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Órgano (instrumento musical)

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Este aviso fue puesto el 28 de junio de 2017.

Órgano

Órgano de la Basílica de Weingarten.

Tesitura

Características

Clasificación Instrumento de teclado


Instrumento de viento

 Organista.
Músicos
 Hydraulés.
Fabricantes Véase Lista de fabricantes de órganos
y categoría:Fabricantes de órganos

Artículos relacionados

Órgano hidráulico o hydraulis · Órgano portátil ·Órgano


positivo · Regal · Claviórgano ·Armonio · Órgano de cine ·Órgano
electrónico · Órgano Hammond ·Música para órgano · Órgano de
cámara ·Piano con pedales ·

Órgano de mar}Órgano de Verospi.

[editar datos en Wikidata]

Para el órgano electrónico, véase Órgano Hammond.


El órgano es un instrumento musical armónico de teclado. Los sonidos se generan haciendo
pasar aire por tubos de diferentes longitudes (desde pocos centímetros hasta varios metros).
Se clasifica como instrumento de viento o aerófono en la categoría instrumentos de teclado y
también dentro de la subcategoría aire insuflado, junto al acordeón y al armonio.
Consta de diferentes registros o sonidos, cuyo timbre dependerá de la forma, tamaño, material
o mecanismo de producción del sonido. Se maneja mediante uno o más teclados para tocar
con las manos, y otro consistente en unos pedales en la parte inferior que generalmente
gobiernan los registros más graves, aunque también se pueden emplear para generar otra voz
aguda. Los distintos registros se accionan mediante unas palancas o botones al alcance de la
mano del organista. Todo el sistema puede ser mecánico, eléctrico o electrónico dependiendo
de la naturaleza de la fabricación del instrumento.
En el pasado, el aire se suministraba por medio de unos fuelles movidos a mano, o también
por medio de una turbina accionada por una corriente de agua suministrada por una cisterna
que era llenada de agua a mano. Actualmente se suministra mediante compresores
accionados por motores eléctricos.
El órgano se toca con manos y pies, lo cual hace recomendable el estudio de otros
instrumentos de teclado para poder pasar a su estudio como instrumento.

Índice
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 1Historia
o 1.1El órgano en la música académica europea
 1.1.1Como solista
o 1.2Renacimiento
o 1.3Barroco
o 1.4Desde 1750 hasta la actualidad
 2Selección de obras para órgano
o 2.1Barroco
o 2.2Clásico
o 2.3Romántico
o 2.4Siglo XX
o 2.5Otras facetas en obras musicales: como acompañante
o 2.6Selección de obras como acompañante o parte del bajo continuo
 3Organistas famosos
 4Bandas sonoras de cine
 5Bandas sonoras de videojuegos
 6Selección de obras destacables en otras músicas
o 6.1Bandas sonoras de anime
o 6.2Bandas sonoras de videojuegos
 7Véase también
 8Referencias
 9Enlaces externos

Historia[editar]

El órgano de la iglesia parroquial de Ayerbe tiene 56 teclas y los tubos de los extremos van en
disminución hacia el centro y de éste surgen otros tubos que superan a aquellos en longitud.

El órgano tubular tiene su origen en Grecia por el antiguo inventor Ctesibio quien ideó diversos
artilugios que funcionaban con agua y aire, tal es el caso del hydraulis. El órgano fue conocido
por los romanos y se adoptó por la Iglesia como acompañamiento a las ceremonias religiosas
en el siglo VII.
A lo largo de la historia, los órganos han sido:

 Portátiles o fijos, según se puedan trasladar o no.


 Hidráulicos o neumáticos, según sea que el aire se genere por la tensión o presión de
agua (fría o caliente), o bien por fuelles manuales o eléctricos (que es el sistema
actualmente en uso).
La invención de los fuelles parece remontarse al siglo IV en Oriente, pues se dibujan en
un bajorrelieve del obelisco de Teodosio en Estambul. Hasta el siglo XII se emplearon los dos
sistemas, que resultaban siempre muy complicados, y al llegar al siglo XIII se abandonaron
completamente los hidráulicos. Se generalizó desde entonces en las iglesias el instrumento,
que fue adquiriendo lentamente su perfección hasta el siglo XVI. En el siglo XIV se simplificó
el juego de los fuelles que antes exigía la fuerza de muchos hombres y se convirtió el teclado
en cromático siendo antes diatónico.
Teclado del Órgano de la Basílica de San Martín en Alemania obra de Joseph Gabler.

En el siglo XV se construyeron órganos de dimensiones más grandes y fijos (continuaron los


portátiles y pequeños para iglesias menores) y se le añadieron pedales. En el siglo XVI se
aumentó el tamaño de los órganos, se los encerró en una caja, tal como hoy los conocemos, y
se inventaron los teclados sobrepuestos.
En el siglo XVII Fray José de Echevarría introduce la llamada "caja de ecos", un artilugio que
permite realizar efectos sonoros de "cercanía y lejanía", y la trompetería horizontal en forma
de tiros dando al instrumento unas sonoridades muy ricas y potentes.
En el siglo XIX se perfeccionó hasta el punto de alcanzar un solo órgano la extensión de
diez octavas con cinco teclados. En las últimas décadas, con la aplicación de la electricidad a
los órganos, se ha conseguido simplificar los sistemas de palancas y dar mayor rapidez a
todos los movimientos.

Órgano de la catedral de Sevilla.

El órgano en la música académica europea[editar]


Como solista[editar]
Representación pictórica de Hubert Van Eyck.

En la música académica europea el órgano, como solista y tocado solo, ha tenido grandes
compositores que le destinaron obras célebres, sobre todo en la época barroca, edad de oro
del instrumento; destaca el aporte de Johann Sebastian Bach en el siglo XVII y Olivier
Messiaen en el siglo XX. Sin embargo el órgano, por ser un instrumento completo (es decir,
que tiene todo lo necesario para interpretar una obra casi de cualquier tipo), no tiene
necesidad de depender de otro instrumento, ya que sus registros y su arquitectura musical (la
forma como se gobierna el órgano) lo hacen independiente. Es el único instrumento para el
cual se han compuesto "sinfonías", debido a la paleta sonora de los instrumentos más
grandes, particularmente mejorada en el s. XIX.
Renacimiento[editar]
Ya en la edad media hubo colecciones de piezas para órgano solo; en el Renacimiento tuvo
su primera edad de oro. Antonio de Cabezón (1510-1566) es uno de los mejores organistas de
su época y uno de los más destacados en el ámbito español; para el órgano escribió tientos,
pasacalles, variaciones, etc.
Barroco[editar]
En el barroco el órgano tuvo su apogeo y época dorada, tanto en intérpretes como en
compositores y organeros.
En Italia destaca la figura de Frescobaldi (1585-1641), cuya obra Fiori musicali (1635) es una
de las más importantes en el ámbito teclístico.
En los Países Bajos hay otro ilustre ejemplo con Jan Pieterszoon Sweelinck(1560-1621). Él y
Frescobaldi son los dos primeros genios de la literatura barroca del teclado.
En Francia el órgano tenía un papel relevante en la vida musical, y la escuela francesa del
órgano tuvo su máximo apogeo entre 1660 y 1720. Los más ilustres exponentes de la escuela
es F. Couperin (1668-1733). Después la escuela, junto con la escuela del clave, pierde
prestigio y la música francesa del instrumento desaparece ante la indiferencia de los grandes
compositores, como J. P. Rameau (1683-1764). En 1790 ya está en plena decadencia y hay
sólo compositores menores.
En España hay numerosas figuras destacables durante todo el periodo, desde Francisco
Correa de Arauxo y Juan Cabanilles hasta Antonio Soler (1729-1783), cuya producción
organística es la más importante del siglo XVIII en el ámbito iberoamericano.
En Inglaterra los dos más ilustres representantes son Purcell (1659-1695), que compuso
piezas de temática libre, y Händel (1685-1759), que compuso conciertos para órgano y
orquesta.
Órgano de Klosterlechfeld, Alemania.

En Alemania el órgano tuvo una importancia capital en todos los sentidos; la calidad y
cantidad de las obras y el gran número de compositores durante todo el periodo hicieron que
el órgano tuviera ahí el máximo apogeo.
La escuela alemana, que puede dividirse en la del norte, la del sur y la del centro, tuvo su
apogeo entre 1650 y 1750 con los tres compositores más importantes de la literatura
Alemana: Pachelbel (sur) (1653-1706), Buxtehude (norte) (1637-1707) y, sobre
todo, Bach (1685-1750), cuya aportación fue la más importante del periodo barroco.
Desde 1750 hasta la actualidad[editar]
Órgano de la iglesia de San Pedro de los Francos, Calatayud, España.

Después de la época barroca y de la muerte de los grandes compositores del periodo entre
1706 y 1750, el órgano entró en decadencia en la música de concierto; la indiferencia de los
grandes compositores hace que se le reserve casi exclusivamente para música religiosa. En el
periodo clásico, Mozart y Haydn sólo compusieron algunas sonatas y fantasías el primero, y el
segundo, conciertos para órgano. Beethoven, por su parte, lo usó en su gran Missa Solemnis.
En el romanticismo, salvo contadas excepciones, siguió relegado por los grandes
compositores, aunque Mendelssohn, Anton Bruckner, Brahms, Jesús Guridi y Franck destinan
grandes obras a este instrumento, como los corales (1897) y las sonatas (1845) de Brahms y
Mendelssohn respectivamente.

Órgano de la Ópera de Sídney, Australia.


Sin embargo, los organistas y compositores belgas César Franck (1822-1890) y Jacques-
Nicolas Lemmens (1823-1881) recuperan las obras de Bach y hacen revivir el órgano, lo que
lleva a una edad de plata con sus discípulos franceses Alexandre Guilmant (1837-1911)
y Charles-Marie Widor (1844-1937). Las sonatas del primero y, sobre todo, las nueve sinfonías
del segundo representan obras que explotan las enormes posibilidades del gran órgano
romántico, gracias también a la labor innovadora del organero Aristide Cavaillé Coll (1811-
1899). Puede decirse que Widor es al órgano lo que Bruckner a la orquesta sinfónica: un autor
que al explorar las posibilidades más amplias y complejas del instrumento lleva la forma
sinfonía/sonata a su máxima expansión, sin romper con la tonalidad clásica.

Órgano Pérez Molero siendo tocado (se necesitan dos personas, una que se encargue del teclado y otra
que mueva los fuelles a mano para suministrar el aire), en el Museo de la Música de Barcelona.

De entre los discípulos de Widor seguramente el más notable es Louis Vierne (1870-1937),
que llegó a recibir el estímulo y aprecio de César Franck. Autor de seis importantes sinfonías,
de numerosas piezas de fantasía y de diversos estilos para órgano. Asimismo, con Vierne los
conciertos de órgano en París adquieren la categoría de acontecimiento cultural, y el autor
llegará a dar varios recitales por los Estados Unidos. También tuvo éxito como intérprete
Joseph Bonnet (1884-1944), discípulo de Guilmant. Bonnet compuso solamente para órgano,
y casi toda su obra entre 1908 y 1913. Autor ecléctico, recuperador de la tradición gregoriana
y notable maestro de la variación, compuso desde obras litúrgicas hasta otras de corte
romántico o impresionista.
Con ello, en el siglo XX el órgano recupera otra vez su papel de instrumento rey, y alcanza su
cumbre en la ricas y complejas obras de Olivier Messiaen (1908-1992), así como en el
concierto de órgano (1938) de Francis Poulenc, aunque el autor sin duda más prolífico es
Marcel Dupré (1886-1971).
En el Museo de la Música de Barcelona se expone una importante colección de órganos
barrocos, clásicos y románticos de distintos orígenes.

Selección de obras para órgano[editar]


Barroco[editar]

Tocata y fuga en re menor, BWV


565

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Tocata y fuga en re menor, BWV 565de
Johann Sebastian Bach (1685-1750)

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 Fiori musicali (1635) de G. Frescobaldi (1583-1643)


 Toccate et partite (1627) de G. Frescobaldi (1583-1643)
 Fantasía coral An Wasserflüssen Babylon de J. Reinken (1623-1722)
 Preludio BuxWV 136 de D. Buxtehude (1637-1707)
 Anthems (himnos) de Henry Purcell (1659-1695)
 Preludios de Johann Pachelbel (1653-1706)
 Libro de misas (1690) de François Couperin (1668-1733)
 Libro de órgano (1699) de Nicolas de Grigny (1672-1701)
 Ariadne Musica (1702) de Johann Caspar Ferdinand Fischer (1665-1746)
 Seis sonatas a trío para órgano, BWV 525-530 (1727) de J. S. Bach (1685-1750)
 Fantasía y fuga en sol menor, BWV 542 J. S. Bach
 Preludios y fugas 543, 547, 548 y 564 de J. S. Bach (1685-1750)
 Tocata y fuga en re menor, BWV 565 (1708) de J. S. Bach (1685-1750)
 Fugas BWV 575 y 578 de J. S. Bach (1685-1750)
 Passacaglia y fuga en do menor, BWV 582 (1715?) de J. S. Bach (1685-1750)
 Ejercicio de pedal, BWV 598 de J. S. Bach (1685-1750)
 Orgelbüchlein BWV 599-644 de J. S. Bach (1685-1750)
 Corales Schubler BWV 645-650 (1746) de J. S. Bach (1685-1750)
 18 Corales de Leipzig BWV 651-668 de J. S. Bach (1685-1750)
 16 Conciertos para órgano (1730) de G. F. Handel (1685-1759)
 Seis Conciertos para dos órganos de Antonio Soler (1729-1783)
 Tres glosas sobre el canto llano a la Inmaculada Concepción, de Francisco Correa de
Arauxo.
Clásico[editar]

 Fantasías y sonatas de W. A. Mozart (1756-1791)


 Dos conciertos para órgano de F. Haydn (1732-1809)
 Concierto para órgano de Michel Corrette (1707-1791)
Romántico[editar]

 Sonatas de Félix Mendelssohn (1809-1847)


 Preludio y fuga en nombre de Bach de Franz Liszt (1811-1886)
 Piezas juveniles de Anton Bruckner (1824-1896)
 Preludio, fuga y variación de César Franck
 Sinfonía n.º 3 de Camille Saint-Saëns
 10 piezas (1890) de Eugenie Gigout
 Corales (1897) de Johannes Brahms (1833-1897)
 Sinfonía n.º 5, op. 42/1 de Charles Marie Widor (1880)
Siglo XX[editar]

 Retablo Medieval: Concertino para órgano y orquesta (1949) de Miguel Bernal Jiménez
 Concierto para órgano (1938) de Francis Poulenc
 La nativité de Olivier Messiaen
 Méditations sur la Sainte Trinité de Olivier Messiaen
 Litanies de Jehan Alain
 Six études de Jeanne Demessieux
 Te Deum de Jeanne Demessieux
 ORGAN²/ASLSP de John Cage
Otras facetas en obras musicales: como acompañante[editar]
El órgano, aparte de ser un instrumento solista, ha tenido otras facetas en las obras, como
acompañamiento o realización del bajo continuo.
En la edad media y el renacimiento, el órgano, antes de que se compusieran obras a "solo" o
como solista, se utilizaba para acompañar o entonar el canto gregoriano, misas, motetes y
piezas polifónicas de Leonín y Perotín (de la Escuela de Notre Dame), siendo el único
instrumento que se podía tocar en la música religiosa.
En la época barroca, con la aparición del bajo continuo, el órgano, junto con el clave, el fagot y
el laúd adquiere una importancia capital, porque el órgano permitía hacer acordes juntos y
alargar notas para realizar el bajo continuo. Entonces, desde 1600 hasta 1750, el órgano esta
prácticamente como parte del bajo continuo en todas las obras vocales religiosas, y también,
se puede decir la instrumental. Todos los compositores barrocos hicieron la técnica del bajo
continuo, entre ellos, Monteverdi, Lully, Brutexude, Couperin, J. S. Bach, etc. Como ejemplos
de obras que requieran el apoyo del órgano haciendo el bajo continuo se podían citar las 200
cantatas sacras de J. S. Bach (1685-1750) o el Gloria RV 589 de Vivaldi (1675-1741).

Coro del templo de Santa Prisca de Taxco.

Además de la técnica del bajo continuo, al órgano también se le dio un papel de acompañante
melódico como ejemplo, algunas árias de cantatas sacras de J. S. Bach o los himnos de H.
Purcell (1659-1695).
En el clasicismo y épocas posteriores, con el desuso del bajo continuo, el órgano recupera el
papel de acompañante y entonador y se relega básicamente a la música religiosa, como
algunas piezas de voz y órgano de C. Franck.
Selección de obras como acompañante o parte del bajo continuo [editar]

 Llibre Vermell de Montserrat


 Misa del Papa Marcelo de Palestrina (1524-1596)
 Cantata BWV 35 (1726) de J. S. Bach (1685-1750)
 Pasión según San Mateo BWV 244 de J. S. Bach (1685-1750)
 Stabat mater de Pergolesi

Organistas famosos[editar]
Véase Categoría:Organistas

Marie-Claire Alain en 1975.

Hablando de compositores para órgano, el periodo barroco fue el más fructífero para el
instrumento, con compositores de gran renombre como Dietrich Buxtehude, Johann Sebastian
Bach, Georg Friedrich Händel, Johann Pachelbel y Antonio Vivaldi, del
romanticismo Mozart, Franz Liszt, Robert Schumann, Alexandre Boël, Felix
Mendelssohn, Anton Bruckner, Bartholdy, Léon Boëllmann, Johannes Brahms y César Franck.
Del siglo XX tenemos a Charles-Marie Widor, Jehan Alain, Olivier Messiaen, Francis
Poulenc, Jeanne Demessieux y Marcel Dupré.
Como intérpretes se pueden destacar a Albert Schweitzer, Lionel Rogg, Helga Schauerte-
Maubouet, Diane Bish, Virgil Fox y Adelma Gómez. La francesa Marie-Claire Alaines
considerada la organista de mayor éxito, con cerca de doscientos cincuenta discos editados y
cuatro millones de copias vendidas, grabó en tres ocasiones la obra integral de órgano de
Johann Sebastian Bach, además de registrar las obras de una docena de compositores.

Bandas sonoras de cine[editar]


A partir de la primera mitad del siglo XX el órgano se encuentra en bandas sonoras de cine,
compositores como destinan brillantes participaciones en algunas de sus bandas sonoras
haciendo una función completamente diferente visto desde entonces.
A partir de aquí, el órgano, conforme avanza el siglo XX encuentra un hueco en más ámbitos
musicales, como las bandas sonoras de series o anuncios.
Un interesante ejemplo son las piezas contemporáneas de órgano compuestas por Hans
Zimmer para la película Piratas del Caribe: El cofre del hombre muerto, donde dedica dos
temas al antagonista de la película Davy Jones y su mascota el Kraken, lo interesante aquí es
que el órgano ha sido llevado a una nueva faceta: una partitura que no incluye pedales y
además tiene un amplio apoyo de instrumentos digitales para orquesta. Hans Zimmer también
compuso la banda sonora de "Interstellar", donde el órgano era el solista de las piezas,
acompañado de una orquesta.
También tenemos a otro compositor: Danny Elfman, quien compuso melodías de órgano
similares en torno al apoyo de otros instrumentos, dedicadas a las películas Batman y Batman
Returns.

Bandas sonoras de videojuegos[editar]


Más recientemente, a partir de la década de 1980, compositores de música
para videojuegos han utilizado samples para emular este instrumento en algunas piezas de
sus bandas sonoras para videojuegos.
Es a partir de la generación de 16 bits (1989-1996) donde, teniendo una calidad de sonido
decente en las consolas Mega Drive, Super Nintendo, las Recreativas y Neo Geo se percata
un buen sample que emula el sonido real de un órgano.
Uno de las primeras apariciones del órgano es en la banda sonora de la recreativa Vampire
Killer (1988) de Konami, ligando entonces para siempre en las bandas sonoras de la
saga Castlevania.
En 1991 encontramos dos excelentes bandas sonoras, Super Castlevania IV y Super Ghouls
ghosts donde el órgano tiene un papel bastante importante.
También, en el mismo año, Nobuo Uematsu le da un papel importante en las bandas sonoras
de Final Fantasy IV (1991,) y más adelante en Final Fantasy VI del año (1994) de Square,
donde se ve una fuerte influencia de la escuela alemana barroca con Bach, Buxtehude, etc. y
hay pistas memorables como "Dancing Mad".
Michiru Yamane, compositora de muchas de las bandas sonoras de los juegos de la saga
Castlevania, le un papel estelar en los juegos Castlevania Symphony of the Night (1997),
Harmony of Dissonance (2002), Aria of Sorrow (2003), Lament of Inoccence (2003) y Curse of
Darkness (2005) donde la música está muy influenciada también por la música organística del
barroco.
Otro ejemplo del uso del órgano en bandas sonoras en videojuegos es Tri-Ace en la mayoría
de sus videojuegos actuales, como Star Ocean o Baten Kaitos (este último desarrollado
por Tri-Crescendo, compañía gemela de Tri-Ace que desarrolla las bandas sonoras). El
célebre músico que compone las obras es Motoi Sakuraba, conocido por crear las BSO de
numerosos RPJ's.
En The Legend of Zelda: Ocarina of Time el antagonista, Ganondorf, espera a Link tocando el
órgano.
En Crash of the Titans durante la pelea contra N.Gin, este toca un órgano mientras sus
mutantes atacan a Crash.

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