Los bienes biológicos de la Tierra son vitales para el desarrollo económico y social
de la humanidad. Sin embargo, las especies y los ecosistemas están hoy
severamente amenazados a causa de un desarrollo incompatible con la
sustentabilidad ecológica.
Como resultado, existe un creciente reconocimiento de que la diversidad biológica
es un bien global de enorme valor para las generaciones presentes y futuras y que
debe ser conservado.
Por otra parte, en el año 2010 la Conferencia de las Partes del CDB, adoptó el Plan
Estratégico para la Diversidad Biológica 2011-2020 junto con las 20 Metas de Aichi
sobre la biodiversidad, mediante el cual insta a las Partes a desarrollar metas
nacionales y regionales utilizando el Plan Estratégico como un marco flexible, y a
examinar, actualizar y revisar, según proceda, sus estrategias y planes de acción
nacionales en materia de diversidad biológica.