La educación es un derecho humano fundamental así reconocido desde 1948, año en el cual se
firma la Declaración Universal de los Derechos Humanos y está incluido en su artículo 26. El
artículo 3° de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos lo ampara señalando:
“Todo individuo tiene derecho a recibir educación”. Los derechos humanos se conforman por
un conjunto de prerrogativas inalienables, imprescriptibles e inherentes al ser humano; son del
individuo y el Estado los reconoce. La educación es también un derecho social, considerado
derecho básico e indispensable, para garantizar condiciones de vida digna a todos los seres
humanos por el simple hecho de serlo. Tanto la Declaración Universal de los Derechos
Humanos, la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos como el Pacto
Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, definen a la educación, al menos
la obligatoria, como gratuita.
Si bien no existe jerarquía entre los derechos humanos, individuales, sociales y colectivos, por
ende, el derecho a la educación no es superior a los demás, sí puede ser considerado un
derecho clave, porque de su cumplimiento depende que se puedan ejercer mejor todos los
otros derechos Hoy en día, en México, se establece con toda claridad que la educación es un
derecho humano, por el solo hecho de ser personas.
Hay propuestas importantes acerca de la información que debe tomarse en cuenta a fin de
saber si una determinada sociedad efectivamente está experimentando los avances necesarios
en el cumplimiento del derecho a la educación.
El sistema educativo mismo, debe estar orientada a mejorar la capacidad de cada actor, en
cada nivel, de cumplir mejor con el propósito de hacer realidad el aprendizaje de calidad, de
manera imparcial, para todos los habitantes del país.
Capitulo 5- ¿Contribuye la Educación al ejercicio del derecho de una vida más plena y
satisfactoria?
La formación que resulta de la escolarización es un activo y medio potencial para que los
ciudadanos puedan ejercer y exigir sus derechos, también provee a las personas de elementos
para ser usuarios y generadores de cultura, así como de insumos para tomar decisiones mejor
informadas. Aumentando las capacidades y competencias de las personas enriqueciendo los
recursos humanos del país para su desarrollo económico, científico y social.
Tiene que ver con la dinámica y el tamaño de los mercados de trabajo asalariado.
El hecho de que la escolaridad es una variable cercana que no logra captar
completamente la “calidad” de la educación — o, más generalmente, de la formación,
cognitiva y no cognitiva de las personas— que es valorada por los mercados.
Los datos estimados con base en la Encuesta Nacional sobre Uso del Tiempo, indican que la
población de 25 a 64 años más escolarizada destina un tiempo significativamente mayor al
ejercicio físico que el que le dedica la gente menos escolarizada, independientemente del
estrato de ingreso en el que ésta se encuentre