¿En qué consiste? Muchos creen que el alcoholímetro, instrumento que mide
oralmente la proporción de alcohol, es la única forma de realizar la prueba de
alcoholemia. No obstante, según indica el “Manual de Guantera” del MTC, existen otras
formas a las que puede recurrir la policía para cumplir con el examen como el test
Hogan, la prueba Romberg o caminar con los ojos vendados y brazos extendidos sobre
una línea recta.
MULTAS Y SANCIONES
Cabe añadir que la papeleta aplicada por manejar en estado de ebriedad es la M2, que
sanciona por “conducir con presencia de alcohol en la sangre en proporción mayor de
0.5 gramos por litro de sangre o bajo los efectos de estupefacientes, narcóticos y/o
alucinógenos comprobada con el examen respectivo o por negarse al mismo”. Esta
multa exige el pago del 50% de una UIT, la cancelación del brevete y nos impide
obtener una nueva por un año.
De otro lado, existe la M1, la más grave, que sanciona por lo descrito en la M2 más el
agravante de haber provocado un accidente de tránsito. En ese caso, la multa exige el
100% de una UIT, la cancelación del brevete y la inhabilitación para obtener una
nueva licencia durante tres años.