Anda di halaman 1dari 29

INDICE

i
DEDICATORIA

Tras la certeza en la correcta elaboración objetiva de esta investigación, es


necesario la respectiva dedicatoria en nivel jerárquico de la misma; Es por eso que
dedico este proyecto en primer lugar a mis primos por el apoyo y la paciencia que han
tenido en todos mis retos personales y académicos; y por último mi familia que me
ayudo al desarrollo de mi educación.

ii
AGRADECIMIENTO

Especialmente y de manera primordial agradezco a Dios, por la oportunidad


para alcanzar los triunfos y éxitos que nos hemos propuesto en este satisfactorio
período académico.
A mis padres por apoyarme en todo este tiempo y acompañarme en los
momentos más difíciles.
A mis primos Martín y Paul les agradezco por estar conmigo cuando mas los
necesite.
María Paz Gómez Reascos.

iii
RESUMEN EJECUTIVO

La investigación siguiente trata de un tema fundamental que desde la década


de los 90 se ha convertido en un problema social de gran relevancia LA
DELINCUENCIA JUVENIL EN LAS DENOMINADAS PANDILLAS, estos grupos
urbanos que se han tomado las urbes de punta a punta y en las cuales han sembrado
olas de terror en cientos de países del mundo y hoy por hoy en el Ecuador, estos
grupos se han formado por otros problemas sociales ligados al fundamentalmente de
la delincuencia, como son los siguientes: los problemas intrafamiliares, la drogadicción,
el alcoholismo, la deserción escolar, el desempleo; que han desencadenado en los
siguientes delitos: el narcotráfico, el robo, el secuestro, la extorsión y la violación; que
tratamos paso a paso desde sus inicios hasta sus consecuencias finales en nuestra
investigación.
Es de suma importancia el estudio de este problema ya que día tras día se
reflejan las consecuencias en los sentimientos de inseguridad ciudadana y en el
porcentaje mayoritario de jóvenes envueltos en las redes de las pandillas juveniles e
inmersos en las futuras redes de la delincuencia organizada.

iv
PALABRAS CLAVE

delincuencia, adolescencia, delitos, pandillas ,inseguridad

KEY WORDS

delinquency , adolescence , crime, gangs, insecurity

v
vi
i
INTRODUCCIÓN

En este proyecto citamos una problemática social acaecida en los seres


sociales más vulnerables, los jóvenes, que principalmente mediante la creación de
pandillas juveniles afectan día tras día a la seguridad ciudadana mediante el
cometimiento de actividades ilícitas como el robo, el hurto y la venta de sustancias
estupefacientes y psicotrópicas; ya que según estadísticas de varios organismos
gubernamentales como la DINAPEN este fenómeno social va en aumento, y de
manera especial en Centros Educativos de segundo nivel de carácter público, que es
donde se encuentran la mayor cantidad de adolescentes infractores.
El siguiente proyecto está contemplado en tres capítulos
El Capítulo I INTEGRACIÓN DE JÓVENES A LA DELINCUENCIA JUVENIL

El Capítulo II sentencia de acuerdo a lo establecido del código penal

El Capítulo III CONCLUSIONES

1
1. JUSTIFICACIÓN DEL TEMA

La investigación que realizaremos tiene gran interés para la institución porque


los datos que se obtengan sobre los motivos del alto porcentaje de delincuentes
juveniles se evaluarán a nivel institucional y se tratará de contrarrestar el problema con
ayudas psicológicas y orientación familiar a los estudiantes que posean este problema,
el cual incida directamente en su aceptación social e integración a la sociedad, es decir
en esta investigación hacemos relevancia a los índices de inseguridad provocados por
la formación de pandillas juveniles dentro del territorio asignado, mediante los cuales
aportamos a la prevención de que nuevos integrantes formen parte de estos grupos
ilícitos.
Se investiga este problema por la incidencia de hoy en día en la mayoría de
jóvenes estudiantes, ya que en ellos el problema es de más fácil afectación y
desarrollo, sin embargo a pesar de que el problema crece cada vez más el principal
inconveniente del mismo es la desinformación que existe y que está a cargo de
docentes, padres de familia y otros entes intervinientes en la solución del problema.

2
2. PREGUNTAS, OBJETIVOS, SUPUESTOS DE INVESTIGACIÓN

2.1. PREGUNTAS DE INVESTIGACIÓN

a) ¿Cuáles son las causas primordiales para la integración de jóvenes a la


delincuencia juvenil?
b) ¿Qué tipo de delitos cometen los jóvenes cuando son miembros activos de
pandillas?
c) ¿Qué consecuencias existen conforme al mandato de la ley para los jóvenes
infractores?

2.2. OBJETIVO DE INVESTIGACIÓN

a) Dar a conocer las causas primordiales que generan la integración de jóvenes a la


delincuencia juvenil
b) Identificar las clases de delitos que cometen los adolescentes infractores cuando
son miembros activos de estas pandillas.
c) Informar que sentencias serán aplicadas a los jóvenes infractores

2.3. SUPUESTOS DE INVETIGACIÓN

a) Las causas primordiales para la integración de los jóvenes a la delincuencia juvenil


es por falta de atención de los padres y muchas veces por las personas que los
rodean.
b) Los delitos cometidos por los adolescentes que son miembros activos de pandillas
son: destrucción de propiedad, robo, sicariato, narcotráfico, etc.
c) El adolecente infracto se le impone la sentencia de acuerdo a lo establecido del
código penal y conforme señalado al código procedimiento penal.

3
CAPITULO I

1. INTEGRACIÓN DE JÓVENES A LA DELINCUENCIA JUVENIL

La delincuencia juvenil, al igual que la adulta, es fruto de diversas variables


que interactúan entre sí. No se puede atribuir a una causa concreta ni se puede
analizar de forma aislada. Por tanto, es un problema multidisciplinar y debe
explicarse desde muchos puntos de vista: el criminológico, el sociológico, el
psicológico, el educativo y el penal, entre otros muchos (Cerezo, 2016).

1.1. ASPECTOS
a) Aspecto Criminológico
¿Qué entendemos por delincuencia juvenil? El autor Hans Joachim Schneider
propone que “la delincuencia infantil y juvenil es un comportamiento que se
denominaría delito en el sentido jurídico-penal, si hubiera sido cometido por un
adulto”. Cito a este autor, en primer término porque, a diferencia de otros, hace una
distinción explícita entre delincuencia juvenil y criminalidad juvenil. Para Schneider, el
hecho de que en la infancia o la juventud se cometan actos delictivos no significa
necesariamente el inicio de una futura carrera delictiva. Mantiene la esperanza de
que estos comportamientos puedan ser temporales y episódicos. Cabe diferenciar
entre la conducta antisocial y la delincuencia juvenil. Un acto incívico o delictivo
puntual no significa que el joven sea delincuente o vaya a serlo. Sin embargo, hay
que estar atento para percibir el límite: dependerá de la acumulación de muchas de
esas conductas y de su gravedad. Ahí radicará el límite. En la mayoría de casos,
estas acciones no precisaran de intervención judicial. Y si la precisan, puede ser una
única vez. Esas conductas pueden ir desapareciendo. No así en otros casos: algunos
autores establecen que la edad del primer delito es un índice claro de probabilidad de
cometer posteriores delitos (Cerezo, 2016).

4
b) Aspecto Sociológico
No hay un retrato-robot del joven que comete acciones delictivas: su edad, su
procedencia social, su modelo educativo son bien diversos, no responden a una
pauta preestablecida. Las directrices de las Naciones Unidas para la 7 prevención de
la delincuencia juvenil (1990), acuñan un nuevo término: jóvenes en situación de
riesgo social. Hay unos factores de riesgo que pueden darnos pistas sobre los
jóvenes más susceptibles de caer en actuaciones delictivas. Puede darse la
circunstancia de que algunos jóvenes delincuentes hayan sobrepasado la mayoría de
edad penal y, sin embargo, no hayan alcanzado un desarrollo completo en su grado
de madurez. Por eso, se suelen considerar delincuentes juveniles todas aquellas
personas menores de 25 años. Sin embargo, sólo se aplicará la Ley del Menor a
aquellos que estén por debajo de los 18 años (Cerezo, 2016).
c) Aspecto Psicológico
Los jóvenes y adolescentes se encuentran aún en una fase de maduración. Han
dejado de ser niños pero aún no se les considera adultos. Este hecho conlleva un
sentimiento de inseguridad respecto a su posición en la sociedad que se traduce en
un intento de ser “como los mayores”. Al no conseguirlo, se derivan conductas
caprichosas, egoístas, impulsivas, exageradas, egocéntricas, etc. Cuando la
situación evoluciona en negativo, el menor, el adolescente, el joven, pueden
convertirse en agresores, en autores de infracciones penales o pueden desarrollar
comportamientos incívicos o indisciplinados (Cerezo, 2016).
d) Aspecto Educativo
El menor, adolescente o joven se forma atendiendo a los “imputs” que recibe,
tanto de su entorno familiar, en la escuela, por sus amigos y por otros aspectos
ambientales y hábitos. Muchos de estas circunstancias pueden convertirse en los
factores de riesgo antes mencionados.
A. La familia: las normas de disciplina y la relación con los padres juegan un papel
vital en el comportamiento social (en este caso, antisocial) del menor. Tan
perjudicial puede ser una actitud demasiado laxa y falta de interés de los
progenitores como una actitud autoritaria que merme la comunicación. 8

5
B. La escuela: el bajo rendimiento y el fracaso escolar favorecen la delincuencia. La
colaboración entre el centro y los progenitores es básica.
C. Las amistades: el contacto con “malas influencias” aumenta el riesgo, aunque el
menor proceda de un ambiente socializado. Los jóvenes tienden a imitar las
conductas más cercanas.
D. Factores ambientales y hábitos: sus formas de ocio (TV, videojuegos, Internet)
pueden fomentar la violencia y la agresividad, la incomunicación y la pérdida de
relaciones sociales. El consumismo o la diversión van desplazando al esfuerzo
(Cerezo, 2016).
e) Aspecto Penal
No todas las acciones delictivas acaban en un juzgado. Pero si implican medidas,
hay que distinguir entre dos de ellas: penales o administrativas. Las penales implican
la naturaleza penal de la norma infringida (Código Penal). Pueden dar lugar al
enjuiciamiento y a la imposición de sanciones de naturaleza penal. En el caso de los
menores de entre 14 y 18 años que cometan delitos y faltas se les aplica la LRRPM y
las sanciones que se imponen son “medidas”, no “penas” como en el caso de los
adultos. Pueden ser privativas de libertad o no, pero todas ellas comportaran un
contenido educativo Además, el artículo 61.3 de la mencionada Ley establece que la
responsabilidad civil por los daños y perjuicios causados por los menores alcanza
solidariamente a los padres, y tutores legales del menor. En cuanto a las infracciones
administrativas, se refieren al incumplimiento de normas administrativas (conducir un
coche sin la correspondiente licencia) y que dará lugar a una sanción administrativa
que, en ningún caso, puede ser privativa de libertad. Al no haber en Derecho
Administrativo una previsión expresa de la imputabilidad de los menores para cumplir
sanciones administrativas, se aplican subsidiariamente las normas penales de la
LORPM. Por ello, se permite imponer sanciones administrativas (multas) a los
menores a partir de los 14 años y se extiende la responsabilidad civil subsidiaria a los
representantes legales (Cerezo, 2016).

6
1.2. CAUSAS
Las principales causas sociales que provocan el pandillaje son las siguientes:
la familia y la educación, principalmente por la baja calidad de esta y problemas
intrafamiliares de gran envergadura. Por otro lado, existen también causas
económicas que provocan el mismo, como son las siguientes: la pobreza y el
desempleo. La pobreza causa que los jóvenes tengan carencia de bienes y es por
esta razón que en las pandillas encuentran dinero fácil por medio de robos, hurtos o
la distribución y venta de drogas; y por último el desempleo, que complementa la
pobreza ocasionando que el adolescente infractor participe en actividades ilícitas
como las antes mencionadas.

1.3. DELITOS COMETIDOS POR LOS JOVENES

El 48 por ciento de los hechos delictivos cometidos por los menores


delincuentes corresponde a delitos contra la propiedad. El 41 por ciento de esos delitos
contra la propiedad cometidos por los menores delincuentes corresponde a robo
simple; el 21 por ciento a hurto simple, el 17 por ciento a robo con armas y el 15 por
ciento a robo agravado (Carvajal, 2004).
Sobre la presunta influencia de las drogas entre los jóvenes delincuentes, el
estudio reveló que "sólo en el 3 por ciento de los casos eran consumidores habituales
de estupefacientes" (Carvajal, 2004).
Los chicos de 12 y 13 años sólo el 2,7 por ciento fue detenido por asalto, entre
los adolescentes de entre 16 y 17 años el porcentaje de causas por robo con armas
crece al 13,3 por ciento (Carvajal, 2004).

7
CAPITULO II

2. SENTENCIA DE ACUERDO A LO ESTABLECIDO DEL CÓDIGO PENAL

La responsabilidad jurídico-penal, consiste en la obligación que tiene un sujeto


imputable de sufrir las consecuencias derivadas de la perpetración de un hecho
socialmente peligroso y antijurídico. Se deduce entonces, que no a toda persona
puede exigírsele responsabilidad penal; sino únicamente cuando se trate de un sujeto
imputable por reunir ciertos requisitos tales como la capacidad de auto determinarse
(voluntad) y de comprender la ilicitud de sus actos (conciencia) (Cedeño, 2011).

CÓDIGO PENAL

Artículo 4.- Ámbito personal de aplicación.- Las normas de este Código serán
aplicadas de conformidad con las siguientes reglas:

1. Quienes no hayan cumplido dieciocho años de edad estarán sujetos al Código


de la Niñez y Adolescencia salvo el régimen especial previsto en este Código.

Artículo 6.- Clasificación de las infracciones.- A efectos de la determinación de los


procedimientos y las penas, las infracciones se clasifican en función de la gravedad
del bien jurídico lesionado o puesto en peligro, de conformidad con las siguientes
reglas:

1. Son infracciones penales muy graves las sancionadas con privación de libertad de
diecinueve a veintiocho años;

2. Son infracciones penales graves las sancionadas con privación de libertad de once
a diecinueve años;

3. Son infracciones penales medias las sancionadas con privación de libertad de cinco
a once años;

4. Son infracciones penales leves las sancionadas con de privación de libertad de seis
meses a cinco años; y,

5. Son levísimas, de primera, segunda, tercera, cuarta, quinta, sexta y séptima clases,
las infracciones penales sancionadas con privación de libertad de hasta seis meses,
penas no privativas de libertad o penas pecuniarias.

8
Artículo 17.- Legítima defensa y estado de necesidad.- La persona infractora no
será responsable penalmente en los siguientes casos:

1. Por legítima defensa, cuando defendiere cualquier derecho, propio o ajeno, siempre
y cuando se reúnan los siguientes requisitos:

a. Agresión actual e ilegítima;


b. Necesidad racional de repeler la agresión; y,
c. Falta de provocación suficiente por parte de quien actúa en defensa del derecho.

Artículo 18.- Circunstancias de excusa.- Son excusables el homicidio, las heridas y


los golpes, cuando son provocados por golpes, heridas u otros maltratamientos graves
de obra, o fuertes ataques a la honra o dignidad, inferidos en el mismo acto al autor
del hecho, o a su cónyuge, parientes dentro del cuarto grado de consanguinidad, o
segundo de afinidad.
Son igualmente excusables dichas infracciones cuando han sido cometidas
rechazando durante el día el escalamiento o fractura de los cercados, murallas, o
entradas de una casa habitada, o de sus dependencias; salvo que conste que el autor
del hecho no pudo creer en un atentado contra las personas, ya se atienda al propósito
directo del individuo que intentaba el escalamiento o fractura, o al efecto de la
resistencia que encontrarían las intenciones de éste.

Artículo 19.- Circunstancias atenuantes.- Son circunstancias atenuantes de la


infracción aquellas que disminuyen su gravedad y que deberán ser consideradas por
las juezas, jueces y tribunales de garantías penales a efecto de reducir la pena
correspondiente:

1. Conducta anterior de la persona infractora que revele claramente no tratarse de un


individuo peligroso;

2. Haber cometido infracciones penales contra la propiedad bajo la influencia de


circunstancias económicas apremiantes, personales o familiares.

Artículo 30.- Imputabilidad penal de las y los adolescentes en conflicto con la


Ley Penal.- Las y los adolescentes en conflicto con la ley penal, que hubieren cumplido
dieciséis años de edad al momento de cometer una infracción penal establecida en
este Libro, serán imputables penalmente.

Artículo 45.- Medidas socioeducativas.- Cuando la jueza, juez o tribunal de


garantías penales en la materia ha establecido la responsabilidad de una persona
adolescente en conflicto con la ley penal, deberá aplicar una o varias de las medidas
enunciadas a continuación, según las siguientes reglas:

1. Las medidas socio-educativas tienen como finalidad garantizar la educación del


adolescente en conflicto con la ley penal, su integración familiar y su inclusión

9
constructiva a la sociedad, además de promover el ejercicio de los demás derechos
de la persona. De igual modo, las medidas deben evitar la criminalización y la
reincidencia del adolescente en conflicto con la ley penal;

2. Para la aplicación de las medidas socioeducativas se considerará la edad del


adolescente y sus condiciones actuales de madurez y el desarrollo de sus
capacidades;

3. En ningún caso la imposición de una medida socio-educativa podrá afectar el


ejercicio del derecho a la educación del adolescente en conflicto con la ley penal;

4. Para los casos de infracciones detalladas en este libro sancionadas con pena
privativa de libertad de hasta un año, se aplicará obligatoriamente la medida de
amonestación y, según el caso concreto, la orientación y apoyo familiar hasta por tres
meses y servicios a la comunidad hasta por un mes;

5. Las medidas socio-educativas, con privación de libertad se aplicarán en relación con


el daño causado al bien jurídico protegido afectado;

6. Para los casos de infracciones sancionadas con pena privativa de libertad mayor de
uno y hasta de cinco años, la duración de la medida socio-educativa no será mayor a
un año;

7. Para los casos de tipos penales sancionados con privación de libertad mayor de
cinco y hasta once años, la duración de la medida socio-educativa no será mayor a
tres años;

8. Para los casos de tipos penales sancionados con privación de libertad mayor de
once y hasta diecinueve años, la duración de la medida socio-educativa no será mayor
a cinco años;

9. Para los casos de tipos penales sancionadas con privación de libertad de hasta
veintiocho años, la medida no será mayor a seis años de privación de libertad, que se
cumplirán en centros de adolescentes en conflicto con la ley penal, aún si la persona
cumple dieciséis años al ejecutarse la medida socio-educativa;

10. En los casos de reincidencia se aplicará el máximo de duración previsto para cada
medida socio-educativa. Así mismo, si la persona adolescente en conflicto con la ley
penal no ha cumplido la medida impuesta, por causas que le sean imputables, la
misma jueza o juez o tribunal de garantías penitenciarias especializado impondrá otra
medida según la gravedad de la causa;

11. Para la ejecución de las medidas socio-educativas, se deberá contar con la


asistencia técnica de personas especialmente capacitadas en temas de derechos de
la niñez y adolescencia; y,

10
12. Los representantes legales de la persona adolescente en conflicto con la ley penal
tienen la obligación de satisfacer de modo integral las reparaciones económicas.

CAPÍTULO CUARTO
DE LA REPARACIÓN INTEGRAL

Artículo 46.- Reparación integral.- La reparación integral comprenderá:

1. El restablecimiento del derecho lesionado al estado anterior a la comisión punible


de ser el caso;

2. La indemnización por los daños y perjuicios ocasionados;

3. La rehabilitación a través de la prestación de servicios idóneos a la víctima tales


como médicos, apoyo social o familiar, psicológicos o psiquiátricos; y,

4. Medidas de reconocimiento, disculpas públicas o publicación de la sentencia por


medios distintos a los ordinarios.

En los casos en los que las víctimas hayan sido efectivamente sujeto de reparación,
por la ejecución de una sentencia proveniente de una acción de carácter constitucional,
la jueza, juez o tribunal de garantías penales se abstendrá de aplicar como formas de
reparación las señaladas en este artículo.
Las obligaciones civiles derivadas de las infracciones, no se extinguen por la muerte
de la persona infractora y se regirán conforme a las reglas del Código Civil.

Artículo 47.- Reparación en sentencia condenatoria.- La sentencia condenatoria


que declare culpabilidad deberá contemplar la reparación integral de la víctima, de
conformidad con las siguientes reglas:

1. La víctima deberá ser identificable y concreta;

2. Si hubiere más de un responsable penal, la jueza, juez o tribunal de garantías


penales determinará la modalidad de la reparación en función de las circunstancias de
la infracción y grado de participación; y, si la misma hubiere sido dolosa o culposa;

3. Si la reparación fuere cuantificable en dinero se requerirá de prueba, para fijar el


monto correspondiente, salvo que aquella conste incorporada o presentada en el
proceso;

4. La obligación de reparar pecuniariamente a la víctima excluye la multa, comiso


especial y otras obligaciones de la persona penalmente responsable;

5. La jueza, juez o tribunal de garantías penales podrá determinar, si voluntariamente


lo aceptaren la persona sentenciada y la víctima, las modalidades de pago;

11
6. En ningún caso la modalidad del pago de la reparación pecuniaria podrá llevar a la
persona sentenciada al estado de necesidad de sí misma o de su familia; y,

7. Si la publicación de la sentencia condenatoria fuere el medio idóneo para reparar a


la víctima, la misma correrá a costa de la persona sentenciada.

CAPÍTULO QUINTO
DE LA APLICACIÓN DE LA PENA

Artículo 48.- Pena por infracción dolosa preterintencional.-En la infracción penal


dolosa preterintencional la pena se reducirá hasta un tercio, dependiendo de la
gravedad del resultado.

Artículo 49.- Pena en error de prohibición.- De existir responsabilidad penal y


comprobarse error vencible del hecho constitutivo de la infracción, la pena será
atenuada hasta un máximo de dos tercios de la que se hubiere impuesto.

Artículo 50.- Pena por tentativa.- Si la persona infractora desistiere voluntariamente


del acto punible, la pena a imponerse será de hasta la cuarta parte de la que
corresponda si la infracción se hubiere consumado.

Se disminuirá la pena hasta dos tercios si la persona infractora impidiere, por los
medios a su alcance, la producción del resultado. Si no lo consiguiere o lograre
disminuir el daño, la pena podrá disminuirse en un tercio.

Artículo 51.- Atenuación de la pena.- Si existieren dos o más circunstancias


atenuantes y ninguna agravante, la pena máxima privativa de libertad no podrá ser
mayor a las dos terceras partes de la pena establecida en el tipo penal
correspondiente.

Artículo 52.- Agravación de la pena.- Si existiere una o más circunstancias


agravantes no constitutivas de la infracción, la pena máxima privativa de libertad se
aumentará en un tercio respecto de la máxima prevista para la infracción penal, que
en ningún caso superará los treinta y cinco años de privación de libertad.

Artículo 53.- Pena por complicidad.- La persona cómplice de una infracción penal
será sancionada con la mitad de la pena que se le hubiere impuesto en caso de ser
autora de la infracción.

Artículo 54.- Pena por encubrimiento.- La persona encubridora de una infracción


penal será sancionada con la cuarta parte de la pena aplicable al autor de la infracción,
pero en ningún caso ésta excederá de dos años de privación de libertad.

12
CAPÍTULO SEXTO
DE LA EXTINCIÓN Y PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN Y LA PENA

Artículo 55.- Extinción de la acción penal.- La acción penal se extingue en los


siguientes casos:

1. Muerte de la persona infractora;

2. Amnistía;

3. Perdón de la parte ofendida en las infracciones de acción privada;

4. Acuerdo reparatorio y aplicación del principio de oportunidad por parte de la Fiscalía;


y,

5. Prescripción.

Artículo 56.- Prescripción de la acción penal.- La prescripción podrá ser declarada


por la jueza, juez o tribunal de garantías penales, de oficio o a petición de parte. La
prescripción operará en el tiempo y condiciones que se establecen en este Libro.

Respecto de las infracciones que no se hubiere iniciado proceso penal se seguirán las
siguientes reglas:
1. La acción penal en las infracciones de acción pública prescribirá en el mismo tiempo
de la máxima sanción del tipo penal, contados desde que la infracción fue cometida,
salvo que se exprese una regla especial al respecto;

2. En las infracciones de acción privada la acción para perseguirlos, prescribirá en el


plazo de ciento ochenta días, contados desde que la
infracción fue cometida. Iniciada la acción y citado el querellado antes del vencimiento
de ese plazo, la prescripción se producirá transcurridos dos años a partir de la fecha
de la citación de la querella;

3. La prescripción de la acción en el caso de infracciones levísimas será de noventa


días, contados desde que la infracción fue cometida;

4. En los procesos seguidos contra adolescentes presuntamente en conflicto con la ley


penal, la acción penal prescribirá en dos años cuando se trate de infracciones graves
y gravísimas; en un año cuando se trate de infracciones medias y leves; y, en ciento
ochenta días en las levísimas;

5. La prescripción se aplicará separadamente, para cada una de los partícipes de la


infracción; y,

13
6. Si la prescripción hubiere operado por falta de despacho oportuno de las y los
servidores judiciales, éstos serán sancionados de acuerdo a lo previsto en ley de la
materia.

De haberse iniciado el proceso penal, la prescripción de la acción operará en los plazos


señalados en los numerales 1, 2 y 3 de este artículo; y, serán contados desde la fecha
de inicio del respectivo proceso.
La acción penal por infracciones sancionadas sólo con una multa se extinguirá en
cualquier estado del juicio, por el pago voluntario del máximo de la multa
correspondiente a la infracción, y las indemnizaciones, en los casos que hubiere lugar.

No prescribirá la acción penal en las infracciones de agresión de un Estado contra otro,


genocidio, lesa humanidad, desaparición forzada de personas y crímenes de guerra,
infracciones graves a los derechos humanos; enriquecimiento privado no justificado,
peculado, cohecho, concusión, enriquecimiento ilícito; e, infracciones contra el medio
ambiente y el patrimonio cultural.

Artículo 59.- Prescripción de la pena.- Las penas y las medidas socioeducativas o


de seguridad prescribirán de conformidad con las siguientes reglas:

1. Las penas privativas de libertad prescribirán en un tiempo igual al de la condena;

2. La prescripción comenzará a correr desde el día en que la sentencia quedare


ejecutoriada;

3. Las medidas socioeducativas privativas de libertad dictadas contra los adolescentes


en conflicto con la ley penal prescriben en cuatro años, cuando la medida fuere mayor
de este tiempo;

4. La prescripción se interrumpirá cuando a la persona sancionada se le imponga una


nueva pena o medida socioeducativa o de seguridad privativas de libertad; y,

5. No prescribirán las penas impuestas por infracciones de agresión de un Estado a


otro, genocidio, lesa humanidad, desaparición forzada de personas y crímenes de
guerra, así como en las demás infracciones de agresión de un Estado contra otro,
genocidio, lesa humanidad, desaparición forzada de personas y crímenes de guerra,
infracciones graves a los derechos humanos; enriquecimiento privado no justificado,
peculado, cohecho, concusión, enriquecimiento ilícito; e, infracciones contra el medio
ambiente y el patrimonio cultural.

Artículo 77.- Homicidio.- La persona que provoque la muerte de otra persona será
sancionada con pena privativa de libertad de once a quince años.

Artículo 79.- Asesinato.- Quien provoque la muerte de otra, será sancionada con
pena privativa de libertad de diecinueve a veinticinco años, si concurrieran en alguna
de las siguientes circunstancias:

14
1. Colocar a la víctima en situación de indefensión, inferioridad o aprovechándose de
ésta situación;

2. Provocar inundación, envenenamiento, incendio o descarrilamiento;

3. Buscar la noche o el despoblado;

4. Utilizar medio o medios capaces de causar grandes estragos;

Artículo 80.- Sicariato.- La persona que provoque la muerte de otra por precio, pago,
recompensa o promesa remuneratoria, será sancionada con pena privativa de libertad
de veinticinco a veintiocho años.

Artículo 145.- Hurto.- Quien sin voluntad de su dueño, se apodere de cosa mueble
ajena, será sancionado con pena privativa de libertad de seis meses a un año. Para la
determinación de la pena se tomará en cuenta el valor de la cosa al momento del
apoderamiento.
Si el valor de lo hurtado supera las cinco remuneraciones básicas unificadas del
trabajador privado en general, siempre y cuando se pueda determinar su valor al
momento del apoderamiento, será sancionada con pena privativa de libertad de uno a
tres años.
Si el autor del hurto, atrapado en el momento de la ejecución, ejerce violencia contra
las personas para conservar la posesión del bien hurtado, será sancionado con pena
privativa de libertad de tres a cinco años.
En caso de que lo sustraído no supere una remuneración básica unificada del
trabajador privado en general, bastará con la reparación económica inmediata; en caso
de que fuese imposible dicha reparación, se aplicará la pena no privativa de la libertad
de servicio comunitario. Este caso se sustanciara mediante el procedimiento expedito.
En caso de reincidencia la persona infractora será sancionada con el máximo de la
pena.

Artículo 151.- Robo.- Quien sin voluntad de su dueño, arranche o se apodere de cosa
mueble ajena, cuando empleare amenaza o violencia contra la integridad física o vida
de otra, será sancionado con pena privativa de libertad de tres a cinco años, siempre
que no se aplicare una pena mayor.
Cuando el robo se produjere únicamente con fuerza en las cosas, será sancionado
con pena privativa de libertad de uno a tres años.
Si la infracción se ejecuta utilizando sustancias estupefacientes y psicotrópicas, con el
fin de someter a la víctima, de dejarla en estado de somnolencia, inconsciencia o
indefensión, o para obligarla en este estado a ejecutar actos que, con conciencia y
voluntad no los habría ejecutado, el infractor será sancionado con pena privativa de
libertad de cinco a siete años.

Las mismas penas serán impuestas, dependiendo de las circunstancias de la


infracción, a las personas que coadyuven dolosamente en el agotamiento de la
infracción, a través de acciones que permitan a los autores de tales conductas
beneficiarse de los resultados de las mismas.
15
Si producto del robo se ha ocasionado lesiones leves o medias será sancionado con
pena privativa de libertad de cinco a siete años; cuando las lesiones son graves o muy
graves será sancionado con pena privativa de libertad de siete a nueve años.
Si producto del robo se ha ocasionado la muerte la pena privativa de libertad será de
veinticinco a veintiocho años

En caso de que lo robado no supere una remuneración básica unificada del trabajador
privado en general, bastará con la reparación económica inmediata; en caso de que
fuese imposible dicha reparación, se aplicará la pena no privativa de la libertad de
servicio comunitario. Este supuesto se sustanciara mediante el procedimiento
expedito. En caso de reincidencia se sancionará con el máximo de la pena.

CÓDIGO DE LA NIÑEZ Y ADOLESCENCIA


LIBRO CUARTO
RESPONSABILIDAD DEL ADOLESCENTE INFRACTOR
TITULO I
DISPOSICIONES GENERALES

Art. 305.- Inimputabilidad de los adolescentes.- Los adolescentes son penalmente


inimputables y, por tanto, no serán juzgados por jueces penales ordinarios ni se les
aplicarán las sanciones previstas en las leyes penales.

Art. 306.- Responsabilidad de los adolescentes.- Los adolescentes que cometan


infracciones tipificadas en la ley penal estarán sujetos a medidas socio-educativas por
su responsabilidad de acuerdo con las preceptos del presente Código.

Art. 307.- Inimputabilidad y exención de responsabilidad de niños y niñas.- Los


niños y niñas son absolutamente inimputables y tampoco son responsables; por tanto,
no están sujetos ni al juzgamiento ni a las medidas socio-educativas contempladas en
este Código.
Si un niño o niña es sorprendido en casos que puedan ser considerados de flagrancia
según el artículo 326, será entregado a sus representantes legales y, de no tenerlos,
a una entidad de atención.

Se prohíbe su detención e internación preventiva.


Cuando de las circunstancias del caso se derive la necesidad de tomar medidas de
protección, éstas se tomarán respetando las condiciones y requisitos del presente
Código.

Art. 308.- Principio de legalidad.- Los adolescentes únicamente podrán ser juzgados
por actos considerados como delitos por la ley penal con anterioridad al hecho que se
le atribuye y de acuerdo al procedimiento establecido en este Código.
No se podrán tomar medidas si existen causas eximentes de responsabilidad según lo
establecido en el Código Penal.

16
Art. 319.- Garantías de proporcionalidad.- Se garantiza al adolescente infractor la
debida
proporcionalidad entre la infracción atribuida y la medida socio-educativa aplicada.

Art. 320.- Cosa juzgada.- Cualquier forma de terminación del proceso impide una
nueva
investigación o juzgamiento por el mismo hecho, aunque se modifique su calificación
legal o se conozcan nuevas circunstancias. En consecuencia, ningún adolescente
podrá ser juzgado más de una vez por la misma causa.

Art. 321.- Excepcionalidad de la privación de la libertad:


La privación de la libertad del adolescente sólo se dispondrá como último recurso, por
orden escrita del Juez competente, en los casos, por el tiempo y con las formalidades
prescritas por la ley. El internamiento preventivo podrá ser revocado en cualquier etapa
del proceso, de oficio o a petición de parte.

Art. 322.- Separación de adultos.- El adolescente que se encuentre detenido,


internado preventivamente o cumpliendo una medida de privación de libertad, lo hará
en centros especializados que aseguren su separación de los adultos también
detenidos.

TITULO IV
DEL JUZGAMIENTO DE LAS INFRACCIONES
Capítulo I
La acción y los sujetos procesales

Art. 334.- Clases de acción.- La acción para el juzgamiento del adolescente infractor
es de dos clases: pública de instancia oficial y pública de instancia particular de
acuerdo con el Código de Procedimiento Penal. Tratándose de infracciones de acción
privada, se las tratará como de acción pública de instancia particular, para las
indemnizaciones civiles procederán sin necesidad de acusación particular. No se
admite acusación particular en contra de un adolescente.

CAPÍTULO I
DISPOSICIONES GENERALES

Art. 369.- Finalidad y descripción.- Las medidas socioeducativas son acciones


dispuestas por autoridad judicial cuando ha sido declarada la responsabilidad del
adolescente en un hecho tipificado como infracción penal. Su finalidad es lograr la
integración social del adolescente y la reparación o compensación del daño causado.
Las medidas socioeducativas que el Juez puede imponer son las siguientes:
1. Amonestación.- Es una recriminación verbal, clara y directa del Juez al adolescente
infractor y a sus progenitores o representantes, para que se comprenda la ilicitud de
las acciones;
17
2. Amonestación e imposición de reglas de conducta.- Es la recriminación descrita
en el numeral anterior, acompañada de la imposición de obligaciones y restricciones
de conducta, para que se comprenda la ilicitud de las acciones y se modifique el
comportamiento de cada involucrado, a fin de conseguir la integración del adolescente
a su entorno familiar y social;
3. Orientación y apoyo familiar.- Consiste en la obligación del adolescente y sus
progenitores o representantes, de participar en programas de orientación y apoyo
familiar para conseguir la adaptación del adolescente a su entorno familiar y social;
4. Reparación del daño causado.- Esta medida consiste en la obligación del
adolescente de restablecer el equilibrio patrimonial afectado con la infracción,
mediante la reposición del bien, su restauración o el pago de una indemnización
proporcional al perjuicio provocado;
5. Servicios a la comunidad.- Son actividades concretas de beneficio comunitario
que impone el Juez, para que el adolescente infractor las realice sin menoscabo de su
integridad y dignidad ni afectación de sus obligaciones académicas o laborales,
tomando en consideración sus -aptitudes, habilidades y destrezas, y el beneficio socio-
educativo que reportan;
6. Libertad asistida.- Es un estado de libertad condicionada al cumplimiento de
directrices y restricciones de conducta fijadas por el Juez, sujeta a orientación,
asistencia, supervisión y evaluación;
7. Internamiento domiciliario.- Consiste en una restricción parcial de la libertad por
la que el adolescente infractor no puede abandonar su hogar, excepto para asistir al
establecimiento de estudios o de trabajo;
8. Internamiento de fin de semana.- Es una restricción parcial de la libertad en virtud
de la cual el adolescente está obligado a concurrir los fines de semana al centro de
internamiento para cumplir las actividades de su proceso de reeducación, lo que le
permite mantener sus relaciones familiares y acudir normalmente al establecimiento
de estudios o de trabajo;
9. Internamiento con régimen de semi-libertad.- Consiste en la restricción parcial
de la libertad por la que el adolescente infractor es internado en un centro de
internamiento de adolescentes infractores, sin impedir su derecho a concurrir
normalmente al establecimiento de estudio o de trabajo; y,
10. Internamiento institucional.- Es la privación total de la libertad del adolescente
infractor, que es internado en un centro de internamiento de adolescentes infractores.
Esta medida se aplica únicamente a adolescentes infractores mayores a catorce años
de edad y por infracciones que en la legislación penal ordinaria son sancionadas con
reclusión. A los adolescentes menores a catorce años, se les aplicará únicamente en
los delitos de asesinato, homicidio, violación, plagio de personas y robo con resultado
de muerte.

Art. 370.- Aplicación de las medidas.- La resolución que establezca la


responsabilidad de un adolescente por un hecho tipificado como infracción penal,
deberá imponerle una o más de las medidas socio-educativas descritas en el artículo
anterior, observando, en todos los casos, el principio de proporcionalidad contemplado
en el artículo 319, según la siguiente distinción:
1. Para los casos de contravenciones, se aplicará obligatoriamente la medida de
amonestación y una o más de las siguientes medidas:
18
a) Amonestación e imposición de reglas de conducta, de uno a tres meses;
b) Orientación y apoyo familiar; de uno a tres meses;
c) Servicios a la comunidad, de siete días a un mes; y,
d) Internamiento domiciliario, de siete días a tres meses.
2. Para los casos de infracciones que en la legislación penal ordinaria son sancionadas
con prisión, se aplicará obligatoriamente la medida de amonestación y una o más de
las siguientes medidas:
a) Amonestación e imposición de reglas de conducta de uno a seis meses;
b) Orientación y apoyo familiar, de tres a seis meses;
c) Servicios a la comunidad; de uno a seis meses;
d) Libertad asistida, de tres meses a un año;
e) Internamiento domiciliario, de tres meses a un año;
f) Internamiento de fin de semana, de uno a seis meses; y,
g) Internamiento con régimen de semi libertad, de tres meses a dos años.
3. Para los casos de infracciones que en la legislación penal ordinaria son sancionadas
con reclusión, se aplicará obligatoriamente la medida de amonestación y una o más
de las siguientes medidas:
a) Libertad asistida hasta por 12 meses;
b) Internamiento con régimen de semi libertad hasta por 24 meses; y,
c) Internamiento institucional, hasta por cuatro años.

Los adolescentes, cuya medida de internamiento institucional exceda de 24 meses,


tienen derecho a beneficiarse de la rebaja del tiempo por buen comportamiento, de
modo que cada día del cual se pueda certificar su buen comportamiento y
aprovechamiento en el estudio, en la capacitación laboral y en el trabajo, se cuente
como dos. Esta certificación deberá suscribirse por el Director y el Secretario del
Equipo Técnico del centro de internamiento, y será remitida al Juez cada mes.

Art. 371.- Modificación o sustitución de las medidas socioeducativas.- El Juez


podrá modificar o sustituir las medidas socio-educativas impuestas, siempre que exista
informe favorable del Equipo Técnico del centro de internamiento de adolescentes
infractores, y se dé alguna de las siguientes circunstancias:
a) Cuando el adolescente cumpla dieciocho años, si ya ha cumplido la mitad del tiempo
señalado en la medida;
b) Cuando el Director del centro de internamiento de adolescentes infractores lo
solicite; y,
c) Cada seis meses, si el adolescente o su representante lo solicitan.

Art. 372.- Reincidencia e incumplimiento de la medida.- En los casos de


reincidencia se aplicará el máximo de duración previsto en el artículo 370 para cada
medida. Así mismo, si el adolescente no ha cumplido la medida impuesta, por causas
que le sean imputables, el mismo Juez impondrá otra medida según la gravedad de la
causa.
En caso de incumplimiento de las medidas establecidas en los numerales 1, 2, 3, 4 y
5 del
artículo 369 de este Código, no se podrá imponer las medidas establecidas en los
numerales 8 y 9; y de incumplimiento de las medidas de los numerales 6, 7 y 8 del
19
mismo artículo, se podrá aplicar la medida superior, excepto el internamiento
institucional.

Art. 373.- Resarcimiento de daños y perjuicios.- Una vez ejecutoriada la resolución


que aplica la medida socio-educativa, la persona agraviada por la infracción tendrá
derecho a demandar el resarcimiento de los daños y perjuicios provocados, de
conformidad con las reglas generales.

Art. 374.- Prescripciones.- Tratándose de delitos, la acción prescribe en dos


años.- En las contravenciones, prescribe en treinta días.
Las medidas socio-educativas prescriben una vez transcurrido el tiempo señalado por
el Juez para su duración.

Art. 375.- Apreciación de la edad del adolescente.- Para la aplicación de las


medidas socio-educativas, se considerará la edad que tenía el adolescente a la fecha
de la infracción.

TITULO VI
LA PREVENCIÓN DE LA INFRACCION PENAL DE ADOLESCENTES

Art. 387.- Corresponsabilidad del Estado y de la sociedad civil.- Es


responsabilidad del Estado y de la sociedad definir y ejecutar conjuntamente las
políticas, planes, programas y acciones encaminados a la formación integral de los
adolescentes y a la prevención de infracciones de carácter penal, y destinar los
recursos necesarios para ello.

Art. 388.- Supervisión del Consejo Nacional de la Niñez y Adolescencia.- El


Consejo Nacional de la Niñez y Adolescencia supervisará y evaluará el cumplimiento
de lo dispuesto en el artículo anterior.

Art. 389.- Derogatorias.- Deróganse los siguientes cuerpos y disposiciones legales:

1. El Código de Menores: Ley 170.PCL.RO-S 995 de 7 de agosto de 1992; y demás


regulaciones reglamentarias derivadas del referido Código.
2. El Reglamento General al Código de Menores: DE 2766.RO 711 de 7 de junio de
1995.

20
CAPITULO III

3. CONCLUSIONES

3.1. CONCLUSIONES DE LAS PREGUNTAS, OBJETIVOS Y SUPUESTOS DE


INVESTIGACIÓN

Al iniciar la monografía deduje que as causas primordiales para la integración de


los jóvenes a la delincuencia juvenil es por el medio en el que están rodeados, las
influencias que tienen tanto en el colegio como en el hogar y la economía influye mucho
en esto ya que muchos adolescentes no tienen lo necesario para vivir bien o tener un
sitio estable donde vivir ya que todo esto se basa a su baja economía.

Los delitos cometidos por los adolescentes que son miembros activos de pandillas son
la mayoría de veces por daños a la propiedad, robo y en menor cantidad por contener
estupefacientes.

El adolecente infracto se le impone la sentencia de acuerdo a lo establecido del código


penal y conforme señalado al código procedimiento penal

3.2. CONCLUSIONES GENERALES

Al concluir esta investigación pude observar que las pandillas juveniles inician con
jóvenes que comparten un círculo de amistades con personas que están inmersas en
ese mundo es por este aspecto que cada vez más hay jóvenes integrantes de estas
pandillas.

Fenómenos como el narcotráfico y el alcoholismo inician en adolescentes que forman


parte de estas pandillas y que son consecuentes en el cometimiento de actividades
ilícitas.

21
DOCENTE DE INVESTIGACIÓN

Quito, a 09 de mayo de 2016

Msc. Christian Palacios


VICERRECTOR
UNIDAD EDUCATIVA DE LA INMACULADA – QUITO

Reciba un cordial saludo. El motivo de la presente es para manifestarle que garantizo


la coherencia metodológica en base a las normas A.P.A., de la Monografía de la señorita MARÍA PAZ
GÓMEZ REASCOS, del TERCERO DE BACHILLERATO “B”, con el título LA DELINCUENCIA JUVENIL EN
LAS DENOMINADAS PANDILLAS.

En fe de lo cual firmo;

MAURICIO GUERRA
MAGÍSTER

22

Anda mungkin juga menyukai