Anda di halaman 1dari 30

UNIVERSIDAD DE AQUINO BOLIVIA

FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD


CARRERA: MEDICINA

APLICACIONES DE ADN

MATERIA: EMBRIOLOGÍA I
DOCENTE: DRª SHYRLEY SISSY CHOQUETICLLA PUMA
DISCENTE: CAMPERO VASQUEZ JUNIOR JAIME JORGE
GRUPO: G1

07.06.2018
COCHABAMBA – BOLÍVIA

1
Sumário
INTRODUCCIÓN ........................................................................................................ 3

DESARROLLO ............................................................................................................ 7

Marcadores genéticos que se usan en genética forense.......................................... 8

ADN nuclear .......................................................................................................... 10

ADN mitocondrial ................................................................................................... 11

Polimorfismos del cromosoma Y ............................................................................ 13

Casos de paternidad: ............................................................................................. 14

Casos de mezclas en agresiones sexuales:........................................................... 14

Técnicas para analizar los polimorfismos del ADN extraído ................................... 15

Individualización de las muestras biológicas .......................................................... 17

Criminalística ......................................................................................................... 17

Análisis de muestras biológicas .......................................................................... 18m

Exclusión e inclusión .............................................................................................. 20

Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR) ....................................................... 20

Aplicaciones del PCR ............................................................................................ 23

CONCLUSIÓN .......................................................................................................... 27

2
INTRODUCCIÓN

Desde el descubrimiento del ADN en 1869 por mucho tiempo se pasó hasta que sus
funciones primordiales fueron sugeridas por Avery, MacLeod y McCarty, en 1944, y
comprobadas en 1953 por Hershey. La estructura de doble hélice se ha propuesto en 1953
por Watson y Crick y lanzó las bases de cómo esa molécula podría ser duplicada (SCHRANK,
2001).

La amplificación y detección de ácidos nucleicos están sustituyendo ensayos


tradicionales basados más en fenotipos que en genotipos. La reacción en cadena de la
polimerasa (PCR) se ha descrito como el patrón oro para la detección de microorganismos
(MACKAY, 2004). El PCR es un método que permite la amplificación in vitro de segmentos de
ADN, utilizando dos primeros que hibridizan con cintas opuestas en regiones que flanquean el
segmento a ser amplificado (PASSAGLIA & ZAHA, 2001).

Está presente en el núcleo de todas las células del cuerpo (cromosomas autosómicos)
y está formado por una sucesión de nucleótidos (unidad básica del ADN) compuesto por un
azúcar (desoxirribosa), un grupo fosfórico y una base nitrogenada, hay cuatro diferentes tipos
de bases en el ADN, dos pirimídicas: TIMINA (T) Y CITOSINA (C) y dos púricas: ADENINA
(A) y GUANINA (G). Estos nucleótidos están unidos entre sí formando una cadena lineal
enfrentada con su complementaria, por lo que se utiliza la expresión par de bases, formando
una estructura de doble cadena.

La característica más importante de esta doble hélice es la complementariedad de las


bases, ya que la unión de las bases de una cadena a las de la otra se rige por la exclusividad
de la unión: A solo se une a la T y viceversa; la G sólo se une a la C y viceversa.

La herencia de todo organismo vivo es definida por su genoma, que consiste en una
larga secuencia de ácidos nucleicos que proporciona la información necesaria para construir
el organismo (LEWIN, 2009). El término genoma designa el un conjunto completo de
secuencias del material genético de un organismo. Incluye la secuencia de todos los
cromosomas y aún cualquier ADN contenido en organelas (MARTINEZ et al., 2006). A través
de una compleja serie de interacciones, esa se utiliza para producir todas las proteínas del
organismo en el momento y locales apropiados (LEWIN, 2009).

3
Se puede decir que un gen es una secuencia de ADN necesaria para la síntesis de un
ácido ribonucleico (ARN), que llevará la síntesis de una proteína. Que es el dogma central de
la biología molecular (MARTINEZ et al., 2006).

El ADN es el material genético responsable de la herencia y de las características


físicas y metabólicas de un organismo.

El ADN se encuentra organizado en secuencia de nucleótidos (A, G, C, T) que forman


segmentos de ADN denominados genes, los cuales cumplen una función específica y
determinan la secuencia de aminoácidos de una proteína.

Los genes son los portadores de la información hereditaria y controlan las


características específicas de un organismo. El gen se expresa en forma de proteínas que
representan las características físicas (apariencia), metabólicas y moleculares (características
bioquímicas), de cualquier organismo.

Cuando los científicos comprendieron la estructura de los genes y cómo la información


que portaban se traducía en funciones o características, comenzaron a buscar la forma de
aislarlos, analizarlos, modificarlos y hasta de transferirlos de un organismo a otro para
conferirle una nueva característica. Justamente, de eso se trata la ingeniería genética, que se
define como un conjunto de metodologías que permite transferir genes de un organismo a otro.
Como consecuencia, la ingeniería genética sirve para clonar fragmentos de ADN y para
expresar genes (producir las proteínas para las cuales estos genes codifican) en organismos
diferentes al de origen.

Entre las aplicaciones de la ingeniería genética se encuentra:

• Eliminar una característica indeseable de un organismo (por ejemplo, la


producción de una toxina) silenciando el gen correspondiente.
• Introducir una nueva característica en una especie (por ejemplo, la resistencia
a un insecto) copiando el gen indicado de una especie resistente e
introduciéndolo en el genoma de la especie susceptible.
• Modificar la expresión de un gen presente en un organismo vivo

Debido a la universalidad del código genético, la ingeniería genética puede utilizar la


información existente en todos los seres vivos. El intercambio de información genética entre
distintos seres vivos no es una invención humana y ocurre con frecuencia entre

4
microorganismos, de hecho, la ingeniería genética se basa en mecanismos que operan
normalmente en la naturaleza, como el utilizado por Agrobacterium Tumefacien en plastas de
tabaco.

La genética forense no surge como tal, sino que evoluciona a partir de otra rama
conocida como hemogenética forense; nace a principios del siglo XX, cuando Karl Landsteiner
describe el sistema ABO de los hematíes y Von Durgen y Hirschfeld descubren su transmisión
hereditaria. El objetivo de esta ciencia era la identificación genética en crímenes y casos de
paternidad. Inicialmente, las investigaciones se centraban en el estudio de antígenos
eritrocitarios (sistema ABO, Rh, MN), proteínas séricas y enzimas eritrocitarias. Con el estudio
de dichos marcadores podía incluirse o excluirse una persona como posible sospechoso por
poseer una combinación genética igual o diferente a la del vestigio biológico hallado en el lugar
de los hechos.

Pero fue a mediados de siglo cuando gracias al descubrimiento del ADN y de su


estructura y al posterior avance en las técnicas de análisis de dicha molécula la Hemogenética
Forense evolucionó considerablemente hasta el punto de que hoy en día la Genética Forense
es una disciplina autónoma y en constante crecimiento. Aunque la ciencia poseía las
herramientas necesarias para el estudio del ADN, su aplicación en la resolución de casos
judiciales no se produjo hasta 1985.

Esta subespecialidad se centra básicamente en tres áreas:

Investigación de la paternidad: Impugnación por parte del supuesto padre o


reclamación por parte de la madre y/o del hijo.

Criminalística: Asesinato y delitos sexuales (violación sexual). Se analizan restos


orgánicos humanos (sangre, pelo, saliva, esperma, piel).

Identificación: Restos cadavéricos (por ejemplo, los restos del zar Nicolás II de Rusia y
su familia) o personas desaparecidas (como sucedió en Argentina con los niños desaparecidos
durante la dictadura militar). El genoma humano mitocondrial posee ciertas características que
lo hacen especialmente útil para estudios de identificación y evolución molecular, como, por
ejemplo:

5
La importancia del ADN mitocondrial es la escasa cantidad de muestra que se necesita,
debido a su mayor número de copias por célula, se puede realizar en un solo pelo cortado o
sin bulbo.

Un pelo con bulbo caduco o un fragmento de pelo contendrá una cantidad de ADN
Nuclear tan escasa que en principio resultará negativo.

También cuando exista una gran degradación de las muestras por las malas
condiciones de conservación en que permanecieron hasta que fueron encontradas en el lugar
del crimen o por la antigüedad que tienen, tal el caso de restos óseos y dientes antiguos o
sometidos a condiciones extremas, el ADN mt se encontrara en mejor estado.

También en la Antropología molecular para el estudio de la evolución humana, los flujos


migratorios, determinar linajes completos, en catástrofes, etc.

6
DESARROLLO

El ácido desoxirribonucleico, abreviado como ADN, es un ácido nucleico que contiene


las instrucciones genéticas usadas en el desarrollo, funcionamiento de todos los organismos
vivos y algunos virus, también es responsable de su transmisión hereditaria. La función
principal de la molécula de ADN es el almacenamiento a largo plazo de información para
construir otros componentes de las células, como las proteínas y las moléculas de ARN. Los
segmentos de ADN que llevan esta información genética son llamados genes, pero las otras
secuencias de ADN tienen propósitos estructurales o toman parte en la regulación del uso de
esta información genética.

Desde el punto de vista químico, el ADN es un polímero de nucleótidos, es decir, un


polinucleótido. Cada nucleótido, a su tiempo, está formado por un glúcido (la desoxirribosa),
una base nitrogenada (que puede ser adenina→A, timina→T, citosina→C o guanina→G) y un
grupo fosfato (derivado del ácido fosfórico). Lo que distingue a un polinucleótido de otro es,
entonces, la base nitrogenada, y por ello la secuencia del ADN se especifica nombrando solo
la secuencia de sus bases. La disposición secuencial de estas cuatro bases a lo largo de la
cadena es la que codifica la información genética, siguiendo el siguiente criterio de
complementariedad: A-T y G-C. Esto se debe a que la adenina y la guanina son de mayor
tamaño que la timina y la citosina, por lo que este criterio permite cumplir una uniformidad. En
los organismos vivos, el ADN se presenta como una doble cadena de nucleótidos, en la que
las dos hebras están unidas entre sí por unas conexiones denominadas puentes de hidrógeno.

Para que la información que contiene el ADN pueda ser utilizada por la maquinaria
celular, debe copiarse en primer lugar en unos trenes de nucleótidos, más cortos y con unas
unidades diferentes, llamados ARN. Las moléculas de ARN se copian exactamente del ADN
mediante un proceso denominado transcripción. Una vez procesadas en el núcleo celular, las
moléculas de ARN pueden salir al citoplasma para su utilización posterior. La información
contenida en el ARN se interpreta usando el código genético, que especifica la secuencia de
los aminoácidos de las proteínas, según una correspondencia de un triplete de nucleótidos
(codón) para cada aminoácido. Esto es, la información genética (esencialmente: qué proteínas
se van a producir en cada momento del ciclo de vida de una célula) se halla codificada en las
secuencias de nucleótidos del ADN y debe traducirse para poder funcionar. Tal traducción se
realiza usando el código genético a modo de diccionario. El diccionario "secuencia de
nucleótido-secuencia de aminoácidos" permite el ensamblado de largas cadenas de
aminoácidos (las proteínas) en el citoplasma de la célula. Por ejemplo, en el caso de la

7
secuencia de ADN indicada antes (ATGCTAGCATCG...), la ARN polimerasa utilizaría como
molde la cadena complementaria de dicha secuencia de ADN (que sería TAC-GAT-CGT-AGC-
...) para transcribir una molécula de ARNm que se leería AUG-CUA-GCA-UCG-...; el ARNm
resultante, utilizando el código genético, se traduciría como la secuencia de aminoácidos
metionina-leucina-ácido aspártico-arginina-...

Las secuencias de ADN que constituyen la unidad fundamental, física y funcional de la


herencia se denominan genes. Cada gen contiene una parte que se transcribe a ARN y otra
que se encarga de definir cuándo y dónde deben expresarse. La información contenida en los
genes (genética) se emplea para generar ARN y proteínas, que son los componentes básicos
de las células, los "ladrillos" que se utilizan para la construcción de los orgánulos u organelos
celulares, entre otras funciones.

Dentro de las células, el ADN está organizado en estructuras llamadas cromosomas


que, durante el ciclo celular, se duplican antes de que la célula se divida. Los organismos
eucariotas (por ejemplo, animales, plantas y hongos) almacenan la mayor parte de su ADN
dentro del núcleo celular y una mínima parte en elementos celulares llamados mitocondrias, y
en los plastos y los centros organizadores de microtúbulos o centríolos, en caso de tenerlos;
los organismos procariotas (bacterias y arqueas) lo almacenan en el citoplasma de la célula y,
por último, los virus ADN lo hacen en el interior de la cápside de naturaleza proteica. Existen
multitud de proteínas, como por ejemplo las histonas y los factores de transcripción, que se
unen al ADN dotándolo de una estructura tridimensional determinada y regulando su
expresión. Los factores de transcripción reconocen secuencias reguladoras del ADN y
especifican la pauta de transcripción de los genes. El material genético completo de una
dotación cromosómica se denomina genoma y, con pequeñas variaciones, es característico
de cada especie.

Marcadores genéticos que se usan en genética forense

Los marcadores genéticos que se utilizan actualmente están constituidos por regiones
de ADN repetitivo que presentan una gran variabilidad de tamaño entre los distintos individuos
de una población. Estas regiones como ya hemos dicho, se conocen con el nombre de
regiones polimórficas. El principio básico de estos polimorfismos genéticos de estas regiones
reside en la variación del número de veces que se repite en tándem una secuencia
determinada (una repetición en tándem es una secuencia corta de ADN que se repite
consecutivamente, en un locus específico). Según esto se clasifican en:

8
VNTR (acrónimo inglés: Variable Number of Tandem Repeats: número variable de
repeticiones en tándem). Son locus cuyos alelos difieren por tener un número variable de
repeticiones en tándem. Un ejemplo de VNTR en humanos es una secuencia de ADN de 17
pb que se repite entre 70 y 450 veces en el genoma. El número total de pares de bases en
ese locus puede así variar entre 1190 y 7650. Ventajas de estos polimorfismos:

Son muy variables en la población: los perfiles de ADN varían de una persona a otra,
por tanto, podemos afirmar que no existen dos personas con el mismo número de repeticiones
en tándem. Cuando se comparan los perfiles de un solo locus VNTR para individuos no
relacionados entre sí, habitualmente son diferentes. No obstante, es posible que dos personas
tengan el mismo perfil en uno o dos loci por casualidad. Sin embargo, la probabilidad de que
dos personas tengan el mismo perfil de ADN en 4, 5 o 6 loci VNTR diferentes es
extremadamente baja. Cuando se usan los perfiles de ADN con fines médico-legales, se
analizan de 4 a 6 loci VNTR diferentes.

El número de repeticiones es heredable. Dado que recibimos un cromosoma de cada


tipo del padre y otro de la madre, tendremos un número de repeticiones proveniente de éste y
otro de ésta. En forma de esquema, consideremos los individuos A y B. Supongamos que
existen dos hipotéticos VNTR, uno de ellos en una cierta región del cromosoma 6 y otro en el
15.

Existen dos tipos de polimorfismos de repetición de uso en diagnóstico genético, los


VNTR-minisatélites y los VNTR-microsatélites.

Los VNTR-minisatélites o MVR (minisatellite variant repeats) son loci que corresponden
a secuencias de ADN de unas pocas decenas de nucleótidos (sobre 30 pares de bases)
repetidas en tándem. El número de dichas repeticiones varía de cromosoma a cromosoma. La
singularidad más especial de este tipo de polimorfismos está en que cada loci puede presentar
muchos alelos distintos (tantos como repeticiones), sin embargo, presentan el inconveniente
que no están distribuidos por todo el genoma y por lo tanto solo pueden ser utilizados en el
diagnóstico de un número muy reducido de casos. Los VNTR-minisatélites han encontrado su
máxima aplicación en la determinación de la paternidad y en los protocolos de identificación
genética en el ámbito judicial. Cuando se habla de huellas dactilares del ADN se está hablando
de este tipo de polimorfismo.

9
Los VNTR-microsatélites o STR (short tandem repeats) Corresponden a la repetición
en tándem de secuencias de entre 2 y 5 nucleótidos. Los microsatélites presentan dos
características que los hacen ideales para su uso. En primer lugar, están distribuidos de forma
casi homogénea por todo el genoma y, en segundo lugar, presentan un número elevado de
alelos con frecuencias similares entre sí, de forma que la probabilidad de que un individuo sea
heterocigoto es muy elevada (presentan una alta heterocigosidad).

Estas regiones hipervariables pertenecen al denominado “ADN no codificante” son


regiones no conservadas y por tanto no sujetas a una presión selectiva intensa, originando un
gran número de variantes, que son los que denominamos alelos. Estas zonas llamadas
polimórficas son las que nos interesan en genética forense para poder diferenciar unas
muestras de otras. Por tanto, no es interesante analizar la molécula de ADN completa,
principalmente por dos razones:

• Se tardaría mucho tiempo.


• La mayor parte de la molécula es común en todos los humanos y no se podrían
distinguir.

ADN nuclear

Siempre que sea posible se realizará el análisis de polimorfismos de este ADN, pues
son los que más información nos darán en cuanto a la identidad de la muestra. Se encuentra
en el núcleo, y se hereda mitad de la madre y mitad del padre, con excepción del ADN presente
en el cromosoma Y masculino, que sólo se hereda por línea paterna.

Las características más importantes del ADN nuclear para identificación humana son:

Es único para cada persona, excepto en el caso de los gemelos univitelinos.

Permite establecer relaciones entre hermanos, primos, abuelos nietos, y otros grados
de parentesco, porque como veremos, otros tipos de ADN sólo nos permitirán establecer
relaciones de paternidad (cromosoma Y) y de maternidad (ADN mitocondrial).

Sirve para determinar el sexo de la persona de la que proviene una muestra porque se
puede establecer la presencia de XX o XY en el par 23.

Posee un enorme potencial de estudio, por la gran cantidad de ADN no codificante y


las regiones tipo STR y SNP.

10
Uno de los fragmentos de ADN nuclear más estudiados es la amelogenina. Se trata de
un marcador muy útil porque nos informa sobre el sexo del individuo al que pertenece la
muestra.

La amelogenina es un locus localizado en una región homóloga de los cromosomas


sexuales. Existe una diferencia de 6 pares de bases entre el tamaño del alelo presente en el
cromosoma X y el Y, que se debe a una pequeña deleción en el cromosoma X. El resultado
de la amplificación por PCR de este locus en un ADN femenino (XX) será de una única banda,
mientras que si el ADN es masculino (XY), el resultado serán dos bandas de distinto tamaño.

No obstante, hay que tener en cuenta que, aunque ocurre con muy baja frecuencia, se
ha detectado la existencia de deleciones en esta región del cromosoma Y, de tal forma que
una muestra masculina podría asignarse erróneamente como femenina. En este caso, el
análisis de marcadores específicos del cromosoma Y permitirían una correcta asignación del
sexo. El inconveniente que presenta el estudio de marcadores concretos del cromosoma Y, es
que se heredan sin cambios significativos en una misma familia de padre a hijo, de modo que
nos permiten identificar a un varón de la familia, pero tendremos que estudiar otros marcadores
para distinguir entre abuelo, padre, hijo, etc.

Después de una extracción de ADN en muestras que se encuentran en muy mal estado
de conservación, se obtienen fragmentos de sólo 100-200 nucleótidos debido a su estado de
degradación (rotura), con el agravante de que muchas veces estas muestras van
acompañadas de ADN bacteriano. Por el contrario, las muestras de tejido fresco proporcionan
fragmentos de ADN de más de 10.000 nucleótidos.

Pero existen situaciones en las que es recomendable el análisis de otros tipos de


polimorfismos como son los polimorfismos de ADN mitocondrial y polimorfismos ligados al
cromosoma Y.

ADN mitocondrial

Existen numerosas mitocondrias en cada célula (entre 250 y 1000 según el tipo celular,
las necesidades metabólicas y el tipo funcional) y varias copias de ADN mitocondrial en cada
mitocondria, es decir, existen mayor cantidad de copias de ADNmt que de ADN nuclear por
célula, de forma que hay una sola copia de ADN nuclear en una célula mientras que puede
haber miles de copias de ADNmt. Este hecho hace que en muestras forenses muy críticas
(con escasa cantidad de ADN o con ADN en mal estado) tenga más éxito el análisis de ANDmt

11
que el de ADN nuclear. Sin embargo, el ADNmt presenta una peculiaridad, se hereda única e
íntegramente de la madre, sin que exista ninguna combinación con el material del padre. Por
este motivo se dice que es un genoma haploide.

La causa de que no exista mezcla con el material del padre es la siguiente: las
mitocondrias del espermatozoide se localizan en el cuello (entre la cabeza y la cola), con el fin
de aportar la energía que esta célula necesita para mover la cola y desplazarse en busca del
óvulo. Al producirse la fecundación solo penetra en la célula femenina la cabeza del
espermatozoide (con el ADN nuclear) quedando fuera la cola y el cuello, y con él todas las
mitocondrias. Esto hace que el padre no aporte dicho material a su descendencia.

Las características básicas que lo hacen útil en investigación forense y antropológica


son:

El elevado número de copias por célula que hace alguna de ellas resista las
condiciones adversas sin ser degradada.

Su pequeño tamaño. Esto facilita la conservación en el tiempo a pesar de que las


condiciones no sean apropiadas: al ser más pequeño que el ADN nuclear la probabilidad de
verse afectado es menor.

Estas 2 características garantizan la estabilidad postmortal y una mayor resistencia que


el nuclear.

Pero también tiene desventajas o puntos débiles como:

• No es específico de cada persona, sino que se asocia a todas las personas que
proceden de la misma madre, abuela materna, etc.
• Sólo es útil cuando se trata de hacer estudios por vía materna, de modo que
permite identificar a cualquier persona (hombre o mujer) frente a su madre, no
frente a su padre.
• Presenta gran dificultad técnica por lo que restringe su uso a laboratorios
especializados.

Este tipo de ADN se utiliza sobre todo en los casos siguientes:

Cuando existe una gran degradación de las muestras por las malas condiciones de
conservación en que permanecieron hasta que fueron encontradas en lugar del crimen o por

12
la antigüedad que tienen. En este caso el ADN mitocondrial se encontrará en mejor estado
que el nuclear debido a su mayor número de copias por célula. Tal es el caso de restos óseos
y dientes antiguos o sometidos a condiciones extremas.

Cuando la cantidad de muestra de que se dispone es mínima (pelos sin bulbo, por
ejemplo). Un pelo con bulbo caduco o un fragmento de pelo contendrá una cantidad de ADN
nuclear tan escasa que en principio los análisis de estas muestras mediante ADN nuclear
resultarán negativo.

En la identificación de restos biológicos y el establecimiento de una relación familiar


cuando no se dispone de los progenitores y no queda más remedio que realizar una
comparación con familiares más lejanos. Si se trata de familiares vía materna tendrán
exactamente el mismo ADN mitocondrial, aunque se trate de familiares lejanos. Un estudio de
ADN nuclear en estos casos sería poco informativo ya que cuanto más alejada sea su relación
familiar, menos alelos compartirán.

Cuando existe un sospechoso en un hecho delictivo, pero se dispone de muestra de la


cual no se conoce su procedencia, se puede recurrir al estudio del ADN mitocondrial de un
familiar relacionado matrilinealmente para excluirlo.

Polimorfismos del cromosoma Y

El cromosoma Y sólo existe en varones y todos los individuos varones emparentados


por línea paterna comparten el cromosoma Y (casi en su totalidad) pues se hereda
directamente de padres a hijos sin mezclarse con ningún material procedente de la madre. Por
tanto, sólo es posible identificar linajes paternos mediante el estudio de su cromosoma Y,
mientras que no es posible identificar individuos. Respecto a los polimorfismos del cromosoma
Y se analizan microsatélites (STRs).

Los principales problemas que derivan de las características hereditarias del


cromosoma Y:

• No es único de cada persona, sino que es común para todos los pertenecientes
a un linaje paterno común.
• Sólo se puede aplicar a los hombres de modo que, en un estudio de paternidad,
como, por ejemplo, no sirve para determinar si un hombre es padre de una
mujer.

13
Existen varios casos especiales en los cuales el análisis de los polimorfismos del
cromosoma Y son de gran utilidad:

Casos de paternidad:

Casos de paternidad en los que no se dispone de material biológico de la madre. Nos


bastará con disponer de la muestra del padre y compararla con la del presunto hijo para
comprobar si ambas presentan idénticos polimorfismos Y.

En casos complejos en los que falta el padre, pero tenemos por ejemplo al abuelo.

Casos de mezclas en agresiones sexuales:

Agresiones en las que el semen del sospechoso varón se encuentra mezclado con
células de una víctima mujer: los polimorfismos del cromosoma Y son detectados de forma
más sensible en el ADN de un individuo a pesar de que éste se encuentre inmerso en una
gran cantidad de ADN femenino. Con marcadores nucleares esto no ocurre pues se detecta
antes el material femenino sobre todo si la cantidad de células epiteliales femeninas es muy
superior al número de espermatozoides. Además, el uso de polimorfismos de ADN del
cromosoma Y nos permite incluir o excluir a un sospechoso cómodamente.

Delitos en los que el agresor es un individuo azoospérmico: los individuos


azoospérmicos tienen ausencia de espermatozoides en el eyaculado. Los espermatozoides
son la mayor fuente de ADN en las muestras de semen, por lo que un individuo azoospérmico
tiene mucho menos ADN seminal para el análisis. La cantidad de ADN por mililitro (mL) en el
eyaculado de un individuo espérmico es aproximadamente de 450 microgramos (μgr) en los
espermatozoides y de 30 μgr en los leucocitos y células epiteliales.

Por ello, en un individuo azoospérmico, el contenido de ADN es aproximadamente de


sólo el 6.3% del contenido en un individuo espérmico. Por las mismas razones que en el caso
anterior, es posible la detección de ADN de las células epiteliales y los leucocitos en
eyaculados de individuos vasectomizados, aunque se encuentre mezclado con ADN de la
víctima.

Agresiones sexuales múltiples: el uso de los microsatélites del cromosoma Y en estos


casos permite determinar el número mínimo de agresores.

14
Otros tipos de mezclas: En mezclas de sangre-sangre, o de sangre-saliva, o de sangre-
pelos, el cromosoma Y es una herramienta de trabajo que puede aportar valiosa información.

Como herramienta de «screening»:

En casos de agresión sexual: los polimorfismos Y pueden servir para relacionar


rápidamente estos casos (bases de datos) y excluir sospechosos de manera rápida antes de
profundizar en marcadores autosómicos.

En grandes catástrofes: Cuando en una catástrofe aparece un gran número de


cadáveres puede ser interesante clasificarlos según sus polimorfismos Y para poder
discriminar qué cadáveres tendremos que cotejar con cada familia antes de realizar los
estudios de ADN nuclear autosómico. Esto resulta muy útil cuando, por ejemplo, los familiares
vivos que se usan como muestras de referencia son los hermanos de las víctimas.

Para terminar este apartado diremos que tanto el ADNmt como los polimorfismos del
cromosoma Y tienen mucho menos poder de discriminación que el ADN nuclear autosómico
utilizado habitualmente. Ninguno de estos tipos de ADN identifica individuos, sino líneas
familiares maternas y paternas.

Técnicas para analizar los polimorfismos del ADN extraído

En un principio la manera de estudiar dichos marcadores se hizo por medio de la


técnica llamada hibridación con sondas o Southern blot.

El tipo de sondas que se utilizan en esta técnica pueden ser de dos tipos:

Sondas Uni-locus (SLP): La técnica permite detectar loci minisatélites únicos. son
específicas para una región de un determinado cromosoma. Se unen a secuencias largas de
nucleótidos y presentan mayor variabilidad que las sondas multi-locus. Como resultado se
observan una o dos bandas por individuo, según sea homocigoto o heterocigoto. El patrón de
bandas obtenido con estas sondas se denomina perfil unilocus de ADN o “DNA profiling”. Se
utiliza principalmente en investigaciones de paternidad porque identifica loci minisatélites muy
informativos.

Sondas Multi-locus (MLP): permiten identificar simultáneamente muchas regiones


hipervariables. Son sondas de 10 a 15 nucleótidos que se repiten múltiples veces y tras el
revelado se observan de 10 a 20 bandas por persona. Este patrón de múltiples bandas es

15
característico de cada individuo, constituye algo así como su “huella dactilar de ADN” y se
conoce como huella genética multilocus o “DNA fingerprint”.

Las sondas multi y uni-locus presentan una serie de ventajas e inconvenientes según:

Información aportada: las sondas multi-locus tienen una mayor capacidad


discriminativa al aparecer múltiples bandas. No obstante, las uni-locus son más específicas ya
que el fragmento de ADN con el que hibridan es de mayor tamaño. Por consiguiente, para
analizar 7 u 8 loci, se deberían utilizar 7 u 8 sondas uni-locus, mientras que con una sola sonda
multi-locus podría hibridar de un solo paso esas 7 u 8 regiones hipervariables.

Cantidad y calidad del ADN: cuando se usan sondas multi-locus se requiere


aproximadamente un microgramo de ADN sin degradar mientras que en el caso de las uni-
locus se necesita menos de 100 ng y este ADN no necesariamente debe estar en perfecto
estado, siempre y cuando el fragmento complementario a la sonda esté intacto.

Especificidad entre especies: las sondas multi-locus permiten su uso sobre el ADN
humano y de cientos de animales superiores, mientras que las uni-locus son exclusivas de
ADN humano.

Aunque las SLP han sido y son bastante útiles en estudios de paternidad no puede
decirse lo mismo de su aplicación a la Criminalística ya que presenta una serie de
inconvenientes como son:

La cantidad de ADN que se necesita está entre 20 y 100 ng, cantidad difícil de
conseguir en casos de criminalística en los que los indicios biológicos encontrados son
mínimos.

En cuanto a la calidad del ADN, es muy difícil encontrar en buen estado toda la cantidad
de ADN que se necesita para un análisis con sondas mono-locus.

El tiempo requerido para este tipo de análisis es de dos o tres días, debido a la
necesidad de tener que utilizar más de una SLP.

El hecho de que se requieran cantidades elevadas de ADN hace que normalmente,


con el primer análisis se consume la totalidad de la muestra, con lo que se dificulta un contraste
de pruebas o una posterior revisión del caso.

16
Todas estas limitaciones se superaron tras la aparición de una técnica muy útil, la
reacción en cadena de la polimerasa (PCR: Polymerase Chain Reaction).

Individualización de las muestras biológicas

En una primera fase se deberá aislar la molécula completa, posteriormente sólo


estudiaremos ciertas regiones de ella, concretamente las zonas más polimórficas.

La analítica de ADN se realiza en cuatro fases:

1. Extracción de ADN: consiste en separar la molécula de ADN del resto de


componentes celulares. La duración de este proceso depende del tipo de resto
biológico que se analice, por ejemplo, en las muestras de sangre o de saliva el
proceso de extracción es más rápido que a partir de un resto óseo o dentario
donde el ADN es menos accesible.
2. Cuantificación de ADN: se realiza para saber qué cantidad de ADN se ha
logrado aislar y en qué estado se encuentra (completo o roto).
3. Amplificación de ADN: consiste en copiar muchas veces el fragmento concreto
de ADN que queremos estudiar para obtener una cantidad adecuada que nos
permita su detección, esto se lleva a cabo por PCR.
4. Detección del producto amplificado o tipaje: esta es la fase final del análisis y
nos permite caracterizar y clasificar los fragmentos de ADN estudiados en cada
muestra para diferenciar unas de otras.

Criminalística

Desde siempre el delito ha venido acompañado de la necesidad de investigarlo, de


aclararlo, de buscar y de castigar al culpable. Se puede definir criminalística como la ciencia
aplicada que estudia científicamente los indicios y las evidencias con el objeto de convertirlos
en pruebas para permitir la identificación de las víctimas y de los delincuentes y esclarecer las
circunstancias de un presunto delito.

Muestras dubitadas e indubitadas

Las muestras con las que se trabaja en criminalística se pueden clasificar en dos tipos:

17
Muestras dubitadas o evidencias: son restos biológicos de procedencia desconocida,
es decir, no se sabe a quién pertenecen (por ejemplo, las muestras recogidas en la escena del
delito o de un cadáver sin identificar).

Los tipos de muestras dubitadas más frecuentemente analizadas por técnicas genético
moleculares son: sangre (habitualmente en forma de mancha), semen (lavados vaginales o
manchas sobre prendas de la víctima), saliva (colillas de cigarrillo, chicles, sobres y sellos),
pelos, uñas, tejidos blandos, restos óseos y dentarios (estos últimos relacionados
fundamentalmente con la identificación de cadáveres).

Muestras indubitadas o de referencia: son restos biológicos de procedencia conocida,


es decir, se sabe a quién pertenecen (por ejemplo, la sangre tomada de un cadáver
identificado, o las muestras tomadas a familiares de un desaparecido). El tipo de muestras
indubitadas más habituales son sangre y saliva (frotis bucal).

Para la genética forense, son de interés los denominados indicios biológicos que son
los que contiene ADN, y por ello se definen como “toda sustancia líquida o sólida que provenga
directamente del cuerpo humano o que haya estado en contacto con el mismo, y en cuya
superficie o interior pueda haber restos de células”.

Algunos ejemplos de indicios biológicos obtenidos en la escena del crimen son: sangre,
semen, pelos, saliva, tejidos blandos, huesos y dientes, orinas, heces, sudor, etc. En cuanto a
los indicios no biológicos, algunos ejemplos son: fibras y tejidos, restos de pólvora y material
de disparos, restos de tierra, semillas, plantas y hierbas, tinta pintura, madera, material de
engrase, etc.

Análisis de muestras biológicas

Sangre: se puede encontrar bien en estado líquido o en forma de mancha. La sangre


líquida bien conservada no ofrece ningún tipo de problema, pero es frecuente que al laboratorio
llegue sangre putrefacta bien porque se ha estropeado durante el transporte o bien porque
pertenece a un cadáver en el cual se ha iniciado la descomposición. Para evitar el primer
problema es conveniente realizar una mancha sobre una gasa antes de proceder al transporte
de la muestra y para el segundo hay que tratar de buscar otra muestra para el análisis, bien
sea un tejido blando, uñas, o un resto óseo, dependiendo del estado de conservación del
cuerpo. Por el contrario, la sangre en forma de mancha se conserva más fácilmente y puede
analizarse tras varios años si las condiciones de secado fueron adecuadas. Quizás las

18
manchas sobre cueros, maderas tratadas, restos vegetales y tierras sean de las más críticas
pues estos materiales tienen diferentes grados de absorción y en ellos se encuentran
presentes gran cantidad de inhibidores de la PCR como los taninos, que impiden que la
reacción funcione. Para detectar muestras de sangre en la escena de una agresión, se utilizan
una serie de métodos como: colorimetría (detección mediante oxidasas), cristalografía,
quimioluminiscencia (mediante luminol), inmunocromatográfica, etc.

Saliva: estas muestras no suelen presentar problemas en la analítica de ADN. Suelen


llegar al laboratorio en forma de mancha, sobre filtros de cigarrillo, sellos, chicles o prendas o
bien en otros soportes como vasos, botellas o huesos de fruta. Se detectan mediante alfa-
amilasa.

Esperma: se recoge en los casos de agresiones sexuales. El principal problema es


que además de los espermatozoides del agresor se suele encontrar las células del epitelio
vaginal de la víctima. Por ello, a la hora de analizar estas muestras aparece una mezcla de
perfiles genéticos, pero como el perfil genético de la víctima sí lo conocemos podemos
determinar cuál es el del agresor.

Pelos: estas muestras requieren un análisis microscópico previo a la analítica


molecular con el fin de determinar el tipo de análisis que es posible en ellos (estudios de ADN
nuclear o de ADN mitocondrial) además de otras características importantes. Con el análisis
microscópico se determinan, entre otros, los siguientes puntos:

- Si se trata de pelos de origen animal o humano.

- Si se trata de pelos completos (con bulbo) o de fragmentos de pelos (sin bulbo). En


el caso de fragmentos de pelos los estudios a realizar son los de ADN mitocondrial como
veremos en el siguiente apartado. En el caso de los pelos con bulbo se puede determinar en
qué fase vital se encuentra éste. En los pelos con bulbo telogénico (en fase de caída) se suele
realizar análisis de ADN mitocondrial y en los pelos con raíz anagénica (en fase de crecimiento)
se puede realizar un análisis de ADN nuclear.

Tejidos: las muestras suelen estar relacionadas sobre todo con la identificación de
cadáveres en los que han comenzado los procesos de putrefacción. Los mejores resultados
se obtienen con músculo esquelético tomado de las zonas que se estén más preservadas de
la putrefacción.

19
Huesos y dientes: estas muestras se obtienen de los cadáveres ya esqueletizados y
son las más problemáticas en cuanto a identificación genética. Los huesos largos (fémur o
húmero) y los molares (muelas) son las muestras que ofrecen mejores resultados. La
extracción de ADN a partir de este tipo de restos es más larga y costosa que en los casos
anteriores.

Exclusión e inclusión

Una vez que se ha estudiado todo lo anterior y se han obtenidos los resultados de ADN
de las muestras y se tienen supuestos sospechosos, hay que decidir si el sospechoso es el
verdadero autor del crimen o sin embargo se ha inculpado a la persona equivocada. Para ello
se definen dos conceptos: Exclusión e inclusión.

En las muestras tomadas del supuesto criminal como en las muestras recogidas en la
escena del crimen se han analizado una serie de loci polimórficos, los mismos en los dos
casos:

Si al analizar los loci de ambos, tanto en la muestra problema como en el sospechoso


aparecen los mimos alelos, se habla de inclusión, pero esta inclusión nunca es del 100% ya
que se está trabajando con probabilidades. Estas probabilidades hacen referencia a las
frecuencias de los alelos en la población. Así, para obtener este valor hay que multiplicar la
frecuencia de que los dos alelos del locus 1 se den en la población, por la frecuencia de que
los alelos del locus 2 se encuentren en la población, y así sucesivamente hasta multiplicar
todas las frecuencias de los loci polimórficos analizados. Este valor será un número muy
pequeño, por lo que para dar el resultado final se hace una conversión. Por convenio, está
establecido que si tras hacer la conversión se obtiene una probabilidad del 99.73% y todos los
alelos de todos los loci coinciden, se estará en lo cierto con una probabilidad altísima si se
inculpa al presunto sospechoso como verdadero sospechoso.

Si, por el contrario, al analizar los loci de ambos, hay algún alelo en el que la muestra
problema y sospechoso no coinciden, aunque sólo sea uno, se habla de exclusión, y en este
caso sí es del 100%, es decir, que se tiene certeza absoluta cuando se rechaza al supuesto
sospechoso como verdadero autor y por tanto hay que seguir buscando al verdadero
sospechoso.

Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR)

20
La reacción en cadena de la polimerasa, conocida como PCR por sus siglas en inglés
(polymerase chain reaction), es una técnica de biología molecular desarrollada en 1983 por
Kary Mullis. Su objetivo es obtener un gran número de copias de un fragmento de ADN
particular, partiendo de un mínimo; en teoría basta partir de una única copia de ese fragmento
original, o molde.

Esta técnica sirve para amplificar un fragmento de ADN; su utilidad es que tras la
amplificación resulta mucho más fácil identificar con una muy alta probabilidad, virus o
bacterias causantes de una enfermedad, identificar personas (cadáveres) o hacer
investigación científica sobre el ADN amplificado. Estos usos derivados de la amplificación han
hecho que se convierta en una técnica muy extendida, sobre todo en el ámbito de la
investigación forense, con el consiguiente abaratamiento del equipo necesario para llevar a
cabo dicha técnica.

Esta técnica se fundamenta en la propiedad natural de los ADN polimerasas para


replicar hebras de ADN, para lo cual se emplean ciclos de altas y bajas temperaturas
alternadas para separar las hebras de ADN recién formadas entre sí tras cada fase de
replicación y, a continuación, dejar que las hebras de ADN vuelvan a unirse para poder
duplicarlas nuevamente. La reacción en cadena de la polimerasa fue perfeccionada por Kary
Mullis perteneciente a la Cetus Corporation en California, en la década de 1980. Inicialmente
la técnica era lenta, ya que las polimerasas se desnaturalizaban al realizar los cambios de
temperatura y era necesario agregar nuevas polimerasas en cada ciclo. Puesto que las
temperaturas del ciclo (95 °C en las fases de desnaturalización del ADN) suponen la inmediata
desnaturalización de toda proteína, se emplean ADN polimerasas termoestables, extraídas de
microorganismos adaptados a vivir a esas temperaturas, restrictivas para la mayoría de los
seres vivos. Dichos microorganismos, generalmente arqueas, son: Thermus aquaticus
(polimerasa Taq), Pyrococcus furiosus (Pfu), Thermococcus litoralis (Vent) y Thermus
thermophilus (Tth). Generalmente se emplean mezclas de polimerasas muy procesivas (Taq)
con otras capaces de hacer corrección de errores (Pfu, Vent).

Hoy, todo el proceso de la PCR está automatizado mediante un aparato llamado


termociclador, que permite calentar y enfriar los tubos de reacción para controlar la
temperatura necesaria para cada etapa de la reacción. Muchos termocicladores modernos
hacen uso del efecto Peltier, que permite tanto calentar como enfriar los tubos simplemente
invirtiendo la corriente eléctrica. Los tubos usados para PCR tienen una pared muy fina, lo que
favorece una buena conductividad térmica, permitiendo que se alcance rápidamente el

21
equilibrio térmico. Casi todos los termocicladores tienen un sistema que calienta la tapa de
cierre con el fin de evitar la condensación sobre los tubos de reacción. Los termocicladores
más antiguos carecían de este sistema y solucionaban el problema de la condensación con
una capa de aceite en la parte superior de la mezcla de reacción o con un poco de cera dentro
de los tubos. Actualmente existen algunos termocicladores que utilizan o pueden utilizar aceite
mineral en el tubo de PCR como los termocicladores de nueva generación de flujo de aíre.

Por lo general, la PCR es una técnica común y normalmente indispensable en


laboratorios de investigación médica y biológica para una gran variedad de aplicaciones. Entre
ellas se incluyen la clonación de ADN para la secuenciación, la filogenia basada en ADN, el
análisis funcional de genes, el diagnóstico de trastornos hereditarios, la identificación de
huellas genéticas (usada en técnicas forenses y test de paternidad) y la detección y diagnóstico
de enfermedades infecciosas.

Para realizar la técnica se necesitan:

• Los 4 desoxirribonucleótidos-trifosfato (dNTP), sustratos para polimerizar nuevo


ADN.
• Dos cebadores o iniciadores (en inglés, primers), oligonucleótidos que son,
cada uno, complementarios a una de las dos hebras del ADN. Son secuencias
cortas, de entre seis y cuarenta nucleótidos, normalmente de dieciocho a
veintidós, que permiten que la polimerasa inicie la reacción. Deben estar
enfrentados y no a mucha distancia. Delimitan la zona de ADN a amplificar, es
decir, corresponden a los nucleótidos que definen los extremos de la secuencia
que se desea replicar.
• Iones divalentes. Se suele usar magnesio (Mg2+), agregado comúnmente como
cloruro de magnesio (MgCl2), o algún otro catión divalente. También se puede
emplear manganeso (Mn2+), para mutagénesis de ADN mediante PCR, ya que
altas concentraciones de Mn2+ incrementan la tasa de error durante la síntesis
de ADN. Actúan como cofactores de la polimerasa.
• Iones monovalentes, como el potasio.
• Una solución tampón o buffer que mantiene el pH adecuado para el
funcionamiento de la ADN polimerasa.
• ADN polimerasa o mezcla de distintas polimerasas con temperatura óptima
alrededor de 70 °C (la más común es la polimerasa Taq).

22
• ADN molde, que contiene la región de ADN que se va a amplificar.
• Termociclador, el aparato que mantiene la temperatura necesaria en cada una
de las etapas que conforman un ciclo.

Conceptos de la PCR:

Sensibilidad: se refiere a la cantidad mínima de ADN necesaria para que se produzca


la amplificación, es decir, para obtener una banda. Se relaciona con los falsos negativos, ya
que puede que una muestra sea positiva, pero sea dada como negativa porque no se ha
amplificado por no tener suficiente cantidad de ADN.

Especificidad: se refiere a la obtención de un solo producto amplificado. Viene


determinada por los oligos y la especificidad con la que se unen al ADN molde. De esta forma,
si los oligos tienen más de un sitio al que se pueden unir aparecerá más de un producto
amplificado. Se relaciona con los falsos positivos, ya que puede que una muestra sea negativa,
pero sea dada como positiva porque se ha amplificado una región de ADN no diana o que no
se buscaba amplificar.

Eficiencia: se refiere a la amplificación máxima que se puede obtener en un número


determinado de ciclos.

Fidelidad: se refiere a los errores que comete la ADN polimerasa durante la


amplificación. Este concepto es de especial importancia en la secuenciación, pero en otros
casos no es tan importante. Una buena fidelidad permite evitar falsos positivos y/o negativos.

Aplicaciones del PCR

La técnica de la PCR tiene multitud de aplicaciones: ya en ciencia básica, como


herramienta de detección y/o generación de acervos de fragmentos de ADN de interés; ya en
ciencia aplicada, como elemento resolutivo en sí mismo, por ejemplo, en diagnóstico clínico.

Investigación

La PCR convencional, se emplea como base para multitud de técnicas en el laboratorio


debido a su robustez y rapidez. De este modo, la PCR de punto final permite controlar y
detectar los fragmentos de ADN de interés.

Clonación de un segmento de ADN mediante amplificación con cebadores que


contienen una secuencia apta para la recombinación dirigida con un plásmido.

23
Una aplicación de la PCR de extrema importancia es la clonación de secuencias de
ADN en vectores, como pueden ser los plásmidos. Para ello, se emplean cebadores que
contienen en su extremo 5' una corta secuencia que permite la interacción posterior con otra
complementaria situada en el vector de clonación a emplear. Por ejemplo, se puede incluir una
diana de restricción en dichos cebadores, de modo que, y si ésta no existía previamente en el
fragmento y es única en el vector, pueda efectuarse una ligación mediante la ligasa de T4 tras
la digestión con la enzima de restricción apropiada de ambos elementos. Otro método
asimilable a esta vía es el empleo de la recombinación dirigida; esto es, se adapta al 5' de los
cebadores una secuencia que faculta a una recombinasa la recombinación dirigida con un
vector dado.6

En la Medicina

En medicina, la PCR se emplea fundamentalmente como herramienta de diagnosis


(Coleman y Tsongalis, 2006):

Una de las principales aplicaciones de la PCR es hacer pruebas genéticas para


detectar mutaciones en el ADN que provoquen algún tipo de enfermedad. El diagnóstico de
enfermedades hereditarias presentes en el genoma es un proceso largo y complicado que
puede acortarse significativamente gracias a la PCR. Así, se pueden hacer análisis del ADN
de los futuros padres para ver si son portadores, o analizar el ADN de sus hijos por si están
afectados por una enfermedad hereditaria. Para el análisis prenatal, las muestras de ADN
pueden obtenerse a partir de la amniocentesis, de la muestra de las vellosidades coriónicas o
incluso a partir de algunas células fetales que circulan por el torrente sanguíneo de la madre.
El uso de la PCR también es esencial para el diagnóstico genético preimplantacional donde
se pueden analizar las células del embrión para buscar posibles mutaciones.

Permite el genotipar la especie o especies que provocan un determinado cuadro


infeccioso: para ello, se amplifica una zona del genoma bacteriano cuyo producto de PCR
posea unas características de tamaño o temperatura de fusión que permitan identificarlo de
forma inequívoca. En el caso de infecciones virales que implican la integración del genoma del
patógeno en el ADN del hospedador, como es el de la infección por VIH, la PCR cuantitativa
posibilita la determinación de la carga viral existente y, por tanto, del estadio de la
enfermedad.7

24
La PCR también se puede usar en revisiones médicas rutinarias, como en los servicios
de donantes de sangre, para test de rutina. A través de esta técnica se pueden detectar
infecciones en el donante (como VIH o Hepatitis B) mientras aún están en el periodo de
incubación. Dada la sensibilidad de los test de PCR se pueden tomar muestras colectivas o
"pools" (por ejemplo, 96 pruebas individuales). Si una de estas muestras colectivas da positivo,
se toman a partir de ella muestras progresivamente menores hasta que se encuentre el
causante.

También se puede usar la PCR como parte de las pruebas realizadas cuando se hace
un trasplante de tejidos. En 2008 se propuso usar esta técnica para reemplazar las pruebas
tradicionales con anticuerpos.8

A veces, mediante la PCR se pueden hacer terapias personalizadas para pacientes


con ciertos tipos de cáncer que producen mutaciones en los oncogenes a partir de la detección
de estas mutaciones.

Paleontología, antropología biológica, y ciencias forenses

Los campos de la paleontología, antropología biológica y la medicina y antropología


forense se han visto enormemente beneficiados por esta técnica, puesto que todas ellas
construyen con frecuencia el conocimiento de sus correspondientes disciplinas gracias a
restos o huellas de seres vivos. Uno de los materiales biológicos que más información puede
proporcionar es el ADN.

La relativa estabilidad de éste permite que, aunque fragmentado, se conserve durante


largos períodos si las condiciones son propicias.6 En ocasiones las muestras intactas con las
que se puede contar son extraordinariamente pequeñas o están deterioradas. La PCR
soluciona ambos problemas y proporciona cantidades útiles para posteriores pasos de
análisis. En primer lugar, aumenta la cantidad de material recuperado a partir de muestras
escasas, puesto que como ya se dijo anteriormente, en teoría basta una sola molécula para
que el proceso pueda tener lugar. También debido a la naturaleza de la técnica y su propósito
de amplificación de fragmentos pequeños, esta fragmentación no impide que este ADN pueda
ser empleado como molde para una reacción de PCR.

En paleontología y Antropología la PCR permite recuperar las escasas cantidades de


ADN que aún no se han degradado. Algunos lugares en que el ADN podría preservarse son
la brea las cenizas volcánicas, el ámbar, hielos históricos polares o glaciares y ambientes

25
áridos, sedimentos, así como en los cristales de apatita de restos de esqueleto,9 siendo
posible de ese modo caracterizar cadáveres, fósiles u otros restos mediante genotipado por
análisis de microsatélites o incluso genomas de taxones extintos, amplificados de este modo,
como pueden ser los realizados mediante el ADN genómico del hombre de Neanderthal.10 El
propósito sería utilizar este ADN amplificado para posteriormente realizar estudios
filogenéticos o etnográficos o de poblaciones mediante la comparación de secuencias de ADN,
o el estudio de las causas de la separación evolutiva de dos especies.

En las ciencias forenses se emplea para establecer la filiación de una persona o para
obtener pruebas a partir de muestras mínimas dejadas por el autor de un crimen como saliva,
semen u otros restos de tejidos (Butler, 2005).

Agronomía y diversidad

Tal y como la PCR multiplex permite producir huellas genéticas de individuos concretos,
dentro del marco de la genética forense, existen métodos basados en la PCR que permiten
discernir entre grupos infraespecíficos de cultivos de interés agronómico; por ejemplo, de
cultivares.11 Para ello, se emplean oligonucleótidos de un tamaño lo suficientemente pequeño
como para que ceben de forma relativamente inespecífica, aunque siempre de tal forma que
produzcan un patrón de bandas discreto e interpretable. De este modo, la pauta obtenida tras
la electroforesis de los fragmentos tiende a agrupar a los individuos de mayor semejanza, que
poseen un comportamiento similar, de los que divergen.

26
CONCLUSIÓN

En conclusión, el ADN es la molécula más importante de todo el cuerpo ya que es la


que guarda la información hereditaria y también la información para el correcto funcionamiento
de nuestro cuerpo. Este gran descubrimiento se lo debemos a los hombres que dedicaron la
vida al entendimiento de esta complicada molécula. Esta pequeña molécula es sumamente
importante no solo para los humanos si no para todos los seres vivos incluyendo las plantas.
Esta nueva ciencia llamada genética ahora nos beneficia a nosotros los humanos ya que
podemos manipulas los genes y beneficiarnos con ellos.

La investigación sobre el ADN tiene un impacto significativo, especialmente en el


ámbito de la medicina, pero también en agricultura y ganadería (donde los objetivos son los
mismos que con las técnicas tradicionales que el hombre lleva utilizando desde hace milenios
- la domesticación, la selección y los cruces dirigidos - para obtener variedades de animales y
plantas más productivos). La moderna biología y bioquímica hacen uso intensivo de la
tecnología del ADN recombinante, introduciendo genes de interés en organismos, con el
objetivo de expresar una proteína recombinante concreta, que puede ser: aislada para su uso
posterior: por ejemplo, se pueden transformar microorganismos para convertirlos en auténticas
fábricas que producen grandes cantidades de sustancias útiles, como insulina o vacunas, que
posteriormente se aíslan y se utilizan terapéuticamente

En la medicina forense, los médicos forenses pueden utilizar el ADN presente en la


sangre, el semen, la piel, la saliva pelo en la escena de un crimen para identificar al
responsable. Esta técnica se denomina huella genética, o también "perfil de ADN". Al realizar
la huella genética, se compara la longitud de secciones altamente variables de ADN repetitivo,
como los microsatélites, entre personas diferentes. Este método es frecuentemente muy fiable
para identificar a un criminal. Sin embargo, la identificación puede complicarse si la escena
está contaminada con ADN de personas diferentes. La técnica de la huella genética fue
desarrollada en 1984 por el genetista británico Sir Alec Jeffreys y fue utilizada por primera vez
en medicina forense para condenar a Colin Pitchfork en los asesinatos de Narborough (UK)
en 1983 y 1986. Se puede requerir a las personas acusadas de ciertos tipos de crímenes que
proporcionen una muestra de ADN para introducirlos en una base de datos. Esto ha facilitado
la labor de los investigadores en la resolución de casos antiguos, donde sólo se obtuvo una
muestra de ADN de la escena del crimen, en algunos casos permitiendo exonerar a un
convicto. La huella genética también puede utilizarse para identificar víctimas de accidentes
en masa, o para realizar pruebas de consanguinidad. o el

27
La bioinformática implica la manipulación, búsqueda y extracción de información de los
datos de la secuencia del ADN. El desarrollo de las técnicas para almacenar y buscar
secuencias de ADN ha generado avances en el desarrollo de software de los ordenadores,
para muchas aplicaciones, especialmente algoritmos de búsqueda de frases, aprendizaje
automático y teorías de bases de datos. La búsqueda de frases o algoritmos de coincidencias,
que buscan la ocurrencia de una secuencia de letras dentro de una secuencia de letras mayor,
se desarrolló para buscar secuencias específicas de nucleótidos. En otras aplicaciones como
editores de textos, incluso algoritmos simples pueden funcionar, pero las secuencias de ADN
pueden generar que estos algoritmos presenten un comportamiento de casi-el-peor-caso,
debido al bajo número de caracteres. El problema relacionado del alineamiento de secuencias
homólogas y localizar mutaciones específicas que las diferencian. Estas técnicas,
fundamentalmente el alineamiento múltiple de secuencias, se utilizan al estudiar las relaciones
filogenéticas y la función de las proteínas. Las colecciones de datos que representan
secuencias de ADN del tamaño de un genoma, tales como las producidas por el Proyecto
Genoma Humano, son difíciles de usar sin anotaciones, que marcan la localización de los
genes y los elementos reguladores en cada cromosoma. Las regiones de ADN que tienen
patrones asociados con genes que codifican proteínas – o ARN – pueden identificarse por
algoritmos de localización de genes, lo que permite a los investigadores predecir la presencia
de productos génicos específicos en un organismo incluso antes de que haya sido aislado
experimentalmente. persigue identificar secuencias

La estructura de ADN de la izquierda (mostrada de forma esquemática) se auto-


ensambla en la estructura visualizada por microscopía de fuerza atómica a la derecha. La
nanotecnología de ADN es el campo que busca diseñar estructuras a nano escala utilizando
las propiedades de reconocimiento molecular de las moléculas de ADN. Imagen de Strong,
2004. Plantilla: Doi-inline

La nanotecnología de ADN utiliza las propiedades únicas de reconocimiento molecular


del ADN y otros ácidos nucleicos para crear complejos ramificados auto-ensamblados con
propiedades útiles. En este caso, el ADN se utiliza como un material estructural, más que como
un portador de información biológica. Esto ha conducido a la creación de láminas periódicas
de dos dimensiones (ambas basadas en azulejos, así como usando el método de ADN
organismo), además de estructuras en tres dimensiones con forma de poliedros.

La iniciación de la replicación del ADN comienza siempre con una secuencia específica
de nucleótidos conocida como el origen de replicación. Requiere proteínas iniciadoras

28
especiales y además enzimas conocidas como helicasas, que rompen los puentes de
hidrógeno abriendo la hélice, formándose las horquillas de replicación, una a cada lado de la
burbuja a que da lugar la separación de las ramas del ADN. Una vez abierta la cadena de
ADN, proteínas adicionales (conocidas como proteínas de unión a cadena simple o
topoisomerasas) se unen a las cadenas individuales del ADN manteniéndolas separadas y
evitando que se retuerzan. En el siguiente paso, las enzimas llamadas ADN polimerasa
catalizan la síntesis real de las nuevas cadenas, añadiendo nucleótidos sobre el molde, las
que se dan bidireccionalmente desde cada una de las horquillas que se replican en sentido
opuesto dentro de cada burbuja, cuando éstas se encuentran y se fusionan todo el cromosoma
ha quedado replicado longitudinalmente.

La importancia de que la duplicación de ADN quede perfectamente bien hecha, es


mucha, ya que, si no, se pueden presentar mutaciones genéticas.

Esto se debe a que, como existe un código genético universal, que se basa en la lectura
de las bases nitrogenadas (adenina, timina, guanina y citosina). Cuando un nucleótido queda
mal ubicado o algún error, puede haber serias enfermedades o mutaciones genéticas.

El ADN es libro de instrucciones que usan las proteínas para crear la vida. Sus
aplicaciones más relevantes son:

Los transgénicos, como el arroz capaz de producir proteínas animales. Muchas


poblaciones de países subdesarrollados subsisten a la falta nutricional de alguna vitamina o
aminoácido gracias a los transgénicos. Luego también está lo que podríamos llamar caprichos,
como frutos transgénicos sin semillas, flores de nuevos colores, etc.

El ADN contiene a veces errores causantes de enfermedades llamadas genéticas.


Conocer su proceso de replicación y unión en el zigoto puede detener la heredabilidad de
males como la hemofilia.

El trasplante de órganos sin necesidad de un donante. Hoy en día es posible engendrar


órganos humanos en cerdos transgénicos.

La regeneración de tejidos (en investigación). Es posible crear cualquier tejido a partir


de células madre (hueso, músculo, hepatocitos), fluidos como la insulina curando la diabetes,
inclusive órganos enteros.

29
Entender el ADN es fundamental para detener la replicación sinsentido de las células
tumorales, combatiendo así el cáncer.

También puede combatir el proceso contrario, la no formación de células


(envejecimiento) o la no restauración de sinapsis entre neuronas (Alzheimer, Parkinson)

30

Anda mungkin juga menyukai