VENTILADOR: Maquina rotativa que transmite energía al fluido que circula por ella,
bajo la forma de aumento de presión
CAUDAL: Flujo volumétrico determinado para la densidad del aire.
PRESION ESTATICA: Presión del aire debida solo a su grado de compresión. Puede ser
positiva o negativa. En el ventilador es la diferencia entre la presión
estática de salida y la presión total a la entrada.
PRESION DINAMICA: Presión del aire debida solo a su movimiento. La presión dinámica puede
ser solo positiva. En el ventilador será la correspondiente al promedio de
las velocidades a la salida del ventilador.
Arriba
En un sistema dado, un ventilador, si se mantiene constante la densidad del aire, cumple con:
Arriba
Clasificación de Ventiladores
VENTILADORES AXIALES:
Son aquellos en los cuales el flujo de aire sigue la dirección del eje del mismo. Se suelen llamar helicoidales,
pues el flujo a la salida tiene una trayectoria con esa forma. En líneas generales son aptos para mover grandes
caudales a bajas presiones. Con velocidades periféricas medianamente altas son en general ruidosos. Suelen
sub-clasificarse, por la forma de su envolvente, de la siguiente manera:
VENTILADOR DESCRIPCION APLICACION
Se utiliza en instalaciones de
ventilación, calefacción y aire
Tienen rendimiento algo
acondicionado que requieran
superior al anterior y es capaz
altos caudales con presión
de desarrollar una presión
media a baja. También se
estática mayor. Por su
utiliza en algunos sistemas
construcción es apto para
TUBE AXIAL industriales como cabinas de
intercalar en conductos.
pintura y extracciones
localizadas de humos.
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VENTILADORES CENTRIFUGOS:
Son aquellos en los cuales el flujo de aire cambia su dirección, en un ángulo de 90°, entre la entrada y salida.
Se suelen sub-clasificar, según la forma de las palas o álabes del rotor, de la siguiente manera:
VENTILADOR DESCRIPCION APLICACION
1. ¿Qué es un ventilador?
Un ventilador es una máquina rotativa que pone el aire, o un gas, en movimiento. Podemos definirlo
como una turbomáquina que transmite energía para generar la presión necesaria con la que mantener un
flujo contínuo de aire.
Dentro de una clasificación general de máquinas, como muestra el cuadro al pie, encontramos a los
ventiladores como turbomáquinas hidráulicas, tipo generador, para gases.
Un ventilador consta en esencia de un motor de accionamiento, generalmente eléctrico, con los
dispositivos de control propios de los mismos: arranque, regulación de velocidad, conmutación de
polaridad, etc. y un propulsor giratorio en contacto con el aire, al que le transmite energía.
Este propulsor adopta la forma de rodete con álabes, en el caso del tipo centrífugo, o de una hélice con
palas de silueta y en número diverso, en el caso de los axiales.
El conjunto, o por lo menos el rodete o la hélice, van envueltos por una caja con paredes de cierre en
forma de espiral para los centrífugos y por un marco plano o una envoltura tubular en los axiales. La
envolvente tubular puede llevar una reja radial de álabes fijos a la entrada o salida de la hélice, llamada
directriz, que guía el aire, para aumentar la presión y el rendimiento del aparato.
En el tipo helicocentrífugo y en el transversal, el elemento impulsor del aire adopta una forma cercana al
de los rodetes centrífugos.
Fig. 1. Esquema
Los ventiladores más antiguos, de los que se tiene referencia, eran manuales, en principio
con mango fijo, como el flabellum, que aparece en la cultura egipcia, al menos desde la
dinastía XIX, para pasar posteriormente en el siglo V a. de C. a la Antigua Grecia, en la que
tenía forma de palmeta, tal como aparece en pinturas de vasos de cerámica. También de la
Antigua Roma hay pinturas en las que se representan esclavos manejando el flabellum.
Manejado también por esclavos, pero ya con cierto mecanismo, es el abano, que era un
bastidor con tela gruesa que se colgaba del techo y se movía mediante un sistema de
cuerdas y poleas y que ya usaban los árabes a principios del siglo VII. También se
encuentra en la India y Medio Oriente con el nombre de punkah. En China, el origen del
abanico rígido se sitúa hacia 2697 a. de C., con el emperador Hsiem Yuan, y la referencia
escrita más antigua (1825 a. de C.) menciona dos abanicos de plumas ofrecidos al
emperador Tchao Wong, de la dinastía Chou.
Pero el ventilador similar o precursor del que conocemos hoy como tal, aparece en 1886 y
es un invento del estadounidense Schuyler Skaats Wheeler, que fue comercializado por su
empresa Crocker & Wheeler, instalada en Nueva York. Era de pequeño tamaño y diseñado
para ponerlo sobre una mesa. Casi simultáneamente aparece en Alemania una versión de
techo creada por el ingeniero Philip Diehl.
Usos[editar]
El tipo de ventilador más conocido, se utiliza para la ventilación o para aumentar la
velocidad del aire en un espacio habitado, básicamente para refrescar.nota 1 Por esta razón, es
un elemento muy utilizado en climas cálidos.
Un ventilador de piso. En países como Argentina este tipo de ventilador es llamado
turboventiladornota 2 porque además del giro de la hélice central se produce
independientemente el giro de la parrilla frontal.
Los dispositivos de ventilación utilizados en lugares en los que se requiere más ventilación
que la natural proporcionada por los huecos de fachadas, son ventiladores que extraen el
aire viciado y provocan la entrada de aire fresco por depresión, o bien, impulsan aire fresco
y evacúan el aire viciado por sobrepresión. Aunque más caro, es más eficaz utilizar ambos
sistemas simultáneamente, sobre todo si el aire se distribuye mediante bocas de entrada y
salida en cada local.
Ventiladores y compresores[editar]
Aunque tanto los ventiladores como los compresores tienen como función impulsar un gas
aumentando su presión, entre ambos existen diferencias: El objeto fundamental de los
primeros es mover un flujo de gas, a menudo en grandes cantidades, con aumentos
generalmente reducidos de presión; mientras que los segundos están diseñados
principalmente para producir grandes presiones y flujos de gas relativamente pequeños.
Tipos de ventiladores[editar]
Ventilador centrífugo.
Atendiendo a su función[editar]
Atendiendo a la presión[editar]
Ventiladores de Baja Presión : Se llaman así los que no alcanzan los 70 Pascales.
Suelen ser centrífugos. Los más característicos son los utilizados en climatizadores.
Ventiladores de Media Presión: Cuando la presión llega entre los 70 y 3.000
Pascales. Pueden ser centrífugos o axiales.
Ventiladores de Alta Presión: Cuando la presión está por encima de los 3.000
Pascales. Suelen ser centrífugos, con rodetes estrechos y de gran diámetro.
Ventiladores estándar: Son los aparatos que vehiculan aire sin cargas importantes
de contaminantes, humedad, polvo o partículas agresivas con temperaturas máximas
de 40ºC , si el motor está en la corriente de aire.
Ventiladores especiales : Son los diseñados para tratar aire caliente, corrosivo,
húmedo etc., o bien para ser instalados en el tejado o dedicados al transporte
neumático (fluidización).
Mención aparte tienen los ventiladores con uso exclusivo de refrescamiento que se utilizan
en el ambiente doméstico o en pequeños espacios y que disponen de un sistema de soporte
para su ubicación:
De pared: se fijan a la pared, permitiendo una mayor circulación en lugares
pequeños, donde el uso de ventiladores de otro tipo sería engorroso debido al
tamaño o a la disposición del local, o en conjunto con otros ventiladores,
proporcionando una mayor circulación de aire.
De mesa: son ventiladores axiales de baja potencia utilizados especialmente en
oficinas o en ambientes donde necesitan poca ventilación. A veces también los hay
centrífugos.
De piso: son portátiles y silenciosos, posibilitan que sean colocados en el suelo en
cualquier ambiente de una casa, pudiendo ser trasladados a cualquier parte. Los hay
de varios modelos y formas.
De techo: son ventiladores verticales, sus aspas están en posición horizontal, y por
lo tanto el aire va hacia abajo. Muy comunes, utilizados en habitaciones donde no
hay espacio disponible en las paredes o el suelo, pueden ser muy peligrosos si no
están correctamente fijados al techo.
Sin Aspas:2 son ventiladores con una forma circular tradicional pero en lugar de
tener aspas impulsan el aire por medio de canales de aire que generan la misma
función.
Los parámetros necesarios para la selección de un ventilador son; el caudal que debe mover
y la pérdida de carga a vencer debida al rozamiento del aire con los conductos, rejillas, etc.
Los ventiladores helicoidales pueden mover un gran caudal, pero comunican poca presión
al aire, por lo que no se suelen utilizar en instalaciones de conductos. Para este caso los
ventiladores habituales son los centrífugos, que pueden vencer una pérdida de carga
elevada.
El caudal y la presión de un ventilador, son variables dependientes que se pueden
relacionar3 mediante una curva de trabajo. Se ensaya el aparato variándole la carga desde el
caudal máximo al caudal cero. Todos los pares de valores obtenidos caudal-presión se
llevan a unos ejes coordenados, obteniéndose un grupo de curvas, cuyo conjunto recibe el
nombre de característica del ventilador.
Se observan en la figura curvas diferentes. Cada una de ellas representa un valor distinto y
su lectura se hace en las escalas que la enmarcan. Obsérvese que a descarga libre, es decir
cuando la Presión estática (Pe) es nula, el ventilador da el máximo caudal que puede
mover; en este punto la Presión total es igual a la dinámica (Pt = Pd). Asimismo, cuando el
ventilador esta obturado, es decir que da el mínimo caudal, la Presión dinámica (Pd) es
nula; en este punto, la Presión total es igual a la estática (Pt = Pe). Otra curva que se puede
ver en el gráfico:4 es la curva de rendimiento (η), que se lee en % en la escala de la derecha.
Se ve que el rendimiento del ventilador, depende del caudal que está moviendo y se marca
el rendimiento máximo. La zona idónea de trabajo del ventilador, por tanto, es el tramo A-
B de su curva de presión estática. Entre B y C su funcionamiento es inestable, el
rendimiento desciende rápidamente y aumenta notablemente el ruido. Por ello, en muchos
catálogos se representa sólo el tramo eficaz de funcionamiento, obviando el tramo hasta la
presión máxima de que es capaz.
Para conocer el punto5 en que trabajará un ventilador, una vez determinada la pérdida de
carga que debe vencer, no hay más que marcarla sobre el eje de ordenadas. A partir de aquí
y con una horizontal se corta la curva de Presión estática en un punto, a partir del cual y
mediante una línea vertical, en el eje de abscisas se obtiene el caudal que proporcionará el
ventilador en cuestión, trabajando contra la pérdida de carga que se ha considerado
inicialmente.