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La importancia de la sociedad civil en la tarea de fortalecer las políticas j cé.

públicas y la calidad de las instituciones democráticas es algo que suele


darse por sentado. Lo que no resulta tan claro, sin embargo, es la defi- I
nición misma de sociedad civil: ¿cuál es su función en relación con el CID
Estado y con las agrupaciones políticas?, ¿qué rasgos presentan las
11 ' C.=
denominadas "organizaciones de la sociedad civil" y en qué se diferen- i.'
cian, por ejemplo, de las fundaciones o de cualquier otra asociación?
¿Cuáles son sus recursos y cómo difunden sus actividades? Y, acaso lo :: CI=1

más relevante, ¿de qué modo estas organizaciones pueden incidir en las ' C1=1

políticas públicas? . . CC:


e=
Como punto de partida, este libro asume que las nociones de sociedad
civil y de incidencia son complejas y potencialmente equívocas, y que es
hora de superar las visiones simplistas que presuponen una polaridad CI7
infranqueable entre Estado y sociedad civil y que, por esta razón, ofrecen
CI=I
análisis forzosamente limitados de un polo o del otro.
Lejos de idealizar a la sociedad civil concibiéndola como una suma de
virtudes, opuesta por naturaleza a las reglas del ámbito político, este texto
sostiene que ambos integran un campo de tensiones y cruces, cuyo aná-
lisis pone en evidencia las fortalezas y debilidades de la incidencia
social. Para dar cuenta de esta complejidad, los autores han optado por
una perspectiva crítica y un enfoque plural: la primera parte del libro
expone el debate teórico y el marco conceptual sobre el tema, la segunda '
incluye el relato de experiencias de incidencia política en torno a la
pobreza, los derechos humanos, el medio ambiente y la salud sexual y
reproductiva, y la tercera pasa revista a los claroscuros de la incidencia
política de la sociedad civil.
Si bien este libro reúne experiencias y reflexiones surgidas del Programa _
INICIATIVAS para el fortalecimiento democrático y social, todos los textos
aspiran a abrir interrogantes y a impulsar un debate más amplio sobre
un tema sin duda controvertido.
ISBN: 978-987-619-018-0

I
9 98711901 1

OCILS ,
AVAlhdverskIld de

SallAndrés. p.,.,.-...dmfentodemardtko y sodat


)x1 siglo veintiuno
editores
FLACSO
ARGENTIN.
Índice
siglo veintiuno editores argentina s.s.
Tucumán 1621 7° N (cro5oAA0), Buenos Aires, Argentina
siglo veintiuno editores, s.a. de c.v.
Cerro del agua 248, Delegación Coyoacán (04310), D.F., México
siglo veintiuno de espafia editores, s.a
c/Menéndez Pidal, 3 Ars (28006) Madrid, España

Introducción, por Carlos H. Acuña y Arianyz Vacchieri gp


PRIMERA PARTE. LA INCIDENCIA DE LAS
ORGANIZACIONES' DE LA SOCIEDAD CIVIL


EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS. UN MARCO
CONCEPTUAL Y LA EXPERIENCIA DE INICIATIVAS 015
La incidencia política de la sociedad civil / compilado por Ariana 1. La incidencia de las organizaciones de la
Vacchieri y Carlos H. Acuña
- la ed. - Buenos Aires : Siglo XXI Editores Argentina, 2007. sociedad civil en las politicas públicas.
224p. ; 21x14 cm. (Sociología y politica) Definiciones, explicaciones y evaluaciones de la
literatura especializada local e internacional,
ISBN 978-987-629-018-0
por Marcelo Leiras
1. Sociología Política. I. Vacchieri, Ariana, comp. II. Acuña,
Carlos H., comp.
2. Observaciones para el análisis y la práctica „-----,
CDD 306.2
de la incidencia, por Marcelo Leiras

Portada de Peter Tjebbes S. Experiencias de fortalecimiento democrático


y social, por Equipo de INICIATIVAS 87
©2007, Siglo XXI Editores Argentinas. A.

ISBN: 978-987-629-018-o

Impreso en Crafinor SEGUNDA PARTE. LA INCIDENCIA DE LAS


Lamadrid 1576, Villa Ballester ORGANIZACIONES DE LA SOCIEDAD CIVIL EN LAS
en el mes de diciembre de 2007.
POLÍTICAS PÚBLICAS. DEBATIENDO OTRAS
EXPERIENCIAS EN LA ARGENTINA ACTUAL 147
Hecho el depósito que marca la ley 11.723
Impreso en Argentina — Made in Argentina
4. Sociedad civil y políticas de salud y derechos
N11 ,0tv-f
sexuales y reproductivos, por Silvina Ramos 149 Introducción
5. Sociedad civil y políticas de defensa
del medio ambiente, por Jorge Daneri 161

6. Algunas reflexiones sobre la incidencia


en políticas públicas en materia de
derechos humanos, por Andrea Pochale 169

()Sociedad civil y políticas de combate Este volumen presenta una parte del trabajo realizado
a la pobreza, por Luis Fara por el Programa INICIATIVAS para el fortalecimiento democrático
y social, en torno a la reflexión y análisis sobre las estrategias de
incidencia social en las políticas públicas y las condiciones que
CONCLUSIONES 189 favorecen o amplían su impacto.
Repensando los claroscuros de la incidencia INICIATIVAS es el resultado del encuentro de tres instituciones,
política de la sociedad civil: obstáculos y el Centro de Estudios Legales y Sociales (cas), la Facultad Lati-
debilidades, por Carlos H. Acuña noamericana de Ciencias Sociales (FLAcso) y la Universidad de
191
San Andrés (UdeSA), que, con el apoyo de la Fundación Ford,
emprendieron un análisis de los problemas sociales y políticos
argentinos que se manifestaron dramáticamente en la crisis desa-
tada hacia finales de 2001. Este análisis permitió reconocer que
la Argentina enfrenta un desafio de simultaneidad. En otras pala-
bras, el patrón de funcionamiento de sus instituciones democrá-
ticas no asegura per se la inclusión social y política, ni el fortaleci-
miento y la profundización de los derechos humanos y sociales.
El ejercicio efectivo de la ciudadanía demanda tanto la construc-
ción de canales institucionales de participación y representación
más eficaces y eficientes, como la generación de condiciones que
aseguren suficientes capacidades y autonomía en la propia socie-
dad civil como para utilizar esos canales. Lo "social" y lo "políti-
co", el Estado y la sociedad civil, se encuentran ineludiblemente
articulados y demandan una acción simultánea de fortalecimien-
to, tanto en su especificidad como en su vínculo.
Fue éste el contexto en que las tres instituciones integraron
sus capacidades y crearon un Fondo de Acción Social y Desarro-
1. Lá incidencia de las
organizaciones de la sociedad civil
en las políticas públicas.
Definiciones, explicaciones y
evaluaciones de la literatura
especializada local e internacional

MARCELO LEIRAS *

INTRODUCCIÓN'

Este texto reseña y discute la literatura disponible a pro-


pósito de la incidencia de las organizaciones de la sociedad civil
(OSC) en las políticas públicas. El argumento se organiza del
siguiente modo: la sección 1 expone y analiza las denominacio-
nes y definiciones más frecuentes, señalando sus ventajas y des-
ventajas para el análisis de la intervención política de dichas orga-
nizaciones. La sección 2 presenta, en primer lugar, una serie de
argumentos explicativos para situar el incremento de la actividad
política de las OSC en el marco de transformaciones sociopolíti-
cas más amplias y expone, en una segunda instancia, las valora-
ciones ideológicas positivas y negativas de este incremento. La sec-
ción 3 discute algunos de los desafíos teóricos y metodológicos
que plantea el estudio del fenómeno y evalúa distintas tradicio-
nes de estudio en relación con sus respuestas a esos desafíos. Cie-

Director de las orientaciones en Ciencia Política y en Relaciones


Internacionales de la Universidad de San Andrés y responsable del
seguimiento de proyectos político-institucionales del equipo de INI-
CIATIVAS.
1 Fernando Cafferata, Julieta Lenarduzzi, Ignacio Salgueiro, Ignacio
Sófia y Guadalupe Tuñón colaboraron con la recolección de infor-
mación para la elaboración del presente estudio.
18 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL 1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 19

rra la exposición una descripción de los mecanismos más habi- las metas fundamentales de estas organizaciones o sus miembros,
tualmente citados en la literatura para interpretar las experien- como cuando se habla de "organizaciones de bien público", "de
cias de intervención exitosa de las OSC en los procesos de políti- interés público" o "de voluntarios", 2 pero tampoco pueden evitar
cas públicas.
- la abstracción y cierta vaguedad.
Aunque no son muy precisas, para la mayoría de los usos
corrientes y aun en ciertos usos analíticos estas denominaciones
son suficientemente informativas. Se entiende que refieren a
I. LA SOCIEDAD CIVIL EN PERSPECTIVA POLÍTICA: DEFINICIONES organizaciones con objetivos que interesan o deberían interesar
a alguna otra gente además de a sus miembros; en ese sentido
La sociedad civil abarca un conjunto amplio de organizaciones pueden considerarse públicas. Se comprende también que en
con historias, propósitos y formatos muy diversos. Un estudio esas organizaciones se ingresa y se sale voluntariamente y que son
exhaustivo sobre este sector en la Argentina (Roitter y González autogobernadas; en ese sentido no son organizaciones estatales
Bomba!, 2000) ilustra la amplitud y diversidad de este conjunto, y se parecen a otras organizaciones privadas. Los usos negativos,
y propone una tipologít que distingue seis tipos básicos de orga- que son los más comunes, subrayan dos distinciones necesarias:
nizaciones; tres puros (asociaciones civiles, fundaciones y mutua- hay un espacio público más allá del Estado y lo que queda fuera \
les) y tres híbridos (cooperativas, obras sociales y sindicatos). Den- del espacio estatal no se agota en el mundo privado de las fami-
tro de cada tipo hay subtipos que, en conjunto, suman más de lias y las empresas. Pero para analizar la incidencia de las OSC en
veinte categorías. Esta complejidad corresponde solamente a un las políticas públicas es necesario ir más allá de esta distinción
caso nacional; se puede inferir que, si fuera posible una clasifica- básica y de los otros genéricos usuales.
ción general de alcance comparativo incluiría seguramente Las definiciones negativas no establecen distinciones categóri-
muchas más categorías. cas: tampoco las empresas son organizaciones gubernamentales
Dada esta diversidad en el fenómeno, no es sorprendente que y el Estado no tiene fines de lucro. Los otros genéricos usuales
exista también diversidad en las nociones propuestas para desig- pueden dar lugar a equívocos sobre la contribución política
narlo y en las interpretaciones de esas nociones, comenzando por potencial de estas organizaciones. Entre estos equívocos, la refe-
el concepto mismo de sociedad rencia al bien público es el más significativo.
dad dede— significados distintos desde el tratamiento seminal de Un ejemplo de este equívoco puede encontrarse en la intro-
A-dam Ferguson en su History of Civil Society (Hodgkinson y Foley, ducción a un volumen que reúne estudios de caso de incidencia
2003, vii-xxlv). Por el mismo motivo, porque dentro del concep- de OSC sobre las políticas públicas en América Latina (Villar,
to de sociedad civil caben muchas cosas y muy distintas, tampoco 2003). El texto expone inquietudes y puntos de vista semejantes
es sorprendente que muchas de las nociones usadas para nom- a los que se presentan aquí, pero define las OSC como "organi-
brarla sean muy abstractas, ni que algunas de las más usuales
refieran a las OSC destacando lo que no son antes que lo que son.
Tales, por ejemplo, los casos de las muy frecuentes denominacio-
nes "organizaciones no gubernamentales" y "organizaciones sin
2 Para una lista más exhaustiva véase Campetella, González Bombal et
fines de lucro". Otras denominaciones destacan algún aspecto de al, 2000.
1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 21
20 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL

supuesto, la posibilidad de que algunos sectores no los consideren


zaciones privadas que producen bienes públicos" (p. 15). De
bienes sino males y entonces resistan activamente su producción.
acuerdo con la clasificación frecuente en economía, los bienes
Un estudio internacional comparativo (Salamon y Anheier,
públicos son bienes de cuyo consumo no puede excluirse a nadie.
y que no se agotan con cada consumo individual; por ejemplo, la 1996; Salamon, Anheier et al., 1999) propone una definición
muy influyente en la literatura; especialmente en la derivada de
seguridad pública o la legalidad. Son pocas las OSC que produ-
los casos nacionales latinoamericanos incluidos en ese estudio
cen este tipo de bienes. En muchos casos, producen bienes que
no se agotan con cada consum . 1 a *vidual ( en ese sentido • ue- (Campetella, González Bombal et al., 2000; Roitter, 2001; Roit-
ter y González Bombal, 2000; Roitter, Rippetoe et al., 1999;
den considerarse colectivos), pero cuvo disfrute se concentra_en_
Thompson, 1994). Esta definición destaca atributos de la estruc-
de alguna cate.goría_social,_en los habitantes de
tura y las funciones de las OSC. 3 De acuerdo con ella, estas orga-
nizaciones son: formalmente organizadas, privadas (institucio-
deJa_organización_(por eso,n_p_spn_públicos). Otro gran conjun-
tes d no
to de organizaciones demanda la producción de algún bien públi- -

entre ue
co (por ejemplo, el cuidado del medio ambiente) o la extensión
generar beneficios derivados de la venta de bienes o servicios) y
de algún bien que se - considera público pero del que algún sec-
voluntarias. Esta definición tiene la ventaja de especificar los
tor de la población está excluido (equidad de género, acceso a la
justicia para sectores desprotegidos): lo demanda, no lo produ- atributos positivos q - • • g• en a as e otro tipo
nizaciones. En este sentido, constituye un punto de partida útil.
ce. De modo que las OSC no pueden definirse en general a par-
Sin embargo, el conjunto de entidades que reúnen todos estos
tir del carácter público de los bienes que generan.
atributos es todavía demasiado amplio y los componentes de la
Es posible que el equívoco derive de la ambigüedad misma de
definición traslucen los objetivos del estudio para el que fue pro-
la noción de bien público. Que un objeto, una actividad o un esta-
ducida, que trató fundamentalmente de estimar el peso de este
do de cosas sea un "bien público" en el sentido económico no
sector en el producto nacional y-la demanda de empleo así como
implica que lo sea en el sentido político: que nadie pueda ser
de identificar los determinantes de su crecimiento (Roitter,
excluido del consumo de un bien y que ese bien no se agote con
cada consumo individual no implica que todo el mundo lo valo- 2001; Salamon, Sokolowski et al., 2000).
A ríosotros nos interesa, en cambio, determinar bajo qué condi-
re del mismo modo. Un bien público no es un beneficio general
y el bien público, asumiendo que sea identificable, no es reducti- ciones, con qué motivaciones y con
as olíticas
eillp •. • OS a - • I os aumen-
ble a las metas de ninguna organización particular ni de ningún
taron notablemente tanto la visibilidad pública (González Bombal,
tipo de organización: pública, privada, estatal o no estatal.
1996) como la participación más o menos activa e institucionaliza-
Aclarando este equívoco puede avanzarse hacia una definición
más adecuada a la variedad de propósitos de las OSC y también for-
marse expectativas más prudentes acerca de su incidencia en las
políticas públicas. Algunas OSC, bajo ciertas circunstancias, pue- 3 Aunque el genérico que se usa en el estudio es "organizaciones sin
den contribuir a la producción de bienes públicos. Pero, en gene- fines de lucro".
4 Thompson (1994) agrega también que se trata de organizaciones
ral, debe esperarse que esos bienes sean valorados de distinto "no partidarias". Este agregado es necesario para elaborar una defi-
modo por distintos sectores de la población, incluyendo, por nición exhaustiva.
22 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL
1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 23

da de este tipo de organizaciones en espacios de decisión política riar los intereses o los valores de otros grupos u otras organiza-
nacionales e internacionales (Bryce, 2006; Raustiala, 1997; Robert, ciones. Este reconocimiento es particularmente importante para
McM et ai
Ada —).(75Tg'-áriy Anheier, 1996; Salamon, Anheier articular una perspectiva sensible al carácter conflictivo de los
et al., 1999; Steinberg, 1993). No obstante, las asociaciones que
procesos y las decisiones políticas.
desarrollan regularmente actividades de carácter político son un
La definición se ajusta más estrechamente a las organizaciones
subgrupo (de tamaño variable de acuerdo con el momento, el
que desarrollan actividades de advocacy pero puede incluir otro
lugar y la perspectiva de análisis que se adopte) del total de orga-
tipo de estrategias, incluyendo el lobby, la movilización, la partici-
nizaciones. Son estas instituciones las que nos interesan especial-
pación en espacios de consulta para el diseño de las políticas
mente y, por lo tanto, necesitamos una definición que las describa
públicas y la colaboración en la implementación y en la evalua-
más específicamente.
ción de políticas públicas.
Adaptando la definición de organizaciones de advocacy que
Tal como señalan Andrews y Edwards, la definición sintetiza
proponen Andrews y Edwards (2004, p. 7) definimos como una serie de concepciones usuales en distintas tradiciones de
organizaciones políticas de la sociedad civil a las "organizacio- estudio. Esto permite articular las tesis de los estudios multidisci-
nes que desarrollan. estrategias respaldadas en argumentos de
plinarios sobre las organizaciones sin fines de lucro y no guber-
interés público para promover o resistir cambios sociales que,
namentales con las de los estudios sobre grupos de interés en
si se implementaran, entrarían en conflicto con los intereses o ciencia política y las de los estudios sobre movimientos sociales
valores sociales, culturales, políticos o económicos de otros gru-
en sociología y antropología. Esta articulación facilita el uso de
pos u organizaciones". Las organizaciones políticas de la socie- las herramientas teóricas desarrolladas en los estudios tradicio-
dad civil, así entendidas, satisfacen todos los requisitos de la defi-
nales para el análisis del fenómeno relativamente novedoso de la
nición de Salamon y Anheier. A estos requisitos agregan dos
intervención política de las OSC.
rasgos funcionales: la búsqueda de un cambio social o resistencia Ocasionalmente las definiciones desarrolladas en los estudios
al mismo,5 y la apelación a algún argumento de interés público.
sobre movimientos sociales se aplican al análisis del papel políti-
Desde el punto de vista de los objetivos de este trabajo, la defi- co de las OSC. Estas definiciones son informativas y válidas para
nición propuesta presenta una serie de ventajas: distingue este ciertos propósitos, pero introducen restricciones innecesarias,
subconjunto de organizaciones por la persecución de algún obje- para los nuestros. Por ejemplo, Jenkins (citado en González Bom-
tivo político; admite que ese objetivo consista tanto en la promo-
bal, 2003) acentúa la capacidad de las OSC para representar a
ción como en la resistencia a un cambio y reconoce que, aunque grupos que carecen de representación en otros espacios político-
las intervenciones se lleven adelante en nombre del interés públi- institucionales. Este acento coincide con el de otra parte de la
co, el alcance de los objetivos de la organización puede contra-
literatura sobre las organizaciones de los movimientos sociales,
que se concentra en las entidades que desafían las reglas de inclu-
sión y decisión habituales en los procesos de elaboración de polí-
5 Entendido, de modo genérico y amplio, como cualquier cambio en ticas. Algunas organizaciones políticas de la sociedad civil pue-
las relaciones, las instituciones, las organizaciones, las estructuras o den, efectivamente, canalizar la participación o la influencia de
los resultados sociales y no en el sentido restringido habitual de grupos que de otro modo quedarían marginados de la toma de
cambio de las estructuras sociales.
decisiones. En algunos casos esa participación desafía las reglas
24 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL
1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 25

de juego establecidas. Pero no todas las OSC tienen estas carac-


DE. ORGANIZACIONES DE LA SOCIEDAD CIVIL EN EL PROCESO DE
terísticas, no existe ningún motivo teórico fuerte para esperar que
LA POLÍTICA PÚBLICA: EXPLICACIONES TEÓRICAS Y
las OSC estén en mejores condiciones que cualquier otro tipo de
VALORACIONES IDEOLÓGICAS
organización para representar a esos grupos y, fundamentalmen-
te, no es necesario que las OSC traigan una "nueva voz" al proce-
Una de las observaciones más frecuentes en la literatura es que a \
so político o a la deliberación pública para que sus intervencio-
partir de las últimas décadas del siglo xx la actividad y el peso
nes sean políticamente relevantes. Frente a estas definiciones,
político de las OSC aumentaron significativamente. Por supues-
sigue siendo preferible la propuesta líneas arriba.
to, la actividad política nunca fue patrimonio exclusivo de los
Sin embargo, pueden anticiparse dos objeciones a esta defini-
gobiernos, los partidos y las corporaciones, pero, al menos en los
ción. En primer lugar, que hace demasiado énfasis en la persecu-
retratos habituales, los regímenes de la inmediata posguerra
ción deliberada de objetivos políticos. En segundo lugar, que pre-
(tanto los democráticos como los totalitarios y los autoritarios)
senta el desarrollo de actividades políticas como el atributo
aparecían como un terreno dominado por las grandes organiza-
distintivo de un subconjunto cuando en realidad debería conce-
ciones. El ingreso de las OSC en este terreno apareció entonces
birse como una dimensión de las actividades de todas las OSC.
r Muchos observa
como una-71-67-p—Eii. -do-res lo etiquetaron como -
Restringir la definición a las organizaciones que persiguen deli-
"•Yd~e+ reernerP"cia:--rerraettniento o reconstrucción de
beradamente objetivos políticos es inevitable si se quiere contar
la~ad ( hen y Arato, 1994, p. ' 9). Algunos analistas
con un lenguaje que retenga un mínimo de capacidad distintiva.
rec azan estas etiqu - tas-Paraellas iación de la arena poli-
Es cierto que en un sentido muy abstracto y remoto todas las acti-
. tica no es una reedición de patrones conocidos previamente sino
vidades de todas las OSC tienen alguna consecuencia política-
un fenómeno en el que predominan los rasgos novedosos. Inde-
mente relevante. Ahora bien, las organizaciones cuyo objetivo
pendientemente de la relevancia de los aspectos precedentes, es
fundamental depende de la sanción de una ley en el Congreso

indudable que la activación política de la sociedad civil estimuló
Nacional enfrentan desafíos muy distintos de los que enfrenta,
tanto la actividad teórica de distintas disciplinas sociales como
por ejemplo, un club de barrio cuyo objetivo fundamental es
una reelaboración de argumentos ideológicos para evaluarla. En
ofrecer oportunidades de desarrollo fisico y cultural a sus socios. mentos ideo-
esta sección reseñamos las explicaciones y los argumentos
No todas las OSC son políticas en el sentido propuesto. Por
lógicos más influyentes.
supuesto, tampoco todas lo son centralmente ni todo el tiempo.
La persecución de objetivos políticos es, efectivamente, una
dimensión que puede ser más o menos relevante para describir
EXPLICACIONES ACERCA DE LA CRECIENTE ACTIVIDAD POLÍTICA
a cualquier organización de la sociedad civil. En este sentido, la
DE LAS ORGANIZACIONES DE LA SOCIEDAD CIVIL
definición propuesta no distingue un subconjunto sino que expli-
Las explicaciones más relevantes están asociadas con cambios en
cita un punto de vista. Esto equivale a decir que las OSC intere-
los regímenes políticos, en la regulación estatal de las actividades
san a nuestro análisis en tanto que y en la medida en que, en
económicas, en la extensión de las funciones administrativas del
nombre del bien público, persigan o resistan cambios que pue-
Estado y en la escala territorial de los procesos políticos y econó-
den contradecir los intereses o valores de otros grupos.
micos (globalización). Es probable que existan relaciones de
mutua influencia entre cada una de estas dinámicas. Puesto que
26 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL 1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 27

la literatura no ofrece explicaciones claras sobre posibles interac- la facción liberalizadora del régimen. Limitar la participación se
ciones, aquí las consideramos en forma separada. vuelve más difícil porque la movilización aumenta el costo políti-
co de la represión.
En otro tipo de argumentos la activación • olítica de la socie-
Democratización d avi es más •ten un resu tado antes que una causa de la
Una de las interpremcionesings frecuentes presenta la activación democratización. Esta asociación puede explicarse recurriendo
política de _la sociedad-civil_en_estrecha asociación con los próce :_. al _wáje
ki de los estudios sobre movimientos sociales. En térmi-
_
sos de democratización de la llamada "tercera ola" (Huntington,
__—_- nos de este lenguaje, la democratización ofFEEEZ -indiciones más
19DZI La asociación adopta diversas -formas en distintos argu- favorables para la movilización de los recursos de las OSC (Jen-
mentos y aparece con mayor o menor importancia en la discu- kins, 1983; Tarrow, 1988) y oportunidades políticas más propicias
sión de los procesos democratizadores de acuerdo con los casos para su intervención (Meyer," rilc-o-ff,--275U-
0 45:11
nacionales y la región. levantamiento de las restricciones legales a la acción política que
De acuerdo con un primer argumento la activación política de acompaña la democratización reduce los costos de la acción
la sociedad civil debilita a los gobiernos autoritarios y, en ese sen- colectiva. La institucionalización de la competencia política y la
tido, promueve la democratización. D ker . entes versiones e este apertura de la esfera pública valorizan las capacidades de movili-
argumento atribuyen distinta potencia a la sociedad civil como zación, producción de información y argumentación de las OSC
elemento democratizador. En algunas versiones, la activacion de (Goldstone, 2004). Esto estimularía a emprendedores políticos y
la sociedad civil es la Piina;ITCá-usa —aér a sponsors tanto públicos como privados a realizar las inversiones
iuiOismos Estas versiones Se inspiran fun a- Menta-6-e'; necesarias para solucionar los problemas de acción colectiva que
te en
la reie-v-an
- cia-de las OSC en los movimientos democratizadores implica la constitución y el mantenimiento de las OSC.
del este de Europa, especialmente en Polonia y Checoslovaquia Lin tercer tipo de argumentos sostiene que~pacia
(Cohen y Arato, 1994, cap. 1). En las versiones más„débiles....la, OSC cultiva en los individuos las disposiciones necesarias para par-
relevancia política de la sociedad civil acelera el debilitayniento de las decisiones políticas
de-Tis-re' ImeneiputqvitArips que gqmienza . cón la dificultad
de
Jos aUt.9-ritVistnosparaingittnionalizárse y con las contadipcior_ ce los _costos_de_transacción-que-implican- el-diseño,- la. decisión_y
nes dentro del mismo régimen que que esta dificul/ad g.enera la im_plemer
_it ación
lepórdcas_públicas._,Layersión
c más influyen-
( 0-15PnneiTY- Schmitter,"1 186).
. La inspiración más frecuente de te de_esteárgumentp_es_eLconocido_estudio de Rohert.P.utnain
esta variante deriva de las transiciones de Europa Mediterránea sobre las diferencias de_carar~ entre loszobiernos regiona-
y América Latina. De acuerdo con estas explica -aOle— s, Ta- m
—Ovili- les italianos (Putnam, 1993). Ellas se explican en función de la
zación Política de la sociedad civil erosiona la dominación auto- dotación de capital social de cada región y_mi áástiátióhérvotarv-
ritaria porque aumenta los costos que debe asumir el régimen tarias son el- componente fundamental de ese capital. Este argu-
para mantener restringidas la competencia política y la participa- ntentenie-ti-e -üriáTéláCióTeTaen-a- Pri nuestro tema, porque
ción. Restringir la competencia se vuelve más costoso porque no es necesario que las OSC participen activamente en política
algunos de los sectores movilizados de la sociedad civil pueden para que el mecanismo causal opere. Sin embargo, razonamien-
convertirse en aliados tanto de la oposición partidaria como de tos inspirados en el argumento central de Putnam son citados fre-
28 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL 1. *LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 29

1-111:1 cuentemente en discusiones sobre la relación entre estas organi- de las economías en desarrollo minaron la credibilidad de este
111 zaciones y la política pública (véase por ejemplo Bryce, 2006). enfoque. El equilibrio de las cuentas públicas se convirtió, enton-
En rigor, solamente el segundo de estos argumentos ofrece una ces, en una meta fundamental de las políticas económicas. Fren-
111 explicación sobre el origen de la politización de las OSC. En el te a la dificultad de incrementar los ingresos públicos, la persecu-
11[1.1: primero y en el tercero, la actividad política de estas organizacio- ción del equilibrio implicó en la mayoría de los casos una
nes es un factor explicativo, no una incógnita a develar. Sin reducción del gasto público. Puesto que la provisión de servicios
embargo, puesto que los efectos de retroalimentación positiva sociales universales típicamente tiene una incidencia muy alta en
r. son sencillos de imaginar (las OSC producen democracia y la
1¡:H el gasto público, el esfuerzo de ajuste implicó, en algunos casos,
democracia alimenta a las OSC) y, de acuerdo con algunos esta- una retracción en la cobertura de los servicios sociales 6 y, más fre-
dios, verificables en la práctica (Paxton, 2002), la dirección de la cuentemente, cambios en las modalidades de implementación de
flecha 'causal inicial parece menos relevante que la estrecha aso- las politicas sociales para incrementar la eficiencia del gasto.
• ciación qué la mayoría de los estudios encuentran entre la poli- Los cambios en el manejo de las cuentas públicas tuvieron con-
,. . tización de la sociedad civil y la democratización. secuencias relevantes para el desarrollo de las OSC. En primer
•1,., lugar, produjeron dislocaciones sociales de distinta naturaleza.
Los sistemas universales de provisión de servicios alimentaron
Cambios en el babel regulador del Estado en las actividades económicas expectativas de protección social. Puesto que esas expectativas no
El cambio en las funciones reguladoras del Estado en la econo- se redujeron, la retracción en la cobertura de los servicios derivó
mía es otro de los factores citados habitualmente para explicar el en demandas sociales insatisfechas. Esa insatisfacción alimentó
incremento de la actividad y la relevancia política de las OSC. Este tanto la protesta social como la generación de fuentes alternati-
cambio se inició en distintos momentos en diferentes regiones, vas de provisión de servicios, que fueron frecuentemente canali-
tuvo profundidad y resultados variables en distintos países y afec- zadas a través de OSC. En segundo lugar, con el objetivo de
tó a distintas dimensiones del manejo macroeconómico. Los cam- aumentar la eficiencia en ertrák-15"pu-151-itó,16-s-Estados-delegáFon
bios más relevantes para nuestra discusión son: la persecución del distintas funciones asociadas con la implementación de las poli-
equilibrio fiscal, la privatización y la desregulación, la descentra- ticas sociales en oreanizacionelde la sociedad civil (Acuña, Jelin
lización y focalización en la provisión de servicios sociales. )07; González Bombal, Garay et al.,
En
áspeapectivas
l macroeconómicas y Lipsky, 1993).
tes hasta la segunda mitad de los arios setenta el gasto público era El diagnóstico sobre los problemas macroeconómicos de la
considerado como—uTfIWEfiránienta cié-estímulo de la demanda segunda mitad de los arios setenta no se detuvo en la política fis-
agregallly,_entonces,..~fla palanca del desarrollo económi- cal sino que implicó una redefinición global en las concepciones .42-"L" V
co. Como resultado de esta creencia, los déficits de las cuentas dominantes sobre el papel del Estado en la economía. Su peso
públicas no eran percibidos como obstáculos estructurales sino
como desajustes coyunturales consistentes con equilibrios macro-
económicos y sociales de más largo plazo. La coincidencia de altos
niveles de inflación y bajos niveles de crecimiento en las economí- 6 Esa retracción ha sido también atribuida a dinámicas demográficas y
políticas de más largo plazo que no tienen que ver con las metas de
as centrales y la crisis de endeudamiento externo de buena parte la política económica. Véase, ppr ejemplo, Turner (2001).
30 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL

económico, considerado como demandante de dinero, agente de ' titucionalladps_de-consulta. Tal es, por ejemplo, el caso de los
gasto y ente regulador comenzó a ser percibido como un lastre entes reguladores de servicios públicos en la Argentina. En
que restringía las oportunidades de financiamiento y la capaci- ambos casos, al constituirse en actores centrales en áreas políti-
dad de acción de los agentes privados. Versiones de este diagnós- camente sensibles, estas organizaciones adquirieron un relieve
tico ocupaban un lugar importante en la economía, la filosofía político del que carecían anteriormente.
política y la teoría social desde la posguerra. Las condiciones eco- La descentralización Etszlizaciiin de la asistencia social tam-
nómicas y financieras de principios de los arios ochenta les die- bién contribuyeron a dar visibilidad y relevancia al trabajo de las
ron verosimilitud. La difusión de estas visiones inspiró una serie 0-§C. En algunos casos, como se comenta más arriba, estas medi-
de medidas para aligerar el peso económico del Estado, tanto en lás-fueron -adoptadasfundamenialmente_para aliviar las finanzas
su calidad de productor de bienes y servicios como en su calidad públicas.En_otras ocasiones testuvieron asociadas con procesos
de agente regulador. Estas medidas fueron tomadas, con distin- de aesCentralización .política que, en algunos países, a-compaña-
to alcance y variados resultados, en los países capitalistas centra- ron la democratización. Independientemente del motivo inicial,
les, en los países capitalistas en desarrollo yen los países que hasta la deiaritariación fl l ion imp icaron definir a lo s
inicios de 1990 formaban parte de la esfera de influencia de la eneficia as í a social de acuerdo con criterios
Unión Soviética en Europa central y oriental. Empresas de pro-
piedad pública fueron vendidas a propietarios privados y se pro-
curó reducir la capacidad de intervención de los gobiernos en la aí:raigo local y el acceso a comunidades específicas del que ¿lis-
determinación de los precios de bienes clave como el dinero (a frutan algunas OSC se convirtieron, a los ojos de numerosos ana-
partir de la llamada autonomización de las autoridades moneta- listas y diseñadores de políticas, en herramientas valiosas para la
rias nacionales), el trabajo (mediante la eliminación de las regu- intervención focalizada. De allí que muchas de estas organizacio-
laciones salariales que fueran más allá del establecimiento de sala- nes hayan asumido, con resultados dispares (González Bombal,
rios mínimos) y en el comercio exterior (con la reducción de Garay et al., 2003; Rathgeb Smith y Lipsky, 1993), responsabilida-
barreras arancelarias y no arancelarias y la suscripción de acuer- des de implementación y adquirido alguna influencia sobre el
dos bilaterales y multilaterales). diseño de las políticas sociales.
LaH___:1, i la desregulación crearon cond~ra
ivatizációk_y
el desarrollo de las OSC a trav • - • • • - anisms2kE~0s
casos, estas tomaron a su cargoya prestación de servicios púbTi- Extensión en las funciones administrativas del Estado
c-61-,'— —tóló¿ habitualmente considerados soCialéi
fán _ „._.,- o la
-(diin . edu- Eicrecimiento de la influencia olítica de las OSC ha sido asociar.
cación, en Chile, o servicios de salud, en los Estados Unidos) do con otra trans ormación en las funciones de los Estados: la
c6iii6 servicios de infraestructura (es el casode
_ la distribución
, _ de ampliación del conjunto &AD:u n ssiu_e_sexonvierten-eanbjem
energía electnca y la provisión de servicios telefónicos en algu- lapfiicaa Esta ampliación es un fenómeno conocido y
nas- comunidades pequeñas). En otros casos, las OSC fueron analizado desde muy diversos puntos de vista. Ha sido especial-
incorporadas a regímenes de regulación de servicios públicos mente relevante en los estudios sobre las políticas públicas en los
_
prestados por empresas, Estos regímenes suelen estar formaliza- Estados Unidos, en particular en las discusiones sobre el papel de
dos en leyes y reconocen la participación & OSC en espacios ins- los grupos de interés en el sistema político norteamericano
1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 33
32 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL
una intervención estatal e institucionalizar el tratamiento de
(McFarland, 2007). En relación con estas discusión_esy_eligis-£ 41---
texts)
ua modelos lunlistas clásicos, Hugh
,--p_ (issue
I/ este tema como responsabilidad de largo plazo (Hula y Jackson-
Elmoore, 2001; Lowry, 1995; Rutheford, 2000; Steinberg, 1993).
Heclo (1978) desarrolló el conceredes de asuntos Las OSC también han sido retratadas como canales en los pro-
networks).
Las redes de asuntos s2nespácios de rekciarlesalLe se_ cesos de emulación internacional en lo que hace a la adopción
1 eneral, informal, entre
eLz__.. de políticas o la formación de instituciones, ambos procesos aso-
forman en la interacció
funcionarios públicos y personas, grupos y organizaciones inte- ciados con la complejización de las burocracias públicas. Estos
redes dan lugar a relaci---
-iairáf.-ris--- ones
enfoques postulan que el desarrollo organizacional del Estado no
resados en un tema part
r
más bien cooperativas -entré activistas y funcionarios y, de acuer- siempre obedece a causas y presiones domésticas. En algunos
do con algunas lecturas, borran los límites entre la burocracia casos resulta de la adopción de modelos internacionales y la difu-
pública y las organizaciones sociales (Nyland, 1995). Esta noción sión de aprendizajes institucionales. De acuerdo con algunos
se expandió rápidamente en el terreno de los estudios sobre polí- estudios de caso, las OSC pueden funcionar como promotores y
ticas públicas en el ámbito internacional (Gormley, 1986; Keck y vehículos de esa difusión (Bennett, 1997). 7
Sikkink, 1998; Kira:, Meister et al., 1984; Sikkink, 1993). La
influencia de las redes de asuntos en la construcción de la sen-
----_----
promoción de decisiones de pollticayública puede inter- Globalización
da-flá- - ¿cien-
. bién como consecuen -cia de la cr•
---y- t-am
p`i-e-tlise-C6ifiii-ausa El término "globalización" es usado para referir una enorme
te— relevancia política de las organizaciones de la sociedad civil. variedad de procesos de muy diversa naturaleza. Muchos de esos
De acuerdo con el argumento de Heclo, las redes e asun os procesos están ocurriendo simultáneamente. El hecho de que
,."--se forman cuando el Estado adopta nuevas responsabilidades coincidan en el tiempo sugiere que están asociados, aunque los
) administrativas. Según la interpretación más frecuente, la expan- términos de esa asociación son difíciles de entender con las teo-
l",
sión temática de estas responsabilidades reduce la probabilidad rías y evidencias empíricas de las que disponemos. Aquí propo-
\j de que los funcionarios públicos (electos o designados) dispon- nemos un uso distinto de esta denominación con el, proposito de
gan de información en cantidad y calidad suficientes para tratar-
_, abre la.1 de ca que presumamos que_esosfenómenos-están.asociados_de algún
1 los. Ese déficit, deinformción
ind~organizacioneique tienen los incentwos,ppltticos o modo particular. Los fenómenos son do_s: elslesarrollo de or_g_á-__
__.. . Algunas OSC adquie-
la competencia profesional para_p ruládo-n-e-s--Y >regímenes internacionales, y la reducción en los cos-
----
ren relevaa _ _
política en la medida en que pueden incorporar- tc
-5-1-dé d internacional de la inforyng_ción.yjas, persa
se a estas redes de asuntos. En' este sentido, la expansión de las Oo-áP - c iosiiecuentemente citados en relación con la globa-
responsabilidades administrativas e ciifii-6-su
del Estado aparé -c— lización, como la reducción en las restricciones a la movilidad
. _ ,
causa.
Yendo un paso más atrás en el proceso, también podernos
encontrar a organizaciones de la sociedad civil. Es frecuente que
7 Estos fenómenos forman parte de la incidencia de "segunda genera-
los Estados asuman nuevas responsabilidades administrativas por- ción" que Carlos H. Acuña discute en el capítulo de conclusiones
\ que algunos movimientos u organizaciones sociales consiguen incluido en este volumen.
incluir un tema en la agenda pública, argumentar que merece
1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 35
34 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL

organizaciones que reclaman la remoción de las minas anti-per-


internacional del capital y el aumento del comercio internacio-
sonas luego de los conflictos bélicos o de las organizaciones que
nal, quedan fuera del foco de nuestro comentario.
combaten la participación de niños en enfrentamientos armados.
Los regímenes internacionales son "principios, normas, reglas
En segundo lugar, los regímenes y las organizaciones internacio-
y procedimientos para la toma de decisiones alrededor de las cua-
nales pueden servir como recurso político para magnificar la inci-
les convergen las expectativas de los actores en una determinada
dencia de las OSC en la escala nacional. La presión internacio-
área de asuntos" (Krasner, 1982, p. 185). Aunque el concepto
nal puede aumentar los costos de reprimir o demorar la adopción
puede extenderse a cualquier actor que intervenga en la arena
de reformas, y así promover el alcance de los objetivos de algu-
internacional, los actores de los que habla la definición son, fun-
nas OSC. La influencia internacional favoreció la posición domés-
damentalmente, Estados nacionales. Los Estados pueden encon-
tica de, por ejemplo, las organizaciones de derechos humanos y
trar necesario o conveniente estabilizar sus expectativas respecto
aquellas que encuentran obstáculos políticos y culturales para la
del comportamiento de otros Estados por una variedad de moti-
adopción de políticas de salud reproductiva (Keck y Sikkink,
vos. En la mayoría de los casos, los regímenes internacionales se
1998; Misra, 2006). La suscripción de tratados internacionales y
desarrollan y se mantienen para resolver problemas de coordina-
el funcionamiento de las cortes internacionales de justicia per-
ción; es decir, problemas que surgen no porque las preferencias
miten sostener la influencia doméstica de este vector internacio-
de los Estados sean absolutamente conflictivas (aunque pueden
nal a lo largo del tiempo. En este sentido, también puede espe-
serlo parcialmente) sino porque la ausencia de acción concerta-
rarse que multipliquen las oportunidades de intervención
da lleva a resultados indeseables para todas las partes. Muchos de
política de las OSC, lo cual no quiere decir que esas oportunida-
estos problemas de coordinación surgen en relación con el mane-
des vayan a aprovecharse siempre de modo eficaz.
jo de fenómenos que atraviesan las barreras territoriales. Dos
La reducción en el costo de la movilidad internacional de la
ejemplos clásicos son el tratamiento de los temas ambientales y
información y las personas facilita la acción colectiva a escala
la regulación de las telecomunicaciones. También surgen regí-
internacional y, en ese sentido, fortalece la posición de las OSC,
menes internacionales para la resolución de problemas de coo-
tanto en la arena política y en las organizaciones multilaterales
peración, problemas que no están relacionados con la acción
como en los espacios domésticos. Este factor tiene un efecto
concertada, sino con el cumplimiento de compromisos. Un ejem-
independiente r otro indirecto, puesto que también ha estimu-
plo de estos problemas son los regímenes internacionales de
lado el desarrollo de los regímenes y organizaciones internacio-
comercio, muchos de los cuales dan lugar a la formación de orga-
nales que comentamos en los párrafos anteriores. Estos cambios
nizaciones internacionales, entidades encargadas de supervisar
ofrecen a las OSC facilidades para obtener información y difun-
el cumplimiento de las reglas y canalizar la toma de decisiones.
dirla y nuevas oportunidades para obtener recursos y establecer
Los regímenes y las organizaciones internacionales facilitan la
participación política de las OSC por dos razones. En primer alianzas.
Aunque esta reseña no es exhaustiva, permite poner en un con-
lugar, ofrecen una arena internacional de intervención y, en ese
texto histórico el tópico de la politización de las OSC, llamar la
sentido, multiplican las oportunidades políticas de esas organiza-
atención sobre la multiplicidad de fuentes que puede tener este
ciones. La naturaleza del tema de interés de muchas organizacio-
fenómeno y subrayar que sólo puede entenderse en relación con
nes demanda la acción internacional. Tales son los casos, por
procesos más amplios y que afectan a otros actores.
ejemplo, de un sector de las organizaciones ambientales, de las
36 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL 1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 37

El crecimiento en la significación política de estas organizacio- determilládo, es el reinosle,la.pluralidad. El argumento de la plu-


nes ha sido objeto de distintas valoraciones. Algunas de ellas son -
ralidad, en la expresión magistral de Walzer, es probablemente
positivas y otras no. Esas valoraciones adoptan ciertas formas típi- el más persuasivo de los argumentos de la sociedad civil. Pero no
cas. A continuación reseñamos las más frecuentes. el único ni el más influyente.
Es posible aducir un segundo argumento asociado con el plu-
ralismo. En éste, la multiplicación de asociaciones con vocación
de intervenir en el proceso de políticas contribuye a la descon-
LOS ARGUMENTOS DE LA SOCIEDAD CIVIL centración del poder y, en ese sentido, hace posible el gobierno
En 1991, Michael Walzer publicó un ensayo que expone una valo- democrático en sociedades complejas. En él aparece la sociedad r
ración particularmente persuasiva y prudente del significado civil concebida como promotora y resguardo del pluralismo poli- I
político de la sociedad civil. Originalmente publicado como The tico. La multiplicación de intereses privados ha sido una de las
Idea of Civil Society (1991), trascendió con un título distinto en dos preocupaciones clásicas de la reflexión política moderna. Hasta
reediciones posteriores: The Civil Society Argument (1992; 1995), finales del siglo )01ilt, fue presentada casi siempre como una ame-
el argumento de la sociedad civil. Ajuicio de Walzer, el argumen- naza para la realización del interés público. Tal es el sentido que
to de la sociedad civil es un correctivo frente a cuatro argumen- adopta la consideración de las organizaciones representantes de
tos comunes en e, político moderno y que celebran otras intereses particulares en los escritos del Iluminismo escocés, par-
tantas formas de vida como modelos de coexistencia. Los prime- ticularmente en el clásico de Adam Ferguson citado más arriba.
ros dos argumentos forman parte de la tradición de izquierda: el • De acuerdo con las interpretaciones habituales, esta preocupa-
de la buena vida asociada con la participación activa en la políti- ción adquirió un nuevo sentido a partir del trabajo de james
ca y el de la buena vida como comunidad autónoma y autorregu- Madison. Los artículos de El Federalista que se le atribuyen pre-
lada de productores libres. Los otros dos argumentos son repre- sentan la multiplicación de intereses particulares y su interven-
sentativos de los discursos de derecha: el de la buena vida ción en la arena política como mecanismos de neutralización
dedicada a la producción y el intercambio en el mercado y el de recíproca. Según él, este mecanismo garantiza tanto la autono-
la buena vida como lealtad a la nación. El problema de estos cua- mía de las repúblicas frente al poder faccional como las autono-
tro argumentos es su singularidad, su insensibilidad a la comple- mías de los poderes locales y los individuos frente al poder cen-
jidad de los asuntos humanos y a los inevitables conflictos de leal- tral. Esta imagen de la democracia moderna, como sistema con
tades asociados con ella (1995, p. 162). El argumento de la múltiples centros de poder, ha sido y continúa siendo una rica
sociedad civil, en cambio, celebra la sociabilidad, el vincularse fuente de inspiración ideológica (McFarland, 2007). Las deman-
con otros, independientemente de la motivación o el propósito. das de inclusión política de las OSC encuentran un robusto res-
Incorpora los otros argumentos, puesto que acepta todos los paldo en esta fuente.
impulsos asociativos: la producción, el consumo, la participación. De acuerdo con un tercer argumento, la intervención y la
política, la nacionalidad; pero también niega los otros argumen- adopción de responsabilidades políticas por parte de las OSC son
tos, porque requiere preservar la posibilidad de mantener múl- valoradas como complemento o alternativa de la representación
tiples afiliaciones y múltiples lealtades. La socied_ad_ci~es- política canalizada a través de las elecciones. Este argumento
pretada, precisamente porque no tiene ningún propósito juzga el voto como un mecanismo de expresión muy inadecuado
_
38 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL 1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 39

con respecto a la complejidad de las decisiones de gobierno y de \ más propicias que el Estado para satisfacer las demandas de sus
las burocracias públicas modernas. El voto y los partidos políticos públicos.
no tienen ni pueden tener sensibilidad suficiente frente ala mul- El argumento de la sociedad civil no es uno. Considerando sólo
tiplicidad de demandas e intereses existentes. La constitución de los más frecuentes, hay por lo menos cuatro. Aunque destacan
OSC y su inclusión en los procesos de toma de decisiones ofre- valores distintos y su combinación puede dar lugar a inconsisten-
cen, entonces, una posibilidad de representación a grupos y cias, son compatibles y aparecen muchas veces mezclados en las
demandas para las que los canales y procedimientos establecidos discusiones acerca de la contribución política de las OSC. El
no tienen lugar. Presentan de este modo un complemento a los retrato de esas discusiones sería incompleto si no consideramos
mecanismos electorales de rendición de cuentas. Otra versión de algunos contra-argumentos, que aparecen con frecuencia similar
eitedtt pede las OSC productoras
argumento y ofrecen razones de poder persuasivo equivalente.
de bienes colectivos que pueden complementar o reemplazar los
provistos por el Estado. Dados su tamaño, su localización y sus
incentivos, estas organizaciones disponen de mejor información
y motivación más adecuada para satisfacer los intereses de las CONTRA-ARGUMENTOS
poblaciones a las que sirven (Bryce, 2006; Steinberg, 1993). Así, La participación política y el interés por los asuntos públicos no
es más probable que los mecanismos de rendición de cuentas, condensan todas las virtudes humanas ni reflejan siempre las
aun los informales, funcionen eficazmente. Esta noción de la superiores. Éste es el primer argumento fuerte del texto deWal-
sqciedad civil como refuerzo de representación esgrime razones zeij los motivos que ofrece para respaldarlo son convincentes.
ero, como él mismo advierte: "[...] no hay forma de escapar al
poder y la coerción ni posibilidad de elegir, como los viejos anar-
val—ora desde un punto de vista distinto. En el caso anterior, la des-
mismo. En este caso, quistas, sólo la sociedad civil" (1995, p. 167). La sociedad civil
es un medio para producir mecanismos de representación más no se sostiene ni se basta a sí misma _ el Estado no es meramen-
sensibles a las demandas y preferencias ciudadanas. te una_entre_Arariaslormas d_e_As9g1APilrl P9.111,m_ELKIta_.do, él
Es posible articular una defensa de la sociedad civil a partir de mismo una asociación, es condición de posibilidad de todas las
un cuarto punto de vista: la eficiencia. Desde esta perspectiva las otras asociaciones y, lo que es particularmente importante para
_
nuestros propósitos, es condición de la civilidad_ Vra:Piii ráida•21--
-
1 í asociaciones de la sociedad civil, junto con otrass asociaciones l
de la sociedad civil. Sin un marco de reglas comunes (que impli-
voluntarias las empresas, ofrecen alternativa
in esquemas estatales de provisión de bienes colectivos, típicamen- ca la obediencia a la autoridad común que vigila el cumplimien-
te centralizados y rígidos. La asociación voluntaria funciona en to de esas reglas) la civilidad de la sociedad civil "se disuelve en
este caso como serial de valoración de un bien y, entonces, como multiplicidad de lealtades a un archipiélago de organizaciones.
serial de disposición a contribuir, con tiempo o dinero, a su pro-L , Ésta es una de las enseñanzas de los filósofos contractualistas clá-
ducción (Casella y Frey, 1992). Las OSC funcionan aquí como sicos y continúa siendo relevante para leer la situación contem-
vehículos de eficiencia económica por motivos semejantes a los poránea. Sin un marco de reglas comunes, la pluralidad de la
que se ofrecen para presentarlas como vehículos eficaces de sociedad civil no es pluralidad sino multiplicación de singulari-
representación política: tienen motivos más fuertes y condiciones dades.
1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 41
40 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL

rno
patillescznelgóllis_____dero orrkiro Esta objeción es frecuen-
Buena parte del interés por explorar las condiciones de inciden-
te en las críticas del trabajo de Robert Putnam citado más arriba
cia de las OSC en las políticas públicas implica un reconocimien-
y ha sido expuesta de modo particularmente convincente por
to tácito de la centralidad del Estado. La voluntad de pasar de la
Theiss-Morse y Hibbing (2005). A partir de la evaluación de una
acción expresiva y el trabajo de advocacy sugiere que aunque algu-
nos movimientos han abandonado la aspiración de conquistar el amplia literatura, los autores encuentran que no todas las orga-
nizaciones voluntarias promueven valores democráticos (ésta es
Estado, éste continúa siendo una herramienta de acción politica
la más común de las críticas a Putnam), que las asociaciones
ineludible (Acuña, Jelin et al., 2007; González Bomba', 2003; Villar,
voluntarias reúnen a gente parecida entre sí (lo cual no favorece
2003). No obstante, en algunos casos, la vocación de participación
el cultivo de actitudes pluralistas) y que la participación en aso-
política puede traducir una intención de neutralizar o reemplazar
ciaciones voluntarias, más que volcarlos hacia la política, desinte-
el Estado. En estos casos, la vocación antiautoritaria de los movi-
mientos sociales en los que muchas OSC reconocen su anteceden- resa a sus miembros respecto de ella. 8
Considerando estos contra-argumentos, la incidencia de las
te, se transforma en vocación antiestatal y, entonces, antipolitica.
OSC en la política pública presenta desafios particulares. Las
IRepitiendo a Walzer, no hay motivos para elegir sólo la política,
objeciones están inspiradas por un denominador común: la polí-
Wit pero no se puede prescindir de ella. La acción política no se agota
en el Estado, pero no puede eludirlo. Del poder y la coerción no tica es una forma de acción pública sui generis. Incidir en las polí-
se escapa, éstos pueden ser herramienta de profundización demo- ticas públicas requiere reconocer, afirmar y resguardar esa singu-
crática en la medida en que se proteja al Estado como bien públi- laridad. Para participar eficazmente y de modo productivo en la
política pública es necesario internalizar el punto de vista del
co y recurso común de acción política.
Motivos semejantes inspiran la impugnación del argumento de Estado, y hacerlo implica reconocer la inevitabilidad de la coer-
la sociedad civil como pluralismo político desde un punto de vista ción y la necesidad de un marco de reglas y un espacio de acción
democrático. De acuerdo con esta impugnación, la multiplicación comunes. El argumento de la sociedad civil, en cualquiera de sus
de intereses particulares políticamente organizados no implica variantes, no la asume como una versión superior de lo público.
ninguna garantía de neutralización recíproca sino que aumenta Por el contrario, supone, tal como lo enfatiza Walzer, el recono-
el peligro de captura y colonización del aparato estatal. Esta cimiento de que no existe tal versión superior. Si compartimos
impugnación ha sido un tema frecuente de los críticos del funcio- este reconocimiento y, al mismo tiempo, aceptamos la inevitabi-
namiento de la democracia norteamericana (Wright Mills, 1956) lidad de la coerción, la afirmación de la política y la estatalidad
y es retomada por críticos contemporáneos de la globalización aparecen como corolarios del argumento de la sociedad civil
(Cerny, 1999). Desde el punto de vista de estos críticos, la sobera- como pluralidad. Esta afirmación no es una síntesis del cotejo
nía estatal es condición del gobierno democrático. La activación entre argumen\ os y contra-argumentos, sino una advertencia ini-
política de las organizaciones de la sociedad civil, en la medida en cial para evitar 1 s errores más comunes al considerar la contri-
que contribuye a la superposición e intersección entre estructu- bución potencial de las OSC a las políticas públicas.
ras de gobierno, debilita la soberanía estatal y erosiona, entonces,
el instrumento de las decisiones democráticas de gobierno.
Un tercer contra-ar: mento cu - •• • . • ue la participación en 8 Estos hallazgos confirman los de los estudios y ensayos compilados
ntaria generevalores y ac anteriormente por Skocpol y Fiorina (1999).
cualquier organización

42 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL


1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 43

HL INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS:


interés, el universo se amplía aún más. Para dar una idea de la
DESAFÍOS ANALÍTICOS Y HALLAZGOS •
"- magnitud de la producción relevante para el tema, un estudio de
Burstein y Linton (2002) sobre el impacto relativo de las organi-
En la primera parte de la sección anterior hemos relevado argu-
zaciones de los movimientos sociales, los partidos políticos y la
mentos que nos permiten entender bajo qué condiciones contex- opinión pública sobre la politica pública incluyó 53 artículos, con-
tuales puede esperarse que las OSC desarrollen la motivación y ' iando solamente los publicados entre 1990 y 2000 en las revistas
encuentren el espacio para participar de procesos de elaboración académicas más influyentes en ciencia política y sociología de los
de políticas públicas. En esta sección reseñaremos algunos análi- Estados Unidos. Esos 53 artículos presentan 230 medidas de
sis sobre las condiciones bajo las cuales esa incidencia puede ser impacto sobre la política pública (Burstein y Linton, 2002, p.
eficaz. Dada la variedad de organizaciones en la sociedad civil, la 390). A pesar de la intensidad del esfuerzo intelectual invertido
complejidad del Estado como organización y la particularidad de en esta empresa, los progresos en términos de acumulación de
las experiencias nacionales y transnacionales, dar cuenta de esas conocimientos han sido limitados.
condiciones implica resolver gran cantidad de desafios teóricos y Algunos autores atribuyen las dificultades en la elaboración
metodológicos. Comenzamos nuestra indagación señalando bre- de argumentos generales a variaciones en la conceptualización
vemente qué grado de exactitud y generalidad podemos esperar de los fenómenos de interés y en la teorización sobre los efec-
dado el conocimiento disponible y la experiencia acumulada. A tos causales (Meyer, 2004; Meyer y Minkoff, 2004). Otros atri-
continuación discutimos las dificultades asociadas con la verifica- buyen este lento avance a la falta de articulación explícita entre
ción de experiencias de incidencia. Fs2s dificultades tienen dimen- disciplinas o tradiciones de estudio (Andrews y Edwards, 2004;
siones teóricas (¿qué cuenta como incidencia?) y metodológicas Roitter, 2001). Estas consideraciones coinciden con las conclu-
(cómo asignar atributos de las políticas públicas a la incidencia siones de la revisión que realizamos para este estudio. Pero es
de las OSC?). Exponemos más adelante la variedad de espacios en posible que la dificultad para progresar en el conocimiento
los que puede verificarse la incidencia tomando en cuenta la reconozca motivos más profundos. Como señaláramos al comien-
estructura de los Estados y la de los procesos de configuración de zo de la segunda sección, sociedad civil es un término demasigdo
políticas públicas. Comentamos luego cuál es la magnitud de inci- ari-ip•ro—(a
_ eliberadamente amplia)_comapam-contener el míni-,_
dencia esperable tomando en cuenta que las OSC participan de mo de homogeneidad indispensable_para quecualquierzenera-
.
arenas políticas en las que también intervienen otros actores. Ter- _
lizáa-sYn tenga algún valor informativo. Parece_entómás,pitt_
minamos describiendo algunos mecanismos de incidencia a par- dente dEWT6Ilar un vocabular _i_o_que_permita.slistinguir~
tir de la síntesis de la experiencia nacional e internacional y las lec- dé la soaéaáa-CiV— il a—las orgrizáciones_quomparten_atributos
ciones aprendidas en la implementación de INICIATIVAS. modultrgitiiárT--e evantes y elaborar hipótesis testeables en relación
cein esos tipos más acotados de organizaciones. Aunque existen
en la literatura varias tipologías de organizaciones, ninguna goza
¿ARGUMENTOS GENERALES?
de la aceptación general necesaria para estructurar un programa
La cantidad y la variedad de estudios sobre la participación de las común de investigación.
OSC en las políticas públicas son abrumadoras. Si incluimos en En función de lo señalado anteriormente, una exploración
la revisión la literatura sobre movimientos sociales y grupos de más convincente de las capacidades políticas de las OSC nece-
1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 45
44 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL

análisis. 10 En otras etapas es más dificil determinar si la inter-


sita: a) acuerdos terminológicos más amplios; b) argumentos
vención de las OSC constituye un caso de incidencia. Este pro-
descriptivos más exhaustivos y c) teorías acotadas por tipos de
blema se presenta particularmente en lo referido a la etapa de
organización. Sorteando estas dificultades conceptuales y las
implementación. En algunos casos, las OSC desarrollan activida- \
barreras disciplinarias, pueden de todos modos encontrarse
des, autónomamente o en coordinación con autoridades estata-
algunos mecanismos causales repetidos(Elster, 1998; Hedstróm
les, que complementan y en ese sentido inciden sobre los resul-
y Swedberg, 1998). No podemos hacer afirmaciones fuertes
tados de la implementación (INICIATIVAS para el fortalecimiento
sobre la validez general de estos mecanismos, pero ellos seña-
democrático y social 2005 ofrece ejemplos de este tipo). En otros
lan en qué dirección vale la pena continuar explorando. Des-
casos, las OSC sirven simplemente como canales de distribución
cribimos algunos de ellos en el apartado final de esta sección.
de bienes o servicios generados desde el Estado y de acuerdo con
un diseño decidido desde allí (González Bombal, Garay el al., 2003
cita ejemplos que confirman esta apreciación en relación con la
¿QUÉ CUENTA COMO INCIDENCIA?: LEGISLACIÓN,
implementación de políticas sociales focalizadas en la Argentina
IMPLEMENTACIÓN, MEDIACIONES Y MEDICIONES
durante los años noventa). Es conveniente considerar esos casos
Una de las dificultades más importantes entre las señaladas ante-
como instancias de participación y reservar el uso de "incidencia"
riormente consiste en determinar qué cuenta como incidencia.
para intervenciones en las que las OSC tienen algún impacto rele-
Esta dificultad tiene dos aspectos. El primero de ellos es teórico.
vante sobre la política en cuestión.
Casi todos los estudios que hemos relevado procuran resolver este
Un tratamiento más completo del problema de la incidencia
aspecto del problema considerando por separado cada una de las
requiere complementar el esquema de etapas de la política públi-
etapas de la política pública: determinación de la agenda, iden-
ca en dos sentidos. En primer lugar, como se señala en la segunda
tificación de las opciones de decisión, elaboración de la decisión,
sección de este estudio, la actividad política de las OSC incluye
implementación, monitoreo y evaluación. 9
tanto la promoción de cambios como la resistencia a los cambios.
Es relativamente sencillo aceptar señales típicas de algunas
La resistencia eficaz puede manifestarse en la adopción de decisio-
de estas etapas como instancias de incidencia. Por ejemplo, la
nes o en no decisiones. Las no decisiones puedén resultar de la
inclusión de un tema en la agenda pública, en la medida en
exclusión de un tema de la agenda pública o del mantenimiento
que pueda atribuirse de modo convincente a alguna interven-
del statu quo aunque el problema haya ingresado. El registro de las
ción de OSC, podría entenderse de este modo. Lo mismo
no decisiones puede ser dificil desde el punto de vista metodoló-
podría afirmarse respecto de la formulación de una, ley, un
gico, pero debe contemplarse esa posibilidad teórica.
cambio en la reglamentación o el diseño de un programa. Esto
es así, aunque dentro de cada una de esas etapas pueden iden-
tificarse dimensiones particulares que hacen más complejo el

19 Por ejemplo, Rutheford (2000, p. 80) distingue, en cuanto a la agenda


de políticas públicas, dimensiones cognitivas (temas de agenda como
unidades de información) y normativas (temas de agenda como
objeto de juicios éticos). Las eficacia de las intervenciones de las OSC
9 Distintos estudios proponen distintas enumeraciones y denominacio-
puede variar respecto de cada una de estas dimensiones.
nes para las etapas, pero las diferencias son pequeñas.
46 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL
LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 47

En segundo lugar, es necesario considerar que la incidencia de mente en entrevistas con los líderes de estas organizaciones. Sin
las OSC puede ser mediada por otros grupos o actores. Por ejem- el contraste con casos negativos de incidencia (lo que no necesa-
plo, las acciones de advocacy de las OSC pueden persuadir a seg- riamente demanda el empleo de métodos estadísticos) es dificil
mentos de la opinión pública y a los funcionarios públicos a adop- confirmar la relevancia de los factores mencionados.
tar cambios que estos segmentos juzgan favorables por motivos La recurrencia de los estudios de caso ha conspirado también
electorales y no por la intervención directa de las OSC. Una des- contra el desarrollo sistemático de indicadores de incidencia. Las
cripción adecuada de las condiciones de incidencia requiere un descripciones e interpretaciones propuestas suelen ser muy
inventario exhaustivo de las posibilidades de mediación, en par- dependientes de las peculiaridades de las organizaciones, la natu-
ticular de la relación entre las OSC, los partidos políticos y la opi- raleza de las políticas y los países analizados. Considerando las
nión pública (Burstein y Linton, 2002; Costain y Majstorovic, dificultades señaladas anteriormente es deseable y, a partir de la
enorme riqueza de estudios producidos, posible, avanzar en la
1994).
La atribución de propiedades de las políticas públicas a la inter- producción de indicadores de relevancia independientes de la
vención de estas organizaciones plantea desafíos metodológicos especificidad de los contextos.
complicados, entre otras cosas porque la incidencia de las OSC
frecuentemente está mediada por, o coexiste con, los intentos de
VARIEDADES DE LA INCIDENCIA: ETAPAS, SECTORES, PODERES Y
influencia de otras organizaciones. Los estudios de caso, que
NIVELES DE GOBIERNO
constituyen el diseño más usado, son especialmente vulnerables
a esta dificultad. Aun cuando el control estadístico sea difícil o Como se ha señalado, una de las coincidencias generales en la
inadecuado a la naturaleza de los datos disponibles, otras técni- literatura es la distinción de las
cas frecuentes en los estudios comparativos sobre otros temas, aaerdo con la etapa de la política de que se trate. Puesto que
como el contraste de contextos (Skocpol, 1994) o de desarrollo caetaptt-ply inámicas distintas, requiere entonces dife-
más reciente, como el análisis de conjuntos (Ragin, 2006), pue- rentes capacidades y distintas estrategias de las OSC (Burstein,
den ayudar a sopesar la validez de los hallazgos de los estudios de 1991; Soule y King, 2006). Otra distinción frecuente correspon-
caso. Estas técnicas están prácticamente ausentes de los estudios de con las diferencias sectoriales entre las políticascuña, Jelin
et al., 2007; Casey, 2002; González Bombal y Villar, 1003; Kirst,
relevados.
Otro rasgo frecuente en los estudios es la concentración en Meister et al., 1984). La naturaleza de los problemas y la estruc-
casos "exitosos" de incidencia. Esta concentración puede llevar a tura de la burocracia estatal
ñali va significativamente
— entre sec.:
sobreestimar la relevancia de algunos atributos de las organiza-
ciones que efectivamente consiguen incidir porque no permite
identificar si son esos atributos u otros los que las distinguen de L_ denominarse_s_pec:_
el a
aquellas organizaciones que tratan de incidir pero no pueden. to" _
administrativo
.... delproblema.
Por ejemplo Rees (1999) estudia las 12 organizaciones sin fines Otras dimensiones político-institucionales relevantes están
de lucro más influyentes sobre la actividad legislativa en el Con- prácticamente ausentes en los estudios relevados. Las arenas polí-
greso de los Estados Unidos y atribuye la eficacia de estas organi- ticas más frecuentemente estudiadas son las agencias de los eje-
zaciones simplemente a los factores mencionados más frecuente- cutivos, el poder legislativo (con casi absoluto predominio de los
48 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL 1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 49

estudios sobre el Congreso de los Estados Unidos) y las organiza- interacción entre los funcionarios electos y los ciudadanos media-
ciones internacionales (en las que también predominan los agen- dapórel ré IteiA.p1.Mral. La literatura de raíz institucionalis-
tes del Ejecutivo). La intervención sobre las legislaturas de otros ta disponible en el área de la ciencia política ofrece una serie de
países y la rica experiencia práctica de estrategias de incidencia ' argumentos para estimar el efecto individual y algunas de las inte-
judicial (acerca de la cual el movimiento de derechos humanos racciones entre estos factores (Carey, 2000). Ellos permitirían
y el movimiento ambiental en la Argentina ofrecen numerosos complementar los aportes de los estudios sobre OSC, grupos de
ejemplos) no han tenido hasta el momento un impacto significa- interés y movimientos sociales.
tivo en la elaboración teórica. • Hasta el momento los estudios han explorado una parte peque-
En términos de niveles de gobierno, las dinámicas nacionales ña del mapa social e institucional de la incidencia y lo han hecho
on las más frecuentemente analizadas, aunque una porción de modo incompleto. Hay áreas importantes de la experiencia de
importante de la literatura más reciente da cuenta de las dinámi- las OSC que aún aguardan un tratamiento sistemático y hay acto-
cas locales (Acuña, Jelin el al., 2007; Hula y Jackson-Elmoore, res dentro de las áreas ya exploradas cuyas motivaciones pueden
2001; Sampson, McAdam et al., 2005). El primer nivel subnacio- elucidarse con herramientas teóricas probadas en el análisis de
nal (provincial o estadual) es tratado por pocos estudios (por otras cuestiones. Esto señala una dirección posible para las inves-
ejemplo, los referidos a los procesos de descentralización en Amé- tigaciones futuras.
rica Latina) y no hemos encontrado contrastes explícitos entre
las condiciones para la incidencia de las OSC en distintos niveles
de gobierno. LOS LÍMITES DE LA INCIDENCIA: OSC, OPINIÓN PÚBLICA,
La debilidad del tratamiento de los factorespónico-institucio: PARTIDOS Y GOBIERNOS
nales no administrativos es consistente con la concentración de Para evaluar cuánto inciden las OSC es indispensable formarse
alguna expectativa respecto de cuánto podrían incidir. Esa
de incluir esos otros factores en el análisis se haría más expectativa debería estar apoyada en argumentos teóricos que
evidente tan pronto como se prestara atención a las motivaciones permitan evitar optimismos desmedidos o subestimaciones sin
de los funcionarios públicos. Elanálisis de estás_ótiac m iiones fundamento. Al respecto, los argumentos más desarrollados se
demanda, en prirner.Lagar, el recon,achniento_delaszegla&-cons- encuentran en la literatura sociológica sobre los movimientos
tituci-oe_estructuran la intraacción_entre_las ejecntivos, sociales. Como se comenta brevemente líneas arriba, en esta lite-
iásm° ayorías legislativas v los funcionarios_kulicialessemindo ratura predominan dos enfoques: el de la movilización de recur-
discusión de la influencia sos y el de las estructuras de oportunidades políticas (Goldsto-
las organizaciones ne, 2004; Jenkins, 1983; Jenkins, Jacobs et al., 2003; Meyer, 2004;
Meyer y Staggenborg, 1996; Tarrow, 1988). Ambos son relevan-
tes para estimar el alcance potencial de la incidencia de las OSC,
pero el enfoque de oportunidades políticas lo es más directa-
11 Los motivos de los funcionarios públicos, electos o no electos, sólo
aparecen tratados explícitamente en un estudio que documenta la mente.
cooptación de esas organizaciones como instrumento de supervi- El enfoque de movilización de recursos resultó de una serie de
vencia política de un régimen autoritario (Wiktorowicz, 2000). esfuerzos para determinar bajo qué condiciones los movimientos
1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 51
50 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL

sociales consiguen superar los problemas de acción colectiva. El sea la apertura de los espacios institucionales para la inclusión de
tratamiento original de Olson (1965) proponía el tamaño peque- nuevos actores, mayor la disponibilidad de opciones de alianza
ño, la homogeneidad y la capacidad de los grupos para distribuir con los actores ya incluidos y mayores las capacidades políticas
beneficios selectivos entre sus miembros como soluciones bási- del Estado. Los estudios que utilizan este enfoque no llegan a
cas. Los estudios que desarrollaron el enfoque de movilización conclusiones comunes. Jenkins y sus coautores (2003) encuen-
de recursos identificaron sucedáneos de estas soluciones básicas, tran que efectivamente la percepción de un incremento en las
particularmente la influencia de emprendedores sociales indivi- oportunidades de influencia política estimuló la acción colectiva
duales y la de grupos que actúan como sponsors. Las conclusiones de protesta en las comunidades representantes de la población
de estos estudios pueden leerse de dos modos y ambos son útiles afroamericana en los Estados Unidos. Por su parte, Goldstone
para nuestros propósitos. De acuerdo con la primera lectura estos (2004) sostiene que la democratización alimenta la acción colec-
estudios permiten identificar qué grupos tienen más probabili- tiva; pero esta acción no proviene de sectores excluidos del siste-
dades de constituir OSC y qué OSC tienen más probabilidades ma político sino que es una herramienta dentro del menú al que
recurren los actores políticos establecidos para alcanzar sus obje-
de resolver eficazmente á lo largo del tiempo sus problemas de
acción colectiva. Los grupos con mayor probabilidad de organi- tivos. En ambos casos se espera el mismo resultado, mayor acción
zarse son los pequeños y homogéneos, que tienen la capacidad colectiva, aunque las motivaciones y los mecanismos son distin-
de "cerrarse" al exterior y distribuir beneficios exclusivamente tos. Sin embargo, entender bajo qué condiciones puede ocurrir
entre sus miembros. Las OSC que tienen mayor probabilidad de un intento de influencia es distinto de entender bajo qué condi-
resolver sus problemas de acción colectiva son las que cuentan ciones éste puede ser eficaz.
con la participación de emprendedores altamente motivados o Burstein y Linton (2002) presentan una evaluación más sobria
del argumento de oportunidades políticas (similar a la de •Giug-
con el respaldo de sponsors consecuentes. La segunda lectura (que
no implica una refutación de la anterior) es que los grupos y las ni, 1998). En su modelo, las decisiones gubernamentales pueden
organizaciones que satisfacen estos requisitos son muy pocos. obedecer a tres fuentes de influencia: la presión de las organiza-
Burstein y Sausner concluyen (2005) que las condiciones de reso- ciones de los movimientos sociales, la de los partidos políticos y
lución de los problemas de acción colectiva son muy exigentes y las demandas difusas y no organizadas de la opinión pública. Los
en consecuencia debería sorprendernos que algunas organiza- resultados revelan que si bien las decisiones gubernamentales fre-
ciones estén en condiciones de intervenir eficazmente en la cuentemente coinciden con las preferencias de las organizaciones
arena pública. Algunos estudios agregan que es probable que una de los movimientos sociales y las de los partidos, rara vez lo hacen
mayoría de esas pocas organizaciones representen a los sectores sin la mediación de la opinión pública o en contradicción con los
sociales de más altos ingresos y nivel de instrucción. objetivos de supervivencia electoral de los funcionarios. Los auto-
Pero el esfuerzo necesario para movilizar recursos no puede res interpretan estos resultados como prueba de que los intereses
considerarse de modo independiente de las oportunidades de organizados, tanto en forma de partidos políticos como de orga-
acción política que ofrece el contexto social e institucional. La nizaciones autónomas de la sociedad civil, rara vez tienen peso
perspectiva de acción colectiva del enfoque anterior puede político propio suficiente como para orientar la política pública
entonces vincularse con los argumentos de estructura de oportu- en contra de las intenciones de los funcionarios y las preferencias
nidades. Esas estructuras son tanto más propicias cuanto mayor de los votantes no organizados. Burstein y Sausner (2005) com-
III

1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 53


1 ,•... 52 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL
• I
Un desarrollo más sistemático del argumento de oportunida-
plementan esa interpretación, agregando que la debilidad de las
des políticas demanda, nuevamente, un análisis detallado de los
organizaciones de los movimientos sociales puede atribuirse a la
incentivos, las trayectorias y las aspiraciones de los funcionarios \
.relativa infrecuencia de la acción colectiva autónoma.
electos, los designados y las organizaciones partidarias de las que \
Si bien la mayoría de los estudios citados analiza procesos polí-
ellos participan.
ticos en los Estados Unidos y puede entonces reflejar caracterís-
ticas particulares de esa sociedad y ese sistema político, la estruc-
tura teórica del argumento es persuasiva y puede adaptarse a
MECANISMOS DE INCIDENCIA: HALLAZGOS COMUNES DE LOS
otros contextos nacionales. Las conclusiones para el análisis de
ESTUDIOS Y LA EXPERIENCIA DE INICIATIVAS
la incidencia de las OSC sobre las políticas públicas son relativa-
Como se señala más arriba, no es posible elaborar una teoría
mente simples pero importantes: general sobre las condiciones de incidencia de las OSC en las
políticas públicas. Sin embargo, a partir de las enseñanzas de los
• Primero, la organización para la incidencia política demanda la casos exitosos (incluyendo las de los proyectos acompañados
resolución de problemas de acción colectiva exigentes que pre-
desde DilaAlivAs) puede identificarse una colección ilustrativa de
sentan desafios de distinta intensidad para diferentes grupos.
mecanismos a través de los cuales esa incidencia tiene lugar. El
• Segundo, el nivel típico de esfuerzos de incidencia debería ser
documento Experiencias.., ofrece un análisis preliminar de dichos
bajo y tanto más bajo cuanto más cerrado se perciba el sistema
mecanismos. Aquí se reseñan algunos de esos argumentos y se los
político. La "cerrazón" del sistema político puede manifestar-
compara con los hallazgos de los estudios internacionales.
se como violación de las garantías formales de participación y
Como es costumbre en la literatura sobre este tema, el análisis
competencia política o como imposición de barreras institu-
se divide de acuerdo con las etapas de la política pública. Para
cionales a la formación de nuevos grupos políticos, incluyen-
cada etapa se indica el mecanismo de incidencia y la "ventaja com-
do nuevos partidos.I 2 parativa" de las OSC con el que está asociado. Por "ventaja com-
• Tercero, el éxito de los esfuerzos de incidencia "desde afuera" parativa" entendemos los atributos que las OSC están en mejores
que efectivamente se realizan depende de la adaptación a los
condiciones de desarrollar respecto de otro tipo de organizacio-
incentivos y metas políticos de los actores "de adentro". Aún
nes. Esto no implica que sean atributos exclusivos de este tipo de
más, si el argumento de Goldstone es correcto (como también
organizaciones ni que todas las OSC los desarrollen en la misma
sugiere González Bomba!, 2003), lo que puede parecer acción
magnitud o con la misma facilidad. La evidencia sugiere (aunque
política "desde afuera" en algunos casos es estrategia política
no demuestra categóricamente) que estos atributos están asocia- \
impulsada "desde adentro".
dos con las experiencias de intervención política exitosa.
Entla etapa de constitución de la agenda pública, las OSC inter-
vienen a través de dos mecanismos fundamentales: la producción
12 Un argumento como éste permitiría explicar la diferencia en los r■ p•rtirm•rste y fiable V la difusión onor'tUna de esa
niveles de actividad política de las OSC que desempeñan actividades
en distintas provincias argentinas, así como la concentración de la
acción en el nivel nacional, que presenta oportunidades de acción El primero de estos mecanismos resuelve asimetrías de informa-
más propicias aunque no necesariamente promesas de impacto más ción entre funcionarios y ciudadanos, entre legisladores y funcio-
alto.
LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL 1.. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 55
54

narios del Poder Ejecutivo o entre miembros de distinto nivel de El facilitamiento de negociaciones intragubernamentales con- 1
los partidos políticos. Las partes "desposeídas" de información siste en la formulación de las opciones de decisión en términos
sufren esa desposesión como resultado de problemas de acción aceptables y creíbles para las partes y en el monitoreo sobre el
colectiva asociados con su producción. Típicamente, la producción cumplimiento de los términos de los acuerdos. Funcionando
e interpretación de esa información requiere de inversiones impor- como mecanismo de "compromiso", las OSC pueden facilitar la
tantes de recursos financieros y humanos. La motivación, la forma- negociación reduciendo la incertidumbre de los directamente
ción profesional y el acceso a fuentes de financiamiento permite a involucrados. El papel facilitador no implica necesariamente la
las OSC resolver esos problemas más fácilmente que otro tipo de adopción de una posición "amistosa" respecto de los negociado-
organizaciones. Adicionalmente, algunas OSC pueden ser voceras res. Por el contrario, la credibilidad de las OSC, como la de todo
más creíbles de este tipo de información puesto que típicamente mediador, descansa en última instancia en la amenaza potencial

1 \. no se las percibe como actores motivados electorahnente y las moti-


vaciones políticas no electorales son más dificiles de interpretar.
La difusión oportuna de información (igualmente pertinente
de imposición de castigos. En este caso el castigo puede consistir
en la difusión pública de información sobre las negociaciones o
el cumplimiento de los acuerdos. Dependiendo de las circunstan-
y fiable) puede imponer "costos de reputación" (Peruzzotti y cias, esta difusión puede implicar costos de reputación y consti-
Smulovitz, 2002) que comprometan las oportunidades de super- tuir entonces un disuasivo electoral poderoso. Estas observacio-
vivencia electoral de los funcionarios electos. nes coinciden con los hallazgos de Raustiala (1997) acerca del
Los mecanismos descriptos coinciden con los hallazgos de papel de las OSC en las negociaciones internacionales.
diversos trabajos de la literatura especializada (Braun, Chud- En_la etapa de implementación las OSC pueden intervenir a
novsky et al., 2007; Chinnok y Salamon, 2002; Raustiala, 1997; través del conocido mecanismo de distribución de bienes -y servi-
Villar, 2003).

1 En la etapa de decisión, las OSC pueden intervenir a través de


dos mecanismos fundamentales: difundiendo ejemplos de inno-
vación en el diseño de políticas públicas y monitoreando las nego-
ciaciones intragubernamentales. La difusión de ejemplos de
innovación está asociada con las ventajas de localización, tamaño
de segmentos de 1,1„pobladki,~
el Estado. En los primeros dos casos, operan las ventajas de tama-
y flexibilidad de las OSC. La localización facilita la recolección de ño, localización y flexibilidad que ya hemos comentado. En el ter-
información sobre las necesidades, demandas y capacidades . de cero, las capacidades de advocacy y movilización descriptas abun-
_ las poblaciones. El tamaño y la flexibilidad reducen el costo de dantemente en la literatura especializada (Andrews y Edwards,
reversión en el caso en que las innovaciones no alcancen los resul- 2004; Nicholson-Crotty, 2007) y las capacidades de resolución de
tados esperados. Por "flexibilidad" entendemos la relativa simpli- problemas de acción colectiva resultantes de estrategias exitosas
cidad organizacional, la fluidez de las estructuras de división de, de movilización de recursos de acuerdo con la lógica descripta
-- —...„-----
tareas, autoridad y regimenes de remuneración (incluyendo la más arriba.
posibilidad de contar con trabajo voluntario). Villar (2003) coin- Finalmente, en el monitoreo y,,esluación delaspólíticáspúbli-
cide con este hallazgo, aunque sitúa la innovación en otra etapa casse_pone us_naecanismes-y -las'ráp-árrdátlrrd-e-pro—
del proceso de conformación de políticas. ducción de información analizados en relación con la etáRlde
56 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL 1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 57

constitución de la agenda. Esta coincidencia no es sorprenden- 114


Mecanismos de incidencia y ventajas comparativas de
te, ya que la intervención en la conformación de la agenda públi-
las OSC
ca puede ser juzgada como resultado de un juicio sobre las polí-
ticas implementadas anteriormente. Etapa de la Mecanismo de Ventaja comparativa
política pública incidencia de las OSC
Para facilitar el análisis de la correspondencia entre etapas,
mecanismos y ventajas, la tabla 1 sintetiza lo expuesto en esta • Resuelven asimetrías de
información y problemas
sección. de acción colectiva en
Constitución Producción de
de la información la producción de
agenda pública pertinente y fiable. información.
• Resuelven problemas de
IV. CONCLUSIONES
credibilidad y conflictos
de intereses.
Es probable que para nombrar a las OSC la multiplicidad de sig-
Difusión oportuna de • Imponen costos
nificados y las denominaciones negativas sean inevitables. En electorales.
información.
efecto, el espacio de la sociedad civil no es estatal ni mercantil; es
un ámbito en el que se desarrollan asociaciones voluntarias con Facilitamiento • Resuelven problemas de
de compromiso y
características, historias, capacidades y propósitos muy diversos. negociaciones credibilidad.
¡ Decisión
Aunque inevitables, la multiplicidad de significados y las deno- intragubernamen tales. • Imponen costos electorales.
minaciones negativas hacen más difícil el análisis de la inciden- Innovación y difusión
cia de estas organizaciones sobre las políticas públicas, y para de ejemplos.
• Explotan ventajas de
comenzar a superar estas dificultades es necesario adoptar una Distribución de bienes escala, localización y
perspectiva política. Desde este punto de vista, lo distintivo no y servicios. flexibilidad.
es el carácter voluntaririla ausencia de fines de lucro de dichas
Implementación Refuerzo de impacto de
políticas públicas.
qué pueden ser perseguidos2 resistidos_Raptrc)s^ grupósza_ iras Remoción de obstáculos • Desarrollan estrategias
orgáliz—a-Ciófié"áa,áiár—
eamd—elas OSC muchas veces se lleva adelan- para el acceso a de advocacy y movilización.
te -eirfirónbTe del bien público y la adopción misma del rótulo servicios • Resuelven problemas
públicos. de acción colectiva.
"organización de la sociedad civil" es el resultado de una elección
estratégica que tiene motivaciones y consecuencias políticas. El • Resuelven asimetrías de
primer paso en la tarea analítica es adoptar definiciones que sean información y problemas
de acción colectiva en la
sensibles al carácter político de las intervenciones de este conjun-
Monitore° Producción de producción de
to de organizaciones y que reconozcan que las referencias al inte- y información pertinente información.
rés público, al bien público o a la sociedad civil forman parte de evaluación y fiable. • Imponen costos
retóricas políticamente motivadas y políticamente connotadas. electorales.
• Resuelven problemas de
En este sentido, la creciente visibilidad e incidencia que regis- compromiso y credibilidad.
tran los estudios sobre estas organizaciones parece resultar de
58 LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL 1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 59

cambios en las estructuras de oportunidades políticas que, por tibles, deben reconocer que el carácter civil de las asociaciones
un lado, hacen más probable y más relevante la intervención de voluntarias depende de la existencia de una autoridad pública
asociaciones voluntarias y, por otro, hacen más potente la refe- común y eficaz y que el ejercicio democrático de esta autoridad
rencia a "la sociedad civil" como argumento político. En otras común no puede prescindir de los canales de representación par-
palabras: la creciente incidencia política de las OSC es, en parte, tidarios y electorales. Una defensa democrática de la sociedad
un fenómeno nuevo y en parte un nuevo modo de presentarse civil no puede ser antiestatal ni antipartidaria.
adoptado por actores más conocidos. La nueva estructura de Es fácil advertir que en las últimas décadas las OSC se han vuel-
oportunidades está asociada con la democratización, la amplia- to actores políticos más relevantes. Dados la teoría y los datos dis-
ción temática y la redefinición económica del Estado, así como ponibles, es más dificil especificar en qué consiste y de dónde
con algunos aspectos de la llamada globalización. Estas grandes surge esa relevancia. En primer lugar, elaborar una teoría gene-
tendencias hacen más probable la intervención política desde la ral de la eficacia política de las OSC es una tarea tan sencilla y
sociedad civil o en nombre suyo pero, para evaluarlas adecuada- potencialmente fructífera como elaborar una teoría general
mente, deben tenerse en cuenta dos cosas. Primero, que no son sobre el comportamiento de los animales. Hay tantos tipos de
tendencias unidireccio-nales ni irreversibles; destacan, simple- organizaciones, con formas, propósitos y capacidades tan diver-
mente, dinámicas predominantes durante las últimas décadas, sos, que cualquier enunciado general resultaría, por fuerza, exce-
pero que pueden estancarse o revertirse. En segundo lugar, no sivamente abstracto y de dudosa utilidad explicativa. Si queremos
afectan a todas las OSC por igual sino que ofrecen oportunida- saber qué es lo que un determinado ente social es capaz de hacer
des de intervención eficaz que, de acuerdo con el contexto insti- cuando interviene en los procesos de política pública, necesita-
tucional y social, y las características de las propias organizacio- mos saber cuáles son los atributos relevantes de ese ente. Los estu-
es, pueden aprovecharse en distinta medida. dios aún no han producido una tipología concluyente con acep-
En general, el hecho de que los órdenes políticos estén más tación más o menos amplia. Tampoco existen explicaciones
abiertos a la participación de las asociaciones voluntarias es eva- convincentes sobre la fuente de influencia política de las asocia-
luado positivamente y presentado como un avance democrático. ciones voluntarias. Estas insuficiencias obedecen a dificultades
La justificación democrática más fuerte de esta evaluación está teóricas y metodológicas.
fundada en un argumento de pluralidad. Pero ésta no es la única En primer lugar, se tiende concebir cualquier intervención de
justificación posible ni la más frecuente. También se valora a las las OSC en la política pública como si se tratara de una instan-
OSC como promotoras del pluralismo político, como comple- cia de "incidencia". Esta tendencia es problemática porque,
mento de la representación partidaria y electoral, y como fuen- siguiendo el uso común, parece conveniente reservar el térmi-
tes de eficiencia en la asignación de recursos. En el discurso no "incidencia" para las intervenciones que cambian el conteni-
corriente, estas valoraciones pueden aparecer combinadas de dis- do o alteran el curso de la política pública en algún sentido. No
tintas formas. La combinación no elimina su independencia con- todas las intervenciones de las OSC satisfacen este requisito. En
ceptual y no siempre resulta en argumentos lógicamente consis- segundo lugar, la incidencia, aun concibiéndola en sentido
tentes. Y lo que es más importante para nuestros propósitos, no estricto, puede adoptar muy diversas formas. Esa diversidad
todas las justificaciones de la intervención política de las OSC son corresponde con las etapas de las políticas públicas, la variación
compatibles con los valores democráticos. Para que sean compa- entre los sectores, la interacción entre los poderes de gobierno
6o LA INCIDENCIA POLÍTICA DE LA SOCIEDAD CIVIL e flá 1. LA INCIDENCIA DE LAS OSC EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS 61

y la arquitectura de niveles de gobierno. Hasta el momento, los REFERENCIAS


estudios han cubierto un área muy pequeña de este amplio .
territorio de posibilidades de incidencia y algunas experiencias Acuña, c. H. , E Jelin y G. Kessler (eds.), Políticas sociales y acción local: diez estudios de
de incidencia relevantes aguardan un tratamiento teórico ade- caso, Buenos Aires, CLASPO-Argentina / Instituto de Desarrollo Económico y
Social / Universidad de San Andrés / Universidad de General Sarmiento, 2007.
cuado . En tercer lugar, carecemos de razones teóricas fuertes
para fundar una expectativa sobre la incidencia de las OSC. No Andrews, K. T. y B. Edwards, "Advocacy organizations in the US political process",
Annual Review of Sociology 30, 2004, pp. 479-506.
sabemos estimar cuánto son capaces de incidir, con lo cual nos
Bennett, C. J., "Understanding ripple effects: The cross-national adoption of
resulta difícil evaluar cuánto y cómo inciden. Algunas de estas policy instruments for bureaucratic accountability", Governance-an International
dificultades teóricas derivan de, o se combinan con carencias journal of Polity and Administration 10(3), 1997, pp. 213-233.
metodológicas. Abundan los estudios de casos exitosos y escase- Braun, M., M. Chudnovsky, N. DUcoté y V. Weynrauch, "Lejos de Thinktanklandia':
an los estudios comparativos (con o sin técnicas estadísticas), de los institutos de investigación de políticas en los países en desarrollo", A. Garcé
y G. Uña (e s) Think tanks y políticas públicas en Latinoamédca, Buenos Aires, Pro-
modo que el conocimiento progresa a partir de inducciones ins-
meteo, 2007.
piradas en la observación de pocos casos cuya relevancia gene-
,. Bryce, H. J., "Nonprofits as social capital and agents in the public policy process:
ral es difícil de precisar. Toward a new paradigm", Nonprofit atad Voluntary Sector Quarterly 35(2), 2006,
A pesar de estas dificultades, durante la implementación de INT- pp. 311-318.
CIATIVAS hemos sido testigos de distintas experiencias de inciden- 11 Burstein, P. y S. Sausner, 'The incidence and Impact of policy-oriented collective
cia que, según estimamos y de acuerdo con el título del progra- action: Competing views", Sodokagical Forum 20(3), 2005, pp. 403-419.

ma, han contribuido al fortalecimiento democrático y social. Burstein, P., "Policy domains: Organization, culture and policy outcomes",
Annual Review of Sociology 17, 1991, pp. 327-350.
Hemos documentado estos procesos y analizado los mecanismos
que los alimentan. Las conclusiones de nuestros análisis coinci- Burstein, E y A. Linton, "l'he impact of political parties, interest groups and
social movement organizations on public policy: Some recent evidence and
den con las de buena parte de la literatura internacional. En un theoretical coricerns", Social Forms 81(2), 2002, pp. 381-408.
sentido, la coincidencia es alentadora: indica que hemos elegido Campetella, A. L González Bombal y M. Roitter, "Definiendo al sector sin fines
bien los proyectos a acompañar y que hemos evaluado su imple- de lucro en la Argentina", M. Roitter y I. González Bombal (eds.), Estudios
mentación de acuerdo con criterios aceptables para otros obser- sobre el sector sin fines de lucro en la Argentina, Buenos Aires, Centro de Estudios
de Estado y Sociedad, 2000, pp. 15-30.
vadores del fenómeno. En otro sentido, la coincidencia sugiere
Carey, J. M., "Parchment, equilibria and institutions", Gomparative Political Studies
que quienes estamos interesados en entender las capacidades 33(5-7), 2000, pp. 735-761.
políticas de las OSC debemos ampliar nuestra imaginación teó-
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