Dios creó el sexo y ordenó todo lo relativo a él. Los deseos e impulsos sexuales
son creados por Dios.
Génesis 1.27 dice: “varón y hembra los creó” y Génesis 1.31 dice: “Y vio Dios
todo lo que había hecho, y he aquí era bueno en gran manera”.
Si esto lo entendemos así, al ser Dios el creador del sexo, por consecuencia,
esto no es pecaminoso, ni sucio, ni repugnante, porque es dado por Dios,
siempre que sea utilizado dentro de su plan.
1.1 El sexo nos fue dado por dos razones físicas principales:
1.1.1 Como fuente de profundo placer espiritual y físico entre el marido y la
mujer (Mateo 19.4-6; Génesis 2.24,25; 24.67; Eclesiastés 9.9; 1Corintios 7.2-5).
Esta unidad en la relación sexual provee al hombre el gozo más perdurable y la
máxima plenitud que puedan llegar a conocer. ¡¡Es por eso que el acto sexual
en el momento oportuno, con la persona adecuada, en la relación correcta; es
tan increíblemente perfecto!!
“Y los dos serán una sola carne,” dijo Dios. ¡Qué frase tan cargada de
significación!
Sabemos que todo juego fútbol, tenis, etc. tiene sus reglas. Sin esas reglas de
conducta no habría deportes. Sin estas disciplinas los deportes serían un “hago-
lo-que-quiero”.
Aún los juegos más simples de pasatiempo o entretenimientos tienen sus reglas.
Desarrolla convicciones bíblicas en tus relaciones con personas del otro sexo.
Sólo entonces podrás disfrutar de la satisfacción que proviene de una relación
centrada en Cristo, y mantenida dentro de sus sabios límites de amor.
4.- ¿CUÁLES SON LOS LÍMITES Y LAS CAUSAS QUE NOS LLEVAN A LA
CAÍDA?:
Hay ciertas restricciones que son imprescindibles para que el noviazgo conduzca
a un matrimonio feliz. Dichas limitaciones son mayormente de orden sexual.
En Gálatas 6.7 dice que nadie que desobedezca a Dios quedará impune sino
que recogerá lo mismo que sembró. Son palabras fuertes pero a la vez medicina
saludable.
Hay jóvenes que se fastidian y algunos se enojan mucho cuando sus padres, por
protección y amor, les imponen ciertas restricciones en el noviazgo.
Cuando dichos límites son normales y razonables, sin duda son para nuestro
bien.
Hay limitaciones dictadas por Dios, la lógica y la honradez, y conviene que nos
atengamos a ellas.
¿POR QUÉ?
El arrancar una fruta descuidadamente o fuera de sazón es robarle su
preciosa florescencia, y jugar con el amor es robarle su profundo
significado y belleza.
¡Cuánto dolor habrá en el corazón de Dios! ¡Deténte y piensa muy bien lo que
vas a hacer!
El aborto es matar una vida que no nos pertenece, sin mencionar el inmenso
peligro que esto representa a las mujeres que son sometidas a este. Miles de
mujeres mueren todos los años debido a los abortos que se han hecho.
Hoy en día muchas parejas se unen y viven juntos sin asumir ningún compromiso
legal o espiritual con la otra persona. Algunos tienen hijos sin haber asumido el
rol y compromiso de una familia que de hecho está constituida.
La única diferencia es que no hay un papel de por medio que vincule y obligue a
los cónyuges a ser fieles y ayudarse el uno al otro.
Todos los años miles de jóvenes, en todo el mundo, que han pasado por
profundas crisis llegan aún a quitarse la vida por sus decepciones amorosas, etc.
5.- LA ABSTINENCIA TE LIBERA DE ESTAR BAJO LA PRUEBA
CONSTANTE DE TENER QUE DEMOSTRARLE ALGO A LOS DEMÁS: Los
jóvenes, hoy día, son a menudo puestos a prueba. Han de actuar sexualmente
si quieren ser aceptados. Una relación basada en ser aceptado por lo que hace
y no por lo que es.
Una pareja que haya tenido esta experiencia y descubre ciertos desajustes
sexuales, llegará a la conclusión de que no han sido hechos el uno para el
otro y en consecuencia deciden romper su compromiso matrimonial.
El aporte de una vida emocional limpia es tan importante como cualquier otra
preparación para dar el paso del matrimonio. El amor que está dispuesto a
negarse la satisfacción del presente por un mayor goce en el futuro mejora
grandemente la calidad y cualidad de la experiencia sexual. Este amor guía al
mutuo regocijo y aprecio que ennoblecen los lazos matrimoniales.
Esta clase de amor puede estar seguro de sí mismo en cualquiera situación,
porque ha salido triunfante en las circunstancias más difíciles y apremiantes.
Entre quienes leen, habrá quienes ya han perdido la virginidad física, y ésta
nunca podrá ser recobrada. Pero puedes comenzar de nuevo desde donde te
encuentras. La mayoría de los factores positivos de la abstinencia pueden volver
a ser ciertos en tu vida.