BARCO A LA DERIVA
(coro)
Barco a la deriva que
se hunde un poco cada dia
barco a la deriva que
no quiere ver el faro que le guia
no ya no te voy a abandonar
saldras de aqui
mi servatillo herido
no podre dormir mientras estes hundida
por favor no digas que estas bien
(coro)
Barco a la deriva que
se hunde un poco cada dia
barco a la deriva que
no quiere ver el faro que le guia
EL JUEGO VERDADERO
YO SOY REBELDE
Yo soy rebelde
porque el mundo me ha hecho asi
porque nadie me ha tratado con amor
porque nadie me ha querido nunca oir
yo soy rebelde
porque siempre sin razon
me negaron todo aquello que pedi
y me dieron solamente incomprension
Y quisiera ser como el niño aquel
como el hombre aquel que es feliz
y quisiera dar lo que hay en mi
todo a cambio de una amistad
y soñar, y vivir
y olvidar el rencor
y cantar, y reir
y sentir solo amor
Yo soy rebelde
porque el mundo me ha hecho asi
porque nadie me ha tratado con amor
porque nadie me ha querido nunca oir
Y quisiera ser como el niño aquel
como el hombre aquel que es feliz
y quisiera dar lo que hay en mi
todo a cambio de una amistad
y soñar, y vivir
y olvidar el rencor
y cantar, y reir
y sentir solo amor.
Sal 95 (94)
S. SI HOY ESCUCHÁIS SU VOZ |
| (Bis A)
NO ENDUREZCÁIS EL CORAZÓN. |
S. Venid, aclamemos al Señor,
demos vítores a la roca que nos salva;
vayamos a Él dándole gracias,
aclamándolo con cantos y salmos.
A. SI HOY ...
S. Porque el Señor es un Dios grande,
más grande que todos los dioses;
suyo es el mar, suya es la tierra,
son suyas las cimas de los montes.
A. SI HOY ...
S. Venid, postrémonos por tierra,
bendiciendo al Señor Creador nuestro.
Porque Él es nuestro Dios y nosotros su pueblo,
somos su rebaño, las ovejas que Él conduce.
A. SI HOY ...
S. ¡Ojalá!, ¡Ojalá escuchéis hoy su voz
y no endurezcáis el corazón!
como en Meriba,
como el día de Masá en el desierto,
donde vuestros padres
dudaron de mí,
aunque habían visto mis obras
me obligaron a hacer su voluntad.
Durante cuarenta años
me disgustó aquella generación.
Y dije:
"Éste es un pueblo de corazón extraviado,
no quiere conocer mis caminos,
por eso no entrarán en mi descanso."
A. SI HOY...
ORACIÓN DE PARTIDA
Tomad, Señor, y recibid toda mi libertad, mi memoria, mi entendimiento y toda mi voluntad; todo mi haber y mi
poseer. Vos me disteis, a Vos, Señor, lo retorno.
Todo es Vuestro: disponed de ello según Vuestra Voluntad. Dadme Vuestro Amor y Gracia, que éstas me bastan,
permíteme conocerte de verdad en este retiro. Amén.
ORACIÓN A JESÚS
Jesús, mi dulce Señor, te amo tanto,
ayúdame a ser como quieres que sea.
Soy tan pequeño y pobre,
pero Tú, Jesús, que eres mi Señor,
puedes ayudarme, debes ayudarme a convertirme.
Quiero siempre vivir unido a Ti,
como el sarmiento a la vid,
y deseo que mis hermanos te conozcan y amen por mí.
Jesús, dulce Señor, tu bondad es inmensa.
Deja que la alegría y la seguridad de ser hijo de Dios
se lean en mi rostro.
Cuando te reciba en mi corazón, dame tu paz,
déjame sentir que estás conmigo,
para enfrentar juntos al día
que deseo vivir como un regalo tuyo.
Jesús, mi dulce Señor, necesito de tu gracia
para parecerme más y más a Ti,
necesito de tu amor
para vencer mi egoísmo.
Quiero llegar contigo al Paraíso
y por el momento colma mi corazón con este anhelo.
Jesús, mi dulce Señor,
ámame tan pobre como soy,
Permíteme conocerte en este retiro.
AMEN
ORACIÓN
Señor, enséñanos a orar como Jesús ha enseñado a sus discípulos. Que podamos ser uno en la fe, en el amor y en el servicio como ellos mismos no tenían
más que un solo corazón. Concédenos celebrar nuestra diferencia, alegrarnos en la diversidad y compartir de todo corazón las riquezas de nuestras
respectivas oraciones. Haz que nuestra reunión en nombre de Jesús nos transforme, a fin de que seamos Verdaderamente uno y el mundo crea en su
presencia fiel. Amén.
ORACIÓN
Reunidos en el nombre de Cristo Jesús, te rogamos, Padre: haznos descubrir tu presencia en este mundo y ayúdanos a discernir los caminos sobre los
cuales tú nos quieres guiar en nuestra peregrinación ecuménica. A ti todo honor y toda gloria por los siglos de los siglos. Amén.
Oración
Dios vivo, despierta en nosotros el deseo de ser un pueblo misionero. Ayúdanos a escuchar tu llamada y concédenos el coraje de dejarnos guiar por tu
Espíritu. Que podamos congregar mediante nuestro testimonio común a los más necesitados, para que sean fuertes y en el mundo proclamen la buena
noticia de tu reino. Amén.
Oración
Padre eterno, concédenos reconocer que tú estás presente entre nosotros de diferentes maneras, para que aumente nuestro deseo de llegar a una
auténtica comunión en nuestras propias Iglesias y en la sociedad donde vivimos, y que nuestra oración por la unidad del cuerpo de Cristo, tu Iglesia,
llegue a ser siempre más ferviente. En el nombre de Cristo te lo pedimos. Amén.
Oración
Padre eterno, reunidos en nombre de Jesús, concédenos la certeza de que a pesar de todo la muerte no predominará, que nuestras divisiones cesarán, que
no nos dejaremos vencer por el desánimo y que, en la esperanza, llegaremos a la plenitud de vida, de amor y de luz que tú has prometido a los que te
aman y son fieles a tu palabra. Amén.