Empecemos por decir que el arroz es un cereal -vale decir que uno de los más
completos- desprovisto de colesterol y con una carga importante de fibra y de
energía. Si al arroz blanco le agregas leche, estas sumándole beneficiosa
proteína animal a la proteína vegetal que de por sí ya contiene, además de
potentes vitaminas y calcio que le gusta a tus huesos.
Dile adiós a esa vieja creencia dándole la bienvenida a esta receta de arroz con
leche fácil, y toca el cenit culinario tras cada bocado de un sustancioso postre.
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Porciones 4
Calorías 110 kcal
Autor Adriana Arias Simonovis
Ingredientes
La leche
En tu olla suprema donde nada se pega, vierte el litro de leche con el azúcar,
junto con las ramitas de canela y los trozos de cáscara de limón. Revuelve de
vez en cuando, manteniéndolo a fuego medio.
El arroz
Mientras la leche toma calor, toca encargarse del arroz. Y es en este paso
donde abuelas, reposteros, chefs, cocineros aficionados y todo aquel
interesado en la materia tiene algo que decir, pues hay varias maneras de
tratar previamente el arroz, y la que escojas determinará el resultado final que
tendrá el postre.
Por lo menos hay 3 formas de procesar los granos de arroz antes de que llegue
a ser un arroz con leche:
Escojas una u otra opción, lo importante aquí es saber que las técnicas del
lavado y el remojo previos permitirán que el arroz desprenda su almidón para
lograr una textura más cremosa del dulce, mientras que la técnica de la cocción
o reciclado dará como resultado un arroz con leche más apelmazado. Todo es
cuestión de gustos. Nosotros siempre preferimos lavar o remojar los granos,
pero si se da el caso de que tienes arroz sobrante, será muy buena idea que en