Antecedentes
La selección amateur del Reino Unido que ganó el primer torneo internacional de fútbol organizado
en los Juegos Olímpicos de Londres 1908.
Durante los Juegos Olímpicos de 1928, la FIFA organizó un congreso donde se decidió
finalmente la realización de un torneo de fútbol profesional de nivel internacional en 1930.
Inmediatamente varios países europeos presentaron su candidatura (Italia, Hungría,
los Países Bajos, España y Suecia) junto a la de Uruguay. Jules Rimet, presidente de la
FIFA en esos años, estaba a favor de la realización en el país sudamericano, tanto por sus
éxitos deportivos como porque el país celebraría el centenario de la Jura de la
Constitución.12
Finalmente, Uruguay salió electo por unanimidad, pero eso no implicó el apoyo europeo a
la realización del torneo fuera de su continente. Los países europeos invitados al torneo
rechazaron su participación argumentando que no podían costear el largo
viaje transatlántico en medio de la crisis económica que había azotado al mundo en esos
años. A pesar de que Uruguay se ofreció a solventar los costos,
solo Francia, Bélgica, Yugoslavia y Rumania acudieron a la cita. Tras el boicot, los
organizadores debieron disminuir el número de participantes en el torneo, de 16 a 13.12
Lucien Laurent, futbolista francés, autor del primer golen la historia del torneo.
A pesar de las complicaciones iniciales, el torneo fue un éxito. Para el torneo, la intención
de los organizadores era que todos los partidos se disputaran en un solo estadio,
el Estadio Centenario, construido especialmente para la celebración de la Copa Mundial y
como celebración del centenario de la independencia uruguaya. Fue diseñado por Juan
Scasso13 y Rimet lo llamó el "templo del fútbol".14 Con una capacidad para 90.000
espectadores, era el mayor estadio del mundo fuera de las Islas Británicas.15 Sin embargo,
las fuertes lluvias acaecidas en Montevideo antes de la inauguración del campeonato
impidieron que su construcción fuera finalizada a tiempo. Dada esta situación los
organizadores se vieron obligados a buscar otros estadios para celebrar en ellos los
primeros partidos, el Gran Parque Central y el Estadio Pocitos, escenarios donde se
jugaron de manera simultánea los dos primeros partidos en la historia de la Copa Mundial.
El Estadio Centenario fue oficialmente inaugurado el sexto día de competición y a partir de
ese momento todos los partidos se jugaron ahí. Finalmente, los equipos del Río de la
Plata avanzaron a la final, Uruguay y Argentina se enfrentaron el 30 de julio de 1930 en el
recién inaugurado Estadio Centenario. Tras ganar el encuentro por 4:2, los locales se
coronaron como los primeros campeones mundiales de fútbol ante 93.000 personas.1617
El bicampeonato italiano
Italia organizó la segunda Copa Mundial en 1934. Como respuesta al boicot realizado en
1930 por los países europeos, Uruguay y otros países americanos se retiraron del
torneo.12 La Copa Mundial se había convertido en muy poco tiempo en un gran
acontecimiento que recibía las miradas de todo el mundo, por lo que el
caudillo fascista Benito Mussolini usó el torneo para la exaltación del nacionalismo,
buscando publicitar el poder italiano con una victoria en la competición.18 Para ello no dudó
en asegurar la naturalización de varios jugadores argentinos, como Luis Monti, Raimundo
Orsi, Enrique Guaita y Attilio Demaría, y también del brasileño Anfhiloquio Marqués Filo,
italianizado como Anfilogino Guarisi. Italia llegó a la final del torneo donde se enfrentó
a Checoslovaquia. Tras una serie de errores arbitrales, Angelo Schiavio anotó el gol del
triunfo italiano durante la prórroga, que coronó a Italia como campeona del mundo.19
Varios jugadores de aquel equipo reconocieron haber jugado la final bajo amenazas
del Duce. El naturalizado Monti declaró:20
«En 1930, en Uruguay, me querían matar si ganaba, y en Italia, cuatro años más tarde, si perdía».
En los años posteriores el advenimiento de la Segunda Guerra Mundial se hacía cada vez
más presente. La Copa Mundial de Fútbol de 1938 realizada en Francia contó con las
deserciones de España, debido a la Guerra Civil, China y Japón, debido al estallido de
la Segunda Guerra Sino-japonesa, mientras la clasificada Austria no participó en el torneo
al ser incorporada a Alemania tras el Anschluss.21 Ya en el torneo propiamente
tal, Alemania fue repudiada por el público mientras los jugadores realizaban el saludo nazi.
Además, los equipos americanos (a excepción de Brasil y Cuba) nuevamente boicotearon
el torneo, luego de que fuera otorgada la sede a un país europeo a pesar del compromiso
inicial de alternar la sede entre ambos continentes.21
En el ámbito deportivo, Italia mostró su capacidad ofensiva llegando a la final del torneo
tras derrotar a Brasil de Leônidas, una de las figuras del torneo. Los italianos se
enfrentaron a la potente Hungría y la derrotaron con 4:2, convirtiéndose en el primer
equipo en alcanzar el bicampeonato. Mussolini, al igual que en 1934, no estaba dispuesto
a ver perder a su equipo. El seleccionador italiano, Vittorio Pozzo, recibió un telegrama
antes del partido final en el que solo podía leerse «Vencer o morir». Además, obligó a sus
jugadores a vestir para la final camisetas negras, símbolo del fascismo italiano.22