La tipografía para una época industrial: La revolución industrial tuvo lugar por primera

vez en Inglaterra, entre los años 1760 y 1840 y se trata de un proceso de cambios
económicos y sociales radical. La fuerza animal y humana fueron las primeras fuentes
de energía hasta que james watt perfecciono la máquina de vapor a partir de 1780. La
electricidad y los motores de gasolina aumentaron la productividad. Se desarrolló un
sistema fabril de manufactura mecánica y también se produjo la división del trabajo. Un
gran número de personas dejaron de laborar las tierras y buscaron empleo en las
fábricas. Las ciudades crecieron rápidamente. El poder político se desplazó hacia los
fabricantes capitalistas, comerciantes e incluso loas clases trabajadoras. En los países
de occidente el capitalista desplazo al terrateniente como la fuerza más poderosa. La
inversión de capital en máquinas, para fabricación masiva, llego a ser la base del cambio
industrial y del desarrollo. La demanda crecía rápidamente y estimulo las mejoras
tecnológicas facilitando la producción en masa lo cual produjo un incremento en la
presencia de productos disponibles en el mercado y la reducción de los costos. La
abundancia de mercancía barata estimulo un mercado masivo y su consecuente
demanda. Los diversos materiales gráficos jugaron un papel importante en la
comercialización de la producción industrial. El nivel de vida de las personas en Europa
y américa mejoro notablemente durante el siglo XIX. El grado más alto de igualdad que
se inició a partir de las revoluciones francesa y americana, trajo consigo un
mejoramiento en la educación pública y la posibilidad de leer y escribir por lo que el
público lector aumento. Este periodo se caracterizó por una mayor trascendencia y
disponibilidad de la comunicación gráfica. La tecnología hizo bajar el costo unitario e
incremento la producción de materiales impresos, lo cual origino una demanda
insaciable y el inicio de la era de las comunicaciones masivas. Las artesanías
desaparecieron casi por completo. En el transcurso del siglo XIX se dividió la
comunicación gráfica en dos partes diferentes, por un lado, el diseño y por el otro la
producción. Se expandió la escala de medidas tipográficas y el estilo de los tipos de
letras. La invención de la fotografía y la impresión de las mismas ensancharon el
significado de la documentación visual y de la información pictórica. A partir de una
revolución democrática las imágenes a color pasaron de las clases privilegiadas a toda
la sociedad, la litografía a color dio un toque sensual y de colorido a todos los hogares.
Innovaciones en la tipografía: Las necesidades masivas de comunicación de una
creciente sociedad urbana e industrializada produjeron la pronta expansión de
imprentas comerciales, anuncios y carteles. Mayor tamaño, más impacto visual y una
clase diferente de carácter. La era industrial requería que estos signos se transformaran
en formas visuales abstractas que proyectaran formas concretas de fuertes contrastes
y de gran tamaño. Los impresores de prensa de tipos móviles recurrieron a fundidores
de letras de imprenta para aumentar sus posibilidades de diseño, los fundidores se
sentían más que felices por cumplir.