La radio es el primer medio de comunicación masivo en que la información llegaba en un
espacio de pocas horas, y fue el resultado de muchos avances tecnológicos ligados al desarrollo de la electricidad, a fines del siglo XIX. El primer paso para la invención de la radio como medio de comunicación fue la invención del telégrafo, en 1833 por Friedrich Gauss, y la invención del teléfono en 1876 por Alexander Graham Bell. En esa misma época, James Maxwell y Heinrich Hertz realizaban investigaciones sobre las ondas electromagnéticas. Un italiano llamado Guillermo Marconi sabía de estas investigaciones, y, como era un hombre que le buscaba los adelantos científicos una aplicación comercial inmediata, inventó el telégrafo inalámbrico en 1897. Este fue el segundo paso para la creación del radio. Del sistema Morse a la transmisión de la voz solo había un paso. En la navidad de 1906, se realizó la primera transmisión de la voz a grandes distancias, en las costas del Atlántico Norte. El hombre responsable de esto fue Reginald Fessenden, quien construyó un transmisor capaz de transmitir señales más complejas que las del código morse. Los receptores fueron los telegrafistas de los barcos que se encontraban en altamar en ese momento. En ese mismo año se descubrió que el germanio conectado a un circuito eléctrico era capaz de recibir señales de radio, lo que abarataba los costos de los receptores. En esa época, Lee de Forest inventó el tubo de vacío, que son amplificadores que aumentan las señales de radio, tanto la transmisión como la recepción. Este invento permitió que los aparatos fueran más portátiles, y fueron instalados en los aviones de reconocimiento para dirigir el fuego de artillería durante la I Guerra mundial. En 1912, el ingeniero David Sarnhoff transmitió durante 3 días los sucesos del hundimiento del Titanic, manteniendo informada a la audiencia del desarrollo de la tragedia. Y llamando la atención pública. En 1916, Sarnhoff ideó un plan de desarrollo masivo de la radio, casi prediciendo el futuro con todos los servicios que luego daría la radio. Cuando el gobierno de los EE. UU. perdió el control sobre la radio, las compañías RCA, fundada en 1919, y la compañía Westinghouse empezaron a competir entre ellas. Esta última compañía no tuvo mucho éxito ya que la mayoría de las patentes las tenía RCA. Frank Conrad, que estaba a cargo de los transistores de Westinghouse, instaló uno en su casa para poder trabajar de noche, durante los experimentos él ponía música clásica. Algunas personas que tenían radios de aficionados lo escuchaban, y pronto empezaron a pedir canciones por el teléfono. Conrad, molesto por las llamadas, pidió la ayuda de un comerciante de fonógrafos y pudo presentar un programa de música continua, 2 horas 2 veces a la semana. La cantidad de oyentes aumentó la demanda de los aparatos de radio, y Westinghouse instaló un transmisor mayor en Pittsburg, creándose la estación KDKA en 1920. En ese año, 1000 personas escucharon los resultados de la elección presidencial. En los años 50 la radiofonía alcanza más avances con la invención del transistor. En Colombia, fue el presidente Miguel Abadía Méndez quien inauguró, en 1929, la primera radiodifusora, llamada HJN. Unos meses más tarde nace, con el nombre de La Voz de Barranquilla, la primera emisora en esta ciudad de la Costa Caribe colombiana.