“La fotosíntesis”
Bioquímica
Dra. Yolanda Garza García
Las plantas utilizan una parte específica del espectro solar (luz) para la fotosíntesis,
lo que se conoce como radiación fotosintéticamente activa (RFA) (Figura 1). La RFA
es la región de la radiación solar entre 400 y 700 nm.
“Figura 1. Entre más alta la línea, más responden las plantas a esta longitud de
onda o color de luz. La actividad fotosintética de la planta ocurre entre 400 y 700
nm.
Las plantas son los autótrofos más comunes en los ecosistemas terrestres. Todos
los tejidos verdes de las plantas pueden fotosintetizar pero, en la mayoría de las
plantas, la mayor parte de la fotosíntesis ocurre en las hojas. Las células de una
capa intermedia de tejido foliar llamada mesófilo son el principal lugar donde ocurre
la fotosíntesis.
En casi todas las plantas hay unos pequeños poros llamados estomas en la
superficie de las hojas, los cuales permiten que el dióxido de carbono se difunda
hacia el mesófilo y el oxígeno hacia el exterior.
El comienzo de las investigaciones o hipótesis sobre la fotosíntesis surge en la
antigua Grecia, donde Aristóteles sugería que la luz solar estaba relacionada de
manera directa con el color en las hojas.
Las ideas de Aristóteles fueron consideradas hasta el siglo XVII, con el padre de la
fisiología vegetal: Stephen Hales, quien citó las hipótesis y afirmó que el alimento
de las plantas era el aire que entraba por las hojas de las mismas.
Pero fue hasta el siglo XVIII que las investigaciones en el ámbito de la química se
unieron con la biología, siendo así que Joseph Priestley en 1770 reconoció que el
proceso de las plantas era relativamente inverso al de la respiración animal.
La totalidad del carbono de los vegetales procede del CO2 que existe en la
atmosfera y en el agua.
En el aire existe realmente poca concentración de CO2 pero el conjunto asciende a
unos 2500 millones de toneladas a partir de los cuales las plantas terrestres
transforman unas 60000 toneladas en sustancias orgánicas, quedando un margen
amplio de reserva como manantial de energía. Además la concentración de CO” no
varía mayormente en la atmosfera, pues se recupera con el liberado en la
respiración de los animales o incluso en fenómenos como las exhalaciones
volcánicas.
En el caso de los vegetales, las hojas son las principales receptoras de la energía
de la luz, poseen clorofila que al poder recibir radiaciones con cierto tipo de
frecuencia y reflejar otras puede eliminar el exceso de energía que podría serles
perjudicial.
Pigmento clorofiliano: Utilizando técnicas cromatográficas identificado en este
pigmento un grupo de sustancias denominadas clorofilas siendo las más
interesantes la a y la b. La clorofila a está integrada por un núcleo de Magnesio, 4
nitrógenos, carbono e hidrógeno. Para que se pueda formar la clorofila es
indispensable la presencia del hierro, las formulas condensadas de la clorofila a y b
son:
Clorofila a: C55 H72 O5 N4 Mg
Clorofila b: C55 H10 O6 N4 Mg
En previas investigaciones sobre los pasos intermedios del proceso Rubén y Kamen
han prestado gran ayuda en sus estudios sobre átomos marcados se utilizó el
oxígeno 18 y se pudo demostrar que el oxígeno desprendido en la fotosíntesis no
proviene del dióxido de carbono sino que proviene del agua
Otros investigadores Hill y Arnon aislaron los cloroplastos sin interrumpir el proceso.
Posteriormente Melvin Calvin quién ganó el Nobel en 1961, usó el carbono 14 para
ver los compuestos intermedios. También ha sido de utilidad en este estudio el alga
clorofita chlorella por su facilidad de manejo.
Todas las investigaciones han conducido a la mejor comprensión del proceso total
en el que se consideran dos tipos de reacciones:
Reacción acíclica: la energía lumínica absorbida obra sobre los electrones en forma
igual a la ya descrita haciendo que salten de nivel los electrones de la clorofila a y
posiblemente otro de la b o de otros pigmentos como las caracteres también se
encuentran presentes en el cloroplasto, ambos electrones son aceptados por la
ferredoxina, la cual reduce el TPN o el NAD, almacenando más energía, siendo
catalizado por las flavoproteínas y catalizando a su vez a la siguiente reacción
oscura.
B) Reacción oscura
United States Geological Survey. USGS World Petroleum Assesment and Analysis.
2000.
Barajas, Esperanza, De Roldan y Gutiérrez, “Bios Vida”, pp 77-84, Editorial Herrero
S: A, México, 1974.