Integrantes:
Adán Isaías Portillo López – 20162000840
Eduardo René Schrunder Guzmán – 20162000191
Carlos Humberto Gonzáles Romero – 20152030197
Sección: 0700
Índice
Introducción y objetivos……………………………………………………………………………………………………………… 3
Espermatozoide…………………………………………………………………………………………………………………. 9
Espermiogénesis……………………………………………………………………………………………………………….. 10
Semen………………………………………………………………………………………………………………………………………. 14
Funciones de la testosterona……………………………………………………………………………………………. 15
Conclusiones…………………………………………………………………………………………………………………………….. 26
Bibliografía……………………………………………………………………………………………………………………………….. 27
Introducción
El sistema reproductor masculino, ha sido y sigue siendo tema de tabú en nuestra sociedad,
pero que tiene la importante función de mantener la especia humana a través de la
reproducción. Además, los órganos que componen este sistema tienen funciones
hormonales que mantienen los caracteres sexuales que diferencian al hombre de la mujer.
Pero, ¿Cómo se desarrolla este sistema en el periodo embrionario y fetal?, ¿Cómo está
regulado este sistema hormonal de los órganos reproductores?, ¿Qué funciones específicas
físicas cumplen en el varón?, estas y otras dudas se responderán a continuación a través de
la recolección exhaustiva de información fisiológica del sistema reproductor masculino.
Objetivos
Describir el proceso de espermatogenia desde la embriogénesis hasta el prepuber.
Explicar la anatomía fisiológica de los órganos sexuales masculinos.
Explicar la histología fisiológica del aparato reproductor masculino y hacer un
recorrido del espermatozoide desde su formación hasta su expulsión en la
eyaculación.
Identificar las funciones de la testosterona en general y su regulación
hipotalámico-hipofisario.
Definir el acto sexual masculino desde un enfoque psicológico y analizar las
diferencias con el acto sexual femenino.
Describir las anomalías relacionadas con la testosterona y los órganos
reproductores masculinos.
Desarrollo embriológico
El sexo cromosómico de un embrión queda determinado en el momento de la fecundación por el
tipo de espermatozoide (X o Y) que se introduce al ovocito.
La fase inicial de desarrollo gonadal sucede durante la 5ta semana cuando se produce un
abultamiento en el lado medial de los mesonefros llamado cresta gonadal.
A la 6ta semana las células germinales primitivas entran a los cordones gonadales que están en el
mesénquima. Los cordones gonadales se diferenciaran eventualmente para formar los cordones
seminíferos, los primordios de los túbulos seminíferos
Las características morfológicas sexuales no empiezan a formarse hasta la 7tima semana. Los
sistemas genitales iniciales son similares para ambos sexos. Esta etapa se conoce como fase
indiferente del desarrollo sexual.
Además de producir testosterona los testículos producen una glucoproteína, llamada Hormona
Antimülleriana (HAM). La HAM es producida por las células de Sertoli, continuando su producción
hasta la pubertad, después disminuyen las concentraciones de HAM. La HAM suprime el desarrollo
de los conductos paramesonéfricos, que forman el útero y las trompas uterinas.
Los túbulos seminíferos están separados por el mesénquima que origina las células intersticiales.
Hacia la 8ava semana, las células comienzan a segregar hormonas androgénicas (testosterona y
androstenediona) que inducen la diferenciación masculina de los conductos mesonéfricos y de los
genitales externos.
Los túbulos seminíferos permaneces sólidos sin mostrar luz en su interior hasta la pubertad,
después se canalizan
Células de Sertoli, que desempeñan una función de soporte y que proceden del epitelio
de superficie de los testículos fetales. Son productoras de la Hormona Antimülleriana.
Espermatogonias, que son células espermáticas primordiales derivadas de las células
germinales primordiales.
A partir de la pubertad, alrededor de los 13 años, continuando durante el resto de la vida hasta
disminuir drásticamente en la vejez, comienzan a dividirse por mitosis, proliferando y
diferenciándose a los estadios definitivos de desarrollo para ser espermatozoides. Esto es
consecuencia de la estimulación de las hormonas gonadótropas de la adenohipófisis.
Testículo: o glándula sexual masculina, está compuesto por hasta 900 túbulos seminíferos
espirales de aproximadamente 0.5m de longitud, en los que se forman los espermatozoides. Posee
dos funciones diferentes íntimamente relacionadas con la reproducción:
Epidídimo: donde se vacían los espermatozoides, otro tubo espiral de 6m de longitud. Este se abre
al conducto deferente, el conducto del epidídimo, que se ensancha para formar la ampolla del
conducto deferente inmediatamente antes de desembocar en el cuerpo de la glándula prostática
o próstata.
Próstata: es la mayor glándula accesoria del aparato reproductor masculino. Se conecta a los
testículos por los conductos deferentes los cuales ascienden un nivel más alto de la vejiga lo cual
evita que la orina contamine al escroto. Este órgano funciona como “una vejiga secundaria” que
ejerce presión para que el semen sea expulsado de la uretra al exterior e impedir el paso del
contenido de la vejiga durante el coito.
Justo encima y a los lados de la glándula prostática se encuentran las vesículas seminales que
producen mayor parte del líquido seminal.
Uretra: el último eslabón de la comunicación del testículo con el exterior. Está provista de moco
procedente de numerosas glándulas uretrales diminutas localizadas en toda la longitud y todavía
en mayor cantidad de las glándulas bulbouretrales (glándulas de Cowper), encargadas de secretar
una sustancia lubricante que protege a los espermatozoides y lubrica al glande peniano durante el
coito, bilaterales situadas cerca del origen de la uretra. Mide alrededor de 20 cm y se divide en 3
secciones:
Prostática (2-3cm)
Membranosa (1cm)
Peniana (más o menos 15cm variables)
Escroto: un saco fibromuscular cutáneo para los testículos y estructuras asociadas situado en la
porción posteroinferior del pene.
Pene: el órgano copulador masculino, y al alojar la uretra, proporciona una salida común para la
orina y el semen. Está compuesto por 3 cuerpos cilíndricos de tejido cavernoso eréctil:
Erección se debe a:
Testículos
Estos tienen una función similar a la de los ovarios, producen gametos y hormonas sexuales,
espermatozoides y testosterona, esta hormona estimula los órganos sexuales secundarios e
induce el desarrollo de características sexuales masculinas secundarias.
Visión general
Los testículos están localizados fuera del abdomen en el escroto. Están rodeados internamente
por una capsula de tejido conectivo llamado "túnica albugínea", esta túnica en su parte externa
está recubierta por mesotelio que representa la túnica vaginal propia del testículo, la túnica
albugínea también en profundidad está en contacto con la túnica vasculosa del testículo, que se
comunica con el tejido conectivo laxo vascular o intersticio que rodea los túbulos seminíferos.
La túnica albugínea se extiende hacia el mediastino testicular y forma tabiques testiculares que
dividen el tejido glandular en aproximadamente 250 lobulillos testiculares. En estos lobulillos
encontramos los túbulos seminíferos. Estos túbulos, de tortuoso trayecto con diámetro
aproximado de 250 micrómetros y 50 cm de largo, se continúan cerca del mediastino con unos
túbulos rectos, que desembocan en la rete testis.
Túbulos seminíferos
Rodeados por una membrana basal y por 3-4 capas de células mioides (contráctiles parecidas
estructuralmente al músculo liso). Después le sigue el epitelio productor de espermatozoides que
contiene:
1. Células de Sertoli
2. Células espermatogénicas (espermatogonias, espermatocitos primarios y secundarios,
espermátides y espermatozoides).
Células de Sertoli: en su forma original son cilíndricas pero su citoplasma se extiende y envía
prolongaciones delgadas entre las células espermatogénicas. Estas prolongaciones representan la
base de la barrera hematotesticular que crea un microambiente especial que protege a las células
del compartimiento albuminar contra sustancias dañinas transportadas por el torrente sanguíneo,
además después de la primera meiosis, las células en el compartimiento albuminar son
genéticamente diferentes a las del resto del cuerpo, entonces se impide que proteínas de estas
células lleguen al torrente sanguíneo e induzcan la formación de anticuerpos que puedan causar
una respuesta autoinmune contra los espermatozoides y la consecuente esterilidad. Su núcleo es
muy voluminoso, grande y claro.
Espermatocitos primarios: se encuentran en la capa celular más cerca de la luz del túbulo. En esta
etapa sufren un notable aumento de tamaño y entran en la Profase de la primera división meiótica
por lo que se reduce el número de cromosomas al valor haploide. Esta profase se prolonga
durante unos 22 días
Espermatozoides: mide unas 60 micras de largo, está compuesto por una cabeza y una cola o
flagelo. Con movimientos flagelares pueden moverse de 1-4mm/min
La cabeza es oval, vista de frente, y presenta forma de pera vista de perfil. Con un extremo
angosto orientado hacia adelante. Mide unas 5 micras de largo y 3 micras de ancho. La mayor
parte de la cabeza está ocupada por el núcleo. Y los 2/3 anteriores están cubiertos por el
acrosoma.
La cola mide unas 55 micras de largo y de 1-0.1 micras de ancho. Tiene 4 secciones: cuello, pieza
intermedia, pieza principal y pieza terminal. Cada una con diferencias estructurales demostradas
en microscopia electrónica.
El núcleo del espermatozoide es electrodenso y homogéneo, en su zona distal (hacia la cola) del
nucleolema encontramos una zona especializada llamada placa basal.
El cuello de la cola espermatozoide: es muy corto y se fija en la placa basal. Contiene 11 columnas
segmentadas de alrededor de 1 micra de largo. Justo por detrás de la placa basal se encuentra en
el cuello un centriolo proximal. El cuello está rodeado por un cúmulo de citoplasma residual
llamada gota citoplasmática
La pieza principal de la cola del espermatozoide mide unos 45 cm de largo. Contiene una vaina
fibrosa compuesta por una columna dorsal y otra longitudinal ventricular unidas entre sí mediante
costillas circunferenciales de disposición regular. Esta estructura parece tener importancia para el
carácter ondulatorio de los movimientos de la cola del espermatozoide.
La pieza terminal de la cola del espermatozoide no contiene la vaina fibrosa ni las fibras densas
externas, por lo que las últimas 5 micras de la cola solo consisten en el axonema y algo de
citoplasma.
El acrosoma rodea estrechamente los 2/3 anteriores del núcleo, contiene varias enzimas entre
ellas grandes cantidades de hialuronidasa y enzimas proteolíticas. Las hialuronidasa despolimeriza
los polímeros de ácido hialurónico del cemento intracelular que mantiene unidas a las células de la
capa granulosa proveniente del ovario y que permanece adherido al ovulo. Las enzimas
proteolíticas digieren también estos elementos estructurales del ovulo.
Antes de que el espermatozoide pueda fecundar el ovulo deberá disolver esta capa de células de
la granulosa y después deberá penetrar a través de la densa membrana del propio óvulo, la zona
pelúcida. Para abrirse paso en esta zona, la membrana anterior del espermatozoide se une de
forma específica a proteínas receptoras de la zona pelúcida. Después, todo el acrosoma se
disuelve con gran rapidez, consecuencia de esto, se liberan el resto de enzimas del mismo y en
unos minutos logran abrir una vía de penetración para el paso de la cabeza del espermatozoide a
través de la zona pelúcida hasta el interior del ovulo. Seguidamente después de unos 30 min las
membranas celulares de la cabeza del espermatozoide y el óvulo se fusionan formando una sola
célula.
Espermiogénesis
1. Fusión de las vesículas del aparato de Golgi para formar una sola vesícula acrosómica, el
cual contiene un gran granulo acrosómico. Esta vesícula se ubica cerca del nucleolema y
crece hasta volverse plana y recubrir 2/3 anteriores del núcleo.
2. Migración de los centriolos a la cara opuesta del acrosoma. El centriolo proximal se fija al
núcleo y a partir del centriolo distal se forma el axonema, que dará origen a la cola del
espermatozoide.
3. Los gránulos de cromatina del núcleo se vuelven más gruesos, aumentando de tamaño de
este y prolongándolo en forma de pera.
4. Las mitocondrias se unen de forma espiral alrededor de la primera porción de la cola, para
luego armar la vaina mitocondrial en la pieza intermedia.
5. En la parte distal de la cola se forma la vaina fibrosa
6. Cerca del final de la diferenciación se da una liberación de plasma excedente llamado
cuerpo residual. Este posteriormente es fagocitado por las células de Sertoli.
Túbulos Rectos
Se localiza cerca del mediastino testicular y se continúan de los túbulos seminíferos, su epitelio se
compone solo por células de Sertoli, la luz se estrecha y e epitelio se hace cilíndrico bajo. Su
función es transportar los espermatozoides a la rete testis.
El movimiento de espermatozoides a través de estos conductos tiene lugar por flujo de líquido y
por las células peritubulares mioides testiculares antes mencionadas que actúan en conjunto con
una delgada capa de células musculares lisas que contribuyen al transporte, ya que los
espermatozoides comienzan a presentar movimientos independientes hasta que están en el
epidídimo. Este flujo de líquido cargado de abundantes espermatozoides continua por la rete
testis llega a los conductillos eferentes, donde es reabsorbido gran cantidad de este líquido.
Conductillos eferentes
Se continúan de la rete testis, son de 10-15 conductos que ascienden y atraviesan la túnica
albugínea e ingresan a la cabeza del epidídimo. Su epitelio es cilíndrico simple con grupos de
células ciliadas absortivas, los cilios de estas células también ayudan al transporte de
espermatozoides a través de los conductillos. Aquí comienzan a hacer un camino tortuoso a partir
de los conos eferentes que cada conductillo forma en la cabeza del epidídimo.
Tubo de unos 6m de largo y tortuoso recorrido, tiene una cabeza, cuerpo y cola que abre paso al
conducto deferente. El conducto del epidídimo está revestido por epitelio cilíndrico
pseudoestratificado compuesto por dos tipos de células: células principales y células basales.
Las células principales son altas en la parte de la cabeza pero van disminuyendo su altura hasta
llegar a ser cilíndricas bajas en la porción de la cola del epidídimo. También en este segmento
inicial (cabeza) del epidídimo encontramos células donde en su porción luminar del conducto
encontramos unos estereocilios con funciones absortivas y de movilidad como en los conductillos
eferentes. En estas dos porciones (conductillos eferentes y cabeza del epidídimo) se llega a
reabsorber hasta un 90% del líquido original secretado en los túbulos seminíferos. Las células
principales secretan glucoproteínas y glicrofosforilcolina (importante para la maduración de
espermatozoides), para esto necesitan un retículo endoplásmico rugoso bien desarrollado.
Las células basales: pequeñas, redondeadas o piramidales, se desconoce su función, se cree que
son precursores de las células principales.
El epitelio del epidídimo es una delgada lámina propia y una capa de musculo liso en forma circular
que va aumentando su grosor en dirección distal, además esta capa de musculo liso está rodeada
por tejido conectivo laxo que contiene vasos sanguíneos y nervios.
En el segmento medio o cuerpo del epidídimo se dará el asiento y maduración final de los
espermatozoides, esto producto de la estimulación de la testosterona. Aquí ya no hay mucho
movimiento en comparación con el segmento inicial.
El segmento terminal o cola del epidídimo es el sitio de almacenamiento de los espermatozoides
maduros donde pueden durar hasta 3 semanas si no son eyaculados o eliminados por la orina.
Conductos Deferentes
Es la continuación del conducto del epidídimo. Sigue su camino hacia arriba y por el borde
posterior del testículo y luego hacia arriba donde forma parte del cordón espermático. Atraviesa la
cavidad abdominal hasta la pared posterior de la vejiga, donde se orienta hacia la parte posterior
de la próstata, lugar donde sufre un ensanchamiento (conocido como la ampolla del conducto
deferente). Todo este recorrido es de aproximadamente 40cm de largo. Después de la ampolla el
conducto deferente se une con el conducto excretor de la vesícula seminal para formar el
conducto eyaculador.
Túnica Mucosa: forma múltiples pliegues que le dan un aspecto estrellado al conducto, está
revestido por epitelio cilíndrico pseudoestratificado que también posee estereocilios.
Túnica Muscular: una gruesa capa de fibras musculares que le dan una consistencia firme.
Túnica Adventicia: se compone de tejido conectivo bastante denso que rodea la capa muscular.
Estas túnicas son de importantes porque durante la estimulación sexual, las contracciones
peristálticas del conducto deferente transportan a los espermatozoides desde el segmento
terminal del epidídimo hasta la ampolla.
Conducto eyaculador
Este conducto tiene una mucosa muy delgada y su epitelio es cilíndrico pseudoestratificado y la
túnica muscular solo se detecta en la primera porción de éste.
Vesículas Seminales: tiene estructura similar a la ampolla del conducto deferente, forman dos
cuernos de unos4 cm de largo y 2cm de ancho. Es un tubo que desdoblado puede alcanzar hasta
15 cm de largo debido a sus pliegues.
La túnica muscular de las vesículas seminales se compone de una capa circular interna y una
longitudinal más delgada que la del conducto deferente.
La túnica adventicia de las vesículas seminales está hecha de tejido conectivo que mantiene unidos
los pliegues del tubo.
Las vesículas seminales producen una sustancia espesa que representa la mayor parte del
esperma. Un componente importante en esta secreción es la fructosa que es utilizada como
sustrato energético por los espermatozoides. También posee prostaglandinas, aminoácidos e
iones de Potasio.
Próstata
La glándula sexual accesoria más grande del hombre. Mide 2x3x4 cm de espesor y pesa unos 20 g.
Rodea la primera parte de la uretra y su parte posterior la recorren dos conductos eyaculadores.
Histológicamente la componen unas 40 glándulas tubuloalveolares que vierten sus secreciones en
unos 20 conductos excretores independientes que desembocan en la uretra. Las glándulas están
incluidas en un estroma compuesto en su mayor parte por células musculares lisas separadas por
hebras de tejido conectivo. Esta musculatura forma una masa muy densa que rodea a la uretra.
Entre el estroma de la próstata también encontramos los alvéolos, estas tienen tamaño irregular y
forman evaginaciones a la luz de los conductos excretores. Están revestidos por epitelio cúbico o
cilíndrico pseudoestratificado.
La próstata se caracteriza por la presencia, en los alveolos, de cuerpos amiláceos redondos. Estos
están compuestos de depósitos de glucoproteínas. La cantidad de estos cuerpos amiláceos
aumenta con la edad y también se pueden calcificar, entonces se llaman cálculos.
La zona periuretral: contiene glándulas mucosas, solo se encuentran en la parte superior del
colículo seminal.
Zona periférica: la de mayor tamaño y contiene grandes glándulas principales, cuyos conductos
excretores desembocan cerca del colículo seminal.
La secreción prostática es un líquido lechoso, muy fluido, que contiene fosfatasa ácida, antígeno
específico de la próstata y cantidades importantes de ácido cítrico, por lo que su pH es algo ácido.
La secreción se vacía durante la eyaculación, por contracción de la musculatura lisa.
Miden alrededor de 1cm de diámetro y se localizan detrás del bulbo del cuerpo cavernoso,
incluidos en el diafragma urogenital. Un conducto excretor de cada glándula (con longitud de unos
3 cm de largo) sale de cada glándula, para desembocar en la porción cavernosa proximal de la
Uretra. La secreción de estos es un líquido claro y viscoso, cuya función parece ser lubricante, pero
la importancia fisiológica se desconoce aún.
Uretra
La secreción de estos es un líquido claro y viscoso, cuya función parece ser lubricante, pero la
importancia fisiológica se desconoce aún.
Semen
El semen eyaculado durante el acto sexual masculino se compone de:
Espermatozoides 10%
Líquido de vesículas seminales 60%
Líquido de la glándula prostática 30%
Donde también se incluye una pequeña cantidad de líquido procedente de las glándulas
bulbouretrales.
-Posee una proteína coagulante que mantiene al semen en regiones profundas de la vagina
durante 15-30 minutos hasta que la proteína es degradada.
Debido a la viscosidad del coagulo los espermatozoides permanecen algo inmóviles, una vez se
pierde esta viscosidad adquieren gran movilidad. Una vez eyaculado el semen, los
espermatozoides en él, solo sobreviven de 24 a 48 horas a temperatura corporal.
La Hormona antimulleriana
La AMH es una proteína presente tanto en hombres como en mujeres, pero con funciones y
localizaciones diferentes. Su papel principal ocurre durante el embarazo, ya que es la encargada
de la diferenciación sexual del feto.
En el feto masculino la AMH es producida por los testículos alrededor de la 8va y 9na semana de
desarrollo fetal con el objetivo de impedir el desarrollo de los conductos de Müller (estructuras
que dan lugar al útero y trompas de Falopio.
En el feto femenino la ausencia de AMH permite que se forme el aparato reproductor femenino
en el feto. No obstante, la AMH comenzara a expresarse unas semanas más tarde, cuando ya haya
folículos ováricos.
La testosterona se produce en las células intersticiales de Leydig. Las células de Leydig son casi
inexistentes en los testículos durante la niñez, en la que los testículos apenas secretan
testosterona, pero muy numerosas en el recién nacido varón durante los primeros meses de vida y
en el varón adulto en cualquier momento después de la pubertad; en estas dos etapas de la vida,
los testículos secretan grandes cantidades de testosterona.
Química de los andrógenos. Todos los andrógenos son compuestos esteroideos, tanto en los
testículos como en las glándulas suprarrenales, los andrógenos pueden sintetizarse a partir del
colesterol o directamente desde la acetil coenzima A.
Metabolismo de la testosterona. Tras ser secretada, alrededor del 97% se une con mayor afinidad
a una globulina beta denominada, globulina fijadora de hormonas sexuales. Así puede circular en
sangre desde 30 a minutos a varias horas. Gran parte de la testosterona se convierte en el interior
de las células en dihidrotestosterona, en especial en órganos como la glándula prostática en el
adulto y en los genitales externos del feto varón.
Funciones de la testosterona.
Es demasiado importante en el desarrollo del varón, ya que es indispensable para mantener los
caracteres sexuales masculinos incluso en el desarrollo fetal. Su producción disminuye durante la
niñez pero se elevaba en la pubertad llegando a bajar de nuevo hacia los 50 años.
Desde que inicia la pubertad hasta la edad de los 20 años en promedio, la testosterona hace que el
pene, el escroto y los testículos aumenten hasta 8 veces su tamaño, al mismo tiempo, la
testosterona mantiene los caracteres sexuales secundarios que ayudan a distinguir al varón de la
mujer en los siguientes aspectos:
o Vello corporal: Crece en el varón en las siguientes zonas, sobre el pubis, ascendiendo en la
línea alba, en la cara, en el tórax y con menos frecuencia, en la espalda.
o Calvicie: La testosterona reduce el crecimiento del pelo en la parte superior de la cabeza,
los varones castrados no sufren calvicie, aunque no necesariamente todos los hombres
viriles quedarán calvos ya que también esta puede darse por factores genéticos.
o La voz: La testosterona produce una hipertrofia de la mucosa laríngea y aumento del
tamaño de la laringe, que ayuda progresivamente a formar la voz grave típica del varón.
Aumenta el grosor de la piel en todo el cuerpo y endurece los tejidos subcutáneos, a la vez,
incrementa la secreción de las glándulas sebáceas, que cuando se da de manera excesiva puede
provocar el acné. El acné es un signo característico de la adolescencia, luego de unos años la piel
se acostumbra a esta hipersecreción y desaparece el acné.
Durante la pubertad hay un aumento de la masa muscular del varón llegando a tener un 50% que
las mujeres. Este incremento muscular se asocia también a un aumento de las proteínas en las
partes no musculares del organismo. Esto ha llevado a que se utilicen andrógenos sintéticos por
los deportistas para mejorar su rendimiento muscular, pero a su vez, la testosterona puede traer
efectos nocivos prolongados. De igual manera se utilizan en varones ancianos como hormona de la
juventud para mejorar la fuerza muscular y el vigor.
Luego de aumentar los niveles de testosterona en sangre, los huesos experimentan un aumento
de espesos y se depositan cantidades significativas de calcio en estos. Así, la testosterona
incrementa la matriz ósea y aumenta la retención de calcio. Se cree que el aumento de la matriz
ósea es el resultado de la función anabólica proteica general de la testosterona, asociada al
depósito de sales de calcio secundario al aumento proteico.
En la niñez, si hay una secreción anormal de testosterona u otro andrógeno, se producirá un gran
estirón de su talla, pero también estas hormonas provocan que las epífisis de los huesos largos
cierren más pronto. Por lo tanto, el varón alcanza una talla relativamente inferior a la que hubiera
alcanzado sin esta secreción anormal de testosterona y otros andrógenos.
El varón tiene un promedio de unos 700,000 eritrocitos por milímetro cúbico más que la mujer. La
testosterona tiene un efecto directo sobre la producción de eritrocitos pero no se debe a los
niveles de eritropoyetina, sino que podría deberse indirectamente, al aumento de la tasa
metabólica que tiene lugar tras la administración de testosterona.
Efecto sobre el equilibrio electrolítico e hídrico.
La testosterona puede aumentar la resorción de sodio en los túbulos distales renales, su efecto es
ligero, sin embargo, tras la pubertad, los volúmenes de sangre y de líquido extracelular del varón
ascienden hasta incluso 5 al 10% por encima de lo que correspondería en relación al peso
corporal.
Posteriormente, este complejo se desplaza al núcleo donde activa la transcripción de ARN y ADN.
En 30 min la polimerasa de ARN y la concentración de ARN comienzan a aumentar, a continuación
se produce un aumento progresivo de la proteína celular. Al pasar unos días, la cantidad de ADN
de la próstata también se ha incrementado y se ha producido un ascenso simultáneo del número
de células prostáticas.
De esta manera podemos concluir que la testosterona aumenta la producción de proteínas en casi
cualquier lugar del organismo, especialmente en los órganos efectores que mantienen los
caracteres sexuales masculinos tanto primarios como secundarios.
La GnRH es secretada por neuronas que tiene su cuerpo celular en el núcleo infundibular
(arqueado) del hipotálamo. Las terminaciones de estas neuronas acaban en la eminencia media
del hipotálamo donde liberan GnRH al sistema vascular portal hipotálamo-hipofisario. Luego, la
GnRH alcanza la adenohipófisis por la sangre portal hipofisaria y estimula la liberación de las
gonadotropinas LH y FSH.
La secreción de GnRH se produce durante unos minutos cada una a tres horas y su intensidad va a
depender de:
Son producidas por las células gonadótropas de la adenohipófisis, las cuales aún en ausencia de
GnRH pueden producir una muy pequeña cantidad de LH Y FSH. Ejercen sus efectos en los órganos
efectores mediante la activación del segundo mensaje del monofosfato de adenosina cíclico, que
activa a los sistemas enzimáticos específicos en las células efectoras correspondientes.
La FSH se une a receptores específicos situados en las células de Sertoli de los túbulos seminíferos,
lo que hace que estas células crezcan y secreten varias sustancias espermatógenas. Al mismo
tiempo, la testosterona y la dihidrotestosterona que difunde al interior de los túbulos desde las
células de Leydig también ejercen un poderoso efecto trófico sobre la espermatogenia. Por tanto,
para que esta tenga lugar son necesarias tanto la FSH como la testosterona.
Las células de Sertoli secretan una hormona llamada inhibina, esta ejerce un poderoso efecto
sobre la producción de FSH, cuando hay sobreproducción de espermatozoides, esta trabaja
inhibiendo al hipotálamo y a la adenohipófisis para reducir la producción de FSH y controlar los
niveles de espermatozoides.
De esta manera, este efecto inhibidor nos brinda un potente mecanismo de control de la
espermatogenia por retroalimentación negativa, que opera de forma simultánea y paralela al
mecanismo de control mediante retroalimentación negativa de la secreción de testosterona.
Climaterio masculino
Pasada la pubertad, la adenohipófisis del varón produce gonadotropina durante el resto de la vida
y lo ideal es que mantenga cierto grado de espermatogenia hasta la muerte. Sin embargo, las
funciones sexuales van disminuyendo en edades avanzadas, en promedio, la edad en la que se
produce la finalización de las relaciones sexuales es a los 68 años. Este declive se debe a la
disminución en la secreción de testosterona, que en general se le denomina, climaterio masculino.
El glande del pene es la fuente más importante de señales nerviosas sensitivas para la iniciación
del acto sexual masculino, ya que este contiene un órgano sensitivo muy sensible que transmite al
sistema nervioso central una sensación sexual. Cuando se estimula físicamente al glande durante
la relación sexual, se estimula a su vez al órgano sensitivo y provoca la sensación sexual que viaja a
través del nervio pudendo, seguidamente al plexo sacro, luego a la porción sacra de la médula
espinal y por último ascienden a través de la médula en áreas indefinidas del encéfalo.
Pero estos impulsos no solo pueden proceder del glande del pene, sino que también de otras
zonas próximas al pene como ser: la estimulación del epitelio anal, el escroto y las estructuras
perineales en general, pueden enviar a la médula estas sensaciones sexuales. Incluso pueden
proceder de estructuras internas como en zonas de la uretra, la vejiga, la próstata, vesículas
seminales, los testículos y el conducto deferente.
Además, una de las causas del impulso sexual es que los órganos internos estén llenos de
secreción, esta acción provoca el deseo sexual, tal es el caso con los “afrodisiacos”, como las
cantáridas, que irritan las mucosas vesicales y uretrales que induce inflamación y congestión
vascular, lo que provoca un deseo sexual casi interrumpido.
Es probable que la función encefálica no sea necesaria en el acto sexual masculino, porque la
estimulación genital adecuada puede mandar señales sexuales a la médula que pueden o son
necesarios para provocar la eyaculación en algunos animales y algunas veces en el ser humano.
En conclusión podemos decir que el acto sexual masculino es el resultado de mecanismos reflejos
intrínsecos integrados en la médula espinal, sacra y lumbar y estos mecanismos pueden iniciarse
tanto por estimulación psicológica del encéfalo como por una estimulación física de los órganos
sexuales o ambos.
Se han determinado varias etapas que se desarrollan en el acto sexual masculino, que se llevan a
cabo una tras otra. Podemos dividirlas en etapas realizadas por el sistema nervioso parasimpático
y etapas realizadas por el sistema nervioso simpático. En las primeras tenemos la erección y la
lubricación y en las segundas están el orgasmo masculino y la resolución.
El tejido eréctil del pene es un conjunto de grandes sinusoides cavernosos que normalmente
contienen poca sangre pero que experimentan una gran vasodilatación cuando la sangre arterial
fluye a presión en su interior y el sangrado venoso se encuentra ocluido. Los cuerpos cavernosos
están revestidos por tejido fibroso, que con la presión que produce a los cuerpos, provocan un
abultamiento del tejido eréctil, de forma tal que el pene se endurece y se alarga.
Orgasmo Masculino
El orgasmo masculino es el inicio de las funciones o etapas del acto sexual masculino realizado por
el sistema nervioso simpático. Este consta de dos partes:
Las contracciones rítmicas de los músculos pélvicos e incluso de algunos músculos del tronco,
producen movimientos de vaivén de la pelvis y del pene, que ayudan también a propulsar el
semen más profundamente en la vagina e incluso ligeramente al interior del cuello uterino.
Resolución: Es la etapa final del acto sexual masculino, uno a dos minutos después de la
eyaculación, desaparece totalmente la excitación sexual del varón y la erección termina.
Deseo: Ocurre a nivel mental, por lo tanto, no hay ninguna alteración ni cambio físico. Se
caracteriza por el fantaseo con temas relacionados al sexo y aparece cuando el grado de
excitabilidad neurofisiológica y las sensaciones conducen a algún tipo de impulso sexual.
Es el origen de una necesidad de buscar placer sexual.
Excitación: Se produce como consecuencia de la estimulación psíquica o física. El nivel de
deseo es importante en esta etapa porque si el deseo es elevado, la excitación es más
rápida e intensa. Sin embargo, si el deseo es bajo, la excitación puede no ser suficiente
para desarrollar una erección. Se caracteriza por un creciente aumento de las sensaciones
placenteras.
Meseta: Se mantienen e incrementan los niveles de excitación sexual, predisponiendo a la
persona para el orgasmo.
Orgasmo: A nivel psíquico, se produce una caída brusca de la tensión psicológica sexual. Y
a nivel físico, ocurren contracciones rítmicas de la musculatura perineal. El varón
inmediatamente antes del orgasmo alcanza el denominado punto de inevitabilidad
eyaculatoria” a partir del cual ya no es posible detener la emisión del semen.
Resolución: Ocurre después del orgasmo. A nivel psíquico se adquiere una peculiar
sensación de bienestar y relajación en general.
Muchos ancianos desarrollan fibroadenomas prostáticos benignos que pueden causar obstrucción
urinaria se debe a un crecimiento excesivo y patológico del propio tejido prostático.
El temido cáncer de próstata, causante del 2 a 3% de todas las muertes en hombres alrededor del
mundo. La testosterona juega un papel negativo en los varones a los que se les ha desarrollado el
cáncer de próstata, ya que esta estimula a las células cancerígenas a que crezcan de manera más
rápida que lo normal, por eso, la castración quirúrgica es uno de los métodos usados en el
tratamiento del cáncer de próstata.
La administración de estrógenos es otro de los métodos usados como tratamiento del cáncer
prostático, ya que la presencia de esta hormona en la sangre del hombre, inhibe la producción y
secreción de testosterona, pero trae efectos secundarios como
Aun cuando el cáncer ya se ha diseminado a casi todos los huesos del cuerpo, pueden ser tratados
con éxito con alguno de los dos métodos antes mencionados o por la implementación de ambos.
La metástasis suele disminuir de tamaño y los huesos experimentan una curación parcial. Aunque
el cáncer no se detiene, se reduce su propagación y a veces alivia mucho el intenso dolor óseo.
La tendencia genética básica del feto tanto masculino como femenino, es a formar órganos
sexuales femeninos en ausencia de hormonas sexuales masculinas (más que todo la testosterona),
porque en ausencia de esta, se inhibe la formación de órganos sexuales femeninos y en su lugar se
estimula la formación de órganos sexuales masculinos.
Cuando un niño pierde los testículos antes de la pubertad, se produce un estado de eunucoidismo
en el cual los órganos y características sexuales se mantienen infantiles durante el resto de su vida.
La altura del eunuco adulto es mucho mayor que la del varón normal, debido a que las epífisis
tardan más en cerrarse, aunque los huesos son bastante finos y los músculos bastante más débiles
que en el hombre normal. La voz es infantil, no se pierde el pelo de la cabeza y la distribución
masculina normal del pelo en la cara y en otras zonas del cuerpo no se da.
Cuando se castra a un varón de la pubertad, algunos caracteres sexuales secundarios vuelven a ser
los de un niño y otros conservan su carácter masculino adulto. Los órganos sexuales sufren una
ligera pérdida de tamaño, pero no se reducen al tamaño infantil y la voz solo pierde un poco de su
tono grave. Sin embargo, desaparece la distribución masculina del vello, el espesor de los huesos
masculinos y la musculatura del varón viril.
En el varón castrado, disminuyen los deseos sexuales pero no se pierden, siempre que se antes se
hayan practicado actividades sexuales. La erección puede seguir produciéndose como antes,
aunque con menos facilidad, pero es raro que pueda tener lugar la eyaculación sobre todo porque
los órganos formadores del semen degeneran y existe una pérdida del deseo psicológico
impulsado por la testosterona.
Algunos casos de hipogonadismo se deben a una incapacidad genética del hipotálamo para
secretar grandes cantidades normales de GnRH. Este trastorno se asocia con frecuencia a una
anomalía simultánea del centro del apetito del hipotálamo, que induce a la persona a comer en
exceso, en consecuencia, aparece la obesidad y el eunucoidismo. Este eunucoidismo hipotalámico
se le denomina síndrome adiposogenital o síndrome de Fröhlich.
Rara vez, los testículos desarrollan tumores de las células intersticiales de Leydig. Estos tumores
producen en algunas ocasiones hasta 100 veces la cantidad normal de testosterona. Cuando estos
tumores aparecen en niños pequeños, causan un rápido crecimiento de la musculatura y de los
huesos, pero también una fusión prematura de las epífisis, haciendo que la talla final del adulto
sea, de hecho, considerablemente inferior a la que se alcanzaría sin esta afección.
Estos tumores de las células intersticiales provocan un desarrollo excesivo de los órganos sexuales
masculinos, de todos los músculos esqueléticos y de otros caracteres sexuales masculinos
secundarios. En el varón adulto es difícil diagnosticar tumores pequeños de las células
intersticiales, debido a que los caracteres masculinos ya se han desarrollado.
Los tumores del epitelio germinal son aún más frecuentes, como las células germinales pueden
diferenciarse hacia casi cualquier tipo de tejido, por lo que estos tumores contienen tejido
placentario, huesos, pelo, dientes, piel, entre otros y que forman un teratoma. Este tumor, el
teratoma, también tiene capacidad secretora aunque en cantidades pequeñas, pero si tiene una
cantidad significativa de tejido placentario, podrá secretar grandes cantidades de hCG y también
hormonas estrogénicas lo que puede causar ginecomastia.
Criptorquidia
El descenso final de los testículos necesita la acción de los andrógenos, por lo tanto, si hay una
deficiencia en la producción y secreción de andrógenos durante el periodo fetal, probablemente el
varón nazca con los testículos no descendidos.
Disfunción eréctil
También llamada “Impotencia”, es la incapacidad del hombre para desarrollar y mantener una
erección de suficiente rigidez para un coito satisfactorio. Hay diversos factores que pueden dar su
origen:
La disfunción eréctil por enfermedades vasculares se trata a menudo con éxito utilizando
inhibidores de la fosfodiesterasa-5 (PDE-5), como sildenafilo, vardenafilo o tadalafilo. Estos
inhiben la enzima fosfodiesterasa-5, lo que a su vez inhibe la rápida degradación del GMPc,
potenciando y prolongando el efecto del GMPc para provocar la erección.
Conclusiones