No se deberá entorpecer la marcha normal de otro vehículo circulando sin causa justificada a
velocidad reducida. Para estos efectos, se prohíbe la circulación en autopistas y vías rápidas, tanto
urbanas como extraurbanas, de vehículos automotores que transiten a menos de 60 kilómetros
por hora en dichas vías. Esto último no es válido en los siguientes casos:
a) Cuando existan carriles o franjas especiales para vehículos que circulen por debajo de la
velocidad mínima.
b) Cuando las condiciones del tránsito impidan el mantenimiento de una velocidad superior a la
mínima; y,
c) Cuando, para los vehículos que no puedan circular más rápido de la velocidad mínima, no
existan otras vías, carreteras o caminos paralelos y se vean obligados a utilizar una autopista o vía
rápida.