Alumnos:
Esta es una de las conclusiones de la Primera Encuesta Virtual para Personas LGTBI que
realizó entre mayo y agosto del año pasado el Instituto Nacional de Estadística e
Informática (INEI). Se revela que, entre los encuestados, un 12% asegura que sufrió
algún tipo de discriminación en el trabajo. Además, entre el 39.2% de la población que
no asiste a la escuela, un 2.7% señala que no lo hace porque ha sido discriminado o
violentado en ese espacio por su identidad de género.
Llama la atención que la encuesta señale como los principales agresores de la
población LGTBI a los compañeros o padres de la escuela (55.8%), así como a los
líderes religiosos (42.7%), funcionarios públicos (32.7%) y hasta a la propia familia
(28%).
A. La población transgénero frecuentemente soporta un fuerte estrés, debido a
los habituales episodios de discriminación que sufren, incluso agresiones físicas
y verbales. La intervención por parte de las entidades del Estado es de vital
importancia, pues hay que preparar y enseñar a la sociedad conceptos éticos y
morales poniendo en práctica las leyes que rigen la defensa de estas personas.
B. Proponemos una ley que defienda los derechos universales de las personas
transgénero y, además, que permita a cualquier persona tener la libertad de
elegir su sexualidad teniendo acceso a las prácticas médicas y quirúrgicas
necesarias para les pueda permitir desarrollar su propia identidad y formar
parte de la sociedad de igual manera que todas las demás personas.
a) Beneficio esperado:
Con esta propuesta se pretende optimizar el numeral 2 del artículo 2° del
Título I, Capítulo I de la Constitución Política del Perú, el mismo que se señala
que toda persona tiene derecho “a la igualdad ante la ley. Nadie debe ser
discriminado por motivo de origen, raza, sexo, idioma, religión, opinión,
condición económica o de cualquiera otra índole.” En ese sentido,
planteamos que este artículo sea replanteado de modo que pueda sea
beneficioso para personas de toda opción sexual, y así puedan beneficiarse
de un respaldo ante la Constitución Política de su propio país.
3. CONCLUSIÓN
3.1. Consideramos que M1 es una medida políticamente correcta ya que
entra en concordancia con lo prescrito en la Constitución de nuestro pais y los
tratados internacionales que la respaldan.