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GARANTÍAS

Es el aval económico que garantiza el cumplimiento total de una responsabilidad


contractual. Se extiende a favor del propietario del proyecto y puede ser: garantía
hipotecaria, cheque certificado, cheque de caja, deposito en efectivo, fianza
extendida por un banco o afianzadora. Las condiciones de cada proyecto definen
el periodo de entrega, monto, vigencia, y los tipos.0

Garantía de mantenimiento de obra

Garantiza que el ofertante de un servicio mantiene en firme su oferta económica


por un periodo de vigencia estipulado en las condiciones generales del proyecto.
Su monto varia del (2% al 5%) del monto ofertado (LACAP art.33) y su vigencia
normal puede ser como minino de 90 días calendario y se emite a favor del
contratante.

Garantía de anticipo

Garantiza que el 100% del anticipo otorgado será usado en la ejecución del
proyecto. el monto garantizado es del 100% del anticipo y tendrá una vigencia
hasta que se haya amortizado completamente el anticipo. El máximo anticipo que
se puede otorgar es del 30% del monto contratado. (ART. 34) y se emite a favor
del contratante.

Garantía del fiel cumplimiento de contrato

Garantiza que se ejecutara el 100% del proyecto y que en ningún caso el


contratista abandonara la obra. Su monto es del 10% del monto contratado (ART.
35 LACAP) y su vigencia es por lo menos el tiempo contractual y debe ampliarse
hasta que el proyecto finalice completamente y se emite a favor del contratante.

Garantía de buena obra

Garantiza la buena calidad de la obra ejecutada y materiales utilizados y se


entrega al propietario después de la recepción final del proyecto. Su monto es del
10% del monto final contratado y su vigencia no debe ser menor de 1 año y se
emite a favor del contratante. (ART.37 LACAP)

Garantía de pagos a terceros.

Garantiza que el contratista no adeuda a ninguna persona el valor de materiales,


mano de obra, subcontratistas de servicios incorporados al proyecto y se asegura
que el propietario no será demandado por estas situaciones, las condiciones
depende del proyecto.
ROTULO DE LICITACION

Es el aviso público que se realiza para invitar a personas naturales o jurídicas a


presentar ofertas de servicios de construcción y/o supervisión de un proyecto. El
aviso debe contener: institución que promueve, nombre del proyecto, objeto del
contrato, personas que pueden participar, lugar y fecha de retiro de bases de
participación, requisitos, entrega y apertura de ofertas, forma de presentación,
plazo de ejecución y monto disponible.

DEFINICIÓN DE LICITACION.

Las licitaciones son la regla general para las adquisiciones, de arrendamientos y


servicios,

son convocadas mediante una convocatoria pública para que se presenten


propuestas libremente, en sobre cerrado mismo que es abierto públicamente para
que sean aseguradas al estado las mejores condiciones en cuanto a la calidad,
precio, financiamiento, oportunidad, crecimiento económico, generación de
empleo, eficiencia energética, optimización y uso sustentable del medio ambiente.

¿CÓMO ES UNA LICITACIÓN PÚBLICA?

En una licitación, todas las compañías que entran en concurso deben participar
en igualdad de oportunidades. Para asegurarlo, la Administración debe seguir los
siguientes principios:

 Libertad de concurrencia: toda aquella empresa que considere que tiene


los recursos y habilidades, puede presentarse a la licitación.
 Transparencia: desde la Administración hay que mostrar todos los pasos
que se realizan de forma clara.
 Publicidad: se da a conocer la licitación en el lugar que hay habilitado para
ello para que pueda ser conocido por todas las empresas en el mismo
momento.
 Objetividad: se tratarán a todas las empresas por los mismos parámetros,
sin ningún tipo de favoritismo.

¿QUÉ REQUISITOS DEBE MOSTRAR UNA EMPRESA?

Para poder ser tenidas en cuenta, las empresas deben demostrar lo siguiente:

 Solvencia económica y financiera: que disponen de los recursos


necesarios para realizar la obra o servicio. Para ello, se examinan
sus cuentas anuales y cuál es su volumen de negocio.
 Solvencia profesional y técnica: demostrar que la empresa es capaz de
realizar aquel servicio. La mejor forma de mostrarlo es realizando
una relación completa de aquellos trabajos que se han desempeñado en los
últimos años. Así, la Administración tiene una vía clara donde poder
comprobar el trabajo y su calidad.

¿QUÉ FACTORES SE TIENEN EN CUENTA?

Una vez reunida toda la información, la Administración se encarga de revisarlo


todo y, mediante ponderaciones propias, escoger aquella empresa que creen que
mejor será capaz de prestar el servicio que se pide. Para ello, se fijan en los
siguientes aspectos:

 Precio: hay que tener en cuenta que toda licitación supone una
movilización de recursos públicos, que son el resultado del esfuerzo
fiscal de personas y empresas que operan en el país. Por lo tanto, se
querrá que sea el menor posible, siempre dentro de unos estándares de
calidad.
 Calidad: al tratarse de una obra pública, tendrá un gran impacto e
incidencia en la vida de las personas. Así pues, existe preocupación para
que se haga de la mejor forma posible. Para ello, se analizan de forma
exhaustiva los informes técnicos que se han elaborado y se tiene en cuenta
el resultado final de obras parecidas.

 Experiencia: aquellas empresas que lleven más tiempo realizando obras


similares tienen más probabilidades de ser escogidas. Ello deja en situación
de gran dificultad a empresas que empiezan, que deberán presentar un
proyecto muy sólido y creíble para ser las seleccionadas.
 Solvencia: lo peor que le puede pasar a una obra pública es quedarse a
medias. Las consecuencias las paga directamente la población, que es a la
vez el beneficiario de ellas. Por lo tanto, la empresa debe mostrar solvencia
y que será capaz de invertir la cantidad demandada y que seguirá
funcionando durante todo el periodo que dure la obra.

Los tres procedimientos que pueden utilizar las dependencias para adquirir
productos y servicios son:

 Licitacion Pública.
 Invitación a cuando menos tres personas
 Adjudicación directa.

LICITACION PÚBLICA.
Las licitaciones públicas pueden ser presenciales, electrónicas o mixtas.

Presenciales:

Aquellas en las que solo se podrán presentar propuestas en sobre cerrado, de


forma documental, durante un acto de presentación y apertura de propuesta y en
donde todo acto de la licitacion ya sea junta de aclaraciones, acto de presentación
y apertura o acto de fallo deben ser presenciales, es decir, que debe el licitante
estar presente físicamente en dicho actos.
Electrónicas:
Únicamente se permita la participación de los licitantes a través de COMPRANET
y utilizando los medios de identificación electrónica que son proporcionados por la
Secretaría de la Función Pública.

Mixtas:
Cuando las licitaciones sean de las llamadas mixtas, los licitantes, a su elección
podrán participar de manera presencial o electrónica en todos los actos de la
licitacion (Junta de aclaraciones, acto de presentación y apertura de propuestas o
acto de fallo).

EXCEPCIONES A LA LICITACION

Toda selección de los procesos de excepción a la licitacion publica que realicen


las dependencias deben ser fundados y motivados, según las circunstancias y con
criterios establecidos en la Ley de adquisiciones.

En cualquier supuesto invitarán a personas que cuenten con capacidad de


respuesta inmediata así como los recursos técnicos y financieros que aseguren al
Gobierno las mejores condiciones.

Las excepciones a la licitación pública son:

- Invitación a cuando menos tres personas


- Adjudicación directa.
Las dependencias podrán contratar mediante estos esquemas cuando:

 No existan bienes o servicios alternativos o sustitutos, o bien solo exista un


posible oferente, o se trate de una persona que posea la titularidad o el
licenciamiento exclusivo de patentes, derechos de autor, u otros derechos
exclusivos, o por tratarse de obras de arte.
 Peligre o se altere el orden social, la economía, la salubridad, seguridad y el
ambiente como consecuencia de caso fortuito o fuerza mayor.
 Existan circunstancias que puedan provocar pérdidas o costos adicionales
importantes.
 Las que se realicen con fines exclusivamente militares y su contratación
ponga en riesgo la seguridad nacional.
 También que derivado de caso fortuito o fuerza mayor, no sea posible
obtener bienes y servicios por medio de licitacion publica.

Que se le haya rescindido un contrato adjudicado a través de licitacion publica a


un licitante, en cuyo caso se le adjudicará al siguiente concursante en precio,
también que se haya declarado desierta una licitacion publica o se trate de
adquisiciones de bienes perecederos o existan razones justificadas para la
adquisición de bienes de marca determinada o se trate de servicios de
consultorías, estudios o investigaciones.

Se podrá contratar adquisiciones arrendamientos y servicios, sin sujetarse al


proceso de licitacion, en el supuesto de que no se excedan en cada operación los
montos máximos establecidos en el presupuesto de egresos de la federación.
INVITACIÓN A CUANDO MENOS TRES PERSONAS.

Los procesos de Invitación a cuando menos tres personas son llevados a cabo de
forma parecida a una licitacion, ya que la invitación es difundida a través de
Internet (COMPRANET) y en la página WEB de la dependencia o entidad, los
actos de presentación y apertura podrán ser sin la presencia del licitante, pero
siempre se invitará al Órgano Interno de Control. Para que se realicen la
adjudicación se debe contar con un mínimo de tres propuestas solventes. Los
plazos se fijan atendiendo el tipo de bienes o servicios requeridos.
BITÁCORA DE OBRA.

DEFINICIÓN. En construcción, la bitácora de obra es una libreta que forma parte


del contrato. Se utiliza para anotar en ella cualquier situación que se presente
durante el desarrollo de los trabajos de construcción que sea diferente a lo
establecido en los anexos técnicos de contratación. Diciéndolo en otras palabras,
se anota en ella todo lo que resulte distinto a lo previsto a la firma del contrato, por
ejemplo: en caso de existir una escasez de cemento, habría que anotarlo en la
bitácora ya que afecta al programa de obra al no poderse avanzar en colados; en
caso de ocurrir, deberá anotarse también una alza imprevista en el precio del
acero, ya que ello tendrá repercusiones al incrementar los costos originales; se
anotaría también un cambio en las especificaciones de un mueble de baño, puesto
que quedaría afectada la calidad del producto. Estos ejemplos nos muestran
situaciones que afectan los resultados al modificar las condiciones sobre las que
se estableció el pacto entre quien encarga la obra y quien la ejecuta.

Anotaciones como las descritas en el párrafo anterior pueden provenir de


cualquiera de las partes que firman el contrato, ya que ambas tienen tanto el
legítimo derecho como la obligación de hacerlas.

La función más importante de la bitácora para el supervisor, es la de constituir una


herramienta de control. De hecho, esa es la principal razón por la que fue creada.
Permiten mantener las riendas que controlan el avance de la obra y obtener los
resultados preconcebidos.

TEORIA SOBRE EL USO DE LA BITÁCORA DE OBRA.

Hemos señalado que la bitácora forma parte del contrato de obra, por
consiguiente, al término de los trabajos de construcción el contenido de la bitácora
complementara los términos y condiciones establecidas tanto en el texto del
contrato como en los anexos técnicos que son así mismo parte integrante del
contrato.
Hemos dicho y ahora reiteramos que la bitácora es el instrumento por excelencia
para ejercer el control de la obra a nuestro cargo. Esta gran virtud lleva implícita
también una gran responsabilidad sobre la cual el supervisor debe tener plena
conciencia. Cada uno de los asientos en la bitácora es importante. Es posible que
muchas de las notas no representan consecuencias posteriores, pero nunca
podremos saber en ese momento cuales de ellas van a convertirse en
significativas. Por lo tanto, debemos cuidar la elaboración y el contenido de todos
los asientos sin excepción.

Teóricamente, la bitácora de obra es un medio oficial y legal de comunicación


entre las partes que firman el contrato.

Está vigente durante el desarrollo de la obra y su último objetivo es el de oficializar


todos los elementos que integraran el finiquito del contrato, un instrumento que, a
su vez, trata de la relación de costos reales autorizados que determinan el valor
final de la obra misma. Es fundamental comprender esta teoría ya que de ahí
partirá la posibilidad de un manejo adecuado y profesional de todo el proceso
constructivo, con todas las ventajas y conveniencias que representa para el
ejecutor, el contratante y para la calidad del producto terminado.

Dada la seriedad que debe tener la bitácora, su uso debe limitarse a asuntos
importantes relacionados con la obra. Desgraciadamente ocurre con demasiada
frecuencia que se le utilice como una especie de “buzón de quejas”, anotando en
ella asuntos no solo intranscendentes, sino de carácter personal.
FORMATOS DE LA BITACORA DE OBRA.

La podemos clasificar en 3 tipos: En el primer tipo encontramos el formato


diseñado e impreso conforme a las necesidades de una institución que contrata
obra regularmente. Estas libretas ya tienen el núm. de copias que son necesarias
de acuerdo a las necesidades e inclusive está indicado el destino de cada una de
dichas copias.

El segundo tipo son los formatos que se encuentran a la venta en papelerías


especializadas.

El tercer tipo serían los formatos improvisados. En cualquiera de los tres casos se
deben cumplir las condiciones descritas a continuación:

1) Las hojas originales deben estar foliadas

2) Se debe contar con un original y al menos dos copias, una para el contratista y
otra para el contratante.

3) Las hojas copia deben ser desprendibles, no así la original 4) deberá existir
una columna para anotar el núm. de la nota y la fecha

4) deberá existir una columna para anotar el núm. de la nota y la fecha

El tamaño de las libretas de bitácora constituye un problema. En ocasiones son


insuficientes y en otras quedan muchas hojas sobrantes. En el primer caso será
necesario abrir otra u otras libretas e indicar en cada una de las hojas, justo antes
del núm., la leyenda correspondiente: “libreta 2ª “, “libreta 3ª”, etc.

Las pastas deben ser duras y resistentes al mal trato, y de preferencia de algún
material capaz de resistir a la humedad. En caso de trabajarse en un frente de
obra en donde existen muchos contratistas, y por consiguiente se manejan
muchas libretas de bitácora, se recomienda que en los lomos y en las pastas
frontales los datos indicativos en letras de mayor tamaño posible. Esto ahorrara
tiempo para identificarlas pues las fracciones de minuto perdidos diariamente
pueden significar horas la final de la obra. Estos detalles son importantes si
deseamos ser eficientes.

Los sig. puntos se refieren a prohibiciones respecto a las libretas de bitácora.


Como supervisores profesionales no debemos permitir que se ponga en entre
dicho nuestra principal herramienta de control. En este sentido deberemos ser
muy estrictos.

El foliado de las hojas debe revisarse antes de empezar a utilizarlas, ya que puede
haber errores de imprenta, en cuyo caso es conveniente desechar la libreta. Si
fuese necesario foliarla a mano, se procederá a realizar esto por triplicado y con
tinta indeleble, cuidando de no omitir ningún número.

En el caso que se utilice una libreta de bitácora improvisada, es conveniente para


proteger los asientos, que la parte superior (junto al num. de folio) firme en cada
hoja aunque sea con antefirma cada una de las partes (residente y supervisor).

Si no hay libreta de bitácora no puede iniciarse la obra.

En caso de no haberse recibido oportunamente por cualquier razón, será valido


iniciar con una libreta improvisada que reúna las condiciones aquí mencionadas y
después, cuando se reciba la libreta oficial, hacer el traspaso de una a la otra,
poniendo especial cuidado de asentar una nota final en la bitácora improvisada
mediante la cual se realiza el traspaso, e inutilizar el resto de las hojas.
REGLAMENTO DE LA BITACORA DE OBRA.

Debido a que el "Libro de Bitácora" es manejada por personas que representan a


intereses distintos, es necesario reglamentar su uso para evitar malos entendidos
y manipulaciones que distorsionen la buena marcha de la obra y lesionen la labor
de control de la misma, en perjuicio del propietario. En esta forma se logra
oficializar e integrar las reglas que lo componen. Por lo cual procederemos a
enlistar las reglas generales que nos servirán para iniciar nuestra primera
aplicación. Estas reglas no tienen ningún orden prioritario y se dan únicamente
en calidad de ejemplo:

1.- APERTURA Y CIERRE. Es imprescindible que las bitácoras sean abiertas con
una nota especial al caso. El cierre de la bitácora es igualmente importante.

2.-SERIADO DE NOTAS. Todas las notas deben seriarse consecutivamente,


respetando el orden sin excepción. Esta regla tiene por objeto su identificación
inequívoca al momento que se requiera. No debe de existir nota sin número.

3.- FECHADO. Todas las notas de bitácora deben estar fechadas en el día en
que se efectúa el asiento.

4.- ESCRITURA. Los asientos deben efectuarse con tinta indeleble, nunca a
máquina o con tinta que pueda borrarse, mucho menos con lápiz. Es importante
además tener cuidado en escribir con letra de molde que sea fácilmente legible y
sin abreviaturas.

5.-ERRORES. Cuando se comete un error de redacción, de intención o de


ortografía la nota debe anularse acompañada de una leyenda que diga “esta nota
se anula por tener error”. De inmediato se abre la sig. nota repitiendo lo asentado
esta vez sin errores.

6.-TACHADURAS O ENMENDADURAS. Una nota con tachaduras o


enmendaduras automáticamente es legalmente nula, con todas las consecuencias
que puede acarrear el hecho.
7.-SOBREPOSICIONES O ADICIONES. No esta permitido sobreponer ni añadir
nada a las notas de bitácora, ni entre renglones, ni en los márgenes, ni en ningún
otro sitio. Si hubiere la necesidad de agregar algo, se abre otra nota haciendo
referencia a la de origen.

8.- FIRMAS. Firmaran la bitácora aquellos que son responsables superiores de la


obra. Por una parte nos referimos al coordinador o jefe de supervisión, por la otra
al superintendente o gerente de construcción, que son quienes firman la bitácora
para abrirla, cerrarla, para autorizar a los supervisores y residentes responsables
de cada contrato y para desautorizarlos cuando dejen de prestar sus servicios
nombrando a los sustitutos asignados. Se recomienda que su participación en la
bitácora se restrinja exclusivamente a estas funciones, con el objeto de evitar
contradicciones. Si desean asentar algo, basta con que se lo ordenen a sus
subordinados autorizados por ellos mismos. El supervisor y el residente
responsables del contrato son ellos quienes usaran cotidianamente la bitácora de
obra y quienes se valdrán de esta para controlar la obra en todos los sentidos.
Serán los celosos guardianes del orden en la misma y todos sus superiores deben
procurar de abstenerse de intervenir directamente en la libreta pues si lo hacen
atentan contra el orden establecido y desautorizan lo que ellos mismos
autorizaron. Reiteramos que el supervisor y el residente son los únicos que deben
manejar la bitácora, teniendo toda la libertad y la consiguiente responsabilidad. La
intervención de la auditoría técnica de cualquiera de las partes que llegase a
visitar la obra queda restringida a dar fe de su visita en determinada fecha.
Cuando existen varios supervisores y/o residentes en una obra a cargo de un
mismo contrato no es recomendable que todos firmen, ya que se presta a
confusiones, repeticiones y contradicciones. Llegado este caso, recomendamos
que se nombre un responsable de cada parte y únicamente este asiente notas en
la bitácora.

9.- INUTILIZACION DE ESPACIOS SOBRANTES. Al completarse el llenado de


cada una de las hojas de la bitácora, es indispensable cancelar todos los espacios
sobrantes. Esto se logra cruzándolos con rayas diagonales para utilizarlos.
10.- RETIRO DE COPIAS. Inmediatamente que se haya llenado cada una de las
hojas de la bitácora, es menester retirar las copias y remitirlas a las oficinas
centrales las de la empresa responsable de la supervisión y las del contratista.
Esta práctica evita que por un extravío por descuido o intencional se pierde el
control de la obra. Por esto mismo se revela que es necesario que las copias sean
legibles y por tanto el supervisor y el residente deben vigilar que así sea.

11.- DISPONIBILIDAD. El Libro de Bitácora estará disponible en las oficinas de la


obra los días hábiles de trabajo. Cualquier cambio temporal o definitivo, se
comunicará en el mismo Libro de Bitácora, con 24 horas de anticipación.

12.- NOTAS APREMIANTES. Cuando sea necesario escribir una nota de


particular importancia y que por sus características es preciso dar conocimiento de
ella a las autoridades o inversionistas, se procederá a anular el resto de la hoja
correspondiente para retirar de inmediato las copias y poder remitirlas con carácter
de urgente.

13.- SERIEDAD. Todos los puntos anteriores hacen comprender la seriedad que
se requiere para manejar una bitácora de obra. Por consiguiente recomendamos
que, antes de hacer un asiento se medite sobre la necesidad de hacerlo. Si
decidimos hacerlo, debemos pensar cuidadosamente lo que queremos decir. Por
ningún motivo consideramos apropiado escribir la nota directamente en la
bitácora. Es necesario hacer un borrador de ella. La libreta de bitácora nunca debe
utilizarse para asuntos intrascendentes, insensateces y mucho menos para
ventilar agravios o hacer agresiones.

14.- COMPROMISO DE USO DE LA BITÁCORA DE OBRA. Tanto el residente


como el supervisor están comprometidos a utilizar la bitácora. De ninguna manera
deberá permitirse que se evada la responsabilidad de realizar asientos para no
comprometerse.

15.- REDACCIÓN. Este es un asunto de vital importancia. Hemos tenido ocasión


de observar, una vez que se ha acabado la obra, que a una de las partes se le
interroga sobre un asiento que hizo en la bitácora y la respuestas más
frecuentemente dadas son de que se intentaba decir otra cosa, que se olvido el
hacer una aclaración o de que “hay varias formas de interpretar lo escrito”. Estas
respuestas y otras en el mismo talante están motivadas por errores de redacción y
todas dan como resultado afectaciones económicas a veces muy costosas para
cualquiera de las partes. Cabe reconocer que la mayoría de los casos es el
contratista el que se ve beneficiado con estas situaciones, aunque existen casos
en que ocurre lo contrario.

16.-ORTOGRAFÍA. Un supervisor profesional que se aprecie en serlo esta


obligado a manejar bien la ortografía. Aunque puede considerarse que este tema
es un asunto de segunda importancia, hacemos especial énfasis en el pues
significa mucho para la imagen que proporciona de quien escribe con faltas
ortográficas.

17.-CERRADO DE ASIENTOS EN LA BITÁCORA DE OBRA. Todas y cada una


de las notas deben quedar cerradas, esto es, resueltas. Naturalmente que nos
referimos a notas que traten asuntos que deben entenderse. Es también
fundamental cerrarlas a la brevedad posible dejando resueltos los problemas o
situaciones que las motivaron. A nosotros, como supervisores, nos afecta mucho
nuestro tiempo y nuestra concentración el hecho de estar arrastrando asuntos
pendientes de resolverse.

18.-CUSTODIA DE LA LIBRETA DE BITACORA. Por su carácter de instrumento


de control y por las razones por las que fue creada, la libreta de bitácora de obra
debe quedar bajo la custodia del supervisor, lo importante es que realmente esté
disponible para ambas partes y a este respecto es conveniente reglamentar en
cada caso como, cuando, y en donde se encuentra la libreta, para tener libre
acceso a ella en horas de trabajo, desde luego en el mismo lugar en el que se
desarrolla la obra, De hecho, es absolutamente incorrecto sacra la libreta de la
obra, salvo en casos excepcionales, cuando no hay lugar para guardarla. Se debe
tener en cuenta que custodia no quiere decir propiedad, y que es un asunto muy
grave ocultar la libreta.
19.-BITÁCORA UNITARIA POR CONTRATO. Solo esta permitida una bitácora
por cada uno de los contratos. No podrá existir una libreta utilizada por dos
contratos, aunque se trate de la misma construcción o del mismo frente.

Las reglas que continúan ya no son generales, sino particulares, en primer lugar
para el supervisor y en segundo para los residentes, y en esta forma se
complementan las reglas de uso de la bitácora de obra.
PROGRAMA DE TRABAJO

Un Plan de Trabajo, es un conjunto de programas detallados, que determina el


orden, los métodos de construcción y la organización que se dispondrá para la
ejecución de las obras, en otras palabras, es un instrumento que permite planificar
en cada etapa de la obra, cuándo, con qué, y cómo se ejecutará.

El estudio del plan de trabajo, se realiza previo a la confección del presupuesto de


la obra y a la iniciación de los trabajos. El objetivo es el de evitar que durante la
construcción deba improvisarse sobre qué parte de la obra debe iniciarse en ese
momento, con qué equipo o herramientas se va a ejecutar, qué operarios se
destinarán a la obra, quién será el responsable y cuáles sus atribuciones.

Lo mismo puede decirse respecto al resto de la organización, como las bodegas,


el sector de contabilidad y los demás servicios. Puesto que el aprovechamiento
óptimo de los operarios y equipos depende del plan de trabajo.

Un buen plan de trabajo además de coordinar de manera efectiva las distintas


etapas de la construcción en cuanto a continuidad y sistematización, debe ofrecer
el menor costo de construcción posible.

El plan de trabajo debe establecer las fechas en que los operarios, materiales y
equipos deben llegar a la obra, fijar las normas para controlar los avances,
rendimientos, costos, etc. y de esta manera permitir saber si las obras están
progresando de acuerdo al plan elaborado o no, para que en este último caso se
efectúen los cambios o mejoras necesarias al programa de trabajo, para recuperar
el tiempo perdido o reducir los costos con el uso de otros métodos de trabajo.
También permite elegir los métodos de trabajo y equipos a emplear y fijar la
ubicación de los talleres, oficinas, bodegas, comedores, casas para habitación y
otros.
Puntos mínimos que debe incluir un Programa de Trabajos.

1.- Identificación de las principales unidades de obra que podrían condicionar la


realización de la obra.
2.- Métodos de ejecución previstos y equipos necesarios y su idoneidad con la
realización de la obra.
3.- Estimación de suministros de materiales, localización, transporte, volúmenes
necesarios y necesidad de acopios.
4.- Métodos constructivos en estructuras y túneles.
5.- Métodos de excavación dependiendo del tipo de terreno, tipo de roca o
existencia de nivel freático.
6.- Análisis de los factores medioambientales incluidos en la Declaración de
Impacto Ambiental y que pueden condicionar los trabajos.
7.- Análisis del orden de ejecución y precedencias.
8.- Estudios de los condicionantes externos de tipo expropiaciones, disponibilidad
de los terrenos, servicios afectados, climatología,…

El Programa de Trabajos es un documento “vivo” y se tiene que ir revisando cada


cierto tiempo. El tener un buen Sistema de Calidad implantado en nuestra
organización nos ayuda a realizar mejor estos programas y sus revisiones, ya que
nos puede aportar mucha información y registros basados en datos reales, que
nos permitan contrastar la veracidad de nuestra programación de trabajos de
partida (partes de trabajo, partes de maquinaria, No Conformidades e incidencias,
controles de recepción y acopio, control de suministradores, control de cambios y
modificaciones.

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