El diseño de moda se encarga del diseño de ropa y accesorios creados
dentro de las influencias culturales y sociales de un período específico.
Representa el estilo e idea del diseñador según su talento y conocimientos. No debe confundirse con el corte y confección o la sastrería, pues aunque el diseño de moda esté muy ligado a estos, son actividades distintas.
Un diseñador de modas ejerce un arte que consiste en la creación de
prendas de vestir de forma artesanal y a medida, diseñando exclusivamente de acuerdo con las medidas y preferencias de cada cliente, sin hacer un uso estandarizado de numeración preexistente. El diseñador de moda es un creador y un técnico, posee capacidad creativa y las métodos necesarios para poder plasmar en sus diseños sus visiones e ideas artísticas. Pero, como en todas las ramas del arte, es necesario un espacio habilitado y condicionado para el desarrollo de estas actividades.
Entrando en el campo de la etimología, se concluye que “taller” se deriva
de la voz francesa atelier que proviene de la palabra latina assula diminutivo de axis, que significa “astilla”, con otra acepción, en la palabra eje. De aquí se infiere el sentido de la palabra taller: el eje desde donde todas las ideas se ejecutan y giran. (Recio, 2002,página 4). Es decir, el espacio en el que se realiza un trabajo, manual en su origen, bien de tipo artesanal (taller artesano) o fabril (taller fabril).
Históricamente clasificados en el contexto de los oficios viles y mecánicos,
y en menor grado a las artes liberales, han evolucionado en su tipología hacia muy diferentes y diversas formas, desde el primitivo taller gremial hasta los modernos talleres intelectuales paralelos a las escuelas o seminarios de ciencias y artes: un taller puede ser, por ejemplo, el espacio de trabajo de un pintor, un alfarero o un artesano, también se pueden estudiar modelos de taller científico o laboratorios, de talleres docentes o módulos educativos, y en un contexto no laboral, talleres de literatura. Desde los casi ancestrales alfares, hasta las “oficinas” de las corporaciones gremiales medievales y las “bottegas” italianas de los talleres renacentistas en Europa (donde confluían en un mismo ámbito arquitectos, ingenieros, escultores, pintores, ceramistas, diseñadores y estrategas), el taller, como espacio de trabajo y producción, ha llegado a generar todo tipo de obradores, (para distintas artesanías, costura, repostería, etc.).
Partiendo de la organización laboral gremial, muchos talleres conservan
en el siglo XXI la estructura del maestro, a aprendices o discípulos, y colaboradores. Tuvo su natural evolución en las escuelas y talleres de bellas artes y artes aplicadas, llegando a generar el concepto “Artes y Oficios”, acuñado por William Morris como taller de diseño, a partir del modernismo, el art déco y la Bauhaus.
No solo es equipar de herramientas y crear practicidad que un taller de
costura debe tener para poder confeccionar cualquier cosa, éste debe contar con diversas fuentes de inspiración. Además de elementos imprescindibles, como una máquina de coser, se deben incluir detalles que permitan que la creatividad nunca deje de fluir. El diseñador o la mente maestra detrás de cada proyecto deben sentirse familiarizado y motivado por el lugar en donde pasa la mayoría del tiempo armando bosquejos, eligiendo telas, combinando colores y confeccionando prendas. Karl Lagerfeld, por ejemplo, no tardó en sellar su atelier de París con su impecable y original gusto. El excéntrico diseñador tapizó más de una pared con repisas de libros y revistas que coloreaban el estudio donde las modelos realizaban las pruebas de vestuario final de su firma.
No importa si se trata de una fila de maniquies atelier hechos
especialmente para un estudio de moda o de una pared decorada al gusto y estilo del diseñador de alguna firma, se incluye lo necesario para ejecutar este arte extrasensorial y de sensibilidad tangible para el diseñador. INTRODUCCIÓN
La noción y el concepto de “taller” (del francés atelier), lo definen,
como el espacio para el desarrollo de actividades artesanales, artísticas, sociales, científicas e industriales, que concretan objetivos humanos de diferente índole. El taller es el sitio, para lo experimental, un lugar por excelencia de reunión de teorías, prácticas y reflexiones conjuntas.
En el campo de la moda, el atelier (un término muy nombrado)
proporciona acceso al trabajo con el corte, drapeado y costura de la ropa y la moda del futuro. El atelier contiene de todo, desde máquinas de coser industriales, principalmente para la indumentaria del vestido, hasta una gama de máquinas especiales. Éste va a cargo de un gerente con experiencia profesional en diseño, que puede asesorar a los asistentes o aprendices y brindarles apoyo en un nivel altamente profesional, sobre la base de requisitos específicos individuales, deseos o procesos de trabajo, como así agilizar la creación y producción de estos artistas. CONCLUSIÓN
La alta costura se refiere a la creación de prendas exclusivas hechas
a la medida. Las piezas están hechas de tela de alta calidad, costosa y cosidas con detalle minucioso por las costureras más experimentadas y capaces. ¿Dónde tiene lugar la creación de la alta costura? En un atelier, por supuesto. La palabra francesa se traduce como taller y generalmente denota una que se usa para las artes.
Un atelier es el taller o estudio privado de un artista profesional en
artes finas o decorativas, donde un maestro principal y varios asistentes, estudiantes y aprendices pueden trabajar juntos produciendo obras de arte o visuales. Su función básica es ser un lugar utilizado específicamente para la creación del arte, es por eso que los atelieres son conocidos como “fabricas de sueños” ya que es donde el artista materializa sus ideas. REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA