El desarrollo que el TAS ha tenido en los últimos 20 años, desde una mínima
intervención a una presencia absoluta en los conflictos internacionales en
soluciones a través de la mediación o el arbitraje, se ha correspondido con el
desarrollo que esta experimentando en la misma línea el TEAD, donde después de
unos años de inactividad los distintos sectores del deporte acuden a esta alternativa
cada vez con mayor frecuencia. El TAS en el orden internacional y el TEAD a nivel
nacional, son los órganos de referencia para la resolución de conflictos a través de
métodos alternativos en relación con el deporte.
. Uno de los casos destacados fue el de Arioza(2015), un laudo arbitral dictado por el TAS (Tribunal Arbitral
del Deporte) en el que se concedió el daño moral al jugador frente a una ruptura contractual por parte del club.
Se trataba de un jugador uruguayo que tenía cáncer y se desempeñaba en el Olimpia de Paraguay. El club
dejó de pagarle y de cubrirle el tratamiento y Arioza se consideró despedido, pero además de cobrar las
indemnizaciones correspondientes, se agregó este ítem de daño moral, lo que constituyó una novedad.
Todos los conflictos internacionales en materia de derecho deportivo se dirimen en arbitraje. Porque una vez
que decide la Federación Internacional -sea esta de fútbol o de otro deporte- esa decisión final se puede
apelar únicamente ante el TAS, ya que es el único Tribunal Arbitral en Deporte que hay en el mundo.
árbitro internacional ante el TAS, estoy entre los 285 que existen en el mundo. Entonces, si un club argentino
se ve envuelto en un problema y tiene que apelar ante el TAS, probablemente de los cinco árbitros argentinos,
elija alguno de nosotros.
El terreno a desarrollar es que en el ámbito nacional nada se resuelve con arbitraje. En general, los conflictos
laborales de jugadores y clubes van a la justicia laboral. Asimismo, los problemas entre clubes, terminan
recurriendo a la justicia pero esto sucede en verdad porque no existe otro lugar al cual recurrir: no hay otra
institución constituida para esto. Las ventajas del arbitraje -si se llegara a implementar a nivel local- son la
especialidad, es decir, que tenés gente especializada en la materia, y también la rapidez. En sí, el derecho
deportivo es una materia muy específica y no todos los jueces la conocen en profundidad.
G.A.: En efecto, los jueces ordinarios muchas veces se equivocan porque la especificidad del derecho del
deporte es muy grande. Hay países que tienen tribunales arbitrales nacionales pero no la Argentina…
G.L.: Estos tribunales requieren aceptación por parte de las asociaciones nacionales. En nuestro caso, la AFA
debería decir que hay un tribunal arbitral para resolver conflictos, por ejemplo, entre clubes, o entre clubes e
intermediarios.
Vale la pena recordar que nuestro país cuenta con una antigua Ley del Deporte, sancionada el 21 de
marzo de 1974 bajo el número 20633, que sin lugar a dudas debiera ser actualizada, teniendo en
cuenta la transformación que ha tenido la actividad deportiva, y en especial el deporte profesional
en los últimos años.
Mientras tanto, sería importante evaluar la posibilidad de crear en Argentina un Tribunal Arbitral
del Deporte con el apoyo y financiamiento del Comité Olímpico Argentino, pero ajeno a su
estructura a fin de garantizar la independencia de sus laudos. Para ello, las Federaciones que
integran el COA debieran impulsar la idea y brindar el apoyo económico necesario. Dicho Tribunal
debería estar integrado por especialistas en cada disciplina, capacitados en arbitraje y que
representen a todos los intereses en juego.
Habrá que evaluar la conveniencia de que su reglamento ofrezca la posibilidad de una instancia de
apelación, por ejemplo ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (CAS), que cuenta con sedes enNew
York (Estados Unidos de Norte América) y Sydney (Australia), además de su central ubicada en
Lausanne (Suiza) ya mencionada.
Sin lugar a dudas, este instituto brindaría al deporte argentino la posibilidad de contar con una
herramienta seria, eficiente y de bajo costo, al menos en la instancia local, para atender los
diferendos que exceden el marco de sus reglamentos deportivos y que hoy día terminan
irresueltos o en la maraña de la justicia estatal. La experiencia española en esta materia, podría ser
un espejo a imitar, siempre teniendo en cuenta la cultura e idiosincrasia de nuestro pueblo.