interrupción del desarrollo del feto dentro o fuera del útero materno, antes de que el
embrión haya alcanzado los ciento ochenta días de gestación. La terminación del
embarazo antes del parto se llama "parto pre término".
Historia del término
En las ciudades griegas el aborto estaba tenido en cuenta como una forma normal y
común para el control de la población y para conservar las condiciones sociales y
económicas.
En el siglo II hayamos el primer registro de leyes creadas por el Estado en contra del
aborto, castigando con el destierro a aquellas madres que lo practicaban y
condenando a los que proporcionaban la pócima abortiva a ser mandados a islas, si
eran nobles y a trabajos en minas del metal si eran campesinos.
Durante los seis primeros siglos del cristianismo los teólogos no se podían poner de
acuerdo y en cada sitio había leyes diferentes.
Un pequeño grupo de personas creía que el feto era humano en el momento de la
unión entre el óvulo y el espermatozoide, pero la mayoría de las personas seguían
opinando como Aristóteles.
Los pensamientos y teorías de que el embrión se convertía en humano pasado varios
días de su fecundación fueron muy importantes con san Agustín y llegaron a
convertirse en doctrina de la iglesia.
Muchos países, en el siglo XX empezaron a legalizar el aborto en el caso de que se
usara para proteger la salud y la vida de la madre.
El primer país en hacerlo fue Islandia en 1935, aunque solo en casos extremos.
Cuando se acabó la Segunda Guerra Mundial, en la mayoría de los países
industrializados la legislación con respecto al aborto comenzó a ser menos
restrictiva.
A finales de la década de los sesenta las mujeres empezaron a confirmar que la
decisión de abortar pertenece únicamente a la mujer.
A final de los años sesenta y a lo largo de los setenta los países desarrollados
empezaron a permitir el aborto en un amplio abanico de circunstancias.
Investigación teórica del término
Un aborto se puede llevar a cabo utilizando medicamentos o cirugía.
Un aborto médico es posible realizarlo dentro de las siete primeras semanas.
Un aborto quirúrgico se lleva a cabo con una ventosa obscétrica para sacar el feto y
la placenta, y normalmente se realiza después de seis semanas de embarazo.