Definición de Humanismo: Movimiento intelectual que se extendió, sobre todo,

en la Europa del siglo XVI cuyo método de filosofía se basaba en el estudio de textos
antiguos (sobre todo filosóficos). El humanismo es uno de los varios aspectos del
Renacimiento, época de reforma intelectual, moral y espiritual del hombre y de la
Iglesia. Es un conjunto de tendencias intelectuales y filosóficas que tienen por
objeto el desarrollo de las cualidades esenciales del hombre. Gran cambio desde lo
religioso: Antropocentrismo, importancia de la cultura grecolatina y sus ideales
estéticos, dignificación de las lenguas vulgares.
Período de crisis religiosa: surgen la Reforma luterana (escisión de la Iglesia) y
la Contrarreforma (movimiento de la Iglesia española) Gran auge del Erasmismo en
España, doctrina derivada de las ideas de Erasmo de Rótterdam, crítico de
costumbres degradadas de la iglesia de su tiempo. Propugnaba una reforma de las
órdenes religiosas y una mayor importancia de la espiritualidad (no tanto rito como
manifestación externa) El Erasmismo como ideología fue muy difundido en la
primera mitad del siglo XVI, y luego duramente prohibido en época de la
Contrarreforma (Inquisición) En la segunda mitad del siglo XVI se refleja en la
literatura religiosa y ascética (Fray Luis de León, San Juan de la Cruz, etc.)
. Cómo se prepara el Renacimiento
Como culminación de un lento proceso cultural, dos hechos darán en el siglo
XIV un fuerte impulso a la evolución que conduce hacia el Renacimiento: el pleno
desarrollo de la burguesía y el primer humanismo italiano.
La clase burguesa produce ahora sus máximas realizaciones: los Cuentos de
Canterbury (Geoffrey Chaucer)el Libro de buen amor, (Juan Ruiz) el Decamerón
(Boccaccio) El Heptamerón (Margarita de Navarra desde la nobleza). En los que una
visión práctica de la vida contrasta con la gravedad heroica de los viejos ideales
guerreros-religiosos de la Edad Media en general. En coincidencia con esta nueva
visión burguesa, tienen lugar en Italia los primeros “intentos humanísticos”. Es
sobre todo Petrarca quien, con fervorosa admiración hacia el mundo grecolatino,
comienza a difundir un nuevo tipo de arte y de vida. El siglo XV será definido como
la gran época del humanismo italiano.
La afanosa búsqueda de manuscritos clásicos iniciada por Petrarca va a ser
imitada por toda una legión de humanistas que, protegidos por generosos mecenas,
llevan a cabo la “resurrección” de la cultura antigua. La Edad Media europea no la
había olvidado por completo, pues Alfonso X había utilizado a Lucano, el Arcipreste
a Ovidio, Ayala a Tito Livio, etc., pero antes del siglo XV el conocimiento de los
clásicos no tenía otro alcance que el de un mero saber erudito, puesto a menudo al
servicio de la moral cristiana y plagado de errores de interpretación. (Citas de
autoridad)
Otro elemento que colaboró con las producciones fue el invento de la imprenta,
que permitió una amplia difusión de los clásicos recién descubiertos. También se
sumaron a este descubrimiento un sinfín de hallazgos arqueológicos y paleográficos
(arquitectura y escritos antiguos) que van a completar los conocimientos sobre la
antigüedad grecolatina, muy abundantes ya desde llegada a Italia de los sabios
griegos fugitivos de Bizancio. Y por último, cómo el uso de la brújula hace que
cambie la noción que se tenía del mundo físico, cuando facilitó la llegada a tierras
ignotas.
Este período socio-histórico se inserta en el reinado de los Reyes Católicos que
abarca desde la ascensión al trono de Fernando (el católico) e Isabel I, en 1479, a la
elección de su nieto Carlos V al trono imperial en 1519. Esta etapa señala la
transición de la Edad Media al Renacimiento. Durante estos años se produjeron
acontecimientos de enorme importancia: la conquista de Granada a los moros, el
descubrimiento de América, la expulsión de los judíos de España y el
establecimiento de la Inquisición, así como otros menos dramáticos que tuvieron
igualmente una influencia especial en la literatura. Uno de ellos fue la aparición de
la imprenta en 1473 y la publicación de la primera gramática española en 1492 por
el gran humanista Nebrija. La fundación por parte del cardenal Francisco Jiménez
de Cisneros en 1508 de la Universidad de Alcalá de Henares para fomentar el
estudio del latín, el hebreo y el griego.
.El humanismo se inicia en Italia en el siglo XIV cuando se considera que la
enseñanza del medioevo no bastaba para el desarrollo del hombre y su inteligencia,
solamente se limitaba a la repetición de tópicos, memorización, etc. Era necesario
un cambio pedagógico partiendo del desarrollo del lenguaje, nace así el Studia
Humanitatis que reunía 5 disciplinas relacionadas con la lengua: Retórica,
Gramática, Poética, Historia, Filosofía moral. La filología resume el concepto de los
humanistas y abarca las restantes ciencias.
La historia del humanismo español cuenta con nombres tan ilustres como los
de Pérez de Oliva, Vitoria, Arias Montano, Simón Abril, Melchor Cano, Fox Morcillo,
etc. Desde las cátedras universitarias o desde sus libros, los humanistas españoles
realizaron una fructífera labor en los más diversos aspectos de la cultura, poniendo
por lo general su saber al servicio del conocimiento y exégesis de los Libros Sagrados.
Así ocurrió, por ejemplo, en la Universidad de Alcalá de Henares, donde las lenguas
clásicas se enseñaban con el fin de aplicarlas a los estudios bíblicos. Por eso tuvo
en España mayor influjo el humanismo cristiano de Erasmo que el de Italia, que fue
más paganizante.