Ante el inicio de un año escolar.

El desafío de la
convivencia…
Que nos quieren decir cuando escuchamos: …es
necesario “mirar” el clima del aula y de la institución
El comienzo de un año lectivo significa el comienzo de
un año de convivencia en el que la comunidad escolar
debe compartir horas de trabajo.
Esta convivencia muchas veces posibilita la
creación de conflictos, que, cuando no se conocen
medios para reconocerlos y tratarlos pueden derivar
en situaciones que alteren el buen clima institucional,
afectando a los alumnos en su rendimiento escolar, a
los docentes, afectando su salud y a la calidad de la
educación.
Las exigencias de la cotidianidad, la necesidad de
innovar, la incorporación de las nuevas tecnologías en
el aula, muchas veces actúan como una cortina de
humo imposibilitando ver la importancia de la
convivencia y el “clima” institucional real de nuestras
instituciones.
El tema de la convivencia, la formación de alumnos
mediadores, la violencia escolar, entra en la agenda
institucional cuando un hecho grave trasciende y es
entonces cuando se buscan “soluciones” inmediatas
que no se mantienen en el tiempo.
Los docentes enfrentamos todos los días situaciones
complejas que al no tener canales de gestión provocan
focos de tensión que producen estrés e incide en la
calidad de vida y en la calidad educativa.
La salud institucional genera el “clima” escolar. Con
respecto a los conflictos, éstos siempre habrán y no
son buenos o malos, todo dependerá de la manera
más adecuada de resolverlos, cuando un conflicto no
está resuelto, se lo “ve” cuando “estalla”, producto de
tensiones acumuladas que no se tomaron a tiempo, es
entonces cuando se ataca a la persona sin mirar el
verdadero problema.
Es ideal para comprender la complejidad de nuestras
relaciones conocer y contar con herramientas como la
mediación y la negociación para mejorar y tener una
buena calidad de vida y relaciones laborales
saludables.
Lic. Patricia Ríos