3. ¿Cuáles son las posibilidades de gravar las rentas que tienen los
Estados y cuál es la opción del sistema legal peruano?
Uno de los elementos esenciales del Impuesto a la Renta es que los Estados
determinen qué rentas van a gravar. Teóricamente, existen dos posibilidades: o
gravan a los sujetos residentes (domiciliados) o nacionales de su país por la
integridad de sus rentas sin importar donde se producen; o, gravan las rentas
producidas en su territorio sin importar la residencia, domicilio o nacionalidad
de los sujetos que la generan.
En el caso del Perú, desde 1968 nuestra legislación interna recoge el primer
criterio. Esto le permite al Estado peruano gravar a los sujetos que tengan la
condición de residentes en el país por sus rentas de fuente mundial, es decir,
sea cual sea el lugar donde se genere.
6. ¿Cuáles son las formas más usuales que utilizarían algunas empresas
afectadas para evitar la doble imposición?
Actualmente, dos de las formas más comunes para conseguir aminorar las
diversas cargas tributarias se dan través del endeudamiento o lo que se conoce
como "precios de transferencia".
Los intereses que se pagan por una deuda son deducibles para la
determinación del impuesto a la renta. Si una empresa local consigue un
préstamo de una empresa extranjera, los intereses que pague serán un gasto
que disminuye el monto de su renta gravada y, consecuentemente, de su
impuesto. Sin embargo, si el préstamo es proporcionado por la matriz o
empresa vinculada, lo normal es que tratándose de recursos propios no se
admita el gasto, o los intereses se graven con la misma tasa que la utilidad.
A fin de eludir esta consecuencia, el mecanismo más utilizado a nivel
internacional para disfrazar estos préstamos es denominado “back-to-back”.
Así, si se cobra más por un bien o servicio esa mayor renta estará gravada en
un país con menor incidencia tributaria, y el mayor gasto que representa para la
empresa adquirente le ayudará a tener un menor impuesto en aquél país donde
seguramente la incidencia tributaria es mayor. La ventaja que se produce en
conjunto es manifiesta [2] .
[1] Con algunos requisitos, los intereses por préstamos en el Perú, por
ejemplo, están gravados con tasas moderadas del 1% o 5%, evitando pagar la
de 30% aplicable a empresas vinculadas.