Mundo Medieval
Pues bien, es importante destacar que en una concepción del mundo donde todo
es necesario explicarse con un sentido católico en lo más estricto, se tiene que ver
a la sociedad común en la vida pública, como una construcción teatral en la cual
cada una de las acciones corresponde a una necesidad de conseguir una paz
espiritual y librarse del pecado.
Es por esta cuestión que más haya de retratar al propio enfermo es sumamente
necesario entender el entorno social de un enfermo, sobre todo los procesos por los
que pasa una persona que será de algún modo aislada de la ciudad.
Y es que esta cura y como también explicare este tema, no solo se limita a la propia
enfermedad de la antes mencionada “alma enferma”, si no que en un aspecto físico
se trató de curar al sujeto que padecía un mal, así también es necesario que
conozcamos el tipo de medicina aplicado en ese entonces, así como los rituales por
los que pasaba un enfermo.
El enfermo es parte también de modelos establecidos en la edad media, su propia
presencia en la villa o pueblo genera temor y miedo por la sola idea de que su
condición es debida a la mala vida que llevo.
EL DIAGNOSTICO
Los síntomas se podían ver físicamente en la cara del sujeto, la lepra atacaba partes
de el rostro que poco a poco se inflamaba, tanto al grado de una destrucción lenta
de la cara, así como ronchas que aparecían en diferentes partes del cuerpo.
La obtención de estos síntomas era considerada un castigo de dios por lo que las
personas que la obtenían estaban condenadas, tanto por la sociedad, así como por
que no existía cura alguna para ella.
EL PROCESO
Después del diagnostico del leproso este debía someterse a un ritual propio de la
época que corresponden a ideologías y visión de esta.
La primera etapa comenzaba en un templo donde el enfermo representaría una
“muerte en vida”, Se comienza con un confesa torio donde acostado se le cubría
con una manta, mientras esto sucedía, la misa se recitaba por parte de los
sacerdotes.
El sacerdote pronunciaba “Ahora mueres para el mundo, pero renaces para dios”
Las palabras que usan incluso me hacen pensar que a pesar de que se le tenía que
aislar al sujeto por cuestiones de salud, aun se tenía la idea de que la enfermedad
es una manera de pagar por el pecado y aceptar el castigo divino.
Después de esta aplicación, el enfermo tenía que obtener ciertos objetos que
facilitaran al pueblo el reconocerlo al momento de entrar, ser expulsado del pueblo,
no era un destierro tal cual, pero si suponía que si se quería entrar al pueblo se
debía seguir ciertas normas.
[2]una capucha de color café o gris, zapatos de piel, un par de castañuelas para
avisar a la gente de su proximidad, una taza, un bastón, un par de sábanas, un
cuchillo pequeño y un plato.17 El leproso, solo y desamparado, debía caminar hacia
el campo abierto y asentar su morada alejado de todas aquellas personas que no
habían sido castigadas con la lepra. Allí viviría y moriría, con suerte acompañado
de su esposa (si es que ésta no pedía el divorcio), y nunca más podría presentarse
en lugares públicos. En algunos lugares de Inglaterra incluso se creó el concepto
de las "ventanas para leprosos".
Esto ultimo confirma la idea de que en esta sociedad medieval cada pequeño grupo
social o sujeto pertenece a una línea que define que es lo que le corresponde como
parte de un sistema altamente cristiano y las consecuencias de no pertenecer a
este.
LA IMPORTANCIA DE LA ENFERMEDAD
Hemos hablado de la lepra por la importancia y magnitud social la cual traía una
importante exclusión social, pero, cuál era el impacto como tal de las enfermedades
en la edad media cuando se trataba de la nobleza.
Sabemos bien, que la clase burguesa en la edad media que vivía en grandes
castillos no conocían las propias condiciones de vida en su reino y que no era muy
común que salieran de sus grandes fortificaciones por lo cual es muy interesante
preguntarse lo anterior ya que el rey funcionaba como órgano representativo y
elegido en el cargo por la “mano de Dios”.
[4] Galerío Maximiano murió por un absceso rebelde y de una ulcera fistulosa, que
le vinieron al medio de las partes secretas del cuerpo, […], que ambos males eran
incurables y le corroían las entrañas; que, además, tenía una supuración y con esta
le salían gusanos y un fetor tan pernicioso e insufrible, que el emperador mando
matar a sus médicos, a unos porque no podían tolerar el mal olor y, a otros porque
no sabían curarle el mal.
De esta manera podemos entender que la propia enfermedad y el efecto que tiene
en las personas muchas veces depende de el contexto que en el que interactúas,
es por ello que existen muchas diferencias claras entre la vida de alguien burgués
enfermo y un habitante más.
Aun más veces nos apoyamos en los modelos que, aunque se necesitaban, muchas
veces se utilizaban para controlar.
INTENTOS DE CURA
[5]Es probable que esta terapéutica fuera algo más simbólico, relacionando el
cambio de piel de la serpiente con el cambio de piel que necesitaban los pacientes
afectados con lepra.
La aplicación de manejos de medicina rustica que más bien estaba más ligada a
un sentido altamente metafórico, así como religioso es destacable al momento de
una “terapia” que poco sabemos si en verdad alguno de estos métodos surtió un
efecto positivo en la salud de los pacientes.
La propia ropa no era cambiada en meses lo cual es normal pensar que estaba
infestada de piojos, liendres y ácaros por decir algunos insectos, la propia idea de
las pelucas en la burguesía venia del problema de los piojos en la cabeza, era
más factible raparse y ponerse una peluca que se podía desechar si se tenía
bichos.
IDEAS FINALES
La higiene en ese momento es una idea que nada tiene que ver como la
conocemos hoy en día, el espacio, el aseo personal, la individualidad como tal es
desconocida en la edad Media, el hogar era un espacio que necesitaba muchos
cuidados debido a las condiciones de la época, los bichos, la humedad y los olores
eran situaciones comunes de la vida diaria.
La lepra, así como diferentes enfermedades muchas veces nos enseñan otra
perspectiva de lo que significaba la vida cotidiana en el mundo medieval, también
nos abre barreras a entender el miedo a lo desconocido, al no poder explicar la
razón de algo, por lo que esto significaba la marginación de estas personas.
El significado siempre lo tuvo la región y si algo se salía de los estándares había
que rechazarlo o tomarlo como un ejemplo a quien no obedecía las normas,
aunque no en el margen de la ley si en el margen social.
1.Soto Pérez de Celis Enrique, La lepra en Europa medieval: El nacimiento de un
mito, Elementos BUAP, Facultad de Medicina de la BUAP, Pp.39-45, Recuperado
de: http://www.elementos.buap.mx/num49/pdf/39.pdf, 2003