en los átomos, por resultado del movimiento de electrones. Un campo magnético externo
tiende a alinear estos dipolos, con la consiguiente aparición de momentos magnéticos
inducidos en los diferentes tipos de materiales: metales, cerámicos, polímeros y
materiales compuestos. Los materiales de cada uno de estos grupos poseen estructuras y
propiedades distintas.
Aceros, todos los aceros trabajados en prueba magnética cuya estructura contiene perlita,
ferrita, bainita o martensita, son magnéticos. Están comprendidos todos los aceros no
aleados, los de baja y media aleación, los aceros al Cromo- Silicio y al Cromo, y los
aceros con menos de 10% de Manganeso. Aceros no magnéticos son los que tienen
estructura austenítica como los aceros al Cromo - Níquel, aceros con más de 10% de
Manganeso y los aceros con más de 20% de Níquel. Dando como una determinación
acerca de las propiedades magnéticas que aquellos aceros con bajo porcentaje en
contenido de carbono tendrán menos fuerza de atracción o baja permeabilidad magnética
ya que tendrán mayor contenido en su microestructura de ferrita.
Bronce: en comparación con el acero, estos tienen regiones que responden a los campos
magnéticos de diferente forma. EL hierro alinea estas regiones que se llaman dominios
magnéticos al campo generado por un imán. El alineamiento seda en sentido contrario al
campo por lo que se experimenta una atracción. Otros materiales como el bronce los
alinean en menor proporción pero en el mismo sentido, por lo que se experimenta una
pequeña repulsión. Como para el bronce los dominios alineados son muy pocos la fuerza
repulsiva es muy pequeña para apreciarse salvo en un experimento muy fino. Para
concluir un material siempre interactúa con un campo magnético en mayor o en menor
grado debido a la alineación de sus dominios magnéticos con respecto a un campo
magnético el cual puede ser generado con una corriente eléctrica o con un imán.