Estudiante:
Código: 39274497
Grupo: 403024_38
Programa de Psicología
Mayo 2018
Identificación paciente
Nombre del alumno: AA
Fecha de Nacimiento: 12 de octubre de 2000
Edad: 7 años
Sexo: Femenino
Grado Escolar: 2° de primaria
Informe dirigido a: Colegio Picapiedra
Motivo de la consulta
La madre refiere: “La niña no se relaciona con los demás, nos está
perjudicando, la orientadora nos la quiere sacar”
Situación:
- Se queda atrasada en medio de la clase
- Sus familiares le insisten que hable enfrente de personas fuera de su
“burbuja de comunicación”
- No participa en juegos o integraciones escolares y sociales
Respuesta fisiológica: Disminución de energía, una baja efusividad y
una baja predisposición a las relaciones sociales. Se reduce la capacidad
de atención en estímulos exteriores.
Respuesta cognitiva: La niña presenta problemáticas en el desarrollo
de las habilidades cognitivas complejas.
Respuesta motora: Comportamientos autolesivos, enuresis, huir,
retracción del cuerpo.
Consecuencias:
La niña no recibe una estimulación que garantice el correcto desarrollo de
las habilidades cognoscitivas vitales para la supervivencia. Si continúa
entendiendo este comportamiento como normal el mutismo puede llegar
a complicarse, pudiendo convertirse en mutismo total o incluso
agorafobia.
Hipótesis
De acuerdo a las manifestaciones sociales, conductuales y emocionales
analizados en el caso propuesto, es posible que la niña presente un
trastornos de ansiedad social llamado mutismo selectivo, se caracteriza
por la inhibición selectiva del habla en situaciones en las que existe
expectativa de hablar.
El origen hipotético del mutismo de la niña está asociado a la ansiedad,
las primeras manifestación se presentaron aproximadamente desde los 2
años y medio o 3 años de edad, cuando la niña ingresó al jardín a la etapa
de párvulos, en el cual presentó variedad de correlatos asociados al
trastorno como enuresis y conductas autolesivas y desde entonces su
ansiedad aumentó considerablemente. La niña con mutismo selectivo
experimenta ansiedad ante determinadas situaciones sociales, que
interpreta como amenazantes. En ese escenario aparece el miedo a ser
juzgado por los demás o el temor a no dar la respuesta adecuada, que
hacen que la situación sea vivida por la pequeña como una auténtica
amenaza, y le produzca el bloqueo o inhibición del habla. Como
consecuencia, la niña presenta problemas escolares y sociales.
Evaluación conductual