“¿Qué, pues, es Pablo, y qué es Apolos? Servidores por medio de los cuales
habéis creído; y eso según lo que a cada uno concedió el Señor. Yo planté,
Apolos regó; pero el crecimiento lo ha dado Dios. Así que ni el que planta
es algo, ni el que riega, sino Dios, que da el crecimiento. Y el que planta y
el que riega son una misma cosa; aunque cada uno recibirá su recompensa
conforme a su labor” (1ª corintios 3: 5; 8).
Introducción
Aplicación
Pablo enseña que él fue el instrumento que Dios uso para plantar la semilla
del evangelio en el mundo gentil (parábola del sembrador Mateo 13:3-8), el
puso el fundamento, la base coloco la semilla etc. (leer 1ª Corintios 3:10-
11) Plantar significa meter en tierra una planta o un vástago para que arraigue
en un terreno, asentar, fijar, colocar una cosa en el lugar que debe, fundar,
establecer etc., esto habla en términos generales de la evangelización (Mateo
28:19, Marcos 16:15, Hechos 1:8) el Apóstol tuvo el gran privilegio de
llevar la semilla del evangelio a un mundo que desconocía a absolutamente
el plan de Dios y plantar esa semilla en sus corazones.
Pablo nombra a Apolos como quien regó: ¿Quién fue Apolos? Judío nacido
en Alejandría, era elocuente y poderoso en las escrituras del A.T. al principio
solo conoció el bautismo de Juan. Luego trabajó en Corintio a la partida del
Apóstol Pablo de esa ciudad. Era un gran orador, fuerte predicador y se dice
que es elocuente expositor al referirse a temas doctrinales. El Apóstol dice:
“Apolo regó” dando a entender que Apolos hizo una labor posterior diferente
pero no menos que la había realizado en el centro de la Iglesia Local.
Regar
Plantar
Crecimiento
Palaras finales