ANDAR COMO ES DIGNO DEL SEÑOR: UNA META DEL CREYENTE
COL. 1:9-14
INTRODUCCIÓN
La vida cristiana como que no ha sido del todo comprendida en nuestros
días. Se quiere ver el evangelio como una vida cómoda y religiosa, cuando en realidad nos vemos desafiados con metas que lograr, y el andar cristiano es un verdadero desafío.
En la porción Dios nos imparte una gran lección mostrándonos muchos
detalles sobre el tema del andar cristiano como es digo del señor, Dios nos ofrece suficientes detalles como para que cada uno de nosotros podamos hacernos una evaluación personal, para ver qué tan lejos o qué tan cerca estamos de esa meta.
I. REQUISITOS PARA ANDAR COMO ES DIGNO DEL SEÑOR
A. CONOCER LA VOLUNTAD DE DIOS, Col. 1: 9a,
1. El Apóstol Pablo fue de los líderes de la iglesia primitiva que invertía
tiempo orando por las Iglesias e individuos entre quienes ministraba 2. El motivo de oración del Apóstol por los creyentes de la Iglesia de Colosas, fue por llenura del conocimiento de la voluntad de Dios. A los creyentes de Roma, el Apóstol Pablo también había pedido que procuraran conocer la voluntad de Dios y vivir en ella, 12:1-2 3. Está claro entonces que para andar como es digno del señor, los creyentes necesitamos conocer la voluntad de Dios en todo tiempo y circunstancia a. Hacer la voluntad de Dios, es resultado de tener su palabra en nuestro corazón, Salmo 40:8. b. Hacer la voluntad de Dios es una evidencia de nuestra relación con él señor Jesucristo, Marcos 3:35. c. Los oídos de Dios están atentos a las oraciones de quienes hacen su voluntad, Juan 9:31.
B. DIOS HA EXPRESADO SU VOLUNTAD PARA LOS CREYENTES,
1Tesalónicenses 4:2-8,
1. Para que los creyentes no tengamos ninguna confusión o excusa,
Dios dice aquí claramente cuál es su voluntad. “La Santificación” 2. En esta porción Dios también nos dice como se manifiesta la santificación en las diferentes áreas de nuestra vida: a. En nuestro propio cuerpo evitando la inmoralidad sexual, 1 Tes. 4:3. b. En nuestra relación matrimonial no destruyendo su integridad, 1 Tes. 4:4. c. Santidad en el trato con el prójimo, 1 Tes. 4:6 d. No hacer la voluntad de Dios abrazando la santidad es rechazar a Dios, 1 Tes. 4:7-8.
C. DISCERNIMIENTO ESPIRITUAL, Col. 1:9b-10ª,
1. Los creyentes de Colosas estaban asediados por los judíos
legalistas, que deseaban introducir los rudimentos de la ley de Moisés a la Iglesia. 2. Sin embargo el Apóstol Pablo no ora para que Dios detenga esa doctrina falsa en la Iglesia, lo que el Apóstol Pablo hace es: a. Afianzar a los creyentes en el fundamento de las verdades del evangelio de Cristo. b. Orar a Dios para que dé a los creyentes el conocimiento y el discernimiento de la voluntad de Dios, para que puedan rechazar las falsas enseñanzas y andar como es digno del señor 3. Conocer la vedad de Dios y la voluntad de Dios, trae al creyente sabiduría de lo alto y discernimiento espiritual, para no caer en el error doctrinal y andar como es digno del señor. II. MANIFESTACIONES DEL ANDAR COMO ES DIGNO DEL SEÑOR
A. UN DESEO INTENSO DE AGRADAR A DIOS EN TODO LO
QUE HACEMOS, Col. 1:10a,
1. El conocimiento de la voluntad de Dios debía producir en los
colosenses y en nosotros, un nuevo estilo de vida que nos permita vivir dignamente, agradando en todo a Dios y no basándonos en el legalismo, sino en una relación personal con Cristo. 2. La Biblia muestra dos cosas de nuestra relación con Dios que podemos hacer para agradarle, Hebreos 12:28. 3. La Biblia muestra dos cosas de nuestra relación con el prójimo que agradan a Dios, Hebreos 13:16.
B. UN ANHELO FERVIENTE POR FRUCTIFICAR PARA DIOS,
1:9-10c, “…llevando fruto en toda buena obra…”
1. Los creyentes hemos sido salvados por Dios: para ser un
soldado de su ejército en este mundo, para ser árbol frutal dentro de su huerto, para ser un servidor dentro de su obra, Romanos 7:4. 2. Así como las plantas frutales producen sus frutos, el Espíritu Santo morando en nosotros debe producir su fruto espiritual, Gálatas 5:22–23. 3. La vida de un creyente que anda como es digno del señor, por resultado será fructífero para Dios, y por resultados agradara a Dios en su andar.
C. UN ESFUERZO SUPREMO POR CONOCER A DIOS CADA DÍA
MEJOR, 1:9-10d, “…y creciendo en el conocimiento de Dios”
1. Andar como es digno del señor requiere que procuremos
cada día una mejor comprensión de la divina persona de Dios, para agradarle más y mejor con nuestra vida y con nuestros frutos. 2. El autor sigue usando como ejemplo la agricultura, un concepto que los receptores de su carta entendían. 3. Al observar los árboles en primavera, vemos que le brotan nuevas ramas y florece. Este ciclo se repite cada año en esa temporada. 4. Si un árbol no hace esto no produce fruto, así es también con un creyente auténtico. Siempre producirá más frutos porque sigue creciendo continuamente en el conocimiento de Dios, el Apóstol Pablo deseaba ver esto en los creyentes de Colosas.
D. CONSCIENTES DE QUE NOS APOYAMOS EN EL PODER DE
DIOS, Col. 1:11, “…11fortalecidos con todo poder, conforme a la potencia de su gloria, para toda paciencia y longanimidad” 1. La capacidad de los creyentes para vivir conforme lo desea el Padre Celestial no procede de nosotros mismos sino que Dios nos da la fuerza
III. RAZONES PARA ANDAR COMO ES DIGNO DEL SEÑOR
A. PORQUE HEMOS RECIBIDO UNA HERENCIA CELESTIAL, Col.
1:12a, “12con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz”
B. PORQUE FUIMOS LIBRADOS DE LA CONDENACIÓN, Col. 1:13,
“13el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo”
1. Mediante la obra de la cruz, Dios nos ingresó al reino de su Hijo
amado Jesucristo, ya no somos extranjeros sino ciudadanos del cielo, ya no estamos ajenos a los pactos de Dios ahora somos participantes, ya no somos enemigos de Dios ahora somos hijos de Dios, Efesios 2:19, Fil. 3:20 2. El Apóstol Pablo aclara la naturaleza de esta obra divina usando dos contrastes que han acontecido en la vida espiritual del creyente, el primer contraste compara dos situaciones, anteriormente andábamos en tinieblas y ahora andamos en luz. 3. El segundo contraste se refiere a dos lugares, antes pertenecíamos al reino de oscuridad bajo el dominio de Satanás, Dios nos libró y nos trasladó al reino de luz bajo el gobierno de Cristo.
C. PORQUE FUIMOS REDIMIDOS DEL PECADO, Col. 1:14, “14en
quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados”
1. Con la sangre de Cristo fuimos redimidos o rescatados de la
esclavitud del reino de las tinieblas, la palabra redención se usaba para referirse a la compra de un esclavo o prisionero de guerra, después de pagar el precio estipulado, sólo así podía conseguirse su libertad. 2. Con la sangre de Cristo recibimos el perdón de pecados. Perdonar significa librar al hombre de una deuda. 3. En otras palabras, mediante el sacrificio de Cristo Dios ha eliminado la deuda que teníamos con él por nuestro pecado, que era el obstáculo que existía para que fuéramos libres de la condenación.
CONCLUSIÓN
Andar como es digno del señor, es un mandato divino para el creyente,
No tenemos excusas delante de Dios, no esperemos más, encomendémonos a Dios y comencemos hacerlo, que Dios nos ayudara a seguir adelante en ese propósito. Oremos
REINANDO BAJO EL PACTO DE LA GRACIA LECCIÓN III ¿QUIEN ES JESÚS? EL AMOR DE DIOS, EL VINCULO PERFECTO II Andar en amor es un andar de mucha responsabilidad porque nadie te dice que tienes que hacer, uno tiene la libertad y decide usarla correcta y convenientemente para el bien de todos sus hermanos en Cristo. Por eso es un andar de tremenda responsabilidad y la gente sabrá así que somos discípulos del Señor Jesucristo. El amor de Dios es una responsabilidad inexcusable dentro de la casa de creyentes. Juan 13:34 y 35: 34Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros. 35En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros. Ahí dice un mandamiento nuevo os doy. Se los dio a ellos, pero también es para nosotros y si los conocían a ellos debido a este amor también lo harán con nosotros. La gente al comienzo al menos no lee la Biblia, ellos nos leen a nosotros. Si nosotros no les proveemos