Los inicios de la arqueología no están definidos, tal vez se deba buscar en los rincones del tiempo tan
antiguos como los de la humanidad.
Podemos citar multitud de relatos, que muestran el interés por los tesoros de la antigüedad, el heroísmo de
los aventureros por conseguirlos, el amor a lo antiguo, el gusto a contemplar las edificaciones, por ejemplo,
de una iglesia con motivos medievales; y hasta algo más familiar como ese cajón que casi todos tenemos
lleno de cosas que muchos considerarían “basura”, pero que por nada del mundo lo desecharían. Pero hay
que dejar en claro que lo antes mencionado no es arqueología, pero sin dudas es un antecedente de esta.
Se atribuyen que los orígenes de la arqueología estarían en una época cercana a nosotros, El Renacimiento,
durante el siglo XV, con el aprecio por el modelo de belleza enteramente de Grecia y Roma en sus tiempos
clásicos. Tal es así que las principales manifestaciones culturales de la época se orientan -por no decir imitan-
a ésta.
La apreciación a esta orientación clásica del mundo lleva a la investigación de los orígenes de Pompeya, Este
interés está influenciado por la reflexión de que todo lugar tiene un pasado.
Un pasado que influye y ha sido influido y hasta determinado por acontecimientos externos. Podemos
mencionar pues el pasado de América y “conquista”, -por no llamarlo invasión- que tuvimos que estudiar en
conjunto con la España de finales del siglo XV, para comprender las razones de este descubrimiento y
posterior conquista. Determina también entre otras cosas, el tipo de gobierno, el idioma, las creencias, etc.
El amor a lo antiguo resulto en un muy importante bagaje cultural en estos tiempos en el mundo occidental;
las obras de arte-que Roma admiraba-de las que se apropió al conquistar el Medio Oriente, por ejemplo.
Con el final del Renacimiento y la edad media, se reestablece el enfoque de la cultura, se reconoce el
conocimiento del arte clásico para el rango en sociedad; por lo que todo aspirante a caballero debía realizar
el Golden Tour, sirviendo como impulso del mismo.
Esto al ser desconocido para Europa, significo una reestructuración de sus modelos de la humanidad basados
en la antigüedad clásica, para poder encajarlos con los propios del Nuevo Mundo.
El arte clásico tuvo un retorno al surgir el romanticismo social en el contexto de Los movimientos
independentistas de Estados Unidos, La revolución francesa y el movimiento de independencia de América
Latina, conectando el arte con contenido social (ámbitos políticos, rechazando los abusos de la monarquía),
teniendo a lo viejo como símbolo de cambio.
Otro de los orígenes de la arqueología radica un “relación” ciencia-religión; la ciencia que explicaba los
orígenes de la humanidad y el universo contrapuesto a La Biblia, “verdad dictada por dios”.
La ciencia impedía conocer plenamente en mensaje divino, que rechazaba también la idea de un estado laico
por ser amenaza de la sociedad tradicional.
Esto influye en el surgimiento de la arqueología al querer establecer un consenso entre los dos bandos,
ciencia y religión; la ciencia debía dar pruebas físicas de los acontecimientos mencionados en La Biblia, de
aquí siguen excavaciones e investigaciones, lo que hoy llamamos Arqueología. Los palacios de Ur donde se
reveló la verdad, por ejemplo.
La ciencia trasciende su objetivo puramente observable y taxonómico, pasa pasar a un carácter explicativo y
aplicativo para mejorar su condición y la de la humanidad. Comencemos con: Los Naturalistas que en su
mayoría se inclinaban al proceso de cambio de las especies y sus restos dejados como las huellas, restos
fósiles; especies que llegaron a su fin por el catastrofismo y el devenir. Esta idea de un proceso evolutivo en
el tiempo de toda especie fue aceptada por el liberalismo y pudo seguir su rumbo de estudio “teorías
evolucionistas”. Y basándose en los acontecimientos bíblicos (como el diluvio) se emprendes los orígenes y
fines de la humanidad, su forma de supervivencia y su convivencia con otras especies y en sociedad
manifestando su cultura, sus evidencias como las herramientas desde las más primitivas o casi subhumanas
hasta herramientas muy avanzadas están regidas por su evolución biológica y social.
La ciencia no debe desligarse de la arqueología, pues al estar unidad permite unidas la colocación cronológica
de los artefactos hallados, ayudando a la comprensión y evolución de la cultura humana.
Con este método científico aplicado a la arqueología que entretejía muchas disciplinas, era más viable la
investigación del pasado humano y conocer las leyes universales que rigen la conducta de la humanidad.
La arqueología adopta a la estadística como auxiliar, hoy es indispensable para encontrar patrones y
tendencias en los hallazgos, material fragmentario, que lo que principalmente estudia el arqueólogo.
Los acontecimientos bélicos detuvieron el desarrollo de la arqueología, dejándola casi estática durante casi
un siglo, obligándola a desestructuralizarse al haber nuevos estados, pasando luego de la guerra al real
interés colectivo por el pasado de su país, al haber sido influenciados por el patriotismo característico en una
guerra. Cambio su metodología de estudio, ampliándola para un estudio más eficaz y la mayor penetración
de los enigmas por resolver y las regiones inexploradas.
Parte 3: ¿De qué trata la arqueología?
Esta pregunta tiene una respuesta dependiendo del lugar y en cada uno de estos en forma muy distinta. Tal
es que si la pregunta se hace en el sur de Europa, la respuesta estará orientada a las antigüedades romanas y
griegas; de a misma forma otras respuestas serían: los aztecas, los incas, la biblia, etc.
Así como las ciencias buscan más allá de los fenómenos físicos y los fundamentos de la materia; la
arqueología también investiga asuntos particulares dependiendo del lugar, como se mencionó en el anterior
párrafo, pero, esta ciencia tiende a crecer –abarcar más disciplinas- para resolver determinadas preguntas
hechas solo para ella.
De este modo pues, se tiene diversas descripciones y respuesta a la pregunta, cada una de ellas corresponde
a maneras específicas de entender la arqueología tomando en cuenta su enfoque de estudio, que puede ser:
la actividad humana, la cultura, el hombre y su adaptación, etc. Dicho esto, se podría definir como:
El estudio de la cultura de los grupos humanos, sus procesos de cambio a través del tiempo, su
relación con el medio ambiente en que viven y con otros grupos, vecinos o lejanos, contemporáneos
o no, inclusive con el mismo grupo en épocas distintas.
De esto se entiende a la arqueología como un sistema que trabaja metodológicamente con fuentes
materiales que evidencia la acción del ser humano.
De aquí se entiende a la arqueología como el estudio del ser humano determinado por factores naturales y
sociales.
La arqueología es el concepto del tiempo y los acontecimientos de alguna época junto con otros
acontecimientos en una escala de tiempo mayor o menor.
De aquí se entiende que los acontecimientos no debes estar desligados de otros, porque no dejan de influir
los hechos pasados y lo que están por pasar a consecuencia de ese.
Las localizaciones espaciales de los objetos no muestran mayores dificultades, pues consiste en la ubicación;
el tiempo sin embargo, no es exacto ni absoluto, por lo que será más difícil fijarlo o determinarlo
La arqueología al ser considerada ciencia debe tener parámetros, lo que no se consigue solo con
datos de espacio tiempo, sino que debe tener una tercera dimensión, el material mismo estudiado
por ser evidencia de un hecho.
Son clasificables al tener todos características distintas, puede ser: su forma, material, tamaño, motivos, etc.
Y cada uno de estas diferenciaciones cuentan con información útil para el arqueólogo.
Los objetos en investigación al estar localizados en tiempo y espacio, forman un conjunto que
representa, para éste, las dimensiones de la ciencia y su unidad de trabajo: clases de material.
Las diferencias de los materiales y sus asociaciones, permiten al arqueólogo describir el proceso que se
puedo haber seguido.
Al examinar estas diferencias se puede detectar los fenómenos generales inherentes al proceso humano de
una región.
Y así se establecen diversos parámetros, interrogantes, dimensiones, metodologías, que sirven para ahondar
cuidadosa y objetivamente el trabajo de la arqueología para obtener evidencias del desarrollo de la
humanidad y los fenómenos en el desarrollo de la cultura. De esto trata la arqueología.
Parte 4: Las dimensiones de la arqueología
La arqueología examina de diferentes con respecto a sus dimensiones en estudio; por ejemplo, en la
dimensión del tiempo que es indispensable en el estudio de un arqueólogo porque está directamente
relacionada a lo que más interesa de una cultura: el cambio.
Las dimensiones naturales, orientada a los fenómenos naturales, determinados por el espacio y cubierto por
un tipo de superficie como los de la composición del suelo y por capas y capas. Y cada una de estas capas
deben ser descrita y analizada con cada uno de sus componentes y buscar las relaciones existentes. Cada
capa tiene un significado, con diferencias entre las otras mayores o menores.
Dependiendo de la distancia en las diferencias o similitudes habrá inclusión o pérdida de tipos de estudios
nuevos. El cambio que descubre un arqueólogo es muy lento por lo que se debe esperar un tiempo para que
esas pequeñas diferencias se acumulen hasta ser mayores e incluso totales lo que significarían cambios
globales y otra manera de vivir.
Los cambios tienden a ser cada vez mayores hasta llegar a un límite, que pasaría a ser un nuevo punto de
partida que ya no sería un cambio cuantitativo sino cualitativo.
Ahora desarrollaremos técnicas sin excavación con las que se simula modelos de cambio:
Si se tienen objetos
Parte 5: El trabajo del arqueólogo
Aquí describiremos y explicaremos el proceso del trabajo arqueológico, por qué se hace y para qué se hace.
Lo que caracteriza y más llama la atención del trabajo arqueológico, son los objetos encontrados, y lo que
significan para la historia. En la excavación, todo lo que la tierra puede guardar ahí sobre el pasado y es por
esta razón su mayor atracción.
Aunque se dice que la arqueología aún no ha alcanzado las características para ser llamada ciencia, debería
considerarse como tal pues hace uso de técnicas de laboratorio y emplea el método científico; aunque como
a toda ciencia le falta afinar sus sistemas empleados.
La arqueología en una de sus dimensiones estudia la cultura material para entender los procesos humanos,
esto la obliga a diseñar métodos destinados a obtener datos controlados y procesados según sus
características para luego clasificarlos, determinar su ubicación, y el tiempo en el que fue realizado.
El trabajo de un arqueólogo siempre está encaminado por la lista de patrones donde está el tiempo y la
ubicación para tener objetividad, por eso la fuente material el mejor testigo de evidencia humana. Como ya
se dijo la arqueología busca la objetividad porque examina el objeto desde donde viene haciendo exámenes
completos y exactos. Por eso se dedica más que nada a la recolección de innumerables fuentes materiales y
pedazos de éstas, y a su vez si estas son encontradas en más cantidad determina un uso común-
representado estadísticamente-, lo que ya es una información adicional.
Para mucha gente la arqueología es una rama de la historia, pero son campos muy distintos, principalmente
en sus objetos de estudio y en sus métodos; lo que se puede afirmar es que sí son complementarias. Aunque
sin duda se parecen, pues ambas tienen como objeto el estudio del pasado, incluso ambas lo rebasan. Aquí
presentaremos las diferencias: