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ESCUELA SUPERIOR POLITÉCNICA DE CHIMBORAZO

FACULTAD DE MECÁNICA
ESCUELA DE INGENIERÍA INDUSTRIAL

IMPACTO AMBIENTAL

TEMA: HÁBITAT III


INTEGRANTES: JIMMY OCAÑA
EVER VILLAMARIN
FECHA: 2018-02-06

RIOBAMBA 2018
INTRODUCCIÓN
“Hábitat III” es como se conoce la formalmente llamada Conferencia de las Naciones Unidas
sobre Vivienda y Desarrollo Urbano Sostenible, que se desarrolló en Quito, Ecuador del 17 al
20 de octubre de 2016.
Es la tercera de una serie de conferencias convocadas por las Naciones Unidas que
comenzaron en 1976, teniendo como principal objetivo fortalecer el compromiso político
global en favor del desarrollo sostenible de pueblos, ciudades y otros asentamientos humanos,
tanto rurales como urbanos. El producto de ese fortalecimiento, mediante nuevos
compromisos y obligaciones, es la “Nueva Agenda Urbana”, que establece estrategia global en
torno a la urbanización para las próximas dos décadas.
MARCO TEÓRICO
Oportunidades que ofreció este evento
La conferencia fue la primera vez en 20 años que la comunidad internacional, encabezada por
los gobiernos nacionales, evaluó colectivamente las tendencias urbanas rápidamente
cambiantes y las formas en que estos patrones están impactando en el desarrollo humano, el
bienestar ambiental, y los sistemas cívicos y de gobierno en el mundo.
Hábitat III también ofreció una gran oportunidad para que la comunidad internacional en
todos sus niveles compatibilice su comprensión acerca de los problemas y oportunidades
planteados por las actuales tendencias en materia de urbanización. La pobreza, la calidad de
vida, la degradación ambiental y el cambio climático entre otros temas, y por otra parte las
ventajas económicas, sociales y de creatividad ofrecidas por las ciudades.
Desarrollo sostenible
Un referente en la construcción de la definición de desarrollo sostenible fue el informe final de
la Comisión Mundial sobre Medio Ambiente y Desarrollo, un organismo mandatado por la
Asamblea General de la O. N.U para atender las crecientes inquietudes acerca del deterioro del
hábitat humano y natural. Esta comisión conformada por expertos definió en su informe de
1987 al desarrollo sostenible como “el desarrollo que satisface las necesidades de la
generación presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer
sus propias necesidades”.
Cabe señalar que la sostenibilidad en el contexto de desarrollo no se limita a los recursos
naturales y problemas medioambientales, sino que también toma en cuenta asuntos
económicos y sociales sobre cuestiones de equidad.
Encaje de la definición de desarrollo sostenible con Hábitat III
La Comisión Mundial sobre Medio Ambiente y Desarrollo sirvió para generalizar la idea de que
el desarrollo económico y social debe ser considerado dentro de un sistema interconectado de
equilibrios, y que el progreso en un área puede y habitualmente supone un deterioro en otra.
Podría decirse que hay pocos contextos en los que esta dinámica se puede observar más
claramente que actualmente en las zonas urbanas, donde los notables progresos humanos son
alimentados por los recursos naturales que se extraen de las zonas rurales. Este proceso global
supone un gran motor para el mejoramiento de la humanidad. Pero a su vez afecta a las
diferentes comunidades de forma desigual. Rápidamente ha hecho cada vez más inhabitables
grandes zonas de nuestros pueblos y ciudades, con impactos en el bienestar del planeta
entero.
Hábitat III en Quito
A principios de 2013, la ciudad de Quito se candidateo para ser sede de la conferencia Hábitat
III, a iniciativa del alcalde de la ciudad en ese momento. Ya que la oferta de Quito no fue
disputada, la Asamblea General de la ONU decidió aceptarla, en diciembre de 2014.
Quito ha recibido premios por liderar el desarrollo de planes para la adaptación al cambio
climático, en tanto la actual administración ha puesto la vivienda y la calidad de vida en el
centro de su estrategia de desarrollo. En 1978 la ciudad de Quito también fue reconocida
formalmente por las Naciones Unidas por su éxito en la preservación de su casco histórico:
junto con la ciudad de Cracovia, Polonia, fueron las primeras urbes declaradas Patrimonio de la
Humanidad por la UNESCO.
Importancia del proceso del Hábitat III
Hábitat III no será la primera vez en que el mundo se haya reunido a considerar y debatir una
estrategia de aproximación colectiva para tratar las tendencias actuales que impactan sobre
pueblos, ciudades y otras zonas urbanas. Pero aunque ya ha habido dos cumbres de estas
características en el pasado, esta tercera conferencia lleva una carga de responsabilidad y
expectativas nunca antes vista.
En los últimos años se ha observado un cambio histórico en cuanto a dónde están viviendo y
trabajando las comunidades. Desde el año 2009, hay más personas en el mundo viviendo en
áreas urbanas que rurales. Esta tendencia está cada vez más acentuado, y se espera que para
mediados de siglo casi tres cuartos de la población mundial esté viviendo en pueblos y
ciudades.
Dados los problemas de inequidad, consumo de energía y degradación ambiental que pueden
parecer infranqueables en muchas zonas urbanas, los efectos de este cambio son
desconcertantes. Las ciudades ocupan menos de un décimo del área terrestre del planeta, y
sin embargo son responsables de tres cuartas partes del total de energía consumida. Las áreas
metropolitanas también son las causantes de la inmensa mayoría de las emisiones de carbón.
Por lo tanto, Hábitat III fue una gran oportunidad para que la comunidad internacional se
involucre sustancialmente y formule estrategias sobre estos temas complejos y muchos otros.
Resultados de la cumbre en Quito
La conferencia Hábitat III tenía como cometido alcanzar lo que está siendo referido como la
Nueva Agenda Urbana, un modelo que establece nuevas prioridades y estrategias que tomen
en cuenta los patrones de evolución del nuevo siglo.
Primero y sobretodo informará y armonizará el trabajo realizado en los diferentes organismos
que conforman el sistema de las Naciones Unidas. La nueva agenda también tendrá impactos
significativos sobre las prioridades de desarrollo y los programas financiados por el sistema
multilateral más amplio — el Banco Mundial, bancos de desarrollo regional y otros — y por
gobiernos nacionales que llevan a cabo su propia financiación bilateral.
A los Estados nación también se les solicitaban contraer una serie de compromisos para
alinearse con los objetivos y las metas de implementación de la Nueva Agenda Urbana. Estas
políticas urbanísticas nacionales pueden ofrecer el primer acercamiento a estas temáticas para
algunos países.
A su vez, este nuevo acuerdo marco y la consiguiente ola de políticas y acciones sustantivas
generarán una estructura de compromisos y controles que tocarán casi todos los aspectos de
la planificación de desarrollo urbano.
¿A quién le debería importar esto?
Definitivamente aquellos involucrados con la planificación urbana, el transporte y el gobierno a
nivel local, como también los urbanistas que siguen las discusiones relacionadas, hallarán los
debates que precedan a Hábitat III y la implementación de la Nueva Agenda Urbana como
vitales.
También así lo verán especialistas en desarrollo internacional e investigadores, incluyendo
aquellos que trabajan en tecnologías aplicadas, energía limpia, salud, educación, género, micro
finanzas y gobernanza, entre otros. Aquellos involucrados en los cambios significativos que
están produciéndose en la cooperación internacional, incluyendo el aumento del
financiamiento por el sector privado y de las asociaciones público-privadas, también tendrán
mucho para aprender y contribuir en este foro.

¿Qué dice la Nueva Agenda Urbana?

• Proporcionar servicios básicos para todos los ciudadanos

Estos servicios incluyen: acceso a la vivienda, agua potable y saneamiento, alimentos


nutritivos, atención de la salud y planificación familiar, educación, cultura y acceso a las
tecnologías de comunicación.

• Garantizar que todos los ciudadanos tengan acceso a la igualdad de oportunidades y libre
de discriminación

Toda persona tiene derecho a los beneficios que sus ciudades ofrecen.

• Promover medidas en apoyo de ciudades más limpias

La lucha contra la contaminación del aire en las ciudades es buena para la salud de las
personas y para el planeta.

• Fortalecer la resiliencia en las ciudades para reducir el riesgo y el impacto de los desastres

Muchas ciudades han sentido el impacto de los desastres naturales y los líderes se han
comprometido a poner en práctica las medidas de mitigación y adaptación para minimizar
estos impactos.

• Tomar medidas para hacer frente al cambio climático mediante la reducción de sus
emisiones de gases de efecto invernadero

Los líderes se han comprometido a involucrar no sólo al gobierno local, sino a todos los
agentes de la sociedad en la acción climática teniendo en cuenta el Acuerdo de París sobre el
cambio climático, que busca limitar el aumento de la temperatura mundial por debajo de los 2
grados centígrados.

• Respetar plenamente los derechos de los refugiados, los migrantes y los desplazados
internos, independientemente de su situación migratoria

Los líderes han reconocido que la migración plantea desafíos, pero también ofrece una
importante contribución a la vida urbana. Debido a esto, se han comprometido a establecer
medidas que ayuden a los migrantes, los refugiados y los desplazados internos hacer
contribuciones positivas a las sociedades.

• Mejorar la conectividad y apoyar iniciativas innovadoras y ecológicas

Esto incluye el establecimiento de asociaciones con empresas y la sociedad civil para encontrar
soluciones sostenibles a los problemas urbanos

• Promover espacios públicos seguros, accesibles y ecológicos

La interacción humana debe ser facilitada por la planificación urbana, por lo que en la Agenda
se pide un aumento de los espacios públicos como aceras, carriles para bicicletas, jardines,
plazas y parques.
En relación a estos, se definieron seis conceptos claves para promover en las
ciudades: compacta, inclusiva, participativa, resiliente, segura y sostenible.

POSIBLES SOLUCIONES

 El primero era un acuerdo internacional sobre clima que apuntaba a sustituir al


Protocolo de Kyoto, cuyas negociaciones estaban teniendo lugar a medida que los
impactos del cambio climático en áreas urbanas y en la gente de bajos recursos se
comprendan cada vez más. El Acuerdo de Paris resultó en diciembre 2015, y marcó la
agenda sobre cómo mitigar y adaptarse a los efectos del cambio climático en las
próximas cruciales décadas.
 Objetivos para el desarrollo global destinados a enfocar los esfuerzos de la comunidad
internacional en combatir la pobreza hacia el 2030.
CONCLUSIONES
Este nuevo acuerdo marco y la consiguiente ola de políticas y acciones sustantivas generarán
una estructura de compromisos y controles que tocarán casi todos los aspectos de la
planificación de desarrollo urbano.
RECOMENDACIONES
Evaluar colectivamente las tendencias urbanas y las formas en que estos patrones están
impactando en el desarrollo humano, el bienestar ambiental, y los sistemas cívicos y de
gobierno en el mundo.
Fortalecer nuevas obligaciones relativas al clima y al desarrollo a medida que el proceso
hábitat iii.
Cumplir con la superposición de estas tres agendas (clima, desarrollo y ciudades).

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