ANTECEDENTES
Al finalizar la Segunda Guerra Mundial Japón se encontraba en ruinas. Entre los
temas de capacitación que se facilitaron a los científicos e ingenieros del Japón
de la posguerra, se incluyó el control estadístico de la calidad, este tema fue
considerado gracias a los aportes del profesor Walter Shewhart. Los japoneses
comprendieron que esta fortaleza fue una razón de la victoria de los EE.UU. en
la guerra, por lo que solicitaron que les recomendaran a expertos para poder
estudiarlo y aplicarlo.
Debido a que Shewhart en ese momento no estaba disponible, se les recomendó
a un profesor de la Universidad de Columbia, que había estudiado y ampliado
los conceptos de Shewhart este profesor era W. Edwards Deming. Ya en el año
1947, Deming había estado en Japón como parte de una misión de observadores
por lo que ya era conocido por los japoneses, lo que facilitó su incorporación
como instructor.
En Marzo de 1950, el director ejecutivo de la Unión de Científicos e Ingenieros
de Japón (UCIJ), Kenichi Koyanagi, le escribió al Dr. Deming solicitando que
impartiera a los investigadores, gerentes de producción e ingenieros, una serie
de conferencias sobre métodos de control de calidad. Los japoneses estaban
interesados en la reconstrucción de su país al término de la Segunda Guerra
Mundial, e intentando incursionar en el mercado extranjero .Debían cambiar la
reputación del Japón de producir artículos de calidad inferior. Deming los
convenció de que la calidad japonesa podría convertirse en la mejor del mundo
al instituirse los métodos que él proponía.
Deming sugiere una nueva definición con respecto al papel que tiene una
organización, esta es proporcionar empleo mediante la investigación, la
innovación y mejoramiento constante.
Hay dos tipos de problemas: los problemas de hoy y los problemas de mañana,
para la compañía que espera permanecer en el negocio. Los problemas de hoy
abarcan el mantenimiento de la calidad del producto que se fabrica hoy, la
regulación de la producción para que no exceda demasiado a las ventas
inmediatas, presupuesto, empleo, beneficios, ventas, etc (planificación a corto
plazo). Los problemas del futuro exigen, ante todo, la constancia en el propósito
y la dedicación para mejorar la competitividad, para mantener viva la compañía
y proporcionar puestos de trabajo a sus empleados.
Ser constante en el propósito significa: 1) innovar. Hay que asignar recursos para
la planificación a largo plazo. Por su naturaleza misma, la innovación requiere fe
en el futuro. No tiene posibilidad de éxito, dice Dr. Deming, a menos que la alta
gerencia haya "declarado su inquebrantable compromiso con la calidad y con la
productividad. 2) Invertir recursos en investigación y en instrucción con el fin de
prepararse para el futuro , una compañía debe invertir hoy. Por lo cual se
destinan los recursos para investigación y educación. 3) Mejorar constantemente
el diseño del producto y diseño. Esta obligación no acaba nunca. El consumidor
es la pieza más importante de la línea de producción. Y 4) Invertir en el
mantenimiento de los equipos, muebles e instalaciones, y en nuevas ayudas
para la producción tanto en la oficina como en la planta.
Estos son
Velar por aumentar las ganancias trimestrales sin una visión a largo plazo socava
la calidad y la productividad.
3. Evaluación del desempeño, clasificación según el mérito o análisis
anual del desempeño
Los efectos de estas prácticas pueden llegar a ser muy perjudiciales si se usan
inadecuadamente o de forma excesiva, fomentando la rivalidad y destruyendo el
trabajo en equipo.
4. La movilidad de la gerencia
Asegura Deming que “las cifras más importantes son desconocidas e imposibles
de conocer”. La contabilidad financiera clásica es incapaz de cuantificar los
denominados “activos intangibles”. Este concepto hace referencia a aspectos
tales como: fidelidad de los clientes, calidad del producto, la participación del
mercado, el grado de calificación de los empleados y la capacidad gerencial.
Estos aspectos deben ser conocidos y ser tenidos en cuenta por el gestor,
porque sin ellos la empresa esta destinada al fracaso a largo plazo.