Según la Norma ISO 14001:2004, se puede definir auditoría como un «proceso sistemático,
independiente y documentado para obtener evidencias de la auditoría, y evaluarlas de manera
objetiva con el fin de determinar la extensión en que se cumplen los criterios de auditoría».
Podemos decir que una auditoría es el examen, por parte de personas neutrales, del
cumplimiento de una determinada norma o procedimiento.
De modo más sencillo la auditoría es una actividad de análisis que, partiendo del punto inicial
de recabar información, la evalúa para determinar posibles errores, estableciendo pautas para
corregirlos. De ningún modo se trata de un «proceso policial», sino de un proceso técnico, en el
que el auditado tiene que ver siempre la parte positiva de recibir información sobre el
funcionamiento de la empresa.
DEFINICIONES
Como definiciones, de imprescindible conocimiento, podemos destacar las siguientes, que se
encuentran recogidas en las normas ISO 14001:2004 e ISO 19011:2002.
Objetivos de una auditoria ambiental
La auditoría ambiental debe proporcionar a la dirección de la organización la información
suficiente para controlar, planificar y revisar las actividades que puedan ocasionar efectos sobre
el medio ambiente. Del mismo modo, permite evaluar la adecuación de la política ambiental a la
empresa.
Los objetivos de una auditoría ambiental son muy amplios y diversos dependen, en gran
medida, de las especificaciones de la actividad, la empresa auditada y el entorno en que
se ubica. Aun así, existen unos objetivos genéricos que deben tenerse presentes en,
prácticamente, todas las auditorías.
Como consecuencia, se podría decir que las auditorías ambientales se realizan con
la finalidad de determinar:
Se debe tener en cuenta que la filosofía de los sistemas de gestión ambiental se basa más en
la prevenciónque en la detección de problemas y, por ello, se debe dar mayor importancia a:
Para realizar la auditoría es imprescindible contar con personal preparado para llevarla a
cabo. Dicho equipo debe poseer la competencia necesaria para alcanzar los
objetivos deseados, teniendo en cuenta la necesidad de imparcialidad e independencia del
equipo auditor respecto a las actividades a auditar.
Así mismo, deberán establecerse los oportunos contactos, mediante reuniones previas y
de apertura, entre el equipo auditor y el auditado. En estas reuniones se explicará el objetivo de
la auditoría y las líneas generales de actuación durante su desarrollo.
Una vez finalizada la auditoría, el auditor realizará una reunión con el auditado, o persona
delegada, al que expondrá las desviaciones encontradas, para obtener su acuerdo con éstas o
para que formule sus observaciones y, conjuntamente, proponer las acciones correctivas y
preventivas pertinentes. Cuando se realicen auditorías de tercera parte, para la certificación,
queda totalmente prohibido que el equipo auditor proponga, conjuntamente con la empresa,
acciones correctivas o preventivas.