Aprende al escuchar
Habla con tu hijo constantemente. Cuéntale una historia interesante que leíste recientemente en el
periódico. También le puedes describir una conversación que tuviste con un colega en el trabajo. Cuando
vayan a comprar ropa, cuéntale de cuando solías ir de compras con tus papás.
Es importante que te acostumbres a narrar las labores cotidianas. Por ejemplo, cuando estén juntos en la
cocina, mientras preparas la cena, le puedes decir: “Necesito medir dos tazas de agua y después añadir una
taza de arroz”. Tal vez te parezca que tu pequeño no te está prestando atención, pero sí lo está haciendo.
No te sorprendas si lo escuchas repetir una de tus frases célebres (“¡Qué barbaridad!”), cuando esté
conversando con otra persona. No te olvides que los niños son imitadores innatos, así que ¡ten cuidado con lo
que dices!
Haz que la lectura sea interactiva. Cuando le leas un libro a tu pequeño, espera unos segundos antes de
darle vuelta a la página y pregúntale: “¿Qué crees que pasará después?”. Así sabrás si escuchó lo que le
estabas leyendo. Si parece estar un poco confundido con la trama, es recomendable que leas el libro desde el
inicio.
Pídele que adivine cómo acabará un cuento. Léele un libro en voz alta a tu niño y detente justo antes de la
última página. Pídele que adivine cuál será el fin de la historia. Después termina de leer el cuento y hablen
sobre el final. ¿Adivinó lo que pasaría o fue un final inesperado? Si el final fue totalmente diferente al que el
pequeño propuso, ¿había pistas al principio de la historia que apuntaban a ese final?
No se olviden del libro favorito. Saca uno de los libros favoritos de tu niño, que seguramente está viejito y
destartalado, y léeselo en voz alta. Intenta, esta vez, hacer una pausa en los puntos claves y pídele que
termine las frases. O cuando le leas la historia, bríncate algunos detalles importantes para ver si está
prestando atención. Si al pequeño algo no le suena correcto, es probable que te corrija.
Escuchen historias juntos. A todos los niños les gusta que les lean en voz alta. Las bibliotecas, tiendas de
libros y centros comunitarios generalmente ofrecen “la hora del cuento”, donde una persona les lee en voz alta
divertidas historias a los bebés y niños pequeños.
También pueden ir a ferias y eventos comunitarios donde se presentan personas que son expertos en contar
cuentos a los pequeños. O bien, puedes sacar libros en formato de audio en tu biblioteca local para
escucharlos cuando vayan en el auto o estén en casa.
Invéntense rimas chistosas. Cuanto más absurdas, mejor. Este tipo de actividad le enseñará a tu hijo a
ponerle atención a las palabras que suenan igual. Además le ayudará a identificar patrones en las rimas.
Jueguen al "cuento en cadena". Éste es un juego divertido para toda la familia. Por ejemplo, tú puedes
comenzar a narrar una historia (“Había una vez un niño que vivía en el bosque en una casa arriba de un
árbol”), y tu niño puede continuar y describir la próxima oración. Como cada persona tiene que escuchar lo
que se dijo antes, para continuar la historia, este juego fomenta las habilidades auditivas.
https://espanol.babycenter.com/a11000064/actividades-para-fomentar-las-habilidades-auditivas-
de-tu-hijo
Forma de hablar. Utiliza expresiones o verbos relacionado con el sentido del oído.
“Me suena lo que me estás contando“, “Me he quedado sordo cuando te has
marchado…“, “Ese color es amarillo chillón…“, etc.
Forma de mirar. En una conversación, no necesitará mantener el contacto visual
contigo, pero necesitará escuchar claramente lo que dices. Si hay mucho ruido de
fondo, te pedirá ir a un lugar más tranquilo.
Otros comportamientos: Suelen hablar correctamente y son capaces de
expresarse en público con seguridad. Si les cuentas una historia, son capaces de
reproducirla exactamente, con las mismas palabras. Necesita silencio para
estudiar.
Etc.
¿Como capta la información alguien con el estilo de aprendizaje auditivo VAK?
Pero claro, no todo puede ser bueno para el adolescente con un estilo de
aprendizaje auditivo. Necesita silencio para concentrarse, por lo que cualquier
murmullo en el aula distraerá su atención. Cuando no está atento a la explicación
del profesor, tendrá problemas posteriormente para aprender la información. El
libro de texto, lamentablemente no habla para él.
Cuando conocí a Julia, que era una
adolescente que tenía un estilo de aprendizaje auditivo, sus padres estaban
preocupados por su rendimiento. Nunca había tenido problemas anteriormente,
pero ahora, al llegar a la adolescencia su calificaciones habían bajado
notablemente.
Para colmo, cuando Julia trataba de aprenderse algo, hablaba en alto para
poderse escuchar, pero su madre le decía que estudiase callada, porque su
hermano pequeño no escuchaba la televisión y se ponía nervioso.
Parecía como si a Julia la estuviesen poniendo todos los obstáculos posibles para
que no aprendiese eficazmente.
Un recurso interesante para las personas auditivas pueden ser los audiolibros o
podcast (programas de radio grabados). Ivoox.com es una página web en la que
se pueden encontrar numerosos programas de radio en audio, audiolibros y
grabaciones en español, que pueden ser utilizados para el aprendizaje. Es un
buscador similar a Youtube pero en formato audio.