MACRONUTRIENTES EN
EL SUELO AGRÍCOLA
POTASIO
INTEGRANTES:
QUEZADA SANCHEZ WILMER
RODRIGUEZ GONZALES, ROYER
ROSARIO ANGULO, JUNIOR
SILVA MUÑOZ, EDUARDO
YALLE PICHON, FLOR DE MARIA
DOCENTE:
ING.BRUNO REYES
GRUPO: N°:
“A” 3
CICLO:
IX
TRUJILLO-PERU
2018
MACRONUTRIENTES EN EL SUELO AGRÍCOLA
INDICE
Página | 1
MACRONUTRIENTES EN EL SUELO AGRÍCOLA
POTASIO
La calidad y cantidad de arcillas de un suelo son los principales parámetros que definen el
contenido total de K de un suelo. En general los suelos con dominancia de arcillas del tipo
2:1 (vermiculita y esmectita) contienen mucho más potasio que los suelos con predominio de
caolinita.
La suma del K intercambiable y de solución de suelo son los que dan lugar a la fracción
disponible del K en el suelo y únicamente constituyen alrededor del 0.2 – 5 % del K total.
Página | 3
MACRONUTRIENTES EN EL SUELO AGRÍCOLA
De acuerdo con estas relaciones, un suelo arenoso, con baja capacidad de intercambio
catiónico, tiene baja capacidad tampón de K. Es decir, es de baja capacidad para mantener la
concentración de K en la solución del suelo cuando las plantas lo retiran durante la etapa de
crecimiento o cuando se pierde por lixiviación. Por el contrario, un suelo con mayor
capacidad de intercambio catiónico puede ser capaz de mantener un suministro relativamente
constante de K en la solución del suelo a través del desarrollo de un cultivo.
(Mutscher, 1997)
El potasio se encuentra en el suelo en distintos silicatos que forman parte de las rocas de
origen magmático tales como micas, feldespatos, etc. También se combina con la materia
orgánica, aunque por su escasa transformación en formas minerales es poco importante.
Además, existen formas iónicas libres en la solución del suelo, adsorbidas en el complejo de
cambio y fijadas en determinadas arcillas.
Página | 4
MACRONUTRIENTES EN EL SUELO AGRÍCOLA
TRANSFORMACIONES DEL
POTASIO EN EL SUELO
Página | 5
MACRONUTRIENTES EN EL SUELO AGRÍCOLA
Debido a su baja carga y pequeño radio iónico, el potasio es fácilmente absorbido por las
raíces sobre todo por difusión, pudiendo incluso absorberse cantidades superiores a las
necesarias sin que por ello se produzcan efectos negativos.
FERTILIZACIÓN POTÁSICA
Una vez determinadas las características físicas y muy especialmente el tipo de arcillas del
suelo, así como las propiedades químicas, en particular el contenido en potasio cambiable, el
calcio activo y el magnesio de cambio, y en función del potasio extraído por las cosechas y
los restos de estas, se calculan las cantidades de potasio a añadir a través de la fertilización.
La movilidad de este elemento aconseja que, sobre todo en sistemas de regadío, se consideren
las pérdidas por lavado. Además, los ritmos de absorción de potasio por los cultivos son muy
diferentes según los distintos sistemas de laboreo, convencional o mínimo.
Página | 6
MACRONUTRIENTES EN EL SUELO AGRÍCOLA
Textura del suelo y tipo de arcillas: en suelos arenosos, con menor poder de retención de
agua, a igual contenido en potasio asimilable, mayor concentración en la solución del suelo.
Cuanto mayor es el contenido en arcilla, mayor es su capacidad de fijación de iones potasio,
en la superficie e interlaminarmente.
Relación entre los cationes de cambio: además de los contenidos absolutos en potasio, debe
de analizarse la relación y contenido del resto de cationes: Ca, Mg y Na.
Igual que se indicó para el fósforo, el potasio se aplica en presiembra o en siembra junto con
este elemento y el nitrógeno. Se aconsejan aportaciones más tempranas en el caso de
aplicación de fertilizantes con cloruro potásico, por su influencia sobre la salinidad del suelo.
En determinados cultivos, el fraccionamiento del potasio es muy eficaz, tales como frutales,
praderas, alfalfares, etc.
(tecnicoagricola, 2013)
Página | 7
MACRONUTRIENTES EN EL SUELO AGRÍCOLA
FERTILIDAD
Con respecto a fertilidad tendríamos que considerar los distintos requerimientos nutricionales
de los cultivos con el fin de tener una idea más cuantitativa de las limitaciones. Para Potasio:
Es muy requerido en los cultivos de producción de azúcares o almidones, como: frutales (vid,
banano, ciruelo, etc.), sacaríferas (remolacha azucarera, caña de azúcar) y otras como papa.
También en los de producción de fibras como algodón y yuca. Además, es especialmente
necesario para cultivos como: tabaco, tomate, maíz, sorgo, curcubitáceas y leguminosas
(poroto y alfalfa). En general las plantas gramíneas son más hábiles para captar el potasio del
suelo que las de hoja ancha.
Página | 8
MACRONUTRIENTES EN EL SUELO AGRÍCOLA
en estas fuentes está ampliamente disponible para las plantas de forma similar a las fuentes
inorgánicas. Las aplicaciones repetidas en grandes cantidades de abonos resultan en la
acumulación de potasio en el suelo, que puede resultar en consumo de lujo por las plantas. Es
necesario un análisis químico de estos materiales para saber su composición y con ello
obtener el mayor beneficio posible. Es necesario conocer el origen de los materiales, ya que
el compostaje o la digestión animal producen nutrientes.
Sulfato de potasio. Cuando este material proviene de fuentes naturales se permite su uso en
la agricultura orgánica. No se puede hacer proceso alguno sobre el material, salvo la
trituración y tamizado. Su uso no está permitido en algunos países europeos sin el permiso
especial de alguna agencia certificadora. De forma general contiene 40 % de potasio y 17 %
de azufre.
Algas marinas. Las algas marinas se pueden utilizar de manera directa como fuente de
potasio o se puede extraer el potasio soluble. Estas fuentes de potasio contienen menos del 2
%, el cual es soluble. Aunque su costo puede ser una limitante por la cantidad que se
requeriría para satisfacer la demanda de los cultivos.
V. EPOCA DE APLICACIÓN
Las épocas más adecuadas para su aplicación son: julio a septiembre (60% del total) y
diciembre a enero (40% del total). Las dosis de potasio a aplicar dependen de la
disponibilidad de este elemento en el suelo, de la concentración en las hojas y de los
requerimientos del cultivo. En suelos arenosos y sin fertilización básica se sugiere la
aplicación de 20 kg de K2 O ha -1 p (2⁰ año), 30 kg K2 O ha-1 (3⁰ año), 40 kg K2 O ha-1 (4⁰
Página | 9
MACRONUTRIENTES EN EL SUELO AGRÍCOLA
Cuando la deficiencia principal del suelo es potasio o sus niveles son adecuados y nos
vemos en la necesidad de reponer el potasio que consumen las plantas.
Cuando los cultivos consumen alta cantidad de potasio como es en el caso del cultivo
del tomate o el pimentón, por ejemplo.
(Ellena, s.f)
Página | 10
MACRONUTRIENTES EN EL SUELO AGRÍCOLA
más importantes para la producción, pero no se deben olvidar aspectos de la fertilidad física
(profundidad de suelo, compactación, aireación, drenaje, variables del agua del suelo) que a
menudo son más limitantes para el crecimiento del cultivo y pueden dificultar la asimilación
de nutrientes. Tampoco debe dejarse de considerar la fertilidad química del suelo (capacidad
de intercambio catiónico, contenido de carbonatos, salinidad, sodicidad, pH). Para mejorar la
fertilidad del suelo y la productividad de cualquier cultivo no basta sólo la aplicación de
nutrientes, se deben considerarse todos los factores antes mencionados de lo contrario sólo se
harán gastos innecesarios e inclusive se puede agravar aún más el problema. Figura 1.
Deficiencia de potasio en maíz. Aunque en muchos suelos el potasio está presente en grandes
cantidades sólo una pequeña porción es la disponible para los cultivos, de manera que en
muchos casos los cultivos manifiestan carencia de este nutriente.
Los macronutrientes (N, P y K) son requeridos por los cultivos en cantidades considerables.
El suelo por su parte tiene un suministro, a menudo, reducido de estos nutrientes. Estos
nutrientes son los que han concentrado la mayor parte de la atención en las prácticas de
fertilización, y los que han conseguido incrementos en el rendimiento más espectaculares en
la mayor parte de los cultivos. Tanto las fuentes que los suministran en el suelo, como la
retención o la solubilidad son muy diferentes entre ellos. Por las razones anteriores, los planes
y técnicas de fertilización deben presentar diferencias que ayuden a mejorar o manejar más
eficientemente cada uno de los nutrientes en particular. Las necesidades nutrimentales están
definidas por la especie, donde es necesario considerar cantidad, calidad, forma y momento
de aplicación.
La fertilización potásica
Este nutriente esencial para las plantas resulta muy abundante en muchos suelos, y en algunos
casos puede estar presente en aguas superficiales o subterráneas. Es frecuente encontrar
potasio en los minerales del suelo (arcillas). Por la abundancia del potasio en el suelo se
pensaría que no es un factor limitante para producir, pero desgraciadamente de la cantidad
total de potasio en los suelos sólo una pequeña parte está disponible o potencialmente
aprovechable para las plantas. Para describir con mayor detalle, en el suelo pueden
encontrarse tres situaciones: 1. Potasio en minerales con liberación muy lenta (despreciable);
2. Potasio intercambiable de liberación rápida; y 3. Potasio en solución del suelo de inmediata
asimilación. Las dos últimas formas de potasio en el suelo son quienes abastecen a la planta.
Página | 11
MACRONUTRIENTES EN EL SUELO AGRÍCOLA
Los minerales de potasio son altamente solubles; sin embargo, el suelo suele retener bien el
potasio disponible, salvo en caso de suelos muy arenosos. En suelos muy arcillosos puede
darse un fenómeno de inmovilización del potasio, donde este queda ligado a formas
minerales por mucho tiempo.
La solubilidad del potasio en los fertilizantes no supone un problema. El más más económico
es el cloruro potásico, y es altamente soluble. De modo que el potasio aportado con
fertilizantes minerales será inmediatamente asimilable. Aunque el potasio no se evapora, y el
riesgo de pérdida por lavado es reducido, la facilidad de asimilación del potasio puede
perderse, en este caso, por fijación a las arcillas del suelo. La fijación de este potasio puede
durar mucho tiempo hasta el momento en que surja una alteración en los minerales.
Los aportes orgánicos tienen un contenido importante en potasio, una parte en forma soluble
y otra parte ligada a las estructuras orgánicas (no inmediatamente asimilable). La liberación
de la parte ligada a formas orgánicas será al ritmo con que se mineralicen estos materiales. El
potasio queda contenido en gran parte de las estructuras vegetativas de las plantas, de modo
que si se retornan al suelo los restos de cosechas se repone la parte más importante del
potasio extraído.
Página | 12
MACRONUTRIENTES EN EL SUELO AGRÍCOLA
Al igual que el resto de los nutrientes, para tener una orientación robusta a cerca de la
fertilización potásica es necesario saber el contenido de este nutriente en el suelo. En base a
los resultados del análisis de suelo se puede decidir entre aumentar, mantener o reducir la
dosis de fertilización. En suelos de textura media, puede servir el siguiente criterio: a) en
suelos con contenidos bajos o muy bajos de potasio se puede incrementar en un 25 o 50 %
respectivamente; b) en suelos con contenidos medios se puede únicamente incorporar las
demandas del cultivo en cuestión; y c) en suelos con contenidos altos o muy altos se puede
optar por suspender temporalmente la aplicación de este nutriente.
El análisis de suelo permite conocer el estatus del potasio disponible en el suelo. Este dato,
junto con las necesidades del cultivo, es fundamental para diseñar adecuadamente los
programas de fertilización. Existen diversos métodos para la determinación de potasio
disponible en el suelo. El más generalizado es la "extracción con acetato de amonio" en el
que se obtiene la información del potasio intercambiable y potasio en solución del suelo. Éste
método es el que recomienda la NOM-021 para analizar potasio en los suelos de México
Página | 13
MACRONUTRIENTES EN EL SUELO AGRÍCOLA
Página | 14