I. Presentación general
Los objetivos principales del grupo son, en primera instancia, propiciar procesos de investigación y
brindar espacios de reflexión académica e investigativa en el marco de la historia cultural y, en
segunda instancia, abrir espacios institucionales e inter-institucionales, para que los estudiantes de
pregrado y postgrado con intereses en el campo de la historiografía cultural puedan explorar sus
inquietudes investigativas y discutir las propuestas y los acercamientos teóricos relevantes.
Esta línea de investigación del grupo examina las prácticas, representaciones e imaginarios teniendo
en cuenta la historia cultural y sus múltiples manifestaciones. En general estudia cómo se dirimen las
relaciones de poder a través de las significaciones. De la mano con este acercamiento estudia temas
como la diferencia, el cuerpo y las transgresiones. Los investigadores de esta línea entendemos por
diferencia una disonancia real o imaginada con relación a la normalidad, por cuerpo un portador de
significados y por transgresión una acción en contravía a la norma.
Aunque existen diferentes acentos metodológicos y temáticos, los investigadores se preocupan por
argumentar teniendo en cuenta las redes de significación y señalando las tensiones y la circulación
entre el discurso y las acciones, en algunos casos privilegiando perspectivas desde lo subalterno y lo
microsocial, pero también desde el poder y la ciencia. Los temas que estudiamos son políticos porque
fundamentalmente tratan del problema de la discriminación y la criminalización, por lo general de
grupos sociales segregados por las relaciones de poder. En esta medida las significaciones culturales
se develan no como inocentes, sino más bien como poderosos dispositivos de poder con los cuales
se marcan y se reproducen las diferencias pero también se configuran guiones alternativos a los que
estas presentan.
Esta línea de investigación del grupo examina las prácticas, representaciones e imaginarios a través
de la identificación y análisis de lenguajes políticos localizados. Los investigadores de esta línea
entendemos por lenguajes el conjunto de recursos socio-lingüísticos necesarios para abordar
cualquier problema y darle una solución colectivamente satisfactoria. Estos recursos comprenden
varios niveles, tales como los conceptos, metáforas y figuras lingüísticas que definen un campo de
significación; el conjunto de reglas –lingüísticas y socio-culturales-- necesarias para adelantar una
argumentación con éxito; los modos de persuasión de que los interlocutores son capaces y los
protocolos de legitimación y autorización necesarios para establecer criterios de verdad y falsedad,
inclusión y exclusión; y, finalmente, las convenciones e instituciones socio-culturales necesarias para
que estos lenguajes sean socialmente efectivos.
Los lenguajes que estudiamos son políticos porque fundamentalmente abordan el problema de la
institución de la comunidad y el lugar y naturaleza de los individuos que la componen. En otras
palabras, los lenguajes políticos no sólo se ocupan de abordar los problemas propios de la vida
política, sino que penetran de manera más íntima en la experiencia social para examinar su proceso
de auto-institución.
Finalmente, estos lenguajes políticos son localizados porque todo ese conjunto de recursos socio-
culturales ocurren siempre entramados en (por lo menos) una forma concreta de relacionamiento
social, tales como las asociaciones formales o informales, los encuentros cotidianos, los
comportamientos en público y su proceso de diseminación y contestación reguladas por las reglas,
jerarquías e instituciones propias de esa forma de sociabilidad. Las diversas formas de sociabilidad
construyen posibilidades comunicativas diferenciadas que configuran lugares de negociación, de
expresión y formación de la opinión.
Una vez que todo lenguaje político localizado es intencionado –es decir, emerge como intento de
resolver problemas concretos y generalizados—el análisis de un lenguaje político localizado permite
reconstruir la problemática de sus usuarios, es decir, nos permite abordar las aporías propias de esa
sociedad. Apelar a la autocomprensión de los mismos contemporáneos para entender su figuración
de los acontecimientos, el significado de sus proyectos y la manera en que otorgan sentido a sus
propias acciones, nos permite cartografiar el campo de las posibilidades políticas de diferentes
momentos históricos.
- Culturas y visualidades
Esta línea de investigación presta especial atención a las imágenes como problema de investigación
y como fuente para la historia. Las investigaciones que se desarrolla en torno a esta línea dan cuenta
de la preocupación por la manera como se configuran diferentes tipos de visualidades que se
superponen en diversos periodos y espacios geográficos. Uno de los intereses principales es el análisis
de los usos y circulación de las imágenes teniendo en cuenta diferentes tipos de artefactos culturales
ya sean estos pinturas, esculturas, estampas, grabados, murales, libros, publicaciones periódicas,
postales o fotografías, entre otros. Si bien cada uno de los investigadores utiliza sus propias
metodologías las aproximaciones relacionadas con la geografía del arte, el atlas mnemosyne, las
representaciones y la producción de presencia son privilegiadas.
https://vimeo.com/album/2469879/video/90787160
http://www.prismatv.unal.edu.co/nc/detalle-serie/detalle-programa/article/max-hering-torres.html