 IDEA DE PROGRESO – QUÉ MUNDO QUEREMOS (DOC 1)

“Medianeras” de Gustavo Taretto (primera secuencia)

Buenos aires crece descontrolada e imperfecta, es una

ciudad superpoblada en un país desierto, una ciudad en la
que se yerguen miles y miles y miles y miles de edificios sin
ningún criterio. Al lado de uno muy alto hay uno muy bajo,
al lado de uno racionalista, uno irracional, al lado de un
estilo francés hay otro sin ningún estilo. Probablemente
estas irregularidades nos reflejen perfectamente,
irregularidades estéticas y éticas. Estos edificios que se
suceden sin ninguna lógica demuestran una falta total de
planificación. Exactamente igual es nuestra vida, la vamos
haciendo sin tener la más mínima idea de cómo queremos
que nos quede. Vivimos como si estuviésemos de paso en
Buenos Aires. Somos los inventores de la cultura del
inquilino. Los edificios son cada vez más chicos, para darle
lugar a nuevos edificios, más chicos aún. Los
departamentos se miden en ambientes, y van desde los
excepcionales 5 ambientes con balcón terraza, playroom,
dependencia de servicio, baulera, hasta el monoambiente,
o caja de zapatos. Los edificios como casi todas las cosas
pensadas por el hombre están hechas para que nos diferenciemos, los unos de los otros. Existe un frente
y un contrafrente, están los pisos bajos y los altos. Los privilegiados son identificados con la letra A, o
excepcionalmente la B, cuanto más progresa el abecedario menos categoría tiene la vivienda. Las vistas
y la luminosidad son promesas que rara vez coinciden con la realidad. ¿Qué se puede esperar de una
ciudad que da la espalda a su río? Estoy convencido de que las separaciones y los divorcios, la violencia
familiar, el exceso de canales de cable, la incomunicación, la falta de deseo, la abulia, la depresión, los
suicidios, las neurosis, los ataques de pánico, la obesidad, las contracturas, la inseguridad, el estrés y el
sedentarismo son responsabilidad de los arquitectos y empresarios de la construcción. De estos males,
salvo el suicidio padezco todos. MARTÍN. Este es mi mono ambiente, este soy yo. Rodríguez Peña. 1136.
4to. H.

https://medianera.wordpress.com/2009/04/20/medianeras-de-gustavo-taretto/
 IDEA DE PROGRESO – QUÉ MUNDO QUEREMOS (DOC 2)
La zona – texto 1
“La zona” es una película de 2007 que fue dirigida por el mexicano Rodrigo Plá. Esta película
trata la temática de los barrios cerrados y de la justicia por mano propia. La prevención de
la violencia es uno de los temas más importantes y urgentes en México. E l 13 febrero de
2013, el Presidente de México promovió un programa de prevención de la violencia y de la
delincuencia*. Alejados de la violencia en las ciudades, se han formado barrios cerrados
donde los habitantes ricos pueden vivir alejados de la inseguridad.
La película “La zona” presenta la vida protegida en un tal barrio cerrado: hay guardias
privados, altos muros y cámaras dondequiera en la zona. Es una sociedad con sus propias
leyes porque un edicto judicial ha permitido a los habitantes encargarse de sus propios
problemas. La película demuestra en qué medida esta reglamentación puede ser
problemática, hasta peligrosa, po rque las acciones de los habitantes asustados son difíciles
de controlar. El miedo se transforma rápidamente en cólera. Por eso, es apenas sorprendente
que la situación haya resultado en una escalada de violencia sin control posible. La película
critica así la reglamentación especial en el estado jurídico de los barrios cerrados.

https://cinele.weebly.com/la-zona.html

 IDEA DE PROGRESO – QUÉ MUNDO QUEREMOS

La zona – texto 2

La película tiene lugar en la ciudad de México donde se puede ver una zona apartada de
los barrios paupérrimos de la ciudad. Esta zona residencial está rodeada por un muro que
sigue estando bajo la vigilancia de cámaras. La zona parece ser un lugar apacibl e donde
todos viven en armonía. Todas las casas son semejantes: guapas y limpias. La mariposa que
nos conduce por las calles de la zona fortalece este sentimiento de serenidad. En el
momento en que la mariposa sobrevuela por encima del muro, protegido por cables
eléctricos, se puede ver los barrios de chabolas de la ciudad. La mariposa se quema las alas
al tocar los cables. Esto es el símbolo de que adentro de la zona la vida es hermosa y
segura, pero fuera reina la supervivencia. Los dos ambientes se opone n: los barrios pobres
de la ciudad están en la oscuridad y parecen estar en el caos mientras que la Zona, barrio
residencial, está en la luz, en un ambiente sano y ordenado. A primera vista, claro que
parece ser mejor vivir en la Zona, pero a lo largo de l a película, el ambiente opresivo, el
sentimiento de inseguridad continua nos hacen reflexionar sobre los malos aspectos de la
existencia de estas personas adentro. Se sospechan los unos de los otros olvidando
cualquier sentimiento de compasión. Por último se puede decir que la Zona es una cárcel
maravillosa.

https://cinele.weebly.com/la-zona.html
  IDEA DE PROGRESO – QUÉ MUNDO QUEREMOS (DOC. 4)
A pesar de que resulta difícil que una sola persona pueda hacer un mundo mejor por sí sola, las pequeñas acciones hechas por millones
de personas pueden marcar una gran diferencia.
¿A quién no le gustaría vivir en un mundo más amable, respetuoso y seguro? Estas pequeñas acciones crean un gran valor y
transformar a las personas que están a nuestro alrededor. En este artículo te ofrecemos 30 ideas para conseguir el objetivo de un
mundo mejor. ¿Las compartes?  http://modoeficaz.com/30-pequenas-acciones-para-hacer-un-mundo-mejor/
Pequeñas acciones para hacer un mundo mejor:
• Recicla; el reciclaje es de vital importancia no
sólo ayuda a necesitar menos recursos sino que
también evita que se contamine el entorno con
los desechos sobrantes.
• Dúchate en lugar de bañarte; reducirás el
consumo de agua y por lo tanto los costes
medioambientales asociados a este consumo.
• Saluda y da los buenos días; no importa que no
conozcas a alguien, cuando entres en una tienda,
una cafetería o incluso el ascensor recuerda
saludar y dar los buenos días.
• Sonríe; la sonrisa es un arma muy potente que
puede ayudar a aliviar el estrés y conseguirá que
las personas con las que te cruces se sientan más
cómodas y se contagien de esta sonrisa.
• Ayuda a otras personas; hay cientos de maneras
de ayudar a otras personas, desde acompañar a
una anciana subiendo las bolsas de la compra,
hasta echar una mano al vecino con una reforma
en la casa.
• Pon plantas en tu vida; no importa si vives en el
campo o en la ciudad, pon plantas en tu vida,
cuídalas y crea pequeños espacios verdes. Por
pequeña que sea la planta y por poco que pueda
hacer, estará ayudando a limpiar el aire de
dióxido de carbono.
• Sé respetuoso con la naturaleza; si estás en
contacto con la naturaleza respétala y cuídala,
tanto a plantas como animales. No arrojes
basura y no molestes a otras especies.
• No compres mascotas, adóptalas.
• Presta o regala las cosas que ya no utilices.
• Apaga las luces y los electrodomésticos cuando
no los estés utilizando; ahorrarás electricidad y
reducirás la cantidad de dióxido de carbono que
arrojas a la atmósfera.
• Dedica parte de tu tiempo a una buena causa;
desde causas locales hasta causas globales todos
podemos aportar nuestro pequeño granito de
arena.
• Pasa más tiempo con personas ancianas; en
ocasiones pueden sentirse solas en estos últimos
años de su vida, tu compañía les reconfortará y
además tu podrás aprender mucho de ellos.
• Ríete; ten buen humor y afronta de manera
positiva la vida. La risa es contagiosa y sus
beneficios están científicamente probados.
¿Qué te parecen? ¿Se te ocurre alguna más? Compártela con nosotros y no dudes en poner estas acciones en práctica.
• Escucha a la gente, deja hablar e intenta
comprender lo que quieren expresar. Todo el
mundo se siente mejor cuando se siente
escuchado.
• Da las gracias y expresa tu aprecio por todas
aquellas cosas en las que te ayuden los demás.
• Sé paciente y respetuoso con los ancianos y
todas aquellas personas que no puedan seguir tu
ritmo o que te estén causando alguna molestia
de manera involuntaria.
• Si ves a un turista que está perdido o que no
encuentra lo que busca, ayúdale amablemente a
encontrarlo.
• Apadrina a un niño del tercer mundo que no
tenga las mismas posibilidades que tuviste tú
para salir adelante. Los niños son muy
vulnerables y hay que cuidar de ellos.
• No pierdas el contacto con tus amigos, envíales
mensajes, pregúntales que tal se encuentran y
queda con ellos siempre que puedas para
compartir un poco de tiempo.
• Conduce de manera responsable, evita la bocina
y los gritos y se un poco más paciente.
• En el transporte público ofrece tu asiento a
alguien que pueda necesitarlo más que tú.
• Dona sangre, puedes ayudar a salvar vidas.
• Comparte tus libros y deja que personas que no
pueden acceder a ellos tengan la oportunidad de
leerlos.
• Echa una mano a tus compañeros de trabajo que
se encuentren más estresados.
• Si encuentras un objeto perdido intenta
devolverlo a su dueño.
• Presta un poco de tu dinero en proyectos como
Kiva.org que ayudarán a personas de zonas
desfavorecidas a crear su propio futuro.
• Planta árboles; puedes unirte a campañas de
plantación de árboles y ayudar con tu trabajo a
reforestar zonas que están perdiendo sus
árboles.
• Sé positivo y transmite esa positividad.
• Ayuda a los indigentes, en ocasiones un poco de
comida o productos de higiene personal pueden
mejorar sus condiciones hasta el punto de
ayudarles a encontrar un trabajo.
• Defiende a aquellas personas que no puedan
hacerlo por sí mismas y no participes en abusos
de ningún tipo contra ellas.
  IDEA DE PROGRESO – QUÉ MUNDO QUEREMOS (DOC. 5)

Queremos un mundo mejor sin mover un dedo

Alba Chaparro, 29 de diciembre de 2016

 https://lalechugademinerva.com/2016/12/29/queremos-un-mundo-mejor-sin-mover-un-dedo/
“Cuando a las gentes les faltan músculos en los brazos,
les sobran en la lengua.” (Miguel Delibes)

Queremos un Madrid más limpio, pero sin restricciones al tráfico.

Queremos un mundo sin cambio climático, pero sin modificar nuestros hábitos contaminantes.

Queremos unos colegios sin bullying, pero seguimos riéndonos de nuestros compañeros de trabajo, de nuestros vecinos,
de la gente diferente que vemos por la calle.

Queremos que se acabe el racismo, pero identificamos a algunas personas como “el moro”, “el negro”, “el chino”.

Queremos que se acabe la homofobia, pero si nos enfadamos con nuestro primo es un puto maricón.

Queremos que se acaben los abusos sexuales, pero esa chica va provocando.

Queremos que se acabe la violencia de género, pero hay veces que tu novia se merece una hostia.

Queremos que se acabe la pobreza, pero no dedicamos un céntimo a su erradicación.

Queremos que se acabe la explotación, pero seguimos comprando en Zara y en Primark.

Queremos que se acabe la guerra de Siria, pero no llegamos a entender -ni nos esforzarnos por entender- ni siquiera
cuáles son los bandos enfrentados.

Queremos que se auxilie más a los refugiados, pero que sean acogidos en otros países.

Queremos que se acabe el terrorismo, pero nos esforzamos en imponer nuestro imperialismo económico y cultural.

Queremos que se acabe la corrupción, pero seguimos votando a los corruptos.

Queremos que se acaben los contratos precarios, pero la huelga general no sirve para nada.

Queremos un Sistema Educativo eficiente, pero no atendemos a las demandas del profesorado.

Queremos una televisión más cultivadora, pero preferimos ver el reality de la tarde que un documental.

Queremos una sociedad más instruida y culturizada, pero se venden más magazines que nobeles.

Queremos un entorno laboral meritocrático, pero asumimos como natural el enchufismo y la zalamería.

Queremos una Sanidad Pública de Calidad, pero hacemos más caso a los gestores que a los profesionales sanitarios.

Queremos que se acabe con el maltrato animal; pero nos gusta ir al zoo, comprar cosméticos de empresas que
experimentan con animales y comer carne en cantidades industriales.

Queremos, queremos… ¡Qué fácil es decir, pero qué difícil hacer!