BOGSAT / la responsabilidad Eduardo Molinari / Archivo Caminante

B.O.G.S.A.T.
La responsabilidad

Eduardo Molinari / Archivo Caminante

2· ·3

B.O.G.S.A.T.
La responsabilidad

1. Las agendas moleculares: régimen de visibilidad y agenda del agronegocio / AC

Las agendas rotas 5
Etología del capital 11

Soja Bonus Track / Azul Blaseotto 29

2. Los drones transgénicos: una máquina ciega e invisible / AC

Un monstruo americano en la mira 43
Bolsas en un camión sojero 44

El experimento neofeudal / Ala Plástica 51

Ypy / Hernán Cardinale 65

3. La mesa: responsabilidades en el modelo transgénico / AC

Un zángano en la sopa 77
La ciudad de mis sueños 81

ArGENtina: la patria transgénica / Ana Bróccoli 89

4. La tierra es la vida: transitando senderos / AC 107

English texts 145

6· ·7

1.
por AC
LAS AGEndAS
MOLECuLArES
réGiMEn dE viSiBiLidAd y AGEndA dEL AGrOnEGOCiO

“Este hecho tautológico de la auto-evidencia ha sido una bendición para

la fotografía, pero también ha importunado su compleja transmisión en
la imaginación pública, porque lo que la foto propone en la unión entre
sus imágenes y representaciones es minado por dos principios: primero,
la veracidad y fiabilidad de la imagen fotográfica y, segundo; la lógica
circulatoria de la imagen –cómo lo que podríamos llamar sus espacios
discursivos se relacionan con e igualan con las formas de conocimiento
que la fotografía produce–. [...] Las imágenes de conflicto se han conver-
tido en más que instrumentos en la formación de opinión; se han vuelto
dientes en las ruedas de la percepción social de conflictos mediados y
mediatizados. [...] ¿Qué beneficio de conocimiento entonces se acumula
en la percepciones públicas del conflicto? ¿Quién controla el régimen de
visibilidad de la foto y sus espacios discursivos? 1

Amigos cenando en la vereda. Una hermosa noche, vino y pescado.

La conversación se enfoca. Días atrás, a comienzos de mayo de 2010,
el proyecto colectivo de investigación con métodos artísticos Principio
Potosí ¿Cómo podemos cantar el canto del Señor en tierra ajena?2 inau-
guraba en el Museo Centro Nacional de Arte Reina Sofía
de Madrid, España, la primera exposición de su itineran-

LAS cia, que lo llevaría luego a Berlín y a La Paz. Para algu-

nos de los comensales (yo mismo) la inauguración de una
AGEndAS muestra de arte contemporáneo significaba el comienzo de

rOTAS un proceso vital, la posibilidad de que el trabajo realiza-

do encontrara nuevos interlocutores e interacciones en la
comunidad. Para otros, esta fluidez entre arte y sociedad
era mucho más un anhelo que una realidad. En el marco
de la recordación del bicentenario de las revoluciones que en Suda-
mérica iniciaron procesos de independencia de la Corona Española en
el siglo XIX, la continuación de los procesos de descolonización y de
lucha contra la hegemonía neoliberal dominante en el siglo XXI esta-
ban en centro del diálogo y de los desafíos enfrentados conjuntamente
en Principio Potosí. Uno de los ejes centrales del proyecto era el se-
ñalamiento de la existencia de una maquinaria industrial de produc-
ción de imágenes al servicio de la empresa colonialista de conquista y
sometimiento a cargo de la Corona Española de entonces. Sin embargo,

1 Okwi Enwezor, Image counter Image, Foreword, Haus der Kunst / Verlag der Buch-
handlung Walther König, Köln, 2012.
2 www.potosiprincipleprocess.wordpress.com
8·
podemos hoy encontrar un paralelismo entre dicha maquinaria y el
actual sistema de arte contemporáneo, legitimador de aquélla élite
transnacional que se beneficia, día a día, con la hegemonía del actual
capitalismo financiero, postindustrial, extractivista y semiótico.
Los niños de la soja.
Montaje.
Museo Reina Sofía,
Madrid, 2010. Foto AC.
En nuestra experiencia colectiva puntual, sin embargo, un dato re-
sultaba insoslayable a la hora de analizar tácticas y estrategias al inte-
rior de las industrias culturales hegemónicas, prácticas que a muchos
historiadores del arte y teóricos les gusta llamar como arte político.
Nuestra exposición había inaugurado sin que fuera posible la circu-
lación del libro-catálogo que documentaba nuestro trabajo y nuestras
voces. Una amargo sabor nos había quedado aquél día: tanto nosotros
como el público se había retirado de la sala, en este sentido, con las
manos vacías. La disputa por el control del relato, la administración y
gestión de las voces de los participantes, y los conocimientos genera-
dos, se hicieron evidentes con esta ausencia. Algo parecía que no debía
verse ni decirse. Algo no debía circular en Madrid en esa fecha.
Guardo de aquélla cena una imagen útil para introducir mi actual
trabajo para en la exposición Monday begins on Saturday, en la Bergen
Assembly. Con seguridad, el día de la inauguración de una muestra
de tal magnitud es el comienzo de algo intenso. Sin embargo, en la
agenda de M., director del Museo Reina Sofía, parecía terminar. Casi
con seguridad podríamos ver que en su agenda ha sido tachado de sus
páginas o arrojado a la papelera de su teléfono móvil.
·9
“¿Con qué anotaciones, citas y bocetos nos encontraríamos hoy si pu-
diéramos leer las agendas con las que el capital organiza sus objetivos?
¿Cuáles de esos mensajes nos permitirían conocer mejor sus planes? Visi-
bilizar, intervenir y desordenar estas agendas hegemónicas es un objetivo
central del proyecto. No obedecerlas pasivamente y soltarse de su crono-
logía para crear y habitar otro tiempo, nuestro tiempo.”3
El concepto de hegemonía planteado por Antonio Gramsci como
herramienta de construcción política, la “capacidad de unificar a tra-
vés de la ideología y de mantener unido a un bloque social, que sin em-
bargo, no es homogéneo, sino marcado por profundas contradicciones de
clase”4 había sido dejado de lado por la casi mayoría de las prácticas
políticas y culturales resistentes al neoliberalismo durante la década
del ´90 en Argentina. El desinterés por disputar el poder estatal lle-
gaba a su pico durante la crisis del 2001 y su máxima expresión fue
la consigna en boca de los manifestantes durante las jornadas del
19 y 20 de Diciembre de aquél año: “¡Qué se vayan todos!”. Profunda
crisis de representación política que, sin embargo, poseía su reverso:
una construcción social, política y cultural basada en un entramado
transversal, autogestión y territorialidad, la ocupación y creación de
espacios, tiempos y lazos comunitarios. Construcción encarnada (aún
hoy con enorme potencialidad) en las organismos de derechos huma-
nos, Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, HIJOS, la Mesa de Escrache,
organizaciones de trabajadores desempleados, cartoneros, fábricas
recuperadas, comunidades originarias, colectivos artísticos, radios y
canales de televisión comunitarias, asociaciones en lucha por los de-
rechos de distintas identidades sexuales.
A partir de la llegada de Néstor Kirchner al gobierno, el 25 de mayo
de 2003, algo cambió. Durante la década 2003-2013, la fuerza política
liderada por Néstor y Cristina Kirchner desplegó un inesperado proce-
so de enorme intensidad, en sintonía con una renovación de los go-
biernos y el fortalecimiento de los lazos entre los países de la región.
El Kirchnerismo vuelve a politizar la vida cotidiana, a partir de una re-
vitalización del protagonismo de las políticas públicas, de la interven-
ción estatal para diseñar políticas de inclusión y redistribución de la
riqueza. Estableciendo un diálogo con todos los actores sociales antes
nombrados pudo afirmarse en el gobierno, a partir de un conjunto de
triunfos electorales solamente empañados con la derrota del año 2009,
al calor del conflicto con las patronales agropecuarias de 2008, luego de
3 Azul Blaseotto, Santiago Fredes, Eduardo Molinari, Gabriel Serulnicoff, Valeria
Serué. Texto de presentación del proyecto Hegemonía. Desordenando las agendas
del capital, en La Dársena_Plataforma de Pensamiento e Interacción Artística, Bue-
nos Aires, Argentina, 2011 - 2013. www.plataformaladarsena.blogspot.com.ar
4 Antonio Gramsci. El materialismo histórico y la filosofía de Benedetto Croce, Juan
Pablos Editor, México, 1975.
10·
intentar aumentar las retenciones a las exportaciones sojeras. Néstor
primero y Cristina luego, han podido llevar adelante una agenda que
incluye el juzgamiento y el envío a prisión común y efectiva de los
genocidas responsables de la última dictadura, la creación de centros
de la memoria en los antiguos centros clandestinos de detención, el
rechazo al ALCA (iniciativa de EE.UU. de articular una alianza comer-
cial continental), el pago de la deuda al FMI, la re-estatización de em-
presas estatales emblemáticas (YPF-Yacimientos Petrolíferos Fiscales,
Aerolíneas Argentinas, AYSA, a cargo del suministro de agua potable).
También se ha re-estatizado el sistema jubilatorio y se ha creado la
Asignación Universal por Hijo (AUH), generando una contención so-
cial impensable en la década del 90.
Plaza de Mayo,
25 de Mayo de 2013.
Buenos Aires, Argentina.
Foto AC.
Nestor Kirchner
Evo Morales, Lula y
Hugo Chavez. 2010.
El retorno de la juventud a la militancia política permite desplegar
lo que una oposición crispada define como “el relato K”, una narra-
tiva que interpreta el pasado, presente y futuro del país y la región.
Este relato da lugar a una batalla cultural, revalorizando figuras y
pensamientos nacionales y populares en pos de la construcción de
la Patria Grande, cuyas expresiones político-institucionales más no-
torias son la revitalización del MERCOSUR-Mercado Común del Sur
(existente desde 1991), la creación de UNASUR-Unión de Naciones
Suramericanas (creada en 2008, cuyo primer Secretario General fue
Néstor Kirchner hasta su muerte en 2010) y la CELAC-Comunidad de
Estados Latinoamericanos y Caribeños, en 2010. Esta batalla también
ha incluido el reconocimiento de los derechos civiles de las diversas
·11
identidades sexuales. A través de la Ley de Servicios de Comunicación
Audiovisual se busca poner límites a los intereses monopólicos de las
grandes corporaciones mediáticas. Dicha ley aprobada por el Congreso
Nacional en 2009, está aún esperando la decisión de la Corte Suprema
de Justicia de la Nación para su aplicación efectiva, luego de que el
Grupo Clarín solicitara y obtuviera una medida cautelar de parte de
jueces interesados. El gobierno también llevó adelante la iniciativa en
2013 de reforma del Poder Judicial, proponiendo la elección de los jue-
ces a través del voto popular (intento frustrado pues la Corte Supre-
ma de Justicia dictó su inconstitucionalidad). Forman parte de este
proceso histórico la recuperación de la movilización y concentración
de multitudes en el espacio público, a partir de una serie de eventos
y fiestas populares, como fueron los festejos del Bicentenario en 2010,
la feria de ciencias Tecnópolis desde 2011 y la restauración de los
feriados de la fiesta popular del Carnaval, que habían sido eliminados
por la última dictadura.
Es desde el interior de la “década ganada” y sintiéndome parte de este
movimiento político, social y cultural, a nivel nacional y latinoamerica-
no, que me interesa desarrollar un pensamiento crítico y una práctica
artística situada, en contexto. Es desde la defensa de todo lo hecho, des-
de la necesidad del fortalecimiento de la Patria Grande, el Abya Yala y la
búsqueda del Buen Vivir, que me propongo en B.O.G.S.A.T / La responsa-
bilidad (instalación para la muestra Monday Begins on Saturday ) compar-
tir un conjunto de interrogantes, reflexiones e intuiciones respecto del
12·
régimen de visibilidad que nos imponen los responsables del modelo de
los agronegocios organizado en torno a la siembra directa, la biotecnolo-
gía, las semillas transgénicas y los agroquímicos. Y por supuesto respecto
de sus letales consecuencias sociales y ambientales. No hay justicia social
sin justicia ambiental. No hay liberación negociando con Monsanto. Es
preciso romper las agendas del capital.
B.O.G.S.A.T. / La responsabilidad responde a la invitación realizada
por los curadores Ekaterina Degot y David Riff a continuar con la in-
vestigación de Los niños de la soja, mi primer trabajo sobre el modelo
transgénico, realizado entre 2008 y 2010.
ETOLOGíA
Eduardo Molinari, 2010.
Inmediaciones
dEL CApiTAL
Puerto Gral. San Martín,
Rosario, Pcia. Santa Fé.
Foto: rastrojero.net
“Mis deseos de habitante urbano de acercarme físicamente a un campo
transformado por la biotecnología y los agronegocios, de conocer sus
escalas, proporciones, olores, colores y; sobre todo, de intentar habitar
–aunque fuera por un breve fragmento de tiempo– el mundo invisible de
las plantaciones transgénicas, se toparon con un aspecto inesperado: el
mundo-soja tiene una apariencia amable, poblado de verdes, de quietu-
des e inmensidades. Sin embargo, algo extraño escapa al campo visual,
fuga de nuestros sentidos hacia otra parte del cuerpo, golpeándolo fuer-
temente en el estómago. El mundo-soja está lleno de agujeros negros, de
tajos hacia otra y ninguna parte. Es lo que no se ve lo que lo define, en
absoluta sintonía con la noción misma de lo transgénico.”
·13
Con estas palabras intenté definir la extrañeza experimentada por
un habitante urbano (de Buenos Aires) al enfrentar por primera vez
un campo de cultivo de soja transgénica, paisaje rural dominante en
Argentina, central en el diseño territorial regional hegemónico de
producción de commodities; parte de la república unida de la soja, el
puzzle imaginado por Syngenta y armado junto a varias compañías
transnacionales de agronegocios a escala global, en alianza y compli-
cidad con gobiernos, sectores agropecuarios, financieros, empresaria-
les, industriales, científicos y académicos locales. Si lo que no se podía
ver definía al mundo-soja en aquél primer encuentro, en la presente
experiencia, para Bergen, decidí profundizar la práctica caminante
en busca de imágenes. Introducirme en los agujeros negros que per-
foran el tiempo y espacio campesino, habitar los tajos que rasgan el
tejido comunitario del mundo rural, también con consecuencias en
las grandes ciudades que pretenden no tener nada que ver. Metodoló-
gicamente realicé tres recorridos: 1) Una visita de tres días a la feria
Expoagro, Baradero, Provincia de Buenos Aires; 2) Caminatas por los
barrios fumigados de Malvinas Argentinas y Barrio Ituzaingó Anexo,
periferia de la capital de la Provincia de Córdoba y 3) finalmente, un
recorrido a lo largo de la Cuenca del Plata, con el especial objetivo de
llegar a Curuguaty, Paraguay. Invité para compartir la experiencia y
armar un colectivo de trabajo a Azul Blaseotto, Ana Bróccoli, Ala Plás-
tica y Hernán Cardinale. También estuvo presente en Expoagro Carlos
Carballo. A lo largo de esta publicación podrán conocer algunos de los
resultados de este andar conjunto.
“Bajo la hegemonía del capital es un milagro que no estemos
pagando por el aire, o que no haya un impuesto sobre él al
menos. Sin embargo, pronto tendremos que pagar por nues-
tros genes, porque ningún recurso biológico por encima del
nivel molecular se mantendrá en el dominio público”.5
6 de marzo de 2013. 7.30 a.m. Azul, Ana, Carlos y yo partimos de Triun-
virato y Avenida de Los Incas, adónde se unen Villa Ortúzar y Parque
Chas, en Buenos Aires. En el camino en auto dentro de la Capital, llaman
mi atención los carteles de propaganda política de Francisco de Narváez,
diputado del peronismo opositor al gobierno. Nacido en Bogotá, Colom-
bia, en 1953, de Narváez es el primer diputado de origen extranjero en
la historia argentina. Llegó a la Cámara en 2005, siendo parte la lista
encabezada por la mujer de Eduardo Duhalde. Sus carteles, cuya estética
recuerda a las placas rojas con las que el canal sensacionalista Crónica TV
anuncia sus primicias, desafían: “Ella o Vos. Nosotros estamos con vos”.
En 2003, de Narváez acompañó la candidatura de Carlos S. Menem. Nues-
tro auto se aleja a toda velocidad. “Vos” no soy yo.
5 Critical Art Ensemble, The molecular invasion, Autonomedia, 2002.
14· ·15

Ruta 9, Provincia de Buenos Aires. Más carteles. Lonas atadas a los no tripulados, semilleras, empresas de biotecnología, agroquímicos,
alambrados que delimitan los campos. Son amarillos, pertenecen al PRO ropa de trabajo, grupos multimedios, asociaciones de productores
(Propuesta Republicana), fuerza política del actual jefe de gobierno de agropecuarios, gremios, instituciones educativas, etc. ¿Qué clase de
la Ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri, quien intenta proyectarse a conciencia ecológica expresa este derroche de bolsas de plástico?
nivel nacional. También hay verdes y azules, del partido recientemente
creado FE, liderado por Gerónimo “Momo” Venegas, secretario general de
UATRE-Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores y también
integrante de la CGT-Confederación General del Trabajo opositora al go-
bierno. Durante el paro patronal agropecuario de 2008, Venegas ordenó a
las 62 Organizaciones (gremios peronistas) que no acompañen los actos
convocados por la CGT ( por entonces oficialista) y apoyó al campo. Espo-
rádicamente, veo carteles metálicos, con fondo naranja y letras blancas,
tipografía que recuerda mucho al Hotel Faena de Puerto Madero. Son
propaganda oficial de obra realizada o por realizar del gobernador de la
Provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli. Vicepresidente de Néstor Kirch-
ner en su mandato presidencial (2003-2007), Scioli comenzó su carrera
política en 1997 junto a Carlos S. Menem, como diputado. La casi totali-
dad de las manifestaciones de apoyo al gobierno de Cristina Fernández
de Kirchner no son carteles ni lonas, son pintadas en las bases de los
puentes de cemento gris que cruzan la ruta. Sólo dicen CFK.
Primera señal de que estamos llegando a la más grande feria a
campo abierto de Latinoamérica dedicada a los agronegocios: letreros
pequeños, blancos con letras negras. Nos alertan: “Precaución: a 500
mts. Expoagro”. Me pregunto ¿de qué habríamos de tener cuidado?
(1) Marcela , hija
apropiada por Ernestina
Ruta 9, Km. 121. Ingreso al predio de la estancia La Flamenca, sitio Herrera de Noble.
Inauguración
elegido este año para la realización de Expoagro, “cuyos accionistas Expoagro 2013.
son los diarios Clarín y La Nación, que es la más grande y más completa
de las muestras dinámicas, denominada así porque en las adyacencias
del predio donde se realiza se ponen a prueba, ante los visitantes, cientos
de máquinas e implementos agrícolas de última generación que realizan Calles de Expoagro. Tráfico incesante. Los primeros rumores dicen:
distintos trabajos: labores de siembra, cosecha, pulverización, embolsado “este año faltan visitantes y se bajaron Monsanto y John Deere, no quieren
de granos, hilerado, enrollado, etc.”6 También anuncian los organizado- tener problemas con el gobierno”. Circulan grupos de hombres y mujeres.
res la presencia de los “plots, el corazón científico de la muestra. Donde Llevan sombreros “Panamá”, camisas blancas y celestes, recién plancha-
las empresas líderes en investigación biotecnológica y agroquímica exhi- das. Pasan decenas de vehículos. Autitos similares a los que circulan en
ben en cada campaña los materiales y las soluciones que sustentan la los campos de golf, transportan a invitados VIP. Trencitos arrastrados
rentabilidad del productor agropecuario.”7 por tractores o por “mosquitos” (vehículos terrestres utilizados para
las pulverizaciones de agroquímicos) llevan grupos mayores de visitan-
Dentro del predio, resulta imposible esquivar el frenético reparto tes variopintos. En autito VIP pasan Gustavo Posse (UCR, San Isidro)
de manos de hermosas y jóvenes mujeres con uniformes y sombreros, y Jorge Macri (PRO, Vicente López), intendentes de la zona norte de
que parecen haber atravesado con éxito un casting para seleccionar la Provincia de Buenos Aires. Calles más adentro, aparecen grupos de
modelos. Ellas nos entregan compulsivamente bolsas y más bolsas de personas de especial apariencia. A lo largo de nuestra visita a la feria,
plástico, con logos de marcas de autos, bancos, bolsas de comercio y los volveremos a encontrar, nunca de a uno, siempre en grupo. Como los
aseguradoras, máquinas cosechadoras, pulverizadoras, gps, aviones mormones o los menonitas, son los “cowboys” de Nidera, DuPont, Don
Mario, Bunge. De todas las semilleras que desarrollan sus negocios en
Argentina. Entre la masa de caminantes, detecto a los agentes de la em-
6 www.expoagro.com.ar
presa de vigilancia Global Security. Todos parecemos estar seguros aquí.
7 Ídem
16·
La estructura territorial de Expoagro se arma a partir de una cuadri-
cula de calles. La avenida central está poblada de palmeras, espécimen
ajeno a nuestras pampas. Recorro la Primera Avenida, “la avenida de los
medios”. Encuentro allí camiones estacionados, móviles desde los cuáles
distintas radios del hegemónico grupo multimedia Clarín transmiten su
programación en vivo. También stands de revistas y suplementos dedi-
cados a la realidad del campo. En el móvil de Cadena3, Miguel del Sel,
actor cómico devenido político y candidato del PRO, se peina pero no me
mira a los ojos cuando le robo una fotografía. El móvil de radio Rivadavia
publicita su programa: “Bichos de campo, periodismo que pica”. ¿Picarán
estos periodistas a los responsables de las fumigaciones con glifosato,
de la contaminación de las personas, la tierra y el agua en nuestro país?
Héctor Magnetto,
Jorge Rafael Videla
y Bartolomé Mitre.
Inauguración de Papel
Prensa, 1977.
La Real Academia Española dice que la etología es el estudio cien-
tífico del carácter y comportamiento tanto del hombre como de los
animales. La batalla contra las plagas es el título de la conferencia en
el stand de la empresa química BASF-The Chemical Company. Fundada
en 1865, su casa matriz se encuentra en la ciudad de Ludwigshafen. El
ingeniero agrónomo a cargo de la charla advierte que lo importante es
el conocimiento de la etología. Tanto de los productores, que no deben
repetirse ni estancarse sino ser innovadores, como de los insectos.
Dice que hay que “atacar en el lugar y el momento justo” y remarca
la inutilidad del deseo de venganza una vez que el daño se hubiera
·17
producido, que los insectos se hubieran comido las plantas. Resultan
de sumo interés los giros lingüísticos y discursivos que organizan esta
“batalla” en la república unida de la soja.
“¿Cuáles eventos son presentados en la forma de imágenes, y cuáles no?
¿Cuán significativa o informativa es una imagen per se? ¿Qué puede lo-
grar? ¿Cuál es la agenda política detrás de esta forma de producción de
imágenes?”8
Las imágenes seleccionadas por el ingeniero muestran que no to-
das las orugas ni todos los insectos (los enemigos en esta batalla) son
visibles a simple vista. Algunos se esconden en el reverso de las hojas
Almuerzo en
Expoagro 2013. de soja o bien cerca de la tierra, dificultando la pulverización con pes-
ticidas. Por ello se debe conocer su etología. Es importante que los tra-
bajadores rurales aprendan a identificar estos insectos. Para lograr este
objetivo el profesional de BASF propone nombres fáciles de recordar:
“oruga “peronista” (por la forma “en V” de sus antenas), “oruga kirch-
nerista” (por su preferencia para alimentarse de granos y no de hojas
de soja transgénica). Estos son algunos ejemplos de los enemigos que
8 Patrizia Dander, Bild Gegen Bild, Haus der Kunst, Verlag der Buchhandlung Walter
König, 2012.
18· ·19

deben ser eliminados. En las fotografías, dichos enemigos aparecían Carpa de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos
señalados al interior de un círculo rojo. Casi al finalizar su presentación, Aires. Sobre una mesa, se desparraman un cantidad de variedades
incluyó en su power point una fotografía del periodista Víctor Hugo de maíces nativos americanos. Amarillos, blancos, naranjas, azules,
Morales, cuya posición oficialista es pública y notoria. La imagen era violetas. Largos y cortos, gorditos y flacos. Un libro documenta la ubi-
anterior al conflicto de 2008 por las retenciones a la exportación sojera cación de estas variedades en Argentina. Es muy impresionante leer
y lo muestra acompañado por conocidos dirigentes agropecuarios. Lo en la primera página: “La impresión de este libro se realizó con el apoyo
sorprendente era encontrar allí al periodista Morales encerrado en el de Monsanto Argentina S.A.I.C.”.
mismo círculo rojo que señalaba a los insectos que deben morir bajo los
efectos de los pesticidas que BASF ofrece con el argumento de lograr Café M. Leemos los diarios, La Nación y Clarín. Ellos son los prin-
mayor rentabilidad. El ingeniero dijo entonces a los productores: “Algu- cipales sponsors de Expoagro. También socios de Papel Prensa, em-
nos bichos son incomprensibles, su comportamiento es incomprensible, sus presa que suministra el principal insumo para sus productos y cuyo
cambios son totales, son malos bichos.” Fin de la charla. Impresionado traspaso, en 1976, de los propietarios Graiver-Papaleo a los dueños de
por sus muy precisas imágenes sobre diminutos insectos, pregunté al La Nación, Clarín y La Razón, durante la última dictadura militar en
conferencista por su trabajo visual. Me respondió que su cámara foto- Argentina; se realizó de modo completamente irregular, incluyendo el
gráfica le permite acercarse a 1,5 cm. de su objetivo. Señaló la necesidad secuestro y detención ilegal de familiares y miembros del Grupo Grai-
de realizar una historización de los pesticidas y advirtió que, aunque se ver en el centro clandestino Pozo de Banfield en 1977. En Expoagro, La
cambiaran los formatos de los picos pulverizadores, la lluvia del pesti- Nación anunciaba en primera página: “Murió Hugo Chávez”. Y Clarín:
cida tendrá siempre forma de triángulo. Recuerdo mientras escribo esta “Murió a los 58 años. Chávez. El líder populista que deja una huella en
crónica que durante la campaña 2010 llovieron sobre suelos argentinos América Latina”. Dos hombres adultos y una joven conversaban sobre
230 millones de litros de glifosato. Propongo a los lectores hacer un política en la mesa de atrás. Uno señalaba la dificultad de “entrarle a
ejercicio de imaginación política: procurar hacer visible el tamaño del los partidos políticos”, refiriéndose especialmente al PRO de Mauricio
triángulo que esta lluvia química dibuja sobre las más de 18,5 millones Macri y a FE del Momo Venegas. También a Elisa Lilita Carrió, que “está
de hectáreas cultivadas con soja transgénica. creciendo”, para rematar: “los negocios se hacen con los amigos”. La jo-
ven, en cambio, se mostraba preocupada: “Estamos en un tiempo entre
El sol raja la tierra. Al interior de la república unida de la soja, “es- la salida del egoísmo y la pérdida de la institucionalidad”. Su voz sonó
tado imaginario” creado en 2003 para una campaña publicitaria de la más angustiada cuando expresaba: “La generación sub-40 y sus amigos
compañía de agronegocios Syngenta, con casa matriz en Basilea, Sui-
za; Argentina se propone mediante su Plan Estratégico Agroalimentario
y Agroindustrial 2020 pasar de las actuales 100 millones de toneladas
de cosecha de granos a casi 160 millones. En 2013, Argentina posee
23,9 millones de hectáreas de cultivos transgénicos de las cuales más
de 18 millones son soja. Los nudos que ajustan la trama de este expe-
rimento eco-tóxicológico enlazan empresas privadas con instituciones
públicas. Vuelve a mi memoria una imagen de la charla del ingenie-
ro de BASF: “las orugas nos hablan”. ¿De qué nos hablarán pues las
orugas? En un nuevo ejercicio de imaginación política propongo al
lector que las escuchemos. Debajo de las hojas, podrían preguntarnos:
¿De quién es la responsabilidad de estudiar, conocer y controlar la
etología del capital? ¿Los rostros de quiénes deberían estar dentro
del círculo rojo que permita visibilizar las responsabilidades de la
creación e impulso de un modelo de relaciones con la naturaleza que
privatiza la biodiversidad, transformando la vida en mercancía, hasta
en sus niveles moleculares? ¿Cómo desplegamos un pensamiento y
accionar descolonizadores, emancipatorios, que no reproduzcan los
modelos “civilizatorios” y de “desarrollo” de nuestros antigüos y pre- Marcha opositora al
Gobierno nacional.
sentes opresores? ¿Cómo hacer consciente y poner en acción el enorme Buenos Aires, 2013.
reservorio de sabiduría de las culturas originarias de América?
20· ·21

que hacen arte son kirchneristas.” Ellos, decía cada vez más inclinada
hacia delante:“encuentran en el kirchnerismo una cultura y un relato
del que se sienten parte, aunque después no les interese si se cumple
lo que se dice”. Las últimas palabras que le escuché definieron esta
situación como muy difícil porque “además, ellos con su arte pueden
transmitir, comunicar a otros, y eso no lo podemos evitar”.
La cámara con la que están equipados saca una foto cada 3 segun-
dos, lo que permite configurar mapas de las tierras en las que se
desarrollarán los cultivos transgénicos. El estudio arma e imprime
estos mapas como parte de los servicios que ofrece a los productores.
¿Cuál será la influencia de esta cartografía en el imaginario de las
nuevas generaciones de habitantes del mundo rural contemporáneo?

Aún tenemos dos días más por delante. Cuando quisimos almorzar
no había suministro eléctrico en los asadores. Las cajas registradoras
para hacer el pedido no funcionaban, nadie podía pedir comida. En las
parrillas, el fuego cumplía noblemente su misión. Los cortes de carne
son a cada minuto más tentadores. El muchacho que nos entregó,
finalmente, los sanguches de vacío, dijo: “Es cierto, a pesar del lindo
día, hay poca gente. Pero los dos últimos días la exposición se llena!”.
Vamos a ver.

7 de marzo de 2013. 10.30hs. Desayunamos en el café M. No hay

diarios esta vez, tampoco los de ayer. Buscaba estos ejemplares ya
“viejos” pues quería conservar la tapa original de Clarín anunciando
la muerte de Hugo Chávez. Recordé la frase del Comandante: “A los
que me desean la muerte yo les deseo mucha vida para que vean como la
revolución bolivariana va a seguir avanzando de batalla en batalla y de
victoria en victoria.” A escasos metros del café, una comitiva de hom-
bres negros ingresa a la exposición. Parecen africanos. Todos llevan
una gorra roja, lo que hace la escena más llamativa aún. El guía es un
hombre blanco.

Avenida de los medios. Stand del diario Clarín. Pido a las promo- Stand Agritechniks,
Expoagro 2013.
toras una bolsa de plástico con el logo del diario y un ejemplar del Foto AC.
día. No me lo dan, dicen que solamente me lo entregarán si acepto
participar del sorteo de un silo. No acepto.

Caminamos hacia el Stand 22A, un emprendimiento especiali-
zado en “agricultura de precisión”. Son de mi interés las tareas que
desarrolla esta empresa pues implican una producción visual: me-
diciones y mapeos con GPS, satélites y aviones no tripulados. Sí!
UAV-Unmanned Aerial Vehicles. El local es diminuto, ingenieros
dan una charla explicando al público los distintos tipos de regis-
tros visuales que puede producir “el avioncito”, como lo llaman: de
superficie, relieve, temperatura y napas. Cualquier semejanza con
algunas de las funciones de maquinaria bélica desplegada por la
CIA, las fuerzas armadas norteamericanas y sus aliados ¿es mera
coincidencia? Retomaremos esta relación en el capítulo siguiente.
Tomo fotografías de dos modelos distintos de avioncitos exhibidos
en las paredes del pequeño stand. Consulto al joven que se iden-
tifica como “el piloto”. Me explica que él programa las rutas sobre
los lotes y que una vez en el aire, se ponen en piloto automático.
“Imagina que estás cayendo pero no hay suelo. Muchos filósofos con-
temporáneos han señalado que el momento actual se distingue por una
condición dominante de falta de suelo. no podemos dar por sentada la
existencia de ningún fundamento estable en el que basar las afirmacio-
nes metafísicas o los mitos políticos fundacionales. En el mejor de los
casos, nos enfrentamos a intentos temporales , contingentes y parciales
de encontrar una base. Pero si no hay una base estable disponible para
nuestras vidas sociales y nuestras aspiraciones filosóficas, la consecuen-
cia debe ser un estado permanente, o al menos intermitente, de caída
libre tanto para los sujetos como para los objetos. Y si es así, ¿por qué
no lo notamos?” 9
9 Hito Steyerl. Ver en: www.e-flux.com/journal/in-free-fall-a-thought-experiment-on-
vertical-perspective
22·
Este permanente o intermitente “estado de caída libre” no parece
afectar en nada a la joven que atiende el stand que vende picos de
todos los colores y formas para las pulverizaciones. Estas piezas de
plástico, fijadas a las alas mecánicas de los vehículos terrestres o aé-
reos, dispersan el glifosato sobre los suelos de la república unida de la
soja. La joven da una clase magistral sobre la diversidad de encastres
y combinaciones que se pueden realizar. Realza la simpleza de sus
conexiones. Finaliza diciendo: “Parecen juguetes”.
Asistimos a una demostración de pulverizaciones. La cartelera que
indica las actividades que se realizan a campo abierto en la feria, cita a
los interesados a reunirse en una esquina de la periferia del predio. Se
anuncia una “salida al campo” y viajamos en un bus que, en rigor, no
hace más de 500 mts. Hay un centenar de personas. Nos integramos a
la multitud. Comienzan a darnos órdenes. Desde la cabina de mando de
un mosquito dos locutores con micrófonos y lenguaje castrense anun-
cian el comienzo del “espectáculo”. Delante de nuestras narices comien-
zan a desfilar distintos modelos y marcas de vehículos terrestres cuya
función es pulverizar agroquímicos sobre los cultivos, matar malezas y
plagas. Rugen los motores y se abren y cierran las alas mecánicas. Los
locutores amenazan: el desfile no comenzará hasta que todo el público
(ahora más de 200 personas, incluidas mujeres y niños) se ubique detrás
de la soga sostenida por paisanos encargados de la seguridad. ¿Nuestra
protección depende de una soga? Excitados, dan la orden y los mosqui-
tos inician su marcha. Rojos, verdes, amarillos. Altos y bajos, rápidos y
lentos. Sus alas se agitan, se doblan y se vuelven a extender. Los locu-
tores señalan las propiedades técnicas, la potencia de los motores y los
distintos modos de lanzar los venenos sobre la tierra, cultivos, plantas
y árboles frutales. Nada dicen de qué pasa con los animales. Los con-
ductores de las máquinas generan movimientos coreográficos y parecen
disfrutar cuando la nube líquida que sale de los picos pulverizadores
moja cabezas, rostros y cuerpos de los asistentes. Mientras nos llue-
ve encima, los locutores bromean: “­¡Quédense tranquilos, es sólo agua!
O eso nos dijeron”. Agradezco tener puestos anteojos de sol. De pronto,
aparece el atractivo principal del GlifoCirco: tres veces sobrevuela sobre
nuestras cabezas un avión fumigador. Los locutores advierten: “El color
rojo del líquido que sale de las alas del avión se lo pusimos nosotros, para
que vean mejor como trabaja”. Una nube queda suspendida en el aire y
luego inicia su deriva. ¿Alguien sabe adónde irá a parar? ¿Qué imágenes
guardará un piloto fumigador luego de una jornada de trabajo?
“La vista desde arriba es la metonimia perfecta de una verticalización
de las relaciones de clase en el contexto de una guerra de clases inten-
sificada desde lo alto, vista a través de lentes y de las pantallas de las
industrias militares, del entretenimiento y de la información.” 10
10 Ídem nota 9.
·23
4 p.m. El sol sigue siendo muy intenso y llevamos horas caminando
por la feria. Ingresamos al salón VIP de la semillera norteamericana
DuPont. Allí hay aire acondicionado y agua helada. Nos sentamos luego
de recibir un nutrido puñado de folletos que informan sobre los pro-
ductos biogenéticos de la empresa. A nuestro alrededor, se reitera un
extraño efecto visual: casi todos los hombres portan inmaculadas
camisas blancas y sombreros Panamá. Las paredes son rojas. Esto se
parece demasiado a una secta. En el sitio web de DuPont Argentina,
podemos leer en su inicio: “Los milagros de la ciencia. Juntos podemos
alimentar al mundo. Welcome to The Global Collaboratory”. Esto se pare-
ce demasiado a una secta. El día anterior, al visitar el stand de Nidera,
los “cowboys” tenían de fondo paredes amarillas. Fundada en Rotter-
dam en 1920, su nombre se deriva de las iniciales de los seis países en
los cuáles la empresa enfocaría sus actividades entonces: Netherlands
(Países Bajos), India, Deutschland (Alemania), England (Inglaterra),
Rusia y Argentina, país en el que se instala en 1929. Nidera construyó
entre 1979 y 1983 una planta y una terminal para granos y aceites
en Puerto Gral. San Martín, Provincia de Santa Fé. En 1997 constru-
yó otra terminal de Fertilizantes en Quequén, Provincia de Buenos
Aires, y en 2010 comenzó la construcción de una nueva terminal de
Fertilizantes en el Puerto Gral. San Martín. La empresa forma parte de
la ya nombrada república unida de la soja ya que también tiene repre-
sentaciones en Brasil, Uruguay y Paraguay. Tuve que solicitar ayuda
a Ana para poder comprender el significado del objeto casi escultórico
fijado en una de las paredes del stand de Nidera: un círculo confor-
mado por anillos concéntricos de distintos colores, desde cuyo centro
partían centenares de hilos de alambre que unían distintos puntos
de los anillos. Su aspecto, en una rápida y torpe percepción, remitía
a una ruleta de casino. Ana me explicó que se trataba de una repre-
sentación de las operaciones posibles sobre el genoma de un cultivo.
“Más de 30 investigadores y colaboradores, trabajan en la creación de
nuevas variedades e híbridos para los cultivos...” está escrito en la pa-
red. La creación de especies, de naturaleza, tarea propia de los dioses
para muchas culturas, parece ser uno de los desafíos centrales de las
empresas del agronegocio, cuya coartada es “alimentar al mundo”. No
puedo dejar de ver a este círculo como una ruleta, un juego en el que
pocos ganan y la mayoría pierde.
INTA, Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria. Organismo
estatal creado el 4 de diciembre de 1956, durante la dictadura mili-
tar conocida como Revolución Libertadora, que derrocara al gobierno
constitucional de Juan Domingo Perón en 1955. Actualmente está bajo
la órbita del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca. En Expoa-
gro, el stand del INTA es casi una librería especializada. Llama mi
atención un libro muy pequeñito: “Insectos en soja. Los buenos y los
malos”. Resulta fascinante su título, que pretende clarificar contra
quiénes es el combate, a la hora de fortalecer un modelo productivo
24·
que para AAPRESID (Asociación Argentina de Productores en Siembra
Directa) hace foco “en las innovaciones tecnológicas, organizativas e
institucionales, trabajando para maximizar la cantidad de conocimiento
por unidad de superficie” 11
“Como técnica (la siembra directa) es llanamente la práctica de cultivar
la tierra sin ararla previamente”[...] “ como concepto sistémico, compor-
ta otra complejidad. Siembra directa es el sistema productivo basado en
la ausencia de labranzas y la presencia de una cobertura permanente
del suelo, vía cultivos y rastrojos de cultivos anteriores. Basado en un
conjunto de Buenas Prácticas Agrícolas, el esquema permite producir sin
degradar el suelo, mejorando en muchos casos sus condiciones físicas,
químicas y biológicas. Además logra hacer un uso más eficiente del agua,
recurso que en cultivos de secano es generalmente el factor limitante en
la producción. Así, la Siembra Directa logra niveles productivos altos con
estabilidad temporal y en armonía con el ambiente.”12
Stand de AAPRESID. Las Buenas Prácticas Agrícolas en cuestión
tienen relación con el uso insoslayable de agroquímicos, en particular
del glisofato RoundUp de Monsanto, para el desarrollo de la siembra di-
recta. Un chico y una chica se aproximan, nos dan la mano y nos pre-
guntan en qué pueden ayudar. Les explico que soy artista y docente
de arte y que me interesa analizar la producción visual de la maqui-
11 www.aapresid.org.ar
12 Ídem.
·25
naria transgénica. La voz del joven cambia y comienza a hablar como
si se hubiera encendido una grabación. Manifiesta su asombro por
mi preocupación por el uso de glifosato. Hace referencia al principio
científico; sin nombrar a su autor, el físico, astrólogo y alquimista
suizo Paracelso (1493/1541); por el cual ninguna substancia es un
veneno, sino que sólo la dosis utilizada es la que permite establecer
esa categoría. Todo indica que no ha estudiado nada respecto de las
actuales condiciones toxicológicas, por las cuáles nuestros cuerpos
se encuentra sometidos a una exposición múltiple y permanente a
centenares de moléculas químicas. El principio ideado por Paracelso
no tiene vigencia alguna frente al accionar de los disruptores endó-
crinos, substancias químicas que interfieren en el funcionamiento de
nuestro sistema endócrino (aquél que regula la actividad hormonal, la
fabricación de las glándulas que dan forma a nuestro organismo). El
daño generado por los disruptores endócrinos, presentes en los com-
puestos químicos que se vierten en nuestro medio ambiente y en los
alimentos, no depende tanto de la dosis si no del momento evolutivo
en el que actúan. No es lo mismo cuando lo hacen sobre un embrión,
un feto o un adulto. Las malformaciones de los niños nacidos en po-
blaciones fumigadas tiene que ver entonces con su exposición durante
el período de desarrollo embrionario, algo que a AAPRESID parece no
importarle mucho. El joven sigue con su guión armado: “Todos vamos
detrás de la nube de Raid que arrojamos sobre moscas y mosquitos y no
decimos nada. La sal o una bayaspirina son letales si nos excedemos en
la dosis ingerida.” En el tramo final habla del aumento de la población
mundial, que según sus cálculos llegaría a 9.000 millones de habi-
tantes en 2050. Le pregunto si cree que la “agricultura industrial”
va a terminar con el hambre mundial y su respuesta me deja helado:
“No, yo no dije eso. Lo que digo es: si quieren hacer agricultura ecológi-
ca, háganla. Si más gente muere de hambre, es la ley de la naturaleza.”
Auditorio Principal, última estación por hoy. Presentación de los
representantes de Agritechniks, Feria de la industria técnica agrícola
en Hannover, Alemania. El mismo sujeto que un día antes había toma-
do mis datos personales al visitar su stand, nos cierra el paso cuando
intentamos ingresar. “Esto es un evento privado”, dice. Le explicamos
que en la difusión oficial nunca se hace referencia a la necesidad de
estar invitado. Luego de un forcejeo, decidimos no entrar. No tenía-
mos hambre, pero nos pareció justo llevarnos el corazón de mazapán
que colgaba del picaporte de la puerta que nos había sido cerrada. En
la típica masita alemana se podía leer el siguiente texto: “Agritechniks
grüsst Argentina”.
Estancia Los Patricios, propiedad de la Facultad de Agronomía de
la Universidad de Buenos Aires. Allí dormimos durante nuestra visita
a Expoagro. Durante la cena conocimos a dos mujeres que se dedica-
ban al turismo rural. En rigor, profesora y alumna. Marianela estaba
26·
preparando un exámen de historia argentina. Conté acerca del Archi-
vo Caminante, archivo visual que explora las relaciones entre arte e
historia. Gabriela, la profesora, hizo entonces un relato muy especial.
Señaló el piso de baldosas. A escasos 2 metros de la mesa sobre la que
cenamos, había una tapa de madera, con una grieta por la que se veía
una profunda y atemorizante negritud. Se podía abrir manualmente,
pero a nadie se le hubiera ocurrido hacerlo. En su relato, la profesora
explicaba que por allí se bajaba al sótano de la casa, adonde se guarda-
ban una enorme cantidad de papeles y tal vez, fotos. Documentos de la
administración de la estancia. Sin saberlo, habíamos estado cenando
sobre una memoria enterrada. Un sótano oscuro de una casa de campo
no parece ser el lugar más acogedor para consultar un archivo. ¿Qué
tipo de relaciones entre memoria y naturaleza propone el capitalismo
postindustrial? ¿Qué ocurrirá con los recuerdos que alojan las fábri-
cas, los galpones, las máquinas, las estancias? ¿La memoria de los
trabajadores rurales tendrá el mismo destino que la de los trabajadores
fabriles?
“... la mayoría de las antiguas fábricas siderúrgicas habían sido trans-
formadas en centros de exposiciones, espectáculos, conciertos, al mismo
tiempo que las autoridades locales intentaban implantar un turismo in-
dustrial fundado en la reconstrucción del modo de vida obrero a prin-
cipios del Siglo XX. [...] Aquellos colosos industriales, donde antaño se
concentraba el grueso de la capacidad productiva [...] ahora estaban
herrumbrosos, medio derruidos, y las plantas colonizaban los antiguos
actor cómico devenido
talleres, se infiltraban entre las ruinas y las envolvían gradualmente en
una selva impenetrable. [...] El triunfo de la vegetación es absoluto.” 13
Envueltos en barro, tres chanchos duermen en la sombra escasa.
Hay muy pocos animales en Expoagro. 6 chanchos, 7 ovejas, 8 vacas.
6,7,8. Transito por tercera vez la avenida de los medios. En el móvil
de Radio Continental reconozco la voz del periodista Fernando Bravo,
que charla con un colega, el cordobés Alfredo Leuco. Ambos pública-
mente opositores al gobierno K, comparten su “sorpresa” ante el rápi-
do retorno de Cristina desde Caracas, del sepelio y despedida popular
de Hugo Chávez. Lo interpretan como una “falta de afecto” que no se
condice con la relación que tenían ella y Néstor con el Comandante de
la revolución bolivariana.
8 de marzo de 2013. Último día de la feria. Recuerdo las pa-
labras del vendedor de sanguches de vacío el primer día... pero la
feria no explotó de concurrencia. Sí hay más presencia de familias
de trabajadores rurales y de curiosos como nosotros. La tradicional
“gente de campo” sigue acumulando bolsas de plástico en sus manos.
13 Michel Houellebecq. El mapa y el territorio, Ed. Anagrama, 2011.
·27
La más llamativa, por su tamaño, es –irónicamente– la bolsa de la
Bolsa de Cereales de Buenos Aires. Contiene a todas las demás. Los
usos y costumbres gastronómicas, la indumentaria y el consumismo
que esta clase social terrateniente despliega ostentosamente no se
llevan muy bien con una mínima conciencia social, ecológica y am-
bientalista. La tierra del predio queda poblada de residuos de toda
forma, color y tamaño. Si la patria es el campo, como gustan decir,
la están dejando bien sucia.
Miguel Del Sel,
político (PRO),
Expoagro 2013.
Foto AC.
La lengua de los agronegocios, sus operaciones retóricas en el te-
rritorio (señalamientos, intervenciones, jerarquizaciones, apropiacio-
nes), dan cuenta de un imaginario en el que es posible reconocer dos
tipos de alianzas entre significantes y significados y que se expre-
san en la producción visual presente en la feria. La primera une a la
agricultura y a los frutos de la tierra con el juego, las apuestas y el
mundo de las finanzas. Se reafirma una lógica de ganadores y perde-
dores, también de ganancias exorbitantes, acumulación de dinero y
propiedades. Ruletas, dados, sorteos, rompecabezas, memo-test, son
algunas imágenes que invitan a para probar fortuna. La biodiversidad
patentada y la elección de las armas adecuadas (los agroquímicos)
son también parte del juego. Entre los distintos tipos de tableros y
fichas a disposición de los “jugadores”, algunos tienen mucho peso:
bancos locales e internacionales, aseguradoras. Existe una estrecha
relación entre el valor comercial de las mercancías / commodities y su
cotización en las bolsas internacionales. Un enjambre de agentes, pro-
motores, vendedores y empleados, pulula con ropas recién compradas.
28· ·29

La segunda alianza discursiva ocurre entre agronegocios y guerra.

Para la máquinaria transgénica, algunas poblaciones animales y vege-
tales son definidas como enemigos a los que hay que atacar y eliminar
por completo. Es importante, elegir, como se ha dicho, las armas preci-
sas y el momento justo. La máquina transgénica se asemeja demasiado
a un Drone 14, máquina ciega e invisible que ve todo, con ultrapreciso
poder letal. Las relaciones de las empresas semilleras, biotecnológicas,
de los terratenientes y patronales agropecuarias con los Estados de
la región, no escapan a esta lógica e imaginario bélico. Es imperio-
so afirmar el control territorial en la imaginaria república unida de
la soja. Autos, tractores, pulverizadoras, cosechadoras para siembra
directa, aviones fumigadores y aviones no tripulados, helicópteros,
sistemas de control satelital, GPS, son parte de la logística necesaria.
También sicarios y ejércitos privados, preparados para desalojar y ma-
tar a quién moleste. La logística también precisa de ropa de trabajo.
No hay, sin embargo, información en estos locales que venden ropa
acerca de la indumentaria necesaria para el efectivo cumplimiento Casillas de descanso para
de las Buenas Prácticas Agrícolas. Pareciera que, como en toda guerra, trabajadores rurales
“golondrinas”.
mientras algunos dan las órdenes desde lugares seguros, otros son Foto durante operativo
carne de cañón. de la AFIP, 2012.

Stand de UATRE, Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Esti-

badores. Final del recorrido. Cae la tarde, estoy agotado. Son los cuer-
pos y vidas de los peones y trabajadores rurales, de los campesinos y
las comunidades originarias que habitan el territorio en disputa por
la expansión de la frontera sojera, los primeros en transformarse en
carne de cañón. El Secretario General del gremio desde 1990, Geróni-
mo Momo Venegas, ha fundado su propio partido político, llamado FE.
Además de acompañar a las patronales del campo durante el conflicto
de 2008 (por el intento de aumento de las retenciones a las exporta-
ciones de granos) Venegas fue cómplice durante la década del 90 de
la precarización y desregulación de las condiciones laborales de los
trabajadores que dice representar. Entre los afiliados a su gremio, el
trabajo en negro supera al que está en blanco. Una música nos llevó
hacia su stand. Una voz femenina cantaba una melodía que parecía de
Medio Oriente. Al ingresar a la carpa, un grupo de personas sentadas
en fardos de paja se deleitaban con la actuación de Belén. Mayúscula
fue nuestra sorpresa cuando ella dedicó su siguiente canción a todas
las mujeres en su día (el 8 de Marzo se celebra el Día Internacional de
la Mujer en recuerdo de las protestas protagonizadas por trabajadoras
en Nueva York, en 1857 y en 1908). Entre los fardos de paja, Belén,
sin hacer la menor referencia a Cristina Kirchner, primera mujer en
llegar a la presidencia en Argentina, comenzó a cantar: “No llores por
mí Argentina...”. Al escuchar la ópera Evita, no pudimos resistir alzar
nuestros dedos en V. Nadie nos acompañó.
14 Drone: zángano, vago, zumbido, avión teledirigido. www.es.pons.eu
30· ·31
32· ·33

P.3: What the hell is he looking at? / Ridiculous! Take that Panamá hat off man, this is Argentina/
Water me if you can, punk/ Hey, Peronistas, stop shaking that, you’re gonna kill us all/ Mum, why does
he call them “Peronistas”?/ Because their antennas form a “V”./ Are we “Kirchneristas”?/ Yes, cause
P.2: Voices from below 1. Fuck! It’s hot like hell. 2. If it screws my crop I’m dead. we can build hegemony.
34·
P.4: Voices from above / 1. Mother fucker bug! Get off my land! (holding the rural supplement of
Clarín newspaper) 2. Hey, stop it. You’re missing out on scientific progress. 3. Super Soja, also known
as Intacta RR2 Pro, is the new ally in war against nature: “Nidera is getting ready for launching glifo-
sato and lepidoptera resistant Supersoja. The new tech Intacta RR2 Pro, cutting edge technology soy
that Monsanto developed for Southamerica, a novelty that offers a solution for soy farming, blah blah
blah 4. Lepidoptera my ass, I’m a Lady Caterpillar. 5. Since import taxes on soy are discussed, there’s
a sweet talk around: (song) The one in office shouldn’t turn its back in these cases of slam doors with
indifference… 6. At Expoagro 2013 fair, Super Soja presents his war scenario.
·35
P.5: Meanwhile in the knowledge spheres / 1. Nobody has the right to create new species. Scien-
tists know which the risks are./ I think the 90’s worked very well at University. First, they entered,
and now they tamed it./ Transgenic seeds are in violation to Argentinean food sovereignty. 2. Chorus:
The government should be made conscious that the field is the matrix and the producer is jolly brea-
king his back until daylight, because if the farmers go on strike the country comes to a hault. 3. Who
do they think they are? / Homeland is the other one!
36· ·37

P.6: Wisdom’s voice / 1. However, the food problem is not national, but regional. 2. The so-called
“United Republic of Soybeans” is formed by Bolivia, Uruguay, Brazil and Argentina. All Paraguay is its
heart. 3. When Guaraní people inhabited the territory, today National States, there was reciprocity
binding. 4. Drinking mate is an old Guaraní custom; the beverage passes from hand-to-hand even at
present, in every corner of South America. 5. Guaraní culture didn’t distinguish the rich form the poor.
Just like in the mate round, there was always food and shelter for everybody. 6. The yerba mate emer-
ged from the water as Guaraní language did. Water also flowed over woods, hills and jungles, irrigated
P.7: The voice of power /
idioms and created ways of being in this world. 7. With deforestation, jungles and hills were swept away,
In the transgenic album, everyone wants to appear with its best face.
and forests were sold. On the actual fields of transgenic soy cotton, sunflower and maize there only
lives the biodiversity of death: poisoned toads and butterflies, remains of tapirs, memories of jaguars,
drones that seem like mosquitoes. And, extensive landowners who will give birth to sick children.
38·
P.8: Soy pushes ahead... 1. What happened in Curuguaty? 2. Get out farmers. Farmers OUT! / Chief
and deputy of the Special Operations Group. 3. They were state lands where people were killed! They
say police officers were murdered, and it is also said that the farmers just died. 4. Banner: “Victory or
Death”. Farmer Avelino Espínola: –Stay here, we’ll chat. Farmer Rubén Villalba: –Why do they come this
way? There are children and women among us, let’s talk.
·39
P.9: 1. At the house on the slope, there lived the hit men. From there they could control the lake, the
stream and the extensive soy field that reached the main road. They settled there after landless farmers
occupied the area known as “Marina Kue“. Marina kue is Guaraní and it means Marine former lands.
2. A week before the massacre in Marina Kue occupation, Curuguaty, Paraguay, a representative from
the Ministry of Home Affairs, Elvio Cousirat told the farmers: “You’d better go and sell candies and
cookies in the streets of Asunción” 3. Rosa María, Juan Ramón’s wife, prepared mate and reviro for
breakfast that dawn of June 15th 2012. In the occupied field Marina Kue, the state lands that the bu-
sinessman Blas Riquelme reclaimed as his, it was cold and really wet. Many farmers were sick. For that
reason, María Rosa added sage and ambay to the mate. Reviro was made with three eggs, flour and oil.
4. As from 6 in the morning on that infamous day, a helicopter from the National Police overflew the
settlement. The farmers expected barely one police line; they would face them up through dialogue.
They were positively sure those lands were to be given to them, because there is no document proving
that Marina Kue lands belonged to the businessman. Nobody, absolutely nobody, had imagined such a
big army to evict them, holding rifles, and machineguns. 5. In Paraguay, extensive landowners don’t
pay taxes. 2% of this population owns 85% of all the land. The “de-farming” of the land threats the food
culture of Paraguayan people, who are the producers and caretakers of the ancestral Guaraní culture.
40·
P. 10: ...to live in the clouds / 1. Soy is a commodity, for the region producing it. Commodities
are a limited and rough kind: they don´t develop; neither change or else they don´t survive. Their
life expectancy runs out through the exchange. 2. Even funnier than utilitarian, amenities believe
themselves to be, being neighbouring tribe to commodities. Sauna, golf, gym and swimming-pool are
some of the members of the species. Their apparent vitality runs short where their solitary exclusive-
ness starts. 3. The accumulation of capital generated by agribusiness searches for investment spaces.
In soy cities and ports monstrously high skyscrapers and gatered communities reproduced, control
drones and Hilux 4by4. The horizon is a dying notion further away from the gates, dark glass panels,
air-conditioning and the almighty GPS.
·41
P. 11: Voices of experience / 1. Pst, pst! 2. Hey! 3. Let´s go!/ Right now? 4. It´s time! 5. Go, go,
go. 6. But… 7. Let´s go, earth is live. 8. Guaraní communities believed in a land with “no evil”. It was
a paradise within this world, somewhere people didn´t die, got sick or even suffer. However, they had
to look for it. That is why they moved constantly and in that search, they walked from south the Ama-
zon to the Delta of the Paraná River, in between the Atlantic Ocean and the east of Perú and Bolivia.
All the same they never got to find it, which means we’ll have to continue looking.
42·
NoTaS | Soja boNuS Track | NoTeS
Página 3 | La “oruga Peronista“, reconocida
por todo peón de campo argentino es de color
oscuro y extremadamente “nerviosa“. Se ali-
menta de hojas, empezando por la parte su-
perior de las plantas y es su principal plaga.
El nombre científico es “Anticarsia gemata-
lis“. La “Kirchnerista“ es la “oruga bolillera“,
de la especie Anticarsia, pero come brotes y
tallos tiernos. || The caterpillar Peronista,
known throughout by Argentine farmhand
is dark and extremely “nervous”. It feeds on
leaves, starting at the top of the plants and
is the main pest. The scientific name is “Anti-
carsia gematalis”. The “Kirchner” is also Anti-
carsia species but eats buds and tender stems.
P.4 | “Suplemento Rural del diario Clarín“,
principal vocero de los agronegocios (jun-
to con el diario La Nación, socios en la fe-
ria Expoagro). Allí se anunció por primera
vez la introducción de la soja RR2 en 2009.
“Super Soja“ es un superhéroe de Nidera:
(www.niderasemillas.com.ar). El cantante
se puede ver en youtube como „Payador del
campo“. La foto la tomé en Exporagro 2013,
en el stand Nidera. || “Rural Supplement in
newspaper Clarin”, main spokesman of agri-
business (along with the newspaper La Na-
ción, partners in the fair Expoagro). There
was first announced the introduction of
RR2 in Argentina in 2009. “Super Soya” is a
Nidera´s superhero (www.niderasemillas.com.
ar). The singer can be seen on youtube as
“Payador del campo.” The photo was taken
in Exporagro 2013, at the stand of Nidera.
P.5 | 1. andrés carrasco, principal referente
científico y denunciante de la implementación
de “un experimento ecotoxicológico” en la re-
gión / carlos carballo, ingeniero agrónomo,
Titular Cátedra Libre Soberanía Alimentaria,
Facultad de Agronomía UBA. 2. Integrantes
del coro: Hermes binner, ex Gobernador de
la Provincia de Santa Fe (Partido Socialista)
/ josé M. De la Sota, actual Gobernador de la
Provincia de Córdoba (Peronismo Opositor) /
alfredo De angelis, dirigente rural, actual
candidato a diputado del PRO / Miguel del
Sel, actor cómico devenido político macrista
(PRO) / Luis M. etchevehere, actual Presiden-
te de la Sociedad Rural Argentina / Marcela,
hija adoptiva de ernestina Herrera de Noble,
principal accionista del Grupo Multimedia
Clarín. La Justicia no ha definido aún si es
hija de desaparecidos durante la última dicta-
dura cívico-militar (1976-1983). “La patria es
el otro” es una frase acuñada por la Presiden-
ta cristina kirchner || 1. ac Main scientific
referent and complainant of the implementa-
tion of “an experiment eco-toxicological” in
the region / cc Engineer in Agronomy, Food
Sovereignty free Subject, Professor School of
Agronomy, UBA. 2. Chorus members: Hb Ex
Governor of the Province of Santa Fe (Socia-
list Party) / jMDLS, present Governor of the
Province of Córdoba (Opposing Peronismo)
/ aDa, rural leader form the opposition /
MDS, comedian turned into politician (PRO)
/ LMe, present President of the Argentine
Rural Association / Marcela, ernestina He-
rrera de Noble’s adoptive daughter, Multime-
dia Clarín Group main shareholder. Justice
hasn´t defined yet whether she is an appro-
priated daughter of “disappeared“ people du-
ring the last civil-military dictatorship
(1976-1983). “Homeland is the other“ says
the present President cristina kirchner.
P.7 | 1. Ex presidente argentino (1989-1997)
y ex Ministro de Pesca, Agricultura y Gana-
dería. Bajo su gestión se introdujo en 1996 la
soja transgénica con glifosato en Argentina.
2. Presidente del INTA (1994-1996). Director
del Suplemento Rural del diario Clarín. Ideo-
lógo de la feria “Expoagro” y defensor del
modelo transgénico. 3. j. cobos, Vicepresi-
dente de Argentina (2007-2011). En 2008 votó
en contra de la Resolución 125 que proponía
aumentar las retenciones a la exportación de
soja. j. Venegas, desde 1991 Secretario Gene-
ral de UATRE, el gremio que posee más tra-
bajadores en negro en la Argentina. En 2012
funda FE, partido politico opositor al oficia-
lismo. 4. Presidenta argentina desde 2007.
Desde 2003 lidera junto a Néstor kirchner un
proceso de recuperación del rol de Estado a
favor de una mayor inclusión social. Su ges-
tión, sin embargo, profundiza el modelo de
monocultivo de soja transgénica asumiéndolo
como herramienta de redistribución de la ri-
queza. En 2012, el mismo día de la masacre
de Curuguaty (parte de la operacion desti-
tuyente del Presidente paraguayo Fernando
Lugo), Cristina acuerda con Monsanto la ins-
talación de la planta más grande del mundo
para procesamiento de semillas de maíz, en
Malvinas Argentinas, Córdoba. 5. Gobernador
de Santa Fe y Gobernador de la Provincia de
Buenos Aires inaugurando la feria “Expoagro
2013”. 6. Dirigentes de la oposición al gobier-
no actual almuerzan: Economista del PRO;
Dirigente rural y actual candidato a diputa-
do del PRO; Líder del PRO y jefe de Gobier-
no de la Ciudad de Buenos Aires; Principal
editorialista del diario La Nación; Ministro
PRO de Seguridad; Economista del Peronismo
opositor. || 1. Former President (1989-1997)
and former Minister of Agriculture, Fishing
and Livestock. Under their administration,
in 1996 transgenic soy with glyphosate en-
tered in Argentina. 2. INTA President (1994-
1996). Rural Supplement Director in Clarín
newspaper. Ideologist of the fair “Expoagro”
and defender of the transgenic model. 3. jc
Vice-president of Argentina (2007-2011). In
2008, he voted against the “125 Resolution”
that proposed an increase in soy export ta-
xes. jMV since 1991, UATRE General Secre-
tary, the farming union that has more illegal
workers in Argentina. In 2012, he founds FE
(faith), a political party contrary to the offi-
cial one. 4. President of Argentina since 2007.
Since 2003, she leads with Néstor kirchner a
process to recover the State role in favour of
a major social inclusion. Her administration,
though, deepens the transgenic soy single-
crop model assuming it as a tool of wealth
re-distribution. In 2012, the same day of “Cu-
ruguaty massacre” (part of the operation to
·43
remove the Paraguayan President Fernando
Lugo), Cristina agrees with Monsanto the
installation of the biggest plant in the world
to process maize seeds in Malvinas Argen-
tinas, Córdoba. 5. Governor of the Province
Santa Fe and Governor of the Province of Bue-
nos Aires opening the fair “Expoagro 2013”.
6. Opposition leaders having lunch. From
left to right: economist from PRO; rural lea-
der, present candidate to the Congress from
PRO; PRO leader and Chief of the Government
of the City of Buenos Aires, principal edito-
rialist of the newspaper La Nación, Minister
PRO of Security, economist from opposition.
P.8 | Martina Paredes: activista social, fa-
miliar afectada por la masacre de Curuguaty.
Wilfrido orzusa: educador popular, trabaja
en agroecología con organizaciones socia-
les y campesinas. El guión de este capítulo
lo realicé en base a las investigaciones de:
“Paraguay. Mafia. Soja, narco, terror y gol-
pe de Estado parlamentario”, Marcos Maiz
Montanaro, Asunción 2012 y “La masacre de
Curuguaty. Golpe sicario en el Paraguay”, ju-
lio Venegas Vidallet, Asunción 2013. || MP:
social activist, family member affected by the
Curuguaty massacre. Wo: popular educator,
works in social agroecology and with farmer
organizations. I wrote the script of this chap-
ter based on the research books (see above)
P. 10 | 1. Nueva sede de la Gobernación de
Córdoba, Argentina; 2. Puerto Norte, Rosario,
Argentina; 3. Molino y barco abandonados,
Federación, Paraguay; 4. Proyecto de vivien-
das y hoteles de lujo en los silos de Puerto
Norte; 5. Proyecto para la ex Villa Baja, Fe-
deración; 6. Silos en desuso de Villa Baja.
Todas las imágenes fueron hechas en 2013
|| 1. New Government House, Córdoba, Ar-
gentina, 2. North Port, Rosario, Argentina, 3.
Abandoned mill and ship, Federación, Para-
guay, 4. Project for luxury homes and hotels
in North Port silos 5. Project for the former
Villa Baja, Federación. 6. Disused Silos Vi-
lla Baja. All the images were taken in 2013.
44· ·45

2.
por AC
LOS drOnES
TrAnSGéniCOS
unA MáquinA CiEGA E inviSiBLE

“Un monstruo americano camina en la noche. Mira al cielo y mira a su

alrededor. Parece extraviado pero sigue su estrella. Mientras lo hace,
mueve su lengua. Pronto, son muchos los que lo acompañan. Juntas, sus
voces dicen: preguntando caminamos.”1

“Para Occidente, el sistema regulatorio de lo monstruoso (aquello que ha

sido contaminado por una mezcla aberrante) se combina con sistemas
racionales pseudo-científicos, tales como el Darwinismo
Social, para crear una ideología de la separación. El esta-
un blecimiento de esta ideología ha servido por mucho tiempo

MOnSTruO
a iniciativas coloniales y endocoloniales (...) El proceso
comienza con una reinscripción del territorio del otro con

AMEriCAnO los signos de la civilización-manufactura, commodities,

administración de recursos, y todo el montón de relaciones
En LA MirA sociales que acompañan estos materiales y procesos, todos
unidos bajo el signo de la providencia o el progreso. El pro-
greso asegura que la apariencia de este orden simbólico se
presente como enormemente positivo e indisputable en su generosidad,
mientras que los signos de los regímenes indígenas son parodiados, ridi-
culizados, asimilados o destruidos.”2

“Bryant prefería los turnos de noche, que coinciden con el día en Afganis-
tán. Veía a la gente cultivando los campos, a los niños jugando al fútbol
y a los hombres que abrazaban a sus esposas e hijos. Cuando se hacía
de noche activaba la cámara de infrarrojos. Estudiaba a las personas
durante semanas, entre ellas a los combatientes talibanes (...) Llegaba
a conocerlos. ‘Hasta que alguien más arriba en la cadena de mando me
daba la orden de disparar’”.3

La monstruosidad no significa lo mismo para la tradiciones religio-

sas y filosóficas de Occidente que para las cosmovisiones originarias
en América. Desde Alaska hasta la Patagonia, las comunidades origi-
narias encuentran en los seres híbridos y los dioses compuestos por
partes humanas, animales, vegetales, minerales, aliados posibles,

1 Eduardo Molinari. El camaleón, Edición Archivo Caminante y Museo de Antioquia,

Medellín, 2011.
2 Critical Art Ensemble. The molecular invasion, Autonomedia, 2002.
3 www.ensenadaderiazor.blogspot.com.ar
46· ·47

“La invasión y el control molecular se están transfomando rápidamente

en nuevos tipos de control colonial y endocolonial. El foco parece estar
en consolidar la cadena alimentaria desde la estructura molecular hasta
el envase del producto. Con la capacidad de controlar mejor la expresión
de la especie, las corporaciones tienen una oportunidad mejor que nunca
de intensificar la dependencia de las naciones en desarrollo respecto de
la economía corporativa de Occidente (…) Este plan ha existido desde la
implantación de la agricultura industrial, de modo que se les ha dado a
las hegemonías de recursos alimentarios otra poderosa herramienta que
encaja perfectamente en la presente estructura de dominación.”6

también poderes protectores. La naturaleza habla cotidianamente y

dialogar con ella es imperioso para sobrevivir. Los monstruos no son
una necesaria encarnación del mal. El imaginario y el régimen de vi-
sibilidad que el capitalismo intentó sobre-imponer desde sus orígenes
en todo en el continente americano (ver Principio Potosí4) y también
en la actualidad a través del modelo transgénico, persiste en identi-
ficarse como ligado a las nociones de progreso y desarrollo. Estaríamos
yendo hacia un mundo feliz, sin hambre, nos dice el monstruo trans-
génico sin pudor, mientras deja en nuestros cuerpos y suelos la huella Masacre de Curuguaty,
Paraguay. Junio 2012.
(ecológica, social, cultural) irreversible de su agresión. Como un Drone
de la CIA, su voz de comando “viene de arriba” y tiene en el centro de
su mira al monstruo americano.
14 de julio de 2013. Llegamos a Marina Kue luego de recorrer en auto
más de 1500 km. Menos de un año antes, el 15 de junio de 2012, en
“Era muy claro para la gente. No es que los campesinos
seamos ignorantes y abusivos. Sabían muy bien de quién BOLSAS En estas tierras, ubicadas en Curuguaty, Departamento de Canindeyú,
noroeste del Paraguay y frontera con el Brasil; zona de alta concen-
eran (las tierras), pero estamos en una mafia judicial,
en una mafia política que mantiene a estos usurpadores un CAMión tración de producción de soja transgénica, cultivos de marihuana y
contrabando de drogas y armas, ocurrió la tragedia conocida como
y se ufanan de tener un poder alternativo (paralelo) en
nuestro país” 5
SOjErO Masacre de Curuguaty7. Allí se llevó a cabo un operativo de desalojo
de campesinos que reclamaban por tierras, ordenado por la Fiscala

4 www.potosiprincipleprocess.wordpress.com 6 Critical Art Ensemble. The molecular invasion, Autonomedia, 2002.

5 Vidal Vega. Fragmento de la entrevista al dos veces Secretario de la Comisión Sin 7 Para más información se sugiere la lectura del libro de Julio Benegas Vidallet,
Tierras en Ybypyta, Curuguaty, que fue asesinado en su casa por balas sicarias el La Masacre de Curuguaty, Golpe sicario en el Paraguay, Edición del autor, 2013.
1 de diciembre de 2012. www.ea.com.py También, El experimento neofeudal, por Ala Plástica, en esta publicación.
48·
Ninfa Aguilar. Parte del plan que la alianza entre la clase dominan-
te paraguaya, los partidos y medios de información de derecha, los
terratenientes favorecidos por el reparto de tierras de la dictadura de
Alfredo Stroessner y las transnacionales sojeras, con el visto bueno
de la Embajada de Estados Unidos, llevó adelante para lograr desti-
tuir al ex obispo católico y presidente del Paraguay, Fernando Lugo.
En rigor, creo que debe leerse el golpe de Estado parlamentario por un
lado como un ataque contra la democracia paraguaya y la incipiente
construcción de una fuerza política capaz de terminar con 60 años
de gobierno del Partido Colorado allí; y por otro, contra el proceso de
unión latinoamericana en pleno desarrollo que –a pesar de sus con-
tradicciones– pone en tela de juicio las pretensiones hegemónicas de
los EE.UU. y de la Unión Europea en la región. Las tierras en disputa
pertenecían al INDERT (Instituto de Desarrollo Rural y de la Tierra),
estaban destinadas a la reforma agraria y eran reclamadas como pro-
pias por el empresario Blas N. Riquelme y su grupo Campos Morombí.
Francotiradores sicarios de Riquelme, infiltrados entre los campesi-
nos, tendieron una emboscada y, en el momento en que las fuerzas de
seguridad se pusieron en contacto con los campesinos para lograr su
desalojo, iniciaron una balacera dando muerte con disparos precisos
a los policías. Los campesinos, que siempre pensaron que habría una
instancia de diálogo y que esperaban que se les mostrara la documen-
tación que acreditara quién era el propietario de las tierras, además
Tribunales de Asunción.
Ingreso de los campesinos
a la sala de audencia.
Foto AC, julio 2013.
·49
de sufrir la inmediata represión que mató a 11 de ellos y los encarce-
ló junto a sus familiares que concurrieron a los hospitales cercanos
para prestar atención a las decenas de heridos que sobrevivieron a
los tiros, deben enfrentar hoy graves acusaciones en su contra. Los
casquillos encontrados en el lugar del enfrentamiento indican que
no fueron sus rifles para cazar animales los que dieron muerte a los
policías. Durante nuestra conversación con ellos, en el campamento
actualmente instalado en Marina Kue, nos contaron que los cuerpos
de sus compañeros muertos fueron retirados por las fuerzas de segu-
ridad en bolsas y frazadas, cargados en un camión sojero. Caminamos
juntos los 3km. que van desde el costado de la ruta hasta el sitio en el
que fueron acorralados, la casa que habitaban los sicarios de Riquel-
me. Se encuentra en una loma, delante de un monte acechado a cada
lado por cultivos transgénicos que desde lejos parecen dos lagunas
verdes. En una de las habitaciones de esa construcción de madera y
pisos de tierra encontré una mesa, deforme, semidestruida. No puedo
dejar de preguntarme: ¿qué puñado de tipos estuvieron sentados allí?
¿Qué decisiones se habrán tomado alrededor de esa maldita mesa?
En el capítulo siguiente se comprenderá mejor el sentido de estos
interrogantes. Los campesinos nos mostraron las huellas de las balas
en los árboles y los sitios adonde habían encontrado los cuerpos de
sus compañeros muertos. Estaban señalados con simples palos, ramas
verticales. “Volveremos a ocupar estas tierras” nos dijeron. Regresamos
50· ·51

al campamento. Tomamos mate. Hernán instaló su computadora para

intercambiar fotos. Alejandro y yo escuchamos acerca de las bondades
de las empanadas de tatú.8 Azul no paró de dibujar al lado del fuego.
La luz se apaga, es de noche. Nos despedimos. Antes de irnos nos
cuentan que al día siguiente se reabre el juicio contra los compañeros
presos. Hay una audiencia en Asunción y nos piden que vayamos.

Tribunales de Asunción.
El fiscal Jalil Rachid Lichi,
Foto AC, julio 2013.

15 de julio de 2013. Tribunales de Asunción. Allí estuvimos. Dos

policías con armas automáticas custodiaban el sillón vacío de la jueza
Yanine Ríos. El fiscal Jalil Rachid Lichi (hijo de Bader Rachid Lichi,
amigo de Blas N. Riquelme, también beneficiario de tierras públicas
y al igual que Riquelme, ex presidente del Partido Colorado) estaba a
cargo de la acusación contra los campesinos. Su cabeza está llena de
gomina. Le saqué fotos. Azul dibuja y dibuja. Está entrenada, en los
últimos dos años asistió a los tribunales de Comodoro Py, en Buenos
Aires, para dibujar los rostros de los genocidas de la última dictadura
militar en Argentina. Comienzan los alegatos, pero nos tenemos que
ir. Lamentablemente, no sabíamos de esta audiencia y nuestro retorno
estaba programado. Saludamos a los compañeros y prometemos se-
guir en comunicación. Bajando las escalinatas del bloque de cemento
que son los tribunales, una imagen del campamento de Curuguaty me
brindó orientación y energía: una estrella blanca estampada en una
tela azul oscuro, un retazo de cielo nocturno hecho bandera. La ima-
gen se completa, son 11 estrellas-banderas que se hunden en la tierra
al costado de la ruta. Los Compañeros están presentes. Reclamamos
memoria, verdad y justicia.
Recordatorio de
las víctimas de la
Masacre de Curuguaty;
Marina Cue, Paraguay.
8 Tatú carreta. Armadillo, mamífero con caparazón que habita el monte paraguayo. Foto AC, julio 2013.
52· ·53

EL
EXpEriMEnTO
por ALA pLáSTiCA nEOFEudAL
Cuando Eduardo Molinari nos convocó a participar de una investi-
gación colectiva para una publicación en el marco de su proyecto
BOGSAT supimos que estábamos frente a la posibilidad de examinar
en directo la estructura de algunos acontecimientos clave que se han
sucedido en los últimos tiempos en el área de la Cuenca del Plata1 re-
lacionados directamente con el proceso de transnacionalización de los
territorios y de desestabilización política a gran escala que benefician
básicamente a sectores agroindustriales –monocultivos transgénicos–
corporaciones biotecnológicas como Monsanto, Syngenta, Bayer, Car-
gill, ADM y Bunge, terratenientes y pooles de siembra que controlan
millones de hectáreas (Los Grobo, CRESUD, El Tejar, Maggi, etc.…)

Aquella tarde de junio en La Puerto Rico, un bar notable ubicado

en el casco histórico de Buenos Aires, fue el escenario donde comen-
zamos a desplegar en el aire la cartografía de un territorio que días
más tarde comenzaríamos a recorrer, en el que se superponen capa
sobre capa distintos niveles de organización espacial y política y en el
que cohabitan los rastros de las poblaciones guaraníes de las comarcas
bajas y selváticas originarias de América, las divisiones realizadas
por españoles y portugueses en su proceso de conquista, las misiones
jesuíticas y su estrategia evangelizadora que desde 1585 y hasta 1767
se extendiera en estas regiones, los modelos nacidos de la revolución
francesa que dieron inicio a las repúblicas actuales, los ideales de
unificación de una patria grande latinoamericana, la influencia de los
flujos inmigratorios provenientes de España, Italia, Alemania, Polonia
y de Medio Oriente del s. XIX y XX, hasta la actual encrucijada donde
aquel objeto concreto, único y también unificador de las legalidades,
de las acciones, integrador de niveles, dimensiones, temporalidades
y especialidades que es el estado empieza a perder su sustento desde

1 La Cuenca del Plata, tiene una superficie de 3.200.000 km², aproximadamente un

Francotirador observa a
seguidores del presidente
paraguayo Fernando Lugo
manifestándose frente a
la casa de gobierno luego
de su destitución.
EFE - Junio de 2012
tercio del área total de los EEUU y casi igual al área de todos los países que com-
ponen la Unión Europea. Desde su divisoria de aguas correspondiente abarca parte
de Argentina, Brasil, Bolivia, Paraguay y Uruguay. El nombre “del Plata” parece
deberse a un remoto influjo del Cerro Rico de Potosí y al mito del Rey Blanco que
los indígenas pasaban de boca en boca hasta llegar a oídos de los tremebundos
conquistadores europeos. En este sentido la Cuenca del Plata lleva una designación
de gran valor simbólico y una experiencia práctica que denota desde el inicio de la
interferencia de la conquista, la consolidación de los ríos como vías de extracción
de materia del sistema.
54· ·55

el momento en que este comienza a constituir una caja demasiado ha surgido y que comparte espacios junto a los gobiernos estatales
estrecha para el accionar de los nuevos agentes: las empresas transna- sobre los que inciden directamente en su sostenimiento y control,
cionales de los agronegocios y los megaproyectos mineros e hidroeléc- imponiendo cambios en las políticas tanto en aquellos identificados
tricos. Frente a este panorama desde los ámbitos oficiales de los países cómo conservadores cómo en los denominados progresistas y críticos
del sur de América se han comenzado a diagramar propuestas de in- del neoliberalismo quienes han resignando partes menos pobladas
tegración que intentan presentar una posibilidad de salida para estas de sus dominios a cambio de modelos de retención que les permiten
restricciones. A primera vista la idea de integración es un concepto asumir un rol activo en aspectos sociales, educativos y sanitarios
positivo, pero la trampa intrínseca de estos procesos de integración dentro de ciudades burbuja cada vez más desentendidas del espacio
regional es que los mismos son la estructuración de nuevos subsiste- circundante.
mas del capitalismo. Subsistemas con funciones de concentración y
centralización que para su funcionamiento necesitan el acondiciona-
miento físico para la libre circulación de mercancías, el levantamiento
de las restricciones administrativas de los Estados y la reorientación
de los esfuerzos de inversión para acondicionar los territorios, remo-
viendo las “barreras” físicas pero también las normativas y sociales,
subordinándolas a la lógica de la competitividad. Es así cómo en las
últimas décadas comenzó a imperar el concepto de la cuenca como
“fábrica global”. Esta idea-acción ya ha producido una expansión de
la frontera agrícola y desplazamientos forzados de pobladores nunca
antes conocido en la región, a la que se ha sumado un último y no
tan imaginario deslinde: la “República Unida de la Soja”, una alegoría
cada vez más real con la que en el año 2003, la corporación Syngen-
ta2 publicitara sus servicios en los suplementos rurales de los diarios
argentinos Clarín y La Nación, bautizando con ese nombre a los terri-
torios del Cono Sur en los que se sembraba soja –integrados por Brasil, Para muchos el avance de este proceso es tan importante que los
Argentina, Uruguay, Paraguay y Bolivia– y a la que se identificaba estados-nación no solo han perdido gran parte de sus capacidades
con una bandera en cuyo centro lucía cual blasón un poroto de soja. sino estarían próximos a desaparecer. Lo que no aparece tan claro es
En números concretos esta imaginaria república concentra un valor de qué quedaría en su lugar.4
producción de aproximadamente $50 billones de dólares, lo que supera
con creces el PIB de muchas naciones de existencia real y cubre en la
actualidad una superficie de más de 46 millones de hectáreas de mo- El 22 de junio de 2012, las corporaciones biotecnológicas lograban
nocultivo de soja transgénica, fumigadas con más de 600 millones de dar un gran golpe. Finalizaba la Conferencia de las Naciones Unidas
litros de glifosato y que provoca una deforestación de –como mínimo– sobre el Desarrollo Sostenible en Brasil conocida cómo Río+205, con
500 mil hectáreas por año.3 la adopción del concepto de Economía Verde. Con esta
El enorme poder fáctico que exhibe esta república y sus intereses idea se pretenden aumentar los mercados financieros
globales estratégicos compiten con los territorios reales estatizados.
El avance de este proceso es tan importante que los estados-nación EL pOdEr con la naturaleza legitimando el uso de nuevas tec-

En LAS
nologías, herramientas de mercado y el comercio de
van perdiendo gran parte de sus capacidades de dominio territorial y nuevos productos básicos estandarizados como la bio-
comienza a evidenciarse una compleja red de gobernanza privada que
SOMBrAS diversidad (commodities) para sustituir la extracción
de petróleo con la explotación de la biomasa. En este
futuro post-petrolero la producción industrial (de
2 Syngenta es una empresa multinacional dedicada al desarrollo y producción
de agroquímicos y semillas. La compañía surgió de la fusión entre otras em- plásticos, sustancias químicas, combustibles, fárma-
presas dedicadas a la producción de agroquímicos y semillas tales como No-
vartis agribussines y Zeneca agroquímicos, las que a su vez incorporaron 4 La República de la Soja: Las Alegorías de la Globalización, Gerardo Evia.
empresas o ramas de ellas como Ciba Geigy, Sandoz, ICI Chemicals y Merck. www.agropecuaria.org/analisis/EviaRepublicaSoja.htm
En la historia de desarrollos de algunas de estas se encuentran el DDT y herbicidas
5 Veinte años después de la Cumbre de la Tierra de 1992 en Río de Janeiro, donde los
como el MCPA y el 2,4 D. La empresa cotiza en las bolsas de Suiza y Nueva York.
países adoptaron la Agenda 21, proyecto para repensar el crecimiento económico,
3 www.grain.org/article/entries/4749-the-united-republic-of-soybeans-take-two avanzar en la equidad social y asegurar la protección del medio ambiente.
56·
cos, energía, etc.) dejará de depender de los combustibles fósiles
para derivarse de materias primas biológicas transformadas me-
diante plataformas de alta tecnología basadas en la bio-ingeniería,
incluyendo la genómica, la nanotecnología y la biología sintética.
Los más importantes depósitos de biomasa terrestre y acuática
del planeta se encuentran ubicados en el Sur global. Y es en el Sur
de América donde se encuentran 3 de los 4 mayores exportadores
mundiales de soja transgénica: Brasil, Argentina y Paraguay. De los
3 países mencionados Paraguay es el que presenta mayor debilidad
institucional. Paraguay es, uno de los 10 países más desiguales del
mundo donde el 90% del principal medio de producción del país que es
la tierra, está en manos del 2% de la población. Sin embargo o a raíz
de esto es el que mejores perspectivas brinda para establecer la capital
de la República Unida de la Soja.
El mismo 22 de junio Fernando Lugo, ex obispo católico y presi-
dente del Paraguay era desplazado de su cargo por un golpe de estado
promovido por un parlamento conformado mayoritariamente por los
partidos conservadores apoyado por terratenientes del agroestado. Si
bien la oposición había intentado quitarlo del poder con varias ame-
nazas previas de juicio político, fue la denominada Masacre de Curu-
guaty el evento con el que lograron este objetivo.
Asunción, Capital del Paraguay
Entrevista con Oscar Rivas, ministro de Ambiente durante el gobierno de Lugo
“Frente a la Republica Unida de la Soja que todo lo destruye porque
todo lo enajena y lo expulsa hay miles de comunidades que mantienen
unida la red de la vida bajo los parámetros de la tierra sin
Esto
mal 6 y desde estos oasis de las culturas asociadas a la me-
gadiversidad volveremos a recuperar nuestros territorios”.
es una
Oscar Rivas es un arquitecto reconocido en su esfuerzo
Guerra
por proteger el sistema de humedales del Valle Central
de la Cuenca del Plata y la calidad de vida de sus comu-
nidades. Durante tres años y medio estuvo al frente del
Ministerio de Ambiente del Paraguay en el gobierno de
Fernando Lugo.
6 Los Tupi-Guaraní vivían soñando el Yvymarae´ÿ, la prodigiosa Tierra sin Mal donde
el maíz crece solo y los hombres son inmortales. Por eso, ellos formaban parte de
un pueblo en permanente éxodo. Los Karai, chamanes con suficiente poder para
hacerse invisibles, resucitar a los muertos y devolver la juventud a las mujeres, eran
los que mantenían viva la llama de la esperanza de llegar un día al mítico edén.
·57
Según explica “La ciudad de Asunción se funda bajo el nombre de
Paraguai un vocablo guaraní 7 que tiene entre 3000 y 5000 años de an-
tigüedad y que hasta hoy pervive. Cualquier mestizo o indígena guara-
ní-parlante llama a este sitio Paraguái. La parte más vieja de nuestra
historia está allí, con un potencial de dimensión fantástica. En la historia
de manual lo que aparece formateado es que Paraguay comienza cuando
se instalan las entelequias burguesas del siglo XVII que dieron forma a
los países latinoamericanos tal cómo los conocemos hoy, pero hay otras
territorialidades invisibilizadas que siguen muy vivas en América y en
Paraguay quizás más que en ningún lado.”
Durante su gestión “ni un solo evento transgénico superó el proceso
licitatorio. Esto no fue por capricho. Las decisiones estaban basadas en
un apego riguroso a la normativa, a los procedimientos y a una cabal
interpretación del principio precautorio”. “La soja en Paraguay es ilegal
porque no cumple con la ley forestal, no cumple con la ley de aguas y
no cumple con la ley fitosanitaria. La legislación establece que todos los
cauces de agua deben estar protegidos y no contaminados por lo que debe
existir un sistema de monitoreo de calidad de agua de todos los cauces
que estén en territorio sojero los que no tienen que tener ni un ápice
de agroquímicos o agrotóxicos o biocidas etc.” Quizá sea por esto que,
Oscar Rivas haya sido el único funcionario imputado penalmente por
el gobierno surgido del golpe parlamentario que destituyo al ex pre-
sidente Lugo. “Inmediatamente después de que yo saliera del ministerio
comenzaron las aprobaciones por decreto presidencial de nuevas semillas
transgénicas en Paraguay”.
“En Paraguay la soja no paga. Con la soja vos tenés un territorio ocupado
y una economía ocupada; ocupada en el sentido de la actitud invasiva
que genera un coloniaje del modelo mega agro-exportador. Este coloniaje
aparece utilizando múltiples fisonomías pero en el fondo la agenda que
se discute es la de las corporaciones. Estos poderes se instalan en el mun-
do en desarrollo como territorios generando desestabilización y guerras
internas. Aquí esa guerra se expresa en los desplazamientos forzados, la
resistencia campesina a la expansión de la soja, en las ocupaciones de
tierras, en el incendio de campos, etc.”
El Paraguay actual tiene una superficie de 406.752 km² pero en los
títulos que reclaman derechos sobre ellas figuran 528.000 km². Este
30% inexistente evidencia la densidad y desigualdad de la disputa.
Una gran parte de la población rural no posee títulos de propiedad.
Viven allí desde siempre o han ido desplazándose tradicionalmente con
esa trashumancia que caracterizó y aún caracteriza a varios pueblos
originarios de estas comarcas. Poco a poco y después de diversos golpes
7 Familia lingüística sudamericana; es la de mayor importancia de las lenguas autóc-
tonas de toda América. El guaraní sobrevive cómo lengua mayoritaria del paraguay
a pesar del proceso de limpieza étnica del cual fue objeto esta región.
58·
de Estado, pases de favores y negociados, una tremenda cantidad
de territorio en la que los campesinos vivían naturalmente ha ido
concentrándose en manos de latifundistas, sobre todo Brasiguayos8
Desde entonces estas tierras comenzaron a ser totalmente sojizadas.
Base IS
8 Brasileños (y sus descendientes), establecidos en el territorio de la República del
Paraguay, en las zonas fronterizas con Brasil, especialmente en los departamen-
tos de Canindeyú y Alto Paraná, en el sureste del Paraguay. En 1967, el gobierno
paraguayo abolió una ley que prohibía la compra de tierras por extranjeros en el
rango de 150 kilómetros de sus fronteras. A partir de 1970 comenzó la inmigra-
ción masiva de brasileños al Paraguay, en su mayoría agricultores de origen ale-
mán, italiano o eslavo de habla portuguesa del estado de Paraná. El flujo mayor
de inmigración ingresó cuando fue llenado el embalse de la represa de Itaipú. Al
inundarse sus propiedades, estos productores recibieron una indemnización para
comprar tierras en Brasil, pero optaron por desplazarse a la vecina Paraguay donde
la tierra costaba ocho veces menos. Tierras públicas sujetas a la reforma agraria que
nunca llegaron al campesinado paraguayo, fueron adjudicadas a un cierto número
de productores brasileros en términos de uso. Estos productores adjudicatarios
de tierras públicas compran las semillas genéticamente modificadas a las grandes
compañías y el estado paraguayo cobra un impuesto a la exportación por la can-
tidad de granos que pasan por la aduana. Un factor adicional para estimular la
migración fue la creciente mecanización de la producción de soja, lo que resultó en
la concentración de grandes extensiones de plantaciones de empresas como Cargill.
Actualmente se estima que son 350.000 los ciudadanos provenientes del Brasil que
viven en Paraguay.
·59
Uno de los principales puntos que fue bandera para el acceso del
Gobierno de Fernando Lugo al poder el 20 de abril de 2.008 fue el
de retomar cómo un proyecto de desarrollo nacional a favor de las
familias rurales e indígenas la Reforma Agraria nacida en 1963 y que
nunca llegó a concretarse.
“Para producir alimentos los campesinos se ven obligados a ir buscando
tierras en ese proceso de supervivencia cotidiana. Hay una conciencia y
una consigna en el movimiento campesino paraguayo de que las tierras
de la soja son tierras que genuinamente le pertenecen al sector productivo
campesino y allí hay un principio de soberanía que se reivindica popular-
mente. La gente no reivindica solamente su derecho a tener un pedazo de
tierra, sino que el movimiento campesino paraguayo reivindica y llama
a defender la soberanía de decidir su destino, su comida y su forma de
vida y cultura y todas esas cuestiones vitales que se ven profundamen-
te amenazadas por un proceso de invasión total de los monocultivos y
de expulsión” [...] “En ciertos lugares aparecen pequeños bastiones de
comunidades productoras de alimentos donde todavía flamea la bandera
paraguaya cómo símbolo de la resistencia campesina. Hijos de esos cam-
pesinos y otros solidarios del resto del país son los que invaden porciones
boscosas de los latifundios sojeros. Hoy ya hay reivindicaciones no sólo
de tierras con bosques sino también tierras mecanizadas como le llaman”.
La ley del Estatuto Agrario dice que las tierras productivas no son
reivindicables, a esto ellos responden: “Nosotros defendemos la bande-
ra de la legitimidad que no es la bandera de la legalidad porque la lega-
lidad la han construido los que han por los sectores que han detentado
el poder de nuestro país por golpes de Estado y corrupción durante todos
estos años. La ley existe, pero la legitimidad también”
“El antecedente del golpe contra Lugo podemos ubicarlo en el caso Ña-
cunday con campesinos que llegaron de todo el país reclamando tierras
fiscales de la reforma agraria que en parte fueron vendi-
CóMO das ilegalmente a diversas empresas que a su vez le ven-
den el uso a latifundistas para implantación sojera. Estos
SE FABriCA campesinos comenzaron a realizar ocupaciones en tierras
lindantes con el Parque Nacional de Ñacunday que estaban
un GOLpE en manos de Tranquilo Favero un sojero brasileño conocido
dE ESTAdO cómo ‘O Rei da Soya’ 9 En ese momento el gobierno solicita
a las 800 familias campesinas que vivían bajo carpas 10 en
9 El Rey de la Soja
10 Los carperos son campesinos transhumantes que viven en carpas de plastico sin
asentamientos suficientes para cultivar. Aunque tienen grupos en muchos lugares,
provienen mayoritariamente de los departamentos de Alto Paraná y San Pedro,
y son ramificaciones o desprendimientos de otras organizaciones agrarias y que
repentinamente tomaron por asalto la visibilidad pública.
60·
los límites del Parque Ñacunday11, que aguardaran una resolución judicial
sobre el conflicto dentro del parque para evitar un enfrentamiento entre
campesinos y los matones de los sojeros. Para los sojeros las comunidades
campesinas que resisten al avance del modelo de monocultivo extensivo
son un mal ejemplo para el resto del movimiento campesino que reclama
tierras en el resto de las zonas del país. Ahí comenzó a decirse que el
Estado paraguayo estaba permitiendo que un Parque Nacional fuera in-
vadido por protegidos de Lugo y que estos eran invasores de tierras y que
esta era una situación de total desgobierno.”
¿quE pASó En
CuruGuATy?
11 El denominado Parque Nacional Ñacunday hoy es solo de nombre de una natutra-
leza que ya desapareció. Hoy solo un mar de soja cubre esos lugares que otrora
fueron el pulmón verde del Alto Paraná.
·61
Curuguaty, departamento de Canindeyu, paraguay.
Entrevista a integrantes de la Asociación de Familiares de víctimas de Curuguaty
y de la Comisión Campesina de Marina Cue, en su mayoría familiares de los falle-
cidos y de los 43 imputados.
“132 dirigentes campesinos fueron asesinados después de la dictadura,
pero esta masacre de 17 personas en una tierra del estado tiene más
visibilidad porque se montó un golpe de estado a partir de ella”.
El Viernes 15 de Junio, el mismo día en que la presidente
de Argentina Cristina Fernández se reunía con empre-
sarios en el Consejo de las Américas en New York12 y
anunciaba públicamente la inversión de Monsanto para
una nueva planta de tratamiento y acondicionamien-
to de semillas de maíz transgénico con una capacidad
máxima de producción de 3,5 millones de hectáreas, en Paraguay se
producía el hecho conocido cómo la Masacre de Curuguaty que dejó
cómo saldo 11 campesinos y 6 policías muertos y decenas de heridos
graves. Este hecho se convertiría en el argumento que daría paso al
golpe de estado parlamentario conocido como el Golpe Transgénico que
desplazó al Presidente Fernando Lugo del gobierno y a la legalización
del ingreso de semillas transgénicas al Paraguay.
Curuguaty se encuentra ubicada en el departamento de Canin-
deyú, donde más se ha expandido la Soja en los últimos años. Estas
son tierras muy asequibles para los sojeros pero tienen la desventja de
encontrarse Muy cerca del departamento de San Pedro donde existe el
movimiento campesino más fuerte en todo el país. Por lo tanto está
en el límite de una zona de conflicto.
Las tierras públicas o adquiridas para la reforma agraria que fue-
ron cedidas contraviniendo la normativa legal se conocen como tierras
mal habidas. Se calcula que entre 1954 y 2003 se entregaron 7.851.295
hectáreas en estas condiciones, de acuerdo con el informe final de la
Comisión de Verdad y Justicia (2008)13. En los últimos 9 años, la Pro-
curaduría General de la República impulsó 110 demandas de nulidad
de títulos para la recuperación de tierras mal habidas (10 entre 2003
y 2008, y 100 entre 2008 y 2012). Hasta el momento ninguno de estos
predios fue recuperado.
Las tierras de Marina Cue14 habían sido ocupadas por el empresario
Blas Riquelme quien fuera ministro del dictador Alfredo Stroessner,
miembro del senado paraguayo por el Partido Colorado15 entre 1989 y
12 www.youtube.com/watch?v=cFgI4kJKbmI
13 www.ea.com.py/blas-n-riquelme-y-las-tierras-malhabidas-de-curuguaty
14 La expresión cue significa “ex” o “que fue”. Cuando se habla de Marina Cue signifi-
ca que esas tierras en el pasado pertenecían a la marina paraguaya o sea al Estado
por lo que son tierras públicas que en estaban destinadas a la Reforma Agraria.
15 La Asociación Nacional Republicana-Partido Colorado (ANR-PC).
62·
2008 y uno de los principales financistas de las campañas políticas de
este partido. Estas tierras pertenecientes al Estado paraguayo debían
ser destinadas a la reforma agraria pero pasaron por distintas manos
hasta llegar en forma fraudulenta a Riquelme quién las transformó en
un latifundio sojero bajo el nombre de la empresa –Campos Morombí–
Riquelme argumentaba su propiedad sobre las mismas basándose en
la prescripción adquisitiva por usucapión, pero hasta el momento las
tierras siguen perteneciendo al Estado paraguayo. En estas tierras se
asentaron las comunidades campesinas16 para reclamar la entrega de
2000 ha de las 75.000 ha de estas tierras del Estado.
“Todos los que estamos acá somos agricultores sin tierra. Esa es una
tierra que solicitamos desde hace 9 años. Mi padre tiene 10 ha pero mis
hermanos se habían casado y necesitaban por lo menos 10 ha más para
poder vivir. Lo que ocurrió en Curuguaty es el resultado de una ocupa-
ción del territorio para plantación de soja en un lugar que le pertenece
a los campesinos y no a los grandes terratenientes. Esto es Marina Cue!”
Martina Paredes y Mariano Castro
de la Comisión de las Asociación
de Familiares de Víctimas
de Curuguaty.
Foto Ala Plástica
“Los sicarios de Riquelme vivían en una casa y nosotros estábamos al
otro lado, a la orilla de un monte donde pusimos nuestras carpas. Allí se
iban los matones y disparaban contra nosotros permanentemente. No sa-
bíamos qué armas tenían, pero, según lo que nos contaban vecinos, eran
16 En estas tierras se hizo famosa la figura de El Mensú, nombre que recibe el traba-
jador rural de la selva en Paraguay y las provincias argentinas de Corrientes y Mi-
siones. El término, de origen guaraní, proviene de la palabra española “mensual”,
referida a la frecuencia del pago del salario. El trabajo del mensú ha sido tradicio-
nalmente asimilado a un régimen servil o semi-esclavo.
·63
fusiles y escopetas. Siempre le decía a nuestra gente que no estábamos
allí para enfrentarnos a esos matones, ni tampoco para desafiarles en la
calle, sino que entramos para que nos demuestren si esas tierras son o
no del Estado y que esa era nuestra finalidad. Con todas las personas con
las que hablábamos les decíamos eso”.
“La gente estaba esperando porque había un comentario de que ese día
iban a venir del gobierno para explicar la situación de las tierras, ya
que nosotros exigíamos que nos mostraran los documentos de propiedad
de Blas Riquelme, pero en vez de esto llegó la infantería por un lado
y por el otro un grupo antimotines y la caballería y así nos encerra-
ron en el medio. También llegaron grupos tácticos cómo GEO (Grupo de
Estrategias Operativas) y Fope (Fuerza de Operaciones de la Policía
Especializada)17. Los fiscales se quedaron en el fondo resguardados sin
intervenir.”
“Éramos 64 campesinos y llegaron más de 300 policías, ambulancias y
helicópteros. Aunque estábamos preparados para resistir, no pensamos
que esto podía derivar en una matanza. Si hubiéramos pensado esto no
hubiéramos ido en familia. Nadie quiere perder un hermano, un padre,
un hijo o un sobrino. No esperábamos esa tragedia.”
“Los sicarios de Riquelme comenzaron el tiroteo y luego la policía. Nos
disparaban también desde un helicóptero. Por suerte la mayoría corrió
hacia un monte de maíz y así pudieron salvarse, pero 11 murieron. Está
documentado que al menos 9 fueron heridos y ejecutados después del
enfrentamiento. Algunos llegaron a llamar a sus familiares y comentarles
que estaban heridos y escondidos pidiendo ayuda y luego aparecieron
muertos con disparos en la cabeza. Ejecuciones sumarias. Se informó de
todo esto a la justicia pero no hay ningún avance en este sentido”.
Los detalles de la tragedia son innumerables y mucha de la infor-
mación que circuló fue contradictoria Algunos hablaban de francoti-
radores, otros de grupos de infiltrados ajenos al asentamiento, incluso
algunos afirmaban que se había tratado de un error de fuego cruzado
entre policías, pero sobre algo hay certeza: 30 campesinos por más ra-
dicalizados que estuvieran no podrían decidir enfrentar a 350 policías
y fuerzas de elite junto a sus mujeres e hijos con viejas escopetas de
caza, palos y machetes. En el lugar se encontraron casquillos de armas
automáticas de alto calibre que no son las utilizadas por las fuerzas
de seguridad y mucho menos de los campesinos lo que hace suponer
la presencia de francotiradores que dispararon sobre la policía, ya que
los efectivos fueron ultimados por certeros disparos. Las vainas de los
17 FOPE es la unidad de fuerzas especiales de la Policía Nacional del Paraguay entre-
nada por los norteamericanos en técnicas de patrullaje, contraterrorismo y contra-
insurgencia.
64·
proyectiles fueron entregados a la justicia pero no han sido tenidos en
cuenta por la investigación fiscal.
“A los campesinos muertos se los llevaron para realizar las autopsias
en un camión sojero y a los detenidos los alojaron en la cárcel de Nueva
Esperanza. Otros se encuentran con arresto domiciliario en espera del
juicio, acusados de asociación criminal para invasión de la propiedad
privada y homicidio de los policías”
Señalamientos.
Lugares donde fueron
encontrados los cuerpos
de los campesinos.
Foto Ala Plástica
“La imparcialidad de la investigación de la causa, la credibilidad del
proceder indagatorio que está llevando a cabo el Ministerio Público, jun-
to con la falta de garantías procesales para los imputados, todos cam-
pesinos, hace pensar que estemos ante una acción inquisitoria con la
intención de cerrar este capitulo criminalizando a los campesinos de todo
lo sucedido, y obviando investigar el accionar policial, líneas de investi-
gación paralelas, o la actuación de la fiscalía en torno a ese desalojo de
unas tierras no registradas bajo la titularidad de Blas N. Riquelme. La
Fiscalía cerró el caso omitiendo investigar todo lo que no fuera responsa-
bilizar penalmente a todo ese colectivo campesino”.18
18 Informe de la Plataforma de Estudio e Investigación de Conflictos Campesinos
www.es.scribd.com/doc/110616439/Informe-Curuguaty-PEICC
·65
A un año de la Masacre de Marina Cue, las demandas de los familiares
y victimas de Curuguaty siguen estando vigentes:
1° La inmediata libertad de los presos políticos de Curuguaty y des-
imputación de los 60 imputados por invasión de inmuebles, aso-
ciación criminal y homicidio doloso en grado de tentativa.
2° La recuperación de las tierras de Marina Cue y su entrega a las co-
munidades afectadas por la masacre; porque no podemos permitir
que sobre la sangre derramada de nuestros compañeros y familiares
se siga plantando soja y que las tierras son públicas del Estado
paraguayo y por lo tanto debemos recuperarlas.
3° Resarcimiento a las víctimas, sus familiares y demás personas
sobrevivientes de la masacre;
4° Juicio y castigo a los verdaderos responsables
Si bien Blas Riquelme, de quien se dice que organizó el tiroteo, mue-
re el domingo 2 de septiembre de 2012 víctima de un infarto, la familia
Riquelme continúa alquilando a Cargill los campos donde sucedió la ma-
sacre y sigue actuando cómo si fueran los dueños de la tierra. Las graves
acusaciones y la actitud del Estado demuestran un aprovechamiento del
caso para frenar posteriores ocupaciones en el resto del país.
Se desplazó al Presidente Fernando Lugo del gobierno declarándo-
lo “culpable de mal desempeño de las funciones presidenciales” por la
muerte de 17 personas durante el desalojo de campesinos sin tierras
en Curuguaty. Inmediatamente luego del golpe fue legalizado el in-
greso al Paraguay de las semillas transgénicas de maíz de los tipos
“V3PRO” de la multinacional Monsanto, “BT11” de la compañía Syn-
genta, “TC1507” de Agrotec S.A. y Dow Agrosciences Paraguay S.A.
El ex general Lino Oviedo, firme candidato a la presidencia en las
pasadas elecciones que se declaraba en contra de la oligarquía política y
económica y amigo de los campesinos que viven en carpas a los costados
de las rutas, muere súbita y misteriosamente en un accidente aéreo.
El vocero de prensa de su partido denunció el hecho cómo “un crimen
político”. El Partido Colorado de tendencia conservadora y nacionalista
aliado de los latifundistas recuperó el poder en las elecciones.
COnCLuSión
Vastos territorios han comenzado a convertirse en un gran laboratorio
donde la persona ni siquiera es considerada en la categoría de unidad
productiva. En ellos los nuevos señores no sienten la necesidad de
proporcionar seguridad, alimento, etc. No existe, por tanto, espacio
para forma alguna de participación o consenso democrático. La pro-
pia privatización de la vida es quizá la muestra más aterradora del
neofeudalismo que viene.
Ala Plástica, Julio de 2013
66·
por HErnán CArdinALE
ñEMBO´E
Marcos, campesino sin tierra,
cuida un campamento
sobre la ruta a Curuguaty
mientras sus compañeros
asisten al Tribunal
de Asunción.
Retratos de Hernán Cardinale
·67
ypy
Recorrimos 1500 Km. sin que ningún insecto se haya estrellado en nuestro
parabrisas. El paisaje se muestra distinto recién ahora. La tierra es roja;
el horizonte se nos acercó en bosques tupidos de verde profundo que le
ganan en altura al cielo y el agua está presente en todo:
LA
en la tierra apelmazada, en la vegetación explosiva, en un
río Paraná que se esconde al oeste y se nos reaparece en
ruTA arroyuelos, embalses, saltos, y en el aire mismo. Posadas
quedo atrás. Avanzamos hacia la triple frontera a 120km/h.
Toda la geografía está definida ahora por el agua.
La ruta es un hilo de escaso sentido que cose punto con
punto:–Buenos–Aires–Encarnación;–Curuguaty–Asunción;
Rosario–Taiwán, da lo mismo. Puertos, ciudades, pueblos y la ruta entre
ellos. El sentido de lo que en ella transcurre se halla en sus extremos.
En el punto de destino, en el de origen o, en todo caso, en la pregunta
que los hace par, pero nunca en el trayecto. La ruta es un “trance”, sin
valor ni experiencia alguna, que se mide en tiempo. En los ríos, en cam-
bio, el sentido de experiencia es continuo y se da simultáneamente en
cualquier punto del mismo. El río, en cambio, es ser y estar en todo su
trayecto y a la vez en cada momento del mismo en todo el caudal de agua;
desde su oculto origen hasta diluirse en el mar o en profundas cavernas
corre cargado de vida portándose a sí mismo y a la vez manteniendo todo
vivo: lechos de agua y vida que dan vida al todo. Visto así entiendo al río
como la tierra y a la ruta como del territorio.
La gente del interior Paraguayo se comunica con una
melancolía y amabilidad que no condice con el modo en
que se los expulsa de sus tierras hoy. Los campesinos
guaraníes, viven con la convicción de que el alma no se
da enteramente hecha, sino que se hace durante la vida y
que el modo de su hacerse es “su decirse”(ñembo´e: orar).
La historia del alma guaraní es la historia de su pa-
labra y luego, la serie de palabras que forman el hilo de la vida.
Mientras que para el europeo “la palabra” o excluye a la naturaleza, o la
considera bajo su dominio, en la lengua guaraní la naturaleza es sagrada
y fundante de su habla: en el agua (y) está su origen (ypy)... y el agua
está en todo, en la tierra (yvy), también en el árbol (yvyra), en el viento
(yvytu) y en la canoa (yga) que mueve el hombre (yvypóra) que aspira
a “la tierra sin mal” (yvymaraey) que está más allá del cielo (yvyága).
El guaraní es una lengua rara, con una estructura increíblemente perfecta
68·
que impide que muera porque se rehace a sí misma a través de la conver-
sación, creando continuamente las palabras que precisa.
En el campamento de Curuguaty, escuchábamos atentos a los campe-
sinos hablar guaraní y cada palabra dicha en español resonaba especial-
mente. En español dicen aquello que no pueden expresar en su lengua:
ejército, congreso, diputados, juzgado, policías, cárcel, helicóptero, mo-
nocultivo, sicario, soja... Uno de ellos me comentó “el río es sagrado por-
que nos trae las cosas”, y el árbol es sagrado también pues “al morirnos,
el árbol es el medio para llegar a la Yvymaraey”. Por eso los hacheros
correntinos de sangre guaraní, que habitaban y trabajaban en el Chaco
argentino, le pedían perdón al quebracho antes de cortarlo.
En Argentina la tarde es sin color y sólo el canto de los pájaros nos da un
indicio del cambio de estación. Abandonar Paraguay e ingresar a Formosa
camino hacia a Santa Fe, es desprenderse de un algo vital. Andar ciertas
rutas argentinas es como moverse en tierras peladas, cada tanto abona-
das por una “civilización” deseosa de ser ciudad. Vistas desde la ruta 11,
las provincias de Formosa, Chaco y Santa Fe, hasta llegar a la ciudad de
Reconquista y aún más allá, son de una chatura solo comparable a sus
pueblos llenos de televisores y vidrieras desubicadas. La vida de esos pue-
blos se desarrolla en los interiores de casas de cemento y
arena transportados absurdamente desde canteras lejanas
y planes transoceánicos. Sin embargo, basta con apreciar
tanto vacío ahora estéril, para ver tras ello la presencia de
un Estado terminante y poderoso que determinó que así
EL ESTAdO
sea; un Estado que aun hoy empuja a los menos defensos
a la zona zombie de los suburbios de unas pocas ciudades.
Durante el trayecto por el Paraguay, la vida de los ha-
prOTECTOr
bitantes rurales se veía transcurrir con naturalidad al aire
libre. Las casas, de madera colorida, poseen un ambiente
central techado con una habitación a cada lado pero abierto por delante
y detrás de modo tal que uno puede traspasarlo con la vista y llegar a
apreciar, atrás, cultivos y rastros de una vida rural posible. Es difícil en
las rutas del interior del Paraguay ver casas apiñadas. No, se suceden con
un ritmo discreto y continuo. A toda hora se ve a sus habitantes agrupa-
dos mateando y hablando mientras la brisa se hace fresca cuando traspa-
sa, como la mirada, el espacio bajo la sombra de esos aleros. Las tardes
calurosas deben ser allí una delicia a compartir. Por las noches, cálidas
de luz incandescente, vuelven a ofrecer una invitación a aquerenciarse.
En ese espacio, transcurren sus habitantes la mayor parte de la jornada,
a la vista de todos los que pasen por allí. Son casas de colores naranja
o celeste fuertes, que contrastan con la tierra roja tanto como con el
verde del aire. Todos los paraguayos podrían prontamente adoptar un
buen vivir despreocupados, con sus quintas, sin hacer mayor esfuerzo
para que la fertilidad excepcional de esa tierra rica y húmeda les die-
ra lo suficiente para estar agradecidos. Los paraguayos de esas casas,
·69
cuidan la sabiduría del “vivir en su tierra”, legada de la sabiduría nativa
guaraní. No son como nosotros, no. Ellos tienen sano aún ese vínculo sa-
grado que algunos pueblos cosen con su tierra. Una simpatía nada com-
parable a la melancolía urbana, donde todas las ciudades son “la ciudad”.
Si quieres ver colores en los pueblos de Argentina, lo mejor es entrar
a un bar y buscar su televisor.
GG no disputa con nadie: ni con Clarín, ni con chacareros, ni con Cristina.
A todos sabe darles la razón en cada momento. Amable y rechoncho hijo
de un tractorista del este europeo, se ufana de su historia familiar de
origen laborioso y campesino. En el televisor de un bar
de la chata ciudad de Reconquista se lo escucha recor-
THE dar a su padre diciendo que “hace tiempo, en el campo
trabajaban 100 personas y 10 en la oficina, y ahora, eso
GLOBAL es al revés”. GG, en cambio, aprendió a hacer producir al
campo en la ciudad. El éxito de GG se basa en combinar
AGEnT en un mismo paquete partes iguales de “Taylorismo” al
mejor modo Toyota, biogenética, venenos, inversores y
siembra directa, sin desdeñar las políticas de Estado que
en los ´90 desregularon por igual el control de semillas,
el cuidado medioambiental y sancionaron, entre otras, la Ley 24.093 de
Desregulación de la Actividad Portuaria, con la que en menos una década
se habilitaron 34 puertos en la Hidrovía del Paraná, todos ellos indus-
triales, comerciales y privados, entre las ciudades de Zarate y la cuenca
de Rosario y Santa Fe, convirtiendo al río en territorio. Como nadie, GG,
sabe que la plantita es solo una parte de su sistema de agronegocios,
y que el mismo es insostenible sin la apropiación o “alquiler” de una
tierra donde vertir los insumos para cosechar commodities. Cada vez que
se le pregunta, su optimismo no calla una lejana preocupación por la
GG, CEO de Los Grobo. “soberanía alimentaria global”. Hace pocos días, unas de las empresas
que integra como accionista, Bioceres, obtuvo la aprobación para desa-
rrollar en la Argentina semillas GM tolerantes a la sequía. La Patagonia,
podría sumarse entonces prontamente a la lucha contra hambre mundial,
alimentar peces y ganados europeos, bajar el costo de los combustibles
y sostener la producción agrobioquímica y automotriz con bioplásticos a
base de proteínas de soja.
Pienso si las primeras semillas GM que entraron de forma clandestina a
la región del Paraguay, fueron antecedidas por su locuaz discurso, ese que
Federico Franco se creyó y defendió a fuego en Curuguaty. Pienso en esos
campesinos de Curuguaty, en las familias Quom, las comunidades mapu-
ches y los campesinos santiagueños o formoseños... ¿Puede GG, mirarles a
los ojos y convencerlos de que los bioplásticos les devolverán su historia,
su tierra y libertad, todo gracias a su “Gestión Global”? ¿Puede acaso este
gobierno, mirarnos a los ojos a sabiendas que hace 40 años que la soja
bate año tras año su record de exportaciones y tierras cultivadas y nunca
nada devuelve a los reales herederos de estas tierras? ¿Cuándo sino ahora?
70· ·71
72· ·73
78· ·79

3.
por AC
LA
MESA
rESpOnSABiLidAdES En EL MOdELO TrAnSGéniCO

“Cristina, Cristina, Cristina corazón. Acá tenés los pibes para la liberación!”1

“Un nuevo hombre ha surgido que, por la fuerza de los hechos, no re-
nuncia al legado impuesto, en este caso, la lengua o los instrumentos de
trabajo, sino que da a ellos un nuevo valor, su valor intrínseco y crea una
‘lengua para maldecir’, lo cual supone una forma espontánea de decodi-
ficación del discurso opresor...”2

“Si está entregando el país y habla de soberanía, quién va a dudar que

usted es una soberana porquería.”3

Drone define, en inglés, al macho de la abeja reina, recio aunque sin

aguijón, que no produce miel. También hace referencia a un holgazán
y a los aviones teledirigidos. ¿Qué podría ocurrir si un especímen de
estas características se mete en la sopa de la mesa de
los argentinos? Aunque sea antipático, hay que decirlo:

un hay un zángano en nuestra sopa. La periodista de inves-

tigación, directora y escritora francesa Marie-Monique
zánGAnO Robin, en su último trabajo, El veneno nuestro de cada

En LA
día 4, se pregunta acerca de las responsabilidades en la
evaluación y reglamentación de las aproximadamente

SOpA 100.000 moléculas químicas de síntesis que han invadi-

do nuestro medio ambiente y nuestra mesa desde hace
medio siglo. Para Robin las revoluciones “industrial” y
“verde” son dos caras de un único monstruo insaciable:
el progreso. Atrás quedaron sus promesas de felicidad y bienestar.
Actualmente amenaza, en las sociedades “desarrolladas”, la vida de
las poblaciones y la biodiversidad. Dos aspectos de su investigación
fueron de suma utilidad para analizar a los drones transgénicos de la
máquina de los agronegocios en la república unida de la soja. Por un
lado, su señalamiento de la responsabilidad de las empresas (BASF,

1 Cántico popular, especialmente entonado por la agrupación La Cámpora, liderada

por Máximo Kirchner, hijo de Néstor y Cristina.
2 Arturo Roig. Teoría y crítica del pensamiento latinoamericano, 1980. En Rostro y
filosofía de nuestra América, Ed. Una Ventana,2011.
3 Mario Benedetti en la contratapa de Paraguay Mafia. Soja, narco, terror y golpe de
estado parlamentario. Compilación. Ed. Yerba Mate, Asunción, 2012.
4 Marie-Monique Robin, El veneno nuestro de cada día, Ed. De la campana, 2012.
80·
Corte de ruta durante
el conflicto por la
Resolución 125.
Argentina, 2008.
AgroSAS, Bayer CropScience, Dow AgroSciences, DuPont, Monsanto,
Syngenta, entre otras) en el desarrollo de un proceso de eufemización
y por lo tanto de ocultamiento, a la hora de construir un relato en
torno a los efectos de los agroquímicos en nuestras vidas y en el medio
ambiente. Esta manipulación del lenguaje transforma a estos venenos
en medicamentos, “productos fitosanitarios o fitofarmacéuticos” para
cuidar a las plantas. No quedan por fuera de esta responsabilidad
organismos internacionales y estatales de alto rango, también en la
Argentina. Por otro, la visibilización que su trabajo hace de la muta-
ción que transformó a estas empresas y otras (Degesh, Gegey, Aventis)
vinculadas originalmente a la industria bélica, la creación y comer-
cialización a escala mundial de armas químicas letales (gas mostaza,
Zyklon B, DDT, paratión, malatión, sevín, sarín, agente naranja), en
“global collaboratories” que se dicen poder “salvar del hambre al mun-
do”. Es una imagen que proviene del libro de Robin la que dio título
a mi obra para Monday begins on Saturday, exposición en Noruega.
La periodista le pregunta a Ned Groth, biólogo que durante 25 años
fue perito de la Consumers Union, principal organización de defensa
de consumidores de Estados Unidos: “¿Cuál es la base científica para
el establecimiento de la IDA (Ingesta Diaria Aceptable)5? ¡Fue decidido
5 La IDA (Ingesta Diaria Aceptable) o ADI (Acceptable Daily Intake) es la cantidad
de sustancia química que se puede ingerir cotidianamente y durante toda la vida
·81
mediante el método B.O.G.S.A.T. (del inglés norteamericano, ‘Bunch of
Guys Sitting Around the Table’), un puñado de tipos sentados alrededor
de una mesa!”6 respondió el especialista. Vuelven a mi mente algunas
mesas. La fotografía del almuerzo en Expagro 2013, mesa en la que
Mauricio Macri y sus dirigentes Carlos Melconian y Guillermo Monte-
negro; los peronistas opositores Roberto Lavagna, Eduardo Amadeo y
Jesús Cariglino; los representantes gremiales Gerónimo Momo Venegas
y Alfredo de Angelis, y el editorialista del diario La Nación, José Escri-
bano, definían sus objetivos comunes. También la abandonada mesa
de los sicarios del dirigente del Partido Colorado Blas N.Riquelme, en
sus tierras malhabidas de Marina Kue, Curuguaty, Paraguay. Por últi-
mo, aparece el reflejo de la botella de agua mineral sobre una lustrada
mesa en Nueva York, entre medio de los representantes de Monsanto y
sin que existan riesgos para la salud. Según la OMS este coeficiente fue inventado
por el toxicólogo francés René Truhaut, aunque en EE.UU. se asigna su creación
a Arnold Lehman y Garth Fitzhugh, de la Food and Drug Administration. La IDA
fue adoptada por la JECFA (Join Expert meeting Committee or Food Additives,
FAO/OMS) en 1961. Su aplicación benefició a las autoridades regulatorias del
sector agroalimentario y al comercio internacional. Dejando en claro que todas las
dosis de ingestión de químicos en nuestros cuerpos producen efectos, la IDA surge
de dividir por cien, como “factor de seguridad”, la dosis llamada NOAEL (Non ob-
served adverse effect level o Nivel de efectos no adversos observados).
6 Marie-Monique Robin, idem anterior.
82·
la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, durante el acuerdo para
la instalación -a horas del golpe parlamentario sojero en Paraguay- de
la mayor planta de producción de semillas de maíz transgénico en el
mundo, en Malvinas Argentinas, Provincia de Córdoba. Las tres me-
sas generan campos de fuerzas distintos, sus protagonistas no son lo
mismo, no tienen la misma historia ni persiguen los mismos objetivos
políticos. Sin embargo, hay un riesgo: volver a dejar pasar una oportu-
nidad para profundizar la descolonización. Es preciso e imperioso in-
tentar responder a los siguientes interrogantes (algunos de los cuáles
ya han sido formulado en el presente texto) para proseguir el proceso
de lucha contra el neoliberalismo: ¿se puede concretar un camino de
emancipación política, económica y cultural repitiendo los modelos
de desarrollo de nuestros antigüos y actuales opresores, cuyos resul-
tados están a la vista? ¿Cómo provocar mayores ejercicios regionales
de imaginación política, prestando más atención a los saberes ances-
trales de las culturas originarias americanas y a las experiencias qué
en distintas partes del mundo enfrentan una ideología de exclusión
social y sometimiento de la naturaleza? ¿Son la Pachamama y la Tie-
rra sin Mal meras ensoñaciones? ¿Qué puede el arte contra los drones
transgénicos?
Acuerdo con Monsanto.
Nueva York, junio de 2012.
·83
“No se trata de un sueño regresivo a la vida primitiva, sino de actuar con
nuestra tecnología pero conforme con las pautas éticas originarias en su
relación con todos los entes.”7
“El miedo de vivir lo paraliza todo y, más aún, el miedo de vivir lo ame-
ricano. De esa manera, el verdadero sentido de la moralidad media o del
arte medio consiste, antes que en un arte o en una moral, en un simple
canon que subsume a la verdadera vida”8
LA CiudAd dE 29 de marzo de 2013. No fue fácil llegar hasta allí. Azul,
Ana y yo nos levantamos temprano en Córdoba capital.
MiS SuEñOS Hacía mucho calor y sabíamos que nos esperaba una lar-
ga caminata por los barrios. Dejamos atrás la colmena
de cemento que construyó el gobernador zángano José
Manuel de la Sota, del peronismo opositor a la presidenta Cristina,
dejando en claro que dinero no falta a la hora de demarcar el territorio
con los signos del poder. Malvinas Argentinas es un barrio situado a
12km. del centro de la capital. Originalmente vinculado a la construc-
ción del Ferrocarril General Belgrano, era un caserío rural sin fecha
fija de fundación conocido como Estación Kilómetro 711. En 1953 fue
rebautizado Malvinas Argentinas, de modo que quiénes pasen por allí
“sientan sus corazones envueltos en la bandera de la patria” 9 al recor-
dar las islas del Atlántico Sur usurpadas hasta hoy por los británicos.
En 1987 se creó la Municipalidad, y desde entonces se repartieron el
gobierno local el peronismo (1987-1999) y el radicalismo (1999-2007).
Su población estimada es de 14.000 habitantes. Hoy el Intendente es
el radical Daniel Arzani. Dos rutas atraviesan el barrio y lo dividen
en tres secciones. El colectivo nos dejó cerca del “Centro de Salud
Municipal Evita”. Frente al mismo, en los postes de luz, encuentro
restos de volantes pegados en 2012: “Todos a Malvinas Argentinas a gri-
tar Fuera Monsanto!”. Cruzamos las vías y avanzamos por la Avenida
San Martín. Decidimos caminarla de punta a punta. Es Semana Santa,
hay poco tráfico y escasa actividad comercial. Encontramos la plaza
central y la Municipalidad, en cuyo escudo, una iglesia, una escuela,
el sol y el perfil de una fábrica dan forma a la skyline arquitectónica
del pueblo. Se asoma entre los techos bajos la aguja de otra iglesia.
Es un templo mormón, de la congregación de origen norteamericano
Jesucristo de los Últimos Días. ¿Qué pensará el pastor mormón respecto
de la llegada de Monsanto? Cuadras adelante, un busto sin cabeza del
Gral. San Martín y un mástil sin bandera, comparten la misma base
graffiteada: “No a Monsanto. El pueblo vota”. La cabeza fantasmal del
7 Eugenio Raúl Zaffaroni. La Pachamama y el humano, Ediciones Madres de Plaza de
Mayo / Colihue, 2012.
8 Rodolfo Kusch. Anotaciones para una estética de lo americano, t.IV. Obras Comple-
tas, Ed. Fundación Ross, 2000.
9 Senador Julio Salusso, autor de la iniciativa. En www.ciudadmalvinas.gov.ar/
84· ·85

Barrio Malvinas Argentinas,

Córdoba, Argentina.
Foto AC, 2013.

Barrio Malvinas Argentinas,

Córdoba, Argentina.
Foto AC, 2013.

diputado radical Oscar Aguad aparece intermitente en viejos afiches leemos en el reverso del cartel metálico que anuncia a los auto-
de propaganda política. “Se me paró adelante” deslizó Aguad cuando movilistas la entrada al barrio: “No a Monsanto”. Y también, en su
se conoció una foto en la que compartía un acto junto al genocida Lu- frente:“Juira (Fuera) Monsanto de Córdoba y de la Argentina”. Un ex-
ciano Benjamín Menéndez. Cruzamos la ruta 19 y llegamos a la Plaza tenso alambrado y una alta columna con lámparas que apuntan en las
de las Madres de Malvinas Argentinas, completamente vacía. Volvemos cuatro direcciones nos indican que llegamos al obrador de la planta.
sobre nuestros pasos. Nuevamente del otro lado de la vía, me detengo Allí, desde el anuncio de su llegada en 2012, los vecinos organizados
en la intersección de las calles Puerto Argentino y Capitán Giachino. resistieron y resisten a su instalación. “Habitantes de la localidad cor-
Este hombre fue el primer caído durante la guerra de Malvinas, el 2 dobesa de Malvinas Argentinas se movilizaron nuevamente hacia la puer-
de abril de 1982. Luego de recibir todos los honores, Giachino fue de- ta del predio de la empresa multinacional Monsanto para bloquear los dos
nunciado por su actuación en el centro clandestino de detención que ingresos habilitados para la entrada de camiones que transportan mate-
funcionaba en la Base Naval de Mar del Plata. La calle con nombre de rial. Ayer lograron impedir el trabajo de los operarios.”11 “Ayer” es el 19
represor se topa con la llamada Cabo Adrián Bustos, joven cordobés de julio de 2013. La Justicia cordobesa dio de baja la medida cautelar
muerto en el hundimiento del buque Isla de los Estados por la fraga- que impedía continuar las obras. Como una señal de la perversa ética
ta británica HMS Alacrity. Desde esa esquina, nos dice un vecino, no y del humor negro de Monsanto, la empresa ha elegido para construir
hay más de 300 metros hasta la planta en construcción de Monsanto. su planta las tierras ubicadas en diagonal, cruzando la ruta, a no más
Avanzamos por el costado de la ruta. Una bandera roja en un árbol de 200 metros, del cementerio local “La Santísima Trinidad”.
nos indica que pasaremos por un altar del Gauchito Gil, figura objeto
de devoción popular, cuyo fundamento es la vida y muerte del gau- “No es justo, a nosotros nos enfermaron, nos mataron nuestros hijos, nos
cho correntino Antonio Mamerto Gil Nuñez10. Pocos árboles después, robaron el futuro, nos robaron nuestra vida. Entonces creemos que el que
enferma y mata tiene que ir preso.”12

10 Todas las versiones sobre el destino de este trabajador rural perseguido (por deser-
11 www.cba24n.com.ar [Consultado al 27 de Julio de 2013]
tar de la Guerra de la Triple Alianza contra el Paraguay y/o por liderar un grupo
de gauchos que robaban a los ricos para repartir entre los pobres) convergen en su 12 Entrevsita a Sofía Gatica, Madre de Ituzaingo. www.barricadatv.blogspot.com.ar
ajusticiamiento en Mercedes, Corrientes, en 1878. [6 de junio de 2013].
86·
30 de marzo de 2013. La poderosa luz del sol y el cielo sin nubes
aumentan la legibilidad de las letras que, desde la parte superior del
arco de ingreso al barrio Parque Ituzaingó, indican a propios y aje-
nos que estamos en la “Ciudad de mis sueños”. Conociendo la lucha
desigual de las Madres del lindante Barrio Ituzaingó Anexo, quienes
desde 2001 denuncian las consecuencias de las fumigaciones y del
modelo transgénico, me pregunto: ¿de quién o quiénes serán “mis”
sueños? Sin dudas, no de aquéllos que se enfermaron de cáncer, aler-
gias respiratorias y en la piel, enfermedades neurológicas y malforma-
ciones por efectos del glifosato. Encuentro una escultura, una madre y
su hijo se abrazan. Está muy descuidada y la cabeza del niño es hueca.
Almorzamos empanadas escuchando cumbia, que sale a todo volumen
de una casa vecina. Antes de atravesar un potrero de tierra, veo en un
muro la silueta de la cabeza de Perón. Sobre fondo azul, en su interior
tiene la bandera argentina y a su lado la roja estrella federal. A pocas
cuadras el barrio se deshilacha, se funde con el pasto y los campos
de soja transgénica. En la Manzana 6, niños juegan entre la basura.
Caminando en círculo volvemos a la ruta, nos detenemos en la escuela
“Jorge Cafrune”. Allí vecinos nos dicen que para llegar al Ituzain-
gó Anexo podemos cruzar un descampado. La vegetación es espesa
y alta, los cuerpos se pierden de vista. Tomamos el colectivo. En la
entrada del barrio, en el que viven unas 5000 personas, me sorprende
el nombre de la avenida central: Juan Vucetich. Croata nacionalizado
argentino, en 1888 Vucetich se incorporó al Departamento Central de
la Policía de la Provincia de Buenos Aires, allí desarrolló y puso por
primera vez en práctica un sistema de identificación de las perso-
nas por sus huellas digitales. Actualmente la Escuela de Policía de la
Entrada al
Barrio Parque Ituzaingó,
Córdoba, Argentina.
Foto AC, 2013.
Barrio Ituzaingó Anexo,
Córdoba, Argentina.
Foto AC, 2013.
·87
Provincia de Buenos Aires y el centro policial de estudios forenses de
Zagreb, Croacia, llevan su nombre. Si la nomenclatura de las calles de
un pueblo o ciudad puede dar alguna idea de la idiosincracia de sus
habitantes, me preguntó quién y pensando en qué bautizó a la aveni-
da, pero también a la mayoría de las calles que la cortan, que llevan
el nombre de científicos, inventores, filósofos o artistas como Diesel
(Rudolf), Galileo, Gutenberg, Hertz (Heinrich), Lavoisier (Antoine),
Watt (James), Lumiére, Stephenson (George) o Van der Walls (Johan-
nes). O las paralelas: René Descartes, Alfred Nobel o Salvador Mazza.
¿Alguien enseñará a los niños en las escuelas públicas del barrio fu-
migado quiénes son todos estos nombres? ¿Conocerán los productores
locales condenados por la justicia por fumigar en franjas prohibidas a
estas personalidades? En la plaza grande, otra escultura dedicada a la
madre. Medio cuerpo de mujer embarazada, la panza cortada transver-
salmente se une a la base, rodeada de pinches metálicos. Terminal de
colectivos, calle Erwin Schrödinger entre Vucetich y Max Planck. En
sus memorias, el biólogo norteamericano James Watson refiere al libro
“¿Qué es la vida?” de Schrödinger como inspirador de los estudios que
lo llevarían al descubrimiento de la estructura de la molécula del ADN.
No hay ninguna calle que recuerde a Watson en el barrio fumigado,
tal vez la invasión molecular de la máquinaria transgénica precise de
este olvido. En nuestro recorrido circular llegamos a una plazoleta,
entre las calles Becquerel y Thomson. Hasta ese momento no había
encontrado señales en el espacio público sobre la existencia de las
Madres de Ituzaingó, organización creada a fines de 2001 a raíz de
advertir en el pueblo la frecuencia inusual de mujeres con pañuelos
en la cabeza y niños con barbijos. Ellas comenzaron con las denuncias
88· ·89

Barrio Ituzaingó Anexo,

Córdoba, Argentina.
Foto AC, 2013.

Condenados en el primer
juicio por fumigación
sobre pobladores.
Barrio Ituzaingó Anexo,
Córdoba, Argentina.
Foto AC, 2013.

sobre las consecuencias del uso de agroquímicos, exigiendo la defensa
del derecho a la salud y a la seguridad ambiental y sanitaria. Pese a
los reclamos, los productores continuaron con las fumigaciones te-
rrestres y aéreas, sin respetar la distancia recomendada. En las tapas
metálicas del piso de la plaza, los graffitis borroneados e incompletos
decían: “Organización Comunitaria” y “Monsanto... Usurpan Vidas”. Dos
imágenes estampadas en las patas de los bancos de cemento hacen
estallar el régimen de visibilidad impuesto por las agendas de los dro-
nes transgénicos y testimonian acerca de las responsabilidades que el
método BOGSAT oculta: en una, un avión deja a su paso una estela,
una nube negra que dice “muerte”. En la otra, un maíz lleva por cabe-
za una calavera. El 22 de agosto de 2012 podemos leer en un periódico
cordobés: “Tras nueve horas de deliberación, los jueces de la Cámara
1ª del Crimen declararon culpables a dos de los acusados por contami-
nación dolosa en barrio Ituzaingó Anexo en febrero de 2004 y febrero de
2008, y absolvieron al restante. El productor Francisco Rafael Parra reci-
bió tres años de prisión condicional, lo mismo que el piloto aeroaplicador
Edgardo Jorge Pancello. En cambio, al otro productor, Jorge Gabrielli,
se le confirmó la absolución que habían solicitado los acusadores (...)
a Parra le aplicaron durante cuatro años (...) la realización de 10 horas
semanales de trabajos comunitarios no remunerados en establecimientos
públicos de salud (...) Pancello (...) debe hacer lo mismo, pero durante
tres años y ocho horas semanales (...) a Parra lo inhabilitaron para rea-
lizar fumigaciones durante ocho años, mientras que al aviador Pancello
se le impuso esa prohibición durante 10 años (...) La expectativa de
prisiones efectivas quedó defraudada, especialmente para las Madres de
Ituzaingó, denunciantes de esta causa desde comienzos de la década
pasada. No obstante, quienes las acompañaron, organizaciones ambien-
talistas, sociales y políticas, celebraron el paso adelante que se logra en
la Justicia con un fallo inédito en América latina”.13
10 de julio de 2013. San Ignacio, Misiones, Ruinas jesuíticas. “En
cada curso de agua reside un espíritu protector. Así como las aldeas, los
pequeños pueblos y las grandes ciudades están gobernados por una au-
toridad de importancia cada vez mayor; así también, empezando por las
vertientes, pasando por los pequeños arroyos y hasta llegar a las grandes
corrientes que cruzan nuestra tierra, cada uno de ellos está habitado por
un protector cada vez más poderoso. Para nosotros, las cascadas y las
grandes cataratas son importantes centros de poder, dominio de guardia-
nes formidables. Por ese motivo, tratamos de no derrochar ni hacer mal
uso del agua, cuidando de no faltar el respeto a un orden superior por
el que nos regimos.”14 Con seguridad necesitaremos de la protección
y el amor que la naturaleza nos brinda para que nuestras vidas y las
de las próximas generaciones no se conviertan en una mera molécula
mercantilizada más, disponible en las góndolas del agronegocio.
13 www.lavoz.com.ar [consultado el 28 de julio de 2013].
14 Testimonio de Santiago Moreira, Comunidad Guaraní Kaa’ Cuupe. Pude escuchar su
voz en los auriculares de una de las salas del museo del lugar.
90·
por AnA BróCCOLi
Barrio Malvinas Argentinas,
Córdoba, Argentina.
Foto AC, 2013.
·91
ArGEntina
LA pATriA TrAnSGéniCA
“La obra a realizar no es de un día. Debe sin embargo emprenderse en
forma integral y con urgencia. Asimismo, debe asegurarse la estabilidad
y continuidad de la política adoptada... Sólo así recuperará la Argentina
su capacidad productora y exportadora agrícola-ganadera y, con ello, la
posibilidad de lograr el desarrollo armónico y el progreso de su economía,
así como una sólida y estable situación financiera”.1
Estas palabras del Ministro de Economía de la ultima dictadura
militar, sonaban proféticas 30 años antes de 1996, en que se libera la
soja transgénica RR Round Up Ready, resistente al herbicida Glifosato.
Era claro el camino trazado: contraer deuda, generar dependencia y
pagar con la exportación de recursos naturales. En la década del ‘90
culmina la instalación del modelo neoliberal iniciado por la dictadura
permitiendo flexibilizar las instituciones mediante la “desregulación
del estado”2. Los oligopolios caminan libremente hacia una patria
transgénica: ArGENtina. La soja RR entra de contrabando a Brasil, es
bautizada “soja Maradona”. Crecen los límites difusos de la República
Unida de la Soja, metáfora comercial de la empresa Syngenta para su
expansión en el Sur.
El modelo sojero se consolida, mientras el Congreso Nacional vota
en 2003 el Plan de Seguridad Alimentaria “El Hambre más urgente”.
Personeros de las corporaciones intentan incorporar ese grano, usado
en el mundo como forraje, a los hábitos alimenticios de los comen-
sales argentinos. Es la “Soja Solidaria” en comedores de la población
vulnerable. La beneficencia es también un negocio y un instrumento
de marketing para ellos... pero fracasan gracias a la movilización so-
cial. La frontera agropecuaria se amplia eliminando biodiversidad 3,
expulsando poblaciones campesinas y pueblos originarios. Primero la
Pampa, luego la Región Chaqueña hasta las Yungas, un “mar de soja”
crece, inabarcable. Y con él, la lluvia torrencial de agroquímicos que se
esparcen con aviones y “mosquitos”: es la maquinaria bélica agrícola.
Otras Madres marcan la resistencia en ArGENtina: las Madres de Itu-
zaingó, barrio fumigado de la provincia de Córdoba. Ellas promueven
un juicio histórico4... llegan los primeros responsables de los “daños
1 Martinez de Hoz, A; “La agricultura y la ganadería argentina en el periodo 1930-
1960”, 1967, Ed. Sudamericana, B.A, Argentina.
2 www.infoleg.mecon.gov.ar/infolegInternet/anexos/5000-9999/7539/texact.htm
3 Miguel A. Altieri y Walter A. Pengue, 2006, www.grain.org/article/entries/1090-
la-soja-transgenica-en-america-latina-una-maquinaria-de-hambre-deforestacion-
y-devastacion-socioecologica
4 www.juicioalafumigacion.com.ar/ Blog del juicio por contaminación en Barrio
Ituzaingó, Córdoba.
92·
colaterales” de la fumigación. Sin embargo y tal como rezan otras con-
signas de la Patria Grande en la Venezuela post-Chavez, “la lucha si-
gue”: hoy Madres y Asambleas Populares intentan evitar la instalación
de otra colonia en el periurbano de la ciudad de Córdoba, con el mismo
doloroso nombre “Malvinas Argentinas”, las Falkland Island según los
ocupantes ingleses al sur del Atlántico. La empresa Monsanto cons-
truye allí su planta más grande del planeta para procesar semillas de
maíz. Es la colonia transgénica...
Reina del Plata
puerta de entrada a
La maquinaria productivo-financiera queda a cargo de “pools de
siembra“, los empresarios agropecuarios “sin tierra”, industria na-
cional de exportación, liderada por Los Grobo5. El precio de la tier-
ra aumenta más del triple. En 2013 los productores pagaron por los
arrendamientos un 215% más que en 2001. Esto tracciona el precio de
la República Unida
alimentos y la inflación.
Científicos6 comprometidos de ArGENtina, que “corren velos” de las
imágenes opacas, son agredidos desde ambas maquinarias y por sus
pares que defienden legitimidades7 del modelo transgénico funcio-
nal a las corporaciones. El guión molecular de mercado. La molécula
de la vida, ADN8, presenta una estructura helicoidal en doble hélice.
En una metáfora poética su imagen ampliada transmite la potente
sensación de una escalera al cielo. Los peldaños se explican en un
código alfanumérico que marca la posición espacial de cuatro bases de
nucleótidos, su lenguaje. La maquinaria de ingeniería genética, corta
el ADN con “tijeras biológicas” y desnaturaliza la doble hélice para
poder abrir el código y descifrarlo. Sólo se explica el 2% de la hélice,
lo restante es ADN “basura”... En unos crípticos procedimientos de
laboratorio, la escalera al cielo se ha convertido en una sucesión de
líneas comparables entre sí, sobre una superficie plana... ¿Cómo des-
cribir a qué se parece..? Sí... sí... es como un código de barras, como el
del supermercado... la vida se patenta. Hasta que nuevos paradigmas
postergados, como el ADN Fantasma9 aparezcan sujetando más luz en-
tre sus moléculas.
A pasos de la avenida Corrientes, en el bar La Academia mi en-
cuentro con Eduardo Molinari fue mediado por amigos en común de
militancias por las semillas criollas y soberanía alimentaria, curioso
repertorio de mi “conversión” a la agroecología, siendo ingeniera agró-
noma y profesora de mejoramiento genético de plantas. La invitación a
participar de B.O.G.S.A.T/La responsabilidad, con el Archivo Caminante,
5 www.losgrobo.com.ar/ Empresariado argentino líder de la concentración de tierras
arrendadas.
6 Lopez, S, et al., 2012, Pesticides Used in South American GMO-Based Agriculture,
Adv. in Molecular Toxicology, Vol. 6.
7 Folgueras, G. Grupo de Reflexión Rural y Filosofia de la Ciencia, Fac, Ciencias
Exactas y Naturales UBA.
8 Acido Desoxirribonucleico.
9 Gariaev and V.P. Poponin. Vacuum DNA phantom effect in vitro and its possible
rational explanation. Nanobiology 1995.
·93
respondiendo a la provocativa búsqueda de “consecuencias de este mo-
delo hegemónico en la vida cotidiana de los habitantes y en la naturaleza
y la ausencia u opacidad en la narrativa de la “cultura transgénica”,10
nos llevaría a recorrer territorios físicos
y revisar trayectos institucionales que
Buenos Aires han sido generados mediante la instala-
ción de “maquinarias”11 tendientes a la
defensa y reproducción de ese modelo.
Dos líneas de pensamiento surgieron
rápidamente, uno Argentina como puer-
ta de entrada de la soja transgénica RR,
marcando, el gran puerto de la República
Unida de la Soja12 en construcción en el
Río de La Plata. Por única vez río arriba,
un “flujo inverso” de semillas a contracorriente, hacia el norte, ascen-
diendo “venas abiertas”13 fluviales en que este sur al sur de América
Latina sangra sus riquezas a 200 años de la etapa colonial. La otra
línea sería reflexionar acerca de cómo los mecanismos de instalación
de la agricultura industrial conspiran con fuerzas conservadoras y
logran cambiar un país en desarrollo hasta 1975, con parámetros eco-
nómicos de “estado de bienestar”, en una nación neoliberal que paga
brutalmente la deuda externa adquirida por la dictadura militar san-
grienta (1976-83). Para ello venderá sus empresas nacionales mientras
relaja las regulaciones a fin de poner en marcha nuevas dependencias
y nuevos acreedores. Así, hoy, nuevos órdenes globales secuestran y
capturan recursos naturales para instalar factorías de commodities
destinados a forraje y agrocombustibles para los países centrales y
economías asiáticas emergentes14. La disputa por poderes reales de la
hegemonía global, sus personeros internos locales y medios de prensa
ligados a ellos, entrenados para marcar agenda a los gobiernos desde
sus tapas; genera en cada terreno ganado a las corporaciones una
permanentemente ampliación de derechos de la sociedad. Sin embar-
go, queda el desafío de responder, acompañados de los otros aliados
de la región que sufren las mismas problemáticas, en busca de frenar
mediante decisiones de bloque, el extractivismo y predación de los
recursos naturales del continente. Por otra parte, en la profundiza-
ción de un modelo nacional y popular no resulta confiable la alianza
con Monsanto ni con los “grandes jugadores” del modelo agroexpor-
10 Eduardo Molinari, B.O.G.S.A.T./La Responsabilidad, Ed. unproblema+/Bergen
Assembly, 2013.
11 Siguiendo la metáfora que propone Eduardo Molinari en Los Niños de La Soja,
Ed.Archivo Caminante / MNCARS, 2010.
12 Campaña publicitaria de la empresa Syngenta, 2004, integrando territorios de
Brasil, Paraguay y Argentina.
13 En alusión a la obra de Eduardo Galeano, “Las venas abiertas de América Latina”.
14 Colonias del Siglo XXI: alimentos, especulación y arrebato territorial-Grupo de
Reflexión Rural.
94·
tador vigente. No hay duda sobre el peso de la herencia recibida y
la trascendencia que revisten las medidas tomadas para avanzar. La
recuperación de la planificación estratégica por parte del Estado tuvo
su componente participativo y federal, en la discusión del Plan Estra-
tegico Agroalimentario PEA215 2010-2020. La convocatoria llegó tanto
a equipos de Universidades e instituciones educativas y de investiga-
ción agrícola, como a distinto tipo de organizaciones de la sociedad
en general. A pesar del reconocimiento a este aspecto participativo, el
peso específico de sectores del agronegocio determinó que los resulta-
dos del PEA2 privilegien al sector sobre otros.
“El futuro llegó hace rato” dice la canción de una emblemática ban-
da de rock argentina. Este futuro del hoy se ha gestado en varias “re-
voluciones”: la libertadora, que derrocó a Perón en 1955 retrocediendo
conquistas sociales de una década; la Revolución Verde con la crea-
ción del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria
(INTA) en 1956, sostenida globalmente por las Funda-
ciones Rockefeller y Ford, que instaló la agricultura in-
dustrial en nuestras pampas. Así se impulsó el uso de El
insumos derivados del petróleo y la genética de empre-
futuro
ya llegó
sas que marcan que las suyas son “las buenas semillas”,
insumo y mercancía que regula la OMC16, mientras los re-
cursos genéticos nativos se liberan, internacionalizados
y de libre acceso en bancos de germoplasma. Por último,
la más reciente revolución, la biotecnológica, vigente y pionera en
ArGENtina como segundo adoptante de la tecnología OGM detrás de
EEUU, que reina en paralelo a otra construcción temible, la “sociedad
del conocimiento”17sostenida por líderes de siembra directa y pooles
de siembra. También ahora hay una década de avances políticos y
sociales. En 2003 con la presidencia de Néstor Kirchner comienza una
etapa de cambios que se profundizan en dos gobiernos de Cristina
Fernandez de Kirchner. “La Década Ganada”, “Nunca Menos”, aluden a
conquistas que esta vez se espera “no perder”.
Conciente de la recuperación de la política y la valoración en esta
década, de la presencia de una muy marcada protesta social en las
calles, propuse a Eduardo Molinari indagar y hacer eje en las luchas y
resistencias populares que nacen en respuesta a los “daños colaterales
15 www.64.76.123.202/site/areas/PEA2/index.php
www.agro.uba.ar/sites/default/files/calisa/Como_analizar_al_PEA.pdf
16 Organización Mundial del Comercio
17 Palabras del CEO de Los Grobo: “Se puede hacer producción sin capital porque te lo
prestan. Se puede hacer producción sin trabajo porque lo tercerizás. Sin tierra, sin
capital, sin trabajo. Podés hacer producción sin nada. Sin nada, no: lo único que
necesitás es el conocimiento. Si vos tenés conocimiento, podés hacer un business
plan y te prestan la plata. Si vos tenés conocimiento, podés convencer a este dueño
de la tierra de que te la alquile. Si vos tenés conocimiento, podés desarrollar tus
proveedores, que te hacen el trabajo por vos”. www.portalplazademayo.com
·95
sobre poblaciones civiles” del uso de los agrotoxicos. Las consecuencias
sociales y ambientales que invisibiliza el relato transgénico mientras
derrama nuevos y actualizados “agentes naranja”. Los discursos que
desde los sectores oficiales, organismos de control y las empresas co-
merciales implicadas, garantizan el bienestar de la sociedad en el “en-
torno saludable, de agricultura sustentable, buenas prácticas” y otras
definiciones similares, actúan como disciplinadores de cualquier re-
clamo de derechos humanos como el de vivir en un ambiente sano y el
derecho a la alimentación adecuada. Sin embargo y de modo creciente,
esos actores deben rendirse ante evidencias sobre perjuicios ocasio-
nados por el modelo de agronegocio, vertidas incluso, en informes
generados desde el propio Estado Nacional18, que tan frecuentemente
se ve envuelto en contradicciones. Tal vez la mayor de esas contra-
dicciones sea la posibilidad de financiamiento que la soja provee con
las retenciones a la exportación. Esa normativa que en 2008 generó
el conflicto conocido como “del campo”. Cabe aclarar de todos modos,
que las tensiones no sólo se dan con sectores agrarios por la disputa
de la renta o con partidos de la oposición: algunos de los que adherie-
ren al modelo nacional instaurado en 2003 encuentran disonancias en
un estilo de desarrollo agroindustrial con preeminencia de agroexpor-
tación de commodities y producción de agrocombustibles.
Un discurso optimista-tecnológico de alta ética, con los transgé-
nicos como centro y solución “al hambre del mundo” esparcido glo-
balmente por las corporaciones, da marco al macro experimento OGM
en ArGENtina. El generoso aporte de un país de cuarenta millones
de habitantes que produce ¿alimentos? para cuatrocientos millones,
valida y legitima en parte, la adopción del modelo sojero por parte del
Estado. El Programa Estratégico Alimentario PEA2 2010-2020, con el
que se recupera el rol planificador quinquenal típico de gobiernos pe-
ronistas, invoca cumplir con los Objetivos del Milenio ONU, mediante
el aumento de áreas sembradas y rendimientos por Hectárea. Nadie
decodifica a qué tipo de hambrientos se atiende con los saldos expor-
tables de soja y maíz de ArGENtina. La realidad es que el 88% de la
soja que se comercializa a nivel mundial se utiliza para la producción
de aceite. Con los residuos se hace pasta de soja que es usada como
forraje, esto ha significado que en el Cono Sur se han dedicado menos
tierras para la ganadería y la producción de trigo, arroz y otros culti-
vos para producir alimentos para ganado criado en el extranjero, hacia
dónde se importan además los nutrientes de nuestros suelos. Por otra
parte ¿la soja se destina a los países que padecen hambre? No, pues los
principales importadores de soja o sus derivados son la Unión Europea,
Japón y China19.
18 Informe sobre SENASA de la Auditoria General de la Nación.
19 Bravo, A.L., et al, Los señores de la Soja, la agricultura transgénica en América
Latina, CLACSO, 2010.
96·
La dádiva de liberar la soja RR sin cobro de regalías, fue parte de la
transacción que permitió a las firmas globales de semillas instalar el te-
rritorio multiestadual sojero desde las coordenadas del Río de la Plata,
en 1996. Resulta difícil procesar cómo es que la minúscula dimensión
molecular afecta tan profundamente los Estados Nación reales. Nada fue
improvisado, todo estuvo bajo control. Los escenarios que configurarán
la República Unida de la Soja se van estructurando con el grano “oro
verde” desde que, por medio de dos escuetas resoluciones se autorizara
la tecnología transgénica. Firmadas por el Ministro de Agricultura del
gobierno neoliberal de Carlos Menem, Ing. Agr. Felipe Solá, la 115, de 14
de marzo de 1996, estableció el método de solicitud de autorizaciones
para “la experimentación o liberación de la semilla de soja transgénica”.
La 167, del 3 de abril de 1996, autorizó a producir y comercializar la
semilla y los productos y subproductos de la soja “tolerante al herbicida
glifosato”. El principal impulsor fue el ingeniero Héctor H. Huergo, a
quien Solá designó como director del INTA, donde permaneció entre
febrero y noviembre de 1994. Huergo, otrora militante estudiantil del
Partido Obrero Revolucionario, también ha presidido la Asociación Ar-
gentina de Biocombustibles, dirige el suplemento Clarín Rural, tiene
una consultora en agronegocio y fue el introductor en el país del modelo
norteamericano de las ferias abiertas, que los diarios opositores Clarín
y La Nación aplican en la empresa conjunta Expoagro.
Comienza la travesía río arriba de la soja RR, bautizada en Brasil
como “Soya Maradona”. Una vez más, el Río de la Plata abre puertas al
contrabando y a daños aún peores. En este caso también ha montado
las maquinarias del agronegocio en la región, y ha significado fuente
de ingresos para los gobiernos, empeñados en la reconstrucción de la
pesadilla postliberal. Pero, para las organizaciones indígenas y cam-
pesinas del Movimiento Nacional Campesino Indígena20, la soja “ha
devastado bosques, desalojado comunidades campesinas e indígenas,
contaminado suelos y aguas, y aumentado los precios de los alimentos en
el mercado interno”. Tal realidad se oculta a muchos seres urbanos de
ArGENtina, confiados en la sustentabilidad de Monsanto en su WEB.
Syngenta funda su República Unida de la Soja y al gigante Mon-
santo le interesa recuperar su inversión, litiga en la UE contra Argen-
tina para lograr el cobro de regalías sobre los cargamentos del “forraje
transgénico” que llegan de ArGENtina a los puertos del Viejo Mundo.
Queda un registro wikileaks de este “affaire Monsanto” publicado en el
libro Argenleaks21: al fin los escépticos pueden ver documentos sobre
como la transnacional intenta interferir en las políticas nacionales.
Luego de perder el juicio que entablara contra el país en la UE, el
gigante Monsanto sigue presionando para modificar la Ley de Creacio-
20 www.mnci.org.ar
21 Santiago O’Donell, Argenleaks, Ed. Sudamericana, 2011.
·97
nes Fitogenéticas22 vigente, a fin de garantizar el cobro de regalías de
“genes apilados” 23, próxima tecnología a liberarse y que demanda un
eficiente control del Estado para el cobro de sus derechos de propiedad
intelectual y controles que eviten la circulación de semillas “fuera de
la ley” que lesionen su rentabilidad.
En paralelo, el discurso oficial difundido por organismos del Esta-
do y el de los biotecnólogos de plantas, es casi mesiánico en relación
al poder que se otorga al paquete tecnológico transgénico. Ambos asu-
men que la introducción de soja RR y el maíz Bt han sido la solución
a la crisis económica 2001-02. Una sensación de agradecimiento a las
políticas de los ’90, que liberaron los cultivos OGM sin ninguna consul-
ta a la sociedad ni aplicación de principio precautorio, resulta al me-
nos contradictoria. Las áreas de Agricultura y de Ciencia y Tecnología
fueron elevadas del rango de Secretaría a Ministerio durante la última
década y la impronta desarrollista promovida desde estos estratos es
parte del discurso permanente de la Presidenta. Tecnópolis y el PEA2
lo retratan en parte, lo mismo que el aumento de los presupuestos
dedicados a estas carteras.
Preocupados, por obtener lo que me atrevo a denominar, irónica-
mente, “soberanía genética”, las políticas públicas de ciencia y tecno-
logía de ArGENtina, apelan al desarrollo de una biotecnología local
capaz de ofrecer patentes producidas en el país24. ¿Genes nacionales y
populares que coticen en Wall St.?
“The rapid growth of grain production in the country, due to the introduc-
tion of biotech varieties of RR soybeans and Bt corn, has had an undeniable
role in helping the country to mitigate the effects of economic crisis that
occurred in late 2001 and early 2002. The tax on grain exports, in a context
of high international prices, has allowed the national government to make
available additional resources. In this way, the positive impact of biote-
chnology on society has been shown, albeit in a circumstantial manner,
through its capacity for productive change in the generation of resources.
But it is necessary to ensure the sustainability of productive growth by
allocating resources to encourage innovation in new varieties”.25
22 Ley 20.247; www.catedralibredesoberaniaalimentaria.blogspot.com.ar/#!/2013/04/
como-leer-la-nueva-ley-de-semillas.html
23 Genes apilados: combinación de genes que suman resistencias diversas en el mismo
genotipo OGM.
24 La Presidenta declara desde Nueva York: “Me reuní con Monsanto... estaban muy
contentos porque Argentina hoy está a la vanguardia en materia de eventos bio-
tecnológicos. También en repatriación de científicos hacía la Argentina y funda-
mentalmente en respeto a las patentes. Como ahora nosotros hemos logrado
patentes propias nos hemos convertido también en defensores de las patentes”.
www.presidencia.gob.ar/discursos/25918-almuerzo-en-el-council-de-las-americas-
palabras-de-la-presidenta-de-la-nacion
25 Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentos. Plan Estratégico 2005-
2015 para el Desarrollo de la Biotecnología Agropecuaria, 2004.
98·
Casi un “orgullo de ser argentino”, por el cual irónicamente se
nos caracteriza en nuestra región iberoamericana, se desprende del
discurso sobre la amplia aceptación que los cultivos OGM tienen en
nuestra sociedad. De allí la metáfora elegida para uno de los terri-
torios imaginarios de la Républica Unida de la Soja: ArGENtina, la
patria transgénica. En tiempos de identificación con los valores de
la Patria Grande Latinoamericana, no deberían sentirse deseos de
ser un poco “europeo”... Sin embargo, en este caso no caben dudas:
la UE no permite cultivos transgénicos, salvo en España donde ha
ingresado el maíz para forraje. Es el “otro” primer mundo en que
la sociedad aprecia principios precautorios luego de pasadas “vacas
locas”. Llama la atención a qué actores hacen referencia los inves-
tigadores para caracterizar nuestra “amplia aceptación”:
“In Argentina, for example, transgenic crops are widely assumed, by
agricultural, economist, the media, and government as largely or even
entirely responsible for the spectacular growth in production, producti-
vity, and internationally competitive performance of soy and maize in
recent years”. 26
Según esa visión, agricultura, economía, medios y gobierno con-
figuran el mapa de la “amplia aceptación OGM”. Transmite también
la sensación de contar con dispositivos conectados en diferentes es-
pacios, con potencia para sostener el discurso transgénico. Algunos
colaboran con avalar la seguridad alimentaria, entendida como ino-
cuidad de los alimentos, otros aseguran la posibilidad de conservar
para las generaciones futuras un ambiente saludable y sustentable
impregnado de buenas prácticas agrícolas. Los mismos discursos ema-
nan desde la Universidad que forma profesionales ligados a la produc-
ción e industrialización de alimentos, a la salud y al derecho. Ninguno
de estos aspectos parecen verse afectados por la “amplia aceptación”
de la cultura transgénica.
Nos queda a partir de aquí, formular algunas contradicciones al
discurso, que pudimos relevar caminando barrios fumigados de Ar-
gENtina. Una vez más son madres las que ayudan a correr velos y visi-
bilizar el lado oscuro del éxito, llegando a los lugares donde la amplia
aceptación que señalan los científicos, no existe.
“–Muchas veces se las menciona como las nuevas Madres, ¿cómo toman
esas comparaciones con las Madres de Plaza de Mayo?
–Cuando nos comparan con las Madres, primero hay que saber dónde
estuvieron ellas, lo que han pasado... vivieron cosas terribles como los
secuestros y las desapariciones. Claro que nos sentimos halagadas ante
26 Marin, A. et al. Developing capabilities in the seed industry: which direction to
follow?, CONICET-CENIT, Argentina,2013.
·99
esa comparación. Y tratamos de hacer, como hicieron ellas, la mayor
difusión de nuestra experiencia para ayudar a que la gente no pase lo
que nos pasó a nosotras... Y por esta lucha también me han amenazado,
se han metido con armas en mi casa y me dijeron que ‘deje de joder con
la soja’. Muchas veces tenía miedo de que mis hijas no vuelvan a casa. Y
desde hace unos dos años me fui del barrio, donde los punteros hicieron
que nos peleáramos entre vecinos, y nos puso la gente en contra. Todo
eso es parte de la lucha nuestra. No le deseo a nadie esto.” 27
Semana Santa 2013, apenas a ocho días del equinoccio del otoño en
el hemisferio sur el pronóstico anuncia que la temperatura máxima
superará los 30°C, con Azul y Eduardo caminamos hacia la terminal de
ómnibus interurbanos para ir hacia los “barrios fumigados” del periur-
bano de Córdoba. Es viernes santo, no laborable en nuestro calenda-
rio. No hay fila para subir, viajamos sentados. En menos de una hora
de trayecto, de muy mal humor el chofer
avisa que llegamos a Ituzaingó Anexo.
Sin embargo, nos hemos pasado unos ki-
CAMinAr EL lómetros. Ya comenzamos a sentir la hos-
BArriO FuMiGAdO: tilidad que rodea estos sitios. Luego de
caminar “La Ciudad de mis Sueños”, sitio
LAS nuEvAS MAdrES en que descendimos, retrocedemos en
otro bus. Me resulta muy raro pisar esas
dE ArGEntina calles de Ituzaingó Anexo, cuyo mapa
muestro en charlas sobre consecuencias
del modelo sojero. También duele pasar
por el centro de salud, que guarda las
tristes historias de diagnósticos terminales y abortos espontáneos, en
esta calurosa siesta de sol implacable. Situado al SE de la ciudad, en
unas 30 manzanas viven alrededor de 120 familias, unas 5000 perso-
nas que se asientan desde los años ‘50 para cubrir tareas industria-
les del complejo FIAT-CONCORD, rodeadas de área rural productiva.
El mapa del Barrio Ituzaingó Anexo que menciono, fue realizado por
mujeres el barrio alarmadas por la cantidad de casos de cáncer, leu-
cemia, malformaciones congénitas que sistematizaron entrevistando
a las familias casa por casa para completar su estadística popular. En
2001 Sofía Gatica, quien pierde a su hijo recién nacido por una mal-
formación de riñón en 1997, crea la asociación “Madres de Ituzaingó
Anexo” comenzando con otras mamás como Vita y María Godoy, un
largo y doloroso camino de difundir y de reclamar a las autoridades.
“Salimos a la calle a decir: ‘tenemos cáncer, ayúdennos’.”28
27 Sofía Gatica. Reportaje de Leonardo Rossi, 2013. www.leonardorossi.wordpress.com
28 Del mismo reportaje de Leo Rossi.
100·
Profesionales médicos, abogados, biólogos29 trabajan en red con
barrios y pueblos fumigados. La ONG FUNAM30 define los tres grandes
grupos de contaminantes: arsénico, metales pesados y plaguicidas a
los que está expuesta la población de Ituzaingó, que actúan como un
cóctel con plaguicidas como endosulfán y DDT, disruptores endócri-
nos. La continua fumigación con mezclas de glifosato y otros tóxicos,
sobre los campos que rodean el barrio completa el cuadro. Bajo la pre-
sión de la comunidad movilizada en defensa de sus derechos a la salud
y su seguridad ambiental y sanitaria, la provincia habilitó un centro
público, el Hospital Oncológico de Córdoba y creó el Registro Provin-
cial de Tumores, el más terrible objeto de registro que he escuchado en
mi vida. Tal vez sea medida de ausencia de principios precautorios...
Se dictan tres ordenanzas municipales de “emergencia sanitaria y am-
MOnSAnTO
biental” que prohíben fumigaciones alrededor del barrio y en todo el
ejido de la ciudad. Sin embargo las fumigaciones no se detienen.
Diez años después, el doloroso y solitario camino de las Madres
comienza a tener resultados: llega el juicio, al fin hay responsables.
En febrero 2008, el Subsecretario de Salud de la Ciudad de Córdoba Dr.
MALvinAS
ArGEnTinAS
Medardo Avila Vazquez, denuncia una avioneta fumigando sobre el
Barrio. Procesan31 al propietario del avión y a dos empresarios produc-
tores sojeros como instigadores por fumigación clandestina con pro-
ductos de alta peligrosidad sometiendo a riesgo a población indefensa.
Varias cámaras se apartan de la causa conflictiva hasta que en junio
de 2011 se llega a jucio, “sentando precedente para defender el derecho
a la salud de los pueblos vulnerados por la codicia de los empresarios
sojeros que no dudan en envenenar escuelas rurales, pueblos enteros,
comunidades originarias, fuentes de agua, en afán de aumentar su renta
agraria.”32 El 4 de setiembre 2012 la Cámara Primera del Crimen de la
Ciudad de Córdoba difunde los fundamentos de la sentencia: en 627
páginas explicitan los argumentos que llevan a condenar a tres años
de prisión condicional, no efectiva, al agricultor y al piloto aeroapli-
cador, por el delito de contaminación ambiental dolosa, sentando así
bases para próximas demandas.
Otro reconocimiento a la lucha de estas “otras madres” de ArGEN-
tina llega en 2012: Sofía es distinguida con el Premio Goldman,una
especie de Nobel a causas populares ambientales, lo recibe de las ma-
nos de Barack Obama.
29 Médicos Medardo Ávila, Andrés Carrasco, Biólogo Raúl Montenegro, Abogado Darío
Ávila entre muchos.
30 FUNAM, ONG ambientalista de Córdoba comprometida con Pueblos Fumigados.
31 Viola Ley Provincial de Agroquímicos Nº9164 y Ley Nacional de Residuos Peligrosos.
32 Colectivo Paren de Fumigar y Madres B° Ituzaingó; www.juicioalafumigacion.com
.ar/lacausa
·101
“Le voy a pedir que investigue a todas las multinacionales que están
haciendo daño a nivel mundial” Entregué a su secretaria un informe de
RAPAL33, sabía que apenas me aproximaría a él en la Casa Blanca. Un
tiempo después recibo por correspondencia un sobre plateado, con una
carta que dice: ‘Nada puedo hacer contra Monsanto, sigan luchando us-
tedes, lo están haciendo bien’”. 34
35
“Vecino, vecina, no sea indiferente, Monsanto contamina y asesina a la
gente” La voz de una niñita grita por megáfono, en la manifestación
frente al predio en que Monsanto construye la planta a 700 m de
una escuela. En el título, comparto la metáfora de Raúl Montenegro,
premio nobel alternativo 2004 otorgado por su lucha con los barrios
fumigados: Malvinas Argentinas en Córdoba es para mí una nueva
“Colonia Falkland” creada por Monsanto en el centro
geográfico de nuestro país.
Caminando por la ruta, desde el Barrio Malvinas has-
invAdE ta el campo en que se encuentra obrador de la futura
planta, nos preguntamos con Eduardo y Azul: “¿Te
parece que esta ubicación ha sido casual?” Los tres
35 pensamos que no. Como argentinos siempre sentire-
mos la necesidad de recuperar el archipiélago ocupa-
do por los ingleses, en el mar al sur de la Patagonia.
Sin embargo, dudo que sean muchos los argentinos
que sepan de la instalación de esta “colonia” de Monsanto en Córdoba,
que conozcan los mecanismos de la corporación para seducir al poder,
mucho menos, que se sientan bajo riesgo al enterarse... Recuerdo aho-
ra el spot publicitario que Monsanto pasa en TV cable a hora pico, en
un programa político de gran audiencia, días previos a las Elecciones
Primarias: “Después de 30 años en Argentina, agradecemos a cada pro-
ductor que lo hizo posible”.
Estamos convencidos que deberían ampliar los agradecimientos...
muchos engranajes del Estado han sido penetrados por la corporación
para tener una posición tan privilegiada, que la misma Presidenta de
la Nación elogia sus inversiones para construir la planta de Malvinas,
por cadena nacional desde New York, el 15 de junio de 2012. También
el Ministro de Agricultura anuncia un “necesario cambio de ley de
semillas” para el avance de la tecnología ofrecida por la empresa: In-
tacta RR2 Pro, variedad desarrollada para su cultivo fuera de USA, que
concentra varios eventos para resistencia a insectos y a herbicidas.
Dedicada sin duda a la República Unida:
33 Informe del Tribunal de los Pueblos, Red de Acción en Plaguicidas y sus Alternati-
vas para América Latina.
34 Testimonio de Sofía Gatica, 1er Congreso de Agroeocología de Buenos Aires, 2012.
35 Metáfora de Raúl Montenegro, Presidente de FUNAM, Profesor Titular de Biología
Evolutiva en la Universidad Nacional de Córdoba.
102·
“Monsanto desarrolló un avance productivo para el fundamental para el
futuro de la región. Sin dudas, constituye una gran oportunidad para el
mercado de Sudamérica. Desarrollada especialmente para esta geografía,
la tecnología INTACTA RR2 PRO promete grandes beneficios para el pro-
ductor agropecuario.”36
En nuestro recorrido por ExpoAgro, que Eduardo relata en “Etolo-
gía del Capital”, pudimos ver esta nueva variedad de soja en la muestra
viva de varias empresas. En el stand de la Nidera, cultivada detrás de
paneles acrílicos y elevada respecto al nivel del suelo, tuve la sensa-
ción de estar frente a un altar de la deidad genética del momento. Por
un instante asimilé esta sacralidad capitalista al maíz como planta
sagrada del pueblo maya, en tanto en sus Escrituras, el Popol Vuh re-
lata como la carne del hombre fue creada de maíz... Hoy su santuario,
el centro de origen en Yucatán está resistiendo la entrada del maíz
transgénico... Apenas visible en el frente, en letras pequeñas decía
“Con licencia de Monsanto”. Nueve mil contratos de regalías extendi-
das37 ya se han firmado a la espera de la liberación de esta variedad
¿cuestión de fe en esta deidad RR2?
“Para comprar, el productor tiene que haber firmado previamente una
licencia de uso, que va a decir que se compromete a reconocerle a Mon-
santo un canon tecnológico y pagar por él, independientemente de a qué
empresa le compre la semilla. La licencia es de por vida y no implica
compromiso de compra.”38
La principal incertidumbre sobre su liberación ya fue sorteada: “La
tecnología, que acaba de ser aprobada en China, por inocuidad alimen-
taria, inocuidad para el medio ambiente y que pueda ser importada al
mercado, para línea de soja tenemos Europa y para maíz y aceite, China”.
Un intenso lobby del gobierno argentino en el gigante oriental suce-
dió el anuncio de los directivos de Monsanto ARG. Imposible cultivarla
si nuestro principal mercado no autoriza su comercio.
En junio de 2013 la firma presenta en el Hotel Holiday Inn de Cór-
doba, el Tercer Balance de Sustentabilidad 2012, resaltando la necesi-
dad de una “nueva forma de comunicación con la comunidad”. Estas
declaraciones, vertidas en presencia del intendente y concejales de
Malvinas, dejan en claro la incomodidad que provocan las moviliza-
ciones de la Asamblea Popular.
36 www.intactarr2.pro.com.ar
37 CELMA, Centro de Estudios Legales de Medio Ambiente. Informe “Argentina según
Monsanto”. www.facebook.com/centrodeestudios.legalesdelmedioambiente?fref=ts
38 Gerente de Soja de Monsanto. “¿Cómo va a funcionar el pago de regalías por la
nueva soja RR2 + Bt?”, Suplemento Rural, Clarín, 22/2/2013.
·103
En 1978, Monsanto39 empezó sus actividades de acondicionamiento
de semillas híbridas de maíz en Pergamino, provincia de Buenos Aires.
Actualmente posee en nuestro país cinco plantas: dos procesadoras de
semillas (Planta María Eugenia en Rojas, Planta Pergamino); una pro-
ductora de herbicidas (Planta Zárate) y dos estaciones experimentales
(Camet, Fontezuela). Su proyecto actual es instalar una tercera fábri-
ca en la provincia de Córdoba y dos nuevas estaciones experimentales.
Para otorgar fiabilidad a la operatoria de sus plantas de semillas, los
ejecutivos de Monsanto exhiben la de Rojas, provincia de Buenos Ai-
res. La de Malvinas funcionaría igual, procesando esta nueva semilla
Intacta RR2 Pro, pero a una escala superior; dado que sería la mayor
planta de esa empresa en el mundo. El traslado de la cosecha con res-
tos de agroquímicos, un tránsito de camiones para completar 216 silos
de 137 Toneladas, sumado al procesamiento posterior con curasemillas
de alta toxicidad, hizo que la Red Universitaria de Ambiente y Salud40
publique un su segundo informe los peligros a que se verá sometida
la población de Malvinas a causa del transporte, almacenamiento y
utilización de venenos en la factoría, una amenaza por sí mismos,
sumado a las sospechas de cómo se gestionarán los desechos tras su
utilización. La ironía de las corporaciones a la hora de bautizar sus
productos químicos con nombres “amigables y locales” ha hecho que
Bayer diera nombre a los tres curasemillas usados masivamente en
las plantas procesadoras de las semillas industriales como: Poncho,
Gaucho y Nativo. ¿Venenos populares?
“Probablemente a muchas personas en esa localidad les haya faltado
información al principio. La decisión de difundir el reporte de sustenta-
bilidad en Córdoba tiene que ver con eso.” 41
La Asamblea “Malvinas lucha por la vida” se constituye como mo-
vimiento de resistencia frente a la inminente instalación de la planta.
Constituida por vecinos de Malvinas, de otros barrios y comunidades
de Córdoba. El 24 de julio de 2013, celebraron un año de lucha en que
llevaron a cabo marchas, denuncias e intervenciones artísticas, inten-
tando delatar acuerdos de los funcionarios municipales y provinciales,
a espaldas de los vecinos y que han conducido a rupturas cuando, por
ejemplo, se argumenta acerca de los empleos que facilitará la insta-
lación de la planta. Un relevamiento de la Universidad Católica de
Córdoba que confirmó que el 87 por ciento de los vecinos de Malvinas
reclama una consulta popular para decidir si aceptan la instalación.
Por el aniversario, la Asamblea publica en su facebook:
39 www.monsanto.com/global/ar/quienes-somos/Pages/historia-local.aspx
40 www.reduas.fcm.unc.edu.ar/lo-que-no-se-dice-de-la-nueva-planta-de-monsanto-
en-cordoba-2o-informe
41 Declaraciones a la prensa del gerente de Asuntos de Gobierno de Monsanto.
104·
“Hago falta. Hago falta... yo siento que la vida se agita nerviosa si no com-
parezco, si no estoy... Siento que hay un sitio para mí en la fila, que se ve ese
vacío, que hay una respiración que falta, que defraudo una espera... Siento
la tristeza o la ira inexpresada del compañero, el amor del que me aguarda
lastimado... falta mi cara en la gráfica del Pueblo, mi voz en la consigna, en
el canto, en la pasión de andar, mis piernas en la marcha, mis zapatos ho-
llando el polvo... los ojos míos en la contemplación del mañana... mis manos
en la bandera, en el martillo, en la guitarra, mi lengua en el idioma de todos,
el gesto de mi cara en la honda preocupación de mis hermanos.”42
Monsanto produce semillas en el Valle del Conlara, de la provincia
limítrofe San Luis, en campos de la empresa Cresud desde 1999. Bajo
el modelo de la agricultura industrial, se desmontaron miles de hec-
táreas, se hicieron grandes perforaciones en uno de los acuíferos más
grandes de la Argentina, se instalaron pivotes de riego y tendidos de
alta tensión para su uso exclusivo. Se siembran cultivos transgénicos
de maíz y soja para semilla. Se fumiga durante el ciclo del cultivo, con
productos peligrosos sin el consenso de la comunidad. Este modelo
no genera puestos de trabajo, ni alimento y pone en riesgo la salud
comunitaria. Las fumigaciones se extienden sobre
la planta de agua potable de Santa Rosa de Conlara.
Todo indica que la corporación semillera expandirá
su producción para cubrir la demanda de la plan- Valle
ta Malvinas, por lo que la movilización popular se de Conlara:
encuentra en plenitud durante el último año, enca-
bezada por organizaciones a favor de la soberanía hacer hablar
alimentaria como Asociación Campesinos del Valle
de Conlara, la Red de Médicos de Pueblos Fumigados al gigante
y asambleas populares de otras provincias.
A pesar de haber dedicado un comunicado el 14 de junio, sobre las
actividades en el Valle (justo a un año del anuncio de la presidenta
desde NY), frente al avance de la empresa en la zona, la multinacional
más grande de semillas puso el rostro43 en respuesta a las resistencias
populares locales: “Acá hacemos producción de semillas de maíz en forma
sustentable”, “Estamos en los más altos estándares del mercado”, son di-
chos del Representante de Asuntos Gubernamentales en la conferencia
de prensa y reunión con los vecinos: “Monsanto en una empresa muy
chiquita; grande es Coca Cola. Todos los insumos, agroquímicos y productos
utilizados en dichos campos para el cultivo de maíz se encuentran apro-
bados por los organismos nacionales competentes en la materia: Comisión
Nacional Asesora de Biotecnología Agropecuaria (CONABIA) y el Servicio
Nacional de Sanidad y Calidad Agropecuaria (SENASA). Discutan con los
Estados...” Esta última sugerencia, tal vez se refiera a los estados imagi-
42 Alfredo Zitarrosa. Cantautor popular uruguayo militante de causas sociales.
43 www.leonardorossi.wordpress.com/2013/07/22/monsanto-del-oscurantismo-a-
poner-la-cara-en-san-luis
·105
narios creados por las corporaciones y para los que desarrollan sus nue-
vos productos, por sobre los Estados-Nación, que relajan su regulaciones
para no interferir con la expansión de las nuevas repúblicas.
Consultados por medios locales y vecinos, desde la compañía se ne-
garon a dar datos acerca del tipo y cantidad de agroquímicos que apli-
can en los campos que explotan en el Valle del Conlara. ”No trajimos
los datos. Cumplimos con las reglamentaciones” dijo la Representante de
Comunicación quien aseveró que desde hace 14 años cultivan en el Cam-
po “La Gramilla” del grupo desarrollista inmobiliario IRSA, alrededor
de unas 1700 Hectáreas y no tienen planes de expandirse en el Valle.
Molinari diría: “la lengua de las corporaciones” se ha oído en Conlara.
A diferencia de las luchas de los barrios Ituzaingó y Malvinas, la
condición rural en este episodio más reciente, protagonizado por esta
organización campesina entre muchas otras, nos permite reflexionar
sobre la noción de territorialidad. Del mismo modo que las fronteras
difusas del los estados imaginarios como la República Unida de la
Soja, pero a niveles más locales, se trata de conflictos de definición
y apropiación de territorios. La disputa sobre modelos de producción
familiar presenta la tensión entre adoptar la tecnología industrial
transgénica, como ícono de progreso promocionado por el mercado, o
la permanencia en tecnologías apropiadas y saberes campesinos, que
aseguren dar continuidad a sus modos de vida y su rol en la producción
de alimentos para la población. La expansión del modelo transgénico
parece inhibir la posibilidad de convivencia con otros modelos de pro-
ducción como el agroecológico, biodinámico, orgánico, cuestión que
lesiona seriamente la soberanía alimentaria y la provisión de alimen-
tos saludables a “la mesa de los argentinos”44. La lucha de las organiza-
ciones trasciende fronteras articulando globalmente a través de La Vía
Campesina. En el país MOCASE-Movimiento Campesino de Santiago del
Estero ha conseguido visibilidad por las transformaciones territoria-
les y hechos de violencia anexados al modelo sojero. Mientras tanto,
otro poder, el de las organizaciones de Malvinas Argentinas y Valle de
Conlara pudieron mostrarnos como habla Monsanto... “Parece que les
dimos, tuvieron que bajar a hablarnos.”45
Más de 70 pueblos y comunidades que luchan para frenar la expan-
sión de los cultivos OGM y el uso irracional de pesticidas, se asocian
en la campaña “Paren de Fumigar”46 del Grupo de Reflexión Rural47.
En algunos casos se ha limitado el área de fumigaciones próximas a
viviendas, escuelas y cursos de agua. En la provincia de Buenos Aires,
organizaciones sociales locales y FPC-Familias Productoras de Cañue-
las, logran en ese municipio la primer ordenanza de “Regulación de
44 Frase utilizada durante el conflicto denominado “del campo” por las retenciones a
la exportación de soja.
45 Goyo, Rubén, Fede, Campesinos del Valle.
46 Campaña Paren de Fumigar GRR. www.grr.org.ar/campana.pdf
47 www.grr.org.ar
106·
Uso de Agroquímicos“, que fija un radio de 2000 m. de distancia de los
límites urbanos para la prohibición fumigaciones. Compromete ade-
más a reglamentar el sistema de producción Agroecológica y la Certifi-
cación municipal de los productos obtenidos. El 1° de julio, en la radio
de la Universidad de Buenos Aires 48, el ministro de Asuntos Agrarios
de la Provincia de Buenos Aires, declaró que en sesenta días, la medi-
da sería extendida a los restantes municipios de la jurisdicción: “Hay
una decisión muy importante del gobernador de la Provincia de Buenos
Aires de, utilizando algunas cosas de la ordenanza de Cañuelas, poder
avanzar en un decreto de regulación de agroquímicos que sea para toda
la provincia de Buenos Aires”. Cañuelas, a sólo 50 km de Capital Fede-
ral, ¿podremos los seres urbanos aclarar opacidades y curar cegueras
transgénicas que señala Molinari en su B.O.G.S.A.T?
En Rosario, provincia de Santa Fe, durante junio de 2013 tuvo lugar
el 2° Congreso Internacional de Salud Ambiental congregando pro-
fesionales 49 y organizaciones sociales comprometidos con las conse-
cuencias de modelos extractivos en los que está envuelta nuestra
América Latina. En la declaración final, una serie de SÍ y NO se
refieren a la falta de neutralidad de la ciencia: “No al experimento
global al que nos someten con los cultivos y los alimen-
tos transgénicos. Seguiremos luchando por una América
LA MALA
Latina y un Planeta Libre de Transgénicos, como única
alternativa que garantice las bioseguridad y la alimen-
tación de nuestros pueblos. Las clarísimas exposiciones
científicas sobre la ‘mala ciencia’ que los promueven CiEnCiA
que hemos compartido en este Congreso, no dejan lu-
gar a dudas sobre la amenaza que significan los OGM.”
Intentando decodificar el mapa de responsabilidades que propone la
obra de Eduardo, noto como el sistema de Ciencia y Tecnología ha sido
actor clave en la instalación del modelo transgénico desde finales de
los ’80 en una interacción con estamentos oficiales construidos como
plataforma de experimentación. En esos años, como becaria de inicia-
ción del Consejo Nacional de Investigaciones Cientificas y Tecnológicas
CONICET, pude transitar “desde adentro” la expectativa que provocaba
la revolución biotecnológica incluso para gente como mi Maestro Ing.
Agr. Luis B. Mazoti, genetista de los pioneros, ya retirado para enton-
ces, que soñaba reeditar sus investigaciones teóricas sobre transposable
elements in maize por medio de marcadores moleculares que comenza-
ban a desarrollarse en ArGENtina. En los congresos, diapositivas con lí-
neas de superratones y marcadores de transformación de tejidos in vitro
desafiaban la imaginación de quienes esperábamos con algún objetivo
específico esta tecnología. La empresa Pioneer realiza en julio de 1987
48 www.catedralibredesoberaniaalimentaria.blogspot.com.ar/#!/2013/07/prohibi-
rian-los-agroquimicos-en-amplias.html
49 Marie Monique Robin y Gilles Serallini participaron en paneles.
·107
las “Primeras Jornadas de Biotecnología” en las que Donald Duvick, pa-
dre de la tecnología de híbridos de maíz en USA, sorprende al auditorio
calificado de los principales investigadores del país con dos consignas:
“Continuar con la internacionalización de los recursos genéticos, ante el
riesgo que activistas políticos bloquearan el acceso a los recursos vegetales
en sus Estados como ya ha sucedido. No considerar ningún reconocimiento
a la ‘materia prima’ vegetal, lo que tiene valor y precio es la tecnología
agregada, el trabajo de domesticación ancestral no tiene valor económi-
co”. Promover “Joint Venture” entre Universidades y empresas, compar-
tir riesgo y conocimiento. Generar Patentes. Todavía había chances de
disputar una Ley de Patentes en nuestro país, que incluyera a la vida
como objeto de derechos de propiedad intelectual y exclusividad de uso.
No prosperó a pesar del intenso lobby de las empresas biotecnológicas.
Recuerdo que en aquella reunión de Pioneer, me impresionó que la elite
de la genética permaneciera en el recinto sin comentar nada , yo no
deseaba escuchar nada más sobre el diseño colonial de los dueños del
“valor agregado del conocimiento”.
Así nos formamos los científicos de ArGENtina, país elegido para
desplegar el paradigma transgénico y por ello tiene mucho mérito
pensar desde el Estado en la independencia científico tecnológica que
otorgan los desarrollos de una ciencia propia local. Se reconocen los
grandes esfuerzos, aún más quienes pertenecen a la generación de
investigadores del sistema científico nacional, que fue enviada “a la-
var los platos” por el Ministro de Econonía Domingo Felipe Cavallo,
autor del Plan de Convertibilidad de durante la Presidencia de Carlos
S. Menem. Desde 2005 el Estado está repatriando científicos formados
con sus recursos, que emigraron por la crisis. No caben dudas sobre
la ampliación de derechos que implica la oportunidad de tener una
educación universitaria pública y gratuita que permite un ascenso de
clases permanente y nuevas Universidades en todo el país, especial-
mente en el Conurbano de Buenos Aires que concentra la mayor po-
blación urbana. El refuerzo presupuestario de Educación y de Ciencia
y Tecnología son parte de las diferencias abismales, comparando esta
gestión de gobierno con los últimos cincuenta años, incluyendo el
financiamiento de proyectos de vinculación de las Universidades con
la comunidad: Voluntariado Universitario, Proyectos de Extensión y
de Desarrollo Tecnológico para la Inclusión Social.
Sin embargo, las capas atravesadas por el fenómeno transgénico, exi-
gen de una discusión multidisciplinaria en que otros sectores que sufren
las consecuencias de su aplicación, se sientan contenidos y escuchados.
Que la sociedad en pleno tenga el derecho a la información sobre que
comemos cuando comemos OGM y que distintos modelos de producción
puedan coexistir. Para lograr la independencia de los nuevos territorios
difusos que los poderes transnacionales siguen fortaleciendo. Para volver
a ser Argentina y terminar con la República Unida de la Soja.
Ana Broccoli, Ing. Agr. Agroecóloga. Julio de 2013.
108· ·109

4.
por AC
LA TiErrA
ES LA vidA

“Con la comida no se jode.” 1

“La tierra es la vida, no se compra ni se vende.” 2

El desafío que dio origen a B.O.G.S.A.T / La responsabilidad consistió en

profundizar la práctica caminante investigativa de modo colectivo, para
enfrentar juntos a la maquinaria transgénica y el modelo hegemónico de
los agronegocios en la república unida de la soja, en Sudamérica. Bus-
camos romper la agenda política que controla el régimen de visibilidad
de esta realidad hegemónica, y de este modo producir imágenes y gene-
rar nuevos saberes. Ingresamos en los agujeros negros que perforan el
tiempo-espacio del tejido comunitario rural y atravesamos los tajos que
lo rasgan, tornando evidente que la soberanía alimentaria está en juego
y que los habitantes de las grandes ciudades estamos absolutamente
unidos a esta trama. La tierra que caminamos está en

TrAnSiTAndO
disputa y los frutos de la misma también. Pudimos
conocer más acerca de las responsabilidades del accio-

SEndErOS nar asesino de los poderes concentrados glocales. Pero

pudimos también compartir los senderos transitados
cotidianamente con aquéllos que luchan por la tierra,
la vida y la libertad. “Las semillas se conservan com-
partiéndolas”.3 Las comunidades originarias con sus saberes ancestrales y
su hermandad con la naturaleza, las organizaciones comunitarias que desa-
rrollan y transmiten la agroecología (rural y urbana) y las orugas nos hablan:
No es cierto que no hay otro camino.

Eduardo Molinari / Archivo Caminante, Julio de 2013.

1 Graffitis y afiches de la Juventud Peronista y el Movimiento Evita en las calles de

Buenos Aires, 2008.
2 Félix Díaz, líder de la Comunidad Quom, Formosa, Argentina. www.soc.uniden.edu.ar
[consultado el 4 de agosto de 2013].
Museo del Barro 3 Lucho Lemos, Agricultor agroecológico, coordinador del Banco de semillas Ñanderoga,
Asunción, Paraguay Rosario, Provincia de Santa Fé, Argentina. En Soberanía Alimentaria Dos Puntos,
Foto AC, 2013. Edición El Levante, Rosario, 2012.
110· ·111
112·
146· ·147

1. THE MOLECuLAr AGEndAS /AC

....................................................................................................
regime of visibility and the agenda of agribusiness.
“This tautological fact of self-evidence has been a
boon to photography, but also has bedevilled its com-
plex transmission in the public imagination, because
what the photograph proposes at the juncture between
its images and representations is undermined by two
principles: first, the veracity and reliability of the pho-
tographic image and, second, the circulatory logic of
the image – how what might be called its discursive
spaces relate to and equate with the forms of knowl-
edge that the photograph produces […] Images of
conflict have become more than instruments in shap-

B.O.G.S.A.T.
The responsibility
ing opinion; they have become cogs in the wheels of
social perception of mediated and mediatised conflicts.
What profit of knowledge then accrues to the public’s
perceptions of conflict? Who controls the photograph’s
............................................................................................... regime of visibility and its discursive spaces?”1

B.O.G.S.A.T. / The responsibility The broken agendas.

Eduardo Molinari / Archivo Caminante p. 147 Friends having dinner on the pavement. A lovely
night, wine and fish, summer in Seville. The conver-
1. THE MOLECuLAr AGEndAS sation focuses: Some days before, in the beginning
regime of visibility and the agenda of agribusiness of May 2010, Principio Potosí ¿Cómo podemos cantar
- The broken agendas el canto del Señor en tierra ajena? [Potosí Principle,
- Ethology of the capital How can we sing the Lord’s song in foreign lands?]2,
a collective project of research with artistic methods,
2. THE TrAnSGEniC drOnES had opened at Museo Centro Nacional de Arte Reina
A blind and invisible machine Sofía in Madrid, Spain; the first exhibition of its itin-
- An American monster in the sights erary, that would then take it to Berlin and La Paz.
- Bags on a soy truck To some of us, the opening of this contemporary art
exhibition meant the beginning of a vital process, the
3. THE TABLE possibility that our work could find new interlocutors
responsibilities in the transgenic model and interactions in the community. To others, this
- A drone in the soup fluidity between art and society was much more a
- The city of my dreams wish than a reality.
In the context of the bicentennials of the revo-
4. LAnd iS LiFE lutionary movements that started processes of inde-
Travelling through different paths pendence from the Spanish Crown in South America
in the 19th century, at the core of the dialogues and
..................................................................................................... challenges faced jointly in Principio Potosí were the
continuation of the processes of decolonization and
nEOFEudAL EXpEriMEnT fight against the neoliberal hegemony in the 21st
Ala pLástica p. 161 century. One of the central axis of the project was
to point out the existence of an industrial machin-
..................................................................................................... ery of image production at the service of the Span-
ish Crown and their colonialist enterprise of conquest
ypy and subjugation. However, today we can find a cor-
Hernán Cardinale p. 166 respondence between that machinery and the present
system of contemporary art, which legitimates the
..................................................................................................... transnational elite that, day after day, profits from

ArGEntina: Transgenic Homeland

Ana Broccoli p. 168 1 Okwi Enwezor, Image counter Image, Foreword, Haus der
Kunst / Verlag der Buchhandung Walther König, Köln, 2012.
..................................................................................................... 2 www.potosiprincipleprocess.wordpress.com/
148·
the hegemony of financial, post-industrial, extractiv-
ist and semiotic capitalism.
In our particular collective experience, however,
at the time of analysing tactics and strategies to the
interior of the hegemonic cultural industries, prac-
tices that many art historians and theorists like to
call political art, there was an unavoidable datum.
Our exhibition had opened but it wasn’t possible to
distribute the catalogue-book that documented our
work and voices. We felt a bitter taste in our mouths
that day: in that sense, the public and ourselves had
left the place with empty hands. The dispute over
the control of the narratives, the administration and
management of the participants’ voices and the pro-
duced knowledge, became evident with that absence.
It seems something couldn’t be seen or told. Some-
thing didn’t have to go round in Madrid at that time.
From that Sevillian dinner I keep an image, use-
ful to introduce my present work for the exhibition
Monday begins on Saturday, at Bergen Assembly.
Surely, the opening day of such a big exhibition was
the beginning of something very intense. However,
in the Reina Sofía Museum director, M.’s agenda,
seemed to end. Almost surely, we could see that it
had been crossed out on a page or sent to the trash-
bin on the mobile phone.
“What notes, quotes and drafts would we find to-
day if we were able to read the agendas with which
capital organises its goals? Which of those messages
would allow us to know their plans better? To make
visible, to intervene and to disrupt those hegemonic
agendas is a central goal of this project. Not to obey
them passively but to get rid of their chronology in
order to create and inhabit another time, our time.”3
The concept of hegemony set out by Anto-
nio Gramsci as a tool of political construction, the
“ability to unify and maintain united a social bloc
via ideology that is not homogeneous, but is charac-
terized by deep class contradictions”4 had been left
aside by almost all the political and cultural prac-
tices that meant to resist neoliberalism during the
‘90s in Argentina. The lack of interest in disputing
the power of the state reached its peak during the
crisis of 2001 and its maximum expression was the
slogan shouted by the demonstrators on December
19th and 20th: “All of them must go!” [¡Que se vayan
3 Azul Blaseotto, Santiago Fredes, Eduardo Molinari, Ga-
briel Serulnicoff, Valeria Serué. Introduction text to the
project Hegemony. Disrupting the capital’s agendas, in La
Dársena_Plataforma de Pensamiento e Interacción Artís-
tica, Buenos Aires, Argentina, 2011 - 2013. Further infor-
mation: plataformaladarsena.blogspot.com.ar/2011/05/
hegemonia.html
4 Antonio Gramsci. Historical Materialism and the Philoso-
phy of Benedetto Croce, Juan Pablos Ed., México, 1975.
todos!]. A deep crisis of political representation that,
however, had a reverse side: a social, political and
cultural construction based on a transversal network,
self-management and territoriality, the creation and
occupation of community spaces, times and ties. A
construction embodied (even today with an enor-
mous potential) in Human Rights organizations such
as Madres and Abuelas de Plaza de Mayo, HIJOS, the
Mesa de Escrache, unemployed workers organizations,
cartoneros (people who collect garbage in search of
recyclable items), factories recovered and self-man-
aged by workers, native communities, artistic groups,
community radios and TV channels, associations
fighting for the rights of different sexual orientations
and gender identities.
When Néstor Kirchner took office, on May 25th
2003, something changed. During the decade 2003-
2013, the political force led by Néstor and Cristina
Kirchner deployed an unexpected process of great in-
tensity, in line with a renovation of the governments
of the region and the strengthening of the ties among
the countries. Kirchnerism politicized daily life
again, by revitalizing public policies, through state
interventions to design policies for social inclusion
and redistribution of wealth. Establishing a dialogue
with all the aforementioned social actors, it strength-
ened its position with a series of electoral victories,
only obscured by the defeat in 2009, to the heat of
the conflict with the agricultural trade associations
in 2008, after trying to increase export taxes on soy.
First Néstor and then Cristina have been able to
push an agenda that includes judging the criminals
responsible for the genocide during the last dicta-
torship and sending them to prison; the creation of
memory spaces in former illegal detention centres;
the rejection of the FTAA (Free Trade Area of the
Americas, a U.S. initiative to articulate a continen-
tal commercial alliance); the payment of the debt to
the IMF; the restatisation of emblematic companies
(YPF - Yacimientos Petrolíferos Fiscales [Treasury
Petroleum Fields]; Aerolíneas Argentinas [Argentine
Airlines]; AYSA [provider of drinking water]). They
have also restatised the National Pension System and
created the Universal Childhood Entitlement (AUH),
generating a social safety net that was unthinkable
during the nineties.
The return of the young people to political mili-
tant activities allows to develop what an annoyed
opposition defines as “the K account”, a narrative
that reinterprets the past, present and future of the
country and the region. This narrative gives place to
a cultural battle, reappraising national and popular
leading figures and ideas in pursuit of the construc-
tion of the Patria Grande [the Big Homeland, that
is, a united Latin America], whose most remarkable
political-institutional expressions are the revitaliza-
tion of MERCOSUR - Southern Common Market (cre-
ated in 1991) and the creation of UNASUR - Union of
South American Nations (in 2008; whose first Gen-
eral Secretary was Néstor Kirchner, until his death
in 2010), and the CELAC - Communiy of Latin Ameri-
can and Caribbean States, in 2010. This battle has
also included the acknowledgement of civil rights of
different gender identities. Through the Audiovisual
Communication Services Law there has been an at-
tempt to limit the monopolistic position of big me-
dia corporations. The Law has been approved by the
Argentine Congress in 2009, but it is still awaiting a
decision of the National Supreme Court of Justice to
be in force, because the Clarín Group requested and
obtained a precautionary measure thanks to partial
judges. In 2013, the Government launched an initia-
tive to reform the Judicial System, and proposed the
election of judges through vote (an unsuccessful at-
tempt since the Supreme Court declared it unconsti-
tutional). An important part of this historic process
is the recovery of the presence of multitudes in public
spaces, with a series of events and popular festivities
such as the celebrations of the Bicentennial in 2010
and the science fair Tecnópolis since 2011, as well as
the recovery of the Carnival as a holiday, which had
been eliminated by the last dictatorship.
It is from inside this “won decade” and feeling a
part of this political, social and cultural movement,
at a national and Latin American level, that I’m in-
terested in developing some critical thinking and a
situated artistic practice, in context. It’s in defence
of all these achievements, because of the need for
strengthening the Patria Grande, the Abya Yala and
the search for the Buen Vivir [Living Well], that in
B.O.G.S.A.T / The responsibility (installation for the
exhibition Monday Begins on Saturday) I mean to
share a series of questions, reflections and intuitions
about the regime of visibility that is imposed to us
by the people responsible for the agribusiness model
organized around direct seeding, biotechnology, ge-
netically modified seeds and agrochemicals. And of
course, about their lethal social and environmental
consequences. There’s no social justice without en-
vironmental justice. There’s no liberation negotiating
with Monsanto. It’s necessary to break the agendas
of the capital.
B.O.G.S.A.T. / The responsibility is the response
to an invitation I received from the curators Ekateri-
na Degot and David Riff to continue with the research
of The Soy Children, my first work on the transgenic
model, developed between 2008 and 2010.
“My wishes (an urban inhabitant’s wishes) to get
close, physically, to a field transformed by biotechnol-
ogy and agribusiness, to know its scale, proportions,
smells, colours and above all, to try to inhabit –at
least for a short time– the invisible world of transgen-
ic plantations, my wishes faced something unexpect-
ed: the soy-world has a pleasant appearance, full of
·149
green, stillness and immensity. However, something
strange escapes the field of vision, an escape from our
senses to another part of the body, that punches us
in the stomach. The soy-world is full of black holes,
of passages to another and no place. What remains
unseen is what defines it, in perfect tune with the
very notion of the transgenic.”5
With these words I tried to define the aston-
ishment experienced by an urban inhabitant (from
Buenos Aires) for the first time faced with a GM soy
field, the dominant rural landscape in Argentina, and
a central element in the hegemonic design of the re-
gional territory for the production of commodities;
part of the united republic of soy, a puzzle imagined
by Syngenta and constructed together with several
transnational agribusiness companies at a global
scale, in alliance, and in complicity, with govern-
ments, and local agricultural, financial, industrial,
scientific and academic sectors. If, in that first en-
counter, what couldn’t be seen defined the soy-world,
in the present experience, for Bergen, I decided to
deepen the walking practice in search for images. To
enter the black holes that drill the rural time and
space, to inhabit the cuts that tear the community
fabric of the rural world, with consequences in the
big cities, that pretend to have nothing to do with
it. Methodologically, I’ve walked through three plac-
es: 1) A 3-day visit to the exhibition Expoagro, in
Baradero, Province of Buenos Aires; 2) Long walks
through the fumigated neighbourhoods of Malvinas
Argentinas and Barrio Ituzaingó Anexo, outskirts of
the capital of the Province of Córdoba; and 3) finally,
a tour along the Cuenca del Plata [Rio de la Plata Ba-
sin], with the aim of reaching Curuguaty, in Paraguay.
To share the experience and to form a work team, I
invited Azul Blaseotto, Ana Bróccoli, Ala Plástica and
Hernán Cardinale. Carlos Carballo was also present at
Expoagro. In this publication, you’ll be able to know
some of the results of this walking together.
Ethology of the capital.
“Under the hegemony of capital it is a miracle
that we are not paying for air, or that there isn’t a
tax on it at the very least. However, we will soon have
to pay for our genes, because no biological resource
from the molecular level on up will remain in the
public domain.”6
March 6th, 2013. 7:30 am. Azul, Ana, Carlos and
I depart from Triunvirato Avenue and Los Incas Av-
5 Eduardo Molinari. Los niños de la soja, Edición Archivo
Caminante with the support of MNCARS, Buenos Aires,
2010 [Walking Archives: The Soy Children, Autonomedia,
Minor Compositions, 2012]
6 Critical Art Ensemble, The molecular invasion, Autono-
media, 2002.
150·
enue, where the neighbourhoods of Villa Ortúzar and
Parque Chas meet, in Buenos Aires. In our way on the
car, inside the Capital, Francisco de Narváez’s political
campaign billboards called my attention. He’s a mem-
ber of the Chamber of Deputies by the Peronism op-
posed to the government. Born in Bogotá, Colombia,
in 1953, de Narváez is the first legislator born abroad
in the Argentine history. He entered the Chamber of
Deputies in 2005, as a member of the list headed by
Eduardo Duhalde’s wife. His billboards, whose aes-
thetic reminds us of the red backgrounds over which
the sensationalist TV channel Crónica presents its
first news, the billboards defy: “She or You. We are
with you”. In 2003, de Narváez accompanied the can-
didacy of Carlos S. Menem. Our car gets away at full
speed. “You” is not me.
Route 9, Province of Buenos Aires. More bill-
boards. Tarpaulins tied to the posts of wire fences
that delimit fields. They’re yellow, and belong to the
PRO (Republican Proposal), Maurico Macri’s political
force. Macri, the present Mayor of the City of Bue-
nos Aires, who means to promote himself at a na-
tional level. There are blue and green tarpaulins too,
that belong to the recently created party FE (‘faith’),
headed by Gerónimo “Momo” Venegas, general secre-
tary of UATRE - Argentine Trade Union of Rural Work-
ers and Loaders and also a member of CGT - General
Confederation of Labour opposed to the government.
During the agricultural and livestock lock-out in
2008, Venegas ordered the 62 Organizations (Peronist
unions) not to accompany the actions called by CGT
(then government supporters) and he supported “the
farmers”. Occasionally, I see billboards with an orange
background and white letters, a font that reminds me
of the posh Faena Hotel in Puerto Madero. It’s of-
ficial advertising of works done, or to be done, by
the governor of the Province of Buenos Aires, Daniel
Scioli. Vice-President of Néstor Kirchner in his term of
office (2003-2007), Scioli started his political career
in 1997 with Carlos S. Menem, as a legislator. Almost
all the displays of support for Cristina Fernández de
Kirchner’s government aren’t billboards or tarpaulins:
they’re graffiti in the grey bases of the bridges that
cross the road. They just say CFK.
First sign that we’re arriving to the largest open
field exhibition of Latin America dedicated to agri-
business: small signals, white with black letters. They
warn us: “Caution: 500 metres. Expoagro”. I wonder
what should we take precautions for.
Route 9, Kilometre 121. Entrance to the state La
Flamenca, the place chosen for Expoagro this year,
“whose owners are Clarín y La Nación, it is the biggest
and most complete dynamic exhibition, denominated
so because in the open fields where it takes place,
before the visitors, the last developments, innova-
tions and tendencies in agricultural machinery can be
tested in their different activities: sowing, harvest-
ing, spraying, packing, harrowing, rolling, etc.”7 The
organizers also announce the presence of the “plots,
the scientific heart of the exhibition. Every year the
leading research companies for biotechnology and ag-
rochemistry exhibit their new materials and solutions
supporting the farmer’s yields.”8
Inside the exhibition ground, it’s impossible to
avoid the young and beautiful women with uniforms
and hats, who seem to have come from a model scout-
ing, frantically handing out plastic bags and more plas-
tic bags with logos of different brands: cars, banks,
stock market and insurance companies, harvesting
devices, row-crop sprayers, GPS, unmanned aerial ve-
hicles, seeders, biotechnology companies, agrochemi-
cals, work clothes, multimedia groups, associations
of agricultural and livestock producers, trade unions,
educational institutions, etc. What kind of ecological
conscience does this waste of plastic bags express?
Streets of Expoagro. Never-ending traffic. The
first rumours say: “this year there are fewer visitors,
and Monsanto and John Deere decided not to par-
ticipate; they don’t want to get in trouble with the
government”. Groups of men and women walking by.
They wear “Panama” hats, and white and light blue
shirts, that look just ironed. Dozens of vehicles. Small
cars, similar to those used in golf courses, transport
VIP guests. Small trains pulled by tractors or by “mos-
quitoes” (self-propelled terrestrial vehicles used to
spray agrochemicals) carry bigger groups of visitors.
In a little VIP car we see Gustavo Posse (UCR, San
Isidro) and Jorge Macri (PRO, Vicente López), mayors
of the Northern area of the Province of Buenos Aires.
Getting deeper inside, we see groups of people with
special looks. We’ll meet them again during our visit
to the exhibition: never alone, always in groups. Like
Mormons or Amish, they’re the Nidera, DuPont, Don
Mario, Bunge “cowboys”, all the seeders that develop
their business in Argentina. Among the mass of walk-
ing people, I detect the agents of the company Global
Security. It seems we’re all safe in here.
The territorial structure of Expoagro is set up on
a grid of streets. The central avenue is full of palm
trees, a strange specimen in our pampas. I walk along
the First Avenue, “the Media Avenue”. I find parked
trucks, mobile studios from which different radios
of the hegemonic multimedia group Clarín broadcast
live. There are stands of magazines and supplements
dedicated to the reality of the country. In the studio
of radio Cadena3, Miguel del Sel, a comedian turned
into politician and a PRO candidate, combs his hair
but doesn’t look at me when I photograph him. Ra-
dio Rivadavia advertises their programme “Bichos de
campo, periodismo que pica” [Bugs of the country,
7 www.expoagro.com.ar
8 www.expoagro.com.ar
journalism that stings]. Would these journalist sting
the people responsible for aerial fumigations with
glyphofosate, for the pollution of people, land and
water in our country?
The Spanish Royal Academy says that ethology
is the scientific study of the character and behaviour
of the man as well as the animals. The battle against
plagues is the title of the conference at the stand of
BASF - The Chemical Company. Founded in 1865, its
headquarters are located in the city of Ludwigshafen.
The agronomist in charge of the conference warns
us that the most important thing is the knowledge
of ethology. Of the producers, who shouldn’t repeat
themselves nor be quiet, but should be innovators, as
well as of the insects. He says one has to “attack at
the precise moment and place” and he highlights the
uselessness of the desire for revenge once the harm
is done, when the insects have eaten the plants. It’s
very interesting to pay attention to the phrases and
idiomatic expressions that organize this “battle” in
the united republic of soy.
“Which events are presented in the form of im-
ages, and which are not? How meaningful or informa-
tive is an image per se? What can it achieve? What is
the political agenda behind this form of image pro-
duction?” 9
The images selected by the agronomist show that
not all the larvae or insects (the enemies in this bat-
tle) are visible at first sight. Some are hidden at the
back of the soy leaves or very close to the soil, making
it difficult to spray them with pesticides. That’s why
one must know their ethology. It’s important that the
rural workers learn how to identify these insects. To
achieve that goal this professional from BASF pro-
poses names that are easy to remember: “peronist
larva” (because of its antennae forming a “V” sign),
“kirchnerist larva” (because it prefers to feed on
grains instead of GM soy leaves). These are some of
the examples of the enemies that must be eliminated.
In the photographs, these enemies appeared inside a
red circle. When he was about to finish his presenta-
tion, in his Power Point slides, he included a picture
of the journalist Víctor Hugo Morales, whose support
for the government is public and well-known. The im-
age was previous to the 2008 conflict over the taxes
on soy exports, and showed Morales surrounded by
famous agricultural associations leaders. What sur-
prised me was to find the journalist Morales inside
the same red circle that signalled the insects that
must die under the effects of the pesticides that BASF
offers with the argument of obtaining higher yields.
Then the agronomist told the producers: “Some bugs
are incomprehensible, their behaviour is incompre-
9 Patrizia Dander, Bild Gegen Bild, Haus der Kunst, Verlag
der Buchhandlung Walter König, 2012.
·151
hensible, their changes are total, they’re bad bugs.”
End of the conference. Impressed by his very precise
images of tiny insects, I asked him about his visual
work. He answered that his camera allows him to get
to 1,5 cm. from his objective. He remarked the need
for making a history of pesticides and he warned us
that, although the shapes of the spraying nozzles are
changed, the rain of pesticides will always have the
shape of a triangle. As I write this chronicle, I re-
member that during the 2010 campaign, 230 million
litres of glyphosate were spread over Argentine soils.
I invite the readers to make an exercise of political
imagination: to make visible the size of the triangle
that this chemical rain draws over the more than 18,5
million acres cultivated with GM soy.
The sun is scorching. Inside the united republic
of soy, an “imaginary state” created in 2003 for an
advertising campaign of the agribusiness company
Syngenta, with headquarters in Basel, Switzerland;
through its Strategic Participative and Federal Agro-
alimentary and Agro-industrial Plan 2020 Argentina
expects to increase the present 100 million tons of
grain harvest to 160 millions. In 2013, Argentina has
23,9 million acres of GM crops, of which over 18 mil-
lion are GM soy. The knots that tie the net of this
eco-toxicological experiment connect private com-
panies with public institutions. An image from the
conversation with the BASF agronomist comes back
to my mind: “the larvae speak to us”. What do the
larvae speak about then? In a new exercise of politi-
cal imagination I invite the reader to listen to them.
Under the leaves, they could ask us: Whose respon-
sibility is to study, know and control the ethology
of the capital? Whose faces should be inside the red
circles so that they make visible the responsibilities
for the creation and boost of a model of relations with
nature that privatizes biodiversity, transforming life
in merchandise, even to molecular levels? How do we
deploy decolonizing and emancipatory thinking and
actions, that do not reproduce the “civilizatory” and
“development” models of our old and new oppressors?
How can we create awareness and put in action the
huge reservoir of wisdom of the native cultures of
the Americas?
Stand of the Faculty of Agronomy of the Univer-
sity of Buenos Aires. On a table there’s a number of
varieties of native American maize ears [or corn ears].
Yellow, white, orange, blue, purple. Long and short,
fat and thin. A book documents the location of this
varieties in Argentina. It’s shocking to read on the
first page: “The printing of this book was made pos-
sible by the support of Monsanto Argentina S.A.I.C.”.
M. Café. We read the newspapers La Nación and
Clarín. They’re Expoagro main sponsors. They’re also
partners in Papel Prensa, the company that provides
the main input for their products, and whose transfer,
in 1976, from the previous owners Graiver-Papaleo to
152·
La Nación, Clarín and La Razón, during the last dic-
tatorship in Argentina, was carried out in a totally
irregular way, including the kidnapping and deten-
tion of relatives and members of the Graiver Group
in the illegal detention centre Pozo de Banfield in
1977. In Expoagro, La Nación on its front page head-
line read: “Hugo Chávez dies”. And Clarín: “Chávez
died at 58. The populist leader that leaves a mark in
Latin America”. Two men and a young woman talked
about politics at another table. One of them pointed
out the difficulty of “getting into the political par-
ties”, referring especially to Mauricio Macri’s PRO and
Momo Venegas’ FE. Also to Elisa Lilita Carrió, who “is
doing better”, to conclude that: “in the end, you do
business with friends”. The young woman was wor-
ried: “We are in a time between the end of selfish-
ness and the lost of respect for institutions”. Her
voice sounded full of anguish when she said: “The
generation under 40 and their friends who make art
are kirchnerists.” Leaning forward, she said,“in kirch-
nerism they find a culture and a narrative that they
feel part of, although they don’t care if what it says
is fulfilled”. The last words I heard defined this situ-
ation as a very difficult one, because “with their art
they can transmit it, communicate it to others, and
that... we can’t avoid it”.
We still have two days to go. When we wanted
to have lunch, there was no electricity in the grill
house. The cash registers weren’t working, so no-
body could order food. On the grills, the fire ful-
filled its mission nobly. Every minute, the beef cuts
became more tempting. The boy who finally gave
us the sánguches de vacío [flank steak sandwiches]
said: “It’s true, despite the lovely day, there are few
people. But on the last two days the exhibition will
be crowded!”. We’ll see.
March 7th, 2013. 10.30 am. We have breakfast a
M. Café. There are no newspapers this time, not even
yesterday’s. I was looking for those “old” papers be-
cause I wanted to keep the original Clarín front page
announcing Hugo Chávez’s death. I remembered the
Commander’s words: “To those who wish me death I
wish them a long life, so they can see how the revolu-
tion continues to progress from battle to battle and
from victory to victory.” A few metres away, a a group
of black men enters the exhibition. They seem Afri-
can. All of them wear a red hat, what makes the scene
even more eye-catching. The guide is a white guy.
Media Avenue. Stand of the newspaper Clarín. I
ask the conventional models a plastic bag with its
logo and that day’s newspaper. They won’t give it to
me. They say they’ll only give me one if I accept to
participate in a raffle for a silo. I don’t accept it.
We walk towards Stand 22A, a start-up specialized
in “precision agriculture”. I’m interested in their work
because it implies a visual production: measurements
and mappings with GPS, satellites and unmanned air-
craft. Yes! UAV-Unmanned Aerial Vehicles. The stand
is tiny. The engineers tell the public the different
kinds of visual registers that the “little planes” can
produce: surface, relief, temperature and groundwa-
ter. Any resemblance to some functions of the warfare
technology developed by the CIA, the US Army and
their allies... is pure coincidence? We’ll return to this
connection in the following chapter. I take pictures
of two different models of “little planes” displayed
on the walls of the small stand. I ask some questions
to the young man who identifies himself as “the pi-
lot”. He explains to me that he programmes the routes
over the plots and once the plane’s in the air, it turns
to automatic pilot. The camera they are equipped
with takes a photo every 3 seconds, what allows to
configure maps of the lands on which the GM crops
will be developed. The studio makes and prints these
maps as part of the services they offer to producers.
What will be the influence of this cartography in the
imaginary of the new generations living in the con-
temporary rural world?
“Imagine you are falling. But there is no ground.
Many contemporary philosophers have pointed out
that the present moment is distinguished by a prevail-
ing condition of groundlessness. We cannot assume
any stable ground on which to base metaphysical
claims or foundational political myths. At best, we
are faced with temporary, contingent, and partial at-
tempts at grounding. But if there is no stable ground
available for our social lives and philosophical aspira-
tions, the consequence must be a permanent, or at
least intermittent state of free fall for subjects and
objects alike. But why don’t we notice?10
This permanent or intermittent “state of free
fall” doesn’t seem to affect the young woman at the
stand that sells all kinds of nozzles for spraying pes-
ticides. These plastic pieces, fixed to the mechanical
wings of aerial or terrestrial vehicles, spread glypho-
sate over the soils of the united republic of soy. The
young woman gives a master class on the diversity of
joints and combinations that can be used. She high-
lights the simplicity of the connections. She finishes
her explanation saying: “They’re like toys”.
We attend a demonstration of spraying. The
bulletin board with the activities carried out in the
open field invites interested people to meet on a
corner of the exhibition ground. They announce an
“outing to the country” and we travel on a bus that,
in fact, takes us no more than 500 metres away.
There are around a hundred people. We join the
crowd. We start receiving orders. From the cabin of
a mosquito two presenters, with microphones and
military language, announce the beginning of the
10 Hito Steyerl. www.e-flux.com/journal/in-free-fall-a-thought-
experiment-on-vertical-perspective/
“show”. Before our eyes there’s a parade of differ-
ent models and makes of terrestrial vehicles whose
function is to spray agrochemicals over the crops, to
kill weeds and plagues. Engines roar. The mechani-
cal wings open and close. The presenters threaten
us: the parade won’t start until everybody (over 200
people, including women and children) are behind
the rope held by the peasants in charge of the secu-
rity. Does our protection depend on a piece of rope?
Very excited, they give the order and the mosqui-
toes begin their march. Red, green, yellow. High and
low, fast and slow. Their wings vibrate, fold up and
unfold again. The presenters point out their techni-
cal characteristics, their horsepower and the differ-
ent ways in which they throw poison over the soils,
crops, plants and fruit trees. They say nothing about
what happens to animals. The drivers perform cho-
reographic movements and seem to enjoy it when a
liquid cloud comes out of the nozzles and wets the
public’s heads, faces and bodies. As it rains down
on us, the presenters joke about it: “Don’t worry,
it’s just water! Or so they say”. Luckily, I’m wear-
ing sunglasses. Suddenly, the main attraction of the
Glypho-Circus appears: a crop duster flies over our
heads, three times. The presenters warn us: “We’ve
coloured the liquid that comes out of the wings so
that you can see how it works”. A red cloud stays
suspended in the air and then starts its drift. Does
anyone know where will it end up? What images
does the pilot of a crop duster keep after a work-
ing day?
“The view from above is a perfect metonymy for
a more general verticalization of class relations in the
context of an intensified class war from above—seen
through the lenses and on the screens of military,
entertainment, and information industries.”11
4 pm. The sun is still burning hot, and we’ve been
walking around for hours. We go to the VIP room of
the American company DuPont. There’s air condition-
ing and cold water. We sit down after receiving a
bunch of brochures about the bio-genetic products of
the company. All around, a funny visual effect is re-
peated: almost all of the men wear immaculate white
shirts and Panamá hats. The walls are red. This looks
too much like a sect. On DuPont Argentina’s website,
we can read: “The miracles of science. Together we
can feed the world. Welcome to The Global Collabo-
ratory”. This looks too much like a sect. The previ-
ous day, when we visited the stand of Nidera, the
“cowboys” had yellow walls. Founded in Rotterdam
in 1920, its name comes from the initials of the six
countries where the company would concentrate its
activities: Netherlands, India, Deutschland [Germa-
11 Hito Steyerl. www.e-flux.com/journal/in-free-fall-a-thought-
experiment-on-vertical-perspective/
·153
ny], England, Russia and Argentina, where it started
in 1929. Between 1979 and 1983, Nidera built a plant
and a terminal for grains and oil in Puerto General
San Martín, Province of Santa Fé. In 1997 it built an-
other terminal for fertilizers in Quequén, Province of
Buenos Aires, and in 2010 it started the construction
of a new terminal for fertilizers in Puerto General San
Martín. The company is part of the mentioned united
republic of soy, given that it has offices in Brazil,
Uruguay and Paraguay. I had to ask Ana to help me
understand the meaning of a quasi-sculptural object
fixed on one of the walls of the stand: a circle formed
by concentric rings of several colours, from whose
centre hundreds of metallic threads connected differ-
ent points of the rings. Its appearance, in a quick and
clumsy perception, reminded me of a roulette wheel.
Ana explained to me that it represented the possible
changes in the genome of crops. Written on the wall:
“More than 30 investigators and collaborators are
working in the creation of new varieties and hybrids
for crops…”. The creation of species, of nature, a task
for gods according to many cultures, seems to be one
of the main challenges for the agribusiness compa-
nies, whose excuse is to “feed the world”. I can’t help
seeing this circle as a roulette wheel, a game in which
very few win and the majority loses.
INTA, National Institute of Agricultural Technol-
ogy. State agency created on December 4th 1956, dur-
ing the military dictatorship, known as Revolución
Libertadora [Liberating Revolution], that overthrew
Juan Domingo Perón’s constitutional government in
1955. Presently, it depends on the Secretary of Ag-
riculture, Livestock, Fishing and Food. In Expoagro,
the stand of INTA is almost a specialized book store.
A tiny book calls my attention: “Insects in soy crops.
The good and the bad”. The title is fascinating because
it means to make clear against whom is the battle at
the time of strengthening a productive model that
for AAPRESID (Argentine Association of Direct Seed-
ing Producers) focuses “on the technological, orga-
nizational and institutional innovations, working to
maximize the amount of knowledge by surface unit”.12
“As a technique (direct seeding) is simply the
practice of cultivating the land without previously
ploughing it” [...] “as a systemic concept, it en-
tails a different degree of complexity. Direct seed-
ing [or no-till farming] is the productive system
based on the absence of tillage and the presence
of a permanent coverage of the soil, via crops and
crop residues. Based on a series of Good Agricultural
Practices, with this system it is possible to produce
without degrading the soil, and in many cases im-
proving its physical, chemical and biological proper-
ties. Also, it increases the water use efficiency, a
12 www.aapresid.org.ar
154·
resource that in dry-land crops generally becomes
a restrictive factor. Thus, Direct Seeding achieves
high productive levels with high stability, and in
harmony with the environment.”13
Stand of AAPRESID. The Good Agricultural
Practices have an unavoidable relationship with the
use of agrochemicals for the development of direct
seeding, particularly with Monsanto’s glyphosate:
Round Up. A young man and a girl shake our hands
and ask if they can help us. I tell them that I’m an
artist and a teacher of Arts, and I’m interested in
analysing the visual production of the transgenic
machinery. The young man’s voice changes and he
starts talking as if he were playing a recording. He
can’t believe I’m worried about the use of glypho-
sate. He doesn’t mention the author, Paracelsus
(1493-1541), the Swiss physician, astrologer and
alchemist, but he refers to the scientific principle
according to which no substance is poisonous, but
only the dose determines that category. Everything
indicates that he hasn’t studied anything about
the present toxicological conditions, in which our
bodies are permanently exposed to hundreds of
chemical molecules. The principle set out by Para-
celsus is outdated before the action of endocrine
disruptors, chemical substances that interfere with
the functioning of our endocrine system (the one
that regulates hormonal activity, the glands that
control different events in our organism). Harm
caused by endocrine disruptors, present in the
chemical compounds that are released in our envi-
ronment and food, doesn’t depend on the dose but
on the evolutionary moment in which they act. The
effect is not the same on an embryo, a foetus or an
adult. Malformations in children born in fumigated
locations have to do with their exposure during the
period of embryonic development, something that
AAPRESID doesn’t seem to care about. The young
man goes on with his script: “We all follow the
insecticide cloud we spray on flies and mosquitoes,
and we don’t complain about it. Salt or aspirins can
be lethal if we exceed the normal dose.” Finally, he
talks about the growth of the global population,
that according to some estimates would reach 9
billion people by 2050. I asked him if he really be-
lieved that “industrial agriculture” will end world
hunger, and I was flabbergasted by his answer:
“No, didn’t say that. What I say is: if you want to
support ecological agriculture, go ahead. If more
people die of hunger, it’s the law of nature.”
Main Auditorium. Our last stop for the day. Pre-
sentation by the representatives of Agritechnica,
The World’s Leading International Exhibition for
Agricultural Machinery and Equipment in Hannover,
13 www.aapresid.org.ar
Germany. When we try to go in, the same guy that
the day before had taken down my personal details,
blocks our way. “This is a private event”, he says.
We explain to him that the programme says noth-
ing about the need to be invited. After struggling a
little, we decided not to enter. We weren’t hungry,
but we thought it was fair to take away the marzi-
pan heart hanging on the knob of the door closed
on us. The typical German pastry read: “Agritechnica
Grüsse Argentina”.
State Los Patricios, property of the Faculty of
Agronomy of the University of Buenos Aires. There we
sleep during our visit to Expoagro. At the dinner, we
met two women who worked in rural tourism. Strictly
speaking, a teacher and a student. Marianela was pre-
paring for an Argentine History exam. I told them
about the Archivo Caminante [Walking Archive], a vi-
sual archive that explores the relationships between
art and history. Then Gabriela, the teacher, told us a
special tale. She pointed at the floor tiles. Two me-
tres away from the table, there was a wooden lid,
with a crack through which we could see a deep and
frightening blackness. It could be opened manually,
but nobody would want to do it. In her account, the
teacher explained to us that through that hole one
could go down to the basement, where they kept a
huge amount of papers and probably, photographs.
Documents of the administration of the state. With-
out knowing it, we’d been having dinner over bur-
ied memories. The dark basement of a country house
doesn’t seem to be the most inviting place to con-
sult an archive. What kind of relationships between
memory and nature does post-industrial capitalism
propose? What will happen with the memories kept
in factories, storehouses, machines, farms? Will the
rural workers’ memory have the same destiny as the
factory workers’ memory?
“… most of the steelworks had been turned into
centres for exhibitions, entertainment, concert halls,
at the same time that the local authorities tried to in-
troduce a kind industrial tourism based on the recon-
struction of the workers’ way of life in the beginning
of the 20th century. […] Those industrial colossi,
that used to concentrate the bulk of the productive
capacity […] now were rusty, ruined, and the plants
colonized the ancient workshops, they infiltrated the
ruins and gradually covered them with an impenetra-
ble jungle. […] The victory of vegetation is total.”14
Covered with mud, three pigs sleep in the shade.
There are very few animals in Expoagro. Six pigs,
seven sheep, eight cows. 6,7,8.15 For the third time, I
14 Michel Houellebecq, The map and the territory, Ed. Ana-
grama, 2011.
15 Translator’s note: 678 is a TV programme by government
supporters.
cross the Media Avenue. In the studio of Continental
Radio I recognize journalist Fernando Bravo’s voice,
chatting with his colleague, Alfredo Leuco. They
both are public opponents to the K government, and
share their “surprise” before Cristina’s quick return
from Caracas, from the funeral and popular farewell
to Hugo Chávez. They interpret it as “lack of affec-
tion”, which doesn’t correspond with the relationship
she and Néstor had with the leader of the Bolivarian
Revolution.
March 8th, 2013. Last day of the exhibition. I
remember what the guy who sold sandwiches told
me the first day… but the fair wasn’t crammed. Yes,
there are more rural workers’ families and curious
people like ourselves. The traditional “country peo-
ple” keeps collecting plastic bags. The most striking
one, because of its size, is –ironically- the bag of the
The Buenos Aires Grain Exchange16. It can contain all
others. The customs of the landowning class, their
gastronomic habits, clothes and the level of consum-
erism they show off, don’t get along very well with a
minimum social, ecological and environmental con-
science. The floor of the exhibition ground is covered
with all kinds of waste, trash of all colours, shapes
and sizes. If our homeland is the countryside, as they
like to say, they are leaving it very dirty.
The language of agribusiness, its rhetorical op-
erations on the territory (signalling, interventions,
hierarchizations, appropriations), account for an
imaginary in which it’s possible to recognize two
kinds of alliances between signifiers and meanings,
and they are expressed in the visual production of
the exhibition. The first one links agriculture and the
fruit of the land with games of chance, gambling and
the world of finance. They reinforce a logic of win-
ners and losers, and also of exorbitant winnings, ac-
cumulation of money and properties. Roulette, dices,
raffles, puzzles, memory tests, are some of the images
that invite to try one’s luck. Patented biodiversity
and the election of the proper weapons (agrochemi-
cals) are also part of the game. Among the differ-
ent kinds of boards and game pieces available for the
“players”, some have a significant weight: local and
international banks, insurance companies. There is a
close relationship between the commercial value of
the merchandise/commodities and their price in the
international stock markets. A mob of agents, pro-
moters, sellers and employees, with brand new cloth-
ing, swarm the exhibition.
The second discursive alliance is between agri-
business and war. For the transgenic machinery, some
animal and vegetable populations are defined as
enemies that must be attacked and eliminated com-
16 Translator’s note: Play on words: in Spanish “bolsa”
means both ‘bag’ and ‘exchange’.
·155
pletely. It’s important, as it’s been said, to choose
the appropriate weapons and the precise moment.
The transgenic machine resembles a Drone, a blind
and invisible machine that controls everything, with
extremely precise lethal power. The relationships
among seed and biotechnology companies, landown-
ers, agricultural trade associations and the States of
the region also correspond with this warlike logic
and imaginary. It’s imperative to strengthen the ter-
ritorial control of the imaginary united republic of
soy. Cars, tractors, sprayers, combine harvesters for
no-till farming, crop dusters and unmanned aircraft,
helicopters, satellite control systems, GPS, are part of
the necessary logistics. Also hired killers and private
armies, ready to evict whoever becomes a nuisance.
The logistics also contemplates working clothes. How-
ever, in the shops that sell clothes, there’s no infor-
mation about the necessary apparels to carry out the
Good Agricultural Practices. It seems that, like in all
wars, while some give orders from safe places, others
are cannon fodder.
Stand of UATRE (Argentine Union of Rural Work-
ers and Loaders). End of the tour. Late afternoon,
I’m exhausted. The bodies and lives of the labourers
and rural workers, of the peasants and indigenous
communities that inhabit the territories in dispute
to expand the soy frontier, are the first to be turned
into cannon fodder. The General Secretary of UATRE
since 1990, Gerónimo Momo Venegas, has created his
own political party, called FE. Besides supporting
the agricultural trade unions during the 2008 con-
flict (when the government tried to increase taxes
on soy exports), during the nineties, Venegas was an
accomplice of the labour precarization and deregu-
lation of the working conditions of the people he
“represents”. Among the workers of that union, ille-
gal work exceeds legal work. A tune took us to their
stand. A female voice sung a melody that sounded
kind of Middle-Eastern. When we entered the tent,
we found a group of people sitting on straw bales
were delighted by Belén’s performance. We were very
surprised when she dedicated her following song to
all the women on their day (March 8 marks Inter-
national Women’s Day to remember the demonstra-
tions by female workers in New York, in 1857 and in
1908). Among the straw bales, Belén, without men-
tioning Cristina Kirchner, first woman to be elected
president in Argentina, started singing: “Don’t cry
for me, Argentina…”. When we listened to that part
of the musical Evita, we couldn’t help making a “V”
sign with our fingers [associated to Peronism]. No
one joined us.
156·
2. The transgenic drones: a blind and invisible machine.
An American monster in the sights.
“An American monster walks in the night. He
looks at the sky and all around him. He seems lost,
but he follows his star. As he does so, he moves his
tongue. Soon, there are many others with him. To-
gether, their voices say: Asking, we walk”.17
“For the West, the semiotic regulatory system of
the monstrous (that which has been contaminated
by deviant mixing) blends with rational, pseudo-sci-
entific systems, such a Social Darwinism, to create
an ideology of separation. The establishment of this
ideology has long served colonial and endocolonial
initiatives (…) The process begins with a reinscrip-
tion of the territory of the other with the signs of
civilization-manufacturing, commodities, resource
management, and the full host of social relations
that accompany these materials and processes, all
tied together under the sign of providence or pro-
gress. Progress assures that the appearance of this
symbolic order is presented as enormously positive
and indisputable in its generosity, while the signs of
the indigenous regimes are parodied, ridiculed, as-
similated or destroyed.”18
“Bryant preferred night shifts, because that meant
it was daytime in Afghanistan. He saw people cultivat-
ing their fields, boys playing soccer and men hugging
their wives and children. When it got dark, Bryant
switched to the infra-red camera. He observed people
for weeks, including Taliban fighters hiding weapons
[...] ‘I got to know them. Until someone higher up in
the chain of command gave me the order to shoot’.”19
Monstrosity doesn’t mean the same to the West-
ern religious and philosophical traditions as to native
American cosmovisions. From Alaska to Patagonia,
indigenous communities consider hybrid beings and
gods with human, animal, vegetable, and mineral
parts as possible allies, and also as protective powers.
Nature speaks up daily and having a dialogue with
her is essential to survive. Monsters aren’t necessarily
an incarnation of evil. The imaginary and the regime
of visibility that capitalism tried to impose on the
American continent (see Principio Potosí20) and also
nowadays through the transgenic model, keeps link-
ing itself to the notions of progress and development.
We are going to be a happy world, with no hunger,
the transgenic monster says shamelessly, while on
17 Eduardo Molinari. The Chameleon, Edición Archivo Cami-
nante and Museo de Antioquia, Medellín, 2011.
18 Critical Art Ensemble. The molecular invasion, Autonome-
dia, 2002.
19 ensenadaderiazor.blogspot.com.ar/2013/01/un-opera-
dor-de-drones-cuenta-su-historia.html
20 potosiprincipleprocess.wordpress.com/
our bodies and lands it leaves the permanent mark
(ecological, social, cultural) of its attack. As a CIA
Drone, the voice of command “comes from above”,
and it has the Latin American monster in the sight.
Bags on a soy truck.
“To the people it was very clear. We, the peas-
ants, are not ignorant and abusive. They knew who
the lands belonged to, but there’s a judicial mafia,
a political mafia that supports these usurpers, and
they boast of having an alternative (parallel) power
in our country”21
“Molecular invasion and control is rapidly being
transformed into new types of colonial and endocolo-
nial control. The focus seems to be on consolidating
the food chain from molecular structure to product
packaging. With the ability to better control species
expression, corporations have a better chance than
ever to intensify developing nation’s dependency on
western corporate economy (…) This plan has exist-
ed since the inception of industrial farming, so food
resource hegemonies have simply been given anoth-
er powerful tool that fits perfectly into the current
structure of domination.”22
July 14th, 2013. After driving over 1500 kilo-
metres, we arrive to Marina Kue, Curuguaty, Depart-
ment of Canindeyú, North-West of Paraguay, near the
border with Brazil. An area of high concentration of
GM soy crops, marijuana plantations and smuggling of
drugs and weapons. Less than a year before, on June
15th 2012, in this lands took place the tragedy called
Massacre of Curuguaty23. Part of a plan carried out by
the alliance between the Paraguayan dominant class,
conservative political parties and multimedia, land-
owners favoured by the dictator Alfredo Stroessner and
transnational soy producers, approved by the Embassy
of the United States, in order to dismiss the former
Catholic bishop and President of Paraguay, Fernando
Lugo. I think this parliamentary coup must be read, on
one hand, as an attack against Paraguayan democracy
and against the construction of a political force able to
end with a 60-year hegemony of the Partido Colorado
[Red Party]; and on the other hand, against the pro-
cess of Latin American union that –despite its contra-
dictions- questions the hegemonic pretensions of the
21 Vidal Vega. Fragment of an interview to the twice Secreta-
rio de la Comisión Sin Tierras (Secretary of the Comission
of Landless) in Ybypyta, Curuguaty, murdered in his house
by hired killers on December 1st, 2012. www.ea.com.py/
22 Critical Art Ensemble. The molecular invasion, Autonome-
dia, 2002.
23 For further information we suggest reading Julio Benegas
Vidallet’s, La Masacre de Curuguaty, Golpe sicario en el
Paraguay, Author’s edition, 2013. Also, El experimento
neofeudal, by Ala Plástica, in this publication.
United States and the European Union in the region.
The lands in dispute belonged to INDERT (National In-
stitute of Rural Development and Land), were destined
to an agrarian reform, but the businessman Blas N.
Riquelme and his group Campos Morombí claimed the
lands as their own. The Prosecutor Ninfa Aguilar or-
dered the police to evict the peasants that claimed the
lands. Snipers hired by Riquelme, infiltrated among
the peasants, laid an ambush and, when the police got
in contact with the peasants in order to evict them,
they started shooting and killed two policemen. The
peasants thought there would be a dialogue and ex-
pected the police would show them the documents re-
garding the ownership of the lands, but they suffered a
violent repression that killed eleven of them, and sent
to prison their relatives who went to the hospital to
assist the hundreds of injured peasants that survived
the shooting. Besides, today they have to face serious
accusations. The shells found in the place of the shoot-
ing indicate that the rifles the peasants use to hunt
animals weren’t the ones that killed the policemen.
During our conversation, in the camp in Marina Kue,
they told us that their fellows’ bodies were taken away
by security forces in bags and blankets, and loaded on
a soy truck.
We walked together the three kilometres from
the road to the site where they had been cornered,
near the house of Riquelme’s hired killers. It’s on a
hill, in the middle of two GM soy fields, that from
a distance look like two green ponds. In one of the
rooms of that wooden building with dirt floor I found
a table, misshapen, wrecked. I keep asking myself:
What bunch of guys have been sitting there? What
decisions have been taken around that damned table?
In the next chapter, the sense of this questions will
be better understood.
The peasants showed us the marks of bullets on
the trees and the places where they had found their
fellows’ dead bodies. They were just signalled with
sticks and branches. “We’ll come back to occupy these
lands,” they told us. We returned to the camp. We
drank some mate. Hernán turned on his computer to
exchange some photos. Alejandro and I heard about
the goodness of empanadas of tatou [pasties stuffed
with armadillo meat].24 Azul wouldn’t stop drawing
by the fire. The light goes down in the evening. We
say goodbye to our friends. Before leaving, they tell
us that the following day the trial against their im-
prisoned comrades will continue. There will be an au-
dience in Asunción and they ask us to be there.
July 15th, 2013. Tribunals Palace in Asunción.
There we go. Two policemen with automatic weapons
guard Judge Yanine Ríos’ empty chair. The prosecutor
24 Tatú carreta. Giant armadillo, mammal with a tough shell
found on Paraguayan forests.
·157
Jalil Rachid Lichi (Bader Rachid Lichi’s son, a friend
of Blas N. Riquelme’s, also favoured with public lands,
and the same as Riquelme, former president of the Par-
tido Colorado) presents the charges against the peas-
ants. His head is full of hair lotion. I photographed
him. Azul draws and draws. She’s well trained, because
during the last two years she’s attended the Tribunals
in Comodoro Py, Buenos Aires, to draw the faces of the
genocides of the last dictatorship in Argentina. The
defence opening statement begins... but we have to
leave. Unfortunately, we didn’t know about this audi-
ence and our return trip was already scheduled. We say
goodbye to our comrades and promise them to keep in
touch. Walking down the stairs of the concrete block
of the Tribunals Palace, an image from the camp in
Curuguaty gave me orientation and energy: I saw a
white star stamped on a deep blue cloth, a piece of the
night sky turned into a flag. The complete image con-
sists of eleven stars-flags sinking in the ground next to
the road. Our Compañeros [Comrades] are present. We
claim for memory, truth and justice.
3. The table
“Cristina, Cristina, Cristina of my heart. Here you
have the boys for the liberation!”25
“A new man has appeared that, by the force of
the facts, doesn’t renounce to the imposed legacy, in
this case, the language or the instruments for work,
but give them a new value, an intrinsic value and cre-
ates a ‘language to curse’, which supposes a sponta-
neous form of decoding the oppressor’s discourse…”26
“If you are delivering the country and you speak
about sovereignty, who will doubt you are a sovereign
piece of shit.”27
A drone in the soup.
In English, the word “drone” defines the male
bees, strong but stinger-less, that don’t produce
honey. It also refers to a lazy person and to the un-
manned aerial vehicles. What could happen if a spec-
imen of this characteristics gets into the soup on the
Argentine table? Although it may be disagreeable, it
must be told: there’s a drone in our soup. In her work
25 Popular song of La Cámpora, youth political organization,
led by Máximo Kirchner, son of Néstor and Cristina.
26 Arturo Roig. Teoría y crítica del pensamiento latinoamerica-
no, 1980 [Theory and Critic of the Latin American Thought].
In Rostro y filosofía de nuestra América [Face and Philoso-
phy of our Americas], Ed. Una Ventana, 2011.
27 Mario Benedetti on the back cover of Paraguay Mafia. Soja,
narco, terror y golpe de estado parlamentario. [Paraguay
Mafia. Soybeans, drug dealers, terror and parlamentary
coup.] Compilation. Ed. Yerba Mate, Asunción, 2012.
158·
Our Daily Poison28, the French journalist, documenta-
ry film-maker and writer Marie-Monique Robin, asks
herself about the responsibilities in the evaluation
and regulation of the approximately 100.000 synthet-
ic chemical molecules which have invaded our envi-
ronment and our tables during the last fifty years.
According to Robin the “industrial” and “green” revo-
lutions are two faces of the same insatiable monster:
progress. Its promises of happiness and welfare have
been left behind. Presently, in “developed” societies,
it threatens the life of the populations and biodiver-
sity. Two aspects of her research were very useful to
analyse the transgenic drones of the agribusiness ma-
chinery in the united republic of soy. On one hand,
pointing out the responsibility of the companies
(BASF, AgroSAS, Bayer CropScience, Dow AgroScienc-
es, DuPont, Monsanto, Syngenta, among others) in
the development of a process of euphemismization
and so of concealment, at the time of building a nar-
rative about the effects of agrochemicals on our dai-
ly lives and on our environment. This manipulation
of language transforms these poisons in medicines,
“phytosanitary or phytopharmaceutical products” to
take care of the plants. This process involves high
rank state and international organizations. On the
other hand, her work makes visible the transforma-
tion that turned these companies and others (Degesh,
Gegey, Aventis), originally related to war industries,
the creation and worldwide commercialization of le-
thal chemical weapons (mustard gas, Zyklon B, DDT,
Parathion, Malathion, Sevin, Sarin, Orange agents),
into “global collaboratories” that claim to be able to
“save the world from hunger”. An image from Rob-
in’s book suggested to me the title of my work for
Monday begins on Saturday, the exhibition in Nor-
way. The journalist asks Ned Groth, a biologist who,
for twenty-five years, has worked as a specialist at
Consumers Union, the main organization dedicated to
the defence of consumers’ rights in the United States:
“What is the scientific basis for determining ADI
(Acceptable Daily Intake)29? The specialist answers:
28 Marie-Monique Robin, Our Daily Poison, 2011.
29 ADI (Acceptable Daily Intake) is a measure of the amount
of a specific substance that can be ingested (orally) on a
daily basis over a lifetime without an appreciable health
risk. According to WHO this coefficient was invented by
the French toxicologist René Truhaut, although in the
USA its creation is credited to Arnold Lehman and Garth
Fitzhugh, from the Food and Drug Administration. The
ADI was adopted by the JECFA (Join Expert meeting
Committee or Food Additives, FAO/WHO) in 1961. Its
application favoured the regulatory authorities of food
and agricultural industries and international commerce.
Making clear that any dose of chemicals in our bodies
produces effects, the ADI results from dividing by 100, as
Decisions are made by the BOGSAT method, that is,
a Bunch of Guys Sitting Around a Table!”30. Some
“tables” come to my mind. The picture of a lunch
in Expoagro 2013, the table in which Mauricio Macri
and his fellows Carlos Melconian and Guillermo Mon-
tenegro; the opposition peronists Roberto Lavagna,
Eduardo Amadeo and Jesús Cariglino; the trade union
representatives Gerónimo Momo Venegas and Alfredo
de Angeli, and the leader writer of the newspaper La
Nación, José Escribano, defined their common goals.
Also the empty table of Blas N. Riquelme’s hired kill-
ers, in the lands of Marina Kue, Curuguaty, Paraguay.
And last, the reflect of a mineral water bottle on a
polished table in New York, between the representa-
tives of Monsanto and President Cristina Fernández de
Kirchner, during the announcement of an agreement
for the installation of the largest processing plant
in the world for the production of transgenic maize
seeds, in Malvinas Argentinas, Province of Córdoba
-while in Paraguay the soy producers prepared the
Parliamentary coup. There are different power rela-
tions in these three tables, the actors aren’t the same,
they neither have the same history nor pursue the
same political goals. However, there’s a risk: to miss
this opportunity to deepen the process of decoloni-
zation. It’s necessary and imperative to try to answer
the following questions (some of which have already
been asked in this text) to continue the fight against
neoliberalism: Is it possible to go in the right direc-
tion, towards political, economic and cultural eman-
cipation, if we repeat the development models of our
old and new oppressors, whose results are in sight?
How can we stimulate regional exercises of political
imagination, paying more attention to the ancestral
knowledge of native American cultures and experi-
ences that in different parts of the world challenge
the ideology of social exclusion and subjugation of
nature? Are Pachamama and the Tierra sin Mal [Land
of No Evil] mere reveries? What can art do against
transgenic drones?
The city of my dreams
“It is not about a regressive dream to primitive
life, but about acting with our technology according
to the indigenous ethic standards in their relation-
ships with all the beings.”31
“The fear of living paralyses everything and, even
more so, the fear of living the American. In that way,
the real sense of average morality or average art con-
a “security factor”, the dose called NOAEL (No Observa-
ble Adverse Effect Level).
30 Marie-Monique Robin, idem anterior.
31 Eugenio Raúl Zaffaroni. La Pachamama y el humano, [The
Pachama and the Human] Ediciones Madres de Plaza de
Mayo / Colihue, 2012.
sists, more than in art or in morals, in a simple canon
that subsumes to real life”32
March 29th, 2013. It wasn’t easy to get there.
Azul, Ana and I woke up early in the city of Córdoba.
It was too hot and we knew that we’d have a long
walk through the neighbourhoods. We went past the
concrete warren built by governor José Manuel de la
Sota, of the peronism opposed to President Cristina,
which made clear that there’s enough money at the
time of marking the territory with the signs of pow-
er. Malvinas Argentinas is a neighbourhood located
twelve kilometres away from the centre of the provin-
cial capital. Originally connected to the construction
of the Railway General Belgrano, it was a rural group
of houses, with no precise date of foundation, known
as Estación Kilómetro 711. In 1953, it was renamed
Malvinas Argentinas, so that those passing by would
“feel their hearts covered with the National Flag”33 re-
membering the islands of the South Atlantic usurped
by the United Kingdom. In 1987 the Municipality
was created, and since then the local government
has been in the hands of peronists (1987-1999) and
radicals (UCR, 1999-2007). Its population is around
14.000 inhabitants. Nowadays the Mayor is a radical,
Daniel Arzani. Two routes cross the neighbourhood
and divide it in three sections. The bus left us near
the Centro de Salud Municipal Evita [Municipal Health
Centre Evita]. In front of it, on the lamp posts, I find
the remains of leaflets glued in 2012: “All to Malvinas
Argentinas to claim ‘Out with Monsanto’!”. We crossed
the rail roads and walked along San Martín Avenue.
We decided to walk it from end to end. It’s Holy Week,
there’s little traffic and little commercial activity. We
find the central square and the Town Hall, on whose
badge, a church, a school, the sun and the outline of
a factory give shape to the architectural skyline of
the town. Among the low roofs we see the spire of an-
other church. It’s a Mormon temple, of the American
congregation The Church of Jesus Christ of Latter-day
Saints. What shall the Mormon priest think about the
arrival of Monsanto? Some blocks ahead, a headless
bust of General San Martín and a flag-less flagpole,
share the same base with a graffiti: “No to Monsan-
to. The people vote.” Radical legislator Oscar Aguad’s
ghostly head appears on old political campaign post-
ers. “He stood in front of me,” said Aguad when he
appeared in a photograph sharing an act together
with genocide Luciano Benjamín Menéndez. We cross
Route 19 and reach the Square of the Madres de Mal-
32 Rodolfo Kusch. Anotaciones para una estética de lo ameri-
cano, t.IV. Obras Completas, [Annotations for an Aesthetics
of the American, book IV. Complete Works] Ed. Fundación
Ross, 2000.
33 Senator Julio Salusso, author of the initiative. On www.
ciudadmalvinas.gov.ar/
·159
vinas Argentinas, totally empty. We walk back. Once
again on the other side of the rail roads, I stop at the
intersection of streets Puerto Argentino and Capitán
Giachino. This man was the first dead during the War
of Malvinas, on April 2nd, 1982. After being buried
with full honours, Giachino was denounced because
of his work in the illegal detention centre in the Navy
Base of Mar del Plata. The street with the name of a
criminal comes across the street named Cabo Adrián
Bustos, a young man who died in the wreck of the
ship Isla de los Estados sunk by the British frigate
HMS Alacrity. From that corner, a neighbour says,
there are only 300 metres up to Monsanto’s plant un-
der construction. We go ahead down the road. A red
flag on a tree indicates that there’s an altar to Gau-
chito Gil, a figure of popular devotion, based on the
legend of Antonio Mamerto Gil Nuñez34. We go past
some trees, and at the back of a billboard that an-
nounces the entrance to the neighbourhood, we read:
“No to Monsanto”. And on the front side:“Juira Mon-
santo de Córdoba y de la Argentina” [Monsanto get
out of Córdoba and of Argentina]. A long wire fence
and a high post with lights pointing at the four cor-
ners indicate that we have come to what will be Mon-
santo’s plant. There, since the announcement of its
arrival in 2012, the neighbours organized themselves
to resist the installation. “Inhabitants of the town of
Malvinas Argentinas demonstrated again at the doors
of the multinational company Monsanto to block the
two authorised entrances of trucks that transport
materials. Yesterday they prevented the workers from
doing their job.”35 “Yesterday” was July 19th, 2013.
The Justice of Córdoba dropped the precautionary
measure that ordered not to continue with the con-
struction. As a sign of Monsanto’s perverse ethic and
black humour, the company has chosen to build its
plant at no more than 200 metres from the local cem-
etery “La Santísima Trinidad” [The Holy Trinity].
“It’s not fair, they’ve made us sick, they’ve killed
our children, they’ve robbed us of our future, they’ve
stolen our life. So we believe that those who make
others sick and kill others ought to go to prison.”36
March 30th, 2013. The powerful sunlight and the
cloudless sky increase the legibility of the letters
that, on the upper part of the arch at the entrance
of neighbourhood Parque Ituzaingó, indicate, to local
and foreign people, that we are in the “City of my
34 All versions about this persecuted rural worker’s destiny (for
deserting from the Guerra de la Triple Alianza / War of the
Triple Alliance against Paraguay or for leading a group of
gauchos that stole from the rich to give to the poor) agree
that he was executed in Mercedes, Corrientes, in 1878.
35 www.cba24n.com.ar (Checked on July 27th, 2013).
36 Sofía Gatica, Madre de Ituzaingó Anexo: www.barrica-
datv.blogspot.com.ar , June 6, 2013.
160·
dreams”. We know the fight by the Madres of Barrio
Ituzaingó Anexo, who since 2001 have denounced the
consequences of fumigations and of the transgenic
model, and I wonder: Who do “my” dreams belong to?
Undoubtedly, not to those who got cancer, respira-
tory or skin allergies, neurological diseases and mal-
formations due to the effects of glyphosate. I come
across a sculpture: a mother and her child hugging
each other. It’s very neglected and the child’s head is
empty. We have lunch (empanadas) while we listen
to the cumbia, that sounds at high volume in a near
house. Before crossing a pasture, I see the outline of
Perón’s head on a wall. On a blue background, it has
an Argentine flag inside, and next to it a red Feder-
al Star. A few blocks away the neighbourhood ends,
it disappears among pastures and GM soy fields. On
Block 6, some children play in the middle of garbage.
Walking in circles we get back to the route, and stop
in front of school “Jorge Cafrune”. There, some neigh-
bours tell us that to get to Ituzaingó Anexo we can
cross a piece of waste ground. The vegetation is tall
and thick; the bodies are out of sight. We take the
bus. At the entrance of the neighbourhood, where
about 5000 people live, I’m surprised by the name
of the main avenue: Juan Vucetich. A Croatian-born
anthropologist, naturalized Argentine, in 1888 Vucet-
ich joined the Central Department of Police of the
Province of Buenos Aires, where he developed and put
into practice a system of fingerprinting identifica-
tion. At present, the Police Academy of the Province
of Buenos Aires and the Centre for Forensics Examina-
tions in Zagreb, Croatia, were named after him. If the
nomenclature of the streets in a town or city can give
us an idea about the idiosyncrasy of its inhabitants, I
wonder who, and thinking of what, named that ave-
nue, but also the majority of the streets that cross it,
with the names of scientists, inventors, philosophers
or artists such as Diesel (Rudolf), Galileo, Gutenberg,
Hertz (Heinrich), Lavoisier (Antoine), Watt (James),
Lumiére, Stephenson (George) or Van der Walls (Jo-
hannes). And the parallel streets: René Descartes,
Alfred Nobel or Salvador Mazza. Will someone in the
schools of this fumigated neighbourhood teach the
children who all these names were? And the local pro-
ducers found guilty of fumigating on forbidden strips
of land, do they know these figures? In the central
square, another sculpture dedicated to the mother.
Half body of a pregnant woman, a cross section of the
stomach is attached to the base, surrounded by iron
pikes. Bus station, Erwin Schrödinger street between
Vucetich and Max Planck. In his memories, the Amer-
ican biologist James Watson refers to Schrödinger’s
book “What is life?” as an inspiration for the study
that took him to discover the molecular structure of
DNA. There’s no street to remember Watson in the
fumigated neighbourhood: may be the molecular in-
vasion of the transgenic machinery needs to forget
him. In our circular walk we arrive to a small square,
between Becquerel and Thompson streets. Until this
moment, in the public space, I haven’t found signs of
the existence of the Madres de Ituzaingó, an organi-
zation created at the end of 2001, when they noticed
the unusual presence of women wearing shawls on
their heads and children with surgical masks. They
were the first to denounce the consequences of the
use of agrochemicals, and demanded the defence of
the right to health and to environmental and sani-
tary safety. In spite of the demands, the producers
continued with the aerial and terrestrial fumigations,
without even respecting the recommended distance
from populated areas. On the floor, some incomplete
and erased graffiti read: “Community Organization”
and “Monsanto… Usurp Lives”. Two images painted
on the concrete benches break the regime of visibil-
ity imposed by the agendas of transgenic drones and
they bear testimony to the responsibilities that the
BOGSAT method conceal: on one of them, an air-plane
leaves a trail, a black cloud that says “death”. On the
other one, a maize plant with a skull. On August 22nd,
2012 in a newspaper of Córdoba we can read: “After
a nine-hour deliberation, the judges of the Criminal
Court of Córdoba sentenced two of the men accused
of intentional pollution in neighbourhood Ituzaingó
Anexo in February 2004 and February 2008, and ac-
quitted the third one. The producer Francisco Rafael
Parra was sentenced to suspended three-year prison,
the same as the crop-duster pilot Edgardo Jorge Pan-
cello. Instead, the other producer, Jorge Gabrielli,
was acquitted (…) Parra was sentenced to undertake
ten hours a week of community service in public
health institutions during four years (…) Pancello
(…) will have to do the same, but eight hours a week
during three years (…) Parra will have his license to
fumigate removed during eight years, while aviator
Pancello will have his license removed for 10 years
(…) Expectations for effective imprisonment were
disappointed, especially for the Madres de Ituzaingó,
accusers in this case since the beginning of the last
decade. Nevertheless, those who accompanied them,
environmental, social and political organizations, cel-
ebrated a step forward taken in the Justice with this
landmark sentence in Latin America.”37
July 10th, 2013. San Ignacio, Misiones, Jesuit Ru-
ins. “In every water course resides a protective spirit.
Just like villages, towns and big cities are governed
by authorities of bigger importance; thus, beginning
with little streams, following with brooks, to get to
the big rivers that cross our land, each of them is
inhabited by a protector every time more powerful. To
us, the cascades and big cataracts are important cen-
tres of power, the territory of formidable guardians.
37 www.lavoz.com.ar/ On July 28, 2013.
For that reason, we try not to waste or misuse water,
taking care of not disrespecting a superior order we
are guided by.”38 We’ll surely need the protection and
love that nature gives us for our lives and next gener-
ations’ lives not to turn into another commercialized
molecule, available in the gondolas of agribusiness.
4. Land is life: travelling through different paths.
“Don’t mess with food”39
“Land is life, it’s not something to buy or sell.”40
The challenge that gave origin to B.O.G.S.A.T. /
The responsibility consisted in deepening the walk-
ing as a research practice in a collective way, to face
together the transgenic machinery and the hegem-
onic model of agribusiness in the united republic of
soy, in South America. We mean to break the polit-
ical agenda that controls the regime of visibility of
this dominant reality, and in that way to produce
images and new knowledge. We’ve entered the black
holes that drill the rural time and space, and passed
through the cuts that tear the community fabric of
the rural world, to demonstrate that food sovereign-
ty is at stake and that the inhabitants of big cities
are completely interwoven in that process. The lands
we walk through are in dispute and their fruits too.
We’ve got to know more about the responsibilities of
the glocal concentrated power’s criminal actions. But
we also had the opportunity to share the paths daily
travelled by those who fight for lands, life and liber-
ty. “The seeds are preserved by sharing them.”41 The
indigenous communities with their ancient wisdoms
and their brotherhood with nature, the community
organizations that develop and spread agro-ecology
(both rural and urban) are telling us: it’s not true
that there’s no other way.
Eduardo Molinari / Archivo Caminante, July 2013.
.....................................................................................................
38 Testimony by Santiago Moreira, Guaraní Community Kaa’
Cuupe. I could listen to his voice through the headphones
in one of the rooms of the local museum.
39 [“Con la comida no se jode”]. Graffiti and poster by the
Juventud Peronista [Peronist Youth] and Movimiento Evita
[Movement Evita], in the streets of Buenos Aires, 2008.
40 Félix Díaz, leader of the Qom Community, Formosa, Argentina.
On www.soc.uniden.edu.ar , checked on August 4, 2013.
41 Lucho Lemos, agro-ecological farmer, Coordinator of the
Seeds Bank Ñanderoga, Rosario, Province of Santa Fé, Ar-
gentina. In Soberanía Alimentaria Dos Puntos [Food Sovere-
ignty Colon], Edición El Levante, Rosario, 2012. material extraction of the system.
·161
NEOFEUDAL EXPERIMENT / Ala Plástica
When Eduardo Molinari asked us to take part in a
collective research to be published within the frame
of his BOGSAT Project, we knew we were facing the
chance to directly examine the structure of some of
the latest key events of del Plata River Basin42 closely
related to a territorial trans-nationalization process
and destabilization policies that in the long run are
basically beneficial to agro industrial sectors – trans-
genic monocultures, biotechnological corporations
such as Monsanto, Syngenta, Bayer, Cargill, ADM and
Bunge, landowners and sowing pools that control
millions of hectares (The Grobo’s, CRESUD, El Tejar,
Maggi, etc.…).
That June afternoon in La Puerto Rico, a promi-
nent bar located in Buenos Aires historical centre be-
came the site where we started to unfold in the air
the cartography of a territory that several days later
we would start going through, a place where different
levels of political and spatial layers are superimposed,
where traces of different populations co-habited: guar-
aníes in the lower layers and jungle regions original
from America, divisions carried out by Spaniards and
Portuguese in their conquest process, Jesuitical mis-
sions and their evangelistic strategy that since 1585
up to 1767 expanded in these regions, models born
from the French Revolution that initiated the present
republics, unification ideals of a big Latin American
nation, the influence of migratory waves from Spain,
Italy, Germany, Poland, and Middle East during the
19th and 20th century. Until the present crossroad
where the concrete becomes the unique and unifying
object of legality of the actions, integrating levels, di-
mensions, temporality and specialties that is a State,
starts to lose support as from the moment it becomes
too narrow a box in order to operate new agents: agro
business transnational companies and mining and hy-
droelectric mega projects. In front of this panorama,
official areas of South America countries have started
to diagram integration proposals with the intention of
presenting a possible way-out to these restrictions.
42  La Plata river basin has a surface of 3,200,000km2, ap-
proximately a third of the total area of the USA, and
almost the same area as the one covered by all the Euro-
pean Union. From its watershed, it includes part of Ar-
gentina, Brazil, Bolivia, Paraguay and Uruguay. The name
“del Plata” seems to refer to the remote influx of the
Cerro Rico in Potosí and the White King myth from in-
digenous people’s oral tradition that might have reached
European terrible conquerors. In this sense, La Plata ba-
sin has a highly symbolic value and a practical experience
that denotes from the beginning of the interference of
the conquest, the consolidation of the rivers as means of
162·
At first sight, the idea of integration is a posi-
tive concept, but the intrinsic trap of such regional
integration processes is that they are the re-struc-
turing of new capitalist subsystems. Subsystems that
have concentration and centralization functions
that for their functioning need a physical recondi-
tioning for the free circulation of goods, removal of
States administrative restrictions and re-orientation
of investment efforts to recondition the territories,
lifting up physical “barriers” but also social and
normative ones, subordinating them to the logic of
competitiveness. Thus, in the last decades, the con-
cept of basin as a “global factory” started to rule.
This idea-action has already produced the expansion
of the agricultural frontier as well as forced deploy-
ment of habitants, something never seen before in
this region. In addition, a last and not so imaginary
demarcation: the “United Republic of Soybeans”43, a
more and more real allegory, that in 2003 Syngenta
corporation would use to publicize its services in ru-
ral supplements in Clarín and La Nación (Argentinean
newspapers) in this way, baptizing South American
territories where soy was planted (Brazil, Argentina,
Uruguay and Paraguay). This region was identified
with a flag that had a soybean image in the centre.
In concrete numbers, this imaginary republic
concentrates a production worth U$S 50 billion high-
ly surpassing the GDP of many of the actually existing
nations. At present, it covers a surface of more than
46 million hectares with a single crop: transgenic
soy, fumigated with 600 million litres of glyphosate,
and provoking deforestation of at least 500 thousand
hectares per year.44
The huge factual power that this republic ex-
hibits and its global interest compete with the real
nationalized territories. The progress of this process
is so important that State-Nations lose great part
of their capacities in relation to territorial domain
and a complex net of private government starts to
emerge. They share spaces with estate governments
over which they have direct incidence in terms of
maintenance and control, imposing political changes
whether in those identified as conservative or so-
called progressive and neo-liberal critics who have
resigned less populated areas of their domain in ex-
43  Syngenta is a multinational company that develops
and produces agrochemicals and seeds such as Novar-
tis agro-business and Zeneca agrochemicals that also
incorporated other companies or branches as Ciba Gei-
gy, Sandoz, ICI Chemicals and Merck. In the history of
those developments, we can find the DDT and MCPA and
2,4D herbicides. These companies quote in the Swiss and
American Stock market.
44  www.grain.org/article/entries/4749-the -united-repub-
lic-of-soybeans-take-two
change for tax models that allow them to assume an
active role in social, educational and sanitary aspects
within bubble cities more and more detached from
the surrounding space.
For some, the advance of this process is so impor-
tant that State-Nations have lost not only great part
of their capacities but they are also close to disap-
pearance. What is not so clear is what would stay in
its place.45
The power in the shadows
On June 22nd 2012, biological corporations man-
age to deliver a big stroke. The United Nations Meeting
on Sustainable Development (Rio+20)46 was finishing
with the adoption of the concept of Green Economy.
With this idea, they pretended to expand the finan-
cial markets with nature, thus legitimizing the use of
new technologies, market tools and standardized new
basic trade products as biodiversity (commodities)
to substitute oil extraction for biomass exploitation.
Post-oil industrial production future (composed by
plastic, chemical substances, fuel, pharmaceuticals,
energy, etc.) would stop depending on fossil fuels in
exchange for biological raw materials transformed by
means of high technology platforms based on bio-
engineering (including genomic, nanotechnology and
synthetic biology).
The most important terrestrial and aquatic bio-
mass deposits of the planet are located in the global
South. In South America, there are 3 of the 4 major
world transgenic soy exporters: Brazil, Argentina and
Paraguay. Of these 3 countries, Paraguay represents the
biggest institutional weakness. Paraguay is one of the
10 more inequitable countries in the world. Ninety per-
cent (90%) of the main production means of the coun-
try comes from the soil, and it is in hands of just 2% of
its population. However, the root of this phenomenon
also brings the best perspective for the establishment
of The United Republic of Soybeans capital.
Also on June 22nd, Fernando Lugo former Cath-
olic Bishop and President of Paraguay was removed
from office by a coup d’état promoted by a Parliament
mainly formed by conservative parties with the sup-
port of agro-state landowners. Even when the opposi-
tion tried to remove him with several political trial
threats, the objective was finally achieved during the
Massacre of Curuguaty.
45  The United republic of Soybeans: Globalization Allego-
ries. Gerardo Evia www.agropecuaria.org/analisis/EviaRe-
publicaSoja.htm
46  Twenty years alter the Earth Summit in 1992 in Rio de
Janeiro where the countries adopted Agenda 21 a Project
created to rethink economic growth, advance in social
equity and ensure environmental protection.
This is a War,
Asunción, Paraguay capital city. Interview with Oscar Ri-
vas (Minister of Environment during Lugo’s government).
“In front of the United Republic of Soybeans that
destroys everything because it deranges everything
and expels it, there are thousands of communities that
keep the life net united under the parameters of land
with no evil47 and from this oasis of associated cultures
to mega-diversity we will recover our territories.”
Oscar Rivas is an architect mainly known for his
efforts to protect the wetlands of the Central Valley of
del Plata basin and its communities’ life quality. For 3
years and a half, he was the head of the Paraguayan
Ministry of Environment during Lugo’s office.
He explains, “The city of Asunción was founded
with the name of Paraguai a guaraní48 word that is
around 3,000-5,000 years old and that survives to the
present. Any quaraní-speaking mestizo or indigenous
person calls this place Paraguái. The oldest part of our
history is there, with a potential for fantastic dimen-
sion. In history books, what appears as formatted is
that Paraguay comes to be when the bourgeois entel-
echy settled in the XVII century. They shaped Latin
American countries the way we know them today, but
there are other invisibilized territories that are still
really alive in America and perhaps in Paraguay more
alive than anywhere else.”
During his period, “not a single transgenic event
beat the bidding process. This was not whimsical.
Decisions were based on a rigorous adherence to the
normative, the procedures and a thorough interpreta-
tion of the precautionary principle,”, “Soy in Para-
guay is illegal because it does not meet the criteria
established by Forestall Laws, does not comply with
Water Law neither Phytosanitary Laws. Legislation
stated that every water channel should be protected
and must not be polluted so there shall be a water
quality monitoring system in every river within the
soybean territory. They must not have a pinch of
agrochemicals, agro toxics or biocides. Maybe, that
is why Oscar Rivero has been the only public officer
criminally charged by the government that emerged
47  The Tupi-Guaraní people lived dreaming about Yvymar-
ae´ÿ, the prodigious land with no evil where maize grows
on its own and men are immortal. Thus, they were part
of a people in permanent exodus. The Karai, chamans
with power enough to become invisible, resuscitate dead
people and return youth to women were those who main-
tained the hope that the day would come when they
would reach the mythical Heaven.
48  South American linguistic family, it is the most impor-
tant among the autochthonous languages all through
America. The Guaraní survives as a main language in Par-
aguay despite the process of ethnic cleansing carried out
in the region.
·163
after the parliamentary coup that deposed former
president Lugo. Immediately after his leaving the
ministry, approvals for new transgenic seeds started
to be issued by presidential decree in Paraguay.”
“In Paraguay, soy does not pay. You have the ter-
ritory occupied by soy, occupied in the sense of an in-
vasive attitude that generates a colonization model:
mega agro-exporter. This colonization uses multiple
physiognomies but deeply inside, the agenda being
discussed is the one related to corporations. These
powers settle in a developing world as territories gen-
erating destabilization and internal wars. Here, this
war is expressed by forced deployment, farmers’ re-
sistance to the expansion of soy, land occupation and
field fires, etc.”
Nowadays Paraguay has a surface of 406,752 km2
but in title deeds, the demand rises to 528,000 km2.
This inexistent 30% is the evidence of the density and
inequity of the dispute. The great majority of the rural
population does not possess a deed to their land. They
have been living there forever or have been tradition-
ally moving with the seasonal migration characteristic
of several original groups of this territory. Little by
little and after several coups, favour doings and nego-
tiations, an enormous amount of natural inhabitants
of these territories have become hand labour of large
land owners, especially Brasiguayos49. Since then, all
those lands were turned into soy lands.
One of the main points that became a flag for
Fernando Lugo’s access to government on April 20th
49  Brazilian (and their descendants) settled in the territory
of the Republic of Paraguay, in areas close to the Brazilian
frontier, especially the departments of Canindeyú and Alto
Paraná in the southeast of Paraguay. In 1967, the Para-
guayan government abolished the law prohibiting land
from being purchased by foreigners in an area of 150 km
from their borders. In 1970, a massive Brazilian immigra-
tion to Paraguay started, most of them German, Italian
or Slavic Portuguese speaking farmers from the State of
Paraná. The major emigrational wave occurred when Itaipú
well was flooded. Since their properties were flooded, they
received and indemnity payment to buy land in Brazil but
they chose to move to the neighbouring Paraguay where
land was 8 times cheaper. Public lands subjected to the
Agrarian reform that never got to Paraguayan farmers,
were given to a certain number of Brazilian farmers in
use terms. These public lands awardees buy genetically
modified seeds to big companies and the Paraguayan gov-
ernment collects an export tax in relation to the amount
of grains that pass through customs. An additional factor
that stimulated migration was the rising mechanization of
soy production. This fact resulted in the concentration of
huge extensions of plantations from companies like Cargil.
Nowadays, it is estimated that there are 350,000 Brazilian
citizens that live in Paraguay.
164·
2008 was the one of recovering the national develop-
ment project in favour of rural and indigenous fami-
lies, and the Agrarian Reform born in 1963 that was
never carried out.
“To produce food, farmers are obliged to search
for lands in a process of daily survival. There is a
consciousness and a motto in the Paraguayan farmers’
movement: soy lands are territories that genuinely
belong to the farmers’ productive sector and that
within it there is a sovereignty principle popularly
reclaimed. People do not only reclaim their right to
possess a piece of land but the Paraguayan farmers’
movement reclaims a call to defend the sovereignty to
decide on its fate and destiny, its food, and life style,
culture and every vital issue that comes to be threat-
ened by a process of total invasion of single crops and
expelling”, “in certain places there are small strong
holds of small communities producing food where the
Paraguayan flag flutters as a symbol of the farmers
resistance. Sons of these farmers and supporters from
the rest of the country are those who invade wood-
land portions of soybean big landholders. Today, they
do not just reclaim woodlands but also mechanized
lands as they call them.”
The Agrarian Statute Law determines that pro-
ductive lands cannot be reclaimed; they say, “We de-
fend a legitimacy flag that is not a legal flag because
legality has been constructed by the sectors that
have retained power in our country through coups
and corruption in the last years. Law exists, but le-
gitimacy too.”
How to produce a coup d´état
“The precedents to the coup against Lugo can be
traced back to the Ñanducay case when farmers from
all the country gathered to reclaim fiscal lands of the
Agrarian reform that were partially illegally sold to
several companies. On the other hand, these compa-
nies sell the use of such lands to big landowners to
grow soy. These farmers started to occupy the areas
surrounding the Ñacunday Park that were owned by
Tranquilo Favero a soy producer known as “O Rei da
Soya”50 . At that moment, the government asked the
800 families that lived in tents51 in the border of Ña-
cunday Park52, to move into the park while they waited
50 The Soy King
51 The “carperos” (people living in tents) are nomad farmers
that live in plastic tents without enough land to plant.
Although there are groups in several places, they mainly
come from the departments of Alto Paraná and San Pedro.
They are branches or derived from agrarian organizations
that all of a sudden became publicly visible.
52 The so-called Ñacunday Park is just a name on a missing
nature. Today, a sea of soy covers the place that years ago
was a green space in Alto Paraná.
for a judiciary resolution on the conflict and avoided
any confrontation between farmers and soy bullies. For
soy producers the farmers’ communities resisting the
advance of the extensive single crop model are a bad
example to the rest of the farmers’ movements reclaim-
ing other zones in the country. “At that moment, they
started to say that the Paraguayan State was permit-
ting the invasion of a National Park by people pro-
tected by Lugo and that they were land invaders and
this situation was a total misgovernment.”
What happened in Curuguaty?
Curuguaty – Department of Canindeyu – Paraguay. Inter-
views to members of the Association of Curuguaty victims
and Marina Cue Farmers’ Commission (mainly composed by
relatives of the deceased and 43 accused.)
“132 farmer leaders were murdered after the dic-
tatorship, but the massacre of 17 people in State land
is more visible because a coup was fabricated over it.”
On Friday, June 15th, the very same day Cris-
tina Fernández, the Argentine President, was meet-
ing businessmen of the America’s Council in New
York53 publicly announcing Monsanto’s investment
for a new treatment and conditioning of seeds plant
for transgenic maize seeds with a maximum produc-
tive capacity of 3, 5 million hectares, in Paraguay
the Curuguaty massacre was happening, as a result
6 policemen and 11 farmers were killed and dozens
were seriously injured. This fact would become the
argument for a parliamentary coup (known as the
transgenic coup) that removed President Lugo from
office and allowed the legalization of the imports of
transgenic seeds to Paraguay
Curuguaty is located in the department of
Canindeyú, where soy has expanded the most in the
last years. These are affordable lands for soy produc-
ers but there is a disadvantage: they are located very
close to San Pedro where the country’s strongest
farmers’ movement exists. Therefore, it is within the
border of a conflictive area.
Public lands acquired for the Agrarian Reform
later bequeathed, contravening the legal rules are
called badly held. Between 1954 and 2003, around
7,851,295 hectares were entrusted under these condi-
tions, according to the final report of the Commission
for Justice and Truth (2008)54.
In the last 9 years, the Office of the Attorney
General of the Republic presented 110 deed nullity
claims in order to recover badly held lands (10 be-
tween 2003 and 2008, and 100 between 2008 and
2012). Up to this moment, none of these lands was
recovered.
53 www.youtube.com/watch?v=cFgl4KJKbl
54 www.ea.com.py/blas-n-riquelme-y-las-tierras-malhabi-
das-de-curuguaty/
Lands in Marina Cué55 had been occupied by the
businessman Blas Riquelme former minister of the dicta-
tor Alfredo Stroessner, member of the Paraguayan Sen-
ate for the Red Party56 between 1989 and 2008; he was a
financier of the party’s political campaign. These lands
that belonged to the Paraguayan State should have
been devoted to the Agrarian Reform but they passed
over several hands until illegally reaching Riquelme’s
that turned them into a soy latifundium with the fol-
lowing name: Campos Morombí. Riquelme defended his
lands basing his arguments on acquisition prescription,
but those lands still belong to the Paraguayan State.
In those lands, farmers’ communities57 settled down to
claim the handing over of 2000 hectares of the 75,000
hectares that belong to the State.
“All the people present here are farmers with no
land. This is the land we have been asking for 9 years.
My father has 10 hectares but my brothers got married
and needed at least 10 hectares each to survive. What
happened in Curuguaty is the result of territorial oc-
cupation to plant soy in a place that belongs to the
farmers and not to big landowners. This is Marina Ge!”
“Riquelme’s hit men lived in a house and we were
on the other side, on the verge of the dry land where
we put up our tents. These hit men would go there and
shoot against us permanently. We did not know they
had weapons, but as the neighbours tell, they had rifles
and shotguns. I used to tell our people that we were
not there to confront them, neither to threat them on
the street, we were there to be told whether these lands
belonged to the State or not, that was our purpose. We
would tell the same thing to everyone who asked.”
“People were waiting there because there was a
rumour that this same day the government was go-
ing to come to explain what the situation with the
land was. We demanded Riquelme’s property docu-
ment to be shown, but the infantry arrived from
one side and from the other the anti-mutiny group
and they surrounded us. Tactic groups such as GEO
(Operative Strategies Group) also arrived and FOPE
(Specialized Police Operative Force).58 The District
55 The expression cue means “former” or “that was”. When
we speak about Marina Cue, we refer to lands that in the
past belonged to the Paraguayan Marina, that is to say, to
the State so they are public plots for the Agrarian reform.
56 Republican national Association-Red Party (ANR-PC)
57 The figure of The Mensú became famous here. Mensú is
the name that a rural worker receives in the jungle in the
area of Paraguay and the Argentine Republic provinces of
Corrientes and Misiones. A mensú’s work has been tradi-
tionally assimilated to a servile o semi-slave model.
58  FOPE is a special force of the Paraguayan National Police.
They are trained in patrol, anti-terrorist and counter in-
surgency techniques by Americans. Although they are a
·165
Public Attorney stayed safely in the background and
did not intervene.”
“We were 64 farmers and more than 300 police-
men, ambulances and helicopters arrived. Although
we were ready to resist, we never though it would
end up in a massacre. If we had thought so, we would
not have gone there with the family. Nobody wants
to lose a brother, a father, a son or a nephew. We did
not foresee that massacre.”
”Riquelme’s hit men started shooting and then
the police. They were shooting from a helicopter too.
Fortunately, most people ran to a maize field and
could escape safe, but there were 11 deaths. Docu-
ments state that at least 9 were injured and executed
after the confrontation. Some of them were able to
call their families to let them know they were inju-
red and hidden and asked for help, however, later on
they appeared dead with shots in their heads (express
executions). Justice was informed about all this, but
there is no advance in this issue.”
There are plenty of details about the tragedy and
many circulating information was contradictory. Some
speak about snipers, others say they were undercover
groups, they did not belong to the settlements, some
even state that it was a case of crossfire among police-
men, but something is sure, 30 farmers no matter how
radical they were, could not decide to confront 350
policemen and elite forces with their women and chil-
dren together with old shotguns, sticks and machetes.
Cartridge shells were found in the place and they were
from automatic high calibre weapons (AK 47 and m16).
These weapons are not used by security forces, let alo-
ne farmers. It makes us suppose that there were sni-
pers shooting over the police officers, since they were
killed by assertive shots. Projectile shells were handed
to justice officers but they have not been taken into
consideration for the investigation.
“Dead farmers were carried in soy trucks for au-
topsies and the detained held in Nueva Esperanza
Jail. Some others are under domiciliary arrest waiting
for a trial, accused of criminal association to invade
private property and policemen homicide.”
”Impartiality in the investigation of the cause
and credibility in terms of inquiries procedure that
is being carried out by the Public Ministry, together
with the lack of procedural guaranties for those accu-
sed, all of them farmers, makes us think that we are
in front of an inquisitive action with the intention
of closing this chapter criminalizing the farmers for
what happened, excepting the investigation on the
Police action, parallel investigation lines or District
Public Attorney’s actions in relation to the eviction
from the land owned by Blas N. Riquelme. The District
police unit, they carry weapons as M16 and GALIL manu-
factured in Colombia.
166·
Public Attorney closed the case without investigating
anything but the farmers’ collective responsibility.59
A year later to Marina Cue massacre claims from
relatives and victims from Curuguaty are still in force.
1st Immediate release of Curuguaty political prison-
ers and the discharge of the 60 people accused of real
estate invasion, criminal association and intentional ho-
micide in tentative degree. 2nd Recovery of Marina Cue
lands and their handling to communities affected by the
massacre; because we cannot allow soy to be sowed on
our family and companions bloodshed and because such
lands are public, they belong to the Paraguayan State
and so we have to recover them. 3rd Compensation for
the victims, relatives and survivors. 4th Judgement and
punishment for the real responsible actors.
Whom did Curuguaty benefit?
Even when Blas Riquelme, who is said to have or-
ganised the shooting, dies on Sunday, September 2nd
2012 of a heart attack, his family continues to rent
the fields were the massacre took place to Cargill, and
they still act as the owners of such land.
Serious accusations and the State attitude dem-
onstrate the advantage the case offered to stop sub-
sequent occupations in the rest of the country.
President Fernando Lugo was removed from office
declaring him “guilty of bad performance of presi-
dential functions” because 17 people died during the
eviction of landless farmers in Curuguaty.Immediate-
ly after the coup, Paraguay legalized the imports of
transgenic maize seeds type “V3PRO” from Monsanto
multinational, “BT11” from Syngenta, “TC1507” from
Agrotec S.A. and Dow Agrosciences Paraguay S.A.
Former general Lino Oviedo strong candidate to
past elections, who declared himself to be against the
political and economic oligarchy, and a friend of farmers’
that live in tents by roads suddenly dies mysteriously in
an aircraft accident. The press spokesperson from his
party reported the fact as a “political crime”. The red
party of conservative and nationalistic tendencies ally
to big landowners recovers the power in the elections.
Conclusion
Vast territories are becoming a huge laboratory
were people are not even considered within the cat-
egory of productive unit. New owners do not need to
provide security, food etc. Therefore, there is no space
for any democratic participation or consensus. Life
privatization is the most terrifying example of the
neo-feudalism to come.
Ala Plástica, July 2013.
...................................................................................................
59  Report by the Farmers’ Conflicts Study and Research Platform
www.es.scribd.com/doc/110616439/InformeCuruguaty-PEIC
YPY / Hernán Cardinale
On the road
1500 km along on the road, luckily without any
insect has crashed on our windshield.  Only now
do the views begin to change. The earth is red. The
horizon, with its deep green thick forest trees that
stretch high up into the sky and deep into the water,
draws up closer. It is omnipresent in the lump-filled
earth, the explosive fauna, in the river Paraná, which
hides to the West and then suddenly re-appears in
streams, wetlands, reservoirs, waterfalls, and it is
there in the air. We have passed the town of Posadas.
We are moving towards the triple frontier at 120 km
per hour. Water now defines the whole terrain.
The road threads together few meanings: Buenos
Aires-Encarnación; Curuguaty-Asunción; Rosario-Taiwán,
it’s all the same now... Ports, cities, towns and only
the road between them. Any meaning is thrashed to
the edge of the road. The road is a ‘trance’ that knows
of no value nor experience measured by time. Not so
with the rivers, where the meaning of experience per-
sists and is simultaneously generated by them. The
river is about being and existing in its entire trajec-
tory and within the whole of its water mass; from the
moment of its hidden origin to when it tempers the
open sea or the depths of caves. It is always alive,
carrying itself and the life it maintains: riverbeds and
the natural life-giving life. From this point of view, I
can understand the river as land, and the road leads
us to think about this territory.
 
Ñembo’e (to say to oneself, orate)
The people of the interior of Paraguay communi-
cate with such melancholy and kindness, which does
not correlate with the ways in which they are being
evicted from their lands today. The Guarani people
are convinced that one’s soul is not given as a ready
entity, but that it is made throughout life and the
ways in which it is made, defines the soul’s ‘saying
to oneself’, its inner voice. The history of the Guaraní
soul is the history of its words, and then, the se-
ries of words form the thread of life. In contrast, for
Europeans ‘the word’ excludes nature when they don’t
dominate it, while for the Guaraní language nature is
sacred and the source of their ways of speaking: in
the river (y) is their origin (ypy)… and water is ev-
erywhere; in the land (yvy), also in the trees (yvyra)
and in the wind (yvytu) and in the canoe (yga) which
transports man (yvypóra), who hopes for a ‘land with-
out harm’ (Yvymaraey) beyond the skies (Yvyága).
‘Guaraní is a strange language with an unusually
perfect structure, which inhibits its distinction be-
cause it creates itself. Through conversation it con-
tinuously creates the words that are needed’. (video)
In the Curuguaty settlement we listened care-
fully to the peasants speak Guaraní, and each word
spoken in Spanish echoes loudly, because they say in
Spanish what they cannot express in their language:
army, Congress, deputies, courts, police, prison, heli-
copter, single-crop farming, hitman, soya…
One of them told me, ‘the river is sacred because
it brings us things’, and the tree is also sacred be-
cause when we die, the tree is the medium by which
we arrive at Yvymaraey. This is why the lumberjacks
of the province of Corrientes in the Argentine Chaco
had asked the quebracho tree for forgiveness before
felling it down.
The protective State
In Argentine, it is a colourless afternoon and
only the birds singing give seem to start what re-
mains of the day. Abandoning Paraguay and entering
Formosa heading Santa Fé is like letting go of some-
thing vital. Travelling across certain Argentinean
routes is like moving along bare lands, from time to
time, abandoned by a “civilization” hoping to become
a city… Looking from Route 15, Formosa, Chaco and
the province of Santa Fé until arriving at the city of
Reconquista and even further, there is just a flatness
comparable to their towns full of TV sets and out of
place shop windows. Life, in those towns, develops in-
doors, inside their sand and cement houses absurdly
transported from far away quarries and transoceanic
plans. However, we just need to observe so much ster-
ile emptiness to understand the presence of a pow-
erful and determined state behind it; a State that
pushes away the most vulnerable towards a suburban
zombie zone of the few cities around.
During the journey to Paraguay, we saw inhabit-
ants lives go by naturally in the open air. Houses where
colourful, with a roofed central area with a room at
each side but opened in the front and at the back, in
a way you can look through and appreciate the crops
and the traces of a possible rural life. It is difficult
to see cluttered houses in the interior of Paraguay...
No. They follow a discrete and continuous pattern. You
can see, anytime, their inhabitants in a group having
mate and chatting, while the breeze moves through
everything, like a look, a space under the shade of the
eaves. At night, warm lights invite you to fondness.
In this space, farmers spend most of their day;
anyone passing by can see them. Their houses are
orange, blue, they have brilliant colour the contrast
with the red soil and the green air. All the Paraguayan
people could easily adopt a good unworried life style
with their farms, without making a great effort for
an exceptional fertility in a soil that is in itself rich
and wet, collecting enough to be grateful for… The
people from those houses take care of the knowledge
that comes from living in their lands, a guaraní na-
tive inherited wisdom. They are not like us. No, they
are not. They still have a healthy connection with
the sacred, the same connection some other groups
·167
also weave with their land. A nice attitude not at all
compared with the urban melancholy: all the cities
are The city. If you want to see colours in the people
from Argentina, the best you have to do is get into a
bar and look for a TV set.
The global agent
GG has no dispute with anybody: neither Clarín,
nor the farmers or Cristina. He know how to agree with
everybody at every moment. Friendly and chubby, it
is the son of a tractor driver from East Europe, it is
proud of its family history with a hard working farmer
origin. On TV in a bar in the horrible city of Recon-
quista, I heard this while He was thinking about his
father “some time ago, there were 100 people working
the land and 10 in offices; now it is just the opposite.”
Instead, the GG learnt how to produce the farm in the
city. Its success is based on combining the same pack-
age equal parts of “Taylorism”, in the best Toyota way,
with biogenetics, poisons, investors and direct sowing
without discarding State policies from the 90s that
equally deregulated seed control, environmental care
and passed among others the Law 24.093 of Port Ac-
tivities Deregulation. With this Law, in less than a de-
cade 34 ports were set up on the Paraná hydro way, all
of them are industrial, commercial and private. They
are settled on the cities between Zárate and Rosario
Basin and Santa Fe, transforming the river in terri-
tory. Like anybody else, GG knows that the pattern
is just part of an agro business system and that it is
unsustainable with land expropriation or rental where
to drop the supplies to collect commodities.
Every time they are asked, there is a kind of op-
timism that cannot blur the preoccupation for global
food sovereignty. Some time ago, one of the compa-
nies that is part of the shareholders: Bioceres, ob-
tained the approval to develop GM seeds that tolerate
droughts, in Argentina. Patagonia may be added quite
soon to the struggle against global hunger, feed Euro-
pean fish and cattle, decrease fuel costs and support
agro-biochemical production and automotive industry
with bio-plastic based on soy proteins.
I try to think if the first GM seeds arrived in Para-
guay in a clandestine way, they were preceded by a
wordy speech; the one Federico Franco believed and
defended with fireguns in Curuguaty. I think about
Curuguaty’s farmers, Quom families,mapuche communi-
ties and farmers from Santiago del Estero or Formosa.
Can GG look into their eyes and convince them that
bio-plastic will bring them back their history, land and
freedom, after their “Global Administration”? Can this
government ,look into their eyes, knowing that for 40
years soybean have increased their exports and nothing
ever goes to the land real heirs? When, if it is not now?
Hernán Cardinale, Julio de 2013.
.....................................................................................................
168·
ArGENtina: Transgenic Homeland / Ana Broccoli
“Work to be done will not take one day. However,
it has to be done thoroughly and urgently. In addi-
tion, stability and continuity of the adopted policy
must be ensured... It is the only way Argentina will
recover its livestock agricultural productive and ex-
porting capacity and along with this, harmonic devel-
opment and economic progress as well as a solid and
stable financial situation “60.
These are the words of the Minister of Economy of
the last military dictatorship, they sounded propheti-
cal 30 years before 1996, when RR Round Up Ready
transgenic soy resistant to Glyphosate herbicide is
liberated. The path marked was very clear: acquire
debt, generate dependence and pay by exporting
natural resources. In the 90s the settlement of the
neo-liberal model culminates, it had been initiated by
the dictatorship allowing the flexibilization of insti-
tutions through « State deregulation »61. Oligopolies
freely stride towards a transgenic homeland: ArGEN-
tina. RR soy smuggled from Brazil RR is baptized  The market molecular script. Life molecule, DNA67,
«Maradona soy». The diffuse borderlines of the Unit-
ed Republic of Soybeans are expanded, a commercial
metaphor used by the company Syngenta for its ex-
pansion in the south.
The soybean model is consolidated, while in
the National Congress the Alimentary Security Plan
is voted (2003) «The most urgent Hunger ». Officers
from the corporations try to incorporate this grain,
worldwide used as fodder, to the alimentary habits of
the Argentinean dinner guests. It is the « Solidarity
Soy » in diners for vulnerable people. Welfare is a
good business and a marketing instrument for them,
but they failed thanks to a social demonstration. The
agricultural and livestock border is broadened by the
elimination of biodiversity62, expelling farmers’ pop-
ulations and original people. In the first place, la
Pampa, then the Chaco Region until Yungas, a «sea of
soy» grows boundless. At the same time, a torrential
rain of agrochemicals sprayed by planes and « mos-
quitoes »: it is the agricultural state of war machine.
Other Mothers mark the resistance in ArGENtina:
Mothers’ from Ituzaingó, a fumigated neighbour-
hood in the province of Córdoba. They promoted a
60  Martinez de Hoz, A; “Agricultura and livestock in Argen-
tina in the period 1930-1960”, 1967, Ed. Sudamericana,
B.A, Argentina.
61 www.infoleg.mecon.gov.ar/infolegInternet/ane -
xos/5000-9999/7539/texact.htm
62  Miguel A. Altieri and Walter A. Pengue, 2006, www.grain.org/
article/entries/1090-la-soja-transgenica-en-america-
latina-una-maquinaria-de-hambre-deforestacion-y-de-
vastacion-socioecologica
historical trial63… the first responsible ones of the
fumigation «collateral damages» arrive. However,
and slogans as post-Chavez Big Homeland Venezu-
ela say, «the fight continues » : today, Mothers and
popular Assemblies try to avoid the settlement of a
new colony in the outskirts of Córdoba city, with the
same painful name « Malvinas Argentinas », the Falk-
land Island according to the British occupants in the
South Atlantic. The company Monsanto builds there
its biggest processing maize seed plant on earth. It is
the transgenic colony…
The productive-financial machinery is in charge
of «sowing pools», agricultural and livestock business-
men «landless», export of national industry, lead by
the Grobo family64. Land prices rise three times. In
2013, producers paid a rent 215% higher than in 2001.
This pushes over food prices and inflation.
Committed Scientists65 from ArGENtina that «un-
veil» opaque images are assaulted from both machin-
eries and their similar who defend the legitimacy66
of the transgenic model, functional to corporations.
presents a helical structure in double helix. In a po-
etic metaphor, its extended image transmits a pow-
erful sensation of a stairway to heaven. The steps
are explained in an Alfa numeric code that marks
the special position of four nucleotide bases, its lan-
guage. The genetic engineering machinery cuts the
DNA with four “biological scissors” and denaturalizes
the double helix in order to open and decipher the
code. Just 2% of the helix is explained, the rest is
“junk” DNA… In cryptically laboratory procedures,
the stairway has become a succession of lines, which
are comparable among them, on a flan surface ….
How to describe the way it looks like?... yes… yes…
it is like a bar code, just as in the supermarket... life
is patented. Even the postponed new paradigms like
the Ghost DNA68 appear holding more light among the
molecules.
63  www.juicioalafumigacion.com.ar Blog del juicio por
conta-minación en Barrio Ituzaingó, Córdoba.
64  www.losgrobo.com.ar/ Argentinean businessman leader
in the concentration of rented land .
65  Lopez, S, et al., 2012, Pesticides Used in South American
GMO-Based Agriculture, Adv. in Molecular Toxicology,
Vol. 6.
66  Folgueras, G. Reflexion Group on Rural and Philosophy
of Sciences, School of Exact and Natural Sciences. UBA.
67  Desoxirribonucleic Acid.
68  Gariaev and V.P. Poponin. Vacuum DNA phantom effect
in vitro and its possible rational explanation. Nanobio-
logy 1995.
Buenos Aires, Reina del Plata69
and the gate to the United Republic
A few steps from Corrientes Avenue, in the bar
La Academia my meeting with Eduardo Molinari was
mediated by friends in similar militant activities
related to Creole seeds and alimentary sovereignty,
curious repertoire of mi “conversation” in an agro
ecological way, being an agronomic engineer and a
Plant Breeding Professor. The invitation to take part
in B.O.G.S.A.T/The Responsibility, with the Walking
Archive and responding to a provocative search for
“consequences of this hegemonic model of everyday
life of our inhabitants and the nature and absence or
opacity in the “transgenic culture”70 would take us
through physic territories and revising institutional
pathways that have been generated by the instal-
lation of “machinery”71 tending to the defence and
reproduction of this model..
Two lines of thought emerged rapidly, one Argen-
tina as the open gate to RR transgenic soy signalling
the big port of the United Republic of the Soybeans72
under construction on the La Plata River. Just for once
Up River, an “inverse flow” of seed counter-current to
the north, going up the waterway “opened veins”73
where this south within South America bleeds its 200
years wealth from the colonial period. The other line
would be reflecting on the settlement mechanisms of
the industrial agriculture conspiring with conserva-
tive forces and that could change a developing coun-
try up to 1975 with economic parameters of “welfare
state” in a neo-liberal nation that brutally pays its
external debt acquired during the bloody military
dictatorship (1976-83). In order to do so, it will sell
its national enterprises and relax its regulations to
begin new dependencies and new creditors. Thus,
today new global orders kidnap and capture natural
resources to establish commodities factories devoted
to fodder and agro-fuels for the central countries and
emergent Asian economies74. Dispute for real power in
the global hegemony, its local internal personnel and
the media related to them trained to mark the agenda
for the governments from their covers; generating a
69  “Reina del Plata”. Metaphor about the city of Buenos
Aires from a tango by Manuel Romero, 1923.
70  Eduardo Molinari, B.O.G.S.A.T./La Responsabilidad, Ed.
unproblema+/Bergen Assembly, 2013.
71  Following the metaphor proposed by Eduardo Molinari in
Soy Children, Ed. Archivo Caminante / MNCARS, 2010.
72  Publicity Campaign of Syngenta, 2004, integrating terri-
tories of Brazil, Paraguay y and Argentina.
73  In relation to Eduardo Galeano’s work, “Latin America
open veins”.
74  Colony XXI century: food,speculation and territorial
possession-Rural Reflexion Group.
·169
permanent extension of society rights for each plot
gained. However, a challenge remains, that of re-
sponding accompanied by other regional allies suffer-
ing the same problems, so as to stop extractivism and
predation of natural resources in the continent by
decisions taken as a block. On the other hand, in the
deepening of a national popular model, an alliance
with Monsanto or the other “big players” of the pres-
ent agro-export model does not seem reliable. There
is no doubt about the burden of the inheritance re-
ceived and the dimension of the measures to be taken
in order to move on. Strategic planning recovery by
the State had a federal and cooperative component
in the discussion of the Agro-alimentary Strategic
Plan PEA275 2010-2020. The call reached University
groups, educational and agricultural research institu-
tions, as well as different types of organizations of
society in general. Despite recognizing its participa-
tive aspect, the specific weight of the agro-business
sector determined the results of PEA2 to prevalence
of some sector over others.
The future is here.
“Future arrived a long time ago”, says the lyrics
of a song by an emblematic rock band in Argentina.
This future of today has been developing in several
“revolutions”: the Libertarian one that deposed Perón
in 1955 backing down the social conquests of a de-
cade the Green Revolution with the creation of the
National Institute of Agricultural and Livestock Tech-
nology (INTA) in 1956, globally sustained by Ford and
Rockefeller Foundations that installed the industrial
agriculture in our Pampas. In that way the use of sup-
plies derived from oil were promoted and the genet-
ics of companies that determine that their seed are
the “good ones” supplies and goods regulated by the
OMC76, while native genetic resources are liberated,
internationalized and have free access in germplasm
banks. Lastly, the most recent revolution, the bio-
technological, present and pioneer in ArGENtina as
the second one to adopt GMO technology after USA,
ruling in parallel with terrible construction “knowl-
edge society”77 supported by leaders of direct sowing
75  www.64.76.123.202/site/areas/PEA2/index.php
www.agro.uba.ar/sites/default/files/calisa/Como_anali-
zar_al_PEA.pdf
76  Comerce World Organization
77  Words by the CEO from Los Grobo: “You can produ-
ce capital without capital because you can borrow it.
You can produce without work because you outsource
it. No land, no capital, no work. You can produce with
nothing. Nothing, you only need knowledge. If you have
the knowledge you can prepare a business plan and get
the money. If you have the knowledge you can convince
the owner to rent you his land. If you have the knowled-
170·
and sowing pools. There is now too a decade of politi-
cal and social advances In 2003 with Néstor Kirchner’s
office there comes a period of changes deepened dur-
ing Cristina Fernández de Kirchner’s two period office.
“The Won Decade”, “Never Less”, refer to conquest
that this time are expected “not to be lost”.
Aware of the recovery in politics and assess-
ment of the decade, with the presence of strong
social protests in the streets, I proposed Eduardo
Molinari to research and focus on popular struggles
and resistance that arise from “collateral damage
on civilian populations” from the use of agro toxics.
Social and environmental consequences that makes
invisible the transgenic narrative and spill new and
updated “orange agents” Speeches delivered from of-
ficial sectors, organisms of control and commercial
enterprises involved guarantee social welfare in a
“healthy environment of sustainable agriculture and
good practices” and other similar definitions, they
act as discipliners of any human rights claim such
as the one related to living healthily and the right
to adequate diet. However, in an increasing mode,
these actors must surrender to the evidence on dam-
ages caused by the agro-business model, mentioned
even in reports issued by the National State78 that so
frequently is involved in contradictions. Maybe, the
major contradiction lies in the financing possibility
that soy brings along with the export taxes. The regu-
lation that in 2008 originated the conflict known as
“del campo”. It is necessary to explain that tensions
arise not only in the agrarian sectors in terms of rent
disputes or in the opposing parties: some adhering to
the national model established in 2003 are far from
these dissonances in a style of agro-industrial devel-
opment that emphasizes agro-exports of commodities
and agro-fuel production.
An optimistic technological speech highly ethi-
cal that have transgenic as its core and solution to
the “world hunger” globally delivered by corporations
is used as a framework to the GMO macro experi-
ment in ArGENtina. The generous contribution from a
country with forty million inhabitants that produces
food? For four hundred million, partially validates
and legitimize the adoption of the soy model by the
State. The Food Strategic Program PEA2 2010-2020
replaces the planning role that during peronist gov-
ernments had the quinquennial plan and refers to the
fulfilment of UN Millennium Objectives by increasing
planted areas and yield per hectare. Nobody decodes
what kind of the starving is attended with export bal-
ance of soy and maize from ArGENtina. In fact, 88%
ge you can develop your suppliers who world do the job
for you”. www.portalplazademayo.com
78  Report about SENASA from the National General Auditing
department.
of commercialized soy at world level is used to pro-
duce oil. With the residues, a soy paste is done and
used as fodder. This means that in South America less
lands have been devoted to livestock and the produc-
tion of wheat, rice and other crops to produce food
for cattle bred abroad where the rest of the nutrients
from our land are imported to. On the other hand, is
soy destined to countries that suffer from hunger?
No, because the EU, Japan and China79 are the main
importers of soy and derived goods.
The gift of liberating RR soy without any royalty
was part of a transaction that allowed seed global
companies settle a multi-state soy territory from the
coordinates of de la Plata River in 1996. It is difficult
to process how a minute molecular dimension affects
so profoundly real States Nation. Nothing was impro-
vised, everything was under control. The stages that
configure the United Republic of Soybeans start to
structure with the “oro verde” since by means of two
short resolutions transgenic technology is authorized.
Signed by the Minister of Agriculture of the neo-liberal
government of Carlos Menem Engineer in Agronomy
Felipe Solá, resolution 115 from March 14th 1996
they established a request for authorization method
for the “experimenting or liberation of a transgenic
seed”. Resolution 167 from April 3rd 1996 authorized
the production and commercialization of “tolerant to
glyphosate herbicide” soy seeds, products and sub-
products. The main promoter was the Engineer Héctor
H. Huergo, who Solá appointed as the INTA Director,
where he stayed between February and November
1994. Huergo, one time student militant of the Revo-
lutionary Workers’ Party, he has also been president of
the Bio fuel Argentine Association, directs Clarín Rural
and also has an agro business advisory office and was
the one who introduced the open fairs American model
in the country that the opposition newspapers Clarín
and Nación apply in the joint company Expoagro.
RR soy starts a journey up river, baptized in
Brazil as “Maradona Soy”. One more time, de la Plata
River opens its gates to smuggling and even more se-
rious damages. In this case, the region has already as-
sembled agro-business machinery resulting in income
resources for governments determined to reconstruct
the neo-liberal nightmare.
However, for the indigenous organizations and
farmers’ organizations of the National Farmer Indig-
enous Movement80, soy “has devastated woods, evicted
indigenous and farmers’ communities, polluted land and
water, increased prices of food in the internal market”.
This reality is hidden for many urban dwellers in ArGEN-
tina, they trust on Monsanto’s sustainability in the web.
79  Bravo, A.L., et al, Soy Masters, transgenic agriculture in
latin America, CLACSO, 2010.
80  www.mnci.org.ar
Syngenta founds its United Republic of Soy-
beans and giant Monsanto is interested in recovering
its investment, litigates in the EU against Argentina
to collect royalties on “ transgenic fodder” that ar-
rive from ArGENtina to European ports. There is a re-
cord though, of this “Monsanto affaire” in wikileaks
Publisher in the book Argenleaks81: At last, the scep-
tical could see documents on how the trans-national
tries to interfere in national politics. Then, when
they lost the trial against the country in the UE the
giant Monsanto continues the pressure to modify
the Phitogenetic82 Creation Law in force to guaran-
tee the collection of royalties of “piled genes”83, the
next technology to be liberated and that demands
efficient control from the State to collect its right to
intellectual property as well as controls that would
avoid circulation of “outlaw” seeds damaging profit-
ability.
At the same time, the official discourse broad-
casted by State organisms and those of plant bio-
technicians, is almost messianic in relation to power
granted to the transgenic technological pack. Both as-
sume that the introduction of RR soy and Bt maize has
been the solution to economic crisis 2001-02. There
is a sense of gratitude to the politics of the 90s that
liberated GMO crops without any previous social con-
sultation or application of a precautionary principle,
which results at least contradictory. The Agricultural
and Science and Technology areas were raised from
Secretary level to Ministry during the last decade and
the developmental feature promoted from this stratum
is a permanent part of the President Tecnópolis and
PEA2 discourse or they partially picture the same as in
the raise in budgets devoted to these areas.
They are worried to obtain what I would ironi-
cally call, “genetic sovereignty”, public policies in
science and technology from ArGENtina, appeal to
development of local biotechnology capable of offer-
ing patents produced in the country84. National and
popular genes quoting in Wall St?...
81 Santiago O’Donell, Argenleaks, Ed. Sudamericana, 2011.   co-operate by supporting food security, understood as
www.cuspide.com/9789500735223/Argenleaks/
82 Law 20.247. www.catedralibredesoberaniaalimentaria.
blogspot.com.ar/#!/2013/04/como-leer-la-nueva-ley-de-
semillas.html
83 Piled genes: combination of genes that increase diverse
resistance in the same GMO genotype.
84  The President declares from New York. “I’ve met Monsan-
to... they were very happy because Argentina today is
in the avant-garde in terms of biotechnological events .
Also in repatriating scientists back to Argentina and fun-
damentally in relation to patents. We have now obtained
our own patents, we have became defenders of patents.”
www.presidencia.gob.ar/discursos/25918-almuerzo-en-
·171
“The rapid growth of grain production in the
country, due to the introduction of biotech varieties
of RR soybeans and Bt corn, has had an undeniable
role in helping the country to mitigate the effects of
economic crisis that occurred in late 2001 and early
2002. The tax on grain exports, in a context of high
international prices, has allowed the national govern-
ment to make available additional resources. In this
way, the positive impact of biotechnology on society
has been shown, albeit in a circumstantial manner,
through its capacity for productive change in the
generation of resources. But it is necessary to ensure
the sustainability of productive growth by allocating
resources to encourage innovation in new varieties.”85
It is almost the “pride of being Argentinean”,
which ironically characterize us in the Ibero-Amer-
ican region that comes from the discourse on the
broad acceptance that the last GMO crops have in
our society. Therefore, the metaphor chosen for each
of the imaginary territories of the United Republic
of Soybeans: ArGENtina, the transgenic homeland.
In times of identification with the values of the Big
Latin American Homeland there should not be wishes
of being a bit “European” … However, there is no
doubt in this sense: the EU does not allow transgenic
crops, except Spain that has allowed fodder maize. It
is the “other” first world where society appreciates
preventive principles after “crazy cows disease”. A
significant fact is understanding to which actors do
the researchers refer to when they characterize our
“broad acceptance”:
“In Argentina, for example, transgenic crops
are widely assumed, by agricultural, economist, the
media, and government as largely or even entirely
responsible for the spectacular growth in production,
productivity, and internationally competitive perfor-
mance of soy and maize in recent years.”86
According to this vision agriculture, economy,
the media and government design a map of “GMO
broad acceptance”. It also transmits a sensation of
counting with devices connected in different spaces
with power to sustain the transgenic discourse. Some
food innocuousness, others ensure the possibility of
preserving future generations imbued of agricultural
good practices. The same discourses emerge from the
University that educates professionals connected to
el-council-de-las-americas-palabras-de-la-presidenta-de-
la-nacion
85  Secretary of Agriculture, Livestock, Fishing and Food.
Strategic plan 2005-2015 for the development of agricul-
tural and livestock biotechnology, 2004.
86  Marin, A. et al. Developing capabilities in the seed indus-
try: which direction to follow?, CONICET-CENIT, Argenti-
na,2013.
172·
food production and industrialization, health and
rights. None of these aspects seems to be affected
by the “broad acceptance” of the transgenic culture.
From now own, we will formulate some contradic-
tions to the discourse that we could collect walking
through neighbourhoods fumigated in ArgENtina. One
more time, the mothers help the unveiling and visibility
of the dark side of success, reaching places where this
broad acceptance stated by scientists does not exist.
Walking Ituzaingó Anexo, a fumigated neighbourhood:
New Mothers from ArGENtina
“–Many times they were called the new Mothers.
How do they compare to Madres de Plaza de Mayo?
–When they compare us to the Madres, first we
have to know where they have been, what they have
gone through… they lived terrible things such as
kidnaps and abductions. Of course, we are flattered
with the comparison. And we try to do as they did,
the greatest spreading possible of our experience so
as to help others not to experience the same situa-
tion we did … And because of this fight I have also
been threaten, they CAME with weapons into my
house and told me to stop ” bothering with the soy-
beans” Many times I have been afraid thinking my
daughters may not return home. Two years ago, I left
the neighbourhood, where the local political leaders
(punteros) made us fight among neighbours and turn
people against us. This is all part of our struggle. I do
not want this to anybody else.”87
Eastern 2013, just eight days before the au-
tumn equinox in the South hemisphere the weather
broadcast announces a maximum temperature of
30°C, Azul, Eduardo and I walked to the interurban
bus terminal in our way to the “fumigated neigh-
bourhoods” in Cordoba’s outskirts. That was Friday,
a holiday according to our calendar. There was no
queue and we found seats. Less than an hour later,
the bus conductor in a very bad mood said we had
arrived at Ituzaingó Anexo. However, we are a few
kilometres away. We star to feel the hostility that
surrounds these places. After walking “La Ciudad de
mis Sueños”, the place where we got off the bus, w
e went back on another bus. It is strange for me to
step on Ituzaingó Anexo streets whose map I show
in lectures related to the consequences of the soy
model. It hurts me to pass by the health centre, be-
cause it keeps sad stories of terminal diseases di-
agnoses and spontaneous abortions, in this torrid
siesta. Located in the South east of the city, there
are approximately 30 blocks where around 5,000
people live since the ‘50s carrying out industrial
tasks in the FIAT-CONCORD complex, surrounded by
87  Sofía Gatica. Interview by Leonardo Rossi, 2013.
www.leonardorossi.wordpress.com
a productive rural area. The map of the neighbour-
hood of Ituzaingó Anexo that I mention was made
by the women of the neighbourhood alarmed by the
number of cancer, leukaemia, congenital malforma-
tions that the researched for interviewing families,
door by door, in order to complete a popular sta-
tistic. In 2001 Sofía Gatica, who loses her newborn
son because of a kidney malformation in 1997 cre-
ates the association of “Madres de Ituzaingó Anexo”
starting with other mothers like Vita and María Go-
doy a long and painful path to make this known and
demand the authorities.
“We went to the streets to say: ‘we have cancer,
help us’.”88
Professional physicians, lawyers, biologists89
work in a network with fumigated populations and
neighbourhoods. FUNAM90 NGO defines three big con-
taminant groups: arsenic, heavy metals, and pesti-
cides at which the population in Ituzaingó is exposed
to, they act as a pesticide cocktail like endosulfan
and DDT, endocrinal disruptors. Continuous fumiga-
tion with the mixture of glyphosate and other tox-
ics on the fields that surrounded the neighbourhood
completes the picture. Under pressure of the commu-
nity mobilized in defence of its right to health care,
environmental and sanitary security, the province
opened a public centre, the Oncological Hospital of
Córdoba and created a Provincial Record of Tumours,
the most horrible object of registration I have ever
heard of. Maybe this measures the absence of preven-
tive principles… Three municipal rules are passed
“sanitary and environmental emergency” forbidding
fumigations around the neighbourhood and in the
entire city. However, fumigations have never stopped.
Ten years later, the mothers’ painful path of soli-
darity start to show results: the trial day arrives; there
are responsible ones, at last. In February 2008, the
Health Sub-secretary of Cordoba city Dr. Medardo Avila
Vazquez denounces an aircraft fumigating over the
city. The plane owner is processed91 and two soy pro-
ducers and businessmen as instigators of clandestine
fumigation with highly dangerous products risking a
helpless population. Several chambers reject the con-
flictive cause until June 2011 the trial arrives, “setting
precedent on defending the rights to health of vulner-
able populations against the greed of soy businessmen
who do not doubt in poisoning rural school, entire
88  Leonardo Rossi’s interview.
89  Medardo Ávila Physician, Andrés Carrasco, Biologist Raúl
Montenegro, Darío Ávila Lawyer among others.
90  FUNAM, ONG ambientalist from Córdoba commited to Fu-
migated People.
91  It breaks the Provincial Law on Agrochemicals n°9164
and national Law on dangerous waste.
populations, original communities and, water wells in
their race to increase the agrarian rent.”92 On Septem-
ber 4th 2012 the First criminal Chamber of the city of
Córdoba exposes the principles of the sentence: in 627
pages the explain the arguments that lead to the con-
demnation to three year conditional jail, not effective,
to the farmer and pilot of the air applier for the crime
of intentional environmental pollution thus, setting
the bases for next claims.
Other acknowledgment of the “other mothers” of
ArGENtina struggle comes in 2012: Sofía is awarded
with the Goldman Prize, a kind of Nobel Prize to envi-
ronmental popular causes; she received it from Barack
Obama’s hand.
“I am going to ask him to investigate all the mul-
tinational that are damaging at world level ”I gave
his secretary the RAPAL report93,I knew would only
be a few seconds close to him at the White House.
Some time later, I received a silver envelope on the
mail with a letter saying: ‘I can do nothing against
Monsanto, but you keep on fighting, you are doing
it very well.”94
Monsanto invades Malvinas Argentinas95
“Neighbours don’t be indifferent, Monsanto pol-
lutes and kills people,” a girl’s voice shouts on a
megaphone in a demonstration in front of the place
where Monsanto is building a plant only at 700 m.
from a school. In the title, I share Raúl Montenegro’s
metaphor, alternative Nobel Prize in 2004 awarded
because of his combat with the fumigated neighbour-
hoods: Malvinas Argentinas in Córdoba is for me a
new “Falkland Colony” created by Monsanto in the
geographical centre of the country.
Walking along the route, from Malvinas neigh-
bourhood to the field where the workplace of the new
plant is Eduardo, Azul and I ask us “Is the location
just pure chance? We all thought it was not. As Ar-
gentineans, we will always feel the need to recover
the archipelago occupied by the British, in the South
sea of Patagonia. However, I think most Argentineans
do not know about the settlement of this Monsanto’s
“colony” in Córdoba, I doubt they know the corpo-
rate mechanisms used to seduce the power, not even
recognize they are under any risk of knowing... I re-
92 www.juicioalafumigacion.com.ar/lacausa
Collective Stop Fumigating and Mothers B° Ituzaingó.
93 IReport from People’s Court , Action Net in herbicides and
their alternatives in latin America.
94 Sofia Gatica’s testimony in the 1st Congress of Agro-ecol-
ogy Buenos Aires, 2012.
95 Raúl Montenegro’s metaphor. President of FUNAM, Profes-
sor of Evolutionary Biology in the National University of
Córdoba
·173
member know a commercial spot on cable TV prime
time, in a political program with a big audience of
Monsanto’s some days before Primary Elections: “after
30 years in Argentina, we thank each and every pro-
ducer who made this possible”.
We are convinced they should enlarge their grati-
tude… the State apparatus has been overstepped by
the corporation in order to obtain a privileged posi-
tion that the President of the Nation on TV national
chain, from New York on June 15th 2012 praises their
investment in building their plant in Malvinas. The
Minister of Agriculture also announces a “necessary
change in Seeds Law” for the advance of technology
offered by the company: Intacta RR2 Pro, a variety
developed in the US to be used in territories out of
the US that concentrates several events to resist in-
sects and herbicides. Undoubtedly, devoted to the
United Republic.
“Monsanto developed a fundamental productive
advance for the future of the region. Obviously, it
constitutes a great opportunity for South American
market. It was specially Developer for this geography,
INTACTA RR2 PRO technology promises great yield for
the agricultural producer.”96
In our walk through ExpoAgro, Eduardo tells this
in terms of “Etology of Capital”, we could see this soy
new variety in a live sample of several companies. In
Nidera’s stand, cultivated behind acrylic panels and
raised from soil level, I had the sensation of being
in front of a genetic deity of the moment. For an
instant I tried to assimilate the sacredness capitalist
to maize as a sacred plant to the Mayan people, while
in its writings Popol Vuh relates how man’s meat was
created from maize… today, its sanctuary in the cen-
tre of Yucatán is resisting the entrance of transgenic
soy… Just visible from the front side there was a no-
tice that read “Monsanto’s licensed”. Nine thousand
contracts of extended royalties97 have been signed
and are waiting for the liberation of this variety. Is it
a question of faith in this RR 2 deity?
“To buy, the producer has to previously sign a use
licence that says He promises to recognise to Mon-
santo a technological canon and pay for it, indepen-
dently of the company he is buying the seeds to. The
licence is for life and does not imply the obligation
to buy them...” 98
96  www.intactarr2.pro.com.ar
97  Note froml Facebook CELMA CENTRE OF LEGAL STUDIES OF
THE ENVIRONMENT, Report“Argentina according to Monsanto”.
www.facebook.com/centrodeestudios.legalesdelmedioa
mbiente?fref=ts
98  Soy Manager Monsanto. “How are royalties going to func-
tion with the new RR2 + Bt soy?”, Rural Supplement,
Clarín, 22/2/2013.
174·
The main uncertainty about its liberation was
already sorted out “This technology has just been ap-
proved in China, as alimentary and environmentally
innocuous and that can be imported to the market,
so in terms of soy we have Europe and maize and oil
there is China.
An intense lobby from the Argentinean gov-
ernment in the oriental giant was followed by the
announcement of Monsanto ARG’s Directors. It is im-
possible to be cultivated if our main market does not
approve its trading.
In June 2013, at the Holiday Inn Hotel in Cór-
doba the company presents the Third Sustainability
Balance 2012 highlighting the need of a “new form of
communication with the community”. These declara-
tions done in the presence of Malvinas mayor and city
councillors show how awkward the demonstrations of
the popular Assembly are.
In 1978, Monsanto99 started its activities of con-
ditioning hybrid maize seeds in Pergamino, province
of Buenos Aires. At present, they have five plants: two
processing seeds (Maria Eugenia Plant in Rojas, and
Pergamino Plant); an herbicide producer ( Zárate Plant
) and two experimental stations (Camet, Fontezuela).
Their present project implies the installation of a third
factory in the province of Córdoba and two new ex-
perimental stations. In order to add credibility to the
operation of their seed Plants, Monsanto’s executives
exhibit the one in Rojas, province of Buenos Aires. The
one in Malvinas would work similarly, processing this
new Intacta RR2 Pro seed in a bigger scale since it will
be the biggest plant of this company, in the world.
Transportation of the crop and its agrochemical wastes,
a traffic of trucks to complete 216 grain elevators of
137 Tons, in addition to the subsequent process with
seed treatment of high toxicity, made the Health and
Environment University Net100 publish a second report
on the risks the population of Malvinas World be ex-
posed to because of the transport, stocking and use of
poison in the factory, a threat for themselves together
with the suspicion of how wastes will be disposed
of. The irony of the companies at the time of baptiz-
ing their chemical products with “friendly and local”
names has made Bayer call three massively used seed
treatment in their industrial seeds processing Plants
Poncho, Gaucho and Native. Popular poisons?
“Probably many people in this locality has not have
information at first. The decision to spread the sustain-
ability report in Cordoba has to do with this fact...”101
99 www.monsanto.com/global/ar/quienes-somos/Pages/
historia-local.aspx
100 www.reduas.fcm.unc.edu.ar/lo-que-no-se-dice-de-la-
nueva-planta-de-monsanto-en-cordoba-2o-informe
101 Press declarations by the manager of Governmental Af-
faire from Monsanto.
The assembly “Malvinas fights for life” is a resis-
tance movement to the imminent settlement of the
plant. Neighbours from Malvinas, and other neigh-
bourhoods and communities in Córdoba constitute it.
On July 24th 2013, they celebrated a year of struggle
and they made demonstrations, claims and artistic
interventions as a form of exposing the agreements
among provincial and municipal officials, at the back
of neighbours. This was conducive to ruptures when
for example they mention the amount of employ-
ments the creation of the plant will bring. A research
by the catholic University of Córdoba confirmed that
87% of Malvinas neighbour claim for a popular in-
quest to decide whether they accept the installation
of the plant or not. For their anniversary, the assem-
bly publishes in their facebook:
“I’m necessary, I’m necessary... I feel life is agitat-
ing nervously if I do not attend it, if I am not there...
I feel there is a place for me in the line that otherwise
would be empty, there will be a missing breath that
I let down the other who is... I feel a colleague’s sad-
ness or rage unexpressed, of the love that awaits is
hurt... my face is missing from the people’s graphic,
my voice in the slogan, in the song, in the walking,
my legs in the marching, my shoes making holes in
the dust...my eyes contemplating the morning after…
my hands on the flag on the hammer, on the guitar,
my tongue in the common language, my face’s gesture
in the profound preoccupation of my brothers.”102
Conlara valley: producing for the factory
and making the giant speak
Monsanto produces seeds in the Conlara valley,
in the bordering province of San Luis, in fields owned
by the company Cresud since 1999. Under this in-
dustrial agriculture model, thousand of hectares were
deforested and big perforations were made in one of
the biggest aquifers in Argentina, irrigation pivots
were installed and high tension cables for exclusive
use. Soy and maize transgenic crops are sowed to
obtain seeds. They fumigate during the cultivation
cycle, with dangerous products without the commu-
nity consensus. This model does not create new work
positions, neither food and risk the whole community
health. The fumigations extend to the drinking water
plant in Santa Rosa de Conlara. Everything indicates
that the seed corporation will expand their produc-
tion to cover the demand in Malvinas plant, so during
the last year the community mobilization was at its
peak, lead by organizations in favour of food sover-
eignty such as the Farmers Association of Conlara Val-
ley, a group of doctors from the fumigated towns and
popular assemblies from other provinces.
102 Alfredo Zitarrosa. Uruguayan popular songwriter militant
of social causes.
Despite the fact they have issued an announce-
ment on July 14th about the activities in the Val-
ley (just a year from the President’s announcement
in NY), against the advance of the company in the
area, the biggest seed multinational showed its
face103 in response to local popular resistances: “Here
we produce maize seeds in a sustainable way”, “We
follow the highest standards in the market”, these
are phrases from the Governmental Affairs Repre-
sentative in the press conference and the meeting
with neighbours: “Monsanto is a small company, Coca
Cola is a big one. All the supplies, agrochemicals and
products used in those fields where maize is grown
are all approved by competent national organisms in
the subject: National Advisory Agricultural and Live-
stock Biotechnology Commission (CONABIA) and the
National Quality and Sanitary Service of Agricultural
and (SENASA). You should discuss with the States …”
this was the last suggestion, maybe this refers to the
imaginary Status created by the corporations and for
whom they develop their new products over State-
nations that relax their regulations not to interfere
with the expansion of the new republics.
When asked by local media and neighbours, the
company refused to give information about the type
and quantity of agrochemicals they use in the fields
the exploit in the Conlara valley. ”We did not bring
data. We comply with regulations” said the Commu-
nication representative who stated that in the last 14
years they cultivate in Campo “La Gramilla” owned by
the real estate developmental group IRSA, approxi-
mately 1,700 Hectares and that they do not have
plans to expand to the Valley. Molinari would say “the
corporation’s jargons” has been heard in Conlara.
Differently from the fight in the neighbourhoods
of Ituzaingó and Malvinas, the rural condition of this
episode is more recent, the protagonists belong to a
farmer’s organization similar to many others. It allows
us to reflect on the notion of territory. In the same
way, that diffuse borderlines in imaginary States like
the United Republic of Soybean but at local level, it
refers to the definition of conflicts and the appro-
priation of land. The dispute on family production
models imply a tension between adopting transgenic
industrial technology as a landmark of progress as
promoted by the market or remaining appropriate
farming technologies and knowledge that ensure the
continuity of their lifestyle and their food production
role, food for the population. The expansion of the
transgenic model seems to inhibit the possibility of
coexisting with other production models such as the
agro-technological, biodynamic, organic, a question
that seriously injures food sovereignty and healthy
103 www.leonardorossi.wordpress.com/2013/07/22/mon-
santo-del-oscurantismo-a-poner-la-cara-en-san-luis
·175
food provision for “Argentinean’s tables”104. Organiza-
tions struggle transcend frontiers globally articulated
through the farming Way. In the country MOCASE-
Farmers’ Movement of Santiago del Estero has acquire
visibility through territorial transformations and
violent events annexed to the soy model. Meanwhile,
another power, the one of the organizations from
Malvinas Argentinas and Conlara valley could show
us how Monsanto speaks...
“It seems we got them, they had to come down
to speak to us.”105
More than 70 peoples and communities that
fight to stop the GMO crops and the irrational use
pesticides are associated to the campaign “Stop
Fumigating”106 from the Group of Rural Reflexion107.
In some cases the fumigated areas have been limited,
next to houses, schools and rivers In the province of
Buenos Aires, local social organizations and FPC-Pro-
ducers families from Cañuelas obtain in this town the
first rule “Regulation on the use of Agrochemicals“,
that states an area of 2,000 m. from the urban lim-
its where fumigations are forbidden. It also promises
to regulate the production system of Agro-ecological
and municipal Certification of the obtained products.
On July 1st on the radio of the University of Buenos
Aires108, the minister of Agrarian Affaire of the prov-
ince of Buenos Aires declared that in Sixty days, the
measure World be extended to the rest of the towns
under his jurisdiction: “There is a very important de-
cision from the governor of the Province of Buenos
Aires, using some of the items in the regulations from
Cañuelas to advance in a regulative decree on agro-
chemicals applicable to the whole Province of Buenos
Aires”. Cañuelas is located at only 50 km from the
Capital City. Could we, human beings clear up opaci-
ties and cure transgenic blindness as Molinari states
in his B.O.G.S.A.T?
Bad Science
In Rosario, province of Santa Fe, during June
2013 the 2° International Congress International on
Environmental health was held, gathering profession-
als109 and social organizations committed to conse-
104 Phrase used during the conflict called “del campo” be-
cause of soy export taxes
105 Goyo, Rubén, Fede, Farmers from the Valley
106 Campaign Stop Fumigating GRR. www.grr.org.ar/cam-
panapdf/
107 www.grr.org.ar
108 www.catedralibredesoberaniaalimentaria.blogspot.com.
ar/#!/2013/07/prohibirian-los-agroquimicos-en-am-
plias.html
109 Marie Monique Robin and Gilles Serallini were part of the
discussion.
176·
quences of extractive models in which Latin America
is involved. In the final declaration, a series of YES/
NO refer to the lack of neutrality in science: “No, to
a global experiment that we are subjected to with
transgenic crops and food. We will continue fighting
for a Latin America and a planet free of Transgenic
as a unique alternative to guarantee bio-security and
food for our people. The very clear scientific lectures
on “bad science” that they promote and we have
shared during this Congress leave no doubt on the
threat GMO implies.”
Trying to decode the map of responsibilities
that Eduardo’s work proposes , I notice that the Sci-
ence and technology system has been a key actor
in the settlement of the transgenic model since the
80s in the interaction of official layers built up as
experimentation platforms. In those years, with an
initiation scholarship of the Scientific and techno-
logical Research national Council CONICET, I was able
to experiment “from the inside” the expectations
that the biotechnological revolution provoked even
in people like mi teacher Ing. Agr. Luis B. Mazoti,
pioneer geneticist, already retired at that time, who
dreamt about re-editing his theoretical research on
“transposable elements in maize” by means of mo-
lecular markers that started to develop in ArGENtina.
In Congresses, slides with super mice lines and tis-
sue transformation markers in Vitro challenged our
imagination. The company Pioneer held in July 1987
the “First Biotechnological Conference” where Donald
Duvick, father of maize hybrid technology in the USA
surprises the qualified audience of the main scientist
in the country with two assignments: “To continue
with the internationalization of genetic resources un-
der the risk of political activists blocking the access
to vegetable resources in their States as it already
happened. Not to consider any acknowledgement to
the vegetable ‘raw material’ what has a value and a
price is the added technology, taming ancestral work
has no economic value.” Promote “Joint Ventures”
between Universities and companies, share the risk
and knowledge. Generate Patents. There were still
chances to dispute a Patent Law in our country that
would include life as the object of all rights in terms
of intellectual and exclusive use. It did not thrive
despite the strong lobby of biotechnological compa-
nies. I remember that in the Pioneer Meeting I was
impressed that the genetic elite stayed in the room
without making any comment, I did not want to lis-
ten anything else about the colonial design of the
owners of the “knowledge added value”.
That is the way we graduate as scientists in Ar-
GENtina, a country chosen to unfold a transgenic
paradigm and because of this, there is a great merit
in thinking from the State about technological and
scientific independence that comes from the de-
velopment of a local own science. Great efforts are
recognized, even better in those cases where the re-
searchers belong to the generation of the national
scientific system of researchers, the same generation
that was sent to “do the dishes” by the Minister of
Economy Domingo Felipe Cavallo, author of the Con-
vertibility Plan during Carlos S. Menem’s office. Since
2005, the State is repatriating scientists graduated
with State resources that emigrated during the crisis.
There is no doubt on the enlargement of right that
implies the opportunity to have university public and
free education that permits the permanent raise of
classes and new universities all around the country,
specially in the outskirts of the city where there is
a major concentration of urban population. A bud-
getary reinforcement in education and science and
technology are part of the huge differences, when
comparing this administration to those in the pre-
vious 50 years, including the financing of projects
that link universities to the community: University
Volunteering, Extension Projects and Technological
Development for social inclusion.
However, the layers crossed by the transgenic
phenomenon require a multidisciplinary discussion
with other sectors that suffer the consequences of
its application, so they feel heard and contained. So-
ciety as a whole may have the right to information
on what we eat and when we eat GNO and which are
the different production models may coexist. To reach
independence in new diffuse territories that trans-
national powers continue strengthening. To become
Argentina again and end up with the United Republic
of Soybean.
Ana Broccoli, Eng. Agr. Agro-ecologist, July 2013.
.....................................................................................................
Paraje en el Departamento
de Canindeyú, Paraguay.
Foto Hernán Cardinale, 2013.
B.O.G.S.A.T.
La responsabilidad

Eduardo Molinari / Archivo Caminante

Instalación + Publicación • Installation + publication
En colaboración con • In collaboration with: Azul Blaseotto, Ana Broccoli, Ala Plástica, Hernán Cardinale
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Este libro es publicado en ocasión de la exhibición Mondays begins on Saturday
This book is published on ocassion of the exhibition Mondays begins on Saturday
Curadores • Curators: Ekaterina Degot, David Riff
Bergen Assembly • An initiative for Art and Research, Bergen, Noruega
31-8-2013 / 27-10-2013
KODE 1, Nordahl Bruns, Puerta • Gate 9, 5014, Bergen
Bergen Kunsthall - Art Museum of Bergen - Foundation 3,14.
www.bergenassembly.no
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Fotos • Dossier • Photos : Azul Blaseotto / Ala Plástica / Eduardo Molinari / Hernán Cardinale
Cómic Documental, Dibujos • Documental Comic, Drawings: Azul Blaseotto
Collages: Eduardo Molinari / Archivo Caminante
Traducciones • Translations: Fernando Aíta, Claudia Pereira, Heike Schaumberg
Edición Gráfica • Graphic Edition: Hernán Cardinale
Editado por • Published by: unproblema+ / Bergen Assembly
Impreso con • Printed with: Latingráfica / Buenos Aires, Argentina, 8-2013.
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Agradecimientos • Thanks to: Agatha Wara, Antonio Lattuca, Arnaldo Cardinale,
Asociación de Campesinos del Valle de Conlara, Campo Experimental Los Patricios,
Carlos Carballo, Cecilia Caccia, Celeste Plaza, Christoph Platz, Darío Avila, Eduardo Spiaggi,
Elisa Sementuch, El Levante, Emilio Petersen, FAUBA, Javier Couretot, Jorge Urusoff, Julia Roth,
Julieta Colomer, Leonardo Rossi, Lorena Justel, Lucho Lemos, Luis Padín, María Buenaventura,
Mariano Castro, Martina Paredes, Matías Marizza, Mirta Reviriego, Nuria Enguita Mayo, Oscar Rivas,
Oscar Moreno, Oscar Di Vincensi, Pawel Wiechetek, Pablo Valenzuela, Raúl Montenegro,
Steve Kurtz, Vero y Fabricio, Vincent Grünwald, Wilfrido Orzusa.
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archivocaminante013@gmail.com • www.archivocaminante.blogspot.com.ar
azulblaseotto@yahoo.com • www.azulblaseotto.blogspot.com.ar
plataformaladarsena@yahoo.com.ar • www.plataformaladarsena.blogspot.com.ar
contacto@alaplastica.org.ar • www.alaplastica.org.ar
hernancardinale@monadanomada.com.ar • www.monadanomada.com.ar
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monadanómada ago-2013