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Generalidades.

Una enfermedad parasitaria o parasitosis es una enfermedad infecciosa causada


por protozoos, vermes (cestodos, trematodos, nematodos) o artrópodos. Las enfermedades
parasitarias pueden adquirirse a través de los alimentos o del agua contaminada (como
la fascioliasis o la teniasis), por la picadura de un insecto (como la malaria o la enfermedad del
sueño) o por contacto sexual (como las ladillas), y pueden causar desde molestias leves hasta la
muerte.

Parásito y parasitismo.

Parásito: todo organismo que vive a costa de otro, denominado huésped u hospedador, durante
un periodo de tiempo más o menos largo.

 Parásitos facultativos, son de forma libre pero se adaptan a un determinado huésped.


 Parásitos obligados, dependen necesariamente del huésped.
 Endoparásitos, colonizan el interior del huésped.
 Ectoparásitos, habitan en la superficie del huésped.
 Parásitos patógenos, causan enfermedades en el huésped.

Parasitismo: relación ecológica entre dos organismos en donde uno de ellos, el parásito, depende
nutricionalmente de otro, el huésped. Existe parasitismo permanente y parasitismo temporal que
se produce sólo en el momento de la alimentación.

 Huésped definitivo: cuando el parásito alcanza en él su madurez sexual o estado adulto.


 Huésped intermediario: cuando sirve para completar el ciclo vital del parásito.
 Parásitos patógenos para el hombre: protozoos (Leishmania,* Tripanosoma,*
Giardia,*Tricomonas,*Entamoeba,*Toxoplasma…), cestodos y nematodos.

Patogenia de las parasitosis.

Los parásitos son, casi siempre, exógenos al anfitrión humano y, por este motivo, deben entrar en
el interior del organismo mediante ingestión o penetración directa a través de las barreras
anatómicas. El tamaño del inoculo y la duración de la exposición son factores importantes.
Además, la vía de exposición es clave, numerosos parásitos presentan medios autodirigidos de
invasión del anfitrión humano. Una vez se ha producido la invasión, los parásitos se unen a células
u órganos específicos del anfitrión, eluden los mecanismos de detección inmunitaria, se replican,
producen sustancias tóxicas que destruyen tejidos y provocan una enfermedad secundaria a la
propia respuesta inmunitaria del organismo anfitrión.

Clasificación de los parásitos.


PROTOZOARIOS
1. Amibas: Intestinales  Entamoeba histolytica
 Entamoeba coli
2. Flagelados: Intestinales  Giardia Lamblia
 Trichomonas hominis
3. Ciliados: Intestinales  Balantidium coli
4. Coccidios: Intestinales  Cryptosporidium parvum
 Sarcocystis hominis
5. Otros protozoarios: Intestinales  Blastocystis hominis
6. Amibas, Flagelados: otros sitios  Naegleria fowleri (amiba)
corporales  Trichomonas vaginalis (flagelo)
7. Coccidios: otros sitios corporales  Toxoplasma gondii
8. Esporozoarios, flagelados: sangre y  Plasmodium vivax (esporozoario)
tejidos  Plasmodium ovale (esporozoario)
 Plasmodium malariae
(esporozoario)
 Plasmodium falciparum
(esporozoario)
 Leishmania donovani (flagelados)
 Leishmania mexicana (flagelados)
 Leishmania braziliensis (flagelado)
 Trypanosoma brucei gambiense
(flagelado)
9. Microsporidios: todo el cuerpo  Especies de Pleistophora
HELMINTOS
NEMATODOS
1. Intestinales  Ascaris Lumbricoides
 Enterobius vermicularis
 Ancylostoma duodenale
 Trichuris Trichiura
2. Tejidos  Toxocara canis
 Ancylostoma Braziliense
3. Filarias: sangre, líquidos corporales  Wuchereria bancrofti
 Loa Loa
 Onchocerca volvulus
CESTODOS
1. Intestinales  Taenia solium (solitaria del puerco)
 Taenia saginata
 Hymenolepis nana
 Hymenolepis diminuta
2. Formas larvarias: Tejido  Taenia solium (cisticercosis)
 Multiceps multiceps
TREMATODOS
1. Intestinales  Fasciolopsis buski
 Heterophyes heterophyes
2. Hígado/ pulmón  Fasciola hepática
3. Sangre  Schistosoma mansoni
 Schistosoma japonicum
 Schistosoma intercalatum

HELMINTOS

Morfología y clasificación

Los gusanos son animales elongados, con simetría bilateral, que varían en longitud desde
unos cuantos milímetros hasta 1 m o más. Su pared corporal está cubierta por una
cutícula acelular resistente, que puede ser lisa o poseer crestas, espinas y tubérculos. En el
extremo anterior, a menudo hay ventosas, ganchos, dientes o placas utilizados para la
fijación. Todos los helmintos tienen órganos diferenciados. La totalidad del grupo se
caracteriza por la presencia de un sistema nervioso y uno excretor primitivos y un sistema
reproductor muy desarrollado. Algunos tienen tubos alimentarios y ninguno posee un
sistema circulatorio. Los helmintos parásitos comunes en seres humanos pueden
clasificarse en una de tres clases

Los nematodos o gusanos redondos tienen un cuerpo cilíndrico, fusiforme y un aparato


digestivo tubular que se extiende desde la boca en el extremo anterior hasta el año en el
extremo posterior. Los sexos están separados; por lo común el gusano macho es más
pequeño que el gusano hembra. Estos gusanos pueden dividirse en aquellos que habitan
en el tubo digestivo y aquellos que parasitan sangre y tejidos humanos. A diferencia de
estos últimos, los que habitan en el tubo digestivo por lo general no requieren de un
hospedador intermedio.

Los cestodos o gusanos planos tienen cuerpos acintados, planos. El extremo anterior o
escólex cuenta con ventosas y con frecuencia con ganchos, que utiliza para la fijación.
Inmediatamente por detrás de la cabeza se encuentra el cuello, que produce una cadena
de segmentos reproductores o proglótides. Cada segmento contiene gónadas masculinas
y femeninas. Los gusanos carecen de tubo digestivo y tal vez absorban los nutrientes a
través de su cutícula. En ocasiones se requieren 1 o 2 hospedadores intermedios para
completar el ciclo vital.

Los trematodos son organismos en forma de hoja que se fijan al tubo digestivo. Los
desechos particulados son regurgitados a través de la boca. Dos ventosas actúan como
órganos de fijación y locomoción, una alrededor de la boca y la segunda ubicada en
posición más distal sobre la cara ventral del cuerpo. La mayor parte son hermafroditas y
se requieren dos hospedadores intermedios. Los esquistosomas habitan en la sangre, son
unisexuados y necesitan un intermediario.

Fisiología
Los parásitos helmintos se nutren por ingestión o absorción de líquidos corporales, tejido
lisado o contenido intestinal de sus hospedadores. Metabolizan los carbohidratos con
rapidez y la concentración de glucógeno en el gusano es alta. La respiración es
principalmente anaerobia, aunque las larvas con frecuencia requieren oxígeno. Una gran
parte de los requerimientos de energía se dedica a las necesidades reproductivas. La
producción diaria de descendencia puede ser de hasta 200 000 para algunos gusanos. Por
lo común los helmintos son ovíparos (producen huevos), pero unas cuantas especies son
vivíparas (dan origen a una forma de vida joven). Ya sea que eclosionen o que sean formas
de vida libre, las larvas resultantes son diferentes del gusano maduro desde el punto de
vista morfológico y sufren una serie de cambios o mudas antes de alcanzar la vida adulta.

La protección de las enzimas digestivas del hospedador y líquidos corporales se logra a


través de una cutícula resistente y de la secreción de enzimas. Algunos gusanos, como los
esquistosomas, se protegen del ataque inmunitario mediante la incorporación de
antígenos del hospedador en su cutícula. La esperanza de vida de un helminto adulto a
menudo se mide en semanas o meses, pero algunos, como uncinarias, filarias y duelas,
pueden sobrevivir en el hospedador por décadas.

Los nematodos intestinales

Tienen cuerpos cilíndricos, fusiformes, cubiertos por una cutícula acelular fuerte. Rodeadas por
esta capa de integumento y en la cavidad del cuerpo se encuentran capas de músculo, troncos
nerviosos longitudinales y un sistema excretor. Los sexos son separados; el gusano macho por lo
general es más pequeño que la hembra. La hembra es sumamente prolífica y puede producir miles
de descendientes, por lo general en forma de huevecillos, los cuales deben incubarse o cursar la
etapa embrionaria fuera de un hospedador humano antes de que se tornen infecciosos para otra
persona. Durante este periodo, el embrión se segmenta en forma repetida, y finalmente se
desarrolla en una forma adolescente conocida como larva. En muchos casos, los huevecillos de
nematodos que se desarrollan en el tubo digestivo del humano son llevados al medio ambiente a
través de heces; cursan su etapa embrionaria en la tierra por un periodo de semanas antes de
volverse infecciosos. Los huevecillos deben ser ingeridos a través de alimentos contaminados. En
algunas especies el huevecillo eclosiona fuera del hospedador, liberando una larva capaz de
penetrar la piel de una persona que se pone en contacto físico directo con ella. Los nematodos
intestinales se encuentran principalmente en regiones donde las heces humanas se eliminan de
manera indiscriminada, o bien, cuando se utilizan como fertilizantes.

Seis nematodos intestinales infectan con frecuencia a las personas:

 Enterobius vermicularis (oxiuros)


 Trichuris trichiura (tricocéfalos)
 Ascaris lumbricoides (gusanos redondos largos)
 Necator americanus
 Ancylostoma duodenale (uncinaria)
 Strongyloides stercoralis
- Enterobius Vermicularis (Oxiuro)

Se distribuye en todo el mundo, aunque es mas común en las regiones templadas, la diseminación
de una persona a otra se facilita en condiciones de hacinamiento, por ejemplo guarderías, colegios
entre otros. En todo el mundo se declaran alrededor de 500millones de casos de infección por
oxiuros. El oxiuro adulto hembra tiene 10 mm de longitud, tiene color amarillo cremoso con cola
afilada. Transcurren en dirección longitudinal a ambos lados del cuerpo crestas pequeñas que se
ensanchan en dirección anterior en forma similar a una aleta. Rara vez se observan machos y
suelen ser más pequeños (3 mm). Los huevecillos son de color claro, ovoides, con una cubierta
delgada, se encuentran aplanados de un lado y miden 25 por 50 μm.

Enterobius vermicularis. A. Estructura del huevecillo. B. Estructura del oxiuro hembra adulto. C. Huevecillo en etapa
de embrión recuperado de heces.

CICLO VITAL

Los gusanos adultos se unen a la mucosa del ciego. Conforme se inicia el término del periodo de
gravidez, la hembra migra hacia el colon y durante la noche atraviesa el conducto anal y deposita
hasta 20 000 huevecillos que se adhieren a la piel perianal del hospedador y ropa de cama. Los
huevecillos se encuentran cerca de la madurez al momento de depositarse y se tornan infecciosos
poco después. La manipulación de la ropa de cama o el rascado de la región perianal para aliviar el
prurito relacionado, ocasionan que los huevecillos se adhieran a los dedos y más tarde se
transfieran a la cavidad oral durante la alimentación o durante otras maniobras dedo-boca. Los
huevecillos también pueden ser sacudidos hacia el aire ambiental (p. ej., al hacer la cama), se
inhalan y se degluten. Más tarde, los huevecillos eclosionan en la porción proximal del intestino y
las larvas emigran hacia el ciego, maduran a la forma adulta y se reproducen. La totalidad del ciclo
adulto-adulto se completa en dos semanas.

Los gusanos adultos habitan en el ciego. Las hembras se dirigen hacia el ano por las noches para
depositar sus huevecillos en el perineo. Los huevecillos son infecciosos para el hospedador y para
otras personas poco después de su depósito. Los huevecillos ingeridos eclosionan y las larvas
maduran a formas adultas en el intestino.

Enterobiasis: aspectos clínicos

MANIFESTACIONES

E. vermicularis rara vez produce enfermedades graves. El síntoma más común es el prurito anal,
que suele ser más intenso por la noche y se ha atribuido a la migración de la hembra grávida;
puede conducir a la irritabilidad y a otras molestias menores. En infecciones graves, el prurito
intenso puede ocasionar rascado, excoriación e infección bacteriana secundaria. En mujeres el
gusano puede penetrar en el aparato genital, ocasionar vaginitis, endometritis granulomatosa o
incluso salpingitis. Se ha sugerido que los gusanos en migración pueden portar bacterias entéricas
hacia la vejiga en mujeres jóvenes, induciendo una infección bacteriana aguda de las vías urinarias.
Este gusano con frecuencia se encuentra en la luz de apéndices extirpados, pero es poco probable
que sea una causa de apendicitis.

DIAGNÓSTICO

Por lo común no hay eosinofilia. El diagnóstico se sugiere por las manifestaciones clínicas y se
confirma por la recuperación de huevecillos característicos de la mucosa anal. La identificación se
logra al aplicar el lado adherente de una cinta adhesiva de celofán a la unión mucocutánea; más
tarde se transfiere la cinta a un portaobjetos y se examina bajo el microscopio con una lente de
poco aumento.

TRATAMIENTO Y PREVENCIÓN

Se dispone de varios fármacos que producen resultados muy satisfactorios, lo que incluye al
pamoato de pirantel y mebendazol para el tratamiento de la Enterobiasis. Muchos autores
consideran que se debe tratar de manera simultánea a todos los miembros de la familia o
personas que habitan en el mismo domicilio. En infestaciones graves se recomienda repetir el
tratamiento después de dos semanas. Las tasas de curación son elevadas, pero la reinfección es en
extremo común. No es necesario el tratamiento en ausencia de síntomas.

TRICHURIS TRICHIURA

El tricocéfalo adulto tiene 30 a 50 mm de longitud. En sus dos tercios anteriores es delgado y


filiforme, en tanto que su extremo posterior es prominente, dando al gusano el aspecto de un
pequeño látigo. La cola del macho se encuentra enrollada en tanto que la de la hembra es recta.
La hembra produce 3 000 a 10 000 huevecillos de forma oval cada día tienen una cubierta gruesa.
CICLO VITAL

Trichuris trichiura tiene un ciclo vital que difiere del observado en los oxiuros sólo en cuanto a su
fase interna. Los adultos viven unidos a la mucosa del colon a través de su extremo anterior
delgado. Mientras conservan su posición en el ciego, la hembra grávida libera sus huevecillos hacia
la luz intestinal, los cuales se eliminan del cuerpo humano con las heces y, en regiones con malas
medidas sanitarias, se depositan en la tierra. Los huevecillos son inmaduros al momento de
eliminarse en las heces y deben incubarse al menos por 10 días (periodos más prolongados si las
condiciones de la tierra, la temperatura y humedad son subóptimas) antes de que formen
embriones completamente desarrollados e infecciosos. Una vez que han madurado, se fijan a las
manos de los niños que juegan en la tierra o de trabajadores agrícolas y de ahí alcanzan la boca. En
regiones donde las heces humanas se utilizan como fertilizantes, puede haber contaminación de
frutas y vegetales crudos, los cuales más tarde serán ingeridos. Después de la ingestión, los
huevecillos eclosionan en el duodeno y liberan larvas maduras por casi un mes en el intestino
delgado antes de migrar hacia su hábitat en el ciego, donde pasan su vida como adultos.

Trichuriasis

EPIDEMIOLOGÍA

Aunque se encuentra menos diseminada que la oxiuriasis, la tricocefalosis es una parasitosis


cosmopolita, que afecta a casi 1 000 millones de personas en todo el mundo. Se concentra en
regiones donde la defecación indiscriminada y el clima tibio y húmedo producen siembra extensa
de la tierra con huevecillos infecciosos. En climas tropicales, las tasas de infección pueden ser
hasta de 80%. La incidencia es mucho más baja en climas templados, pero la Trichuriasis afecta a 2
millones de individuos en las regiones rurales del sudeste de EUA, donde ataca sobre todo a
grupos familiares e institucionales, que tal vez mantienen un bajo nivel sanitario en los niños y en
individuos con retraso mental. La intensidad de la infestación por lo general es baja y los gusanos
adultos pueden vivir de 4 a 8 años. Se asocian con la defecación en la tierra con clima húmedo y
cálido. Los gusanos adultos viven por años.

PATOGÉNESIS E INMUNIDAD

La fijación de los gusanos adultos a la mucosa del colon y sus actividades de alimentación
subsecuentes produce ulceración localizada y hemorragia (0.005 ml de sangre por gusanos/día).
Las úlceras crean sitios de entrada para las bacterias entéricas hacia el torrente sanguíneo y en
ocasiones sobreviene bacteriemia sostenida. La disminución de la prevalencia de Trichuriasis en el
periodo posterior a la adolescencia y la demostración de inmunidad adquirida en animales de
experimentación sugieren que puede desarrollarse inmunidad por infecciones adquiridas por
personas en forma natural. En humanos se puede demostrar una respuesta inmunitaria de la
mucosa mediada por IgE, pero ésta es insuficiente para favorecer la expulsión del parásito. La
ulceración colónica local proporciona un punto de entrada al torrente sanguíneo para las
bacterias.

Trichuriasis: aspectos clínicos

MANIFESTACIONES

Las Trichuriasis leves cursan asintomáticas. Con cargas moderadas de gusanos, el daño a la mucosa
intestinal puede inducir náusea, dolor abdominal, diarrea y retraso del crecimiento. En ocasiones
un niño puede portar hasta 800 gusanos o más. En tales situaciones la totalidad de la mucosa
colónica se encuentra parasitada, con daño significativo a la mucosa, hemorragia y anemia. La
fuerza para la expulsión del bolo fecal por la presencia de los gusanos puede producir prolapso de
la mucosa rectal o colónica a través del ano, en particular cuando el hospedador realiza esfuerzo
para la defecación o durante la infancia. Daño colónico con dolor abdominal y diarrea.

DIAGNÓSTICO

Las heces se examinan en busca de los huevecillos característicos, en las infecciones graves se
puede detectar eosinofilia y anemia.

TRATAMIENTO Y PREVENCIÓN

Las infestaciones no deben tratarse a menos que produzcan síntomas. El mebendazol es el


fármaco preferido; el albendazol parece tener la misma eficacia. La tasa de curación es de sólo 60
a 70%, pero por lo común se expulsan más de 90% de los gusanos adultos, lo que deja al paciente
asintomático. La prevención requiere la mejoría de las instalaciones sanitarias.

- Ascaris lumbricoides

A. lumbricoides es un gusano de vida corta (6 a 18 meses); es el helminto intestinal más grande y


más común. Al medir 15 a 40 cm de longitud. Su cutícula firme, amarillenta y sus extremos
ahusados lo diferencian del gusano común de tierra, al cual se parece tanto en tamaño como en
morfología externa. El macho es ligeramente más pequeño que la hembra. La hembra expulsa 200
000 huevecillos al día, se encuentre o no fertilizada. Estos gusanos son muy resistentes a las
condiciones ambientales y pueden permanecer viables hasta por seis años en climas templados.
Los huevecillos permanecen viables hasta por seis años.

CICLO VITAL

Ascaris adultos viven en el intestino delgado, donde se mantienen por medio de la actividad
muscular. Los huevecillos se depositan en la luz intestinal y se eliminan en las heces. Al igual que
los huevecillos de Trichuris, los huevecillos de Ascaris deben presentar la etapa embrionaria en
tierra, por lo común por un mínimo de tres semanas, antes de tornarse infecciosos. Sin embargo,
las similitudes con Trichuris terminan con la ingestión de los huevecillos por el hospedador.
Después de la eclosión las larvas penetran en la mucosa intestinal e invaden las vénulas portales.
Son transportadas al hígado, donde son lo suficientemente pequeñas para pasar a través de los
capilares y salen a través de la vena hepática, donde son transportadas a las cavidades derechas
del corazón y más tarde hacia el tejido pulmonar. En el transcurso de su migración, la larva
incrementa su tamaño. Para el momento en que alcanza los capilares pulmonares, es demasiado
grande para pasar a través de las cavidades izquierdas del corazón. Al encontrar obstruida su ruta,
perfora los espacios alveolares, avanza a través del árbol pulmonar y más tarde es deglutido.
Después de alcanzar la porción superior del intestino, completa su maduración y se reproduce. Los
gusanos adultos habitan el intestino delgado.

Ascariasis

EPIDEMIOLOGÍA

Al igual que la Trichuriasis, con la cual coexiste, la ascariasis es una enfermedad de climas cálidos y
con malas medidas de higiene. Se transmite por los niños pequeños que defecan de manera
indiscriminada en las cercanías del hogar y llevan los huevecillos infecciosos en las manos durante
el juego. La geofagia puede ocasionar cargas masivas de gusanos. Los parásitos también pueden
adquirirse a través de la ingestión de alimentos contaminados con huevecillos; en climas secos y
ventosos los huevecillos pueden ser transportados a través del aire, inhalarse y deglutirse. En
regiones tropicales, la totalidad migra de la población puede verse afectada; sin embargo, la
mayor parte de los gusanos parecen agregarse en una pequeña porción de la población, lo que
sugiere que algunos individuos están predispuestos a sufrir infestaciones intensas.
PATOGÉNESIS E INMUNIDAD

Hay evidencia convincente de que la ascariasis induce respuesta inmunitaria protectora en el


hospedador. Sin embargo, la gravedad del daño pulmonar inducido por la migración de las larvas a
través del pulmón parece estar relacionada en parte con una reacción de hipersensibilidad
inmediata a los antígenos larvarios. Reacciones de hipersensibilidad pulmonar a la migración
larvaria.

Ascariasis: aspectos clínicos

MANIFESTACIONES

Las manifestaciones clínicas de la ascariasis pueden ser consecuencia de la migración de las larvas
a través del pulmón o de la presencia de gusanos adultos en la luz intestinal. La afección pulmonar
suele observarse en comunidades con transmisión estacional; la gravedad de los síntomas se
relaciona con el grado de hipersensibilidad inducida por infecciones previas y por la intensidad de
la exposición actual. Son comunes manifestaciones como fiebre, tos, sibilancias y disnea. Los
estudios de laboratorio muestran eosinofilia, desaturación de oxígeno e infiltrados pulmonares
por la migración. Se han reportado casos ocasionales de muerte por insuficiencia respiratoria. Si la
carga de gusanos es pequeña, las infestaciones con gusanos adultos pueden ser por completo
asintomáticas. Son motivo de atención clínica cuando son vomitados o eliminados en las heces.
Esta situación es más probable durante episodios de fiebre, la cual parece estimular al gusano para
que incremente su motilidad. En ocasiones un gusano adulto migra hacia el apéndice cecal, vía
biliar o conducto pancreático, ocasionando obstrucción e inflamación del órgano. Cargas muy
grandes de gusanos pueden producir dolor abdominal y malabsorción de grasas, proteínas,
carbohidratos y vitaminas. En niños con desnutrición marginal puede haber retraso del
crecimiento. En ocasiones los gusanos pueden formar masas que causan obstrucción intestinal, en
particular en niños.

DIAGNÓSTICO

El diagnóstico de ascariasis por lo general se establece al encontrar los huevecillos característicos


en heces. La productividad extrema de la hembra por lo general hace de ésta una tarea sencilla,
con excepción de aquellos casos en los cuales predominan huevecillos no fertilizados, de aspecto
atípico. La fase pulmonar de la ascariasis se diagnostica al encontrar larvas y eosinófilos en esputo.
El examen de heces revela con rapidez la presencia de huevecillos característicos.

Cestodos

Los cestodos son helmintos largos, acintados, que se han ganado el apelativo común de tenias
(cinta en latín), lo que hace referencia a su forma. Su aspecto, número y reputación exagerada de
inducir pérdida de peso los han hecho los gusanos intestinales mejor conocidos. Las mejoras
sanitarias han reducido de manera espectacular la prevalencia de la infestación. Es el más grande y
más repulsivo de los parásitos intestinales.

 Taenia saginata
 Taenia solium
 Diphyllobothrium latum
 Hymenolepis nana
 Hymenolepis diminuta
 Dipylidiumca ninum

Tenia Saginata

T. saginata habita en el yeyuno del humano, donde puede vivir hasta por 25 años y alcanzar una
longitud máxima de 10 m; carece de ganchos pero posee cuatro discos de succión que son típicos
de la mayor parte de los cestodos Cuando está en estado grávido, cadenas de 6 a 9 proglótides.
Terminales, cada uno con casi 100 000 huevecillos, se separan del resto del estróbilo. Estos
segmentos musculares pueden desplazarse sin ayuda a través del conducto anal y eliminarse
intactos en las heces. Los proglótides que alcanzan la tierra finalmente se desintegran y liberan sus
huevecillos característicos, mismos que tienen un diámetro de 30 a 40 μm, son esféricos y poseen
una cubierta gruesa con estrías radiales. En entornos apropiados, el embrión hexacanto puede
sobrevivir por meses. Si es ingerido por ganado o por otros herbívoros, se libera el embrión,
penetra la pared intestinal y alcanza el aparato vascular hacia los músculos estriados de la lengua,
diafragma y cuartos traseros. Ahí se transforma en un cisticerco blanquecino, ovoide, de 5 por 10
mm, denominado Cysticercus bovis. Cuando se presenta en grandes cantidades, el cisticerco
produce en la carne un aspecto manchado, desagradable. Los humanos se infectan cuando
ingieren carne mal cocida que contiene formas larvarias.

Manifestaciones clínicas

La mayor parte de las personas infectadas con tenia de la res cursan asintomáticas y adquieren
conciencia de la infestación sólo después de la eliminación espontánea de proglótides, los cuales
pueden observarse en la superficie de las heces o aparecer en la ropa de cama de un hospedador
alarmado. El paso puede ocurrir de manera muy irregular o puede precipitarse por el consumo
excesivo de alcohol. Algunos pacientes reportan molestia epigástrica, náusea, irritabilidad (en
particular después de la eliminación de proglótides), diarrea y pérdida de peso. En ocasiones los
proglótides pueden ocasionar la obstrucción de la luz apendicular, conducto biliar o conducto
pancreático.

Diagnostico

El diagnóstico se establece al encontrar huevecillos o proglótides en heces. Los huevecillos


también pueden hallarse en el área perianal como consecuencia de la rotura de proglótides
durante el paso a través del conducto anal. La técnica de cinta adhesiva de celofán descrita para
los oxiuros puede utilizarse para recuperar gusanos de esta área. Con este procedimiento se
detectan 85 a 95% de las infestaciones, a diferencia de 50 a 75% que se logra con el examen de las
heces. Los huevecillos de T. solium y T. saginata son idénticos desde el punto de vista morfológico
y, por tanto, es necesario examinar los proglótides para identificar de manera correcta la especie.

TRATAMIENTO Y PREVENCIÓN

Los fármacos preferidos son prazicuantel o niclosamida, que actúan de manera directa sobre el
gusano; ambos fármacos son muy eficaces en preparaciones orales de una sola dosis. El control se
logra mejor a través de la eliminación sanitaria de heces humanas. La inspección de la carne es de
gran utilidad; los cisticercos pueden observarse con facilidad. En regiones donde es común la
infección, la cocción cuidadosa es el método de control más práctico. Temperaturas internas de 56
°C o más por cinco minutos o más destruyen a todos los cisticercos. Salar o congelar la carne por
una semana a –15 °C o menos también es eficaz.

Tenia Solium

Al igual que la tenia de la carne de res, con la cual guarda gran similitud, T. solium habita en el
yeyuno del humano, donde puede sobrevivir por décadas. Puede diferenciarse mediante la
revisión cuidadosa del escólex y de los proglótides; T. solium cuenta con un rostelo equipado con
una doble hilera de ganchos Desde el punto de vista morfológico, cada huevecillo parece idéntico
al de T. saginata, pero infestan sólo a cerdos.
Sin importar la vía, el huevecillo que alcanza el estómago de un hospedador intermedio apropiado
presenta eclosión y libera un embrión hexacanto. El embrión penetra la pared intestinal y puede
ser transportado a través del aparato linfohematógeno a cualquier tejido del cuerpo. Ahí se
desarrolla en un cisticerco opalescente blanquecino de 1 cm, a lo largo de 3 o 4 meses. El
cisticerco puede permanecer viable hasta por cinco años, y en algún momento infecta a los seres
humanos cuando ingieren carne mal cocida infectada. El escólex se expulsa, se fija a la mucosa y
da origen a un nuevo gusano adulto, con lo que se completa el ciclo.

MANIFESTACIONES

Los signos y síntomas de infección con gusanos adultos son similares a los observados con Taenia
saginata. Las manifestaciones clínicas son por completo diferentes cuando los humanos actúan
como hospedadores intermedios. Se desarrollan cisticercos en tejidos subcutáneos, músculos,
corazón, pulmón, hígado, cerebro y ojos. En tanto que el número de cisticercos sea pequeño y .-
permanezcan viables, se observa una reacción hística moderada y el paciente se encuentra
asintomático. Sin embargo, con la muerte de la larva se estimula una reacción inflamatoria notable
con fiebre, mialgias y eosinofilia.

La presentación clínica más importante y espectacular de la cisticercosis es consecuencia de


lesiones en el sistema nervioso central (SNC). Durante la etapa de invasión aguda, el paciente
experimenta fiebre, cefalea y eosinofilia. En infecciones intensas puede presentarse un síndrome
de meningoencefalitis con pleocitosis de líquido cefalorraquídeo (LCR) a expensas de eosinófilos.
Los quistes establecidos pueden encontrarse en cerebro, ventrículos, espacio subaracnoideo,
médula espinal y ojos. Los quistes cerebrales suelen ser pequeños, a menudo miden 2 cm o menos
de diámetro y las lesiones agrupadas pueden tener un tamaño tres veces superior. Estas
infecciones parenquimatosas pueden inducir anomalías neurológicas focales, cambios en la
personalidad, afectación intelectual, convulsiones o diferentes combinaciones de estas
manifestaciones; en muchas regiones endémicas, la cisticercosis es la principal causa de epilepsia.

DIAGNÓSTICO

La infección por el gusano adulto se diagnostica de la misma forma que se describió para T.
saginata. Se sospecha la cisticercosis cuando un individuo proviene de una región endémica y
presenta manifestaciones neurológicas o nódulos subcutáneos. Las radiografías simples de tejidos
blandos a menudo revelan cisticercos muertos, calcificados. Las lesiones viables pueden
detectarse como tumoraciones de baja densidad en la tomografía computarizada (TC) o imágenes
por resonancia magnética nuclear (IRM). Los cisticercos cerebrales por lo común tienen 5 a 10 mm
de diámetro. Las lesiones subaracnoideas a menudo son grandes, pueden estar lobuladas y con
frecuencia son “isodensas”, lo que dificulta su identificación radiográfica. El diagnóstico se
confirma al demostrar la presencia de la larva en una muestra de biopsia de un nódulo
subcutáneo, o bien, por la presencia de anticuerpos específicos en la sangre circulante. Los
inmunoanálisis enzimáticos en suero y LCR y las pruebas de inmunotransferencia (Western blot)
para detectar anticuerpos específicos contra cisticercos tienen sensibilidad de 80 a 95%. La
presencia de anticuerpos IgG solos puede reflejar la existencia de enfermedad antigua o inactiva.
TRATAMIENTO Y PREVENCIÓN

La infección del gusano adulto se trata de la misma forma en que se describió para T. saginata. La
tasa de mortalidad en pacientes con neurocisticercosis sintomática se acerca a 50%, por lo que
está indicado el tratamiento intensivo. Los pacientes con lesiones parenquimatosas por lo común
responden al tratamiento prolongado con prazicuantel o albendazol. La administración simultánea
de corticosteroides ayuda a reducir la respuesta inflamatoria cuando mueren los cisticercos.

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