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Literatura española II Introducción

Cátedra Vila En el Siglo de Oro se produce una profunda reflexión acerca de los
distintos componentes del lenguaje poético y sus funciones. Se concibe el verso
comouna violencia organizada porquees la sujeción de la materia a una forma y
en esto se muestra la práctica artística como una actividad difícil. La idea de la
dificultad y el artificio es, por lo tanto, fundamental en la poesía del momento.
Por lo tanto, es necesario pensar la métrica y la versificación como la
función estética diferenciadora del lenguaje poético en la época.

“Cuando leemos un verso, un poema del Siglo de Oro, debemos ser capaces de hacer
aflorar sobre la línea del verso varios códigos, cada uno de los cuales lleva a una
conclusión en el plano semántico. La métrica es uno de esos códigos (el más obsoleto, tal

Poesía del Siglo de Oro vez, el más distante de nuestro tiempo) pero un componente de la poética que debemos
cuanto menos conocer.”
Evangelina Rodríguez, “Los versos fuerzan la materia”, Edad de Oro IV, 1985.
Guía de métrica y versificación
El verso se define como una “serie de palabras cuya disposición produce
un determinado efecto rítmico”. (Tomás Navarro Tomás).
Una primera diferenciación entre el verso y la prosa podemos
encontrarla en la mayor o menor regularidad de apoyos acentuales.

Elementos constitutivos del verso español


Son tres: sílabas, acentos y pausas.
También son importantes la rima y las agrupaciones de versos.

SÍLABAS
Existen dos grandes sistemas (anisosilábico e isosilábico):
Versos amétricos o irregulares: no se ajustan a un determinado número de
sílabas; la unidad básica es el pie, conforman los llamados sistemas
anisosilábicos. Un ejemplo de estos sistemas es del de la poesía grecolatina,

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estructurada sobre la base de los pies que pueden estar compuestos por distintas Florida de los apóstoles
cantidades de sílabas: La cantidad de sílabas fonéticas es nueve:
espondeos: — — dáctilos: — ‫ں ں‬ Flo-ri-da-de-los-a-pós-to-les (=9) -1=8 octosílabo

Versos métricos o regulares: se ajustan a un determinado número de sílabas; la Recordar:


unidad básica es la sílaba. Conforman los sistemas isosilábicos que van a recibir
los distintos nombres según la cantidad de sílabas métricas que los compongan Si el verso termina con acento grave, el metro es la misma cantidad de sílabas
(ejemplo, octosílabo, endecasílabo, etc.). Son los sistemas característicos del fonéticas; si termina con acento agudo, se suma una sílaba métrica; y si termina
siglo de oro español. con acento esdrújulo se resta una.

Medición de los versos Licencias métricas o licencias poéticas en la métrica


Los versos se miden contando desde la primera sílaba hasta la sílaba que
sigue a la tónica final. En castellano, el verso modelo es con acento paroxítono Existen otros elementos que pueden determinar diferencias entre sílabas
(grave) porque es el tipo de acentuación más común en la prosa. métricas y sílabas fonéticas o gramaticales por lo cual es importante tenerlos en
Es muy importante distinguir entre sílabas fonéticas y sílabas métricas cuenta al contar las sílabas de un verso.
porque pueden ocurrir varios fenómenos que determinen que las cantidades de En la medición de sílabas hay que tener en cuenta las licencias que se
unas y otras sean diferentes en el mismo verso: pueden producir dentro de una misma palabra o entre palabras contiguas. El
Ejemplo: efecto que producen es de unión o de separación.
Callo la gloria que siento Dentro de la misma palabra
Este es un verso de ocho sílabas en el que no hay ningún tipo de Sinéresis: es la unión en una misma sílaba de vocales que normalmente
fenómeno extraño. Tiene igual cantidad de sílabas fonéticas y sílabas métricas no forman sílaba.
Ca-llo-la-glo-ria-que-sien-to (8) Pintado el caudaloso río se vía (Garcilaso)
Pero si el verso termina en monosílabo o en palabra aguda: Hermosas ninfas que en el río metidas (Garcilaso)
Pues de vos ha de salir
el capitán de Belén Diéresis: es la separación de las vocales que integran un diptongo.
La cantidad de sílabas fonéticas es siete que en süave dolor fueron criados (Boscán)
(pues-de-vos-ha-de-sa-lir =7 / el-ca-pi-tán-de-Be-lén =7) +1 =8 octosílabo
En palabras contiguas
En este caso, hay que sumarle una sílaba en la cuenta para acomodarlo al Sinalefa: es la unión, en una misma sílaba métrica, de la vocal final de
término medio de la normalidad métrica; para eso siempre tiene que haber una una palabra con la vocal inicial de la palabra siguiente (hay que prestar
sílaba después de la sílaba tónica. atención a la h que en Garcilaso y Fray Luis es consonante aspirada; en
Cuando los versos terminan en palabra esdrújula se hace lo contrario, es Góngora y en Quevedo, no).
decir, se le resta una sílaba.

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Cuando amanece en la elevada cumbre (Villegas)
(14 sílabas fonéticas y 11 sílabas métricas) PAUSAS
Ilustre y hermosísima María (Góngora) Las pausas marcan las unidades del verso. El principio general es que
deben coincidir con las pausas gramaticales.
Hiato: es la separación de dos vocales contiguas –que integran Hay tres tipos distintos:
diferentes palabras– que normalmente se unen por medio de la sinalefa. Pausa mayor: se produce al final de cada estrofa.
En brazos de mi esposa y de mi /hija Pausa media: se produce en mitad de la estrofa; generalmente se da en
estrofas simétricas, por ejemplo, la octava y permite un corte de sentido
ACENTOS luego del cuarto verso.
El ritmo del verso español está determinado por los acentos. El acento de Pausa menor: es la más importante de todas; señala el final de un verso
la palabra (prosódico y etimológico) es el que existe en la pronunciación común, o de un hemistiquio en versos compuestos. Es muy importante para
tal como lo tiene la palabra en el uso habitual en la prosa. Salvo unas pocas marcar el verso como una serie limitada, como una totalidad. Debería
licencias, este acento no cambia en la pronunciación del verso. coincidir con la detención del sintagma y con un final de palabra.
El verso español tiene básicamente dos acentos:
obligatorio y fijo al final del verso Licencias poéticas en las pausas
variable dentro de las primeras cuatro sílabas Encabalgamiento: es la unión, por razones del curso del sintagma, del final
de un verso con el comienzo del siguiente. De esta manera desaparece la
Según la extensión del verso, se necesitarán otros acentos rítmicos (este pausa menor, en cuanto a la audición. Excede los límites del verso.
tema se desarrolla después, con la explicación de los endecasílabos).
Con tanta mansedumbre el cristalino
El tipo rítmico del verso está determinado no por la cantidad de sílabas,
Tajo en aquella parte caminaba
sino por el período rítmico interno (PRI), que se cuenta desde el primer acento
rítmico del verso hasta la sílaba átona anterior al último acento del verso. Está que pudieran los ojos el camino
dividido en pequeñas unidades o cláusulas rítmicas (solo vamos a profundizar determinar apenas que llevaba (Garcilaso de la Vega)
un poco este tema con los endecasílabos).
Vuélveme, vuélveme moro (Zorrilla)
Tmesis o hipermetría: separación de una palabra compuesta al final del
verso. La segunda parte pasa al comienzo del verso siguiente.
Período Rítmico Interno
y mientras miserable
mente se estén los otros abrasando
Las sílabas que quedan “sueltas” antes del primer acento conforman lo
con sed insacïable
que se llama anacrusis o antecompás.
del no durable mando,
El aroma de su nombre
tendido yo a la sombra esté cantado (Fray Luis de León)

PRI
anacrusis

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RIMA
No es un constituyente del verso español, pero sí su medio ornamental
más importante. Su origen no es claro; la poesía latina la conocía solamente AGRUPACIONES DE VERSOS
como un adorno ocasional, pero no como un recurso de uso general.
Dentro de las formas poéticas del siglo de oro existe una distinción
La necesidad de la rima probablemente tenga su origen en la poesía importante en la agrupación de los versos que pueden darse en tres tipos:
cantada por cuestiones tales como el señalamiento del final del verso a través de
una equisonancia reiterada Serie: conjunto indefinido de versos que no forman estrofa sino que
constituyen lo que se llama una tirada (romance, silva).
Esta misma cualidad hacía que el verso fuera fácil de retener en la
memoria y de ese modo, servía como ayuda mnemotécnica, algo importante
para el canto en comunidad. Estrofa: conjunto de versos que siguen un esquema fijo. Los tipos de
El valor de una rima no se reduce a una repetición exacta de un aspecto estrofas más comunes son:
fonético sino que lo que realmente importa es su sustancial fuerza expresiva. estrofas de versos de la misma medida: pareados, tercetos,
En cuando a su definición decimos que es la igualdad total o parcial de cuartetas/cuartetos, quintillas/quintetos, sextinas/sextetos, octavas,
los sonidos finales del verso a partir de la última vocal tónica. La coincidencia de décimas.
los sonidos en la rima varía por el grado más o menos perfecto de su igualación estrofas de versos desiguales: combinación de versos de distinta medida,
fonética. Hay distintos tipos de rima: sin esquema fijo: estrofas aliradas, estancias.
Consonante: desde la vocal tónica hay igualdad de vocales y consonantes.
(dolor : amor; viva : esquiva; pálido : válido) Formas de composición fija: poesías que se construyen siguiendo una
No sé cómo he de tener estructura fija (en general, se considera que en su procedencia se trata de
paciencia en tal mal suceso poesías cantadas, se repartían el cantor y el coro distintas partes de la
que si no es perder el seso
composición: villancico, letrilla, glosa, canción petrarquista, soneto).
no me queda qué perder (Lope de Vega).

Asonante: desde la vocal tónica, igualdad de vocales solamente. (dar :


verdad; amigo : cinco; calle : traje).
Mira, Zaide, que te aviso
que no pases por mi calle,
ni hables con mis mujeres
ni con mis cautivos trates. (Lope de Vega)

Puede haber coincidencias totales, parciales o simuladas. La rima se hace


al final pero existe también la rima interna (la vemos luego con los
endecasílabos).

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Metros y estructuras la nata de los donaires
y pierdo mucho en perderte
y gano mucho en amarte,
y que si nacieras mudo
Octosílabos fuera posible adorarte.
Y por este inconveniente
determino de dejarte:
Todo verso que cuenta con ocho sílabas métricas se denomina octosílabo. que eres pródigo de lengua
y amargan tus libertades,
Se pueden distinguir según su forma de agrupamiento. y habrá menester ponerte
quien quisiera sustentarte
un alcázar en el pecho
SERIES y en los labios un alcaide.
Mucho pueden con las damas
Romance
los galanes de tus partes:
Es una serie indefinida de versos octosílabos con la misma rima asonante en los porque los quieren briosos,
versos pares. que rompan y que desgarren;
mas, tras esto, Zaide, amigo,
si algún convite te hacen
Mira, Zaide, que te aviso Romance con asonancia á/e al plato de sus favores,
que no pases por mi calle quieren que comas y calles.
ni hables con mis mujeres, Costoso fue el que te hice.
ni con mis cautivos trates, Venturoso fueras, Zaide,
ni preguntes en qué entiendo si conservarme supieras
ni quién viene a visitarme, como supiste obligarme.
qué fiestas me dan contento Apenas fuiste salido
o qué colores me aplacen; de los jardines de Tarfe
basta que son por tu causa cuando hiciste de la tuya
las que en el rostro me salen, y de mi desdicha alarde.
corrida de haber mirado A un morito malnacido
moro que tan poco sabe. me dicen que le enseñaste
Confieso que eres valiente, la trenza de mis cabellos
que hiendes, rajas y partes que te puse en el turbante.
y que has muerto más cristianos No quiero que me la vuelvas
que tienes gotas de sangre; ni quiero que me la guardes,
que eres gallardo jinete, mas quiero que entiendas, moro,
que danzas, cantas y tañes, que en mi desgracia la traes.
gentilhombre, bien criado También me certificaron
cuanto puede imaginarse; cómo le desafiaste
blanco, rubio por extremo; por las verdades que dijo
señalado por linaje, que nunca fueran verdades.
el gallo de las bravatas De mala gana me río;

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¡qué donoso disparate! fue más castigo que premio.
No guardas tú tu secreto
¿y quieres que otro le guarde? Diéronsela lastimados;
No quiero admitir disculpa; pero con ley se la dieron
otra vez vuelvo a avisarte que la lleve y no la mire:
que ésta será la postrera ambos muy duros preceptos.
de que me hables y te hable.
Dijo la discreta Zaida Iba él delante guiando,
a un altivo bencerraje, al subir; porque es muy cierto
y, al despedirle, repite: que, al bajar, son las mujeres
“Quien tal hace, que tal pague” las que nos conducen, ciegos.
(Lope de Vega)
Volvió la cabeza el triste:
si fue adrede, fue bien hecho;
• El romance puede presentar algunas particularidades como distribución si acaso, pues la perdió,
acertó esta vez por yerro.
en cuartetas:
Esta conseja nos dice
Califica a Orfeo para idea de maridos dichosos que si en algún casamiento
Orfeo por su mujer se acierta, ha de ser errando,
cuentan que bajó al Infierno; Romance con asonancia é/o. como errarse por aciertos,
y por su mujer no pudo
En este caso la distribución en cuartetas es
bajar a otra parte Orfeo. Dichoso es cualquier casado
posible gracias a la unidad sintáctica que se
que una vez queda soltero;
Dicen que bajó cantando; mas de una mujer dos veces,
y por sin duda lo tengo; es ya de la dicha extremo.
pues, en tanto que iba viudo, (Francisco de Quevedo).
cantaría de contento.

Montañas, riscos y piedras • Para enriquecer el romance con intermedios líricos se recurre a los
su armonía iban siguiendo; endecasílabos y heptasílabos en forma de pareados, intercalados
y si cantara muy mal,
le sucediera lo mesmo. en lugares regulares con la función de estribillo.

Cesó el penar en llegando La desgracia del forzado,


y en escuchando su intento: y del corsario la industria, Romance con asonanciaú/a
que pena no deja a nadie la distancia del lugar
quien es casado tan necio. y el favor de la Fortuna,
que por las bocas del viento
Al fin pudo con la voz les daba a soplos ayuda
persuadir los sordos reinos: contra las cristianas cruces
aunque el darle a su mujer a las otomanas lunas,

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hicieron que de los ojos quejáos de mi desventura
del forzado a un tiempo huyan y no echéis la culpa al viento.
dulce patria, amigas velas, y tú, mi dulce suspiro,
esperanzas y ventura. rompe los aires ardiendo,
Vuelve, pues, los ojos tristes visita a mi esposa bella,
a ver cómo el mar le hurta y en el mar de argel te espero.
las torres, y le da nubes, ¿De quién me quejo con tan grande extremo,
las velas, y le da espumas. si ayudo yo a mi daño con mi remo?”
y viendo más aplacada (Luis de Góngora).
en el cómitre la furia,
vertiendo lágrimas, dice,
tan amargas como muchas:

“¿De quién me quejo con tan grande extremo, Romancillo


si ayudo yo a mi daño con mi remo?
Es un romance de versos de menos de ocho sílabas, habitualmente
Ya no esperen ver mis ojos, dispuesto en cuartetas, con la misma rima asonante en los versos pares.
pues ahora no lo vieron, Lloraba la niña
sin este remo las manos, (y tenía razón)
y los pies sin estos hierros, la prolija ausencia
que en esta desgracia mía de su ingrato amor.
Fortuna me ha descubierto
que cuantos fueron mis años Dejóla tan niña,
tantos serán mis tormentos. que apenas creo yo
que tenía los años
¿De quién me quejo con tan grande extremo, que ha que la dejó.
si ayudo yo a mi daño con mi remo?
Llorando la ausencia
Velas de la Religión, del galán traidor,
enfrenad vuestro denuedo, la halla la Luna
que mal podréis alcanzarnos y la deja el Sol,
pues tratáis de mi remedio.
El enemigo se os va, añadiendo siempre
y favorécele el tiempo pasión a pasión,
por su libertad no tanto memoria a memoria,
cuanto por mi captiverio. dolor a dolor.

¿De quién me quejo con tan grande extremo, Llorad, corazón,


si ayudo yo a mi daño con mi remo? Que tenéis razón.

Quedáos en aquesa playa, Dícele su madre:


de mis pensamientos puerto; “Hija, por mi amor,

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que se acabe el llanto, ESTROFAS
o me acabe yo.”

Ella le responde:
Redondilla
“no podrá ser, no:
las causas son muchas, Es una estrofa de cuatro versos octosílabos con rima consonante, según dos
los ojos son dos. esquemas distintos
Satisfagan, madre, Rima abrazada (abba)
tanta sinrazón,
y lágrimas lloren
en esta ocasión, Yo de vos no he de querer
galardón de mis suspiros,
tantas como dellos pues de mi pena en serviros
un tiempo tiró me supe satisfacer.
flechas amorosas
el arquero dios. No tengo más que esperar
en la causa de mi pena,
Ya no canto, madre, pues es la causa tan buena
y si canto yo, con que me puede salvar.
muy tristes endechas
mis canciones son; Y pues llego a merecer
la gloria de mis suspiros,
porque el que se fue, de mis males con serviros
con lo que llevó, me puedo satisfacer.
se dejó el silencio,
y llevó la voz.” Pues nunca tenéis memoria
del daño que me hacéis,
Llorad, corazón, para matarme la gloria
Que tenéis razón de mi mal no os acordéis.1
(Luis de Góngora). (Fernando de Herrera).

Rima cruzada (abab)

Callo la gloria que siento


en mi dulce perdición,
por no perder el contento
que tengo de mi pasión.

                                                            
1 Esta última estrofa sigue el esquema de la rima cruzada.

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Y más hago en encubrir para ver si soy quien fui,
por la honra de mi pena, en fin, señora, me veo...
que no me duele sufrir
el mal que el Amor ordena, Culpa tenemos los dos
del no ser que soy agora,
¿Quién publica mi tormento? pues olvidado por vos
¿Será tal mi presunción de mí mismo, estoy, señora,
que perderé el sentimiento sin mí, sin vos y sin Dios....
que tengo de mi pasión?
Si en desearos me empleo,
Y estimo tanto la gloria y Él manda no desear
de mis penas recebida, la hermosura que en vos veo,
que tengo en más su memoria claro está que vengo a estar
que el descanso de mi vida. sin Dios, por lo que os deseo...

Por no perder el contento ¿Qué habremos de hacer los dos


de mi grande perdición, pues a Dios por vos perdí
no gozo de mi tormento después que os tengo por Dios,
publicando mi pasión . sin Dios, porque estáis en mí,
(Fernando de Herrera). sin mí, porque estoy sin vos?...

Sin vos y sin mí peleo


con tanta desconfianza:
sin mí, porque en vos ya veo
Quintilla imposible mi esperanza
sin vos, porque no os poseo.
Es una estrofa de cinco versos octosílabos con rima consonante, (Lope de Vega, El castigo sin venganza, fragmento).
que sigue el siguiente esquema:
• No puede haber más de dos rimas seguidas
• La estrofa no termina por lo general en un pareado
• Ningún verso queda sin rima Décima espinela
Es una estrofa de diez versos octosílabos con rima consonante fija. En
En fin, señora, me veo general puede estructurarse del siguiente modo: una redondilla con rima
sin mí, sin vos y sin Dios:
sin Dios, por lo que os deseo;
abrazada, dos versos de enlace y una quintilla.
sin mí, porque estoy sin vos; Rima fija quiere decir que el esquema de rimas debe ser el mismo en
sin vos, porque no os poseo... toda la composición, los sonidos en sí cambian en cada estrofa, pero este
esquema se mantiene: abba a-c cddc
En tantos males me empleo,
después que mi ser perdí, Debe producirse un corte de sentido en el cuarto verso. El quinto verso
que aunque no verme deseo, repite la rima anterior y el sexto verso anticipa la próxima rima.

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Por el rigor en la disposición, forma y desarrollo, la décima espinela cuando, atrevido y crüel,
ocupa un digno lugar en la métrica del Siglo de Oro al lado del soneto. la humana necesidad
le enseña a tener crueldad,
monstruo de su laberinto:
¡Ay mísero de mí! ¡Ay infelice! ¿y yo con mejor distinto
Apurar, cielos, pretendo tengo menos libertad?
ya que me tratáis así,
qué delito cometí Nace el pez, que no respira,
contra vosotros naciendo; aborto de ovas y lamas,
aunque si nací, ya entiendo y apenas bajel de escamas
qué delito he cometido. sobre las ondas se mira,
Bastante causa ha tenido cuando a todas partes gira,
vuestra justicia y rigor; midiendo la inmensidad
pues el delito mayor de tanta capacidad
del hombre es haber nacido. como le da el centro frío:
¿y yo con más albedrío
Sólo quisiera saber, tengo menos libertad?
para apurar mis desvelos
(dejando a una parte, cielos, Nace el arroyo, culebra
el delito de nacer), que entre flores se desata,
qué más os pude ofender, y apenas, sierpe de plata,
para castigarme más. entre las flores se quiebra,
¿No nacieron los demás? cuando músico celebra
Pues si los demás nacieron, de las flores la piedad
¿qué privilegios tuvieron que le dan la majestad,
que yo no gocé jamás? el campo abierto a su ida:
¿y teniendo yo más vida
Nace el ave, y con las galas tengo menos libertad?
que le dan belleza suma,
apenas es flor de pluma, En llegando a esta pasión
o ramillete con alas un volcán, un Etna hecho,
cuando las etéreas salas quisiera sacar del pecho
corta con velocidad, pedazos del corazón.
negándose a la piedad ¿Qué ley, justicia o razón
del nido que deja en calma: negar a los hombres sabe
¿y teniendo yo más alma, privilegio tan süave,
tengo menos libertad? excepción tan principal,
que Dios le ha dado a un cristal,
Nace el bruto, y con la piel a un pez, a un bruto y a un ave?
que dibujan manchas bellas,
apenas signo es de estrellas, (Calderón de la Barca, La vida es sueño, fragmento).
gracias al docto pincel,

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FORMAS DE COMPOSICIÓN FIJA en que el alma está metida!
Sólo esperar la salida
me causa dolor tan fiero,
que muero porque no muero.
Villancico
Poesía estrófica de composición fija pero de variable forma métrica. ¡Ay, qué vida tan amarga
Sus elementos de composición son: do no se goza el Señor!
Porque si es dulce el amor,
• La cabeza o estribillo inicial no lo es la esperanza larga.
• La estrofa que se divide en tres partes: Quíteme Dios esta carga,
ƒ mudanza más pesada que el acero,
ƒ mudanza que muero porque no muero.
ƒ vuelta o represa
Sólo con la confianza
Es una poesía destinada al canto. A pesar del carácter popular de la vivo de que he de morir,
cabeza y del estilo llano, el villancico es por su procedencia un género porque muriendo, el vivir
aristocrático. me asegura mi esperanza.
Muerte do el vivir se alcanza,
no te tardes, que te espero,
Vivo sin vivir en mí, Cabeza o estribillo  que muero porque no muero.
y de tal manera espero,
que muero porque no muero. Mira que el amor es fuerte,
vida, no me seas molesta;
Vivo ya fuera de mí Mudanza  mira que sólo te resta,
después que muero de amor; para ganarte, perderte.
porque vivo en el Señor, Mudanza  Venga ya la dulce muerte,
que me quiso para sí; el morir venga ligero,
cuando el corazón le di Verso de enlace  que muero porque no muero.
puse en él este letrero: Vuelta o represa 
que muero porque no muero. Aquella vida de arriba
es la vida verdadera;
Esta divina prisión hasta que esta vida muera,
del amor con que yo vivo no se goza estando viva.
ha hecho a Dios mi cautivo, Muerte, no me seas esquiva;
y libre mi corazón; viva muriendo primero,
y causa en mí tal pasión que muero porque no muero.
ver a Dios mi prisionero,
que muero porque no muero. Vida, ¿qué puedo yo darle
a mi Dios, que vive en mí,
¡Ay, qué larga es esta vida! si no es el perderte a ti
¡Qué duros estos destierros, para mejor a Él gozarle?
esta cárcel, estos hierros Quiero muriendo alcanzarle,

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pues tanto a mi Amado quiero, el mercader nuevos soles;
que muero porque no muero yo conchas y caracoles
(Santa Teresa). entre la menuda arena,
escuchando a Filomena
sobre el chopo de la fuente,
Letrilla Y ríase la gente.
También es una forma que proviene de la canción tradicional y se
Pase a media noche el mar,
populariza a fines del XVI y XVII. Suele diferenciarse del villancico por su tema y arda en amorosa llama
satírico, aunque también hay letrillas amorosas, religiosas, etc. Leandro por ver su Dama;
En realidad, villancico yletrilla no son más que distintas que yo más quiero pasar
denominaciones para un mismo tipo de poema. En las letrillas del siglo de oro del golfo de mi lagar
las mudanzas son más complejas y a veces llegan a tener 6, 8 y 10 versos. la blanca o roja corriente,
Y ríase la gente.
Ándeme yo caliente Cabeza: condensación temática de la 
Pues Amor es tan crüel,
Y ríase la gente. composición. Lleva un estribillo.  que de Píramo y su amada
Traten otros del gobierno hace tálamo una espada,
Del mundo y sus monarquías, do se junten ella y él,
Mientras gobiernan mis días Mudanza. Remata con el estribillo  sea mi Tisbe un pastel,
Mantequillas y pan tierno, de la cabeza. El sexto verso de cada  y la espada sea mi diente,
Y las mañanas de invierno estrofa retoma la rima del estribillo.  Y ríase la gente.
Naranjada y aguardiente,
(Luis de Góngora).
Y ríase la gente.
Coma en dorada vajilla
El príncipe mil cuidados, Glosa
como píldoras dorados; Composición generalmente en versos octosílabos con rima consonante.
que yo en mi pobre mesilla
Consta de una estrofa inicial denominada tema, texto, cabeza, letra o
quiero más una morcilla
que en el asador reviente, retruécano cuyos versos se van a explicar en sucesivas estrofas denominadas
glosa propiamente dicha. El verso final repite el verso comentado de la cabeza.
Y ríase la gente.
Cuando cubra las montañas Ya la esperanza es perdida,
de blanca nieve el enero, y un solo bien me consuela: Tema, texto, cabeza, letra, retruécano.
tenga yo lleno el brasero que el tiempo que pasa y vuela En este caso es una redondilla.
de bellotas y castañas, llevará presto la vida.
y quien las dulces patrañas
del Rey que rabió me cuente, Dos cosas hay en amor
que con su gusto se alcanza:
Y ríase la gente.
deseo de lo mejor,
Busque muy en hora buena es la otra la esperanza,

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que pone esfuerzo al temor.
Los dos hicieron manida
Endecasílabos
en mi pecho, y no las veo;
antes en la alma afligida,
porque me acabe el deseo, Todo verso que cuenta con once sílabas es un endecasílabo. Bajo este
ya la esperanza es perdida. nombre se reúnen versos de muy distinta organización rítmica y de muy
diferente procedencia.
Si el deseo desfallece
cuando la esperanza mengua,
al contrario en mí parece, Al ser un verso más extenso, tiene tres tipos de acentos, en lugar de los
pues cuanto ella más desmengua
dos de otros metros más cortos.
tanto más él se engrandece.
Y no hay usar de cautela • el obligatorio: en la penúltima sílaba (la décima, aquí)
con las llagas que me atizan,
que en esta amorosa escuela
• el principal: en la cuarta o la sexta sílaba (este es el acento que no tienen
mil males me martirizan, otros metros y que marca una cesura en el endecasílabo)
y un solo bien me consuela. • el variable o de apoyo: en alguna de las cuatro primeras sílabas
Apenas hubo llegado
el bien a mi pensamiento, El lugar donde cae el acento principal determina la división de los
cuando el cielo, suerte y hado, endecasílabos en dos grandes grupos: a maiore y a minore; esta acentuación
con ligero movimiento produce además la cesura que se define como: “la cúspide rítmica en el interior
le han del alma arrebatado, del verso que consiste en un final de palabra acentuada con fuerza, seguida por
Y si alguno hay que se duela
una pausa sintácticamente justificada”.
de mi mal tan lastimero,
al mal amaina la vela,
y al bien pasa más ligero A maiore
que el tiempo que pasa y vuela.
En este grupo, la sexta sílaba tiene que llevar un acento fuerte que,
¿Quién hay que no se consuma precisamente, dé lugar a la cesura. Según la terminación del primer hemistiquio,
con estas ansias que tomo, la sexta, séptima u octava sílaba forman el límite de la palabra al que le sigue
pues en ellas se ve en suma una pausa justificada por el curso sintáctico que no necesariamente es
ser los cuidados de plomo perceptible al oído.
y los placeres de pluma?
Y aunque va tan decaída
mi dichosa buena andanza A minore
en ella este bien se anida:
que quien llevó la esperanza En este caso es la cuarta sílaba la que debe tener el acentoprincipal.
llevará presto la vida. (Miguel de Cervantes).
Dentro de estos grupos, operan a su vez otro tipo de distinciones
rítmicas.

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Hay una variedad que se llama “a la francesa” que se produce cuando el acento
A maiore principal coincide con una palabra aguda.
Según la posición del acento de apoyo los endecasílabos del grupo a Y a responder aquesto van diciendo (Garcilaso).
maiore se subclasifican en:
ENFÁTICOS: el acento de apoyo cae en la primera sílaba.
DACTÍLICOS
Aquí el esquema rítmico es 1, 6, 10.
Forma plena: el acento de apoyo cae en la primera y en la séptima.
Su esquema lleva acentos internos en 1, 4, 7, 10.
Flérida para mí, // dulce y sabrosa (Garcilaso).
¿Cómo pudiste tan pronto olvidarte? (Garcilaso).
Hero que vio tendida la tiniebla (Boscán).
Variante pura italiana: el acento de apoyo cae en la séptima sílaba. Su esquema
es 4, 7, 10.
HEROICOS: el acento de apoyo cae en la segunda sílaba. no me contento pues tanto he tardado (Boscán).
Su esquema es 2, 6, 10.
de gualda y roja sangre matizado (Lope de Vega).
más blanca que la leche y más hermosa (Garcilaso).
RIMA
Revuelto con el ansia el rojo velo (Lope de Vega).
La rima determina otro tipo de variantes:

MELÓDICOS: el acento de apoyo cae en la tercera sílaba. Endecasílabos sueltos o sin rima
Su esquema es 3, 6, 10.
Se relaciona con el empeño de los poetas por acercarse a la poesía de la
se adormecen al son del llanto mío (Quevedo). antigüedad clásica.
que no saben decirme lo que quiero (San Juan de la Cruz).
No sé, conde, si dé a mi padre aviso
despidió contra sí rayos del cielo (Lope de Vega).
de vuestro atrevimiento y de su agravio,
que agravio ha sido suyo el atreveros
a entrar en su servicio dese modo
A minore para engañarme a mí, y a él afrentalle.
Los endecasílabos de este grupo se subclasifican en: Otros medios hallaredes mejores,
pues noble sois, con que obligar al duque,
SÁFICOS: el acento de apoyo puede caer en la sexta o en la octava. sin fingiros así su secretario,
Su esquema puede ser 4, 6, 10 o bien 4, 8, 10 pues no sé yo, si no es tenerme en poco,
la providencia tiene aprisionada (Fray Luis de León). qué liviandad hallastes en mi pecho
para atreveros a lo que habéis hecho.
infame turba de nocturnas aves (Tirso de Molina).
volando tristes y gimiendo graves (Góngora).

27 28
Endecasílabos con rima al mezzo En vuestra claridad vi mi alegría
escurecerse toda y enturbiarse;
Este es un tipo usado por imitación de los italianos. La rima se da entre cuando os cobré, perdí mi compañía.
el final de un verso y el final del primer hemistiquio del siguiente. Los finales de
verso entre sí quedan sin rima. ¿A quién pudiera igual tormento darse,
que con lo que descansa otro afligido
venga mi corazón a atormentarse?
Escucha pues un rato, y diré cosas
estrañas y espantosas poco a poco.
El dulce murmurar deste rüido,
Ninfas, a vos invoco, verdes faunos
el mover de los árboles al viento,
sátiros y silvanos, soltad todos
el suave olor del prado florecido
mi lengua en dulces modos y sutiles
que ni los pastoriles ni el avena
podrían tornar, de enfermo y descontento
ni la zampoña suena como quiero.
cualquier pastor del mundo alegre y sano;
(Garcilaso de la Vega).
yo solo en tanto bien morir me siento.

¡Oh hermosura sobre el ser humano!


¡Oh claros ojos! ¡Oh cabellos de oro,
ESTROFAS ¡Oh cuello de marfil! ¡Oh blanca mano!

¿Cómo puede ora ser que en triste lloro


se convirtiese tan alegre vida
Terceto encadenado y en tal pobreza todo mi tesoro?
Se llama también terceto dantesco o terza rima. Es una estrofa de tres
versos endecasílabos en la que riman el primer verso con el tercero, en tanto que Quiero mudar lugar y a la partida
el segundo se enlaza por la rima con la estrofa siguiente. Para que ningún verso quizá me dejará parte del daño
quede suelto, la poesía en tercetos remata con un cuarteto. Se da en general en que tiene el alma casi consumida.
series largas, no obstante se observa la rigurosa correspondencia de la unidad
¡Cuán vano imaginar, cuán claro engaño
estrófica con el sentido, de modo que cada estrofa es autónoma. Es una forma
es darme yo a entender que con partirme,
propia de la poesía culta y se usó en elegías, poesía didáctica, bucólicas y de mí se ha de partir un mal tamaño!
epístolas.
¡Ay miembros fatigados, y cuán firme
En medio del invierno está templada es el dolor que os cansa y enflaquece!
el agua dulce desta clara fuente, ¡Oh, si pudiese un rato aquí adormirme!
y en el verano más que nieve helada.
Al que velando el bien nunca se ofrece,
¡Oh claras ondas, cómo veo presente, quizá que el sueño le dará, durmiendo,
en viéndoos, la memoria de aquel día algún placer que presto desparece;
de que el alma temblar y arder se siente! en tus manos ¡oh sueño! me encomiendo.
(Garcilaso de la Vega).

29 30
Cuarteto
Es una estrofa de cuatro versos, con rima abrazada o cruzada. Rara vez FORMAS DE COMPOSICIÓN FIJA
aparece sola, en general integra un soneto.
Aquí yacen de Carlos los despojos; Soneto
la parte principal volvióse al cielo;
con ella fue el valor: quedóle al suelo Es una composición formada por dos cuartetos y dos tercetos de versos
miedo en el corazón, llanto en los ojos endecasílabos. Las rimas en los cuartetos son siempre fijas (ABBA). Para los
(Fray Luis de León). tercetos se aceptan las combinaciones de dos y tres rimas.
El soneto obliga a una intensa concentración, porque se espera que
Octava real desarrolle un solo asunto. Por lo general, los cuartetos sirven como exposición y
los tercetos como interpretación o como una reflexión. En aquellos sonetos que
Se la llama también octava heroica. Es una estrofa de ocho versos buscan sorprender, el poeta extiende la función habitual de los cuartetos hasta el
endecasílabos con rima alterna en los seis primeros, en tanto que los dos últimos primer terceto y da un final sorprendente en el último terceto.
forman un pareado. ABABABCC
Generalmente busca un desarrollo simétrico en el curso sintáctico con un corte Hermosas ninfas que en el río metidas
al final de cada par de versos o, más frecuentemente después del cuarto verso. contentas habitáis en las moradas
Es una forma de la poesía elevada y noble propia de la épica y la lírica de de relucientes piedras fabricadas
gran aliento. Boscán la introdujo en España (se usaba en Italia desde el siglo y en columnas de vidrios sostenidas;
XIII). Ercilla, al usarla en La Araucana (1569), funda la tradición épica de la
octava real en España. agora estéis labrando embebecidas,
o tejiendo las telas delicadas;
agora unas con otras apartadas
Aquella voluntad honesta y pura,
contandoos los amores y las vidas;
ilustre y hermosísima María,
que en mí de celebrar tu hermosura,
tu ingenio y tu valor estar solía, dejad un rato la labor, alzando
a despecho y pesar de la ventura vuestras rubias cabezas a mirarme
que por otro camino me desvía, y no os detendréis mucho según ando;
está y estará en mí tanto clavada,
cuanto del cuerpo el alma acompañada. que, o no podréis de lástima escucharme,
o convertido en agua aquí llorando,
Y aún no se me figura que me toca podréis allá de espacio consolarme.
aqueste oficio solamente en vida;
mas con la lengua muerta y fría en la boca
(Garcilaso de la Vega)
pienso mover la voz a ti debida.
Libre mi alma de su estrecha roca
por el Estigio lago conducida,
celebrándose irá, y aquel sonido
hará parar las aguas del olvido.
(Garcilaso de la Vega).

31 32
Desmayarse, atreverse, estar furioso,
Combinaciones de endecasílabos y
áspero, tierno, liberal, esquivo, heptasílabos
alentado, mortal, difunto, vivo,
leal, traidor, cobarde y animoso;
FORMAS DE COMPOSICIÓN FIJA
no hallar fuera del bien centro y reposo,
mostrarse alegre, triste, humilde, altivo,
enojado, valiente, fugitivo, Canción petrarquista
satisfecho, ofendido, receloso;
Está formada por estrofas (llamadas también estancias) en número
huir el rostro al claro desengaño,
indeterminado pero con un mínimo de tres. Estas estancias combinan
beber veneno en licor süave,
endecasílabos y heptasílabos con un diseño que se fija en la primera estrofa que
olvidar el provecho, amar el daño;
afecta tanto la distribución de versos largos y cortos como el esquema de la
rima. Este diseño luego se repite a lo largo de toda la composición de la misma
creer que un cielo en un infierno cabe,
manera y culmina en una estrofa de menos versos llamada envío, que tiene
dar la vida y el alma a un desengaño:
forma métrica diversa; temáticamente es un apóstrofe que el poeta le dirige a la
esto es amor: quien lo probó lo sabe.
canción.
(Lope de Vega) Las estancias tienen una extensión mínima de nueve versos y una
máxima ilimitada, pero el promedio suele ser de trece versos. Se subdividen en
dos partes con rima independiente, fronte y coda, unidas por el eslabón o verso
de enlace:
• Fronte: es la parte inicial cuyos versos pueden a su vez agruparse en
unidades menores llamadas pies. Cada fronte cuenta con un par de pies
simétricos que tienen entre dos y seis versos, aunque los de tres versos
son los más comunes.
• Eslabón o verso de enlace: es un verso, generalmente un heptasílabo, que
une por medio de la rima las dos partes de la estancia.
• Coda o sirima: es la parte final de la estrofa y es indivisible.
La canción adopta como principal asunto el amoroso, la expresión del
sentimiento elegíaco o bucólico. Como es forma de poesía elevada también trata
asuntos heroicos de historia nacional y religiosa.
La proporción de heptasílabos y endecasílabos determina el tono de la
composición. Una mayor cantidad de endecasílabos establece un carácter grave
y solemne; en cambio una proporción alta de heptasílabos refleja una intención
estilística menos elevada que puede evocar ambientes pastoriles y bucólicos.

33 34
No me den pena, pues, por lo que ora digo,
E s q u em a de es t a e s t a ncia: abC a bC c d e EDf F que ya no me refrenará el temor:
¡quién pudiese hartarse
de no esperar remedio y de quejarse!
La soledad siguiendo, pie
Mas esto me es vedado
rendido a mi fortuna, con unas obras tales
FRONTE
me voy por los caminos que se ofrecen, con que nunca fue a nadie defendido,
por ellos esparciendo que si otros han dejado
mis quejas de una en una pie
de publicar sus males,
al viento, que las lleva do perecen; llorando el mal estado a que han venido,
ESTANCIA
puesto que ellas merecen verso de enlace o eslabón señora, no habrá sido
ser de vos escuchadas, sino con mejoría
pues son tan bien vertidas y alivio en su tormento;
he lástima que todas van perdidas mas ha venido en mí a ser lo que siento
por donde suelen ir las remediadas; CODA O SIRIMA de tal arte que ya en mi fantasía
A mí se han de tornar, no cabe, y así quedo
adonde para siempre habrán de estar. sufriendo aquello que decir no puedo.
Mas ¿qué haré, señora, Si por ventura estiendo
en tanta desventura? alguna vez mis ojos
¿A dónde iré si a vos no voy con ella? por el proceso luengo de mis daños,
¿De quién podré yo agora con lo que me defiendo
valerme en mi tristura de tan grandes enojos
si en vos no halla abrigo mi querella? solamente es allí con mis engaños;
Vos sola sois aquella mas vuestros desengaños
con quien mi voluntad vencen mi desvarío
recibe tal engaño y apocan mis defensas.
que, viéndoos holgar siempre con mi daño, Sin yo poder dar otras recompensas
me quejo a vos como si en la verdad sino que, siendo vuestro más que mío,
vuestra condición fuerte quise perderme así
tuviese alguna cuenta con mi muerte. por vengarme de vos, señora, en mí.
Los árboles presento, Canción, yo he dicho más que me mandaron
entre las duras peñas, y menos que pensé; ENVÍO
por testigo de cuanto os he encubierto; no me pregunten más, que lo diré.
de lo que entre ellas cuento
podrán dar buenas señas, (Garcilaso de la Vega, Canción II).
si señas pueden dar del desconcierto.
Mas ¿quién tendrá concierto
en contar el dolor,
que es de orden enemigo?

35 36
SERIES ESTROFAS

Silva Estrofas aliradas


Es una serie indefinida de versos heptasílabos y endecasílabos sin Son estructuras que surgen como reacción a la dureza de la canción.
combinación ni rima fijas; existe el caso de la silva de pareados en la cual los Existen varios tipos distintos de estrofas aliradas
versos riman de a dos.
Quinteto lira o lira garcilasiana
Era del año la estación florida Estrofa de cinco versos endecasílabos y heptasílabos con rima
en que el mentido robador de Europa
(medialuna las armas de su frente,
consonante, según el siguiente esquema: aBabB.
y el Sol todos los rayos de su pelo), Si de mi baja lira
luciente honor del cielo, tanto pudiese el son, que en un momento
en campos de zafiro pace estrellas, aplacase la ira
cuando el que ministrar podía la copa del animoso viento
a Júpiter mejor que el garzón de Ida, y la furia del mar y el movimiento,
náufrago, y desdeñado sobre ausente,
lagrimosas de amor dulces querellas y en ásperas montañas
da al mar, que condolido con el süave canto enterneciese
fue a las ondas, fue al viento las fieras alimañas,
segundo de Arión dulce instrumento los árboles moviese
(Góngora, Soledades, I ). y al son confusamente los trujiese:

no pienses que cantado


Silva de pareados seria de mí, hermosa flor de Gnido,
el fiero Marte airado,
Hipogrifo violento a muerte convertido,
que corriste parejas con el viento, de polvo y sangre y de sudor teñido,
¿dónde rayo sin llama
pájaro sin matiz, pez sin escama ni aquellos capitanes
y bruto sin instinto en las sublimes ruedas colocados,
natural, al confuso laberinto por quien los alemanes,
destas desnudas peñas el fiero cuello atados,
te desbocas, te arrastras y despeñas?. y los franceses van domesticados;
(Calderón de la Barca, La vida es sueño, fragmento).
mas solamente aquella
fuerza de tu beldad seria cantada,
y alguna vez con ella
también sería notada
el aspereza de que estás armada,

37 38
Con lluvia y noche escura
y cómo por ti sola si el cielo se oscurece, él se serena;
y por tu gran valor y hermosura, no, si falta ventura
convertido en vïola, agora, ha de durar siempre la pena;
llora su desventura que Apolo ya su musa
el miserable amante en tu figura. despierta, y ya del arco y flechas usa.
(Garcilaso de la Vega, Canción V, fragmento).
En las dificultades
te muestra de animoso y fuerte pecho;
Sexteto lira o lira sestina y en las prosperidades,
Estrofa de seis versos heptasílabos y endecasílabos con rima cuando el favor soplare más derecho,
recoge con buen tiento
consonante, según el esquema aBaBcC, pero que sufrió modificaciones a medida
la vela que va hinchada con el viento
que los poetas la utilizaban.
Si en alta mar, Licino, (Fray Luis de León, traducción de la Oda II, 10 de Horacio).
no te engolfares mucho ni, temiendo
la tormenta, el camino
te fueres costa a costa prosiguiendo
entre la demás gente,
sabrosa vivirás y dulcemente.

Que quien con amor puro APÉNDICE – TEXTOS COMPLEMENTARIOS


la dulce medianía ama y sigue A raíz de las nuevas formas poéticas introducidas por Boscán y Garcilaso
está libre y seguro en el segundo cuarto del siglo XVI, muchas voces se levantaron para defender la
de las miserias en que el pobre vive, poesía tradicional castellana. Cristóbal de Castillejo (1490-1550) es una de las
y carece de grado figuras paradigmáticas de esa defensa.
del palacio real, rico, envidiado.

Que, al fin, más cruda guerra Reprensión contra los poetas españoles que escriben en verso italiano
el viento hace al pino más crecido;
la torre viene a tierra, Pues la sancta Inquisición
cuanto es más alta, con mayor ruido; suele ser tan diligente
los montes ensalzados en castigar con razón
más veces de los rayos son tocados. cualquier secta y opinión
levantada nuevamente,
En los casos aviesos
no pierde la esperanza, ni confía resucítese Lucero,
en los buenos sucesos a corregir en España
el ánimo que está de noche y día una tan nueva y extraña,
para ser combatido, como aquella de Lutero
de templanza y valor apercibido. en las partes de Alemaña.

39 40
Bien se pueden castigar Torres Naharro replica:
a cuenta de anabaptistas, “Por hacer, Amor, tus hechos
pues por ley particular consientes tales despechos,
se tornan a baptizar y que nuestra España rica
y se llaman petrarquistas. Se prive de sus derechos”.

Han renegado la fe Dios dé su gloria a Boscán


de las trovas castellanas, y a Garcilaso poeta,
y tras las italianas que con no pequeño afán
se pierden, diciendo que y por estilo galán
son más ricas y lozanas, sostuvieron esta seta,

El juicio de lo cual Y la dejaron acá


yo lo dejo a quien más sabe; ya sembrada entre la gente;
pero juzgar nadie mal por lo cual debidamente
de su patria natural les vino lo que dirá
en gentileza no cabe; este soneto siguiente:

Y aquella cristiana musa Soneto


del famoso Juan de Mena, Garcilaso y Boscán, siendo llegados
sintiendo desto gran pena, al lugar donde están los trovadores
por infieles los acusa que en esta nuestra lengua y sus primores
y de aleves los condena. fueron en este siglo señalados,

“Recuerde el alma dormida” los unos a los otros alterados


dice don Jorge Manrique; se miran, con mudanza de colores,
y muéstrese muy sentida temiéndose que fuesen corredores
de cosa tan atrevida, espías o enemigos desmandados;
por que más no se platique.
y juzgando primero por el traje,
Garci-Sánchez respondió: paresciéronles ser, como debía,
“¡Quién me otorgase, señora, gentiles españoles caballeros;
vida y seso en esta hora
para entrar en campo yo y oyéndoles hablar nuevo lenguaje
con gente tan pecadora!” mezclado de extranjera poesía,
von ojos los miraban de extranjeros.
“Si algún Dios de amor había,
dijo luego Cartagena, Mas ellos, caso que estaban
muestre aquí su valentía sin favor y tan a solas,
contra tan gran osadía, contra todos se mostraban,
venida de tierra ajena”. y claramente burlaban
de las coplas españolas.

41 42
Canciones y villancicos, Mas esta falta o manquera
romances y cosa tal, no la dan a nuestra lengua,
arte mayor y real, que es bastante y verdadera,
y pies quebrados y chicos, sino solo dicen que era
y todo nuestro caudal. De buenos ingenios mengua;

Y en lugar destas maneras Y a la causa en lo pasado


de vocablos ya sabidos fueron todos carescientes
en nuestras trovas caseras, destas trovas excelentes
cantan otras forasteras, que han descubierto y hallado
Nuevas a nuestros oídos: los modernos y presentes.

Sonetos de grande estima, Viendo pues que presumían


madrigales y canciones tanto de su nueva ciencia,
de diferentes renglones, dixéronles que querían
de octava y tercera rima de aquello que referían
y otras nuevas invenciones. ver algo por experiencia;

Desprecian cualquiera cosa para prueba de lo cual,


de coplas compuestas antes, por muestra de novel uso,
por baja de ley, y astrosa cada cual de ellos compuso
usan ya de cierta prosa una rima en especial,
medida sin consonantes. cual se escribe aquí de yuso.

A muchos de los que fueron SONETO


elegantes y discretos Si las penas que dais son verdaderas,
tienen por simples pobretos, Como bien lo sabe el alma mía,
por solo que no cayeron ¿Por qué no me acaban? y sería
en la cuenta a los sonetos. Sin ellas el morir muy más de veras;

Daban, en fin, a entender Y si por dicha son tan lisonjeras,


aquellos viejos autores Y quieren retoçar con mi alegría,
no haber sabido hacer Decid, ¿por qué me matan cada día
buenos metros ni poner De muerte de dolor de mil maneras?
en estilo los amores;
Mostradme este secreto ya, señora,
Y que el metro castellano Sepa yo por vos, pues por vos muero,
no tenía autoridad Si lo que padezco es muerte o vida;
de decir con majestad
lo que se dice en toscano
con mayor felicidad.

43 44
Porque, siendo vos la matadora, Miradas bien sus estancias,
Mayor gloria de Pena ya no quiero Veréis tales consonancias,
Que poder alegar tal homicida. Que Petrarca y sus canciones
Queda atrás en elegancias».
OCTAVA
Ya que mis tormentos son forçados, Cartagena dixo luego,
Bien que son sin fuerça consentidos. Como plático en amores:
¿Qué mayor alivio en mis cuidados «Con la fuerça d’este fuego
Que ser por vuestra causa padescidos? No nos ganarán el juego
Si como son en vos bien empleados Estos nuevos trovadores;
De vos fuesen, señora, conoscidos, Muy melancólicas son
La mayor angustia de mi pena Estas trovas, a mi ver,
Sería de descanso y gloria llena. Enfadosas de leer,
Tardías de relación
Juan de Mena, como oyó Y enemigas de placer».
La nueva trova polida,
Contentamiento mostró, Torres dixo: «Si yo viera
Caso que se sonrió Que la lengua castellana
Como de cosa sabida, Sonetos de mí sufriera,
Y dixo: «Según la prueba, Fácilmente los hiciera,
Once sílabas por pie Pues los hice en la romana;
No hallo causa por qué Pero ningún sabor tomo
Se tenga por cosa nueva, En coplas tan altaneras,
Pues yo mismo las usé. Escriptas siempre de veras,
Que corren con pies de plomo,
Don Jorge dixo: «No veo Muy pesadas de caderas».
Nescesidad ni razón
De vestir nuevo deseo Al cabo la conclusión
De coplas que por rodeo Fué que por buena criança
Van diciendo su intención. Y por honrar la invención
Nuestra lengua es muy devota De parte de la nación
De la clara brevedad, Sean dignas de alabança.
Y esta trova, a la verdad, Y para que a todos fuese
Por el contrario, denota Manifiesto este favor,
Oscura prolixidad». Se dió cargo a un trovador
Que aquí debaxo escribiese
Garci-Sánchez se mostró Un soneto en su loor.
Estar con alguna saña,
Y dixo: «No cumple, no, SONETO
Al que en España nasció Musas italianas y latinas,
Valerse de tierra estraña; Gentes en estas partes tan extraña,
Porque en solas mis liciones,

45 46
¿Cómo habéis venido a nuestra España
Tan nuevas y hermosas clavellinas? que, porque en una octava dije escudos,
hice, sin más ni más, siete maridos
O ¿quién os ha traído a ser vecinas con honradas mujeres ser cornudos.
Del Tajo, de sus montes y campaña?
O ¿quién es el que os guía y acompaña Aquí nos tienen, como ves, metidos
De tierras tan ajenas peregrinas?- y por el consonante condenados.
¡Oh, míseros poetas desdichados,
-Don Diego de Mendoça y Garcilaso a puros versos, como ves, perdidos!
Nos truxeron, y Boscán y Luis de Haro
Por orden y favor del dios Apolo.

Los dos llevó la muerte paso a paso,


Solimán el uno y por amparo
Nos queda don Diego, y basta solo.

Francisco de Quevedo (1580-1645), en el siglo XVII pone de BIBLIOGRAFÍA


manifiesto la tiranía de los sonidos si se los considera el fin último del lenguaje
poético. En el Sueño del Infierno, un poeta loco se desespera por encontrar
rimas consonantes. BAEHR, RUDOLF, Manual de versificación española, (traducción y adaptación de K.
Wagner y F. López Estrada), Madrid, Gredos, 1972. Biblioteca de Románica Hispánica,
Manuales, 25.
Dije que una señora era absoluta,
LÓPEZ BUENO, BEGOÑA (DIR.), La poesía del Siglo de Oro. Géneros y modelos, (CD),
y siendo más honesta que Lucrecia,
Sevilla, Universidad de Sevilla, Grupo PASO, 2008.
por dar fin al cuarteto la hice puta.
NAVARRO-TOMÁS, TOMÁS, Arte del verso, México, Compañía General de Ediciones, 1959.
Forzóme el consonante a llamar necia
QUILIS, ANTONIO, Métrica española, 6ª ed. corregida y aumentada, Barcelona, Ariel,
a la de más talento y mayor brío:
1991.
¡Oh, ley de consonantes dura y recia!
RODRÍGUEZ CUADROS, EVANGELINA, “Los versos fuerzan la materia: algunas notas sobre
Habiendo en un terceto dicho lío, métrica y rítmica en el Siglo de Oro”, Edad de Oro IV (1985), 117-137.
un hidalgo afrenté tan solamente
porque el verso acabó bien en judío.  

A Herodes otra vez llamé innocente,


mil veces a lo dulce dije amargo
y llamé al apacible impertinente.

Y por el consonante tengo a cargo


otros delitos torpes, feos, rudos,
y llega mi proceso a ser tan largo,

47 48

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