En el año 2003 el suicidio fue declarado como un problema de salud pública por la
Organización Mundial de la Salud, posicionándolo en el 8º lugar entre las enfermedades
con más años de vida perdidos al 2003 y en el lugar 14º en estimación de carga de
enfermedad y años de vida perdidos por discapacidad al año 2002 1. Entre los grupos de
riesgo de comportamiento suicida, las poblaciones de personas lesbianas, gays,
bisexuales y trans (LGBT) han sido las que han mostrado una de las más elevadas
prevalencias en este problema de salud mental2-6.
La asociación entre población LGBT y riesgo suicida ha sido entendida desde el enfoque
de los determinantes sociales de la salud7. Al respecto, se señala que la población LGBT
se ve altamente afectada por problemas de salud mental relacionados con el estigma y
la discriminación5,8. Específicamente, el modelo de stress en minorías8ha ofrecido una
manera de comprender cómo la pertenencia a una minoría discriminada, en este caso
ser parte de la población LGBT, deja expuesto al individuo a un entorno social hostil
caracterizado por el prejuicio, el rechazo y la exclusión. Este entorno generaría
problemas de salud mental tales como depresión, abuso de sustancias, aislamiento
social, conflicto con los pares y victimización, lo cual incrementaría los factores de riesgo
individuales para el suicidio4,8,9.
Algunos de los hallazgos más importantes muestran que en la población LGBT los
procesos relacionados con el suicidio (ideación e intentos) son más prevalentes que en
la población heterosexual. Comprender cuáles son las condiciones y factores que inciden
en este proceso de salud mental en dicha población es muy relevante dado el nivel de
vulnerabilidad de las personas LGBT evidenciada en los estudios y la relación de esta
con la construcción sociocultural de la diversidad sexual asociada al estigma,
discriminación, distintas formas de violencia, faltas de apoyo, barreras de uso de los
servicios de salud, entre otros fenómenos. Al respecto, interesante es notar que la
mayoría de los países en que fueron realizadas las investigaciones revisadas han
impulsado importantes políticas de inclusión que, sin embargo, dado los resultados de
dichos estudios, no parecen condecirse con una disminución de la incidencia de
problemas de salud mental y suicidabilidad asociados a la victimización de género.
Ruiz Utrilla, A., Evangelista García, A., & Xolocotzi Yáñez, Á. (2018). ¿Cómo
llamarle a lo que tiene muchos nombres? ¿Bullying, violencia de género,
homofobia o discriminación contra personas LGBTI?. Revista Interdisciplinaria
de Estudios de Género de El Colegio de México, 4, 1 - 31.
doi:http://dx.doi.org/10.24201/eg.v4i0.210
utiliza este concepto y lo asocia a odio, miedo, prejuicio. Por su parte, la UNESCO la
define como: Temor, rechazo o aversión hacia las personas homosexuales y/o que no
se comportan de acuerdo con los roles estereotipados de género. Se expresa, con
frecuencia, en actitudes estigmatizadoras o comportamiento discriminatorio hacia
personas homosexuales, la homosexualidad y hacia la diversidad sexual (UNESCO
2015 a,p.16).
Otero entiende por homofobia y lesbofobia “un principio ideológico, una actitud
negativa, una aversión, un rechazo, una intolerancia o temor” (Otero, 2017). COGAM, a
su vez, define el término como “la actitud hostil respecto a los homosexuales, ya sean
hombres o mujeres. Se la puede considerar, junto a la xenofobia, racismo,
antisemitismo, etc., como una manifestación arbitraria que consiste en señalar al otro
como contrario, inferior o anormal
Sin embargo, aunque Hay un consenso, más o menos consciente consideramos que el
término tiene problemas a niveles nominales que, de alguna manera, tiene el peligro de
naturalizar las acciones de violencia contra los sujetos LGBTI El término está
construido por dos vocablos, homo y fobia
Medicamente, por fobia se entiende “un miedo intenso y progresivo o ansiedad por un
determinado objeto, animal, actividad o situación que ofrece poco o ningún peligro real”
Revista Europea de Estudios Latinoamericanos y del Caribe No. 104 (2017): July-
December, pp. 69-88 www.erlacs.org Jairo Antonio López Universidad Autónoma
de Zacatecas "Los derechos LGBT en México: Acción colectiva a nivel
subnacional"
LA REALIDAD DE LA
DISCRIMINACIÓN EN LA ESCUELA
La escuela, uno de los primeros espacios de socialización en la que los seres humanos
enfrentan la vida, tristemente se convierte también, de manera muy temprana, en un
espacio de expansión del prejuicio, el rechazo y la exclusión a manos de individuos,
representantes de instituciones y algunos colectivos. Ello justifica preguntarnos ¿Por
qué? El investigador de la Universidad de Antioquía Gustavo López Rozo, señala que
el colonialismo en Suramérica hegemonizó el sistema cultural europeo, para el cual el
heterosexismo es piedra angular, siendo claro que el sistema educativo colombiano ha
fortalecido esta tendencia. El autor alerta sobre la “sorprendente y preocupante
persistencia del racismo, el clasismo, el sexismo y la Homofobia [cursivas añadidas] en
nuestras instituciones educativas y su profundo nexo con el eurocentrismo y el
pensamiento colonial, aún hegemónico en nuestro medio educativo” (López, 2006. p.
58). Ello le permitió a la ciencia, fuente de verdades absolutas y positivas tanto
naturales como sociales, difuminarse por toda la estructura educativa colombiana. Las
instituciones educativas, deudoras de esta ideología científica, promueven la
fragmentación del conocimiento en disciplinas (Wallerstein, 2001: 1-36) y un modelo
antropológico que se regenera mediante estrategias didácticas, pedagógicas y
cognitivas acordes con el paralelismo piramidal jerárquico, las visiones patriarcales del
género [cursivas añadidas] y las concepciones positivistas del conocimiento y del
currículo. (p. 62). Esta tendencia se va a consolidar a principios del siglo XX, época en
la cual, por ejemplo, el maestro colombiano es un moralizador e higienizador. Bajo esta
visión pedagógica todo ciudadano debía ceñir su conducta férreamente a las leyes
republicanas y a la religión católica, ámbitos en los cuales los discursos de la higiene,
la limpieza y la salud se extendieron desde la higiene corporal a la higiene
comportamental y a la higiene mental, y de allí a la higiene espiritual, en donde la virtud
es limpieza y salud eterna.
https://odiseo.com.mx/articulos/diferencias-actitud-ante-homosexualidad-entre-
estudiantes-universitarios-ciudad-mexico Diferencias
de actitud ante la
homosexualidad entre los estudiantes universitarios de la
Ciudad de México
Enviado por Carolyn Young Fernandez en 2012, Junio 30
Actualmente la sociedad enfrenta una serie de cambios, entre los que se encuentra una
supuesta apertura ante la homosexualidad, sin embargo hay sectores que se resisten a
aceptar este modo de relación, mientras que otros se muestran más abiertos. Por lo
que con ésta investigación se pretende contestar la siguiente pregunta ¿Cuáles son las
diferencias de actitud ante la homofobia entre estudiantes de dos universidades?
El debate ha crecido y la discusión cada vez es más abierta en foros públicos, como los
medios o la política. Se le pone mayor atención a los propios homosexuales, sus
familias, los activistas y las asociaciones gays, los teóricos, las organizaciones de
derechos humanos y los partidos políticos. Esto da cuenta de que la homofobia
persiste pero que por lo menos se habla acerca de ella (Castañeda, 2010).
La homofobia no solo daña a los homosexuales sino que también estigmatiza a las
personas diferentes. Se pone en juego la sexualidad, y las reglas del juego social,
desde el amor, la amistad, el sexo y la naturaleza de la pareja y familia (Castañeda,
2010).