Es la fuerza que producen los cuerpos en rotación. Para entender cómo surge el
torque en un motor de combustión, debemos entender el mecanismo en un motor
de Diesel. La explosión del combustible en el cilindro genera la fuerza que actúa a
través de pistones y biela sobre el cigüeñal. En este caso, el torque es el producto de la fuerza del pistón
y la longitud del muñón del cigüeñal. Es muy similar al mecanismo de pedales de una bicicleta. Entre más
fuerza se aplique con los pies al pedal, mejor capacidad de arranque y ascenso va a tener.
En todos los motores de combustión interna el torque no es constante, depende de la velocidad de giro
del motor (rpm).
Durante el funcionamiento del motor, la longitud del muñón del cigüeñal es siempre la misma, sin
embargo, la fuerza del pistón varía según las revoluciones del motor. A revoluciones muy bajas, la
fuerza de combustión de la explosión todavía es débil y, por lo tanto, el torque es bajo. Sin embargo,
cuando el conductor acelera, entrega más combustible al motor, haciendo que aumente la presión de
combustión, la velocidad de giro y por tanto, también el torque.
A un determinado régimen de revoluciones del motor se alcanza la mayor presión de combustión y por
lo tanto, el torque máximo. Este es el este punto más eficiente de combustión.
Sin embargo, si el número de revoluciones sigue aumentando – es decir, se acelera más – vuelve
a disminuir el torque. Esto se debe a que ya no hay suficiente tiempo para aumentar la presión de
combustión en el cilindro; el motor sencillamente gira más rápido. Por lo tanto, se hace menos eficiente
la combustión de los gases, disminuyendo su torque.
CONCLUSION