Las festividades termina con una qhashwa (baile y canto de fin de fiesta),
donde los jóvenes de ambos sexos animados por la bebida se pierden en las
afueras del pueblo (entre los pajonales), allí realizan encuentros de pasión y
amor, representando la culminación del cortejo. Pueden llevar al servinakuy, es
decir al matrimonio o convivencia de prueba.
Forcejeo en la danza