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Para empezar hola a ti también, te diré una cosa, y no es para entrar en un estado de pesimismo

cósmico, pero quiero que sepas que si estás buscando un significado a esta vida entonces quieto.
Que el verdadero significado no se encuentra, pero se construye; con experiencias entenderás, al
mismo modo en el que yo estoy también entendiendo, los varios matices de la que
verdaderamente es la vida.
Yo también he pasado, y continuo a pasar, y muy probablemente continuaré a pasar por
momentos como los que has estado viviendo tú durante estos meses. Es natural, créeme.
De tu punto de vista, todo se reduce a ser feliz. Claro, cómo puedo contradecirte, si la pregunta
“cuál es el significado de la vida?” hace parte del aforisma más discutido durante la historia de la
humanidad. Desde que los antiguos Sumerios inventaron la escritura en sí, y seguramente desde
antes, que continuamos a vivir comiéndonos la cola por probar a responder esta pregunta. Así
que te aconsejo, no busques respuesta a esta pregunta, y si la buscas, encuéntrala en ti mismo.
Eugenio Montale, escritor Italiano del ‘1900, describe perfectamente lo que estás sintiendo. En
“Meriggiare pallido e assorto” el poeta se describe en un día de verano, sintiendo el nada. Se
siente como si fuese los sedimentos de una sepia, la cual fue expulsada ferozmente del mar. Ésta
admira y contempla el mar, como si las olas representasen la vida, y se da cuenta que el Ser se
resume en Estar. Montale ve que no hay respuesta al aforisma ontológico: “qué somos???”. En
“Non chiederci la parola” aconseja a todo el mundo que abandone la idea de buscar respuestas
en lo que nos rodea, y que mediante un análisis atenta de nuestra introspectiva nos aconseja que
aprendamos a reconocer el ente que nos hace sentir seres. Filósofos como Jaspers o Heidegger
(sobretodo este), hablan mucho del Ser-ahí, del Das Sein, y no son ni los primeros ni los últimos
que hablarán de un Ser. Parmenides de Elea también ha vivido toda su vida buscándole un
sentido a nuestra existencia, pero no la ha encontrado con una respuesta universal, es más, no
hay respuesta universal a esta pregunta.

Tu dices que se reduce a ser feliz. Qué te hace feliz a ti?


Nunca te has preguntado si la felicidad es un factor cultural, y por ello tu estás fuertemente
influenciado en el sentido que para tener una vida satisfactoria debes ser feliz?
Lo que nos diferencia de los animales es que somos autoconscientes. Sabemos reconocernos en
diferentes dimensiones a parte de la simple y reduccionista idea del instinto. Freud habla de es,
yo y super yó, y nos dice que parte de nosotros no es más que fruto de lo que es nuestra
sociedad.
Un mono para ser feliz no necesita de un iMac, necesita de lo más básico para sobrevivir y vivir
cómodamente.
Talvez fallamos al definir la felicidad. La felicidad al mismo modo que la moral, como bien has
dicho, no es nada más que algo influenciado por la sociedad. Parece estúpido, pero no. Nietzche
habla, en la “Genealogía de la Moral”, de cómo esta haya sido inventada solo para dar un limite
al proprio individuo, para moldear el nuestro ser y buscar nuestras respuestas en creaciones
aparentemente no ficticias. Connor McCarthy escribe, en su libro The Road, cómo en situaciones
de sobrevivencia el ser humano se olvida totalmente de las leyes morales y cómo existe solo una
base y un principio de resiliencia, resistencia y sobrevivencia. Piensa en la Iglesia; cuántas vidas
ha controlado y sigue por controlar? Está todo basado en su sistema de leyes morales y inputs
más bien determinados. No somos libres; somos presos de este deseo de querer dar respuestas
para hacer más liviana y dulce nuestra existencia. Marx dice que las religiones no son más que el
opio del pueblo. No es cierto?
Bien, en todo esto pero, al menos desde mi punto de vista, queda algo universal. Abro este inciso
para cerrarlo inmediatamente; IMO la justicia es un valor universal, no hay perspectiva ni visión
que me haga cambiar de idea. Lo sé, muy rigido. Pero el sentido común de justicia lo tenemos
todos. Por ejemplo, a quién le gusta ser robado, tío? Genéricamente es algo que interviene en
nosotros como sentido común, casi un instinto. La justicia la tienes que ver como algo más
primitivo, que la perciben también los animales (No pienses al ente jurisdiccional pls).

Por la otra parte, los principios en mí opinión, son y deben de ser analizados como algo
fuertemente sociológico, algo que tiene grande impacto en la vida del ser humano. Somos las
primeras generaciones, y sí, en toda la historia de la humanidad, a conocer una sociedad la cual
no se apoya estrictamente a principios o tradiciones. Es algo bueno o malo? No sabría decírtelo.
Es cierto, como dices tu, que te definen a priori, porque son un factor que influye nuestra vida y
nuestro “aut aut” como lo definiría Kierkegaard (nuestras decisiones). Por la otra parte no le doy
mucho peso a el discurso de la hipocresía, somos seres humanos, lo cuál significa que estamos
destinados a vivir con la condición humana, ósea la del errar y fallar, o lo que los religiosos llaman
pecar en el sentido más dantesco y meritocrático a un puesto en el Infierno de la Divina Comedia.

Ahora hablemos del éxito.


Veo el éxito como una condición humana, no como únicamente una construcción social. Sí, eso
cierto que las redes sociales y todo lo que quieras influye en la manera de reconocer y catalogar
el éxito, pero este ha siempre existido. El reino animal conoce también sus jerarquías; existe un
alpha y un beta. El éxito (dinero coff coff) y el poder son sólo una ambición que se basa en un
estado de avaricia infinita. Todo lo que deriva de nuestra mente es infinito, y si algo es infinito
significa que no es asequible y factible mediante medios físicos. Giacomo Leopardi habla de este
problema en la “teoría del placer” (Teoria del piacere), por el cual un deseo nuestro no
puede/podrá ser jamás amortiguado y extinguido completamente, porque limites en el cerebro
humano no existen en su dimensión metafísica. Te lo ilustro con un ejemplo; imagina cual es la
cosa la cual deseas ahora mismo (pongamos como sujeto un televisor nuevo). Apenas
conseguirás tu televisor nuevo notarás como tu deseo de tener este se apagara, serás feliz, pero
será momentáneo. Habrá, efectivamente, un tiempo temporal en el cual te sentirás complacido,
pero luego volverá el deseo de otra cosa. La felicidad la cual tanto halabas hermano, es también
limitada y tiende, matemáticamente, a disiparse en el nada.
Me encanta que hayas explicitado el hecho que << nadie es más que nadie por tener más
dinero>>. El dinero lo veo más como un medio. No es la meta, pero es el medio. Poca gente
muere siendo feliz por tener más que los otros (Cito otra vez un intelectual italiano, Giovanni
Verga, lo se es un lol pero el tío ha escrito “La Roba”, la cual el protagonista Mazzarò vive su vida
acumulando pertenencias físicas hasta que el último día de su vida se sienta en una silla y ve todo
lo material que obtuvo pero que esencialmente y realmente nunca lo hizo feliz).

Por el déficit que tienes en la temática del eros lo siento tío. El hábito no hace al monje,
recuérdalo. Una persona puede ser guapa cuanto quiere, pero sustancialmente puede tener más
lagunas que cualquier persona en la tierra. Es cierto, hablas de primer impacto, pero no le doy
mucho caso a la belleza. Ésta NO PUEDE influenciar mi estado psico-emotivo, y me lo meto como
muro que hay que superar. Te entiendo mucho, aún así, yo también continuaba a analizar el
mundo desde el punto de vista estético a niveles psicóticos, parecía un dandy a la Oscar Wilde ya
que todo el mundo a mi exterior pasaba por un filtro que tenia como base y como primer criterio
la belleza estética. Yo también he vivido bajones por rechazos o situaciones similares.
Mi único consejo es que tengas paciencia y que seas tu, las cosas buenas no se hacen esperar,
llegarán y de la mejor manera. Estoy felizmente con una persona desde hace año y medio, verás
que lo mejor está por llegar bud. ;-).
Te cito <<Este es mi día a día, viendo el mundo y analizándolo sin parar a través de estos ojos,
sintiendo algo parecido a pinchazos en el corazón cada vez que veo que el mundo no es ideal, que
el mundo no es una utopía, que el mundo es injusto a niveles abusivos. Que no todo el mundo
tiene ni recibe lo que se merece. >> El mundo no es como quieres que sea, tío, es injusto de por sí
y no hay revolución que lo hará cambiar.
La última cosa que puedo decirte es que pruebes a vivir externando tu ser en otras facultades. Qué
es lo que más te gusta hacer? Si sabes responderte pues hazlo, y sigue tu sueño; verás que las
puertas se abrirán y que todo tendrá una evolución y un fluir linear, algo muy hegeliano porque
notarás como, en mi opinión, existe una dialéctica de progreso y de suceso, de contraposición a todo
lo que vives para crear algo nuevo.
Tu vida tío, no es nada más que tu ilusión y tu representación, nos lo dice Schopenhauer.
Dicho esto, espero que te haya ayudado a alargar tus horizontes en cualquier dirección, sea la de tus
problemas existenciales como la de tus problemas más superficiales.
Te quisiera recordar, para finalizar, que yo también lo he pasado varias veces chungo. Y que entre
todas las veces que la he pasado chungo he sacado solo la conclusión que ‘es así’, la vida es así y hay
que aceptarla. Me cuesta pero bueno, esto no es el matrix (o tal vez si.)

Me perdono por las faltas ortográficas que habrás podido notar, no he estudiado en escuelas
españolas entonces sorry tío. Ah, y también lo siento si a veces has notado como todo el contenido y
todo lo que escribía no tenía mucho un orden. Me pasa como a ti, tengo un desorden mental
increíble. James Joyce y Virginia Wolf también lo tenían, no te preocupes, investiga sobre el stream
of consciouscness (flujo de consciencia) y te sentirás especial por escribir de este modo.

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