Los bebés cuando nacen tienen menos capacidad para compensar estos cambios lo que
los hace más sensibles a temperaturas extremas.
Una de las dudas más habituales de los padres y madres novatos es: ¿Cuándo es fiebre en
un bebé? ¿Cuándo debo preocuparme si la temperatura es muy baja?
Si la temperatura está por encima del límite superior en cada sitio, hablamos de febrícula.
Por tanto será fiebre si tiene más de 38º en la axila, más de 38,5º en la boca o en la ingle
o más de 39º en el recto.
En los bebés más pequeños la febrícula puede aparecer simplemente porque esté muy
abrigado o en un sitio donde hace mucho calor. Para saber si es por eso o realmente tiene
febrícula:
1. Lleva al bebé a un lugar con temperatura normal (20-25º) y quítale ropa.
2. Espera 5 minutos y vuelve a tomarle la temperatura.
3. Si ha bajado a cifras normales simplemente estaba demasiado abrigado o en un
ambiente muy caluroso.
4. Si sigue con la febrícula o sube es que realmente tiene algo que le causa esa
febrícula.
5. Lo más frecuente es que sea una infección. Pero en bebés puede subir también con
facilidad si están un poco deshidratados, tras una comida abundante o por
reacción a una vacuna.
Cuando sube por encima de lo que consideramos fiebre asumimos que tiene una infección,
está deshidratado o es una reacción a una vacuna.
La gravedad de la fiebre y por tanto la urgencia para que sea valorado por un médico
depende de:
Edad del niño. Cuanto más pequeño más importante es que sea valorado pronto.
Especialmente en menores de 3 meses en los que no relacionamos la fiebre con una
vacuna puesta hace 24-48 horas.
Estado general. Cuanto más decaído esté el bebé más importante puede ser el
problema que causa la fiebre.
Lo alta y persistente que sea la fiebre. No es lo mismo una fiebre de 38,2 que una
de 41º. Y no es igual un sólo pico de fiebre que ha cedido y pasan horas sin que
vuelva a aparecer que una fiebre casi constante.
De los tres factores, el principal es el Estado General. Aunque la fiebre sea alta, si el
estado general es bueno, resulta tranquilizador. Aunque no sea muy alta, si el estado
general es malo incluso cuando la fiebre baja, puede ser más serio.