Complicaciones
Causas
Las causas más frecuentes de la diarrea aguda (que dura menos de 1 semana) son:
Las causas más frecuentes de la diarrea crónica (que dura más de 4 semanas) son:
La diarrea que ha estado presente durante más de 4 semanas puede ser un caso persistente
de diarrea aguda o la fase incipiente de un trastorno que causa diarrea crónica.
Clasificación
Normalmente, el porcentaje de agua que contienen las heces es del 60 al 90%. La diarrea se
produce cuando no se absorbe suficiente agua de las heces, produciendo heces poco
consistentes y mal formadas. Las heces pueden contener demasiada agua si:
El tránsito rápido de las heces es una de las causas generales más frecuentes de diarrea.
Para que las heces tengan consistencia normal deben permanecer en el intestino grueso
durante cierto tiempo. Las heces que salen del intestino grueso demasiado rápido son
acuosas. La disminución del tiempo de permanencia de las heces en el intestino grueso
puede tener su origen en diversas enfermedades y tratamientos. Estas enfermedades y
tratamientos son: glándula tiroidea hiperactiva (hipertiroidismo); síndrome de Zollinger-
Ellison (una enfermedad en la que hay una producción excesiva de ácido a causa de un
tumor); la extirpación quirúrgica de parte del estómago, el intestino delgado o el intestino
grueso; una derivación quirúrgica de una parte del intestino; una enfermedad inflamatoria
intestinal (como la colitis ulcerosa); el uso de fármacos, como los antiácidos, que contienen
magnesio, laxantes, prostaglandinas, serotonina e incluso cafeína. Muchos alimentos, en
especial aquellos que son ácidos o tienen una gran cantidad de azúcar (como los gofres o el
jarabe de arce), pueden aumentar la velocidad de tránsito intestinal. Algunas personas no
toleran determinados alimentos y siempre sufren diarrea después de consumirlos. El estrés
y la ansiedad son también causas frecuentes.
La diarrea osmótica se produce cuando ciertas sustancias que no pueden ser absorbidas a
través de la pared del colon permanecen en el intestino. La presencia de estas sustancias
hace que la cantidad de agua que permanece en las heces sea excesiva, causando diarrea.
Determinados alimentos (como algunas frutas y legumbres) y los sustitutos del azúcar en
alimentos dietéticos, las golosinas, la goma de mascar (por ejemplo, hexitoles, sorbitol y
manitol) pueden causar diarrea osmótica. También la deficiencia de lactasa puede causar
diarrea osmótica. La lactasa es una enzima que normalmente se encuentra en el intestino
delgado y que convierte la lactosa (el azúcar de la leche) en glucosa y galactosa, para que
pueda ser absorbida en el torrente sanguíneo. Cuando una persona con déficit de lactasa
ingiere leche o productos lácteos, la lactosa no se digiere. La acumulación de lactosa en el
intestino provoca diarrea osmótica; esta patología se denomina intolerancia a la lactosa. La
gravedad de la diarrea osmótica depende de la cantidad de sustancia osmótica que se haya
consumido. El cuadro cesa tan pronto como se deja de ingerir esa sustancia. La sangre
presente en el tubo digestivo actúa como un agente osmótico y produce heces negras y
alquitranadas (melena). Otra de las causas de la diarrea osmótica es la proliferación de
bacterias intestinales normales o el crecimiento de bacterias que normalmente no se
encuentran en el intestino. Los antibióticos pueden causar diarrea osmótica al destruir las
bacterias intestinales normales.
La diarrea secretora sucede cuando los intestinos delgado y grueso secretan sales
(especialmente cloruro de sodio) y agua a las heces. Ciertas toxinas, como la producida por
el cólera o durante algunas infecciones víricas, pueden causar estas secreciones. Las
infecciones debidas a determinadas bacterias (por ejemplo, Campylobacter) y parásitos
(como Cryptosporidium) también estimulan las secreciones. La diarrea puede ser masiva;
en el caso del cólera, se puede llegar a evacuar más de 1 L de heces por hora. Entre el resto
de sustancias causantes de secreción de agua y sales se encuentran determinados laxantes,
como el aceite de ricino y los ácidos biliares (que pueden acumularse en el colon si se ha
extirpado parte del intestino delgado). Ciertos tumores poco frecuentes, como el carcinoide
(argentafinoma), el gastrinoma y el vipoma, también causan diarrea secretora, al igual que
algunos pólipos.
Valoración
Las personas que presentan signos de alarma, como sangre o pus en las heces, fiebre o
signos de deshidratación, deben ver a un médico de inmediato, al igual que aquellas con
dolor abdominal importante. Puede que sea necesaria la realización inmediata de pruebas
diagnósticas o la instauración de un tratamiento, e incluso puede requerirse el ingreso
hospitalario. Si los únicos signos de alarma presentes son la diarrea crónica o nocturna, o la
pérdida de peso, es necesario acudir al médico en un plazo máximo de 1 semana
aproximadamente. Las personas sin signos de alarma deben llamar a un médico si la diarrea
persiste durante más de 72 horas. Según cuáles sean los demás síntomas presentes, la edad
y la historia clínica, se puede indicar una exploración física o intentar tratamientos caseros
o tratamientos con medicamentos de venta sin receta (ver Tratamiento).
En primer lugar, el médico pregunta acerca de los síntomas del paciente y su historial
médico, y a continuación realiza una exploración física. Los antecedentes clínicos y la
exploración física a menudo sugieren la causa de la diarrea y las pruebas que pueden ser
necesarias (ver Algunas causas y características de la diarrea).