Sincretismo religioso:
Para entender sincretismo tenemos que poder hacer una lectura del proceso
histórico peruano, ya que como la realidad es resultado de éste proceso.
Entonces esnecesario el uso de la historia como herramienta de análisis y
comprensión.
Pero también podemos notar que se entiende por Sincretismo como una forma
combinada de distintas formas religiosas que interactúan sin que ninguna de
ellas domine a la otra; es decir, que existe una relación de equilibrio y no de
superioridad entre ellas. Según Esch-Jakob (1994:10).
Para tener una noción del papel del sincretismo en el campo de la antropología,
podemos ver que para los autores Shaw y Stewart (1994:197), el sincretismo
ha obtenido una significación más neutral y favorable. Pues, estos autores
comprueban que una visión optimista de sincretismo surgió en la Antropología
Posmoderna, en que se ven los procesos sincréticos como fundamento del rito,
la religión y la cultura en general.
También por Shaw y Stewart (ibid.:2,3) entendemos que hay un problema con
el término de sincretismo, y se halla en la palabra misma y, en su aplicación
histórica. Shaw y Stewart mencionan así, que el descontento con la noción
Para entender esta práctica se debe tener en cuenta la concepción que tienen
de la enfermedad, entendida como un desequilibrio con uno mismo y/o con la
comunidad, y la relación médico-paciente, debido a que, si bien el curandero o
la curandera inspiran sensaciones de respeto y temor, el paciente es una parte
importante y activa dentro del proceso de curación, ya que su condescendencia
ayuda a agilizar el proceso ritual, mediante el cual la persona queda
convencida de estar curada. La práctica del curanderismo está orientada a
enfermedades que se manifiestan en el cuerpo, pero que tienen un origen
psíquico. Además, el curanderismo está muy relacionado con la naturaleza
(…) los curanderos creen que en esta radica la respuesta a todos los aspectos de
la vida de su paciente, porque el hombre es parte de ella y si este, no está en
conexión o equilibrio con la naturaleza, ahí es donde comienza los problemas para
el hombre. (ibíd, p. 11)
María del Carmen Pancorbo y Tathiana Zárate (2015) resaltan uno de los
registros que se tiene sobre las prácticas del curanderismo en nuestro país,
“Los comentarios reales” (1967) del Inca Garcilaso de la Vega, donde se señala
la:
El curandero o la curandera:
Integrantes: