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Un aprendizaje fundamental

en la escuela que queremos


1. Introducción

El Proyecto Educativo Nacional establece, en su segundo objetivo
estratégico, la necesidad de transformar las instituciones de educación
básica de manera tal que aseguren una educación pertinente y de
calidad, en la que todos los niños, niñas y adolescentes puedan realizar sus
potencialidades como persona y aportar al desarrollo social del país.

Lograr este objetivo de política en el ámbito de MATEMÁTICA representa


un gran desafío, debido a los bajos resultados que se tienen y respecto de
los cuales es muy poco lo que se ha podido avanzar y porque se trata de
competencias y capacidades reconocidas mundialmente como cruciales
para aprovechar las oportunidades del siglo XXI, de una sociedad de
economías globales, con una acelerada producción de información de
diversa complejidad y de significativos avances científicos y tecnológicos
En este contexto, necesitamos transitar hacia un mayor
acceso, manejo y aplicación de conocimientos, en el que la
educación matemática se convierte en un valioso motor de
desarrollo económico, científico, tecnológico y social

Esto nos exige revisar, debatir, ampliar y enriquecer los enfoques


con que hemos venido trabajando; y modificar la idea de la
matemática como algo especializado sólo para estudiantes con
mayor disposición para aprenderla. Necesitamos asumirla como
algo fundamental para la vida, que tenga sentido y genere
motivación para seguir aprendiendo.
Reconociendo este desafío, se adopta un enfoque que conecte la
matemática con la vida, con lo que ocurre en el entorno inmediato y personal
de los estudiantes, así como en los diversos contextos sociales, económicos y
políticos de este escenario mundial.
Se trata de aprender a aplicar los conocimientos y contenidos matemáticos
en el análisis, la comprensión y la resolución de problemas y situaciones de
necesidad real.
Ello implica desarrollar en las aulas, capacidades cognitivas y actitudes
como la perseverancia, la confianza, la toma de decisiones, el trabajo
colaborativo, el sentido de logro entre otros.
El fascículo preparado por el MINEDU se encuentra organizado en tres
capítulos:
 En el primero se presenta algunas aproximaciones teóricas relacionadas
con el aprendizaje y el aprender a aprender matemáticas.
 En el segundo capítulo, se desarrolla el enfoque de resolución de
problemas, basado en el uso funcional de la matemática para el
cumplimiento de su rol social y sentar las bases para que los estudiantes
desplieguen plenamente sus capacidades y potencialidades.
 En el tercer y último capítulo se presentan las competencias y capacidades
matemáticas que desarrollarán los estudiantes a lo largo de su educación
básica
Las capacidades presentadas son seis y son trabajadas a
partir de una situación problemática que las moviliza en
forma simultánea, configurando el desarrollo de la
competencia.

Esperamos que este fascículo pueda serles de utilidad en


su labor cotidiana. Esperamos también sus aportes y
sugerencias para irlo mejorando en las próximas
ediciones, de manera que sea cada vez más pertinente y útil
para el logro de los aprendizajes a los que nuestros
estudiantes tienen derecho.
I. Buscando las piezas de un deseado rompecabezas:
aprender a aprender matemática
La matemática siempre ha desempeñado un rol fundamental en el
desarrollo de los conocimientos científicos y tecnológicos. En ese
sentido, reconocemos su función instrumental y social que nos ha
permitido interpretar, comprender y dar soluciones a los problemas
de nuestro entorno.
Todos los seres humanos, desde que nacemos hasta que
morimos, usamos algún tipo de aprendizaje matemático. Nacemos
sin saber matemáticas, pero el mundo está lleno de experiencias
que pueden convertirse en aprendizajes matemáticos utilizables en
diversas circunstancias.
Así, el niño que cuenta los dedos de su mano por primera vez
sabrá que en cada mano tiene cinco. Esto no lo exime de cometer
errores al contar una y otra vez sus dedos, sin embargo ayuda a
aprender.
Las experiencias cotidianas ayudan a aprender
matemáticas, también contamos con instituciones educativas en
donde se accede a una educación matemática formal. Se aprende a
comprender y producir textos matemáticos, a razonar
matemáticamente, a resolver problemas matemáticos, etc.
El aprendizaje de la matemática es interminable, por lo que
muchos eruditos, haciendo honor a la tradición socrática, declararon
que mientras más se aprende matemáticas, más falta por aprender.
El problema es cuando la matemática que aprendemos resulta
poco significativa, poco aplicable a la vida, o simplemente
aburrida, tanto que al dejar el colegio olvidamos lo que aprendimos
y no seguimos aprendiéndola por nuestra cuenta.
Si bien hay quienes aprenden la matemática por sí mismos, la
mayoría no lo hace. Necesitamos algún tipo de acompañamiento
para aprender matemática y reflexionar sobre nuestro aprendizaje.
Es en la educación matemática formal donde se puede ofrecer una
intervención pedagógica que nos posibilite tal desarrollo.
Esta tarea requiere esfuerzos, de los maestros, estimulando a
pensar a nuestros estudiantes, de autoridades educativas
comprometidas con el mejoramiento continuo de la educación
matemática, de instituciones educativas que provean
ambientes, recursos y materiales de alta calidad para estimular el
aprendizaje de la matemática, etc.
También de una sociedad educadora comprometida, que nos rete
a ser personas más propositivas y activas, no dependientes ni
pasivas; que demande usar el propio razonamiento para resolver
desde problemas cotidianos hasta problemas de gran
trascendencia.
1.1 APRENDER A APRENDER MATEMÁTICAS
¿Cómo tener estudiantes motivados a aprender matemáticas
y mucho más, a aprender a aprender matemáticas por sí
mismos? Requerimos ambientes educativos que brinden confianza
y tranquilidad, así como respeto mutuo, tolerancia y libertad, donde
se puedan generar dinámicas de aprendizajes significativos y de
reflexión crítica. La finalidad es propiciar el aprender y el aprender a
aprender matemática de manera fácil y profunda utilizando los
conocimientos matemáticos en diversas situaciones, no sólo en el
ámbito escolar sino también fuera de él.
El aprender a aprender matemáticas implica aprender a ser
perseverante y autónomo en la organización de nuestros
aprendizajes, reconociendo experiencias, conocimientos
previos, valores e implicancias de diversa índole, haciendo que
nuestros estudiantes sean eficaces en la construcción de sus
conocimientos y la toma de decisiones.
En la escuela la promoción de la competencia matemática se
da en torno a las capacidades de matematizar, elaborar y
seleccionar estrategias, a representar matemáticamente
situaciones reales, a usar expresiones simbólicas, a comunicar y
argumentar, a explorar, probar y experimentar.
Si los estudiantes adquieren estas capacidades y las usan en
su vida, adquirirán mayor seguridad y darán mayor y mejor sentido
a su aprendizaje matemático.
La matemática cobra mayor significado y se aprende mejor
cuando se aplica directamente a situaciones de la vida real.
Nuestros estudiantes sentirán mayor satisfacción cuando puedan
relacionar cualquier aprendizaje matemático nuevo con algo que
saben y con la realidad cotidiana.
Esa es una matemática para la vida, donde el aprendizaje
se genera en el contexto de la vida y sus logros van hacia ella.
Desarrollar habilidades de independencia y control sobre el
proceso de aprendizaje exige que los estudiantes reflexionen
sobre su propio aprendizaje, sean conscientes sobre cómo
aprenden, practiquen el auto cuestionamiento y usen de forma
abierta y flexible diversas estrategias para aplicar selectivamente
en la ejecución de determinadas tareas y actividades
matemáticas.

Por ello, es importante el rol del docente como agente


mediador, orientador y provocador de formas de pensar y
reflexionar durante las actividades matemáticas.
1.2 NECESIDAD DE PLANTEARNOS UN MODELO
FORMATIVO PEDAGÓGICO

Esta perspectiva de aprendizaje de la matemática obliga a repensar y


resignificar la manera como miramos la educación matemática de tal forma
que concuerde con las características del ciudadano que queremos y
necesitamos formar; el énfasis no estará, entonces, en memorizar el
conocimiento o en reproducirlo, por el contrario estará en desarrollar
saberes significativos y con sentido para que el estudiante, en un ambiente
de desarrollo de competencias, aprenda a usar la matemática en distintos
ámbitos de su vida y a aprender durante toda la vida.

Mejorar la calidad de la enseñanza y del aprendizaje de la matemática


es una tarea que compromete a todos. Por ello, es fundamental introducir
una nueva práctica pedagógica donde la matemática sea concebida como
parte de la realidad y de la vida misma que permita el logro de aprendizajes
fundamentales.
II. Armando las piezas del rompecabezas:
Enfoque del aprendizaje matemático
Historia de la mano y la cabeza: resolución de problemas como
práctica social.
Durante mucho tiempo, nuestras manos fueron maestras de nuestra cabeza.
Así, con el paso de los años, las manos fueron adiestrándose y la cabeza
despejándose.
La habilidad manual desarrollaba nuestra inteligencia, y mientras más se
esclarecía nuestra cabeza, más frecuentemente dirigía el trabajo de nuestras manos.
Las manos no podían levantar un pesado bloque de piedra. Nuestra cabeza
aconseja, entonces, colocar una palanca. La palanca sólo nos puede ayudar a
levantar la piedra un poco, mas ¿cómo subirla a lo alto? La cabeza interviene de
nuevo: crea el plano inclinado. Nos recomienda entonces colocar troncos redondos
bajo la piedra, pues ¡hacer rodar es más fácil que arrastrar!
Pero la construcción de un plano inclinado para elevar pesos es faena laboriosa y
compleja, y nuestra cabeza encuentra otra vez una solución más simple: inventa la
polea. Haciendo pasar la cuerda por la polea el peso sube mejor; y si, además el
peso cuelga de una segunda polea móvil, nuestras dos manos podían levantar un
objeto que cuatro manos movían con dificultad.
Esto, sin embargo, nos pareció poco. Entre manos y el peso
colocamos tres, cinco poleas, siete poleas, etc. Cuantas más son las
poleas tanto más fuerte nos hacemos. Así, ahora levantamos, sin
gran trabajo, pesos cuyo manejo era exclusividad de los gigantes.
Nuestra cabeza ayuda a nuestras manos, pero éstas tampoco le
dan reposo. Le plantean siempre nuevas tareas. Como no es fácil
hacer subir el agua del río para que reguemos los campos, nuestra
cabeza crea el pozo con la cigüeña, gracias a la cual podemos hacer
subir el cubo desde el río. Pero un cubo es poco. Hace falta más
agua. Nuestras manos ya no se dan abasto. Entonces, la cabeza
crea el torno. Una manivela sujeta a un rodillo que nuestra mano
hace girar, el rodillo da vueltas enroscando una cuerda, ésta arrastra
un cubo. ¡Asombrosos descubrimientos! Durante miles de años
ayudarían a nuestras manos en su trabajo.
Pero crece la demanda de agua y aumenta el trabajo. La
necesidad es la mejor de las maestras.
Nuestra cabeza piensa: „„¿No se podría hacer eso mismo, pero
sin las manos?‟‟ Recuerda a los cuadrúpedos servidores del
hombre, habituados desde largo tiempo a trasportar cargas. Las
manos enganchan un cuadrúpedo a un madero, el caballo da
vueltas, haciendo girar una rueda
dentada. Ésta sigue su rotación sobre una piedra circular fija.
Nuestras manos se liberan así de un trabajo que puede realizar un
animal. En cambio, les espera un problema más complicado:
construir los dientes de la rueda. Nuestras manos van haciendo
trabajos cada vez más delicados y complejos, pero también nuestra
cabeza tiene que resolver tareas más arduas.
El hombre utiliza al caballo para sacar agua del río, pero
comienza a pensar si no se puede prescindir de él. ¿Para qué
emplear al caballo? ¡Que el propio río suba el cubo de agua y lo
vierta en el surco! Nuestras manos reciben una tarea más
complicada: construir y colocar en el río una rueda tal que saque ella
misma el agua. El río corre por su lecho y tropieza con un obstáculo:
las aletas de la rueda. El río las empuja, y eso es lo que busca el
hombre. La rueda gira, carga el agua y la sube, vertiéndola por
último en el canalón.
El río riega los campos en los que crece el trigo. El otoño llega y la
cosecha debe ser recogida y el grano de las espigas molido. Hubo tiempos
en que se molía el grano en pequeños molinos de mano. Esto era suficiente
para una familia campesina, pero cuando hubo que dar de comer a ejércitos
enteros, cuando surgieron enormes ciudades que necesitaban inmensas
cantidades de harina para las panaderías, fue necesario poner en marcha
grandes molinos y muelas de piedra. Semejantes muelas no se podían
mover a mano, y de nuevo nuestra cabeza buscó la forma de salir del
problema. Los hombres vuelven a probar la manivela, recuerdan otra vez al
caballo y a aquel trabajador más fuerte que el caballo: el agua. El hombre ya
había dominado al río. Quita los cangilones de la rueda y deja las aletas. En
su eterno andar, el río empuja las aletas, la rueda hace girar el rodillo - eje
que mueve la rueda dentada; ésta se engancha en otra que pone en
movimiento un nuevo eje, en el que se encuentra la muela. Al principio, todo
esto debió parecer un cuento a los hombres, y los primeros molinos de agua
significaron, probablemente, una gran fiesta: la blanca espuma del agua, al
estrellarse contra la rueda, la nube blanca de harina flotando sobre la
muela, y las mujeres alrededor, escuchando el zumbido del molino de
agua, más agradable que el chirrido del manual.
Mas con todo su júbilo, no comprendían entonces la
portentosa fuerza que habían descubierto.

¿Podían acaso suponer que el molino de agua sería el


origen de centenares de máquinas que no sólo molerían el
trigo, sino que forjarían el hierro, machacarían el
mineral, tejerían?

Estas máquinas trabajarían por el hombre y para el


hombre, habrían de vestirlo y alimentarlo y, más tarde, incluso
trasportarlo por el aire.
Resolver problemas: una antigua costumbre de los pueblos

La historia del hombre es también la historia de la resolución de sus problemas y


es precisamente a esto que se debe, como hemos visto, el avance de la ciencia y la
tecnología en general, y de la matemática en particular.
La resolución de problemas es indesligable a nuestra existencia como seres
sociales. Desde que aparece el hombre sobre la Tierra, nuestra propia vida nos
impone encontrar soluciones a los diversos problemas que nos plantea nuestra
supervivencia.
La adaptación al medio, tanto por las modificaciones que se producen en nuestro
entorno (escasez de alimentos, condiciones climáticas adversas, etc.) como por la
visión cada vez más amplia que vamos teniendo de la realidad, nos plantea a diario
situaciones problemáticas. No siempre poseemos respuesta inmediata para todas
ellas, o soluciones afines a nuestras creencias o los instrumentos (materiales o
teóricos) con qué enfrentarlas. Así, a lo largo de nuestra milenaria existencia sobre
el planeta, nuestra historia ha discurrido afrontando y resolviendo problemas cada
vez más complejos, en un número de ámbitos cada vez mayor, tanto en nuestra vida
social como en el medio que nos rodea.
Así, cabezas y manos siguen unidas como en el pasado, ayudándose
mutuamente. Y el conocimiento que vamos ganando consolida y sintetiza la
grandeza de la capacidad humana: resolver problemas.
2.1 La resolución de problemas como práctica
pedagógica en la escuela
Asumimos el enfoque centrado en resolución
de problemas o enfoque problémico2 como
EL CAMBIO marco pedagógico para el desarrollo de las
FUNDAMENTAL competencias y capacidades matemáticas, por
Es pasar de un aprendizaje, en
la mayoría d e los casos
dos razones:
memorístico de conocimientos • La resolución de situaciones problemáticas es
matemáticos (como supuestos la actividad central de la matemática,
prerrequisitos para aprender a
• Es el medio principal para establecer relaciones
resolver problemas), a un
aprendizaje enfocado en la de funcionalidad matemática con la realidad
construcción de conocimientos cotidiana.
matemáticos a partir de la Este enfoque supone cambios pedagógicos y
resolución de situaciones
problemáticas.
metodológicos muy significativos, pero sobre todo
rompe con la tradicional manera de entender
cómo es que se aprende la matemática.
Este enfoque surge de constatar que todo lo que
aprendemos no se integra del mismo modo en
nuestro conocimiento matemático.
EJEMPLO:

Una fórmula matemática o la


enunciación de una propiedad
matemática, pueden adquirirse de forma
superficial mediante un proceso de
memorización simple. Esto posibilitará su
reproducción de forma más o menos
literal, pero no su utilización para la
resolución de situaciones problemáticas.
Es posible disponer de muchos
aprendizajes matemáticos que no sólo
seamos capaces de reproducir, sino de
utilizar para dar respuesta a situaciones
problemáticas reales.
2.2 El enfoque centrado en la resolución de
problemas
¿Cuál es la importancia del enfoque centrado en la
resolución de problemas?

Este enfoque consiste en promover formas de enseñanza-


aprendizaje que den respuesta a situaciones problemáticas
cercanas a la vida real. Para eso recurre a tareas y actividades
matemáticas de progresiva dificultad, que plantean demandas
cognitivas crecientes a los estudiantes, con pertinencia a sus
diferencias socio culturales. El enfoque pone énfasis en un saber
actuar pertinente ante una situación problemática, presentada en
un contexto particular preciso, que moviliza una serie de recursos
o saberes, a través de actividades que satisfagan determinados
criterios de calidad.

Permite distinguir:
a) Las características superficiales y profundas de una
situación problemática.

Está demostrado que el estudiante novato responde a


las características superficiales del problema (como es
el caso de las palabras clave dentro de su
enunciado), mientras que el experto se guía por las
características profundas del problema
(fundamentalmente la estructura de sus elementos y
relaciones, lo que implica la construcción de una
representación interna, de
interpretación, comprensión, matematización, correspo
ndientes, etc.).
b)Relaciona la resolución de situaciones problemáticas
con el desarrollo de capacidades matemáticas.

Aprender a resolver problemas no solo supone dominar


una técnica matemática, sino también procedimientos
estratégicos y de control poderosos para desarrollar
capacidades, como: la
matematización, representación, comunicación, elaborac
ión de estrategias, utilización de expresiones
simbólicas, argumentación, entre otras. La resolución de
situaciones problemáticas implica entonces una acción
que, para ser eficaz, moviliza una serie de
recursos, diversos esquemas de actuación que integran
al mismo tiempo conocimientos, procedimientos
matemáticos y actitudes.
c) Busca que los estudiantes valoren y aprecien el
conocimiento matemático.

Por eso propicia que descubran cuán significativo y


funcional puede ser ante una situación problemática
precisa de la realidad. Así pueden descubrir que la
matemática es un instrumento necesario para la
vida, que aporta herramientas para resolver problemas
con mayor eficacia y que permite, por lo tanto, encontrar
respuestas a sus preguntas, acceder al conocimiento
científico, interpretar y transformar el entorno. También
aporta al ejercicio de una ciudadanía plena, pues
refuerza su capacidad de argumentar, deliberar y
participar en la institución educativa y la comunidad.
RASGOS PRINCIPALES DEL ENFOQUE CENTRADO EN LA
RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS

Los rasgos más importantes de este enfoque son los siguientes:


1. La resolución de problemas debe impregnar íntegramente el
currículo de matemática
La resolución de problemas no es un tema específico, ni tampoco
una parte diferenciada del
currículo de matemática. La resolución de problemas es el eje
vertebrador alrededor del cual
se organiza la enseñanza, aprendizaje y evaluación de la
matemática.
2. La matemática se enseña y se aprende resolviendo problemas
La resolución de problemas sirve de contexto para que los
estudiantes construyan nuevos
conceptos matemáticos, descubran relaciones entre entidades
matemáticas y elaboren procedimientos
matemáticos.
3. Las situaciones problemáticas deben plantearse en contextos de la
vida real o en contextos científicos
Los estudiantes se interesan en el conocimiento matemático, le
encuentran significado, lo valoran más y mejor, cuando pueden establecer
relaciones de funcionalidad matemática con situaciones de la vida real o
de un contexto científico. En el futuro ellos necesitarán aplicar cada vez
más matemática durante el transcurso de su vida.
4. Los problemas deben responder a los intereses y necesidades de los
estudiantes
Los problemas deben ser interesantes para los
estudiantes, planteándoles desafíos que impliquen el desarrollo de
capacidades y que los involucren realmente en la búsqueda de
soluciones.
5. La resolución de problemas sirve de contexto para desarrollar
capacidades matemáticas
Es a través de la resolución de problemas que los estudiantes desarrollan
sus capacidades matemáticas tales como: la
matematización, representación, comunicación, utilización de
expresiones simbólicas, la argumentación, etc.
El enfoque centrado en la resolución de problemas
surge como una alternativa de solución para enfrentar
en nuestro quehacer docente:

o Las dificultades para el razonamiento matemático.


o Las dificultades para promover la significatividad y
funcionalidad de los conocimientos matemáticos.
o El aburrimiento, desvaloración y falta de interés por
la matemática.
o Las dificultades para el desarrollo del pensamiento
crítico en el aprendizaje de la matemática.
o El desarrollo de un pensamiento matemático
descontextualizado.
Objetivos del enfoque centrado en la resolución de problemas

Lograr que el estudiante:

 Se involucre en un problema (tarea o actividad matemática) para


resolverlo con iniciativa y entusiasmo.
 Comunique y explique el proceso de resolución del problema.
 Razone de manera efectiva, adecuada y creativa durante todo el proceso
de resolución del problema, partiendo de un conocimiento
integrado, flexible y utilizable.
 Busque información y utilice los recursos que promuevan un aprendizaje
significativo.
 Sea capaz de evaluar su propia capacidad de resolver la situación
problemática presentada.
 Reconozca sus fallas en el proceso de construcción de sus conocimientos
matemáticos y resolución del problema.
 Colabore de manera efectiva como parte de un equipo que trabaja de
manera conjunta para lograr una meta común.
DESARROLLO DE ACTITUDES EN EL ENFOQUE CENTRADO EN
LA RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS
La importancia de este enfoque radica en que eleva el
grado de la actividad mental, propicia el desarrollo del
pensamiento creativo y contribuye al desarrollo de
personalidad de los estudiantes
La actividad mental es aquella característica de la
personalidad que representa el esfuerzo, perseverancia y
constancia intelectual que el estudiante debe realizar
conscientemente en la resolución de una situación
problemática.
Con el incremento sistemático del nivel de la actividad
mental durante las prácticas educativas, se fomenta el
aprendizaje consciente de la matemática y se desarrolla la
autonomía de pensamiento y la confianza de los estudiantes.
El uso continuo de este enfoque posibilita además la
actividad creativa, capacidad
con la que el alumno puede seguir aprendiendo, y que
puede ir consolidando gradualmente.
Este enfoque aporta también al desarrollo de la
personalidad. Esta forma de aprender matemática favorece
tanto el razonamiento e importantes operaciones del
pensamiento, como el afianzamiento del auto concepto, la
autoestima y el desarrollo personal. Ambas cosas lo convierten
en un motor del desarrollo de la personalidad del estudiante.
El enfoque de resolución de problemas constituye entonces
una vía potente y eficaz para desarrollar actitudes positivas
hacia las matemáticas. Permite que cada estudiante se sienta
capaz de resolver situaciones problemáticas y de aprender
matemáticas, considerándola útil y con sentido para la vida. La
posibilidad que ofrezcamos a los estudiantes para enfrentarse
a situaciones problemáticas con diferentes niveles de exigencia
matemática, junto al trabajo grupal, favorecerán el desarrollo
de actitudes positivas hacia la matemática, una aspiración que
la sociedad contemporánea le plantea a la escuela peruana.
2.3 ¿Cómo enseñar matemática resolviendo
situaciones problemáticas?

Como hemos podido ver, el enfoque centrado en la resolución de


problemas no sólo permite a los estudiantes adquirir habilidades duraderas de
aprendizaje y meta-aprendizaje de la matemática, sino que modifica
totalmente el papel del docente.

A los docentes nos toca ahora guiar, explorar y respaldar las iniciativas de
sus estudiantes, sin dar la clase de manera frontal tipo conferencia.

La resolución de situaciones problemáticas es un proceso que ayuda a


generar e integrar actividades, tanto en la construcción de conceptos y
procedimientos matemáticos como en la aplicación de estos a la vida real.

Todo esto redundará, a su vez, en el desarrollo de capacidades y


competencias matemáticas.
a) ¿Qué es una situación problemática?
Una situación problemática es una situación de dificultad ante
la cual hay que buscar y dar reflexivamente una respuesta
coherente, encontrar una solución.
Estamos, por ejemplo, frente a una situación problemática
cuando no disponemos de estrategias o medios conocidos de
solución.

b) ¿Qué es resolver una situación problemática?


Resolver una situación problemática es:
 Encontrarle una solución a un problema determinado.
 Hallar la manera de superar un obstáculo.
 Encontrar una estrategia allí donde no se disponía de
estrategia alguna.
 Idear la forma de salir de una dificultad.
 Lograr lo que uno se propone utilizando los medios
adecuados.
El enfoque centrado en la resolución de problemas, se
relaciona de dos maneras con los escenarios donde se puede
aprender matemática: el aula, la institución educativa y la
comunidad:

1. En tanto guía para nuestra acción educativa nos ofrece


herramientas para actuar sobre la situación problemática; y
nos permite distinguir aspectos de los procesos de
aprendizaje que no siempre nos resultan visibles.
2. En tanto enfoque, posee una carga teórica que requiere
delimitación conceptual y metodológica, para que en
nuestro trabajo cotidiano podamos comprender y afrontar
mejor todos los imprevistos que se escapan a cualquier
predicción.
c) ¿En qué consiste la metodología centrada en la resolución de
problemas?
La metodología plantea que los estudiantes4 :
1. Conozcan una situación problemática. Ellos en grupo organizan
sus ideas, actualizan su conocimiento previo relacionado con la
situación y problemática y tratan de definirla.
2. Hagan preguntas. Se dialoga sobre aspectos específicos de la
situación problemática que no hayan comprendido. El grupo se
encarga de anotar estas preguntas. Los estudiantes son animados
por el profesor para que puedan reconocer lo que saben y lo que no
saben.
3. Seleccionen los temas a investigar. Lo hacen en orden de
prioridad e importancia, entre todos los temas que surgen por medio
de las preguntas durante la situación didáctica. Ellos deciden qué
preguntas serán contestadas por todo el grupo y cuáles serán
investigadas por algunos miembros del grupo, para después
socializarlas a los demás. Los estudiantes y el docente dialogan
sobre cómo, dónde y con qué investigar las posibles respuestas a
las preguntas.
4. Trabajen en grupos. Vuelven a juntarse en grupo y exploran las
preguntas previamente establecidas integrando su nuevo conocimiento al
contexto de la situación problemática. Deben resumir su conocimiento y
conectar los nuevos conceptos y procedimientos a los previos.
Deben seguir definiendo nuevos temas a investigar, mientras progresan
en la búsqueda de solución a la situación problemática planteada.
Observarán que el aprendizaje es un proceso en curso progresivo y que
siempre existirán temas para investigar cuando se enfrentan a un
problema cualquiera.
En las siguientes líneas, explicaremos en forma resumida cada una de
las fases5 de resolución de problemas.
a) Familiarización y comprensión. En esta fase el estudiante debe
identificar la incógnita, reconocer los datos, identificar las
condiciones, si son suficientes, si son necesarios o si son
complementarios.
b) Búsqueda de estrategias y elaboración de un plan. En la segunda
fase, el estudiante comienza a explorar la
situación, experimenta, particulariza. El plan es un conjunto de
estrategias heurísticas que se seleccionan con la esperanza de que
el problema llegue a ser resuelto.
c) Ejecución del plan y control. Cuando el estudiante decide qué
estrategias utilizar, viene la fase de la ejecución del plan, que debe
realizarse siempre en forma controlada, evaluando cada paso de su
realización, a fin de saber si el plan lo está acercando a la respuesta
o lo está conduciendo a una situación compleja.
d) Visión retrospectiva y prospectiva. Cuando se ha obtenido una
solución (no una respuesta, podrían haber varias o ninguna), se
ingresa a la cuarta fase, donde se efectúa una reflexión acerca del
proceso ejecutado.
EL JUEGO EN EL ENFOQUE CENTRADO EN LA RESOLUCIÓN
DE PROBLEMAS

Los juegos en general, y en particular los juegos de contenido


matemático, se presentan como un excelente recurso didáctico para
plantear situaciones problemáticas a los niños. Tales estrategias permiten
articular por ejemplo la actividad matemática y la actividad lúdica en
contextos de interacción grupal.
Las situaciones problemáticas lúdicas son recomendables para toda la
educación básica regular, pero sobre todo para niños de los primeros ciclos.
A esa edad es posible dirigir la atención y esfuerzo de los niños hacia metas
de naturaleza matemática mediante el juego. En esta etapa, el juego
constituye un valioso instrumento pedagógico para iniciarlos en la
construcción de las nociones y procedimientos matemáticos básicos.
Propiciar en los niños la resolución de situaciones problemáticas en
actividades cotidianas, actividades lúdicas y con la manipulación de
material concreto permite desarrollar favorablemente
su razonamiento lógico. El juego es un recurso de aprendizaje
indispensable en la iniciación a la matemática, porque facilita los
aprendizajes en los niños de una manera divertida despertando el placer
por aprender y satisface su necesidad de jugar.
EL JUEGO EN EL ENFOQUE CENTRADO EN LA RESOLUCIÓN
DE PROBLEMAS

Además, el juego:
1. Es la primera actividad natural que desarrollan los niños y niñas para
aprender, desarrollando sus primeras actividades y destrezas.
2. Permite dinamizar los procesos de pensamiento, pues generan
interrogantes y motivan la búsqueda de soluciones.
3. Presenta desafíos y estímulos que incitan la puesta en marcha de
procesos intelectuales.
4. Estimula la competencia sana y actitudes de tolerancia y convivencia que
crean un clima de aprendizaje favorable.
5. Favorece la comprensión.
6. Facilita la consolidación de contenidos matemáticos.
7. Posibilita el desarrollo de capacidades.
8. Se conecta con la vida y potencia el aprendizaje.
En esta dinámica los estudiantes tienen la oportunidad de escuchar a los
otros, explicar y justificar sus propios descubrimientos, confrontar ideas y
compartir emociones, corregir y ser corregidos por sus compañeros. Tales
juegos tienen alicientes: la actividad lúdica en sí misma, la actividad
matemática que la acompaña y el relacionarse con otros.
d) ¿Cuál es la importancia de los materiales concretos en el enfoque
centrado en la resolución de problemas?

Los materiales manipulativos o concretos, especialmente, en los primeros


ciclos, son un apoyo importante para el aprendizaje de la matemática.
Dos principios didácticos a considerar:
 El uso de materiales educativos no es el objetivo de la enseñanza-
aprendizaje de la matemática, sino un medio para el logro de los
aprendizajes.
 La mayoría de los conceptos matemáticos no tienen su origen en los
objetos, sino en las relaciones que establecen los estudiantes entre
ellos. El color “rojo” por ejemplo es una abstracción física que se
origina en los objetos. El concepto “dos”, sin embargo, no está
presente en las fichas con que juegan los estudiantes, sino en la
relación que establecen entre ellas.
Eso ocurre al entender que una es la primera y la otra es la segunda, y
que el “dos” al que llegamos en el conteo resume la cantidad de fichas
disponible.
LOS MATERIALES EN EDUCACIÓN
BÁSICA

En el nivel de Educación Básica, el uso de material


concreto es necesario porque:
1. El estudiante puede empezar a elaborar, por sí
mismo, los conceptos a través de las experiencias
provocadas.
2. Es motivador, sobre todo cuando las situaciones
problemáticas creadas son interesantes para el
estudiante e incitan su participación espontánea.
LA INTERCULTURALIDAD Y EL ENFOQUE CENTRADO EN LA
RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS

Nuestro país es pluricultural y multilingüe. En consecuencia la


educación matemática para ser pertinente a esta realidad tiene que
ser intercultural. La perspectiva del enfoque centrado en la
resolución de problemas implica que:

1) Debemos plantear a nuestros estudiantes situaciones


problemáticas en un contexto socio cultural concreto que refleje
la realidad del estudiante.

2) Debemos generar espacios de aprendizaje y reflexión que


propicien capacidades matemáticas, utilizando las formas de
comunicación, expresión y conocimiento propias de nuestras
culturas. Esto supone diálogo intercultural entre las maneras de
aprender matemáticas.
III. Visualizando el rompecabezas:
competencias, capacidades y dominios
La competencia matemática en la
Educación Básica promueve el desarrollo
de capacidades en los estudiantes, que se
requieren para enfrentar una situación
problemática en la vida cotidiana.
Alude, sobre todo, a una actuación eficaz
en diferentes contextos reales a través de
una serie de herramientas y acciones. Es
decir, a una actuación que moviliza e
integra actitudes.
La competencia matemática es entonces
un saber actuar en un contexto
particular, que nos permite resolver
situaciones problemáticas reales o de
contexto matemático. Un actuar pertinente
a las características de la situación y a la
finalidad de nuestra acción, que selecciona
y moviliza una diversidad de saberes
propios o de recursos del entorno.
Eso se da mediante determinados criterios
básicos, como:
a) Saber actuar: Alude a la intervención de una persona
sobre una situación problemática determinada para
resolverla, pudiendo tratarse de una acción que implique
sólo actividad matemática.
b) Tener un contexto particular: Alude a una situación
problemática real o simulada, pero plausible, que
establezca ciertas condiciones y parámetros a la acción
humana y que deben tomarse en cuenta necesariamente.
c) Actuar pertinentemente: Alude a la indispensable
correspondencia de la acción con la naturaleza del
contexto en el que se interviene para resolver la situación
problemática. Una acción estereotipada que se reitera en
toda situación problemática no es una acción pertinente.
d) Seleccionar y movilizar saberes: Alude a una acción
que echa mano de los conocimientos
matemáticos, habilidades y de cualquier otra capacidad
matemática que le sea más necesaria para realizar la
acción y resolver la situación problemática que enfrenta.
e) Utilizar recursos del entorno: Alude a una acción que
puede hacer uso pertinente y hábil de toda clase de
medios o herramientas externas, en la medida que el
contexto y la finalidad de resolver la situación
problemática lo justifiquen.
f) Utilizar procedimientos basados en criterios: Alude a
formas de proceder que necesitan exhibir determinadas
características, no todas las deseables o posibles sino
aquellas consideradas más esenciales o suficientes para
que logren validez y efectividad.
3.2 FORMULACIÓN DE LA COMPETENCIA MATEMÁTICA
En la formulación de una competencia matemática necesita visibilizarse:
o La acción que el sujeto desempeñará
o Los atributos o criterios esenciales que debe exhibir la acción
o La situación, contexto o condiciones en que se desempeñará la acción
EJEMPLO:
En la competencia matemática «Resuelve situaciones problemáticas de
contexto real y matemático que implican la construcción del significado y el uso
de los números y sus operaciones empleando diversas estrategias de
solución, justificando y valorando sus procedimientos y resultados», puede
distinguirse:
3.3 RESOLUCIÓN DE SITUACIONES PROBLEMÁTICAS
COMO COMPETENCIA MATEMÁTICA

La resolución de situaciones problemáticas reales es la competencia


matemática del Área de Matemática. El estudiante la desarrollará durante
su experiencia escolarizada y no escolarizada a lo largo de toda su vida.

Se han definido cuatro competencias matemáticas en términos de


resolución de problemas, que atraviesan toda la Educación Básica.

Competencias que suponen un desempeño global y que corresponden a


los cuatro dominios del Área de Matemática:
3.4 CAPACIDADES MATEMÁTICAS
La resolución de situaciones problemáticas es entonces una
competencia matemática importante que nos permite desarrollar
capacidades matemáticas. Todas ellas existen de manera integrada y
única en cada persona y se desarrollan en el aula, la escuela, la
comunidad, en la medida que dispongamos de oportunidades y medios
para hacerlo.

En otras palabras, las capacidades matemáticas se despliegan a partir


de las experiencias y expectativas de nuestros estudiantes, en
situaciones problemáticas reales. Si ellos encuentran útil en su vida diaria
los aprendizajes logrados, sentirán que la matemática tiene sentido y
pertinencia.

La propuesta pedagógica para el aprendizaje de la matemática toma


en cuenta el desarrollo de seis capacidades matemáticas, consideradas
esenciales para el uso de la matemática en la vida cotidiana. Éstas
sustentan la competencia matemática de resolución de problemas y
deben abordarse en todos los niveles y modalidades de la Educación
Básica Regular
Estas seis capacidades son las siguientes:

Matematizar
Representar
Comunicar
Elaborar estrategias
Utilizar expresiones simbólicas
Argumentar

Todas ellas están implicadas en cualquier situación


problemática real, o matemática. Pueden ser utilizadas
por nuestros estudiantes cada vez que las enfrentan
para resolverlas.
a) Matematizar
Los sistemas de numeración tuvieron un origen anatómico.
Nuestros antepasados valiéndose de los dedos de sus manos contaban
hasta diez: (uno/huk/, dos/iskay/, tres/
kimsa/, cuatro/tawa/,cinco/pichqa/, seis/suqta/, siete/qanchis/, ocho/pusaq/, nuev
e/isqun/ y diez/chunka).

Al llegar a diez /chunka/, es decir, después de consumir todas las


posibilidades de su «aparato de cálculo» natural, los dedos de sus dos
manos, les fue lógico considerar el número 10 como una unidad nueva, mayor
(la unidad del orden siguiente) y prosiguieron el conteo en los términos
siguientes:

diez y uno/chunka hukniyuq/, diez y dos /chunka iskayniyuq/, diez y tres


/chunka kimsayuq/, diez y cuatro/chunka tawayuq/, diez y cinco /chunka
pichkayuq/, diez y seis /chunka suqtayuq/, diez y siete /chunka
qanchikniyuq/, diez y ocho / chunka pusaqniyuq/, diez y nueve/chunka
isqunniyuq/ y dos veces diez (veinte)/iskay chunka/.

Al llegar a veinte, formaban la segunda decena y proseguían el conteo hasta


llegar a diez decenas /chunkachunka/ y así lograban formar la unidad del tercer
orden, la centena /pachak/ y así sucesivamente.
Algo similar, sucedió probablemente con nuestros antepasados
aimaras.
Ellos, a diferencia de los quechuas, se valieron de los dedos sólo
de una de sus manos, y contaban con facilidad hasta llegar a cinco
(uno /maya/, dos/paya/, tres/kima/, cuatro/pusi/ y cinco/qallqu/).
Al llegar a cinco, les fue lógico considerar el número 5 como una
unidad nueva, mayor (la unidad del orden siguiente) y prosiguieron el
conteo en los términos siguientes: uno y cinco /ma-qallqu/, dos y
cinco / pa-qallqu/, tres y cinco /ki-qallqu/, cuatro y cinco/pu-qallqu/ y
cinco y cinco/qallqu qallqu.
Al llegar a cinco y cinco, formaban la unidad del segundo
orden, después de tercer orden y así sucesivamente. Así los aimaras
dotaron de una estructura matemática quinaria a una de sus manos y
nos legaron el sistema de numeración quinaria aimara. Así
matematizaron nuestros antepasados porciones o partes de su
anatomía.
La matematización es un proceso que dota de una
estructura matemática a una parte de la realidad o a
una situación problemática real.

Este proceso es eficaz en tanto pueda establecer


igualdad en términos de la estructura matemática y la
realidad.

Cuando esto ocurre las propiedades de la estructura


matemática corresponden a la realidad y viceversa.
Matematizar implica también interpretar una solución
matemática o un modelo matemático a la luz del
contexto de una situación problemática.
b) Representar
Existen diversas formas de representar las
cosas y, por tanto, diversas maneras de
organizar el aprendizaje de la matemática.
El aprendizaje de la matemática es un
proceso que va de lo concreto a lo
abstracto. Entonces, las personas, los
niños en particular, aprendemos
matemática con más facilidad si
construimos conceptos y descubrimos
procedimientos matemáticos desde
nuestra experiencia real y particular. Esto
supone manipular materiales concretos
(estructurados o no), para pasar luego a
manipulaciones simbólicas. Este tránsito
de la manipulación de objetos concretos a
objetos abstractos está apoyado en
nuestra capacidad de representar
matemáticamente los objetos.
POR EJEMPLO:

Cuando enfrentamos una situación


problemática real susceptible
de matematización, la representamos
matemáticamente.
Para eso utilizamos distintas
representaciones tales como:
gráficos, tablas, diagramas, imágenes, etc.
Así capturamos y describimos la estructura y
las características matemáticas de una
determinada situación. Cuando ya
disponemos de resultados
matemáticos, presentados en diversos
formatos o
representaciones matemáticas, los
interpretamos. Para hacer esa interpretación
nos referimos a la situación problemática y
usamos las representaciones para resolverla.
A veces es necesario crear nuevas
representaciones.
c) Comunicar
El lenguaje matemático es también una herramienta que nos permite
comunicarnos con los demás. Incluye distintas formas de expresión y
comunicación oral, escrita, simbólica, gráfica.
Todas ellas existen de manera única en cada persona y se pueden
desarrollar en las escuelas si éstas ofrecen oportunidades y medios para
hacerlo.
Buscamos desarrollar esta capacidad en los estudiantes para que logren
comprender, desarrollar y expresar con precisión matemática las
ideas, argumentos y procedimientos utilizados, así como sus conclusiones.
Asimismo, para identificar, interpretar y analizar expresiones matemáticas
escritas o verbales.
En matemáticas se busca desarrollar en los estudiantes esa capacidad
para recibir, producir y organizar mensajes matemáticos orales en forma
crítica y creativa. Esto les facilita tomar decisiones individuales y grupales. La
institución educativa debe brindar situaciones reales de interacción oral para
que los estudiantes tengan oportunidad de
hablar, dialogar, opinar, informar, explicar, describir, argumentar, debatir, etc.,
en el marco de las actividades matemáticas programadas.
La lectura y el
dar sentido a las
afirmaciones, pre
guntas, tareas
matemáticas
permiten a los
estudiantes crear
modelos de
situaciones
problemáticas, lo
cual es un paso
importante
para
comprender, clari
ficar, plantear y
resolverlas en
términos
matemáticos.
d) Elaborar estrategias
Al enfrentar una situación problemática de la vida real, lo
primero que hacemos es dotarla de una estructura matemática.
Luego, seleccionamos una alternativa de solución entre otras
opciones.
Si no disponemos de ninguna alternativa intentamos crearla.
Entonces, cuando ya disponemos de una alternativa razonable de
solución, elaboramos una estrategia.
De esta manera, la resolución de una situación problemática
supone la selección o elaboración de una estrategia para guiar el
trabajo, interpretar, evaluar y validar su procedimiento y solución
matemáticos.
La construcción de conocimientos matemáticos requiere también
seleccionar o crear y diseñar estrategias de construcción de
conocimientos.
Primera forma:
POR EJEMPLO:

Un avión sube a una altura de


2000 metros, después baja
1300 metros, vuelve a subir
1500 metros y baja de nuevo
250 metros. ¿A qué altura se
encuentra en este momento?

Segunda forma:
e) Utilizar expresiones simbólicas

Hay diferentes formas de


simbolizar. Éstas han ido
construyendo sistemas
simbólicos con
características
sintácticas, semánticas y
funcionales peculiares.
El uso de las expresiones
y símbolos matemáticos
ayudan a la comprensión
de las ideas matemáticas,
sin embargo éstas no son
fáciles de generar debido
a la complejidad de los
procesos
de simbolización.
En el desarrollo de los aprendizajes matemáticos, los estudiantes
a partir de sus experiencias vivenciales e inductivas emplean
diferentes niveles del lenguaje. Inicialmente usan un lenguaje de
rasgos coloquiales, paulatinamente van empleando el lenguaje
simbólico hasta llegar a un lenguaje técnico y formal como
resultado de un proceso de convención y acuerdo en el grupo de
trabajo.
El dar una estructura matemática a una situación
problemática, requiere del uso de variables, símbolos y
expresiones simbólicas apropiadas. Para lograr esto es
importante:
- Entender la relación entre el lenguaje del problema y el
lenguaje simbólico necesario para representarlo
matemáticamente.
- Comprender, manipular y hacer uso de expresiones
simbólicas— aritméticas y algebraicas—regidas por reglas y
convenciones matemáticas, es decir, por una gramática
específica de lenguaje matemático.
f) Argumentar

Esta capacidad es fundamental no solo para el desarrollo del


pensamiento matemático, sino para organizar y plantear
secuencias, formular conjeturas y corroborarlas, así como
establecer conceptos, juicios y razonamientos que den sustento
lógico y coherente al procedimiento o solución encontrada.
Así, se dice que la argumentación puede tener tres diferentes
usos:
1. Explicar procesos de resolución de situaciones problemáticas
2. Justificar, es decir, hacer una exposición de las conclusiones o
resultados a los que se haya llegado
3. Verificar conjeturas, tomando como base elementos del
pensamiento matemático.
La capacidad de
argumentar se aplica para
justificar la validez
de los resultados
obtenidos. El diálogo
colectivo basado
en afirmaciones u
opiniones
argumentadas, así como
el análisis
de la validez de los
procesos de resolución de
situaciones
problemáticas favorecen
el aprendizaje
matemático.
En la Educación Básica, se procura que los
estudiantes:
Hagan progresivamente inferencias que les
permita deducir conocimientos a partir de
otros, hacer predicciones eficaces en variadas
situaciones concretas, formular conjeturas e
hipótesis.
Aprendan paulatinamente a utilizar procesos de
pensamiento lógico que den sentido y validez a
sus afirmaciones, y a seleccionar
conceptos, hechos, estrategias y procedimientos
coherentes.
Desarrollen la capacidad para detectar
afirmaciones y justificaciones erróneas.
El razonamiento y la
demostración son
partes integrantes de
la argumentación.
Entran en juego al
reflexionar sobre las
soluciones
matemáticas y
permiten crear
explicaciones que
apoyen o refuten
soluciones
matemáticas a
situaciones
problemáticas
contextualizadas.
3.5 DOMINIOS MATEMÁTICOS
Los dominios son los organizadores del Área de Matemática, que se trabajan
a lo largo de la Educación Básica. En algunos momentos puede haber un
mayor énfasis en un dominio que en otro. Estos dominios son:
a) Números y Operaciones

 Se refiere al conocimiento de números, operaciones


y sus propiedades.
 Este dominio dota de sentido matemático a la
resolución de situaciones problemáticas en términos
de números y operaciones.
 La situación sirve de contexto para desarrollar
capacidades matemáticas mediante la construcción
del significado y uso de los números y las
operaciones en cada conjunto numérico, y en
diversas formas a fin de realizar juicios matemáticos
y desarrollar estrategias útiles en diversas
situaciones.
b) Cambio y Relaciones

 Se refiere a conocimientos algebraicos tales como


ecuaciones, inecuaciones, relaciones, funciones,
sus propiedades, entre otros.
 Este dominio dota de sentido matemático a la
resolución de situaciones problemáticas en
términos de patrones, equivalencias y cambio, las
mismas que sirven de contexto para desarrollar
las capacidades matemáticas.
El mundo que nos rodea presenta una multiplicidad de relaciones temporales o
permanentes, que se manifiestan por ejemplo en los diversos fenómenos
naturales, económicos, demográficos, entre otros. Ellos influyen en la vida de
todo ciudadano, exigiéndole capacidades que le permitan comprenderlos,
describirlos, analizarlos, modelarlos y realizar predicciones para enfrentarse a
los cambios. Así se aligeran
o reducen sus consecuencias (OCDE, 2006).

El álgebra no es solo un medio


de traducción del lenguaje
natural al simbólico, es
también una herramienta de
matematización de distintas
situaciones de la vida real.
En este contexto resulta importante el aporte de la matemática a
través de la matematización. Ella permite analizar las soluciones de
un problema, generalizarlas y justificar su alcance.
A medida que se desarrolla esta capacidad se va progresando en el
uso del lenguaje y el simbolismo matemático, necesarios para
apoyar y comunicar el pensamiento algebraico por medio de
ecuaciones, variables y funciones.
La resolución de situaciones problemáticas sobre cambio y
relaciones, permite desarrollar la capacidad para identificar
patrones, describir y caracterizar generalidades, modelar fenómenos
reales referidos a las relaciones cambiantes entre dos o más
magnitudes. Para eso se puede utilizar desde gráficos intuitivos
hasta expresiones simbólicas como las
igualdades, desigualdades, equivalencias y funciones.
c) Geometría

Se refiere a conocimientos de la geometría y a sus propiedades.


Este dominio dota de sentido geométrico a la resolución de situaciones
problemáticas, las mismas que sirven de contexto para desarrollar
capacidades matemáticas.
En efecto, vivimos en un mundo que está lleno de formas y cuerpos
geométricos. A nuestro alrededor podemos encontrar evidencias
geométricas en la pintura, la escultura, las construcciones, los juegos, las
plantas, los animales y en diversidad de fenómenos naturales.
Estas situaciones del mundo real demandan de la persona, poner en
práctica capacidades con relación a la geometría, como obtener
información a partir de la observación; interpretar, representar y describir
relaciones entre formas, desplazarse en el espacio, entre otras. Aprender
geometría proporciona a la persona herramientas y argumentos para
comprender su
entorno. La geometría es considerada como una herramienta para el
entendimiento y es la parte de la matemática más intuitiva, concreta y
ligada a la realidad (Cabellos Santos, 2006).
La resolución de situaciones problemáticas sobre
geometría permite desarrollar progresivamente
la capacidad para:
 Describir objetos, sus atributos medibles y su
posición en el espacio utilizando un lenguaje
geométrico
 Comparar y clasificar formas y magnitudes
 Graficar el desplazamiento de un objeto en
sistemas de referencia
 Componer y descomponer formas
 Estimar medidas, utilizar instrumentos de
medición
 Usar diversas estrategias de solución de
problemas
d) Estadística y Probabilidad
Se refiere a conocimientos de estadística, probabilidad y a sus respectivas
propiedades. Este dominio dota de sentido matemático a la resolución de
situaciones problemáticas en términos estadísticos y probabilísticos, la
misma que sirve de contexto para desarrollar capacidades matemáticas.
La incertidumbre está presente en nuestra vida cotidiana, somos testigos
que raras veces las cosas ocurren según las predicciones realizadas.
POR EJEMPLO:
Los pronósticos del tiempo o el resultado de las elecciones a veces nos
traen sorpresas. La ciencia y la tecnología rara vez se ocupan de las
certidumbres, pues el conocimiento científico casi nunca es absoluto e
incluso puede ser erróneo en algunas ocasiones. Los aprendizajes que se
logran a partir de la estadística y el cálculo de probabilidades adquieren
hoy mayor importancia de la que tenían en el pasado , pues son7

herramientas que ayudan al estudiante a organizar y profundizar su


conocimiento sobre la realidad, permitiéndole tomar decisiones en
escenarios de cambio y de abundante información.
La resolución de
situaciones
problemáticas sobre
estadística y
probabilidad permite
desarrollar
progresivamente
capacidades
para procesar e
interpretar diversidad de
datos, transformándolos
en información. También
ayuda a analizar
situaciones de
incertidumbre para
estimar
predicciones, que
permitan tomar
decisiones adecuadas.

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