El árbitro Paul Tierney había validado el tanto, pero el VAR lo anuló pese a que
todos los comentaristas en la transmisión por televisión, incluido un exárbitro,
no consideraron que hubo infracción.
Fueron más de seis minutos en los que estuvo detenida la acción mientras se
revisaban las jugadas por televisión el reloj, una eternidad para las millones de
personas que seguían el partido y las decenas de miles de aficionados
confundidos en las gradas.
"El fútbol se basa en emociones", continuó Pochettino.
"Creo que los aficionados que aman el fútbol no están muy contentos por lo
que vieron hoy", agregó.
"El fútbol también es sobre los errores, como nosotros, los jugadores pueden
cometer errores, los árbitros cometen errores. Siempre ha sido así y nosotros
entendemos el fútbol de esa manera".
Interpretación
Es por eso que temo que esa intensa relación intensa, irracional y apasionada
se pierda cada vez que un árbitro se lleve la mano a la oreja cuando hay un
gol, como fue el caso de Tierney en Wembley.
Si hay que esperar para celebrar, con la confusión que eso produce, se corre el
riesgo de quitar la emoción a la que hace referencia Pochettino de la ecuación.
No es lo mismo
EN CONTRA:
LENTO Y NO SIEMPRE EFECTIVO
El fútbol, históricamente, tiene a favor respecto a otros
deportes su dinamismo y rapidez. Muy al contrario,
por ejemplo, que el baloncesto o el fútbol americano,
que sufren parones continuamente. De hecho, los
partidos más aburridos suelen ser los trabados, esos en
los que las faltas rompen el normal transcurrir del
juego. Ahora, con el VAR, también se pararán a ver las
jugadas. A veces, como en el segundo gol de España,
hasta minuto y medio. Es decir, los aficionados y
jugadores tendrán que aguardar a ver qué dice el
árbitro el tiempo que haga falta. Esto rompe el ritmo y
acaba con parte de la esencia del fútbol. O, como dicen
los más contrarios a este sistema, directamente lo
destruye. Incluso se equivoca, como cuando durante el
Mundialito de Clubes el árbitro pitó penalti
correctamente, pero no se dio cuenta de que había
fuera de juego previo incluso tras ver repetida la
jugada.